Universidad de Sonora Departamento de Física Dr. Roberto Pedro Duarte Zamorano © 2013 Temario 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. Propiedades ondulatorias de las partículas. Estructura atómica. Mecánica cuántica. Teoría cuántica del átomo de Hidrógeno. Átomos de muchos electrones. Moléculas. Mecánica estadística. Estado sólido. Temario 2. Estructura atómica. 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. El modelo de Rutherford. Orbitas electrónicas. Espectro atómico. El átomo de Bohr. Niveles de energía. El experimento de Franck-Hertz. El principio de correspondencia. 1. El modelo de Rutherford Joseph John Thomson (1856-1940) A finales del siglo XIX, la mayoría de los científicos compartía la idea de que los elementos químicos consistían de átomos, pero lo que si no quedaba claro era cómo estaban formados, ya para entonces se empezaba a hablar de partículas eléctricas como fundamentos de la materia. En 1894, George Stoney propuso al electrón como unidad atómica de carga eléctrica. En un artículo de 1897, el físico inglés J. J. Thomson propuso que los constituyentes de los rayos catódicos eran partículas materiales cargadas. Entre ese año y 1903 desarrolló su modelo atómico en el que los átomos consistían de materia uniformemente cargada positivamente y con electrones negativos incrustados en ella, el llamado “modelo del budín de pasas”. 1. El modelo de Rutherford Los estudios realizados por Thomson sobre los llamados rayos catódicos terminó con un debate sobre su naturaleza: corpuscular u ondulatoria. Su afirmación de que eran partículas subatómicas a las que llamó “corpusculos” chocó con las ideas que se tenían con relación a un átomo indivisible y fue duramente criticado por muchos de sus contemporáneos. El descubrimiento del electrón constituyó un parteaguas en la física del átomo y provocó desarrollos sorprendentes: el modelo de Rutherford y la primera teoría satisfactoria de la emisión de luz por sistemas atómicos, el modelo de Bohr. Aunque el modelo de Thomson tuvo buen éxito en la explicación de la dispersión alfa, y la relación lineal de la energía de los fotoelectrones y la frecuencia de la radiación incidente, para 1913 había terminado su vigencia. El tubo original utilizado por J.J. Thomson para medir la relación cargamasa del electrón. 1. El modelo de Rutherford En 1911, Ernest Rutherford presentó un modelo que con el tiempo se convertiría en referencia obligada en la historia del desarrollo de la estructura atómica. Sin embargo, en su época no fue recibido con entusiasmo, entre otras razones, porque era más un modelo para explicar la dispersión de partículas alfa que uno atómico. La clave para comprender los espectros de líneas y el modelo correcto del átomo fueron proporcionados, ambos, por Ernest Rutherford y sus estudiantes Hans Geiger (1882-1945) y Ernest Marsden (1889-1970) mediante una serie de experimentos realizados entre 1909 y 1914. En estos experimentos se analizaba la trayectoria de partículas alfa al ser lanzadas contra una lámina delgada de oro, observando que algunas se desviaban más de 90 grados. Ernest Rutherford (1871-1937) 1. El modelo de Rutherford Rutherford lanzó entonces la hipótesis de que en el centro del átomo debía haber un "núcleo" que contuviera casi toda la masa y toda la carga positiva del átomo, y que de hecho los electrones debían determinar el tamaño del átomo. Este modelo planetario había sido sugerido en 1904 por un japonés, Hantarō Nagaoka, aunque había pasado desapercibido ya que se le objetaba que en ese caso los electrones tendrían que irradiar girando alrededor del núcleo central y, en consecuencia, caer. Los resultados de Rutherford demostraron que ese era sin dudar un modelo adecuado para el átomo, puesto que permitía prever con exactitud la tasa de difusión de las partículas alfa en función del ángulo de difusión y de un orden de magnitud para las dimensiones del núcleo atómico. Las últimas objeciones teóricas (sobre la irradiación del electrón) se desvanecieron con los principios de la teoría cuántica, y la adaptación que hizo Niels Bohr del modelo de Rutherford a la teoría de Max Planck, lo que sirvió para demostrar la estabilidad del átomo de Rutherford. 