D Dejando los vaivenes de la economía a un lado, el camino al éxito para una mujer de negocios no es sencillo. Aunque la esperanza es que el mundo laboral sea ciego cuando de géneros se trata, las mujeres enfrentan ciertos desafíos que los hombres comúnmente evitan. Afortunadamente, hay muchas mujeres exitosas y efectivas que han logrado llegar a la cima en el mundo de los negocios y mantienen al resto de la población femenina esperanzada y motivada. Y cuando muchas de las características de estas mujeres son neutrales para ambos géneros, algunos de los hábitos y habilidades que comparten provienen de aprovechar y moldear fortalezas únicamente femeninas para su ventaja. Todo lo que toma es PERSEVERANCIA, ORGANIZACIÓN Y UN INQUEBRANTABLE SENTIDO DE SÍ MISMA. ¿Muy fácil, no? 1. Ten confianza Vístete para el éxito Vestir un escote pronunciado o lucir tu esculpido cuerpo durante las clases de Pilates o un evento social, está bien. Pero Lisa Johnson Mandell, autora del libro récord de ventas "Career Comeback", recomienda a las mujeres mantener el escote cubierto en la oficina. Un escote o transparencia puede atraer la atención, pero de manera equivocada. Yo te sugiero dejar tu ropa sexy en tu armario de 9 de la mañana a 7 de la tarde. Sin embargo, no hay razón para evitar usar atuendos laborales que sean adecuados y destaquen tu figura, con accesorios bien pensados. Ese tipo de atuendos evocan clase y atención a los detalles. Sin duda usar un bazer sastre y zapatos altos es un acierto, ya que estos te pondrán en el mismo plano físico de una contraparte masculina, dándote altura, lo que te hace ver más lucidora. El uso adecuado de zapatos altos puede también ayudarnos a tener una mejor postura y caminar erguidas. Ahora recuerda que sin importar cuál sea tu trayectoria, tener confianza en ti misma y tus metas es la mejor cualidad que necesitarás para alcanzar el éxito. Esta confianza potenciará la mejor característica que se requiere en cualquier profesión: LA PERSEVERANCIA. "La perseverancia requiere de un inquebrantable sentido de creer en ti misma, tu producto y tu misión", dice Maseena Ziegler, autora de un libro récord de ventas en Hong Kong, titulado "Ladies who launche in Hong Kong". La perseverancia es la característica común de las 12 empresarias sobre quienes Ziegler escribió. "Es la habilidad de seguir andando a pesar de los desafíos y obstáculos", dice. Mientras los hombres tienden a demostrar confianza, a las mujeres se les enseña a ser humildes y recatadas. Para superar esto en el lugar de trabajo, es importante identificar tus mejores cualidades y destacarlas. Una de las cualidades que las mujeres poseen con creces es la intuición. "La mayoría de las mujeres pueden caminar en una habitación, leer la habitación, y ser relativamente precisas sobre lo que intuyen", dice Lisa Johnson Mandell, autora del libro récord de ventas "Carrer Comeback". Ella alienta a las mujeres a confiar y prestar atención a esas sensaciones y, antes de comunicarlas, analizarlas críticamente y comprender por qué se sienten así respecto de una situación particular. Si puedes traducir esos sentimientos en objetivas intervenciones de negocios, deslumbrarás tanto a mujeres como a hombres. 2. Monitorea tus emociones Mientras los hombres luchan con ser vulnerables y emotivos, las mujeres son alentadas desde una edad temprana a mostrar sus emociones. Esto puede ser problemático en el lugar de trabajo. Dejar que las emociones dominen en un ambiente laboral puede significar usualmente que has perdido el control de la situación. "Los hombres no perciben los desafíos de negocio como algo personal", dice Ziegler, "son capaces de mantenerse objetivos y bajo control, y quizás tomar mejores decisiones en el ámbito de los negocios como resultado". Roussel dice que ella lucha con tener que manejar sus emociones en el negocio a diario. "Hago un esfuerzo de mantener mis emociones fuera de las situaciones y ser más racional", dice. "Al final del día, los negocios son negocios, y no puedes analizarlos de más o tomarte las cosas muy personales". Mandell recomienda esperar un poco antes de reaccionar ante una situación tensa. Y mientras una conversación acalorada es mala, un correo electrónico reactivo y emocional se convierte en una evidencia física de un comportamiento imprudente. La máxima manifestación de una emoción estereotípicamente femenina es llorar, uno de los comportamientos que casi toda mujer es culpable de realizar y el cual se recomienda no hacer. "No hay llantos en béisbol... o en la sala de reuniones", dice Mandell, "aunque es natural, puede hacer que nos veamos débiles". Pero no te prohíbas tener un buen llanto si lo necesitas. Si las emociones te abruman en el lugar de trabajo, tómate un largo descanso en el baño y expresa lo que te aflige. Si te encuentras haciendo esto a diario, puede ser un indicador que debes examinar tu actual situación laboral. 3. Organiza y estructura Ya sea que estés trabajando para ti misma o para alguien más, tener tu propia estructura personal de un día es una enorme ayuda cuando se trata de alcanzar tus metas. Te recomiendo dar un paso a la vez. No te permitas abrumarte por metas grandes de largo plazo. Escribir una lista de quehaceres es una manera simple y satisfactoria de realizar los objetivos del día. Termina tu día revisando la lista de quehaceres y ajústala. Te comparto lo que yo suelo hacer y me ha dado muy buen resultado. Primero que nada hago un inventario de mis quehaceres, después me pregunto ¿Qué logré hoy?, ¿Qué necesito lograr mañana y en qué orden? Has de ti la necesidad de ser puntual y organizada en las actividades relacionadas con el trabajo. No hagas excusas de ser "impuntual" para ti misma o para otros. Comprométete a cambiar ese comportamiento. Llegar tarde al trabajo, a una reunión, o incluso a un encuentro social, significará que no tienes tu vida bajo control o que tu tiempo es más importante que el de la persona que está esperando por ti. Ser puntual refleja cortesía y confiabilidad, siendo ambas importantes características en los negocios. 4. Afila tus habilidades comunicativas Hablar detrás de tu escritorio, participar en una conferencia telefónica o escribir un correo electrónico, requieren contar con excelentes habilidades comunicativas. Aunque algunas personas pueden ser naturalmente carismáticas, incluso las mujeres introvertidas pueden ser excelentes en esto, siempre y cuando sean asertivas y presten atención a los detalles. Es muy común que suavicemos o debilitemos