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LOS OJOS
UNA SERIE DE MISTERIOS CON RESPECTO A LOS OJOS
Lucas 11:33 La lámpara del cuerpo
Nadie pone en oculto la luz encendida, ni debajo del almud, sino en el
candelero, para que los que entran vean la luz.
La lámpara del cuerpo es el ojo; cuando tu ojo es bueno, también todo tu
cuerpo está lleno de luz; pero cuando tu ojo es maligno, también tu cuerpo
está en tinieblas.
NUESTRO CUERPO DEPENDE DE NUESTROS OJOS
Nacimos para ser luz en ésta tierra.
La luz debe entrar por unos orificios a nuestro cuerpo y estos son los ojos.
Nuestros ojos son los encargados de introducir la luz en todo nuestro ser.
Adán y Eva tenían la capacidad de ver en dos dimensiones; en la natural y en la
espiritual; las dimensiones que el hombre portaba en el huerto del Edén, sin embargo,
después de pecar dejaron de ver en la espiritual.
La última tecnología alcanza el punto de que el hombre pueda ver imágenes en 3D,
pero según la Biblia, el hombre tenía la capacidad de poder ver en la dimensión de la
naturaleza humana pero también en la dimensión del espíritu.
1Corintios 2:14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu
de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente.
DEBEMOS RECUPERAR EL VER EN LA DIMENSIÓN DEL ESPÍRITU
PODER VER LA VERDAD DE DIOS EN LA DIMENSIÓN EN LA QUE ÉL LA PLANIFICÓ
PARA NOSOTROS
Lo grandioso es que todo lo que vemos, tocamos y percibimos fue hecho de lo que no
se veía como dice la Biblia en Hebreos 11:3 Por la fe entendemos haber sido
constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue
hecho de lo que no se veía.
Hay una forma diseñada por Dios para tener acceso a todas las cosas pre ordenadas
por Él y esta es el amor.
1Corintios 2:9 Antes bien, como está escrito:
Cosas que ojo no vio, ni oído oyó,
Ni han subido en corazón de hombre,
Son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Tenemos una lámpara en el ojo. Naturalmente tenemos un glóbulo ocular, pero
espiritualmente tenemos un “ojo” que es una lámpara. Lo cual quiere decir que en
nuestro ojo tenemos algo para captar imágenes pero también algo para traer luz a
determinadas cosas.
La lámpara que tenemos en el ojo de carácter espiritual tiene que ver con la dimensión
de poder guiar e interpretar lo que Dios tiene para nosotros.
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LOS OJOS
Dios le dijo a Abraham en Génesis 13:14-15 Y Jehová dijo a Abram, después que
Lot se apartó de él: Alza ahora tus ojos, y mira desde el lugar donde estás
hacia el norte y el sur, y al oriente y al occidente. Porque toda la tierra que ves,
la daré a ti y a tu descendencia para siempre. Dios el dijo: “la tierra que ves”, es
decir lo que no pudo ver no se lo daría, quiere decir que Dios nos prueba en la
dimensión de la visión y lo que no podamos ver no nos lo podrá dar.
Esta cuestión no tiene que ver con una visión natural sino con una dimensión del
espíritu. Por ejemplo todo lo que podamos ver de lo que seamos capaces de
administrar en el Señor, todo lo que podamos ver que seamos capaces de
responsabilizarnos en el Señor, todo…nos lo dará a nosotros y a nuestra
descendencia.
NOS TIENEN QUE FUNCIONAR LOS OJOS, A LO QUE LA BIBLIA LE LLAMA LA
LÁMPARA, NO NOS PUEDE FALTAR EL ACEITE
SIN ACEITE NO NOS FUNCIONA LA LÁMPARA
Éxodo 30:6-8 Y lo pondrás delante del velo que está junto al arca del
testimonio, delante del propiciatorio que está sobre el testimonio, donde me
encontraré contigo. Y Aarón quemará incienso aromático sobre él; cada
mañana cuando aliste las lámparas lo quemará. Y cuando Aarón encienda las
lámparas al anochecer, quemará el incienso; rito perpetuo delante de Jehová
por vuestras generaciones.
Este ritual no hace falta hacerlo hoy puesto que era sombra y figura de lo tenía que
venir. En el Lugar Santo estaba por un lado el altar del incienso y por el otro el
candelero con sus siete lámparas, y le dijo que después de encender las lámparas
debía quemar incienso.
