Lesiones cutáneas en la línea media asociadas a disrafismos

Anuncio
CARRERA DE ESPECIALIZACIÓN EN DERMATOLOGÍA
DIRECTOR: PROF. DR. RAMÓN FERNÁNDEZ BUSSY
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA
ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
AUTORA: DRA. MARISA ZIMMERMANN
TUTORA: DRA. MARÍA FERNANDA MACCARIO
HOSPITAL PROVINCIAL DEL CENTENARIO
UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO
AÑO 2010
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
1- ÍNDICE:
1- ÍNDICE…….……...…………………………………………..……………………...
2
2- MATERIALES Y MÉTODOS………...…...………………………………………...
4
3- INTRODUCCIÓN…………………...……………………………………….………
5
3.1 Justificación………………………………..……………………………………...
6
4- OBJETIVOS……...………………………………………………………………...…
7
5- EMBRIOLOGÍA DE LOS DEFECTOS DEL TUBO NEURAL...…………………..
8
6- ETIOLOGÍA………………………………………………………….…………….
14
6.1 Factores genéticos………..…………………………………….…………………. 14
6.2 Factores nutricionales……...…….…………………………………………..........
14
6.3 Factores teratógenicos…………….....…………………………………..………... 14
7- EPIDEMIOLOGÍA…………………………………………………………………
15
8- CLASIFICACIÓN………………………………………………………………….
15
8.1 Disrafismos abiertos………………………………………………………..……..
15
8.2 Disrafismos cerrados……………………………………………………..……….
15
8.3 Disrafismos cefálicos……………………………………….…………………..…
17
8.3.1 Manifestaciones clínicas de los disrafismos cefálicos…...……..…………….
17
8.3.1.1 Cefalocele y encefalocele………………………………………………...
17
8.3.1.2 Gliomas…………………………………………………………………..
18
8.3.1.3 Quistes dérmicos…………………………………………………………
18
8.3.2 Diagnósticos diferenciales según la localización de los disrafismos cefálicos
18
8.3.3 Diagnóstico y tratamiento de disrafismos cefálicos…………………….....…. 20
8.4 Disrafismos espinales…...…………………………………………………...........
20
8.4.1 Síndrome de la médula anclada…………………………………….....…........ 20
8.4.2 Diagnóstico de los disrafismos espinales…………………………….....……. 21
8.4.2.1 Historia clínica…………………………………………………....……...
22
8.4.2.1.1 Anamnesis…………………………………...……...……………….
22
8.4.2.1.2 Examen físico…………………………………………......………...
22
8.4.2 .2 Exámenes complementarios…………………………………..…………
22
Autora: Marisa Zimmermann
Página 2 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.4.2.2.1 RM…………………………………………..
22
8.4.2.2.2 Ecografía…………………………………… 23
8.4.2.2.3 TAC………………………………………....
24
8.4.2.2.4 Radiografías………………………………… 24
8.4.2.2.5 Estudios urodinámicos…………………….... 24
8.4.2.2.6 Laboratorio……………………………….…
24
8.4.2.2.7 Biopsia………………………………..……..
24
8.4.2.2.8 Citogenética……………………………..…..
25
8.5 Algoritmo diagnóstico de disrafismos………………...…………………………..
25
9- MARCADORES CUTÁNEOS DE DISRAFISMOS………...………………………
26
9.1 Marcadores cutáneos de alto y bajo riesgo………………...…………………...…
27
9.2 Manifestaciones clínicas de las lesiones cutáneas marcadoras de los disrafismos
espinales………………………………………………………………………….…… 28
9.2.1 Hoyuelos y Senos dérmicos…………………………………......…………..
28
9.2.2 Lipomas…………………………………………………………...……........ 29
9.2.3 Neoplasias (teratomas, ependinoma, hamartoma)…………......……………
30
9.2.4 Hemangiomas……………………………………………………...……....... 32
9.2.5 Telangiectasias………………………………………………...…….………
32
9.2.6 Malformaciones capilares…………………………….......…...………….…
32
9.2.7 Hipertricosis…………………………………………...………...……..……
34
9.2.8 Collar de pelos………….……………………...……………...……….……. 35
9.2.9 Acrocordones, colas y pseudocolas ………………………………………...
35
9.2.10 Aplasia cutis…………………………………………………………….…...
35
10- PREVENCIÓN……………………………………………………………………… 37
11- CONCLUSIÓN…………………………………………………………..………….
38
12- BIBLIOGRAFÍA…………………………………………………..……...………… 39
Autora: Marisa Zimmermann
Página 3 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
2- MATERIALES Y MÉTODOS
Este trabajo se basa en el análisis bibliográfico de distintas especialidades de Dermatología
Neonatal y Pediátrica, Embriología, Neurología, Neurocirugía, Urología y Obstetricia.
La búsqueda de este material se realizó de libros, revistas y publicaciones. Estas últimas se
obtuvieron a través de la búsqueda en internet en bases de datos científicas (Medline,
Scielo, New England of Medicine, Elsiever, Cochrane, Lilacs, Aepe).
Autora: Marisa Zimmermann
Página 4 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
3- INTRODUCCIÓN
Existen lesiones cutáneas ubicadas en la línea media del cuerpo o en su proximidad
que merecen especial atención porque pueden ser marcadoras de disrafismos.
El término de disrafismo fue introducido por primera vez por Hember y luego por
Lichtenstein en 19401 y significa fusión incompleta o malformación de las estructuras de la
línea media pudiendo incluir anormalidades cutáneas, musculares, óseas y del tejido
vascular. Este término amplió el concepto de la palabra que en griego se podría traducir
como “mala sutura”.
Clásicamente, se pueden dividir los disrafismos de acuerdo al área de la línea media
afectada en: disrafismo cefálico y disrafismo espinal. Si hay falla en el cierre del neuróporo
anterior se provocarían lesiones de diferente gravedad que varía desde una anencefalia a un
encefalocele; si existen fallas en el neuróporo posterior también se producirán lesiones de
gravedad variable desde mielomeningoceles (espina bífida abierta o quística) a espina
bífida oculta1.
Dentro de los disrafismos espinales se distinguen dos tipos: disrafismo espinal
abierto (cuando queda expuesto el tejido neural) u ocultos o cerrados (cuando el defecto de
cierre está cubierto por piel)2. Los disrafismos abiertos no constituyen ningún desafío
diagnóstico en la mayoría de los casos, por su presentación clínica característica, y se los
suele diagnosticar precozmente en el período neonatal 2,3. En cambio, los disrafismos
espinales ocultos pueden pasar desapercibidos y producir el síndrome de la médula anclada.
Por ello, es muy importante conocer las lesiones cutáneas que se ubican en la línea media
del cuerpo ya que en más del 50% de los casos se asocian a disrafismos ocultos.
Conocer la embriología del sistema nervioso central no sólo proporciona la
información necesaria para saber en sus sucesivas secuencias el tiempo y el estadio en los
que se produjeron sus malformaciones congénitas, sino que también nos permite interpretar
las complejas interrelaciones de las estructuras involucradas4. Así, se puede observar que
tanto el tejido neural como epitelial derivan de la misma hoja embrionaria, el ectodermo.
La separación entre ambos tejidos que se rodean de estructuras mesodérmicas para formar
el cordón cerebro espinal ocurre entre la 3ra y 5ta semana de gestación, momento en el cual
se produce el cierre del tubo neural. Esta asociación embriológica y cronológica explica por
qué frente a algún defecto en este proceso de cierre se pueden encontrar alteraciones
cutáneas y de otros tejidos.
La incidencia de los defectos de cierre del tubo neural varía de un país a otro en
cifras que van desde 1 al 6 por mil nacidos vivos1; en Argentina es de aproximadamente
2%o1.
La etiología es multifactorial y puede vincularse con factores genéticos,
nutricionales o teratogénicos5.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 5 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
La asociación de marcadores cutáneos con disrafismos ocultos es probablemente
uno de los campos menos estudiados en nuestra especialidad, a pesar de la gran cantidad de
publicaciones que pueden encontrarse al respecto6. Quizá uno de los motivos sea que los
defectos cutáneos y neurológicos suelen ser variados lo que dificulta poder llegar a reunir
un grupo suficientemente numeroso de pacientes para obtener resultados significativos.
También el hecho de que suelen publicarse solamente los casos más particulares o
llamativos, con lo que habría un sesgo con respecto a los casos más sencillos, que
posiblemente también sean los más frecuentes6.
Al revisar la literatura se observó que los casos publicados por revistas de
neurocirugía, neurología y pediatría presentan mayor clínica neurológica, están más
preocupados por la reparación de los defectos, y quizá muestren menos los aspectos
cutáneos; mientras que en las revistas dermatológicas se profundiza más en las
descripciones de los defectos cutáneos asociados, y suelen presentar pacientes con defectos
neurológicos leves o ausentes6. Por otra parte, dado que los pacientes que son remitidos a
los neurocirujanos tienen defectos mayores, también tienen con mayor frecuencia defectos
cutáneos asociados, con porcentajes de afectación asociada cutánea-neurológica mayores
que los casos estudiados por los dermatólogos, que suelen ser asintomáticos y con menor
probabilidad de afectación neurológica6.
Por estos motivos, esta revisión trata de reunir los estudios más significativos para
poder concluir con el manejo práctico de los defectos del tubo neural.
En la práctica diaria de consultorio se pueden visualizar lesiones que se asocian con
alteraciones neurológicas. Si estas lesiones no se estudian y tratan adecuadamente pueden
desarrollarse complicaciones graves y potencialmente mortales por la afectación de
estructuras internas como el sistema nervioso central. Por consiguiente, es fundamental
reconocer estas lesiones y sus diagnósticos diferenciales.
3.1 Justificación
La detección precoz de lesiones cutáneas con sospecha de defectos del tubo neural
permite instaurar un diagnóstico precoz y un tratamiento adecuado para evitar el
compromiso de estructuras internas, fundamentalmente del sistema nervioso central. De
este modo, es crucial el papel de los dermatólogos en el examen minucioso de las lesiones
que se presentan en la línea media.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 6 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
4- OBJETIVOS
Reconocer las alteraciones del desarrollo embriológico que dan lugar a
defectos en el cierre del tubo neural o de los arcos branquiales que se localizan en la cara, el
cuero cabelludo, el cuello y la espalda.
