Pastor: Alfredo Ávila TEMÁTICA: LA ORACIÓN LA ORACIÓN DE INTERCESIÓN Y SUPLICA INTRODUCCIÓN Suplicar es pedir o rogar con instancia y humildad para cambiar situaciones o atar espíritus. Cuando se ora a este nivel el corazón de Dios es movido a misericordia, salva a otras naciones y los trae al arrepentimiento, trae fuerza, liberación y transformación. Los creyentes que se dedican a orar a este nivel son sellados por mandato de Dios. Ezequiel 9:1-11. DESARROLLO Interceder o suplicar por una persona involucra una identificación plena con el pueblo, nación o individuo por el cual sé esta orando, poniéndose en la posición del afectado como que si fuera el mismo el dueño del problema. Todas las intervenciones de intercesión tienen que ser motivas por la fe que tiene que ser el motor que mueva a misericordia para la salvación de otros, de esa manera Abraham intercedió por Sodoma. Génesis 18:16-33. 1) SIN ACEPCIÓN DE PERSONAS Cuando nos responsabilizamos por los problemas de una determinada comunidad o barrio y queremos traer soluciones a problemas obvios entonces es cuando descubrimos el verdadero significado de la oración de intercesión y suplica. Estamos llamados a orar por todos los hombres con gemidos y clamor delante de Dios poniéndonos en el lugar de ellos. Cuando Dios ve la sinceridad de nuestro corazón Él nos sella para que no seamos contaminados por las iniquidades de un pueblo desobediente. 1 Timoteo 2:1; Ezequiel 9:1-11. 2) EL PROPÓSITO DEL INTERCESOR La intercesión es la acción de presentar súplicas o peticiones a Dios generalmente a favor de otros. Tanto el verbo hebreo paga como el griego entygjano quieren decir “encontrarse con una persona, y esto quiere decir que tenemos que buscar su auxilio. La intercesión depende de: A) Un sentido de solidaridad entre los hombres que induce a buscar el bien del otro. B) La convicción del intercesor de que Dios puede salvar o bendecir a la persona necesitada por quien se intercede. 2 Corintios 4:13-18. 3) LA AYUDA OPORTUNA El cristiano que se mueve dentro del mundo espiritual tiene a su disposición la ayuda perfecta dada por Dios en el Espíritu Santo, puesto que Él conoce nuestras necesidades espirituales y pide con gemidos indescriptibles a favor nuestro. Romanos 8:26-27. CONCLUSIÓN Ahora nosotros formamos parte entre los grandes por la intercesión de nuestro Señor Jesucristo que literalmente tomo el lugar de nosotros como pecadores y clavó el pecado dándonos la oportunidad para que podamos experimentar el perdón por nuestros pecados. Isaías 53:12. Y no solamente tomó ese lugar sino que también después intercede para que no nos falte nada. Lucas 22:32.