1. La carencia de estudios centrados en cooperación sanitaria utilización de categorías alejadas de las que se manejan en el ámbito inexistencia de una presentación sistemática de los datos por parte de oficiales ni de indicadores en el Plan Director, dificultan el conocimiento la cuestión y la formulación de propuestas de mejora española, la sanitario y la las instancias del estado de 2.- La ayuda oficial al desarrollo española en el sector salud se compone tanto de las aportaciones a organismos multilaterales, la llamada ayuda multilateral, como de la que se destina directamente para programas y proyectos en los países del Sur, conocida como ayuda bilateral (relación de un país- España en este caso- con otro país). Esta ayuda bilateral se compone de ayuda reembolsable (créditos blandos que tienen que devolver a España) y no reembolsable (libre de devoluciones). El actor principal de la gestión de esta ayuda es el Ministerio de Economía, que gestiona más de la mitad de los fondos destinados a la cooperación en salud, a pesar de la pluralidad de actores implicados en la gestión de la AOD sanitaria española 3.- Una de las características definitorias de la AOD española del sector salud es el excesivo peso de los créditos FAD –Fondo de Ayuda al Desarrollo- (superior al 70% entre 1995 y 2000).Este instrumento provoca un “efecto bumerán” de los recursos destinados a la AOD española en materia sanitaria, pues los países más empobrecidos nos tienen que devolver el dinero que les prestamos en el campo de la salud. Esta ayuda, que en el 90% exige que la compra sea de servicios españoles aunque sean más caros, impide, además de ser ineficiente, el desarrollo de las capacidades locales para que alguna vez estos países tengan su propio desarrollo y dejen de depender de la ayuda exterior. 4.- Los principales países receptores de AOD sanitaria coinciden con los principales destinatarios de créditos FAD. Se trata principalmente de países de ingreso medio, sin que la ayuda haya ido mayoritariamente destinada a sus bolsas de pobreza. El primer país que recibió ayuda en el sector salud entre 1998 y 2000 fue Indonesia. Atención especial requiere el caso de Honduras (5º país en recibir apoyo en el sector salud entre 1998 y 2000), cuya inclusión como país pobre altamente endeudado por la iniciativa HIPC no ha evitado que España continuara financiando préstamos en el sector sanitario que contribuían a su ya grave situación de endeudamiento. 5.- El ejército español está teniendo un papel significativo en las acciones de emergencia, aún sin comprobar su eficacia. El volumen exacto que se utiliza en las acciones de emergencia en el sector salud no es posible cuantificar por falta de datos desagregados. 6.- Dentro de la distribución sectorial de la ayuda, el fuerte peso proporcional de las acciones de atención más especializada (hospitalaria) en contra de la atención primaria de salud ( formación, centros de atención primaria, prevención,...), que soluciona el 80% de los problemas de salud en países de renta media y baja, aleja las acciones realizadas de la mayor parte de la población más vulnerable, que no puede acceder a esos servicios especializados. Además, los altos porcentajes de ayuda destinados a infraestructuras y suministro y equipamiento médico, frente al reducido gasto en investigación y en formación de personal de asistencia básica, plantea serias dudas respecto a la sostenibilidad de las actuaciones. 7.- El reducido volumen de los fondos destinados a salud sexual y reproductiva y en particular a planificación familiar y la cada vez más frecuente sustitución del término por el de salud materno infantil, no es coherente con la promoción del desarrollo con equidad de género, establecido por la ley española de cooperación como principio inspirador de su política. 8.- La política de la cooperación española en salud debe centrarse en la atención primaria, acceso universal a la salud y el control de las enfermedades de mayor morbi-mortalidad, que no se guíe por intereses comerciales y políticos del país donante sino por las apremiantes necesidades sanitarias que hoy tienen los países del Sur. Recomendaciones 1. Es necesaria una política sectorial en materia de salud coherente con las prioridades establecidas en la Ley de Cooperación Internacional al Desarrollo y los c ompromisos internacionales. 2. Debe establecerse como mínimo un sistema efectivo de coordinación y comunicación entre todos los actores: Ministerio de Asuntos Exteriores, Ministerio de Sanidad y Consumo, Ministerio de Economía, Ministerio de Defensa, administraciones públicas autonómicas y locales y ONGD. 3. Se debe limitar la actuación del ejército así como cualquier tipo de objetivo político en las intervenciones de acción humanitaria. 4. Las ayudas de rehabilitación y reconstrucción de infraestructuras tras una crisis humanitaria no pueden limitarse a los países prioritarios para cooperación española. 