Pitágoras y los Pitagóricos Joseph Roberts NIUB: 14944510 Problemas Filosóficos II DR. Eudaldo Forment Grupo A2 Índice Introducción ......................................................................................................................3 Doctrinas Principales........................................................................................................4 La Sociedad Pitagórica......................................................................................................7 Conclusión...........................................................................................................................9 Bibliografía y Webgrafía....................................................................................................10 2 Introducción: Hay una extensa literatura sobre la secta de los pitagóricos y las doctrinas, tanto matemáticas como puramente filosóficas que predicaban. Las aportaciones de Pitagoras a las matemáticas son verdaderamente dignas de admirar, su famoso teorema explica la relación entre la hipotenusa y los catetos en los triángulos rectángulos, como se puede observar en el siguiente esquema. La otra gran aportación de Pitagoras a la filosofía propiamente dicha fue la idea de la transmigración del alma y su existencia fuera del cuerpo en un plano más elevado y perfecto. Esta doctrina fue incorporada luego por Platón a su dualismo tanto antropológico como ontológico. Aunque la figura de Pitagoras sea recordada como la de un gran filósofo y matemático existe también una segunda vertiente más siniestra. Pitagoras y sus seguidores han sido envueltos en mitos y oscurantismo, se les han atribuido peculiares practicas y ritos. Estos van desde el secretísimo total sobre aquello que ocurría en la secta hasta el vegetarianismo o un cierto comunismo primitivo de los bienes que poseían. El secreto que les envolvía hace difícil la distinción y el análisis riguroso de tanto la evolución de las doctrinas, como el nombre del autor de cada texto. Por este motivo se tiende a estudiar estas peculiares tesis filosóficas desde un punto de vista atemporal y como conjunto. El primer documento escrito por la escuela es una trilogía escrita por Filolao. Pero, la pregunta a la cual esta investigación pretende dar respuesta es: ¿Hasta que punto el mito ha pervertido nuestra percepción de los pitagóricos? 3 Doctrinas Principales: La metafísica del numero Los pitagóricos, como matemáticos que eran, situaron el principio de todo en el número, el elemento principal y indivisible de esta disciplina. Debido a sus estudios se asentó la creencia que la naturaleza se basaba en primera instancia en las matematicas y que eran éstas las que regían y controlaban el mundo sensible. Los números eran para ellos, según cita Aristóteles en su famoso texto sobre estos filósofos, el principio de toda naturaleza: “Y puesto que en las matemáticas los números son por propia naturaleza los principios primeros, precisamente en los números ellos pensaban ver - más que en el fuego, en la tierra u en el agua - muchas semejanzas con las cosas que son y que se generan...; y además porque veían que las notas y los acordes musicales consistían en números; y finalmente porque tosas las demás cosas, en toda la realidad, les parecían estar hechas a imagen de los números y que los números fuesen los elementos de todas las cosas y que todo el universo fuese armonía y número” El descubrimiento de la regularidad matemática en la naturaleza y en la música provocó una enorme impresión en la aún incipiente filosofía. Es por las razones ya explicadas que este grupo de filósofos concediera la tarea de ser la razón de ser del mundo, cosa que Tales de Milet concedió al agua, al número. Este deseo de elaborar un sistema que englobase todos los ámbitos del mundo que les rodeaba llevó al absurdo las doctrinas, aparentemente sensatas en sus orígenes, que predicaban. Se llegó a afirmar que la justicia debía coincidir con el número 4 ó 9 ya que siendo la justicia una especie de igualdad debía coincidir con el cuadrado del primer número par o impar. Aunque esta doctrina pueda resultar extremadamente extraña a nuestros ojos contemporáneos cabe destacar la interpretación geométrica que tenía el número en la antigüedad. Los números eran objetos palpables mientras que a nuestros ojos resultan ser meras abstracciones mentales. Esta metafísica del numero es posible explicarla si se tiene en cuenta la vertiente matemática de su doctrina. El descubrimiento de los intervalos en las armonías musicales dio el impulso necesario para efectuar el salto de los casos particulares a la aplicación del principio a gran escala, con su