1. El modelo de Rutherford La dispersión de una partícula a por un átomo de Thomson Hans Geiger y Ernest Rutherford en su Laboratorio en Manchester Diagrama esquemático del Experimento de Rutherford 1. El modelo de Rutherford La pregunta es: ¿porqué debería uno obtener una dispersión a ángulos grandes, tal como aparece en la dispersión de Rutherford? El problema con el átomo de Thomson es que es “demasiado suave” ya que la máxima fuerza experimentada es débil para producir una deflexión grande, debido a la forma en que está distribuida la carga. Rutherford concluyó que la dispersión a grandes ángulos obtenida experimentalmente solamente podía ser resultado de una colisión de la partícula con una carga masiva confinada en un espacio mucho menor que el átomo entero. Considerando que al “núcleo” como una partícula puntual, calculó la distribución angular para las partículas dispersadas. Su predicción de la dependencia de la probabilidad de dispersión como función del ángulo, carga nuclear y energía cinética fue verificada completamente en la serie de experimentos realizados por Geiger y Marsden. 1. El modelo de Rutherford Sin entrar en una derivación rigurosa de la dispersión de Rutherford, vamos a hacer una descripción con algo de detalle de la misma. En el esquema mostrado se considera que el núcleo es una carga puntual Q ubicada en el origen O. A una distancia r, la partícula a (con una carga qa) experimenta una fuerza repulsiva qa Q ke 2 r La partícula a, con una rapidez v, viaja a lo largo de una trayectoria hiperbólica que inicialmente es paralela a la línea COA a una distancia b y después continúa paralela a la línea OB, que hace un ángulo q con OA. El ángulo de dispersión q se puede relacionar con el parámetro de impacto b mediante consideraciones de mecánica clásica. 1. El modelo de Rutherford Considerando que el núcleo permanece esencialmente en reposo, la partícula sale con la misma rapidez v con que incidió. Haciendo uso de ideas y conceptos de mecánica clásica, se encuentra una relación entre el parámetro de impacto b y el ángulo de dispersión q, a saber ke qa Q q b cot 2 ma v 2 De hecho, no es posible escoger o conocer el parámetro de impacto para una partícula a en particular, pero uno encuentra de la expresión anterior que todas las partículas con un parámetro de impacto menor o igual que un valor particular de b, serán dispersadas a un ángulo mayor o igual al ángulo q dado por la relación mencionada, ya que aumentando q disminuye b. 1. El modelo de Rutherford Lo anterior sugiere considerar partículas dentro de un área con radio dado por el parámetro de impacto b, tal como se muestra Para el área pb12 tenemos una dispersión a ángulos mayores que q1, mientras que para el area pb22 (mayor que la anterior) el ángulo de dispersión q2 es menor que q1. El área anterior se conoce como sección eficaz s, la cual está dada por s p b2 La sección eficaz tiene unidades de superficie, sin embargo, en física de altas energías, es usual el medirla en barn (b) que equivale a 10-28m2, y que corresponde aproximadamente al área de la sección eficaz del núcleo de un átomo de uranio. 1. El modelo de Rutherford Si ahora consideramos una lámina delgada de espesor t que contiene n átomos por unidad de volumen. El número de núcleos por unidad de área es nt, por lo que un haz de partículas a que incide sobre un área A se encuentra con ntA núcleos. Con lo anterior, la sección eficaz total para las partículas a dispersadas a un ángulo mayor que q, está dado por el producto de la sección eficaz s por el número de núcleos que encontrará en la lámina, ntA, a saber ntAs Así que, la fracción f de partículas a incidentes que son dispersadas a ángulos mayores que q, es la razón del número de partículas dispersadas a un ángulo mayor que q y el número total de partículas, es decir ntAs f nts A y considerando la expresión para s tenemos que f ntp b 2 1. El modelo de Rutherford Recordando que el parámetro de impacto b está dado por ke qa Q q b cot 2 ma v 2 podemos escribir ke qa Q q f ntp cot 2 2 ma v 2 Y si consideramos la expresión para ke, tenemos que la fracción f de partículas a incidentes que son dispersadas a ángulos mayores que q resulta ser 2 qa Q 2q f ntp cot 2 4 p m v 2 0 a 1. El modelo de Rutherford La expresión anterior es válida para un ángulo arbitrario q; sin embargo, en un experimento real, un detector mide partículas a dispersadas entre q y q + dq, como se muestra. De manera que la fracción de partículas a dispersadas, en ese rango, se obtiene diferenciando f, a saber df, el cual está dado por 2 qa Q q 2q df ntp cot csc dq 2 2 2 4p 0 ma v El signo menos significa que conforme aumenta q, decrece f. Si un total de Ni partículas a inciden sobre la lámina durante el experimento, el número de partículas dispersadas en dq es Nidf, con