¿Qué es quemar incienso?
- La oración.
¿Cuántos tipos de oración existen?
ORACIÓN DE ADORACIÓN
INTERCESIÓN
LA ORACIÓN EN SÍ MISMA.
Antes de orar había que encender las lámparas. Hoy sabemos que la lámpara es
nuestro ojo y éste es el encargado de traer luz a todo nuestro cuerpo.
¿Por qué dice la Biblia que antes de orar, de pedir o de interceder se debían de
encender las lámparas?
Las lámparas debían estar bien encendidas. Lo que entra por el ojo es la revelación de
la Palabra. Cuando un hombre iba a encender el incienso en el Antiguo Testamento lo
que debía poseer es mucha revelación “mucha luz”.
SIN LUZ EL INCIENSO SE OFRECÍA A OSCURAS, SIN LUZ LA ORACIÓN SUBÍA A
OSCURAS
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Hay gente que cuando ora no tiene luz, claridad de lo que está haciendo. Hay quien no
sabe pedir a Dios, lo dice el Apóstol Santiago en Santiago 4:3 Pedís, y no recibís,
porque pedís mal…”
Para pedir necesitamos entonces tener mucha luz, más sin ella no sabremos como
pedir. Nuestro ojo debe estar bien lleno de luz porque la Biblia dice que debemos pedir
como conviene en Romanos 8:26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en
nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos,
pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
La religión enseña a orar mal, por ejemplo, haciendo repetir la misma oración
innumerables ocasiones cuando se tiene una necesidad y Jesús dijo para negar y
aclarar este asunto en Mateo 6:8 No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque
vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le
pidáis. Mateo 6:7 Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles,
que piensan que por su palabrería serán oídos.
Dios no hay que decirle muchas veces la misma cosa, Él tiene una mente perfecta, las
Escrituras nos dicen en Mateo 6:8 “…vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis
necesidad, antes que vosotros le pidáis.
Entonces ¿No hay que pedir?
Lo que sucede es que cuando le pedimos a Dios estamos manifestamos manifestando
incredulidad en cuanto a que Él no lo tiene todo bajo control; cuando le pedimos a Dios
le demostramos que no confiamos en Él.
Si pasamos algún tipo de necesidad, más bien, lo que debemos pedirle es que nos
revele que debemos aprender al pasar por esa situación. No es que Él no vea la
necesidad, lo que pasa es que Dios no se mueve por la necesidad. Usted verá a
personas alrededor de usted con grandes necesidades y no reciben y sin embargo
otros que tienen un poco de necesidad tan solo, reciben, y uno se pregunta ¿por qué?
Porque Dios no se mueve por necesidades sino por principios, como vamos a ver a
continuación.
El pueblo de Israel estaba en Egipto y la Biblia dice que Dios les dio una gracia delante
de los egipcios para que les dieran “todo el oro” Éxodo 12:35-36 E hicieron los hijos
de Israel conforme al mandamiento de Moisés, pidiendo de los egipcios
alhajas de plata, y de oro, y vestidos. Y Jehová dio gracia al pueblo delante
de los egipcios, y les dieron cuanto pedían; así despojaron a los egipcios.
Este mismo pueblo fue el que jornadas más adelante pidió carne a Dios porque
estaban hartos de maná, querían un cambio de dieta y Él se ofendió ante esa petición.
Números 11:18-20 Pero al pueblo dirás: Santificaos para mañana, y comeréis
carne; porque habéis llorado en oídos de Jehová, diciendo: ¡Quién nos diera a
comer carne! ¡Ciertamente mejor nos iba en Egipto! Jehová, pues, os dará
carne, y comeréis. No comeréis un día, ni dos días, ni cinco días, ni diez días, ni
veinte días, sino hasta un mes entero, hasta que os salga por las narices, y la
aborrezcáis, por cuanto menospreciasteis a Jehová que está en medio de
vosotros, y llorasteis delante de él, diciendo: ¿Para qué salimos acá de Egipto?
Hay formas de pedirle a Dios que le ofenden, gente que en vez de clamar reclaman.
¿Estamos en condiciones de reclamarle algo a Dios? No, sin embargo hay personas
que se sienten con el derecho de reclamarle a Él y otros se enojan y comienzan a
decir que si Dios fuese tan poderoso me daría de todo...
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LOS OJOS
Demasiado Dios ha hecho que nos ha dado la vida cuando no éramos merecedores
de ella. Entonces, la actitud con la que nos acercamos a Dios es fundamental.
