Porcentaje de materia orgnica

Porcentaje de materia orgánica
Vocabulario:
Materia orgánica
Descomposición
Hojarasca
Hifas micorrizales
Humus
Porosidad
Mineral
La materia orgánica hallada en los suelos puede oscilar entre el 0% en suelos muy
jóvenes, y el 80% en suelos “orgánicos”. La mayoría de los suelos de bosques,
probablemente, oscilan entre el 0.5% y el 20% en los 20 cm superiores del suelo mineral.
Los suelos de los bosques secos tropicales tienden a encontrarse en el rango más bajo de
materia orgánica, mientras que los bosques frescos y húmedos se encuentran en los
rangos más altos (donde la descomposición disminuye por las frescas temperaturas). La
materia orgánica (del Ecosistema de los Suelos) juega un rol principal en determinar la
textura de los suelos, la humedad, el pH y la disponibilidad de nutrientes para el
crecimiento de las plantas. También, los tipos de microorganismos que viven en el suelo
son influenciados grandemente por la materia orgánica.
La capa O (Horizonte Orgánico) se compone de hojarasca en descomposición.
Generalmente, la materia orgánica incluye todas las formas de materiales orgánicos
(cosas que tuvieron vida) halladas en los suelos, a excepción de las raíces de plantas más
grandes. La fuente mayor de materia orgánica de los suelos es el carbono fabricado por
las plantas durante la fotosíntesis. Las plantas usan gran parte de lo que se fabrica
mediante fotosíntesis para la producción de raíces finas e hifas micorrizales. Dado que
estas partes de las plantas se encuentran bajo tierra, cuando estas partes mueren, junto con
las hojas caídas, las ramitas, se crea la porción de hojarasca del suelo. La hojarasca y la
solución acuosa hallada dentro de la hojarasca proporcionan una fuente de carbono para
el suelo, y se crea el humus a medida que la hojarasca se descompone. La hojarasca
está en una etapa más temprana de descomposición que el humus, y no se liga
químicamente a los minerales del suelo como lo hace el humus. La descomposición de
la hojarasca provee el reciclaje de nutrientes que es tan importante para un ecosistema
saludable.
Los suelos más oscuros indican mayor contenido de materia orgánica. Esto, a su vez,
significa mayor porosidad en el suelo. Dado que la materia orgánica del suelo proviene
de la hojarasca superficial y las raíces, es más abundante cerca de la superficie que en
suelo más profundo. La mayoría de las veces, el carbono y el nitrógeno se concentran
dentro de los 30 a 50 cm superficiales de suelo. Esto es importante cuando se considera el
manejo de los bosques porque estos centímetros incluyen las capas superficiales de suelo
más propensas al daño durante la cosecha y la preparación de los bosques. (El Ecosistema
del Suelo)
Una manera sencilla de aproximarse a la cantidad de carbono orgánico en el suelo puede
obtenerse midiendo el peso seco libre de cenizas. El análisis de la materia orgánica debe
hacerse tanto en muestras del horizonte O como del horizonte A separadamente, de ser
posible.
Materiales:
Base con aro, aro metálico, triángulo de arcilla
Mechero Bunsen y manguera de gas
Crisol con tapa
Balanza analítica o balanza de, al menos, .01 g de precisión
Procedimiento – Materia orgánica
1. Limpie y seque un crisol grande.
2. Coloque el crisol en un triángulo de alambre sujeto a una base con aro, y caliéntenlo
con un mechero Bunsen durante 15 minutos. Pónganlo a enfriar en un desecador durante
10-15 minutos.
3. Pese el crisol, y registre su peso.
4. Añada aproximadamente 5 g de suelo de la muestra de suelo limpia, seca y cernida
(use la muestra de suelo preparada durante el procedimiento de Determinación de
Humedad) al crisol limpio y seco, y vuelva a pesar; anote el peso.
5. Vuelva a colocar el crisol en el triángulo de arcilla, y caliente con un mechero Bunsen.
El crisol y el suelo que contiene deberán verse “al rojo vivo”. Caliente el suelo como
mínimo 30 min. Coloque el crisol en un desecador para que se enfríe. Después de
enfriarse, calcule pese el crisol con el suelo.
6. Vuelva a calentar el crisol con el suelo con el mechero Bunsen otros 15 minutos; enfríe
y vuelva a pesar; anote. Continúe este proceso hasta que el peso observado se vuelva
constante. Alcanzar un peso constante asegura que toda la materia orgánica se ha
quemado. Registre el peso constante final. Generalmente, obtener un peso constante
toma aproximadamente una hora de calentamiento. Esto puede completarse en días
consecutivos en el salón de clases siempre y cuando el crisol se almacene en un sitio
seco, como un desecador.