desarrollo E ORO GRIS El litio es uno de los elementos más ligeros de la tabla periódica y suele utilizarse en la fabricación de acumuladores eléctricos, como las baterías de ion-litio. Dada su elevada densidad energética, muchos lo consideran el reemplazo perfecto para los combustibles fósiles. Texto: LAURA ZAZO n el Salar de Uyuni, en Bolivia, o en el de Atacama, en Chile, están las principales reservas de litio del planeta. Este elemento, descubierto en 1817 por Johann Arfvedson, es un metal escaso en la corteza terrestre, muy ligero, y que se encuentra disperso en ciertas rocas. Se suele utilizar en la fabricación de aleaciones especiales y en acumuladores eléctricos, como las baterías de ionlitio, el alma de los vehículos eléctricos. Por su elevada densidad energética –las baterías de litio almacenan más energía en menos espacio que las de carbón–, muchos lo consideran el combustible del futuro. Esto, unido a las previsiones de agotamiento de las reservas de petróleo, a la continua subida del precio del crudo y a la progresiva toma de conciencia de la población con el medio ambiente, hace que el litio parezca el reemplazo perfecto para los combustibles fósiles, por lo que desde hace unos años gran parte de los esfuerzos en I+D de la industria de la automoción se centran en estas baterías. Movilidad sostenible La dependencia energética de los países y los altos niveles de contaminación han impulsado la necesidad de implantar el vehículo eléctrico para sustituir progresivamente al convencional, alimentado por petróleo. Poco a poco, los coches eléctricos empiezan a formar parte del tejido urbano de nuestras ciudades. El año pasado se vendieron en nuestro país un total de 428 vehículos, lo que supone un 350% más que en 2010, según datos de Faconauto, la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción. Es una cantidad muy pequeña pero se espera una gran proyección para los próximos años. De hecho, el objetivo de la Estrategia Integral para el Impulso del Vehículo Eléctrico en España es que en 2014 haya 250.000 coches, ¿CUáNTA ENERGÍA NECESITAN? POR SU ELEVADA DENSIDAD ENERGÉTICA, LAS BATERÍAS DE LITIO SON PARA MUCHOS EL COMBUSTIBLE DEL FUTURO puros e híbridos enchufables. Durabilidad en ciclos y en tiempos, seguridad y una alta densidad energética son las principales características que se le exigen a una batería para su aplicación al vehículo eléctrico. Uno de los principales productores de litio es Chile, con el 40% de la producción mundial. Desde el Centro de Innovación del Litio de Chile consideran que los tres principales problemas de las baterías de litio a resolver en los próximos cinco años son: • El precio. Debe reducirse en un 80%. • La densidad energética. La cantidad de energía a almacenar por kilo de batería debe duplicarse, desde 150 Wh/kg a unos 300 Wh/kg. • Velocidad de carga. En un vehículo, la rapidez de carga con un cargador rápido debe al menos duplicarse para llegar a unos 20 minutos. El Centro está operativo desde noviembre de 2010 y actualmente están trabajando en Bajo estas líneas, imágenes del Salar de Atacama, en Chile, y de Uyuni, en Bolivia, donde se encuentran las principales reservas de litio del planeta. 63 cuatro proyectos, como el NANOP, que apuesta por el desarrollo de nano polvos y nano cátodos para reducir el costo de las baterías, ya que se mejora el nivel de pureza de estos elementos. Como señala Jaime Alée, director de Proyectos del Centro de Innovación del Litio, “todos los proyectos se encuentran debidamente postulados teóricamente desde hace ya varios meses y se ha iniciado una fase de laboratorio de prueba de conceptos. El primer objetivo ha terminado en mayo y el resultado final está previsto para 2012”. Somabat, batería verde En España se están llevando investigaciones muy relevantes en este campo. El Instituto Tecnológico de la Energía (ITE) coordina un proyecto europeo para desarrollar una batería verde para vehículos eléctricos. El objetivo es producir una batería de litio utilizando materiales reciclados en su composición y de la que pueda reutilizarse el 50% de su peso. El proyecto se ha denominado Somabat y también incluye el estudio del ciclo de vida de la batería, contemplando qué materiales son menos contaminantes a lo largo de toda la vida útil del dispositivo y cómo puede revalorizarse y reutilizarse la totalidad o parte de la batería. Para Mayte Gil, coordinadora del proyecto, la principal ventaja de las baterías de ion-litio frente a otros dispositivos de almacenamiento electroquímico “es su elevada capacidad energética, lo que se traduce en una mayor autonomía y bajo peso”. Aunque también señala que “hace falta aumentar su autonomía, la vida útil, así como disminuir los precios para hacer de ella una tecnología competitiva”. Asimismo, señala que es necesario “aumentar la seguridad de las baterías debido a que en la actualidad están fabricadas con materiales