La oración del hombre debe tener mucha luz y la adoración también.
En la Biblia había una mujer que decía ser una adoradora de Dios; ella se encontró en
el pozo de Jacob con Jesús y Él le dijo en Juan 4:21-22 Jesús le dijo: Mujer,
créeme, que la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis
al Padre. Vosotros adoráis lo que no sabéis; nosotros adoramos lo que
sabemos…” sin embargo Jesús le acababa de señalar algo momentos anteriores en
Juan 4:16-18 Jesús le dijo: Ve, llama a tu marido, y ven acá. Respondió la
mujer y dijo: No tengo marido. Jesús le dijo: Bien has dicho: No tengo marido;
porque cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido; esto
has dicho con verdad. Cinco maridos había tenido y la actual pareja tampoco era su
marido más ella creía saber adorar.
Por esto es necesario que Dios haga algo en nuestros ojos para que sea transformada
nuestra óptica, es decir, la posición en la que vemos las cosas a través de la
revelación de la Palabra.
Hay muchas formas de adorarle y la mayor no es cantándole sino la obediencia y ésta
tiene que ver con el amor.
Tenemos la vida de Salomón al que Dios se le aparece y le concede que pida lo que
desee y él agrada a Dios pidiéndole sabiduría en 1Reyes 3:5-15 Y se le apareció
Jehová a Salomón en Gabaón una noche en sueños, y le dijo Dios: Pide lo que
quieras que yo te dé. Y Salomón dijo: Tú hiciste gran misericordia a tu siervo
David mi padre, porque él anduvo delante de ti en verdad, en justicia, y con
rectitud de corazón para contigo; y tú le has reservado esta tu gran
misericordia, en que le diste hijo que se sentase en su trono, como sucede en
este día. Ahora pues, Jehová Dios mío, tú me has puesto a mí tu siervo por rey
en lugar de David mi padre; y yo soy joven, y no sé cómo entrar ni salir. Y tu
siervo está en medio de tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande, que
no se puede contar ni numerar por su multitud. Da, pues, a tu siervo corazón
entendido para juzgar a tu pueblo, y para discernir entre lo bueno y lo malo;
porque ¿quién podrá gobernar este tu pueblo tan grande? Y agradó delante
del Señor que Salomón pidiese esto. le dijo Dios: Porque has demandado esto,
y no pediste para ti muchos días, ni pediste para ti riquezas, ni pediste la vida
de tus enemigos, sino que demandaste para ti inteligencia para oír juicio, he
aquí lo he hecho conforme a tus palabras; he aquí que te he dado corazón
sabio y entendido, tanto que no ha habido antes de ti otro como tú, ni después
de ti se levantará otro como tú. Y aun también te he dado las cosas que no
pediste, riquezas y gloria, de tal manera que entre los reyes ninguno haya
como tú en todos tus días. Y si anduvieres en mis caminos, guardando mis
estatutos y mis mandamientos, como anduvo David tu padre, yo alargaré tus
días. Cuando Salomón despertó, vio que era sueño; y vino a Jerusalén, y se
presentó delante del arca del pacto de Jehová, y sacrificó holocaustos y
ofreció sacrificios de paz, e hizo también banquete a todos sus siervos.
No le pidió sabiduría para gobernar al pueblo. ¿Y qué dice la Biblia que dijo Dios? “Y
agradó delante del Señor que Salomón pidiese esto”. Dios le concedió la
sabiduría y todo lo demás.
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La Biblia dice en Hebreos 11:6 “Pero sin fe es imposible agradar a Dios;”
Si no le creemos a Dios será imposible obtener nada de Él y esto se ve en lo que
pedimos.
Romanos 10:17 dice que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios.
Juan 11:40 Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
Hay una dimensión para oír y otra para ver. Hay personas que solo han oído, más
debemos llegar a ver y para eso es necesario que le nos abran los ojos. Por ello el
Apóstol Pablo decía que tenían que ser alumbrados los ojos del entendimiento a los
efesios.
Hubo un ciego al que Jesús sanó y le dijo que fuese al estanque de Siloé que significa
“enviado”, por lo cual el ciego tenía que ir a lavarse la tierra a las aguas apostólicas.
