LA FISIOCRACIA ALEJANDRA CUESTA UNIVERSIDAD TÉCNICA DE AMBATO “2009” FISIOCRACIA La fisiocracia surge como una reacción de tipo intelectual a la común concepción de la vida intervencionista del pensamiento mercantilista1. Y para ahondar más las diferencias, estudiaron las fuerzas reales que conducen al desarrollo y creación del valor físico, siendo que François Quesnay, en su obra Tableau Economique2, elaboró la primera descripción de la economía como un flujo circular de bienes y dinero. Este flujo de bienes a cambio de dinero se daría entre tres clases sociales: los agricultores, los terratenientes, y los comerciantes e industriales. Para Quesnay, que era médico, la circulación de la riqueza en una nación era como la circulación de la sangre en el cuerpo. Los fisiócratas consideraban que toda la riqueza venía de la tierra y que, de todas las demás ramas de la actividad, sólo la agricultura producía más de lo que se necesitaba para mantener a los que se ocupaban de ella. Al provenir de la tierra el único excedente, hacia ella debía dirigirse el estado para obtener fondos, por lo que propugnaban el impuesto único sobre la tierra y sugerían la anulación de todos los establecidos por los mercantilistas. La tendencia general de los fisiócratas es el libre cambio. La tarea del economista se reduce a descubrir el juego de las leyes naturales. La intervención del estado es inútil, pues no haría otra cosa que interferir ese orden esencial. El interés de los fisiócratas se concentraba en gran medida en la definición de una estrategia macroeconómica de desarrollo que incluyera políticas coherentes. 1 El mercantilismo; es un conjunto de ideas económicas que considera que la prosperidad de una nación o estado depende del capital que pueda tener, y que el volumen global de comercio mundial es inalterable. 2 Tableau Économique; de François Quesnay describe un modelo para la economía de las naciones según el cual la sociedad se divide en tres clases propietarios de la tierra (aristócratas, alto clero), trabajadores estériles (artesanos, mercaderes), y trabajadores productivos (agricultores, ganaderos, pescadores). La FISIOCRACIA o FISIOCRATISMO era una escuela de pensamiento económico del siglo XVIII fundada por François Quesnay y Anne Robert Jacques Turgot en Francia. Afirmaba la existencia de una ley natural por la cual el buen funcionamiento del sistema económico estaría asegurado sin la intervención del gobierno. Su doctrina queda resumida en la expresión «laissez faire, laissez passer»3 (dejar hacer, dejar pasar). El origen del término fisiocracia proviene del griego y quiere decir "gobierno de la naturaleza", al considerar los fisiócratas que las leyes humanas debían estar en armonía con las leyes de la naturaleza. Esto está relacionado con la idea de que sólo en las actividades agrícolas la naturaleza posibilita que el producto obtenido sea mayor que los insumos utilizados en la producción surgiendo así un excedente económico. Los fisiócratas denominaron de estériles a las actividades como la manufactura o el comercio donde la producción solo sería suficiente para reponer los insumos utilizados. Representantes de la economía política burguesa de Francia en el siglo XVIII. La parte central de la doctrina económica de los fisiócratas corresponde al problema de la PLUSVALÍA o del PRODUCTO NETO''. PLUSVALÍA • Valor que el trabajo no pagado del obrero asalariado crea por encima del valor de su fuerza de trabajo y del que se apropia gratuitamente el capitalista. 