5. La AOD destinada a salud debe incrementarse y dirigirse a la cobertura de las necesidades sanitarias de los países del Sur; dando prioridad a los principales problemas de morbi- mortalidad, contemplando la pandemia de VIH/SIDA. 6. Las intervenciones deben dirigirse más hacia el acceso universal a la salud y el apoyo a estrategias internacionales de acceso a medicamentos esenciales y tratamiento para la infección por VIH/SIDA. 7. Es necesario terminar con el peso excesivo de los créditos FAD en la ayuda sanitaria española, sin que ello implique una disminución del volumen total de ayuda destinada al sector. 8. El peso específico del Ministerio de Sanidad y Consumo en la cooperación internacional al desarrollo española debe ser proporcional a sus recursos económicos, técnicos y humanos. 9. Los actuales porcentajes de ayuda destinada a atención especializada y atención primaria deben invertirse por coherencia con las prioridades de la cooperación española y con los compromisos de la comunidad internacional. 10. Es necesario que los fondos destinados a salud sexual y reproductiva se incrementen de manera proporcional a las necesidades existentes en este ámbito, así como la inclusión real de la perspectiva de género no sólo en este aspecto, sino en toda la política de cooperación española. 11. La AOD en salud debe concentrarse en aspectos que contribuyan a potenciar y reforzar las capacidades de los receptores y favorecer de este modo la consecución de un desarrollo humano sostenible. 12. Es necesaria y urgente la reorientación de la ayuda hacia las zonas que se encuentran en situación más precaria, así como la selección de los países y personas destinatarias siguiendo como criterio las necesidades de salud de cada país y población, en lugar de los intereses comerciales y políticos españoles. 13. La mayor efectividad de las acciones pasa también por otorgar la relevancia necesaria a la disponibilidad de información sistemática en el sector salud. 14. Es necesaria una evaluación de la AOD española destinada a salud, especialmente del gasto en infraestructuras y equipamiento sanitario y del impacto de los créditos FAD, que constituyen la mayor parte de la cooperación bilateral del sector. Medicus Mundi es una Organización No Gubernamental para el Desarrollo (ONGD), sin ánimo de lucro e independiente, tanto confesional como políticamente, que se dedica a la cooperación con el Sur y a contribuir a generar cambios en la sociedad que hagan posible la erradicac ión de la pobreza y permitan que la salud sea un derecho al alcance de todas las personas. Excepcionalmente, realiza acciones de emergencia en países donde mantiene proyec tos. Fundada en 1962, es Organismo Consultor de la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1974 y en 1991 recibió el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia. Es miembro fundador de la Coordinadora de Organizaciones No Gubernamentales de Cooperación para el Desarrollo- España. Página web: www.medicusmundi.es e- mail: [email protected] Teléfono de contacto: 902101065 Prosalus es una Organización no Gubernamental de cooperación al desarrollo (ONGD) que trabaja desde 1985 para contribuir a hacer real y efectivo el derecho a la salud en países empobrecidos de África y América Latina, en colaboración con otras organizaciones de la sociedad civil tanto del Norte como del Sur, a través del apoyo a proyectos de desarrollo a medio y largo plazo y de acciones de sensibilización de la población española. Página web: www.prosalus.es e- mail: comunicació[email protected] Teléfono de contacto : 91 553 35 91 Médicos Sin Fronteras (MSF), premio Nobel de la Paz en 1999, es una organización médica internacional de ayuda humanitaria que aporta su ayuda a las víctimas de catástrofes de origen natural o humano y de conflictos armados, sin ninguna discriminación de raza, sexo, religión, filosofía o política. MSF se creó en 1971 y está presente en más de 80 países. Actúa en campos de refugiados y desplazados, epidemias, hambrunas, programas a medio plazo, situaciones de exclusión y campañas de sensibilización tales como “adiós a las armas” o el “acceso a los medicamentos esenciales”. El testimonio forma parte indisociable de la acción en el terreno. Página web: www.msf.es e- mail: [email protected] Teléfono de contacto: 902250902 Médicos del Mundo es una organización internacional de acción humanitaria, independiente y carente de toda afiliación política o religiosa, que reivindica el derecho fundamental a la salud y a una vida digna para cualquier persona. Desde 1980 presta asistencia a víctimas de catástrofes naturales, conflictos armados, minorías en peligro, refugiados y otras poblaciones vulnerables en países del Tercer Mundo, así como a las personas excluidas de nuestro entorno social - usuarios de drogas, personas que ejercen la prostitución, inmigrantes y minorías étnicas- . La Red Internacional de Médicos del Mundo desarrolla 484 proyectos de Tercer y Cuarto Mundo en 88 países, teniendo siempre muy presente la denuncia de las violaciones de los derechos humanos y las labores de sensibilización. Página web: www.medicosdelmundo.org e- mail: [email protected] Teléfono de contacto: 91 543 60 33