-
Presentar la etiología y epidemiología de los defectos del tubo neural.
Clasificar los disrafismos según el área de la línea media involucrada, la
presencia o no de exposición al exterior y grado de severidad.
Describir las manifestaciones clínicas de las lesiones cutáneas
correspondientes a los defectos embriológicos en cada segmento de la línea media.
Conocer los diagnósticos diferenciales que se presentan de acuerdo al sitio
afectado en la línea media.
Señalar la metodología de estudio correspondiente en cada caso de acuerdo
al tipo y localización de las lesiones cutáneas.
-
Categorizar los marcadores cutáneos sospechosos de defectos del tubo
neural en alto y bajo riesgo de acuerdo al compromiso de estructuras internas (sistema
nervioso central y óseo).
-
Actualizar los mecanismos de prevención de los disrafismos.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 7 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
5- EMBRIOLOGÍA DE LOS DEFECTOS DEL TUBO NEURAL
Como las etapas más importantes del desarrollo del cordón cerebro espinal ocurren
entre la 3ra y 5ta semana de gestación se revisará lo acontecido en este período.
La tercera semana es el comienzo del período embrionario. Se caracteriza por la
formación de la línea primitiva. notocorda, y tres capas germinales a partir de las cuales se
desarrollan todos los órganos y tejidos (morfógenesis)7.
La gastrulación, proceso que establece las tres capas germinales (ectodermo,
mesodermo y endodermo), comienza con la formación de la línea primitiva en el epiblasto7.
Poco después de que aparezca la línea primitiva, las células se desprenden de su
capa profunda y forman una red laxa de tejido conectivo embrionario llamado mesénquima
(ver figura 1)7. Algunas células mesenquimales forman el mesodermo, que es producido
activamente por esta línea7.
A los16 días de gestación, el ectodermo medial sufre una inducción química del
mesodermo subyacente y se origina la placa neural, que, a su vez, se transforma en el
canal neural 4.
Durante los 22 días, el canal neural, mediante inducción dorsal, se convierte en el
tubo neural (neurulación primaria) (ver figura 2)4.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 8 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
La fusión dorsal del canal neural se inicia en la región cervical rombencefálica y se
extiende en forma bidireccional, pero probablemente el cierre se lleva a cabo en varios
lugares del canal; es decir, es multifocal e intermitente. Se han identificado cinco sitios
diferentes que en orden cronológico son (ver figura 3): línea media dorsal, línea media
parietal, línea media nasal, línea media occipital y línea media caudal8.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 9 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
En consecuencia, la neurulación primaria origina el cerebro que está representado
por tres dilataciones o vesículas encefálicas primarias que se acabarán convirtiendo en
prosencéfalo o cerebro anterior, mesencéfalo o cerebro medio y rombecéfalo o cerebro
posterior6. Además origina la mayoría de la médula espinal funcional, es decir, los
segmentos cervicales, torácicos y lumbares4. Una falla en este proceso puede dar origen por
ejemplo a los lipomas intradurales.
Durante el cierre del canal neural, la médula sigue creciendo en dirección caudal,
porque nuevas porciones del ectoblasto se van transformando en placa y canal nervioso. De
este modo, la médula forma un tubo cuya luz es el epéndimo4. En los extremos craneal y
caudal del embrión, la fusión se retarda, y temporalmente los neuróporos craneal y caudal
comunican la luz del tubo neural con la cavidad amniótica6.
A los 24 días acontece el cierre del neuroporo anterior, y a los 26 días se cierra el
neuroporo posterior en la región lumbosacra4. Los errores en el cierre del tubo neural se
suelen producir a sus extremos, traduciéndose en defectos de las regiones craneal o lumbar
baja y sacra, aunque pueden afectar a otras regiones9. Estos defectos van desde alteraciones
estructurales graves, secundarias al cierre incompleto del tubo, a deficiencias funcionales
debidas a la acción de factores desconocidos en fases tardías del embarazo9. Los defectos
más graves se producen en las etapas más tempranas del desarrollo embrinario. En estas
alteraciones los pliegues neurales no sólo no se fusionan, sino que tampoco se diferencian
ni se invaginan, y, en último término, tampoco se separan de la superficie del ectodermo9.
Como por ejemplos se pueden citar la anencefalia, craneoraquisquisis, la iniencefalia y
la mielosquisis. Le continúa en gravedad un defecto más tardío que es la espina bífida
abierta (disrafismos abiertos o espina bífida quística) que cursan con la salida de la médula
espinal o las meninges o ambas (mielocele, meningocele o mielomeningocele), haciendo
protrusión a través de un defecto de los arcos vertebrales y de la piel para formar un saco
semejante a un quiste. Las lesiones menos graves la constituyen los disrafismos ocultos
(véase más adelante defectos en la inducción).
Este proceso de cierre finaliza con la disyunción del ectodermo superficial del tubo
neural. La falla en esta separación da lugar a los senos dérmicos, quistes dermoides, los
gliomas y los encefaloceles. Probablemente el origen embriológico de éstos en la línea
media nasal sea similar10. Un divertículo se extiende desde la duramadre por el foramen
cæcum hasta una región de la nariz situada justo por debajo del ectodermo de superficie,
denominado espacio prenasal10. El divertículo normalmente se separa del ectodermo y se
retrae hacia el sistema nervioso central, cerrándose el defecto del cráneo en el foramen
cæcum10. Si no se produce dicha separación y el ectodermo de superficie se retrae hacia las
proximidades de la nariz o del sistema nervioso central se producen tractos, senos y quistes
dérmicos (Fig 4 y 5). Si queda neuroectodermo en las regiones superficiales de la nariz, con
la obliteración parcial o total de la conexión con el sistema nervioso central se produce un
glioma nasal. Cuando se mantiene la conexión con el sistema nervioso central se producen
encefaloceles nasofrontales, con herniación del cerebro, las meninges y la duramadre10.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 10 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Autora: Marisa Zimmermann
Página 11 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Según Langman11 en la región espinal (zona caudal) la superficie del ectodermo se
fusiona primero y después se cierra el tubo neural subyacente. En la región craneal, sin
embargo, la fusión ocurre antes entre las células del tubo neural y después se fusionan las
células de la superficie ectodérmica. Este hecho podría explicar algunos hallazgos clínicos
en los casos de aplasia cutis congénita, de modo que en ocasiones encontramos defectos
exclusivamente cutáneos, o de piel y hueso, o de tejido neural, dependiendo del momento
del desarrollo en el que se produce el defecto (ver figura 5).
Posteriormente, tejidos mesenquimatosos migran y se interponen entre el
neurectodermo posterior y el ectodermo cutáneo, permaneciendo, de este modo, toda la
médula enterrada debajo de un ancho estrato del que, en última instancia, se forman las
meninges, los arcos vertebrales dorsales y los músculos paraespinales4. Así, las anomalías
del cierre del tubo neural no sólo afectan al desarrollo del sistema nervioso central, sino que
también interfieren con la inducción y morfogénesis de los tejidos adyacentes9. De esta
manera, se podría explicar la presencia de hipertricosis ya que existen ciertas moléculas
de adhesión, importantes en la embriogénesis, que se expresan de forma selectiva en las
células dérmicas congregadas bajo la zona del germen folicular6. La molécula de adhesión
de la célula neural se expresa en el germen folicular y, de una forma diferenciada, en el
ectodermo neural durante el cierre del tubo neural6. Tal vez, la proximidad del ectodermo
neural (expresando la molécula de adhesión neural) altere las interacciones dermisepidermis normales e induzca la aparición de folículos grandes anormales6.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 12 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
El tubo neural caudal se desarrolla durante la neurulación secundaria, después que
haya finalizado hacia el día 25 la neurulación primaria, A partir de la masa de células
caudales, que son un grupo de células pluripotenciales formado por los restos de la
notocorda caudal del nódulo de Hensen, se pueden originar los lipomas extradurales6.
Restos de a línea primitiva pueden persistir y dar lugar a un tumor conocido como
teratoma sacrococcígeo7. A partir de este rodete caudal del embrión se forma un cordón
sólido de células ectoblásticas que, tras sufrir un proceso de vacuolización, conecta con el
canalis centralis de la médula suprayacente. La parte cefálica de este rodete caudal origina
la punta del cono medular, a cuyo nivel se observa una dilatación del canalis centralis
llamada ventriculus terminalis, mientras que la porción distal forma el filum terminale, que
es un cordón fibroso que une el cono medular al vértice del cóccix4. La circunstancia de
que la masa de células caudales no sólo origine el mesénquima precursor del sacro y del
cóccix, sino que se localice adyacente a las partes más distales en desarrollo del intestino y
mesonefros, explica por qué son tan frecuentes las malformaciones congénitas que asocian
anomalías tanto del cono medular, filum terminale y sacro, como de las regiones ano-rectal,
renal y genital4. Como ejemplo, podemos citar los hemangiomas lumbosacros asociados a
síndrome SACRAL.
Las alteraciones de la inducción dorsal se deben al fracaso de la fusión del canal
neural (fusión incompleta), persistiendo, en consecuencia, la continuidad entre el
neurectodermo posterior y el ectodermo cutáneo, y originan el denominado disrafismo
espinal o espina bífida que comprende un grupo heterogéneo de malformaciones
congénitas. La forma más sutil es el disrafismo espinal oculto que incluye un amplio
espectro clínico de malformaciones7. El hecho de que la espina bífida en L5 o S1 sea
frecuente en los recién nacidos y rara en los adultos sugiere que constituye una variación
normal de la secuencia temporal de la fusión de los arcos vertebrales9. Además, los estudios
genéticos indican que las causas de esta malformación podrían ser distintas de las causas de
las formas más graves de espina bífida o disrafismo espinal9. Los arcos neurales son
inducidos por la placa del techo del tubo neural, con la mediación del gen Msx-29. Por
tanto, pareciera ser que el disrafismo oculto es un problema local de la inducción9.
En cualquier momento del desarrollo si quedaran restos celulares éstos pueden dar
lugar a la formación de quistes dermoides.
El 50% de las malformaciones congénitas afecta el eje cerebroespinal sobre todo a
nivel caudal8.