3 PRODUCTO NETO • Cualquier objeto que puede ser ofrecido a un mercado, no tiene una ganacia monetaria Laissez faire, laissez passer; Dejar hacer, dejar pasar. ESTUDIO Y MERITOS DE LOS FISIÓCRATAS Origen de la riqueza social Análisis de la producción capitalista Dominio ilimitado de la propiedad privada La libre competencia y de la libertad de comercio exterior. Mérito científico de los fisiócratas el examinar el capital en la forma que adopta en el proceso de producción Analizar las leyes de la reproducción y de la distribución del producto social global bajo el capitalismo. IMPORTANCIA DE LA PRODUCCIÓN AGRÍCOLA FRENTE AL COMERCIO Para los fisiócratas, en oposición al mercantilismo, la riqueza de una nación procedía de su capacidad de producción y no de las riquezas acumuladas por el comercio internacional. Y consideraban que la única actividad generadora de riqueza para las naciones era la agricultura. Los fisiócratas asumieron que dada su observación de los mercados, la manufactura era una actividad estéril, ya que no se veía un gran avance en este sector. Obviamente, esto se debía al tamaño de la industria de entonces, anterior a la revolución industrial. Lo cual constituye una falla en su análisis, que se deriva también del mayor interés en la productividad física y no en la productividad del valor. También defendían que la agricultura era el único sector productivo capaz de crear riqueza, mientras que el comercio y la industria tan sólo permitían la distribución de esta riqueza; los fisiócratas estaban en contra de las políticas de comercio internacional mercantilistas, favorecedoras del proteccionismo. A mediados del siglo XVIII, la economía de Francia se encontraba en una muy mala situación. El rey Luis XV llevó al país a guerras innecesarias que agotaron el tesoro. Los efectos de estas desastrosas guerras intentaban ser mitigados mediante un sistema fiscal opresivo. Adicionalmente, se habían aplicado políticas mercantilistas que restringían el comercio. El producto de la agricultura y el valor de la tierra decrecían. Los agricultores debían entregar una gran parte de su producto al terrateniente y el resto estaba fuertemente gravado, mientras que la nobleza y el clero, que eran dueños de gran parte de la superficie del país, estaba exentos de impuestos. El sector agrícola estaba en decadencia y la población agrícola disminuía. La fisiocracia surgió como respuesta a este estado de la economía francesa. PADRES DE LA FISIOCRACIA FRANÇOIS QUESNAY François Quesnay nació en Merey, en el actual departamento Eure, cerca de París, hijo de un abogado y pequeño terrateniente. A la edad de dieciséis años empezó su aprendizaje como cirujano, marchó a París, donde estudió medicina y cirugía y, tras obtener la calificación de maestro cirujano se estableció en Mantes. En 1737 fue designado secretario perpetuo de la academia de cirugía fundada por François la Peyronie, y pasó a ser cirujano del rey. En 1744 se graduó como doctor de medicina, se le concedió primero el cargo de médico del rey para más tarde ser ascendido a primer médico consultor, instalándose en el Palacio de Versalles. Sus aposentos estaban en el entresuelo. Luis XV tenía a Quesney en alta estima, y acostumbraba a llamarle "mi pensador"; cuando le otorgó título nobiliario le asignaría como armas tres flores de pensamiento (en francés, como en español, la palabra que nombra a la planta, pensée también tiene el significado pensamiento), con el lema Propter excogitationem mentis. Se dedicó principalmente a los estudios económicos, tomando parte en las intrigas palaciegas, en las que estuvo perpetuamente involucrado. Conoció – aproximadamente en 1750– a Jean de Gournay (1712-1759), que también fue un pionero del pensamiento económico, y alrededor de esta pareja se formaría progresivamente el grupo filosófico de los economistas o fisiócratas. Sus discípulos más destacados fueron: Victor Riquetti, marqués de Mirabeau (autor de L'Ami des hommes, 1745-1760 y Philosophie rurale, 1763); Nicolas Bardeau (Introduction a la philosophie économique, 1771); G. F. Le Trosne (De l'ordre social, 1777); André Morellet, conocido por sus disputas con Ferdinando Galiani sobre el comercio de grano durante la Guerra de la Harina; Mercier Larivière, y Dupont de Nemours. Adam Smith, que durante su visita al continente con Henry Scott pasó algún tiempo en París conocería a Quesnay y a algunos de sus seguidores, homenajeó sus servicios científicos en su obra La riqueza de las naciones. Quesnay murió el 16 de diciembre de 1774 y tuvo tiempo suficiente como para ver a su discípulo Turgot en el cargo de ministro de finanzas. Casado