JUAN ARELLANO GARCÍA (Caudete, 09/03/1870 - 01/07/1964) El 9 de Marzo de 1870 vino al mundo en Caudete, Juan Arellano García, cuarto hijo del matrimonio formado por Francisco Antonio Leonardo Arellano González y María del Rosario García Sánchez., que tuvieron un total de doce hijos. Los orígenes de esta familia en Caudete datan de 1778, según consta en el “Libro Parroquial de Matrimonios 17451778” año éste último, en el que se casa el hijo del matrimonio formado por Francisco Arellano Burgos y Manuela de Agreda Prejamo, llegados a Caudete desde Tudela (Navarra) a mediados del siglo XVIII. Según nos consta, Francisco, el padre de Juan Arellano García, era un humilde alfarero que vivía en el popular barrio del moto. Es fácil adivinar los estudios que, tanto Juan como sus once hermanos tuvieron, las cuatro reglas y poco más. Y dada la situación laboral en Caudete y en España por aquellos años, varios de ellos tuvieron que emigrar, la mayoría se instalaron en el sureste de Francia. Juan encontró en la albañilería una salida para ganarse la vida, y desde luego que lo consiguió. Debido a su carácter, pues era un hombre honesto, trabajador, muy exigente en el trabajo consigo mismo y con los demás, un hombre con temperamento y con una inteligencia que, en otra situación, le podría haber llevado muy lejos, se ganó la confianza de D. Francisco Albalat Navajas, Conde de San Carlos, mecenas caudetano promotor de grandes e importantes obras en Caudete. Don Paco, como era conocido en Caudete, encontró en Juan Arellano al hombre que llevaría a cabo sus obras. Su casa de la calle de las Parras, su finca conocida como El Paso, la Plaza de Toros, las casas del barrio de San Francisco y la Iglesia de San Francisco. Era tal la confianza de don Paco en Juan, que para una mejor realización de algunas obras, le llevó consigo de viaje para que viera y tomara nota de casas y monumentos para luego llevarlas a cabo en Caudete. Sabemos del viaje a Lourdes, adonde le llevó para que hiciera en El Paso una gruta idéntica a la que allí existe, y en la que se apareció la Virgen de Lourdes, y también a Granada, a La Alhambra, para que viera lo que quería tener en la entrada principal de El Paso. Además de todo lo anterior, también se encargó de la reconstrucción de la Iglesia del Carmen, destruida e incendiada en 1.936. Construyó el desaparecido Cine España, en la esquina de la calle del Molino con Alcalde Luís Pascual, y en cuyo solar se ubicaba el Circo de las Hermanas Sánchez, propiedad de las hermanas de la que fuera su esposa, María Gracia Sánchez Díaz, con quién se casó el 28 de Abril de 1895 y con la que tuvo ocho hijos. Fue por tanto, Juan Arellano García un hombre hecho a sí mismo, temperamental, meticuloso en el trabajo, con un punto de mal genio y amante de la música, eran muchos los días, ya con más de 80 años, que tomando el fresco sentado en una silla en la puerta de la calle de cualquiera de sus hijos, podía oírsele cantar alguna estrofa de cualquier ópera o zarzuela conocida, llevando el ritmo golpeando su garrote contra el suelo. Murió en Caudete el 1 de Julio de 1.964 a la edad de 94 años.