En consecuencia, los momentos de mayor vulnerabilidad durante el desarrollo
embriológico son8:
a- la formación del tubo neural
b- la separación del neuroectodermo de los otros tejidos ectodérmicos.
c- la interposición de los elementos mesodérmicos que formarán a posteriori la
columna vertebral y musculatura asociada.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 13 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
6- ETIOLOGÍA
En el 95% de los casos de defectos del tubo neural no hay antecedentes
familiares.1La etiología es multifactorial y puede vincularse con factores genéticos,
nutricionales o teratogénicos, según Pulikkunnel ST, et al 5,12.
6.1 Factores genéticos
Se han descripto alteraciones cromosómicas (trisomias 13, 18 y 9),
transmisión hereditaria (el riesgo de recurrencia en parejas que tuvieron un embarazo
afectado aumenta 10 a 20 veces de los embarazos subsiguientes1) y de origen
poligénico6,13. En esta alteración los genes que intervienen están relacionados directa o
indirectamente al proceso que controla el cierre del tubo neural, varios de ellos
involucrados en el metabolismo del ácido fólico13. Se desconoce el mecanismo exacto por
el cual el ácido fólico previene los defectos del tubo neural. Se postula la existencia de
mutaciones en el gen MTHFR que provocan una menor actividad de enzimas del
metabolismo del ácido fólico (como la metilentetrahidrofolatorreductasa). Esta alteración
dificultaría la síntesis de ácidos nucleicos o impediría la conversión de homocisteína a
metioniona, con la consiguiente acumulación de metabolitos embriotóxicos. Uno de estos
mecanismos causaría alteraciones en la embriogénesis, en un punto crítico del cierre del
tubo neural. El factor ambiental desencadenante estaría dado por la escasa cantidad de
ácido fólico ingerido, suficiente para soslayar la mutación genética6,14.
6.2 Factores nutricionales
-
Nivel socioeconómico bajo 1,6
Multiparidad1
Deficiencia de ácido fólico 1,6,12,14,15,16,17,18
Carencia de Zn6
Alcoholismo1,6
Diabetes Mellitus1,6
Obesidad materna1,6
6.3 Factores teratogénicos
Fármacos: ácido valproico 1,2,19, carbamacepina 1,2,19, talidomida19,
isotretinoína19, ácido acetilsalicílico6, pseudoefedrina19, anticonceptivos2,6, warfarina6,
sulfonamida6, diuréticos6 y antihistamínicos6.
Enfermedades infecciosas (hipertermia): gripe1,2,6,15, phytophtora infestans
(un hongo parásito de la patata en Gran Bretaña)6
Tóxicas: Tabaquismo15 y exposición a solventes y plaguicidas1,6,15.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 14 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
7- EPIDEMIOLOGÍA
Las anomalías del tubo neural son las causas más frecuentes de anomalías congénitas en
la mayoría de países del mundo13. La incidencia varía de un país a otro en cifras que van desde
1 a 6 por mil nacidos vivos; en Argentina no hay estadísticas, aunque se estima una incidencia
de 2 casos por 1000 habitantes1. Se reportan mayores incidencias de defectos en países como
Irlanda, China e Irán y menores en Canadá y EE.UU15,18.
Además de las diferencias geográficas se han encontrado diferencias: étnicas
(mayores en la raza blanca6,15), estacionales (más frecuente en nacidos en primavera) y
referidas al sexo (dependen del defecto involucrado, por ejemplo el mielomeningocele es
más frecuente en mujeres)14.
Es importante señalar que la incidencia de espina bífida oculta en adultos normales
se estima entre el 5% y el 17,3% 6.
8- CLASIFICACIÓN
Clásicamente, se distinguen dos tipos de disrafismos espinales: abiertos (cuando
queda expuesto el tejido neural) u ocultos o cerrados (cuando el defecto de cierre está
cubierto por piel)2.
8.1 Disrafismos abiertos
Los disrafismos abiertos no constituyen ningún desafío diagnóstico en la mayoría de
los casos, dada su presentación clínica característica, y se los suele diagnosticar
precozmente en el período neonatal 2,3.
8.2 Disrafismos cerrados
El tejido nervioso no se encuentra expuesto al medio, sino que está recubierto por
piel. Esta piel puede ser de aspecto totalmente normal, o mostrar signos que nos alerten de
la enfermedad subyacente, por lo que el término disrafismo oculto no sería correcto en
estos casos2. El disrafismo espinal cerrado es mucho más frecuente que el abierto y sus
factores de riesgo no son tan bien conocidos2.
Como se describió durante el desarrollo embriológico las anormalidades del tubo
neural son más frecuentes en sus extremos. De esta manera, podemos dividir a los
disrafismos de acuerdo al área de la línea media involucrada en: disrafismos cefálicos y
disrafismos espinales. Teniendo en cuenta el momento de formación del tubo neural se
puede afirmar que los disrafismos que se originan más tempranamente tendrán mayor
gravedad y por lo tanto peor pronóstico (ver figuras 6 y 7).
Autora: Marisa Zimmermann
Página 15 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Autora: Marisa Zimmermann
Página 16 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.3 Disrafismos cefálicos
Se ubican en la línea media facial, línea media nasofrontal y el cuero cabelludo. Se
pueden presentar lesiones incompatibles con la vida como la anencefalia (ausencia parcial
o total del tejido cerebral), la craneoraquisquisis (fracaso completo del cierre neural que
incluye anencefalia y disrafia espinal) y la iniencefalia (el defecto involucra principalmente
la zona de la nuca provocando retroflexión de la columna que fuerza al feto a mirar hacia
arriba, la lesión abierta en la columna es de diferente grado y las vértebras son anormales) o
bien lesiones compatible con la vida como el cefalocele, el glioma nasal y el quiste
dermoide1.
8.3.1 Manifestaciones clínicas de los disrafismos cefálicos
8.3.1.1 Cefalocele
Es una lesión congénita en la cual a través de un defecto del cráneo protruyen las
meninges, el líquido cefalorraquídeo y el contenido encefálico en cantidad variable20. Se
denomina de acuerdo con las estructuras contenidas en:
-
Encefalocele: contiene tejido glial, meníngeo y LCR
Meningocele: contiene tejido meníngeo y LCR
Se pueden localizar en las regiones frontal, parietal y occipital. Los meningoceles o
encefaloceles grandes son diagnosticados como tales al nacer, pero los de menor tamaño
pueden ser confundidos con tumores cutáneos (hemangiomas, quistes dermoides)3,20.
Clínicamente son de aspecto variable y se ubican preferentemente en la línea media, aunque
pueden distar 1 a 3 cm de ella; pueden estar cubiertos por piel normal o por una superficie
lisa, transparente y azulosa. Son nódulos compresibles, que aumentan su tamaño con
maniobras de Valsalva (llanto).
El pronóstico neurológico en la mayoría de los encefaloceles anteriores es muy
bueno; lo contrario ocurre en los de localización posterior pues pueden presentar
hidrocefalia y a menudo se asocian a otras malformaciones del sistema nervioso como el
síndrome de Dandy-Walker, el síndrome de Meckel, mielomeningoceles, etc21.
Entre 20 y 37% de los nódulos congénitos no traumáticos de cuero cabelludo tiene
conexión con el sistema nervioso central (SNC) subyacente3,20; por esto, todo nódulo
congénito exofítico de cuero cabelludo debe ser evaluado en profundidad, siendo
especialmente sospechosos aquellos nódulos que se presentan en asociación con otras
manifestaciones cutáneas como malformaciones capilares, signo del collarete piloso o
mechón de pelo. El signo del collarete piloso se describe como un anillo congénito de pelo
oscuro, largo y más grueso que el pelo circundante3,20. Cuando rodea un nódulo exofítico de
cuero cabelludo es altamente sugerente de disrafia craneal.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 17 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.3.1.2 Gliomas
Los gliomas nasales corresponden a restos de tejido nervioso ectópico, que no
tienen comunicación intracraneal permeable (a diferencia de los cefaloceles) y al examen se
confunden fácilmente con hemangiomas3,20. La lesión puede ser externa, intranasal o mixta.
Clínicamente son nódulos firmes, indoloros, no compresibles, rojos, ubicados en la raíz de
la nariz; están frecuentemente cubiertos por piel o mucosa nasal cubierta con
telangiectasias3,20. El ensanchamiento del hueso nasal puede dar la impresión de
hipertelorismo3,20. Son lesiones no progresivas3,20.
8.3.1.3 Quistes dermoides
Los quistes dermoides son lesiones subcutáneas congénitas formadas por
inclusiones de elementos dérmicos y epidérmicos, que aparecen en líneas de fusión
embrionarias (faciales y de línea media)3,6,20. A pesar de ser congénitos se diagnostican
generalmente en la niñez, cuando comienzan a distenderse. Se observan más
frecuentemente en la fontanela anterior o bregma, región superolateral de la frente (cola de
las cejas) y región submentoniana3,6,20. Clínicamente son nódulos quísticos, azulados,
indoloros, no compresibles, de 1 a 4 cm de diámetro que no aumentan de tamaño con
maniobras de Valsalva3,6,20. La piel suprayacente es normal, a menos que exista una
conexión externa en forma de hoyuelo (pit) o conductillo3,6,20.
Los quistes dermoides nasales o los de línea media deben tener un estudio más
acabado, dado que un 25% presenta conexión intracraneal3,6,20. En estos casos, si además
se presenta con un conductillo, este puede drenar líquido cefalorraquídeo, comunicación
que aumenta el riesgo de meningitis en estos pacientes, especialmente por estafilococo
aureus3,6,20. La ubicación nasal también puede dar la impresión de hipertelorismo al
aumentar de volumen la lesión3,6,20.
8.3.2 Diagnósticos diferenciales según la localización de los disrafismos
cefálicos
A- Línea media facial (diagnóstico diferencial de quistes y senos dermoides)
Tumores benignos: meningocele, mucocele, neurofibroma, tricofoliculoma,
lipoma, quiste sebáceo, quiste de inclusión, hemangioma.
