Oficio 340-045983 del 6 de noviembre de 2001 LA ASIGNACIÓN DEL PRECIO ACTUALIZADO EN UN INVENTARIO FÍSICO SE REALIZA CON BASE EN UN AVALÚO TÉCNICO Al respecto me permito manifestarle que si la labor desarrollada por ustedes consistente en la asignación del precio actualizado al inventario físico, se ajusta a un avalúo técnico, debe cumplir con los parámetros establecidos en el artículo 64 del Decreto 2649 de 1993, el cual en su parte pertinente señala: Al cierre del período, el valor neto de estos activos, reexpresado como consecuencia de la inflación, debe ajustarse a su valor de realización o a su valor actual o a su valor presente, el más apropiado en las circunstancias, registrando las provisiones o valorizaciones que sean del caso. Pueden exceptuarse de esta disposición aquellos activos cuyo valor ajustado sea inferior a veinte (20) salarios mínimos mensuales. El valor de realización actual o presente de estos activos debe determinarse al cierre del período en el cual se hubieren adquirido o formado y al menos cada tres años, mediante avalúos practicados por personas naturales, vinculadas o no laboralmente al ente económico, o por personas jurídicas, de comprobada idoneidad profesional, solvencia moral, experiencia e independencia. Siempre y cuando no existan factores que indiquen que ello seria inapropiado, entre uno y otro avalúo estos se ajustan al cierre del período utilizando indicadores específicos de precios según publicaciones oficiales o, a falta de estos, por el PAAG correspondiente. El avalúo debe prepararse de manera neutral y por escrito, de acuerdo con las siguientes reglas: 1. Presentará su monto discriminado por unidades o por grupos homogéneos. 2. Tratará de manera coherente los bienes de una misma clase y características. 3. Tendrá en cuenta los criterios utilizados por el ente económico para registrar adiciones, mejoras y reparaciones. 4. Indicará la vida útil remanente que se espera tenga el activo en condiciones normales de operación. 5. Segregará los bienes muebles reputados como inmuebles, mostrando su valor por separado.” Adicionalmente debe tener presente que son personas idóneas para realizar un avalúo técnico una persona natural o jurídica que reúna por lo menos las calidades antes descritas, en especial en cuanto tiene que ver con la materia objeto de estudio, llámese arquitecto, ingeniero, sean miembros o no de la Lonja de Propiedad Raíz, etc., que pueda certificar su dictamen y disponga de todos los elementos de juicio necesarios para asignar los valores que le otorgue a cada uno de los activos por él evaluados, y que presente el estudio junto con los documentos soportes, que evidencien el trabajo realizado. Ahora bien, si el precio actualizado superara el registrado en libros, debe proceder a reconocer una valorización, la cual conforme al artículo 85 del Decreto 2649 ya citado representa el mayor valor de los activos, con relación al costo neto ajustado. Imputación que de acuerdo con el Plan Único de Cuentas para comerciantes, Decreto 2650 de 1993 y sus modificatorios, debe efectuarse en la cuenta 1910Valorizaciones de propiedades, planta y equipo y como contrapartida la 3810 —Superávit por valorizaciones, de Propiedades, planta y equipo, en las subcuentas allí establecidas para cada tipo de activo. Finalmente se informa que los avalúos técnicos no son sujetos de aprobación o improbación por parte de esta Superintendencia, razón por la que el revisor fiscal, deber velar porque los mismos cumplan con los requisitos mínimos para ser considerados como tal. En los casos en que este Despacho en ejercicio de sus funciones hace observaciones a los vigilados respecto de la presentación de sus estados financieros, verifica que dichos avalúos cumplan con los parámetros ya señalados, en caso contrario ordena la elaboración de avalúos técnicos y el registro de los ajustes a que haya lugar.