lo que el número de partículas detectadas (y por lo tanto, medidas) por unidad de área N(q), debe ser N df N (q ) i dS 1. El modelo de Rutherford Por lo tanto, usando las expresiones para df y dS, tenemos 2 qa Q q 2q N i ntp cot csc dq 2 4 p m v 2 2 0 a N (q ) q q 4p r 2 sin cos dq 2 2 Que, al ser simplificada, resulta ser la ecuación para la dispersión de Rutherford qa Q N (q ) 2 2 4 q 8p 0 ma v r sin 2 N i nt 2 o en términos de la energía cinética K, el número atómico Z y la carga del electrón e, 2 Ze 2 N (q ) 2 4 q 8p 0 K r sin 2 N i nt 1. El modelo de Rutherford Las predicciones de la ecuación anterior fueron corroboradas por los experimentos, lo cual fortaleció la idea de Rutherford en su modelo de átomo. En la derivación de la ecuación, Rutherford asumió que el tamaño del núcleo blanco era pequeño comparado con la distancia de máximo acercamiento R al cual las partículas a empiezan a ser desviadas, lo anterior permite encontrar un límite en el tamaño del núcleo. Si uno considera una colisión con parámetro de impacto b = 0, puede asumirse que la energía cinética con la que viaja inicialmente Ki, en el punto de máximo acercamiento, se convierte en la energía potencial eléctrica en dicho punto, por lo que 2 Ki 1 2 Ze 4p 0 R de donde, el máximo acercamiento está dado por 2 Ze 2 R 4p 0 K i 2. Orbitas electrónicas Siguiendo el modelo de Rutherford, podemos hacer un símil con el modelo planetario. Para ello, considerando el movimiento del electrón alrededor del núcleo producido por la interacción eléctrica se puede asumir una órbita electrónica circular, tal como se muestra en la figura. En este caso, la fuerza centrípeta mv 2 Fcp r corresponde a la fuerza eléctrica 1 e2 Fe 4p 0 r 2 lo que lleva a escribir mv 2 1 e2 r 4p 0 r 2 2. Orbitas electrónicas De la expresión anterior encontramos que la rapidez v del electrón, como función del radio r de la órbita, es v e 4p 0 mr La energía total E del electrón en un átomo de Hidrógeno es la suma de las energías cinética y potencial, es decir 1 e2 1 2 E mv 2 4p 0 r que, usando la expresión anterior para la rapidez, se puede escribir como 1 e2 E 8p 0 r Energía total del átomo de Hidrógeno 2. Orbitas electrónicas. Un ejemplo. (a) Encuentre una expresión para la frecuencia de revolución del electrón en el modelo clásico del átomo de Hidrógeno. (b) Considerando que la energía del electrón en el estado base es -13.6eV, ¿cuál es la frecuencia que se obtiene? ¿A qué tipo de radiación electromagnética corresponde? 2. Orbitas electrónicas El análisis realizado hasta aquí es una aplicación directa de las Leyes de Newton para el movimiento y de la Ley de Coulomb para la fuerza eléctrica, ambas pilares fundamentales de la Física Clásica, y es acorde con la evidencia experimental de la estabilidad de los átomos. Sin embargo, NO es acorde con la teoría electromagnética, otro pilar de la Física Clásica, que predice que una carga acelerada radia energía en forma de ondas electromagnéticas. Lo anterior implica que el electrón, al perder energía, describiría una trayectoria en forma de espiral, que lo llevaría a colapsar con el núcleo. En 1900, la Física había alc alcanzado un punto crucial en su desarrollo con la hipótesis de Planck sobre el comportamiento cuántico de la radiación, por lo que considerar esto en el estudio del átomo debía ser posible. 2. Orbitas electrónicas La Física Clásica no proporciona un análisis significativo de la estructura atómica, ya que se acerca a la naturaleza en términos de partículas "puras" y ondas "puras". En realidad las partículas y ondas tienen muchas propiedades en común; aunque debido a lo pequeño de la constante de Planck la dualidad ondapartícula resulta imperceptible en el mundo macro. La utilidad de la física clásica disminuye a medida que la escala de los fenómenos bajo estudio disminuye, lo que implica que, para entender el átomo, hay que tener en cuenta el comportamiento corpuscular de las ondas y el comportamiento ondulatorio de las partículas. Los problemas mencionados anteriormente, incluyendo la imposibilidad de explicar los espectros de emisión, que presenta el modelo de Rutherford fueron resueltos por Bohr, mediante la inclusión de las ideas de cuantización planteadas por Planck y que le valieron el reconocimiento del propio Rutherford. 3. Espectro atómico Antes de analizar, en forma detallada, la propuesta de Bohr para el modelo del átomo, revisemos el trabajo experimental sobre las líneas espectrales que sirvieron para impulsar y confirmar la primera teoría cuántica del átomo. Para finales del siglo XIX, se sabía que los elementos químicos emitían luz con longitudes de onda bien definidas al quemarse o cuando estos eran excitados mediante descargas eléctricas. 