Muchos están hoy con abundante tierra en los ojos que cuando se les quiere hablar de
cosas espirituales es imposible que entiendan porque solo ven las cosas terrenales y
nada de las cosas celestiales, cuando la Biblia dice en Efesios 1:3 Bendito sea el
Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición
espiritual en los lugares celestiales en Cristo, es decir, somos cuerpo, alma y
espíritu y entendemos de las cosas celestiales. Lo que Dios quiere es que tengamos la
mente en el cielo y los pies en la tierra y hay gente que vive al revés tienen la mente
en la tierra y los pies en el cielo y ¡andan de cabeza!
Cuando llegamos al evangelio pensamos saber mucho más en realidad cuando
aceptamos a Cristo nos damos cuenta que teníamos que empezar de cero. Nos
encontramos como Pablo cuando se cayó del caballo que quedó ciego y tuvo que ser
llevado por otros.
¿De donde extraemos que en nuestro ojo portemos una lámpara?
Para responder a ésta cuestión vamos a ir al libro de Apocalipsis donde Jesús es visto
por el Apóstol Juan y lo primero que alcanza a describir de Él es 19:12 Sus ojos eran
como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un
nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo.
NUESTROS OJOS SON COMO LLAMAS DE FUEGO
Vamos a confirmarlo en el libro de Samuel:
1Samuel 3:2-3 Y aconteció un día, que estando Elí acostado en su aposento,
cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver,
Samuel estaba durmiendo en el templo de Jehová, donde estaba el arca de
Dios; y antes que la lámpara de Dios fuese apagada,
¿Que se estaba apagando?
Los ojos de Elí se habían oscurecido hasta el punto de que no podía ver y esto es
igual a que la lámpara de Jehová se estuviera apagando.
1Samuel 3:1El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la
palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con
frecuencia.
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En aquellos días escaseaba la Palabra de Dios y ésta entra por los ojos diciendo las
Escrituras que por ello fallaba la visión.
La visión nos tiene que funcionar cuando las cosas van bien pero también cuando van
mal. Visión tiene que ver con la vida, los visionarios se especializan en la vida.
En la Biblia hubo quien tuvo muchos oficios como OBED EDOM cantor, instrumentista
y portero y al final no hizo bien ninguno de las tareas.
Hay gente en el sistema que son más visionaria que en el Señor, son capaces de
estudiar doce años sacrificándose para llegar a una meta porque tienen una visión ser
cirujano o arquitecto aunque al tener la visión fuera del Reino será perecedera.
En la iglesia las personas tienen que tener una visión y esto será fruto de que los ojos
le funcionen, de tener una meta clara.
Es importante que tengamos visión y sobre todo por causa de la descendencia. Elí
perdió la visión hasta tal punto que los miembros de su familia hacían cada uno lo que
querían. Cuando tenemos una visión todos estarán en sus posiciones.
CUANDO HAY VISIÓN HAY ORDEN
¿Por qué le cuesta a las familias tanto prosperar? Porque cada uno lucha por su
propio visión.
UN HOMBRE SIN VISIÓN PERDERÁ MUCHO TIEMPO
Cuando venimos al Señor debemos abrazar una visión. No podemos dejarnos llevar
por las circunstancias sino toda su vida estará siendo guiado por ellas y las
circunstancias no se terminarán nunca. Hay quien dice que cuando se terminen
distintas circunstancias en su vida servirá al Señor más esto jamás será así porque se
acabará esa y vendrá otra. La única forma es superponernos a las circunstancias y la
vía para ello es tener una meta, saber hacia donde vamos y adonde queremos llegar.
Van a venir a nuestras vidas circunstancias y enfermedades, un sin fin de ocasiones
para que abortemos la ruta de la visión pero el llamado no lo podremos modificar por
nada ni por nadie.
La Biblia dice que somos la luz del mundo porque debemos ser capaces de bajarle
una visión a este.
¿En que consiste predicar el evangelio?
En bajar una visión del cielo, no podemos llevar a la gente al evangelio a través de una
religión. Es fundamental traer una visión al corazón de las personas.
Jesús nos presentó una visión “YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA”.
Nuestros ojos tiene que estar puestos en el principio y el fin.
Hebreos 12:2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual
por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y
se sentó a la diestra del trono de Dios.
No pongamos la mirada en otra cosa más que en Él. Habrá cosas que vengan para que
saquemos la mirada de Jesús y Él las permitirá porque quiere ver hasta donde estamos
dispuestos a seguirlo y a confiar en Él.
Lucas 12:35 Estén ceñidos vuestros lomos, y vuestras lámparas encendidas;
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