La motivación condiciona la forma de pensar del educando y por lo

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¿QUÉ ES APRENDER?
LIGIA MAROTO MARÍN
Todos coincidimos en que la motivación es de suma
importancia en el aprender de cada uno. La motivación
condiciona la forma de pensar de todos y por lo tanto el
tipo de aprendizaje resultante.
La motivación la entiendo como un proceso motivacional
porque considero que va a estar relacionada con las
necesidades, intereses y motivos; si se entiende así se
comprenderá que está en constante transformación, ya que
no será, ni estática ni permanente. Tiene una evolución
inseparable de la vida por la experiencia de cada uno de
nosotros, (lo que Martínez Aldanondo trata de decir cuando
las personas tenemos objetivos que nos interesan,) con un
carácter personal, subjetivo pues es de cada individuo, pero
que al mismo tiempo es objetiva en su naturaleza porque
está en íntima conexión con lo externo de todas las
personas.
Es por todo esto que se dice que la motivación no nace con
nosotros sino que existe una relación entre el desarrollo de
la motivación y las experiencias que cada uno confronta en
su vida cotidiana. (Las historias forman parte de nuestra
vida apunta Martínez Aldanondo).
Motivación como término en sí se deriva del verbo latino
movere cuyo significado es “moverse”, “poner en
movimiento” o “estar listo para la acción”.
Woolfolk (1990, p326). “la motivación se define usualmente
como algo que energiza y dirige la conducta” Por lo tanto
un motivo es un elemento de conciencia que abre la
posibilidad de hacer un acto volitivo. Es lo que hace que
una persona haga una acción. En el plano pedagógico se
podría afirmar que motivación significa proporcionar
motivos, o estimular la voluntad de aprender.
Pienso que hay dos condiciones necesarias básicas que nos
permiten la adquisición de nuevos conocimientos y la
aplicación de lo aprendido de forma efectiva cuando se
necesita, y es “querer aprender y saber aprender”.
La motivación cuando se maneja ya sea presencial o virtual
supone que tanto el facilitador como el educando
comprendan que existe interdependencia entre tres
factores:
a) Las características y demandas de las tareas y
actividades que se tengan.
b) Las metas o propósitos que se establezcan para las
actividades.
c) El fin que se busca al realizarlas.
De lo anterior se desprende que son tres los propósitos que
se persigue mediante el manejo de la motivación:
1) Despertar interés en el educando y dirigir su atención
(para que éste se de cuenta que también él posee historias,
que contar, según Martínez Aldanondo)
2) Estimular el deseo de aprender que conduce al esfuerzo.
(el querer compartir con otros su aprendizaje histórico)
3) Dirigir estos intereses y esfuerzos hacia el logro de fines
apropiados y la realización de propósitos definidos; que
según Bruner se pueden dar interiorizando los hechos
vividos que podemos realizar gracias a un sistema de
almacenamiento que vamos estructurando desde niños
creando nuestro propio sistema de codificación.
El papel de la motivación en el logro del aprendizaje
significativo se relaciona con el impulso de inducir en el
educando el interés y esfuerzos necesarios, y es labor del
facilitador ofrecer la dirección y guía concerniente en cada
situación.
El aprendizaje significativo será el que se encargue de
relacionar ideas, principios y conceptos, que nos conducen
a la memorización tanto asociativa como comprensiva como
antídoto necesario contra la invasión de las informaciones
instantáneas que se difunden en los nuevos medios de
comunicación conocidos como las TIC, por lo que obtiene
como características el ser activa y personal; esta tendrá
ventajas como la retención verdadera, facilitando la
adquisición de esos principios, ideas y conceptos, lo que se
establecerá en la memoria para ser utilizado a largo plazo,
permitiendo así construir un proceso dinámico que
dependerá de las experiencias que tengamos cada uno así
como también de la edad, posición socioeconómica, lo
mismo de los antecedentes educativos que se tengan; todo
este proceso permite el aprendizaje por medio de
representaciones conteniendo los símbolos y signos que se
tomen, conceptos que poco a poco se van descubriendo y
proposiciones que implica un referente unitario para lograr
el aprendizaje significativo.
Actualmente ya no basta con que cada uno de nosotros
acumule al comienzo de su vida una reserva de
conocimientos a la que podrá recurrir después sin límites.
Sobre todo se debe estar en condición de aprovechar y
utilizar durante toda la vida cada oportunidad que se nos
presenta de actualizar, profundizar y enriquecer ese primer
saber, para adaptarnos a un mundo en permanente
cambio.
Aprender a conocer y aprender a hacer, son en gran
medida, indisociables. Cuando aplicamos esto en este siglo
XXI debemos comprender que los aprendizajes deben
evolucionar, ya no pueden considerarse mera transmisión
de prácticas más o menos rutinarias, como el ejemplo de
Rafael Nadar, tenista que analizó su porcentaje de servicios
y puntos ganados en el primer servicio, aunque estas
conserven un valor formativo que no se puede desestimar,
pues tiene que ver más con su formación profesional por
ser el segundo tenista del mundo.
Es por medio de la instrucción que se lleva al aprendiz a
lograr captar, transformar, y transferir lo que ha aprendido.
Es importante permitir la exploración de alternativas de
instrucción para ser flexibles y dinámicos.
Las orientaciones socioculturales y constructivistas nos
permiten un aprendizaje de forma de vida más humano y
de una manera de planificación menos autoritaria.
Me gusta mucho la premisa de “Aprender a Aprender”, creo
que por esto estoy en esta Maestría, pues la experiencia de
los años me dice que siempre hay algo que aprender, lo
único que hay que hacer es tener la disposición y humildad
de ponerse nuevamente en el papel de educando.
Si se trata de definición de esta premisa, Díaz Barriga lo
define como la capacidad de reflexionar en la forma en que
se aprende y actúa en consecuencia, autorregulando el
propio proceso de aprendizaje mediante el uso de algunas
estrategias flexibles y apropiadas que se transfieren y
adaptan a nuevas situaciones.
A través de la experiencia puedo decir que Aprender a
Aprender es lograr que el conocimiento adquirido por el
educando o la persona que lo adquiere sea significativo, de
tal manera que lo pueda utilizar de forma efectiva y sepa
dónde aplicarlo en el momento que lo amerite y que sea
pertinente para sus vidas; como lo nombra Yanira en el
2001. Ya que al tener conciencia de cómo uno aprende, y
usar los mecanismos que le sean más eficaces para
aprender, hará que se tenga una mejor actitud para
aprender.
Los educandos que obtienen resultados satisfactorios a
pesar de situaciones didácticas a las que se enfrentan han
aprendido a aprender ya que pueden controlar sus procesos
de aprendizaje, se dan cuenta de lo que hacen, captan,
las exigencias de la tarea y responden consecuentemente.
También planifican y examinan sus propias realizaciones,
pudiendo identificar los aciertos y las dificultades;
empleando estrategias de estudio oportuno para cada
situación, lo que les permite que planifiquen y examinen
sus propias realizaciones, pudiendo identificar los aciertos y
las dificultades por lo que valoran logros obtenidos y
corrigen sus errores.
CONSULTAS:
1. Bruner
2. Díaz Barriga
3. Martínez Aldanondo
4. Woolfolk
5. Yanira
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