Mientras el sol cae, a lo lejos se escuchan los coyotes que

SAMALAYUCA, CHIH. –
U
na salina es un asentamiento
de sal. Sus orígenes son al
parecer naturales, pero pueden ser alimentados con agua
de mar que se evapora para extraer el
mineral. Existen muchos en la región.
Incluso se cree que formó parte de las
jornadas Mogollón que bajaban hasta
el desierto de Samalayuca para obtener sal; preciado mineral que en muchas culturas fue el elemento necesario para la conservación de alimentos
o incluso como moneda dentro del
sistema de trueque.
Dado su valor histórico, es
que el ex presidente Seccional de Samalayuca, Javier
Meléndez incluyó esta salina
en el corredor turístico del
desierto junto con las Dunas,
los petrograbados y la ex hacienda del Ojo de la Casa, sin
conseguir aún que la familia
Vallina, dueña del predio, la
seda como patrimonio turístico de la región.
Sobre la historia reciente del lugar nos
comenta Meléndez:
“Es una empresa que se llama Las
Salinas S.A., es propiedad del señor
Eloy Vallina, el empresario famoso de
Chihuahua. Esa empresa funcionó desde finales de los treintas hasta los años
sesentas. Desde entonces se quedó
prácticamente abandonado el lugar”.
No queda duda de su potencial turístico, ya que al visitarlo no sólo es interesante entender la posibilidad de que
la sal haya sido tan importante para culturas ancestrales, sino que también se
siente un poco de la historia reciente en
la pequeña bodega de adobe que aún
se sostiene.
“Los atardeceres son espectaculares”, comenta Miriam, una residente cerRevista NET
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cana al lugar, quien sale a caminar en las
tardes de clima bondadoso de febrero y
que se detiene en la salina a observar los
atardeceres que proporciona el desierto.
Es peculiar el paisaje que se genera con
el reflejo que produce el blanco material.
Puede ser un tanto extraño pisar la sal
que parece nieve, pero no lo es. Es una
experiencia extraordinaria.
Mientras el sol cae, a lo lejos
se escuchan los coyotes que
parecen comunicarse para
regresar a sus guaridas tras
un día de caza. La diversidad
de fauna y flora en el desierto
de Samalayuca es muy vasta.