armonía cósmica numérica. El número en si no nace de la nada, es decir, el número mismo está sujeto a un primum absoluto. El número nace por el acuerdo de elementos limitadores y elementos ilimitados. Existe por lo tanto un antagonismo entre los 4 números pares y los impares, ya que cada tipo se compone de más elementos limitados que ilimitados o viceversa. Los números impares tienen la característica de ser limitados, mientras que los pares tienen la característica de ser ilimitados, que era visto como una perfección. Los pitagóricos lo creían demostrado por el siguiente esquema. Con este dualismo nacen todos los otros dualismos. Se considera a los números pares femeninos mientras que los impares eran masculinos, otra oposición se da entre los cuadrados (números impares) y los rectángulos (números pares). La lista completa de los 10 tipos de contrarios nos ha sido transmitido a través de Aristóteles: 1) Límite - Sin límite 2) Impar -Par 3) Uno - Múltiple 4) Diestro - Siniestro 5) Macho - Hembra 6) Quieto - Móvil 7) Recto - Curvo 8) Luz - Tiniebla 9) Bueno - Malo 10)Cuadrado - Rectángulo Este cuadro de oposiciones tiene una cierta significación moral, identificando los primeros con lo perfecto y los segundos términos con lo imperfecto. Otro gran descubrimiento de la secta pitagórica fue su descubrimiento de los números irracionales. Se cree que este descubrimiento surgió al intentar resolver el problema siguiente: Si intentamos calcular el valor de “d” utilizando el teorema de Pitagoras veremos como el resultado es igual a la raíz cuadrada de 2, que resulta ser un número irracional. Este simple problema representó un gran descubrimiento en las matemáticas. Este descubrimiento se mantuvo en secreto y se ha llegado a decir que un pitagórico fue asesinado por revelar el descubrimiento a un individuo que no pertenecía a la secta. Números Especiales El número uno representa un caso extraño ya que para los pitagóricos no era par o impar sino una especie de “Parimpar”, esta nueva categoría es debido a que el 1 tiene la capacidad de cambiar la categoría de los demás números al ser sumado. El 10 (también conocido como la tetraktys) era considerado el número perfecto, resultando de la suma de 1+2+3+4 = 10 En él ocurre una extraña armonía entre sus partes. Existe la misma cantidad de números pares que impares (2,4,6,8 / 3,5,7,9), primos que divisibles (2,3,5,7 / 4,6,8,9). Además se encuentran en él los números lineales, los cuadrados e incluso los cúbicos ( Siendo el 1 el punto, el 2 la linea, el 3 el cuadrado y el cuatro el cubo). Otro de sus famosos símbolos era el pentagrama, es decir, el numero 5. Simbolizaba la salud, la vida, el poder y la invulnerabilidad. Este fue utilizado como un método de identificación entre pitagóricos, una marca secreta. 5 La transmigración de las almas La doctrina de la transmigración de las almas, estrictamente relacionada con la reencarnación, era una parte fundamental del sistema pitagórico. La metempsícosis entiende que el alma pertenece fuera del cuerpo presentando su vida terrestre como un encarcelamiento. Es decir, la verdadera realidad para las almas es aquella en la que se libera de todos los cuerpos para ser libre y se convierte, según Pitágoras, en astro. Según dice Heráclides Póntico Pitágoras afirmaba poder recordar sus encarnaciones y vidas previas como se demuestra en los siguientes extractos: “En otro tiempo había sido Etálides y teniendo por hijo de Mercurio; que el mismo Mercurio le tenía dicho pidiese lo que quisiese, excepto la inmortalidad, y que él le había pedido el que vivo y muerto retuviese en memoria cuanto sucediese” “Que siendo Euforbo, dijo había sido en otro tiempo Etálides, y que había recibido de Mercurio en don la transmigración del alma, como efectuvamente transmigraba y circuía por todo género de plantas y animales” El alma se reencarna en otros cuerpos y en otros seres vivos, cosa que incita a pensar que todos los seres vivos estamos aparentados. La convicción era tal que se debía tener compasión por los seres vivos y abstenerse de comer carne ya que podría ser el alma de un amigo difunto el que habita en el cuerpo del animal. Esto se puede ver claramente en el siguiente extracto de Diógenes Laercio: “Hallándose presente cierta vez que a un perrito castigaban, se refiere que dijo: “Cesa de apalearlo, que es el alma de un amigo; en el eco lo conozco” Las sucesivas reencarnaciones son producto de las decisiones de vida de la persona, es decir, aquel que actúa de forma pura se reencarna en un ser superior a el. Para conseguir romper el esquema de reencarnaciones totalmente, dando así paso a la felicidad eterna del alma, es necesario la purificación de esta mediante la observancia del principio de orden en el mundo, la contemplación de la música, la practica del silencio y el estudio de las matemáticas. Esta doctrina tiene una clara procedencia extranjera, muy semejante a otras de origen oriental a las cuales Pitágoras estuvo expuesto durante sus viajes, esto se ve en la siguiente cita de Herodoto “There are greeks who presented this doctrine as their own, some earlier some later. Although I know their names, I do not write them down” (Hay griegos que presentaron esta doctrina como propia, algunos antes otros después. Aunque conozco sus nombres, no los escribo.) 