en 1718, tuvo un hijo y una hija. Su nieto sería miembro de la Asamblea legislativa. Luego de Quesnay, surgieron otros autores pertenecientes a la fisiocracia, entre los cuales se destaca Víctor de Mirabeau. También pertenecen a la fisiocracia los autores Mercier de la Rivière, Dupont de Nemours, el Abate Baudeau y Vincent de Gournay, a quien, acertada o desacertadamente se le atribuye la conocida frase “laissez-faire, laissez passer”. La fisiocracia concebía a la economía como extremadamente compleja, en la que una modificación en alguna parte constituyente, con el tiempo tenía efectos en las demás partes, lo que constituyó el primer análisis de equilibrio general. Los fisiócratas fueron los últimos autores que indagan sobre si determinadas ramas de la actividad económica contribuyen más que otras a la riqueza de un país. En este sentido, afirmaron que la agricultura era la única rama que originaba producto neto, por lo que ésta era la actividad que debía ser fomentada. Con respecto a las instituciones económicas, fueron los primeros en reclamar un régimen basado en la propiedad y en la libertad. La fisiocracia también fue la primer escuela en concebir a la actividad económica como un flujo continuo de rentas que circulaban de una clase a otra, que podían representarse mediante un cuadro sintético, el “Cuadro Económico”. La fisiocracia apelaba a principios racionales, afirmaba que los hechos sociales están unidos por lazos de leyes inevitables, a las que los gobiernos y los individuos deberían obedecer. La fisiocracia es una respuesta al mercantilismo, aunque si bien defendían el librecambio y el interés individual, continuaban elogiando a autoridad absoluta. Una explicación a esta paradoja se encuentra en el hecho de que, debido al régimen reinante, les estaba prohibida la libertad de expresión y la crítica hacia los abusos cometidos por miembros del estado. [Baur, Stephan; “Studies on the Origin of the French Economists” Quarterly Journal of Economics, vol. 5(1890) pp. 100-107] TEORÍA DEL PRODUCTO NETO DE LA FISIOCRACIA: Para Quesnay, una sola rama de la actividad económica era capaz de suministrar indefinidamente bienes consumibles sin prejuicio para la fuente de donde se extraigan: la agricultura. Las demás ramas de la economía, eran sólo transformadoras que se limitaban a añadir utilidad a elementos preexistentes, modificando su estructura material o trasladándolos de lugar. El valor agregado por la industria o el comercio era sólo el valor del trabajo humano, por lo que Quesnay clasificó de “estériles” al comercio y a la industria, lo que no significa que las haya considerado inútiles, sólo que no eran capaces de generar mas valor que el valor del trabajo. Es decir, sólo agregan valor trabajo a lo ya producido, no crean valor. La agricultura, en cambio, era la única actividad que generaba más riqueza que el trabajo insumido en ella. El “producto neto” se ve en esta actividad, debido a que produce un volumen de bienes mayor a lo necesario para conseguir semillas y mantener a los agricultores. Es necesario aclarar que admiten que en condiciones monopólicas las manufacturas también pueden producir valor agregado. Se pueden encontrar numerosos textos en los que autores de la fisiocracia se refieren a una función divina en la actividad agricultora. Por ejemplo, Mirabeau escribió que (la agricultura) “es una manufactura de institución divina, en que el fabricante tiene como asociado al Autor de la Naturaleza”. CRÍTICAS A LA TEORÍA DE PRODUCTO NETO DE LA FISIOCRACIA No es posible determinar con exactitud qué es lo que la agricultura y sólo ella produce: no es creadora de materia, ni de utilidad, ni de valor. Aparentemente, el concepto de producto neto corresponde a lo que hoy es denominado renta. Nunca probaron su teoría del producto neto. No es cierto que la agricultura multiplique riquezas y el resto de las ramas sólo agregue. Actualmente, la ciencia económica converge a la idea de que producir es crear utilidad. Bajo este concepto, queda claro que la agricultura no es la única actividad capaz