Traumatismos
Infecciones: forúnculos
Inflamación: obstrucción sistema nasolacrimal
B- Línea media nasal: es importante tener en cuenta los diagnósticos diferenciales
que se mencionaron y además diferenciar adecuadamente encefalocele, glioma y quiste
dermoide.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 18 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
C- Cuero cabelludo
Autora: Marisa Zimmermann
Página 19 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.3.3 Diagnóstico y tratamiento de disrafismos cefálicos
Se debe realizar una anamnesis exhaustiva buscando la existencia de factores de
riesgo8. Como los que se describen:
-
-
Historia de traumatismo previo (quiste leptomeníngeo)
Historia familiar de encefalocele, disrafismo espinal oculto o anencefalia.
Lesión en línea media desde el nacimiento que agranda con el llanto, el esfuerzo o
la maniobra de Valsalva, que transilumina, que está rodeada por un collar de pelos o
mancha de vino oporto o que se asocia con otros defectos como hendidura labial o
palatina.
Historia de meningitis recurrentes (aún asépticas).
Celulitis reiteradas en localizaciones inusuales. Abscesos cerebrales.
Signo neurológico asociado, incluso jaqueca o cambios en el comportamiento.
En coincidencia con la bibliografía consultada Puig Sanz,Ll10 refiere que los quistes
dermoides, gliomas y encefaloceles nasales deben extirparse precozmente y de forma
completa para evitar sus complicaciones infecciosas (cuando existe una conexión con el
sistema nervioso central, las fugas de líquido cefalorraquídeo pueden desarrollar una
meningitis). Deben efectuarse estudios radiológicos antes de efectuar la extirpación de las
lesiones para delimitar su extensión y establecer la existencia o no de una conexión con el
sistema nervioso central que requeriría una intervención neuroquirúrgica para conseguir la
disección completa del tracto. La resonancia magnética proporciona excelentes detalles de
las partes blandas y permite caracterizar los defectos cerebrales asociados, mientras que la
tomografía axial computadorizada es más útil con el fin de evaluar la anatomía ósea.
Como estudio prenatal puede solicitarse el dosaje de la alfa-fetoproteína que se
encuentra elevada siempre y cuando exista comunicación del líquido cefalorraquídeo fetal
con el líquido amniótico materno a través de un defecto de la piel que cubre al encefalocele
y a la aplasia cutis, lo cual no siempre se presenta21.
8.4 Disrafismo espinal
Se localizan a lo largo de la línea media cervical, dorsal, lumbar y sacra. Podemos
encontrar también lesiones incompatibles con la vida como la mieloraquisquisis y lesiones
compatibles con la vida como al meningocele, mielomeningocele, lipomeningocele,
lipomielomeningocele y disrafismo oculto que a su vez pueden producir el síndrome de la
médula anclada.
8.4.1 Síndrome de la médula anclada
Esta entidad se considerada un síndrome clínico que puede aparecer como
complicación de la corrección quirúrgica de un mielomeningocele o de forma primaria en
un disrafismo espinal oculto (lipoma, quistes dermoides, diastematomielia, filum
engrosado) que se produce por una fijación de la médula por debajo de L1-L22,22.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 20 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
El mecanismo fisiopatológico parece consistir en una tracción parcial de la médula
espinal en relación con el crecimiento progresivo de la columna vertebral durante el
desarrollo, que produce un descenso del flujo local y por tanto del metabolismo oxidativo,
originando una disfunción neuronal lumbosacra23.
Los síntomas suelen manifestarse en promedio a partir de los 3 años de edad. Se
subdividen en2:
a) disfunción de la primera motoneurona:
- Vejiga neurógena: obstrucción urinaria, vaciamiento incompleto, infecciones
urinarias a repetición, reflujo vesicoureteral, hidronefrosis.
- Alteraciones en el tránsito intestinal
- Hiperreflexia osteotendinosa
- Hipertonía de los miembros inferiores que pueden llevar a deformidades
osteoarticulares, como escoliosis.
b) disfunción de la segunda motoneurona
- Atrofia de miembro inferior
- Hipo o arreflexia osteotendinosa
- Alteraciones vesicales, como pérdida de función del esfínter
- Deformidades pie zambo
c) malformaciones asociada.
- Vertebrales: escoliosis
- Sistema nervioso: siringomelia, diastermatomielia, malformación de Chiari II,
hidrocéfalo.
- Extraanexiales: anorrectales y urogenitales. Menos frecuentemente cardíacas.
B. Pilo de la Fuente et al23 destacan que el diagnóstico se realiza habitualmente en
forma tardía durante la infancia, incluso los síntomas pueden ocasionalmente iniciarse en la
edad adulta. Resalta que es fundamental tener en cuenta los síntomas cutáneos,
neurológicos y ortopédicos que pueden orientar al diagnóstico.
Por ello el diagnóstico debe ser precoz, es decir, previo a la aparición de estos
síntomas. Por este motivo, es muy importante conocer las lesiones cutáneas asociadas a
disrafismos (véase lesiones cutáneas marcadoras de disrafismos)2.
8.4.2 Diagnóstico de los disrafismos espinales
El diagnóstico de los defectos del tubo neural debe realizarse teniendo en cuenta los
antecedentes epidemiológicos, exámenes clínicos, estudios por imágenes y genéticos.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 21 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.4.2.1 Historia clínica
Los marcadores cutáneos deben ser evaluados en el contexto de una anamnesis
completa y de una exploración física exhaustiva.
8.4.2.1.1 Anamnesis
Durante el control prenatal de mujeres embarazadas se deben investigar
epidemiológicamente con un enfoque de riesgo, todos los factores que pudieran
relacionarse con la génesis de los defectos del tubo neural.
La historia debe recoger los antecedentes familiares de disrafismo espinal, así como
los antecedentes personales de meningitis, infecciones urinarias a repetición e incontinencia
urinaria. No se debe olvidar de indagar, en el caso de que sea posible, sobre la existencia de
debilidad y/o dolor en los miembros, alteraciones en la marcha y, escoliosis.
8.4.2.1.2 Examen físico
La exploración debe ser minuciosa, deben palparse las vértebras para detectar
defectos o anomalías; evaluarse los genitales y el recto para descartar malformaciones; la
hendidura glútea que debe ser recta y simétrica, su desviación sugiere la presencia de una
masa subyacente, como un lipoma o meningocele; deben buscarse daños tróficos en las
extremidades como consecuencia del daño neural (asimetría, alteraciones en el tono y los
reflejos osteotendinosos) 3.
8.4.2.2 Exámenes complementarios
La sensibilidad de la RM se estima del 95,6%, la de la Ecografía un 86,5% y la de
las radiografías un 80%6. La especificidad de la RM es de un 90,9%, la de la Ecografía de
92,9% y la de las radiografías del 18%, como lo describen Azzoni R et al6,25.
8.4.2.2.1 Resonancia magnética (RM)
En coindencia con otras publicaciones Rossi A et al34 aceptan que actualmente es la
técnica de elección para el diagnóstico de disrafismo 2,6,20. Permite la visualización de
partes blandas distinguiendo bien los elementos intravertebrales de los extravertebrales2.
No se requiere anestesia general, excepto en personas nerviosas y recién nacidos. Es por
ello, que con frecuencia en estos últimos se retrasa hasta los 4 a 6 meses de edad, salvo si se
sospecha la presencia de un seno dérmico en cuyo caso debe realizarse lo antes posible para
corregir la malformación precozmente y con ello evitar la aparición de meningitis. Incluso,
si los estudios muestran una anatomía normal, es conveniente repetirlos transcurrido un
tiempo, cuando el niño sea un poco más mayor6. Es una técnica que no usa radiación y
permite una excelente representación de las alteraciones anatómicas en los casos de disrafia
espinal, en especial porque permite efectuar cortes en cualquier orientación20. Sus
desventajas son el alto costo, la necesidad de sedación como se describió previamente y la
interpretación dificultosa en el recién nacido8,20.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 22 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
.
8.4.2.2.2 Ecografía
En el caso de niños menores de 6 meses con sospecha de disrafismo, como
concluyen Joan Dalmau-Arias et al26, es la técnica a solicitar ya que los arcos vertebrales no
se han osificado completamente lo cual proporciona una ventana acústica y es posible
visualizar imágenes intrarraquídeas y extrarraquídeas2,6,20 . Se debe solicitar ecografía
transfontanelar y de columna. Como lo determinan Deeg KH, et al27 este método permite
diagnosticar todas las formas de disrafismos. En el caso de que resultara anómala o como lo
establecen Schenk JP et al28 cuando se presentan alteraciones neurológicas es conveniente
complementarla con RM2. En caso de defecto de cierre, incluso puede seguir utilizándose
después de los 6 meses6.
Es una técnica no invasiva, rápida, inocua, no necesita sedación ni medio de
contraste, está disponible en la mayoría de los centros, es de bajo costo, se puede repetir las
veces que se estime conveniente20. La calidad de la ecografía disminuye a partir de los 9
meses por la progresiva osificación vertebral6. Su principal desventaja con respecto a la
TAC y la RM es su menor resolución anatómica y espacial que puede ser de importancia en
aquellos casos que requieran cirugía20.
La ecografía, como lo establecen Lode HM et al 29, es el método de screening más
indicado hoy en día, ante la sospecha de una disrafia espinal oculta, para seleccionar los
casos que requieran estudio más sofisticado20.
Este estudio no sólo se deberá indicar en los niños que presenten lesiones cutáneas
de alto riesgo, sino como lo establecen Henriques JG et al30 las lesiones de bajo riesgo
también se deben estudiar con este método a pesar de que su probabilidad de conexión al
SNC sea muy baja debido al bajo costo que presenta y además a la posibilidad de detectar
el defecto si realmente se manifestaría30.
Además Azzoni R et al25 proponen utilizar este estudio en el screening neonatal de
madres diabéticas.
Sardana K et al31 hallaron que la ecografía presentó mejor performance en niños
menores de 6 meses, pero disminuyó su eficacia en un 5% con las malformaciones
vasculares y un 15% con las masas dorsolumbares (lipomas).