6 Armonía El concepto de armonía en Pitágoras es extremadamente amplio. Se entiende tanto como armonía a nivel cósmico como a nivel personal. La definición más concreta que da es la de “Catecismo de las perfecciones”. La “armonía de las esferas” es la doctrina que afirmaba que las diferentes esferas del cielo, es decir, las estrellas, el sol, los planetas... al dar vueltas producían notas musicales distintas. Estas notas, al estar combinadas, producían una armonía imperceptible para nosotros ya que al ser constante e invariable forma parte de nuestro contexto perceptivo. Esta concepción del mundo parte de la suposición del mundo como “cosmos”, es decir, un todo ordenado y conjuntado de manera armónica. La armonía personal consistía en adecuarse a esta cosmología, encontrando así tu propia función en el mundo, y dedicarse a la contemplación y a la reflexión. La Sociedad Pitagórica: La sociedad pitagórica fue una unión entre, por un lado, la religión y por el otro la ciencia rigurosa. El caso de la secta pitagórica resulta tan espectacularmente interesante justamente por esto. Satisfacía a la vez las necesidades religiosas del hombre (que no cubría la religión griega por su falta de ritos y reverencias a los dioses) y también sus necesidades científicas. Promovía el saber y el rigor matemático envuelto en tradiciones de los más curiosas. En primer lugar se debe distinguir entre las dos clases de miembros: Los matemáticos, también conocidos como los conocedores, eran aquellos miembros dotados de las capacidades intelectuales necesarias para conocer y comprender las doctrinas más complejas de Pitágoras. Ellos eran introducidos a las diferentes ramas de la doctrina siendo su propósito buscar nuevas verdades y promover la expansión de la secta mediante el perfeccionamiento de las diferentes doctrinas de Pitágoras. Los acusmaticos en cambio no participaban del conocimiento científico de las altas castas de la comunidad. Estos “oidores” escuchaban aquellas revelaciones pero se tomaban sin el entendimiento de las causas ni las justificaciones. Eran solo creyentes en las doctrinas pitagóricas. Este grupo participaba en los ritos y el código moral de la sociedad como oyentes. Es posible establecer un cierto paralelismo entre la organización de la fe cristiana. Los obispos y teólogos conocen las justificaciones para la existencia de dios mientras que el rebaño solo se ve involucrado en los ritos y el culto a este dios cuya existencia se da por supuesto. Tras la muerte de Pitágoras estas dos castas de la comunidad comienzan a enfrentarse. Los matemáticos buscan el perfeccionamiento y el avance de la ciencia que cultivan mientras que los acusmaticos se ven con la obligación de mantener las doctrinas de Pitágoras intactas, tal y como las dejo él. Los miembros de la secta definían tres diferentes modos de vida. El primero era el de los “amantes de los beneficios”, estos hombres eran aquellos que se dedican al comercio y a la producción. La segunda categoría es la de los “amantes del honor”, es decir, hombres políticos cuyo deseo es ser admirado. La tercera y última categoría es la de los “amantes del saber”, categoría en la cual se sitúan los 7 pitagóricos. Deseaban mirar la vida como sujetos pasivos y no intervenir, esto era para ellos lo que les aportaba la armonía y el ascenso a una vida mejor. El secreto sobre aquello que ocurría en la secta era total, no se podían revelar los descubrimientos realizados por la comunidad a cualquier extraño de ella. Se dice incluso que un miembro fue ahogado por desvelar el descubrimiento de los números irracionales. El pentagrama, la “ugeia”, era utilizada como medio para reconocerse entre los miembros. Entre las otras curiosas prácticas de la secta era la reverencia de la figura de Pitágoras mismo. Se tenia tal respeto por el que no se pronunciaba su nombre, como se demuestra en el siguiente extracto del juramento pitagórico. “No, por aquel que ha entregado a nuestras almas a la tetraktis, una fuente que contiene las raíces de la naturaleza