3. Espectro atómico 3. Espectro atómico 3. Espectro atómico. Serie de Balmer. En 1885, J. J. Balmer encontró una fórmula empírica para las longitudes de onda (en nm) del espectro visible del hidrógeno. k2 364.56 2 nm k 4 con k = 3, 4, 5, ... Serie de Balmer Johann Jakob Balmer (1825-1898) 3. Espectro atómico. Fórmula de Rydberg En la década de 1880, el físico sueco Johannes Rydberg trabajó en una fórmula que describe la relación entre las longitudes de onda de las líneas espectrales de los metales alcalinos. Rydberg se dio cuenta de que las líneas se presentan en series y encontró que podía simplificar sus cálculos si utilizaba el número de onda (igual a 1/) como su unidad de medición. Graficó los números de onda de líneas sucesivas de cada serie contra los enteros consecutivos que representan el orden de las líneas de esa serie en particular. Encontrando que las curvas resultantes tienen una forma similar, buscó una función que las pudiera generar a todas ellas, con las constantes apropiadas. Johannes Rydberg (1854-1919) 3. Espectro atómico. Fórmula de Rydberg El resultado obtenido fue presentado en 1888 y se resume en la llamada Fórmula de Rydberg para las líneas espectrales, que podemos escribir como 1 1 RH 2 2 n k 1 donde RH = 1.096776x107 m-1 es la constante de Rydberg para el Hidrógeno. Vale la pena mencionar que cada elemento químico tiene su propia constante de Rydberg. Con los valores apropiados para n y k se recuperan, no sólo la Serie de Balmer, sino otras Series que aparecen fuera del visible y que fueron descubiertas posteriormente, dichas series se incluyen en la tabla siguiente. 4. El átomo de Bohr En abril de 1913, el físico danés Niels Bohr publicó el artículo “On the constitution of atoms and molecules” (Phil.Mag, 26(1), 1913) que cambió al mundo de la física. Bohr no sólo proporcionó la primera teoría exitosa de los espectros atómicos, sino que en el proceso, rompió con algunas de las ideas que habían sido desarrolladas por Maxwell, la más importante de ellas relacionada con la pérdida de energía por radiación que experimenta una partícula cargada acelerada, como lo era el electrón en el modelo de Rutherford. Bohr estableció, como una primera idea, que la teoría del electromagnetismo de Maxwell NO era válida para sistemas de dimensiones atómicas. Lo siguiente fue aplicar las ideas de Planck sobre cuantización al movimiento de los electrones, así como las ideas de Einstein sobre el fotón. Niels Henrik David Bohr (1885 – 1962) 4. El átomo de Bohr Las ideas básicas de Bohr, si se aplican a un átomo de Hidrógeno, son las siguientes: n=1 n=2 • El electrón se mueve en órbitas circulares, alrededor del núcleo, debido a la fuerza de atracción Coulombiana. • Sólo ciertas órbitas son estables, debido a que en estas los electrones no radían. • El átomo emite radiación cuando el electrón pasa de un estado estacionario inicial más energético a un estado estacionario más bajo energéticamente. Este salto NO puede analizarse desde el punto de vista clásico. n=3 La frecuencia f del fotón emitido en el salto es independiente de la frecuencia del movimiento orbital del electrón y viene dada por f E f Ei h 4. El átomo de Bohr Las ideas básicas de Bohr, si se aplican a un átomo de Hidrógeno, son las siguientes: n=1 n=2 • El tamaño de las órbitas permitidas es determinado por una condición cuántica adicional impuesta sobre la cantidad de momento angular orbital del electrón. Las órbitas permitidas son aquellas para las cuales el momento angular orbital del electrón alrededor del núcleo es un múltiplo entero de h/2p. me vr n n=3 Estos postulados son la base de la teoría atómica propuesta por Bohr y que le permitieron resolver varios de los problemas presentados por el modelo de Rutherford, pero sobretodo mostrar la forma de incorporar las ideas de Planck a la teoría del átomo. 4. El átomo de Bohr Considerando que el momento angular orbital de un electrón en el nésimo nivel energético sea L me vr n con n 1, 2,3, 4,... nos lleva a restringir los valores posibles para los radios de las órbitas estacionarias, ya que esta condición nos lleva a que la rapidez es v y recordando que v podemos escribir n me r e 4p 0 mr e 4p 0 mr n me r 4. El átomo de Bohr De esta última relación podemos despejar el valor del radio de la órbita permitida, encontrando que este es 4p 0 n 2 rn me e 2 2 Esta expresión para los radios de las órbitas estacionarias del átomo de Bohr se puede rescribir como rn n 2 a0 donde hemos usado el denominado radio de Bohr a0 definido como 2 4p 0 2 11 a0 5.291772 10 m 2 2 me e me ke e El radio de Bohr corresponde al radio del átomo de hidrógeno en su estado base o de mínima energía, cuando n = 1. 