Con lo que respecta los estudios prenatales Blaas HG et Eik-Nes SH31 observaron
que es muy importante la descripción de las alteraciones embriológicas que se pueden
observar durante el primer trimestre del embarazo con ecografía. Por su parte Cameron M
et Moran P47 en una revisión priorizan la utilización de ecografía en 3D ya que tiene mayor
resolución para detectar defectos del tubo neural.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 23 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.4.2.2.3 Tomografía computarizada (TAC)
Sólo supera a la RM para el estudio de los defectos óseos2. Es un buen método para
el estudio de la disrafia espinal, por los detalles anatómicos que permite identificar. Sin
embargo, tiene como desventaja su mayor costo, el uso de radiación ionizante, la necesidad
de sedación del paciente y en muchos casos la necesidad de inyectar medio de contraste
intrarraquídeo20.
8.4.2.2.4 Radiografia craneal y de raquis
Los estudios de radiografía simple de la columna vertebral suelen mostrar la
presencia de anomalías óseas pero la ausencia de hallazgos no excluye la posibilidad de
anomalías subyacentes 6,20.
8.4.2.2.5 Estudios urodinámicos
8.4.2.2.6 Laboratorio
Durante su evolución el tubo neural se encuentra abierto inicialmente en sus dos
extremos y se comunica con la cavidad amniótica. Cuando ocurre un defecto del tubo
neural, hay sustancias fetales como la alfa-feto-proteína (AFP) y la acetil-colinesterasa,que
son secretadas al líquido amniótico y se los detecta como marcadores bioquímicos6.
La determinación en el líquido amniótico de la alfa-fetoproteína (AFP) y de la
acetilcolinesterasa en el suero materno entre la 13 y la 16 semana de gestación se
recomienda, en la actualidad, como “screening” de los defectos del tubo neural, aun
cuando existe un elevado número tanto de falsos positivos como de negativos. Los niveles
de AFP mayores de 1000 ng/mL (el valor normal de la AFP durante la gestación es de hasta
500ng/mL) indican una alta probabilidad de un defecto del tubo neural abiertos o también
se eleva en los encefaloceles y la aplasia cutis4. En estos casos se recomienda realizar
ecografía para corroborar el diagnóstico y el tipo de defecto del tubo neural6.
La pseudocolinesterasa se encuentra en el líquido amniótico normal mientras que la
acetilcolinesterasa se encuentra a mayor concentración en el tejido neural. Por eso la tasa
acetilcolinesterasa/pseudocolinesterasa puede ayudar a diferenciar los casos de defecto del
tubo neural de otras alteraciones y de los casos de contaminación de la sangre fetal. En los
defectos de tubo neural y casos de muerte fetal el cociente es mayor de 0.27 mientras que
en defectos de la pared abdominal y contaminación de la sangre fetal el cociente es menor a
0.16.
8.4.2.2.7 Biopsia
Las lesiones de la línea media deben ser estudiadas cuidadosamente antes de
realizar una biopsia o resección quirúrgica a fin de descartar su conexión intracraneal1, aún
si los estudios realizados no muestran conexión con el SNC, pues si los conductos son muy
delgados pueden no visualizarse en las imágenes8.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 24 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
8.4.2.2.8 Citogenetica
Cariotipo: La citogenética convencional es obligatoria ante la presencia de
cualquier malformación congénita. Según algunos autores el cariotipo debe solicitarse
sistemáticamente a todos los pacientes con aplasia cutis. Sin cariotipo no se puede
confirmar la etiología cromosómica de determinados síndromes malformativos, aunque
sean clínicamente muy típicos, porque hay fenocopias que los pueden imitar. Es muy
recomendable realizar doble cariotipo (por ejemplo en linfocitos y fibroblastos) para
detectar mosaicismos en distintas líneas celulares6.
Genética molecular: Se solicita dado que muchas enfermedades son causadas por
alteraciones subcromosómicas del genoma 6.
8.5 Algoritmo diagnóstico de disrafismos (según la autora):
Autora: Marisa Zimmermann
Página 25 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
9- MARCADORES CUTÁNEOS DE DISRAFISMOS
Como se mencionó existen lesiones cutáneas que se asocian a disrafismos espinales
ocultos o espina bífida oculta. Por este motivo, es muy importante conocerlas. Se agrupan
en diferentes categorías (ver tabla 3)2.
Sardana K et al31 en coincidencia con otras publicaciones23,35 encuentran que las
lesiones que más frecuentemente se asocian a disrafismos ocultos son los lipomas y los
hoyuelos.
La mayoría de ellas se encuentran localizadas en la línea media o cerca, en la región
lumbosacra, aunque su existencia en las regiones dorsal y cervical también puede indicar
malformaciones.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 26 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
9.1 Marcadores cutáneos de alto y bajo riesgo: Siguiendo a Drolet []35, dividimos
a los marcadores cutáneos de disrafismo oculto según su índice de sospecha.(ver tabla 4).
La bibliografía sugiere que algunas alteraciones son más indicadoras que otras de
una anomalía subyacente. Así se puede observar en la tabla 5 que la hipertricosis alertaría la
presencia de diastematomielia y el lipoma de lipomielomeningocele.
*
disrafismo espinal oculto no definido
Autora: Marisa Zimmermann
Página 27 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Schropp C et al revisó 358 casos y encontró un 86,3% de casos de disrafismos con
signos cutáneos36. Otros estudios han documentado una incidencia de asociación con
malformaciones cutáneas que varía de un 50 a 100%37.
La combinación de dos o más lesiones cutáneas en línea media es altamente
sugestivo de disrafismo oculto según lo reporta Guggisberg D. et al° coincidiendo con
otros estudios38.
9.2 Manifestaciones clínicas de las lesiones cutáneas marcadoras de los
disrafismos espinales
9.2.1 Hoyuelos y senos dérmicos
Se encuentran entre los marcadores más bien establecidos de disrafismo espinal
cerrado35. Cuando son profundos corresponden realmente a senos dérmicos3. Los senos
dérmicos espinales son tractos tubulares producidos por un fallo en la separación del
neuroectodermo del ectodermo epitelial durante la neurulación39. Pueden conectar la piel
con el canal espinal2. Se localiza preferentemente en la línea media, aunque puede ser
paramediano y puede encontrarse en cualquier nivel, desde la primera vértebra cervical
hasta el coxis, más frecuentemente en la región lumbar39. En cualquier punto de su
recorrido puede existir un quiste (dermoide o epidérmico)2. Estos quistes pueden
inflamarse, romperse o sobreinfectarse produciendo una meningitis2, pudiendo producir
secundariamente déficit neurológicos serios o compresión neural debida a un absceso
intraespinal o a un tumor dermoide infectado como se describe en un estudio realizado en el
Hospital Nacional de Pediatría “Prof. Dr. Juan P. Garrahan”39, en el cual también se destaca
que sólo en el 30% de los casos los pacientes consultaron por la presencia de la lesión.
Los hoyuelos y senos dérmicos son lesiones relativamente frecuentes2. Se deben
estudiar en los siguientes casos1,3,40:
Ser profundos (mayor de 0,5 cm)
Localizados en la porción superior del pliegue interglúteo o por encima ( a
más de 2,5 cm del borde anal)
Estar asociado a otros marcadores cutáneos.
El seno dérmico espinal debe diferenciarse de otra entidad mucho más frecuente
también localizada en la columna y que no reviste importancia patológica, la fosita
pilonidal o seno sacrococcígeo. Se trata de pequeñas áreas de piel redondeadas y
deprimidas debido a la fijación de la piel a estructuras óseas o fibrosas subyacentes6. Esta
lesión se localiza en la región superior del pliegue interglúteo y generalmente no requiere
estudios por imágenes por tratarse de una entidad benigna que no se comunica con el canal
raquídeo y desaparece en forma espontánea1. Así lo establece Kriss et al en un estudio
donde encontraron que en una población de 207 niños sanos esta lesión fue la más
frecuente y no se evidenció asociación con disrafismo luego de efectuar ecografías.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 28 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
A las mismas conclusiones llegan Gibson PJ et al41 y Weprin BE et al42. Cabe
destacar que ninguna de estas lesiones deben ser exploradas introduciendo sondas debido al
riesgo de infección43.
Winstanley D et al44 publicaron un caso de hemangioma sacro con un seno dérmico
con mucosa entérica, esta particularidad se debería a una herniación del endodermo
intestinal a través de la notocorda.
9.2.2 Lipomas
En un estudio Natarajan Muthukumar45 explica que se pueden clasificar a los
lipomas en dos tipos desde el punto de vista embriológico, epidemiológico y clínico (ver
tabla 6).
A- Lipomas sin afectación dural
B- Lipomas con afectación dural
El origen embriológico de los lipomas sin afectación dural se podría explicar por
dos teorías:
1- por alteración en la segunda neurulación en la que se distinguen dos procesos:
canalización del tubo y regresión. En estos dos procesos el mesodermo puede mezclarse
con las células que formarán el tubo neural.
2- persistencia de células totipotenciales.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 29 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Por otro lado, el origen embriológico de los lipomas con afectación dural se
produciría por una alteración en la neurulación primaria, durante la separación entre
neuroectodermo y ectodermo epitelial acompañado por mesodermo que invade el tubo
neural.
Los lipomas congénitos pueden localizarse en la dermis, en el interior del canal
espinal, o a veces penetrar desde la dermis al canal intraespinal a través de un defecto
vertebral (lipomeningocele) que fluctúa a la palpación3. Cuando tienen un componente
dérmico se manifiestan como una masa subcutánea blanda, en o cerca de la línea media; si
se localizan en una zona baja causan una asimetría del pliegue interglúteo2. A diferencia
de los adquiridos, pueden estar mal delimitados y a la palpación parecen más un aumento
de grasa que una lesión definida3.Es causa frecuente de médula anclada2,3.
Histológicamente, pueden ser grupos de adipocitos maduros separados por tractos
de colágeno o, en algunos casos, pueden permanecer dispersos en su interior restos de
tejidos de origen ectodérmico, mesodérmico o endodérmico, con lo que deberían ser
considerados teratomas simples o complejos2
9.2.3 Neoplasias
Algunas neoplasias, que en ocasiones se confunden con lipomas, quistes
pilonidales, meningoceles o lipomielomeningoceles, se han publicado asociadas a
disrafismos. Se trata de casos de teratomas, ependimomas, neurofibromas y hamartomas
entre otros46.