eterna” Se afirma incluso que al desnudarse unos discípulos vieron que uno de sus músculos era de oro. La figura de Pitágoras era la de un Mesías, un personaje doctrinario que esparcía conocimiento. Esta reverencia hacia la figura de este era tan grande que los propios pitagóricos renunciaban a la “propiedad intelectual” de sus descubrimientos matemáticos o filosóficos, atribuyendo se las a Pitágoras, para aumentar el mito que le rodeaba a la vez que así mejoraban las posibilidades de la supervivencia de sus ideas ya que bajo su propio nombre no se llegarían a conocer. Debido a este seguimiento casi total por sus seguidores la figura de pitagoras ha sido entendida más como la de un líder religioso, un guru, que como científico y filósofo. Entre las más altas capas de la sociedad pitagórica se coexistía en total comunidad de bienes. Los discípulos depositaban sus bienes en común al entrar en la secta, Pitágoras afirmaba según Timeo que “entre los amigos todas las cosas son comunes” Las reglas de abstinencia de la secta eran muy variadas, incluían desde pruebas de silencio (que podían llegar a durar hasta 5 años, en los cuales solo escuchaban la doctrina) hasta el vegetarianismo (probablemente como consecuencia de la creencia en el parentesco de todos los seres vivos). “Que no se coman los peces sagrados pues no conviene dar una comida misma a los dioses y a los hombres, como ni a los libres y a los esclavos” Estas reglas de abstinencia son la base de la moral de los pitagóricos basada en la pureza del alma como el concepto clave de la vida, permitiendo, como ya se ha dicho la rotura del ciclo de reencarnaciones. Las reglas eran las siguientes: 1. " Honra ante todo a los dioses inmortales, como manda la ley, 2. y observa el juramento. Honra también a los nobles héroes 3. y a los dioses del mundo inferior con las ofrendas prescritas. ................................................... 9. ...... acostúmbrate a ser señor 10. ante todo de tu vientre, del sueño, de la lascivia y de la ira. Nunca hagas nada vergonzoso ni con otros ni contigo mismo; sobre todo avergüenzate de tí mismo.... 8 17. Hay dolores que llegan a los humanos por designio divino. Por ello 18. cuando la fatalidad te alcance, sopórtala y no la lleves mal. 19. Remédiala, cuanto de tu parte esté y piensa 20. que el destino al que es bueno no le reserva mucho de ella. .................................................... 40. No dejes que el sueño suave llegue a tus ojos 41. antes de que hayas repasado en tu mente por tres veces cada una de tus acciones del día. 42. "¿En qué he faltado? ¿Qué he hecho? ¿Qué he omitido?". 43. Comienza desde el principio y recórrelo todo. 44. Si has hecho algo mal, arrepiéntete; si has hecho algo bien, alégrate. 46. Esto te conducirá por las huellas de la virtud divina. Estas reglas como se puede observar obligan una vida de retiro y abstinencia de ciertos alimentos e incluso de la vida sexual, predican una vida humilde y incitan a la reflexión constante sobre la conducta personal, formando así miembros respetuosos con la naturaleza y todo lo que esta contiene. Conclusión: Las anécdotas rodean casi completamente la doctrina pitagórica restandole así su valor rigurosamente filosófico. Aunque es parcialmente por estas anécdotas y casos particulares que es atractiva al analizarla profundamente surge un rigor característico de los mejores pensadores. Ciertamente estos casos resultan interesantes, como por ejemplo la peculiar adoración a la figura de Pitágoras, o la obvia exageración sobre algunas de las prácticas particulares de la secta. Como por ejemplo la prueba de 5 años de silencio. El silencio y secretísmo que rodeaba la secta no hizo más que aumentar las posibilidades de tergiversación de los hechos reales. Por lo tanto pienso que aunque el mito y el misticismo juegan un gran papel en nuestra concepción de la secta Pitagórica pero que este atractivo primitivo queda reforzado por sólidas tesis filosóficas que se descubren con el análisis profundo. 9 Bibliografía • Ferrater Mora, José. Diccionario de Filosofía. Barcelona. Ariel. 1994. I.S.B.N:84-344-0500-8 • A b b a g n a n o , N i c o l á s . H i s t o r i a d e l a F i l o s o f í a V. I . H o r a . 19 9 4 I.S.B.N: 84-85950-03-8 • Kahn, Charles H.. Pythagoras and the Pythagoreans. Indianapolis. Hackett Publishing Company. 2001. I.S.B.N: 0-87220-575-4 • Laercio, Diógenes. Vidas de los más Ilustres Filósofos Griegos. Barcelona. Ediciones Orbis. 1985. I.S.B.N: 84-7634-022-6 Webgrafía • www.iep.utm.edu/pythagor • www.thecompletepythagoras.net • www.thebigview.com/greeks/pythagoras.html • http://nonio.mat.uc.pt/pensas_en02/pitagoricos/pitagoricos.htm 10