4. El átomo de Bohr Considerando que el radio de la n-ésima órbita permitida está dado por rn n 2 a0 podemos escribir la energía del sistema, dada por 2 En como 1 e 8p 0 rn 1 e2 1 En 8p 0 a0 n 2 Si usamos los valores numéricos para las diferentes cantidades involucradas, tenemos que E En con n 1 2 1 e2 E1 13.6eV 8p 0 a0 5. Niveles de energía . 6. El experimento de Franck-Hertz Una vez establecida la existencia de niveles cuantizados de energía en los átomos a partir de las observaciones de los espectros de líneas emitidos por los diferentes elementos, hacía falta una confirmación más directa de este comportamiento. Esta confirmación llegó en 1914 con el experimento realizado por los físicos alemanes J. Franck y G. Hertz, y en el cual emplearon átomos de mercurio. James Franck (1882 – 1964) Gustav Ludwig Hertz (1887 – 1975) 6. El experimento de Franck-Hertz El experimento de Franck-Hertz proporcionó una demostración experimental clara de la existencia de niveles de energía cuantizados y demostró que los niveles deducidos a partir del bombardeo con electrones coincidían con los deducidos a partir de las líneas espectrales. Franck y Hertz demostraron que los átomos sólo podían absorber (y ser excitados por) cantidades específicas de energía, lo que les hizo acreedores al Premio Nobel en 1925. James Franck (1882 – 1964) Gustav Ludwig Hertz (1887 – 1975) 6. El experimento de Franck-Hertz En la figura se muestra un esquema del dispositivo empleado por FranckHertz en su experimento. Los electrones emitidos por el filamento son acelerados en una región relativamente larga (~ 1cm) mediante el potencial V entre el filamento y la rejilla. Estos electrones pueden llegar al colector y ser registrador por el electrómetro si poseen la suficiente energía para superar el potencial rretardador (~1.5V) existente entre la rejilla y el colector, que se encuentran separados una distancia corta (~1mm). Con electrones de baja energía ocurren colisiones perfectamente elásticas, y como la masa de los átomos de mercurio es muy grande, los electrones llegan al colector con una energía cercana a eV. 6. El experimento de Franck-Hertz Incluso después de muchas colisiones, el electrón llega a la rejilla con una energía cinética cercana al producto eV, y llegará al colector si el voltaje de aceleración V es mayor que 1.5V; cuando V se incrementa ligeramente, llegan más electrones al colector y la corriente medida en el electrómetro, I, aumenta. Conforme aumenta el voltaje V, la energía de los electrones aumenta hasta un valor crítico en el que ocurren colisiones inelásticas en las cuales electrones pueden los transferir casi toda su energía cinética al átomo, llevándolo al primer estado excitado. Los electrones que chocan pierden energía y no pueden alcanzar el colector, por lo que la corriente tiene una caída importante, la cual puede relacionarse con el voltaje V. 6. El experimento de Franck-Hertz En la figura se muestra una gráfica típica del Experimento de FranckHertz, en la que el voltaje del filamento se estableció en 6V y el tubo se calentó a 185°C. Si se miden con cuidado las separaciones de máximos y mínimos adyacentes se encuentra que esta es de 4.9V±0.1V. Con este valor se puede calcular la longitud de onda asociada hc 253.2294nm E Midiendo cuidadosamente encontraron que, en cuanto se alcanzaba la diferencia de 4.9V, se tenía una emisión con una longitud de onda de 254nm (ultravioleta). 7. El principio de correspondencia. El principio de correspondencia establece que “las predicciones de la teoría cuántica deben corresponder a las predicciones de la física clásica en la región de tamaños donde se sabe que la teoría clásica es válida” Típicamente, se refiere a tamaños del orden de cm, gr y seg, lo que corresponde a números cuánticos muy grandes. Por ejemplo, para un átomo de Hidrógeno con un radio de 1cm se tendría, a partir de 2 rn n a0 usando los valores numéricos correspondientes n 13750 De manera simbólica el principio de correspondencia se escribe como física física lim n cuántica clásica Universidad de Sonora Departamento de Física Dr. Roberto Pedro Duarte Zamorano © 2013