9.2.3.1 Teratomas
Son tumores compuestos por varios tipos celulares representativos de más de una
hoja embrionaria. Se localizan sobre todo en las gónadas pero en la infancia son bastante
comunes en la región sacro-coxígea6.
Mehar Chand Sharma et al47 concluyen luego de analizar 27 pacientes con
teratomas que es muy importante su extirpación precoz y posterior análisis histopatológico
ya que se pueden encontrar tumores malignos como por ejemplo el tumor de Wilms.
Además evidenciaron que 20 pacientes presentaron alguna forma de disrafismo. La
localización de la lesión puede predecir la posibilidad de malignización de modo que las
que se localizan en la parte posterior del sacro son con frecuencia más benignas que las que
se localizan en la parte anterior6. Pueden ser sólidos o quísticos. Una radiografía puede
mostrar calcificaciones en el tumor. Con respecto al tumor de Wilms, Méhes K,et al48,
visualizaron en un estudio que la prevalencia de marcadores cutáneos y disrafismo es más
frecuente en esta entidad en comparación con la población. De todas maneras se necesitan
más estudios que puedan aseverar esta observación.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 30 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
9.2.3.2 Neurofibromas
Existen tres tipos: cutáneos, subcutáneos y plexiformes. Los tipos cutáneo y
subcutáneo generalmente no están presentes en la infancia y no asocian disrafismo8. Los
neurofibromas plexiformes son una combinación de los tipos cutáneo y subcutáneo,
generalmente congénitos aunque pueden ser muy sutiles durante la infancia y pasar
desapercibidos. En ocasiones solo se detectan por la presencia de una zona
hiperpigmentada o con hipertricosis suprayacente. A la palpación es típico la sensación de
tocar un “saco de gusanos”. Pueden llegar a alcanzar tamaños enormes. Los neurofibromas
plexiformes son patognomónicos de Neurofibromatosis tipo 16. Los neurofibromas
plexiformes de la línea media pueden infiltrar los plexos braquial, lumbar o sacro,
envolviendo raíces nerviosas o por medio de un efecto masa comprimir la propia médula, o
provocar colapso vertebral o luxación con el consiguiente daño medular8. También puede
haber consecuencias neurológicas secundarias a cirugía del tumor. La neurofibromatosis
tipo 1 también puede producir escoliosis debida a destrucción vertebral por neurofibromas
paravertebrales o displasia congénita vertebral. Hay que tener en cuenta que la presencia de
hipertricosis o hiperpigmentación en la línea media de un niño puede ser un marcador
de neurofibroma plexiforme y requiere de estudios complementarios para diagnóstico de
neurofibromatosis o disrafismos.
9.2.3.3 Ependimomas
Son los tumores gliales más frecuentes de la médula espinal. Sin embargo, los
ependimomas subcutáneos sacrocoxígeos son lesiones raras que se han asociado con
disrafismo. Dado que en esta localización extradural hay un mayor riego vascular y drenaje
linfático, existe una mayor frecuencia de metástasis6.
9.2.3.4 Hamartomas: Nevos
La presencia de un nevo epidérmico en un recién nacido, en particular en la cabeza
o en área mediofacial, obliga a realizar al menos una evaluación ultrasonográfica
cerebral. Dos entidades incluidas como tipos de “síndrome del nevo epidérmico” son el
síndrome de Proteus y el síndrome CHILD, acrónimo que señala una entidad ligada al sexo
caracterizada por hemidisplasia congénita, nevo ictiosiforme y defectos en los miembros
con un patrón de lateralización muy acusado, que puede presentar anomalías viscerales y
del SNC ipsolaterales como la hipoplasia cerebral unilateral43.
Como lo expresan García-Alix Pérez A, et al43 los nevos melanocíticos congénitos,
en particular los gigantes, representan un aumento del riesgo de desarrollar melanomas y
también de melanosis neurocutánea: invasión y proliferación melanocítica benigna o
maligna en el SNC, tanto en las leptomeninges como en determinadas regiones del
parénquima cerebral. Un reciente estudio de 160 niños con nevo melanocítico congénito
gigante, seguidos 5 años por término medio, mostró que estos pacientes tienen un riesgo
acumulado de presentar melanoma del 2,3% (intervalo de confianza [IC] del 95 %, 0,8-6,6)
y de desarrollar melanosis neurocutánea del 2,5 % (IC 95 %, 0,8-7,2)45. Por lo general, los
niños que desarrollan melanosis neurocutánea presentan síntomas neurológicos antes de los
3 años y la mayoría fallecen en los primeros 3 años tras iniciarse la sintomatología.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 31 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Además de los melanomas y la melanosis neurocutánea, los nevos melanocíticos
congénitos de más de 2 cm de diámetro se puede asociar una gran diversidad de anomalías
estructurales no melanocíticas del SNC43.
Se recomienda realizar estudios tempranos de neuroimagen para examinar no sólo la
posibilidad de melanosis intracraneal, sino también la posible presencia de alteraciones
estructurales43.
9.2.4 Hemangiomas
Los hemangiomas asociados a disrafismo espinal suelen ser grandes (mayor a 4
cm) y cubren la línea media lo que pospone el tratamiento del defecto neurológico. Con
frecuencia, sobre el hemangioma hay una solución de continuidad de la piel o una úlcera3.
Stockman A,et al49 proponen el acrónimo SACRAL para definir las alteraciones
asociadas a estos hemangiomas. Refiere que los superficiales se ulceran más rápido y con
mayor frecuencia se asocian a disrafismo.
Spinal dysraphism
Anogenital anomalies
Cutaneous anomalies
Renal and urologic anomalies
Associated with Angioma of
Lumbosacral localization
9.2.5 Telangiectasias
Las publicaciones sobre telangiectasias probablemente describen hemangiomas
nacientes o que están en fase de regresión3.
9.2.6 Malformaciones capilares
Según algunas publicaciones, las malformaciones capilares cuando son el único
hallazgo, raramente se asocian a disrafia espinal. Sin embargo, Tubbs RS et al50 demuestra
un 17,5% de pacientes con disrafismo sobre un total de 120 pacientes y Karikari IO et al51
reporta dos casos asociados (malformaciones capilares alargadas). De todas maneras, se
necesitarían más estudios para poder determinar si estos pacientes requieren estudios por
imágenes. No obstante, las telangiectasias y malformaciones capilares, requieren por la
relación costo-beneficio hacer un estudio radiológico20. Además se considera conveniente
en estos casos realizar una consulta con el servicio de neurocirugía.
Además podemos encontrar que las malformaciones capilares se asocian a
síndromes:
Autora: Marisa Zimmermann
Página 32 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
– Síndrome de Sturge-Weber: Consiste en la existencia de un nevus flammeus
facial localizado en la primera rama del trigémino, asociado a una angiomatosis
leptomeníngea ipsilateral.
– Facomatosis pigmento-vascular: Consiste en la combinación de nevus
vasculares y melanocíticos en un mismo paciente; representarían una manifestación de
mosaicismo en “manchas gemelas”.
– Síndrome de Cobb: (angiomatosis cutáneomeningo-espinal). Se caracteriza por
presentar un nevus flammeus de distribución metamérica en tronco o extremidades,
asociado a la un angioma de la médula espinal, que puede volverse sintomático en la niñez
o adolescencia, en forma de paraplejia o paraparesia espástica y pérdida sensitiva por
debajo del nivel medular afecto52.
– Síndrome Proteus: consiste en la asociación de gigantismo parcial de manos y/o
pies, nevus pigmentarios, hemihipertrofia, tumores hamartomatosos subcutáneos,
macrocefalia y anomalías esqueléticas, habiéndose publicado más de 100 casos desde
entonces. Los hallazgos mayores, en número de siete, consisten en: (1) macrodactilia; (2)
hipertrofia asimétrica, en especial de cráneo y extremidades; (3) masas blandas
subcutáneas, compuestas por tejido vascular, lipomatoso y fibromatoso; (4) nevus
epidérmico verrucoso lineal; (5) hiperplasia cerebriforme de las plantas,“en mocasín”; (6)
exóstosis localizadas a nivel fronto-temporal y parieto-occipital y (7) escoliosis o
cifoescoliosis. Por otra parte, se han descrito un gran número de hallazgos o características
menores del síndrome, como son: hemimegalencefalia, hidrocefalia, quistes pulmonares,
nevus flammeus, meningioma del SNC, etc.
– Síndrome de Bannayan-Riley-Ruvalcaba: Es un síndrome hamartomatoso
múltiple (probablemente una forma alélica de enfermedad de Cowden), de transmisión
autosómica dominante. Se caracteriza por la asociación de macrocefalia, lipomas,
lentiginosis genital y malformaciones vasculares, también descritas como “angiomas”.
– Síndrome de Beckwith-Wiedemann: (síndrome onfalocele-macroglosiagigantismo). Se ha detectado en algunos pacientes una duplicación parcial del cromosoma
11. La manifestación clínica más evidente consiste en un hipercrecimiento somático y
visceral, asociados a la presencia de un onfalocele, macroglosia y nefromegalia. En el 80%
se aprecia un nevus flammeus en la porción central de la frente.
– Síndrome Robert (pseudotalidomida) Consiste en la asociación de una mancha
en vino de Oporto mediofacial, hipomelia, hipotricosis, retraso del crecimiento y labio
leporino.
– Síndrome TAR (trombopenia-ausencia radio): (thrombocytopenia-absent radii).
Asocia una plaquetopenia congénita severa, ausencia o hipoplasia de radio bilateral y nevus
flammeus en cara o cuello
Autora: Marisa Zimmermann
Página 33 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
– Síndrome de von Hippel-Lindau: Consiste en una angiomatosis retiniana
bilateral, en combinación con un hemangioblastoma cerebeloso o medular. En algunos
casos puede observarse un nevus flammeus facial..
– Síndrome Rubinstein-Taybi
– Enfermedad de Coats
9.2.7 Hipertricosis
La hipertricosis definida como el aumento del vello corporal, debe distinguirse del
hirsutismo, el cual muestra un patrón andrógeno dependiente53. La hipertricosis localizada
en la región lumbosacra generalmente está presente desde el nacimiento1,3. El pelo puede
ser oscuro o claro3. La textura del vello puede variar si bien frecuentemente se describe
como sedoso1,3. La hipertricosis con frecuencia adopta forma de V y está mal circunscripta.
