¿CÓMO ESTUDIAR CON EFICACIA? El estudiar es una tarea compleja que consiste en el conjunto de hábitos y prácticas mediante las cuales asimilamos metódicamente los conocimientos y aprendemos las técnicas para aplicarlas en la práctica del trabajo y en la vida en general. Como se ve, hay dos grandes aspectos en el estudio: uno es la adquisición de experiencias, el aprendizaje, que se realiza mediante la obtención de conocimientos; el otro aspecto es la aplicación práctica de ese aprendizaje a la realidad con el propósito de utilizarlo para la transformación de las cosas, la solución de los problemas y la satisfacción de las necesidades humanas. En resumen: el estudio es por un lado, aprendizaje y por otro, aplicación de ese aprendizaje al trabajo. En una definición más amplia y profunda, diríamos que el estudio es el empleo y la aplicación metódica de los recursos y posibilidades del individuo a las tareas de comprender, dominar y transformar el mundo objetivo y subjetivo. Por lo tanto un objetivo central del estudio debe ser la unión, la vinculación del aprendizaje (formativo e informativo) con la práctica de la vida y del trabajo. Estudiar es adquirir conocimientos y técnicas que nos preparen para enfrentar con éxito todas las actividades que la sociedad exige y , entre ellas, el trabajo cotidiano. También, es estar listo siempre para salir airoso de un control, una prueba y demostrar que, además de estudioso, se es responsable, disciplinado y honesto. EL ESTUDIO COMO ESFUERZO Y COMO TRABAJO. Estudiar bien es una actividad, es trabajo que requiere un propósito decidido, firme, un esfuerzo tenaz y tiempo suficiente; pero cuyo cumplimiento proporciona satisfacción, ventajas y beneficios que compensan con creces el trabajo invertido. El estudio es, en primer lugar, un trabajo duro. Hasta ahora la ciencia no ha podido elaborar ninguna cápsula de vitaminas con conocimientos sintéticos, ni inyecciones de saber, que nadie crea que puede estudiar pasivamente, sólo gracias al esfuerzo del profesor o del presidente del aula. Por otra parte, el estudio requiere de tiempo para practicar y desarrollar las habilidades correctas. Ningún deportista se pone en forma de la noche a la mañana. Para llegar a ser en el campo de estudio lo que han sido Juantorena, María Caridad Colón, Javier Sotomayor en el campo del deporte, hay que someterse a un régimen de prácticas, de entrenamiento asiduo, hasta adquirir el hábito de estudiar con eficiencia. Los métodos científicos y sistemáticos para estudiar pueden requerir más esfuerzos, paciencia y tiempo al comienzo; pero pronto, al cabo de varias semanas, al volverse habituales, determinan un estudio fácil, rápido y efectivo. EL ESTUDIO COMIENZA EN LA CLASE. Participar en la clase cuando te concentras en el tema que se desarrolla, sigues las palabras del profesor, el “hilo” de su exposición, es decir, los escuchas y comprenden bien. Ahora: ¿crees que puedes escuchar y comprender bien la explicación sino orientas tu cuerpo y concentras todos tus sentidos hacia lo que el profesor dice y hace? Una condición básica para la atención es adoptar una postura cómoda, pero correcta. Sentirás entonces como tu cuerpo y todas tus fuerzas se ponen en tensión. Sin embargo, con una postura laxa, relajada, acostado más que sentado en la silla, es muy probable que tu atención se distraiga y “te vallas” de la clase. Para lograr una participación activa debes de preguntar las palabras que no sepas; insistir en los razonamientos que no comprenda; comprobar con el profesor si tu interpretación es correcta; fijar los datos e informes que te ofrece; plantearles los problemas relacionados con el tema explicado. Ten presente que tu quehacer en la clase y la actitud que ella desarrolles influirá en todo lo que realices después. ¿CUÁNDO ESTUDIAR? Debes estudiar con la mayor rapidez posible después de la clase dada por el profesor, o tan pronto como éste haya terminado de desarrollar un asunto o unidad. Los experimentos han demostrado que después del aprendizaje casi todo se olvida en un tiempo breve. Por lo tanto, el estudio de materia explicada, el mismo tiempo de la clase o el más cercano posible allá, contrarresta este olvido y permite que después se recuerde durante un tiempo mayor. Una dificultad surge de no hacerlo así: mientras más tiempo transcurra, más temas tendrás que estudiar y más difícil te será vencerlos. Entonces te verás en la situación del estudiante “finalista”, el estudiante de “ultimo día”, al que no le queda más remedio que “embutirse” una serie de cosas que no comprende o de datos que se le confunden – ya sabes con que resultados – al enfrentarse con la prueba o con las situaciones y problemas de la vida futura cuando tenga que utilizar conocimientos no adquiridos. CÓMO ESTUDIAR Y REALIZAR LAS DEMÁS ACTIVIDADES. El problema puede resolverse haciendo un plan el que distribuyas racionalmente el tiempo, teniendo en cuenta, en primer lugar, el indispensable para el descanso, la recreación tus actividades sociales. Una vez planificado tu tiempo debes cumplir dicha planificación. Si has señalado un tiempo para el estudio debes dedicárselo a esa actividad: ¿qué no te sientas con ánimo?, ¿que estás cansado y con sueño? ¡NO IMPORTA! Debes vencer estas dificultades iniciales y empezar a estudiar. Verás como te habitúas a hacerlo y cada vez se te presentarán menos esas dificultades. Proponle tareas bien definidas y realizables dentro del tiempo asignado por ellas. En otras palabras, no trates de hacer en un límite de tiempo determinado más de lo que realmente puedas. Todas las materias deben tener su tiempo de estudio pero debes asignarles más tiempo a aquellas que te resulten más difíciles. Atendiendo a estos principios generales podrás confeccionar un programa que planifique tus actividades de la semana y hacerte el firme propósito de cumplirlo. ¿DÓNDE ESTUDIAR? El lugar donde estudias debe reunir una serie de condiciones. Las más importantes son: 1. Que sea un lugar determinado, el cual debe ser: (A) Un sitio tranquilo y aislado. (B) Con suficiente iluminación tanto de día como de noche. 2. Que tenga todos los materiales e instrumentos que necesites, así no perderás un tiempo valioso en la búsqueda de los mismos. ¿CÓMO ESTUDIAR? “Echa una ojeada” general a la lección del texto que vas a estudiar para darte una idea de lo que se trata. Fíjate en las divisiones, títulos e incisos y darle una primera lectura a los mismos. Esta lectura no debe ser mecánica, sino una lectura de comprensión, con el fin de establecer las relaciones que te permitan vincularlo con lo explicado por el profesor. Debes plantear y poder contestar estas parecidas preguntas: 1. 2. 3. 4. 5. ¿De qué se trata la lección? ¿Qué explica el profesor al respecto? ¿Qué o cuáles objetivos destacó el profesor debíamos dominar? ¿Con qué extensión? ¿Qué relación hay entre mis notas y la lección? ¿CÓMO PUEDES REALIZAR ESTO PRÁCTICAMENTE? Para ello sería bueno que al comenzar a estudiar cada parte te plantearás los problemas siguientes: 1. ¿Comprendo el significado de cada párrafo? ¿Hay algunas palabras cuyo sentido desconozco o me resultan confusas? Anótalas, búscalas el diccionario y si es necesario consulta a tu profesor. - ¿Con qué otras palabras puedo sustituirlas? - ¿Puedo organizar las palabras en nuevo párrafo conservando la misma idea? 2. ¿Cuáles son las ideas principales de esta parte? - ¿Dónde está la idea principal? - ¿Con qué palabras expresa? Subráyalas, has una marca o señal si el libro es de tu propiedad o escríbela en tu cuaderno de estudio. Trata de formular una pregunta con ella. - ¿Qué relación tiene con lo que ya yo sé o con las ideas fundamentales de parte anteriores? - ¿Cómo se relaciona con lo explicado por el profesor? - ¿Con qué hechos que he observado puedo asociarla y aplicarla? 3. ¿Cómo se desarrolla e ilustra esta idea principal? - ¿Qué argumentos se exponen para apoyarlas? - ¿Qué ejemplos se aclaran? - ¿Qué otros ejemplos se pueden buscar? - ¿Qué me dicen las ilustraciones y las gráficas? ¿CÓMO TOMAR BUENAS NOTAS? 1. Escribe el título general del tema y del aspecto que está desarrollando el profesor. - Añade la fecha correspondiente. 2. Solicita a tu profesor los objetivos del tema. 3. No trates de escribir todo lo que el profesor diga, sino las ideas que has seleccionado como principales. Utiliza tus propias palabras .El mismo profesor te dará indicios en su explicación de lo que puedes valerte para destacar las ideas y hechos principales. - La repetición o reiteración de un asunto. - La utilización de palabras y frases tales como: ¡Fíjense! ¡Recuerden! ¡Es importante saber…! ¡Ahora reflexionaré! 4. Trata de utilizar una escritura abreviada que tú mismo puedes formar. La clave está en: - Suprimir algunas palabras como: artículos, preposiciones, adjetivos determinados, etc. - Usar abreviaturas para las distintas palabras: - Mtzas………… Matanzas - Mat. …………... Matemática - Prob. ………….. Problema