de crear riqueza. EL “CUADRO ECONÓMICO” DE LA FISIOCRACIA Si bien la afirmación de que la agricultura es el único sector capaz de generar “producto neto” es bastante criticable, el aporte fundamental, por el cual los fisiócratas son actualmente elogiados, no proviene de esta rama de su investigación, sino de haber indagado qué sucede con su “producto neto” en la economía. Para averiguar el destino del producto neto, Quesnay ideó el denominado Cuadro Económico, simplificado en el siguiente gráfico: Fuente: Historia de la Teoría Económica y de su Método (1992) p. 93 Quesnay era médico de la corte, y para la realización de su Cuadro Económico se inspiró en el funcionamiento del cuerpo humano. Las rentas circulan por la economía al igual que circula la sangre por el cuerpo. Un trastorno en un órgano del cuerpo, origina reacciones en otros órganos para compensar el trastorno inicial. Este cuadro sirvió como punto de partida de análisis de política económica, realizados por otros miembros de la fisiocracia como el abate Baudeau y Mirabeau. Por ejemplo, afirmaban que cuando la parte del producto neto que vuelve a la tierra es insuficiente (ya sea por compras excesivas a la clase estéril o insuficiente a la clase agrícola), la creación de producto neto disminuye y puede surgir una depresión económica. Si bien el Cuadro Económico desarrollado por Quesnay puede ser fácilmente criticado, su mérito radica en haber tenido una visión de los diversos sectores económicos como interdependientes, que la economía puede estar en desequilibrio a causa de una mala orientación de los flujos de renta. EL “ORDEN NATURAL” DE LA FISIOCRACIA Los fisiócratas creían en la existencia de un “orden natural y esencial”, que era el conjunto de instituciones conformes con la providencia y que aseguraría la prosperidad. Cuando los fisiócratas hablan del Orden Natural, no intentan analizar la realidad, sólo describir una situación ideal. Según los autores de la fisiocracia, existe una ordenación natural o ideal de todas las cosas, impuesta por Dios y que el hombre puede descubrir. Por lo tanto, el objetivo de todos los estudios científicos era descubrir las leyes que rigen los fenómenos. ¿En qué consiste el Orden Natural para la Fisiocracia? En la descripción del orden natural, los fisiócratas enuncian sus propuestas en materia de política económica. LA FISIOCRACIA EXIGE LA PROPIEDAD, BAJO TRES FORMAS: Propiedad Personal Propiedad Mobiliaria Propiedad Territorial: • Derecho de todo hombre a disponer de sus facultades físicas o intelectuales. • Disponer de los frutos de su trabajo • El heredero debía disponer de la tierra, esto lo justificaban afirmando que era la retribución por haber mejorado y conservado el suelo durante las generaciones, y que era el mejor sistema para asegurar el mantenimiento de la tierra. LIBERTAD DEL COMERCIO EXTERIOR A Salarios lo más elevados posibles (para aumentar la capacidad de compra de los productos agrícolas) B Límite a la tasa de interés: para evitar que el rendimiento del dinero sea mayor al rendimiento de la tierra. Quesnay escribió: “La cantidad de renta que se puede adquirir mediante la compra de una tierra no es arbitraria ni desconocida; su medida precisa nos da la naturaleza de las cosas, que impone su ley al comprador y al vendedor…; esta misma ley debe tenerse en cuenta para la fijación del tipo de interés o renta del dinero”. C Despotismo Legal: soberanía de un rey que conocía el orden natural de la fisiocracia y llevaba su política de acuerdo al mismo. INFLUENCIAS DE LA FISIOCRACIA Quesnay fue el primero en concebir la actividad económica como un flujo constante de rentas entre grupos sociales, y en plantear cómo se podía alcanzar el equilibrio económico. Después de él, las visiones de Adam Smith4 y sus discípulos no se plantearían el problema del equilibrio general. La fisiocracia tuvo gran influencia hasta la aparición de La Riqueza de las Naciones en 1776. La fisiocracia influyó en el pensamiento de Adam Smith, quién los conoció mientras desarrollaba su propia investigación sobre la naturaleza