En general, se acepta que cuanto más cefálica sea su posición, mayor es la probabilidad de
la asociación a disrafismo2. La hipertricosis prominente se suele asociar a otros estigmas
cutáneos de disrafismo espinal y en esos casos es altamente sugestiva de defecto
vertebral12. Sin embargo, la hipertricosis de la región lumbar puede ser un hallazgo normal,
especialmente en ciertos grupos étnicos o raciales y puede ser difícil decidir si se necesitan
otras evaluaciones o no1,3. En estos casos, puede ser prudente la derivación a un neurólogo
o neurocirujano para que realice una evaluación neurológica completa3. Recientemente se
ha descrito asociada a acroosteolisis distales52.
Vashi,R et al53 reportan que la hipertricosis primaria ha sido clasificada según la
edad de comienzo (congénita o adquirida) y la extensión de su localización (localizada o
generalizada).
En su forma generalizada congénita puede ser un hallazgo aislado o asociada a
otros signos:
hipertrofia gingival (aparece al momento de la erupción dentaria y puede
condicionar alteraciones en la masticación y abscesos dentarios)
retraso mental o convulsiones.
La hipertricosis lanuginosa congénita se caracteriza por vello fino
generalmente distribuido. En ocasiones mejora con el tiempo. Raramente se asocia a
glaucoma, alteraciones dentarias o anomalías esqueléticas. La mayoría son autosómicas
dominantes
En las formas generalizadas adquiridas debe considerarse los efectos indeseables
de ciertos fármacos (minoxidil, diazóxido, fenitoína, ciclosporina, anticonceptivos orales,
corticoides sistémicos). La discontinuación de la droga lleva a su disminución.
Las formas localizadas pueden ocurrir en el antebrazo, región cervical anterior o
posterior o en región sacra.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 34 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
Ha sido reportada una asociación entre hipertricosis cervical anterior y neuropatía
periférica sensorial y motora.
La hipertricosis cervical posterior ha sido asociada con cifoescoliosis en una
entidad heredada como autosómica dominante o ligada a X.
La hipertricosis limitada a la región sacra puede asociarse a disrafismos.
La hipertricosis en niños puede causar alteraciones cosméticas severas lo que lleva a
perjuicios emocionales55.
9.2.8 Collar de pelos
Es un anillo congénito de pelo oscuro, largo y más grueso que el pelo circundante.
Cuando rodea un nódulo exofítico del cuero cabelludo es altamente sugestivo de disrafia
craneal. Este signo también se ve rodeando lesiones de aplasia cutis, por lo cual no es un
signo específico1. Como ya se mencionó se han relacionado los collaretes con tejido
cerebral heterotópico, encefaloceles, meningoceles, meningoceles rudimentarios y
malformaciones intracraneales como holoprosencefalia. También se han descrito asociados
a quistes dermoides y malformaciones vasculares (nevus flammeus)6.
9.2.9 Acrocordones, colas y pseudocolas
El papiloma o cordón es un tumor pediculado compuesto por dermis, cubierto por
epidermis1,2,20. Una cola humana verdadera, en cambio, presenta un núcleo central con
tejido graso maduro, vasos sanguíneos pequeños, haces de fibras musculares y fibras
nerviosas1,20. Una pseudocola es considerada un hamartoma compuesto por tejido graso y
ocasionalmente por cartílago1,20. Clinicamente estas lesiones son indistinguibles entre sí20.
Las tres variantes son fuertes indicadoras de disrafia, aunque infrecuentes1.
9.2.10 Aplasia cutis
La aplasia congénita del cutis (ACC) es un grupo heterogéneo de trastornos
cutáneos que cursan con ausencia congénita de epidermis, dermis, y en ocasiones,
hipodermis, que se presenta en el momento del nacimiento6,46. Puede adoptar distintas
formas (redonda, oval, triangular, estrellada, etc.) y su superficie puede estar ulcerada, con
tejido de granulación, de aspecto cicatricial, o ampollosa con una membrana
recubriéndola6. Algunas formas de aplasia cutis (específicamente la forma membranosa)
serían secundarias a un cierre incompleto de las líneas de fusión embrionarias20. Se observa
más frecuentemente en el cuero cabelludo2,3,20.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 35 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
La localización lumbosacra se ha descrito con baja frecuencia, pero a menudo
asociada a disrafia espinal20. Se ha sugerido realizar estudios en aquellas aplasia cutis
ubicadas posterior al vértex o en la línea media y no realizarlo en lesiones ubicadas
anterior al vértex y laterales a la línea media20. Las cicatrices congénitas de ubicación
lumbosacra también se han descrito como marcadores de disrafia y podrían ser una variante
evolutiva de aplasia cutis20.
Aunque la mayoría de las lesiones de ACC son esporádicas y no cursan con otras
anomalías asociadas, estas lesiones pueden presentarse con otras anomalías congénitas de
origen disruptivo o asociarse a diversos síndromes malformativos43. Según Frieden se
pueden clasificar en56:
Grado 1: ACC en cuero cabelludo sin anomalías congénitas. AD (autosómica
dominante) o esporádica.
Grado 2: ACC en cuero cabelludo con anomalías de los miembros. AD.
Grado 3: ACC en cuero cabelludo con nevo organoide o epidérmico. Esporádica.
Grado 4: ACC con anomalías embriológicas (mielomeningocele y onfalocele).
Grado 5: ACC con infartos placentarios o feto papiráceo. Múltiples, simétricas,
lineales o estrelladas en el cuero cabelludo, pecho, flanco, axilas y miembros. AD.
Grado 6: ACC con epidermólisis ampollar en extremidades. AD o AR (autosómica
recesiva).
Grado 7: ACC en los miembros sin ampollas. AD o AR
Grado 8: ACC por teratógenos específicos (metimazol, infección viral por varicela o
herpes simple).
Grado 9: ACC con síndromes malformativos
focal,complejo de disrupción de bandas amnióticas.
Autora: Marisa Zimmermann
(trisomía
13,
hipoplasia
Página 36 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
10- PREVENCIÓN
Existe evidencia de que aportes vitamínicos suplementarios con ácido fólico en las
mujeres embarazadas reduce en un 70% el riesgo de defecto del tubo neural6,16. Como se
describe en un estudio realizado en Canadá desde el año 1993 al año 2002 por Philippe De
Wals, Ph.D18 et al, en el cual se observa que la prevalencia de los defectos del tubo neural
disminuye de 1,58 por 1000 nacimientos a 0,86 por 1000 nacimientos luego de la
fortificación con ácido fólico apreciándose un descenso mayor en los pacientes con espina
bífida con respecto a la anencefalia y al encefalocele18. De igual manera Cortés f, et al17 en
un estudio realizado en Chile en el año 1999-2002 evidenció que durante el período
prefortificación la frecuencia de defectos del tubo neural sobre un total de 120.789 recién
nacidos con disrafismo, fue de 1,63 por 1.000 y luego de la fortificación de 1 /1.000, lo que
determina una reducción del 38,6%17.
Además, el ácido fólico favorece la morfogénesis, la trofogénesis y la hadegénesis
mediante la generación de nuevo ADN y la disminución de homocisteína6,
Es por ello que se recomienda el suplemento de ácido fólico a dosis de 0.4mg
diarios a mujeres en edad fértil con probabilidad de embarazarse y de 4.0mg por día a
mujeres en las mismas condiciones pero con factores de riesgo para desarrollar defectos
del tubo neural 1,6,14. Esta recomendación debe extenderse desde por lo menos 1 mes antes
de la fecundación (mejor 3 meses antes) hasta la 12ª semana de amenorrea1,14,60.
Las estrategias aceptadas para aumentar el consumo de ácido fólico en las embarazadas
son:
1) promover el consumo de alimentos ricos en ácido fólico.
2) suplementar con polivitamínicos con ácido fólico y
3) fortificar los alimentos de consumo masivo.
La fortificación de alimentos ofrece la ventaja de cubrir una gran población a bajo
costo. El enriquecimiento de la harina de trigo destinada a la fabricación de pan ha
demostrado eficacia en otros países para disminuir los defectos del tubo neural14.
En la Argentina, la ley 25.630, de prevención de anemias y malformaciones del tubo
neural, exige que todas las harinas para fabricación de pan incorporen el ácido fólico, en un
porcentaje de 2,2 mg por kg14.
Es menester disponer de un sistema de vigilancia, denominándose así al conjunto
de actividades que permiten reunir información necesaria para conocer la historia natural de
la enfermedad; detectar y prever factores de riesgo relacionados con su génesis, y
recomendar oportunamente medidas de prevención y control, como presentan otros países,
como por ejemplo México15.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 37 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
11- CONCLUSIÓN
Desde el punto de vista epidemiológico estas patologías tienen una incidencia
aproximadamente de 2 x 1000 habitantes por lo cual es importante considerar las medidas
de prevención.
Ante la visualización de una lesión cutánea marcadora o malformación se debe
profundizar el examen en busca de otras posibles alteraciones que se interpretan de acuerdo
al desarrollo embrionario.
Es importante sospechar en toda lesión que se presente en la línea media facial y de
cuero cabelludo la presencia de disrafismos cefálicos para oportunamente estudiarlos. Así
como las lesiones cutáneas de la línea media dorsolumbar recordando que hay lesiones de
alto riesgo que siempre se estudian y también lesiones de bajo riesgo que no nos deben
alarmar.
El diagnóstico es importante realizarlo antes de los 6 meses ya que a esta edad
disponemos de estudios inocuos y de bajo costo como la ecografía que nos permite realizar
la detección de un defecto neural.
La presencia de hiperpigmentación o hipertricosis en la línea media dorsolumbar de
un niño puede ser un marcador de neurofibroma plexiforme y por lo tanto se debe descartar
neurofibromatosis o disrafismos.
En toda lesión neoplásica se debe indicar su extracción y posterior análisis
histopatológico ya que puede corresponder a un tumor maligno.
En nuestro país se realizan campañas de prevención primaria a través de una ley
nacional que obliga a fortificar las harinas con ácido fólico. Sin embargo, se necesitaría un
sistema de vigilancia epidemiológica como existe en otros países para conocer las
debilidades de nuestra población.
