Nos paramos a pensar - Aldeas Infantiles SOS

CONCLUSIONES DE LA II JORNADA DE JÓVENES – MADRID, 13 DE MAYO DE 2015
Nos paramos a pensar
Los jóvenes de las diecisiete comunidades autónomas que hemos participado en la II
jornada Nos paramos a pensar, dentro del programa de educación en valores de
Aldeas Infantiles SOS, exponemos nuestras reflexiones sobre la atención:
Los adolescentes españoles necesitamos prestar más atención a nosotros mismos, a
los demás y el entorno. El adolescente medio confiesa que tiene muchas
distracciones, muchas “cosas en la cabeza” que le impiden centrarse.
La mitad de los encuestados no es consciente de su falta de atención en clase. El joven
español deja las cosas para luego, no las hace en el momento, pero todos los
adolescentes deberían hacer un esfuerzo para no caer en las distracciones más
banales, entre ellas la peor es el móvil; además de la pereza, a las que es muy fácil
sucumbir.
A los adolescentes españoles nos gusta trabajar en equipo aunque no realicemos un
trabajo muy eficiente; porque sumamos las partes individuales, o no todos
contribuyen de la misma manera, o no se aprovechan las cualidades de cada uno.
Sabemos que hay que animar a los compañeros en sus momentos de dificultad, pero
no nos resulta fácil acercarnos a ellos.
Apreciamos a la persona capaz de superar sus problemas y buscamos a nuestros
iguales en el grupo. Nuestra relación con los adultos se basa en el respeto, aunque a
veces nos sentimos sobreprotegidos.
Pese a la adversidad y la crisis económica los adolescentes españoles somos
optimistas y pensamos que podemos cambiar el futuro.
Ante una situación injusta somos reivindicativos y buscamos el apoyo de nuestros
amigos para hacer justicia.
Nuestro sueño es estar bien preparados para afrontar el futuro, terminar bien nuestros
estudios y también tener una buena capacidad adquisitiva, pero lo más importante es
estar y cuidar de nuestra familia.
Los adultos tienen una mala imagen de los jóvenes y nos infravaloran, pero nosotros
nos esforzamos y queremos demostrar que merecemos una oportunidad para darnos
a conocer realmente.
A pesar del desconocimiento de lo que traerá el futuro, los adolescentes tenemos una
gran esperanza en la sociedad que construiremos_.
Madrid, 13 de mayo de 2015