y la función del capital en una sociedad agrícola. OBRAS En 1758 publicó el Tableau économique, que contenía los principios de las ideas de los fisiócratas. Este es quizá el primer trabajo que intenta describir el funcionamiento de la economía de forma analítica y puede considerarse la primera contribución importante al pensamiento económico. Las publicaciones en las que Quesnay expuso su sistema fueron: Dos artículos, sobre "Fermiers" (granjeros) y sobre "Grains" (granos) en la L'Encyclopédie de Diderot y D'Alembert (1756, 1757); Un tratado sobre las leyes naturales en la Physiocratie de Dupont de Nemours (1768); Maximes générales de gouvernement economique d'un royaume agricole (maximas generales del gobierno económico de un reino agricola)(1758) Y la, publicada simultáneamente, Tableau économique avec son explication, ou extrait des économies royales de Sully (con el famoso lema Pauvres paysans, pauvre royaume; pauvre royaume, pauvre roi: campesinos pobres, reino pobre; reino pobre, rey pobre)); Dialogue sur le commerce et les travaux des artisans, y otras piezas menosres. Sus escritos económicos se recogen en él: Segundo volumen de los Principaux économistes, publicados por Guillaumin con prefacio y notas de Eugène Daire; OEuvres économiques et philosophiques estaban introducidas por August Oncken (1888) 4 Adam Smith; fue un filósofo y economista escocés el padre de la economía moderna Una repimresión en facsímil de la Tableau économique a partir del original sería publicada por la British Economic Association (1895). El resto de sus escritos fueron el artículo Évidence en la Encyclopédie y Recherches sur l'évidence des vérites geometriques, con un Projet de nouveaux éléments de géometrie, 1773. El Elogio de Quesnay fue pronunciado en la Academia francesa de ciencias por Grandjean de Fouchy ANNE-ROBERT-JACQUES TURGOT (1727-1781) Anne Robert Jacques Turgot, barón de Laune, más conocido como Turgot, (París 10 de mayo de 1727–18 de marzo de 1781) fue político y economista francés, fundador de la escuela de pensamiento económico conocida como fisiocracia. Nacido en el seno de una familia de notable experiencia política, abandonó la carrera eclesiástica poco antes de su ordenación. Tuvo amistad con Condorcet, Pont de Nemours, Gournay y otros intelectuales cercanos a la escuela fisiócrata de pensamiento económico. Tras finalizar sus estudios de derecho, inició una exitosa carrera en la Administración que, en 1761, le permitió acceder al cargo de intendente de la región de Limoges, donde exhibió unas extraordinarias dotes administrativas; impulsó un catastro de la zona y eliminó instrumentos impositivos desfasados, como la corvée. Es el menor de los hijos de Michel-Étienne Turgot, preboste de los comerciantes de París, y de Madeleine Françoise Martineau de Brétignolles, perteneciente a una familia normanda de rancio abolengo. Se le educa en la Iglesia, y en la Sorbona, en la que empezó a estudiar en 1749. Su nombre en esa época es el de abad de Brucourt. Es autor de dos notables disertaciones latinas, Sobre los beneficios que la religión cristiana ha aportado al género humano, y sobre La historia del progreso en por la poesía y trata de introducir en la poética francesa las reglas de la prosodia latina. Su traducción del libro cuarto de la Eneida es acogida por Voltaire como la única traducción en prosa por la que mereciera la pena interesarse. En 1750, toma la decisión de no entrar en las órdenes, lo que justifica, como había hecho Dupont de Nemours, alegando que no es capaz de llevar una máscara toda su vida. En 1752, consigue ser sustituto, y más adelante consejero en el Parlamento de París, y, en 1753, maître des requêtes. En 1754, forma parte de la cámara real que se forma en un exilio del Parlamento. En 1755 y 1756, acompaña a Gournay, por entonces intendente de comercio, en sus giras de inspección por las provincias, y en 1760, durante un viaje por el este de Francia y por Suiza, visita a Voltaire, con el que traba amistad. En París, acude a los salones, en especial a los de Françoise de Graffigny, al