Según las últimas actualizaciones, se recomienda la ingesta de 0,4mg por día en
toda mujer en edad fértil y 4mg por día en toda mujer con factores de riesgo (es decir, diez
veces más) desde por lo menos un mes antes del embarazo, mejor 3 meses, antes hasta la
12va semana de gestación.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 38 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
12- BIBLIOGRAFÍA
1- Pueyo de Casabé, S.; Dermatología neonatal; 1ra edición-Buenos Aires, el autor 2005;
141-149.
2- Escoda García, M. et al: Signos cutáneos de disrafismo espinal; Piel. 2003; 18:382-6.
3- Lawrence F., Eichenfiel MD: Dermatología neonatal; 2nda edición; ELSEVIER;
2009:116-126.
4- Meix, Juan Manuel: Protocolos diagnósticos y terapeúticos en pediatría; 2da edición;
Anales de pediatría; 2008; 129-134.
5- Larralde, M. et al: Dermatología pediátrica; 2da edición; Editorial journal; año 2010; 2:
24-28.
6- Calduch Rodriguez, L.: Aplasia cutis congénita de cuero cabelludo. Estudio clínico de 35
pacientes y su relación con los defectos de la línea media; Pell. Dermatologia clínica; 2007;
978-84-370-6502-1.
7- T. W. Sadler et Langman: Embriología médica; 5ta Edición; Editorial Médica
Panamericana; 1990.
8- Picone, Z, Cella,G. et Maccario, MF: Dermatología en la línea media y SNC; revista del
Hospital de Niños V.J.Vilela; año 2000; 1-9.
9- Otárola B. D: Desarrollo embrionario y defectos del cierre del tubo neural; Revista
Pediatría Electrónica; 2007; Vol 4, N° 3.
10- Puig Saenz, Ll: Protocolos diagnósticos y terapeúticos en pediatría; 2da edición; Anales
de pediatría; 2008; 311- 330.
11- Carlson, Bruce: Embriología Humana y Biológica del desarrollo; 4ta Edición;
ELSEVIER; 2009; 209-272.
12- Pulikkunnel ST, et al: Neural tube defects: pathogenesis and folate metabolism; J Assoc
Physicians India. 2005; 53:127-35.
13- Chúa López, C.: “Anomalìas del tubo neural en Guatemala”; Editorial Universitaria,
Universidad de San Carlos de Guatemala; año 2006.
14- Zabala, R. et al.: Ácido fólico para prevenir defectos del tubo neural: consumo e
información en mujeres en edad fértil de la Región Centro Cuyo; Arch. argent. Pediatr
Buenos Aires; 2008; v.106 n.4.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 39 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
15- Oscar González-Vargas et al: Defectos del tubo neural. Experiencia en un Hospital de
Toluca, México Acta Pediátrica de México; 2008; Volumen 29, Núm. 1.
16- Beaudin, A. et al: Tube defects; Birth Defects Research (Part A); Wiley-Liss, Inc;
2009; 203-219.
17- Rostion A.: Desarrollo embrionario y defectos del cierre del tubo neural; Revista
Pediatría Electrónica; 2007; Vol 4, N° 3.
18- Philippe De Wals, Ph.D, et al: Reduction in Neural-Tube Defects after Folic Acid
Fortification in Canada; N. Engl.J.Med; 2007; 357:135-42.
19- Mitchell,M.D, A: Sistematic Identification of Drugs That Cause Birth Defects – A New
Opportunity; N. Engl.J.Med; 2003; 349; 26.
20- Pérez-Cotapos, ML et al; Marcadores cutáneos congénitos de patología del sistema
nervioso central; Rev.chilena de pediatría; 1999; v.70 n5.
21- Pardo Trujillo, C: Cirugía Pediátrica; edición 1ra ; año 2004; 24-35.
22- Fejerman N y Fernández Álvarez E. Neurología Pediátrica; 3ª Edición; Buenos Aires:
Panamericana; 2007; 59-75.
23- B. Pilo de la Fuente et al: Síndrome de la médula anclada; neurología 2007; 22(4):201205.
24- Rossi A et al: Spinal dysraphism: MR imaging rationale. J Neuroradiol.; 2004; 31(1):324.
25- Azzoni R et al: Spinal cord sonography in newborns: anatomy and diseases; J Pediatr
Orthop B. 2005; 14(3):185-8.
26- Joan Dalmau-Arias et al: Estudio mediante ecografía espinal de marcadores cutáneos
lumbosacros de bajo riesgo Piel. 2006; 21:67-71.
27- Deeg KH et al: Spinal sonography in newborns and infants - part II: spinal dysraphism
and tethered cord. Ultraschall Med. ; 2008; 29(1):77-88.
28- Schenk JP et al: Imaging of congenital anomalies and variations of the caudal spine and
back in neonates and small infants; Eur J Radiol.; 2006; 58(1):3-14.
29- Lode HM et al: Spinal sonography in infants with cutaneous birth markers in the
lumbo-sacral region--an important sign of occult spinal dysrhaphism and tethered cord;
Ultraschall Med.; 2008 ; 29 Suppl 5:281-8.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 40 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
30- Henriques JG et al: Minor skin lesions as markers of occult spinal dysraphisms-prospective study; Surg Neurol. 2005; 63 Suppl 1:S8-12.
31- Sardana K et al: A prospective study of cutaneous manifestations of spinal dysraphism
from India; Pediatr Dermatol.; 2009; 26(6):688-95.
32- Blaas HG et Eik-Nes SH: Sonoembryology and early prenatal diagnosis of neural
anomalies. Prenat Diagn.; 2009; 29(4):312-25.
33- Cameron M et Moran P.: Prenatal screening and diagnosis of neural tube defects.
Prenat Diagn.; 2009; 29(4):402-11.
34- Drolet BA.: Cutaneous Signs of Neural Tube Dysraphism; Pediatr Clin North Am;
2000; 47(4): 813-23.
35- Drolet BA.: Cutaneous signs of neural tube dysraphim; Pediatr. Clin. North Am.; 2000;
47:803-23.
36- Schropp C et al: Cutaneous lesions in occult spinal dysraphism--correlation with
intraspinal findings. Surg Neurol.; 2005;63 Suppl 1:S8-12.
37- Schropp C et al: [Congenital skin lesions in occult spinal dysraphism--what is typical?]
Z Geburtshilfe Neonatol.; 2006; 210(6):222-7.
38- Guggisberg D et al: Skin markers of occult spinal dysraphism in children: a review of
54 cases. Arch Dermatol.; 2004; 140(9):1109-15.
39- Zúccaro, G. et al: Senos dérmicos espinales: ¿Qué debe saber el pediatra?
Arch.argent.pediatr; 2001; 99(1).
40- Kriss VM et al:Occult spinal dysraphism in neonates: assessment of high-risk
cutaneous stigmata on sonography; 1998; 171(6):1687-92.
41- Gibson PJ et al: Lumbosacral skin markers and identification of occult spinal
dysraphism in neonates; Acta Paediatr.; 1995; 84(2):208-9.
42- Weprin BE et al: Coccygeal pits; 2000; 105(5):E69.
43- García-Alix Pérez A, et al: La piel como expresión de alteraciones neurológicas en el
recién nacido An Pediatr (Barc); 2005; 62(6):548-63.
44- Winstanley D et al: Sacral hemangioma with sinus tract in an infant; Pediatr Dermatol;
2003; 20(3): 221-224.
45- Natarajan Muthukumar: Congenital spinal lipomatous malformations Part I
classification; Acta Neurochir; 2009; 151:179–188
Autora: Marisa Zimmermann
Página 41 de 42
“LESIONES CUTÁNEAS EN LA LÍNEA MEDIA ASOCIADAS A DISRAFISMOS”
46- Mc Atee-Smith J et al: Skin lesions of the spinal axis and spinal dysraphism. Fifteen
cases and review of the literature; Arch Pediatr Adolesc Med; 1994; 148: 740-748.
47- Mehar Chand Sharma et al.Spinal teratomas: a clinico-pathological study of 27
patients; Acta Neurochir; 2009; 151:245–252.
48- Méhes K,et al.:Association of wilms tumor with spinal dysraphism; Pediatr Hematol
Oncol.; 2003; 20(3):261-4.
49- Stockman A,et al: SACRAL syndrome: spinal dysraphism, anogenital, cutaneous, renal
and urologic anomalies, associated with an angioma of lumbosacral localization; 2007;
214(1):40-5.
50- Tubbs RS et al: Isolated flat capillary midline lumbosacral hemangiomas as indicators
of occult spinal dysraphism; Neurosurg.; 2004; 100(2 Suppl Pediatrics):86-9.
51- Karikari IO et al.: Spinal capillary hemangioma in infants: report of two cases and
review of the literature. Pediatr Neurosurg.; 2007; 43(2):125-9.
52- Brant AJ et al.: Cutaneomeningospinal angiomatosis (Cobb syndrome) with tethered
cord. Pediatr Neurosurg; 1999; 30:93-5.
53- R. Vashi et al: Hipertricosis primaria localizada y generalizada en niños; Arch
Dermatol; 2001; 137:877-84.
54- Gupta R et al: Faun tail nevus a cutaneous marker of spinal disraphysm. Indian
Pediatrics; 2005; 69 (42): 67-69.
55- Trüeb RM : Hypertrichosis; Hautarzt; 2008; 59(4):325-37; quiz 338.
56- Frieden Ij: A clinical review and proposal for classification; J Am Acad Dermatol 1986;
14: 646-60.
57- Hib, José: Embriología médica; Edición Interamericana-McGraw Hill; Sexta edición;
año 1994: 14-75.
58- T. W. Sadler et Langman: Fundamentos de Embriología con orientación clínica;
Editorial Médica Panamericana 2006; 950-06-1373-5.
59- Dias MS, Li V. Pediatric Neurosurgical Disease. Pediatr Clin North Am; 1998; 45(6):
1539-78.
60- Lumley, J et al: Administración periconcepcional de suplementos con folato o
multivitaminas para la prevención de los defectos del tubo neural; Cochrane Plus; 2010;
Número 1: 1-6.
Autora: Marisa Zimmermann
Página 42 de 42
Descargar