inflamables”. Recientemente, el ITE ha llevado a cabo una estancia en el Angström Advanced Battery Centre –perteneciente a la Universidad de Uppsala (Suecia)–, un centro de investigación de materiales para almacenamiento electroquímico y conversión de energía, puntero en toda Europa, y que está especializado en baterías de ion-litio. El objetivo era adquirir una mayor experiencia en el desarrollo de 64 nuevos materiales que sean más eficientes, respetuosos con el medio ambiente y con un ensamblaje más óptimo a la hora de realizar baterías poliméricas de litio. Con un presupuesto de 8,5 millones de euros, el centro tecnológico vasco CIDETEC-IK4 es el encargado de coordinar Greenlion, otro proyecto europeo cuyo objetivo es desarrollar baterías de ion-litio más baratas y ecológicas por medio de la innovación en los procesos de producción. CITEDEC-IK4 participa en este proyecto junto con otros 15 centros de investigación, universidades y empresas de España, Italia, Irlanda, Alemania, Suiza, Francia y Austria. 750 KILÓMETROS SIN ENCHUFES Uno de los principales problemas que presentan los coches eléctricos en la actualidad es la escasa capacidad de las baterías. Conscientes de este problema, científicos de la compañía IBM tratan de darle solución a través del proyecto Battery 500. En sus laboratorios de Almadén (California, Estados Unidos), están investigando en el diseño de baterías de litio-aire, que hagan posible que los vehículos eléctricos viajen hasta 800 kilómetros tras una sola recarga. Se trata de una innovadora batería en la que vienen trabajando desde 2009 y que, en teoría, permitiría un almacenaje mucho mayor que las de ion-litio que conocemos en la actualidad, lo que supondría un avance muy significativo. La clave de las baterías de litio-aire es que tienen una densidad de energía mucho mayor que las baterías de ion-litio, gracias a la ligereza de sus electrodos y al hecho de que el principal combustible es el oxígeno de la atmósfera. Además, desde IBM, también están desarrollando una infraestructura inteligente para mantener los vehículos con energía sostenible, a través de una gestión eficiente de los recursos y de los suministros. De culminar con éxito sus investigaciones, supondría un salto cualitativo en la expansión del coche eléctrico. el desarrollo de las baterías de litio es esencial para el futuro del vehículo eléctrico El futuro de la industria de la automoción pasa por el vehículo eléctrico. La innovación de Greenlion se centra en la mejora de la maquinaria de ensamblado de componentes para una fabricación más eficiente. Asimismo, la mejora en el diseño y fabricación de módulos de batería también es uno de sus objetivos. La idea es que las baterías sean más ligeras y más fáciles de desensamblar en caso de que deban ser reparadas. El proyecto también busca la creación de un producto más ecológico. Se desarrollarán nuevos materiales no fluorados y térmicamente más estables que los empleados habitualmente y se innovará en los procesos de fabricación de electrodos para evitar el impacto de los disolventes orgánicos volátiles que se emplean hoy en día. Según Oscar Miguel, director del departamento de Energía de CIDETEC-IK4, “Europa siempre ha sido un centro de generación de conocimiento en baterías junto con Estados Unidos, con mucha actividad de I+D y producción científica en materiales para baterías de ion-litio. Sin embargo, su fabricación se ha realizado casi exclusivamente en Asia, unida al mercado de la elec- trónica de consumo”. A su juicio, “el avance en nuevos materiales y en prestaciones está permitiendo ahora nuevas aplicaciones como el vehículo eléctrico, lo que genera la oportunidad de establecer la producción de baterías en Europa, cerca de la industria automovilística que lo demanda”. Las líneas de investigación en torno al litio son muy amplias. Otro campo en el que también se está avanzando mucho es en el desarrollo de nuevos materiales. Concretamente, las investigaciones de José L. Tirado, catedrático de Química Inorgánica de la Universidad de Córdoba, se centran en el desarrollo de nuevos nanomateriales para los electrodos de las baterías de ion-litio. Su objetivo es superar la densidad de energía de los sistemas de ion-litio convencionales, reduciendo notablemente el costo de preparación. Además, la cantidad de carga que podría almacenar sería varias veces superior a la de los sistemas conocidos, lo que permitiría, por ejemplo, aumentar notablemente la autonomía de los vehículos. El desarrollo de las baterías de litio es una pieza clave para que el vehículo eléctrico sea una realidad en la lucha por la movilidad sostenible. Menos contaminación, menos ruido, menos coste... Sin duda, el vehículo eléctrico es una gran alternativa para mejorar la calidad de vida en las ciudades, aunque todavía tendremos que esperar unos años para cambiar las gasolineras de nuestras carreteras por estaciones de recarga de batería. 65