parecer interesado en casarse con su sobrina, Mademoiselle de Ligniville ("Minette"), que luego pasó a ser Madame Helvétius y con la que mantuvo amistad toda su vida, Madame Geoffrin, Madame du Deffand, Julie de Lespinasse y la duquesa de Envilie. En esa época conocerá a los teóricos fisiócratas, Quesnay y Gournay, y con ellos Dupont de Nemours, el abad Morellet y otros economistas. Paralelamente escribió varias obras de teoría económica como Reflexiones sobre la formación y distribución de la riqueza (1766) o Sobre la libertad en el comercio de grano (1770). En 1774, Luis XVI le designó auditor general, y durante los dos años en los que permaneció en el cargo introdujo numerosas reformas, muchas de ellas orientadas a la abolición de los privilegios de los terratenientes, cuyas intrigas provocaron su destitución. Paralelamente, estudia diferentes aspectos de la ciencia, y lenguas clásicas y modernas. En 1753, traduce las Cuestiones sobre el comercio del inglés Josias Tucker, y redacta sus Cartas sobre la tolerancia, y un panfleto, El conciliador, defendiendo la tolerancia religiosa. Entre 1755 y 1756, compone diversos artículos para la Enciclopedia, y entre 1757 y 1760, un artículo sobre los Valores de las monedas, probablemente para el Diccionario del comercio del abad Morellet. En 1759, aparece su Elogio de Gournay. Jacques Turgot, Baron de l'Aulne fue un conocido político y economista francés del siglo XVIII. Contemporáneo, amigo y protector de Quesnay y los fisiócratas, aunque manteniendo ideas originales. Estudió en la Sorbona y ocupó importantes puestos administrativos y políticos, llegando a ser Ministro de Finanzas bajo Luis XVI. Decidido defensor de la libertad de comercio, Turgot era enemigo de los gremios y reformista, pero poco partidario de la intervención gubernamental. Mientras estuvo en el ministerio, nombró responsable de la casa de la moneda a su amigo Condorcet, tratando de restringir los gastos del estado. Se considera que tuvo gran influencia sobre Adam Smith, quién le visitó asiduamente durante su estancia en Francia. Otras obras de A.R. Jacques Turgot Lettre a l'abbé de Cice (sur le Papier-Monnaie), 1749 Tableau philosophique des progrés successifs de l'esprit humain, 1750. Plan de deux Discours sur l'Histoire Universelle, 1751. Plan d'un ouvrage sur la geographie politique, 1751. Fragmens et pensees detachees pour servir a l'ouvrage sur la geographie politique, 1751. Articles in Diderot's Encyclopaedia, 1757 - "Etymologie", "Foire et Marchés", "Fondation", "Langues". "Éloge de Vincent de Gournay", 1759, Mercure. Le Commerce des grains: Projet de lettre au contrôleur général Bertin sur un projet d'édit, 1763. Reflections on the Formation and Distribution of Riches, 1766 L'Impôt Indirect: Observations sur le mémoires récompensés par la Société d'Agriculture de Limoges, 1768. Valeurs et Monnaie: Projet d'article, 1769 Mémoire sur les prîts d'argent, 1770. Lettres au Contrôleur général (abbé Terray) sur le commerce de grains, 1770. Lettre au Contrôleur général sur la marque des fers, 1773. Letters to DuPont de Nemours Obras Discurso sobre las ventajas que el establecimiento del cristianismo ha procurado al género humano, trad. Dr. Gonçal Mayos. Cuadro filosófico de los progresos sucesivos del espíritu humano, trad. Gonçal Mayos. TABLEAU ÉCONOMIQUE El Tableau Économique de François Quesnay describe un modelo para la economía de las naciones según el cual la sociedad se divide en tres clases: propietarios de la tierra (aristócratas, alto clero), trabajadores estériles (artesanos, mercaderes), y trabajadores productivos (agricultores, ganaderos, pescadores). Este modelo prevé un flujo de mercancías con un esquema basado en la circulación sanguínea. Se trata de un equilibrio económico estacionario, cerrado, en el cual no existe distinción entre factores productivos y bienes producidos. La importancia de esta obra radica en que es el primer intento de esquematizar el funcionamiento de un sistema económico. Además, expone algunos de los principios más importantes de la fisiocracia.