13ª RESOLUCIÓN ANDALUCÍA Sobre el Plan de Ajuste a los Presupuestos de la Junta de Andalucía 2012 Es necesario hacer una primera reflexión entorno a las diferencias que existen entre el rescate a los Estados y el rescate a los bancos. Los rescates a los Estados, como los ejecutados con Grecia, Irlanda y Portugal, suponen la aceptación de ajustes y recortes que suponen el sacrificio de una población que ve mermados sus derechos y su acceso a los servicios básicos y fundamentales; por el contrario, el rescate a la banca se hace bajo la premisa de que el capital recibido formará parte de la deuda del Estado, lo cual implicará la exigencia de nuevos sacrificios a los trabajadores para el mantenimiento de una banca que ha especulado y de unos directivos que lejos de ser juzgados son premiados con indemnizaciones multimillonarias. La operación es redonda para la clase dominante pues los delincuentes económicos son indemnizados, los acreedores reciben sus cuotas en tiempo y forma, y los trabajadores asumimos el pago de una deuda absolutamente ilegítima. Estamos por lo tanto en presencia de la adopción de medidas económicas que sólo favorecen a la Oligarquía Financiera, pues los Estados están blindando el pago de sus deudas frente a los servicios más elementales de sus trabajadores. No es cierto por lo tanto que se estén practicando políticas de austeridad económica, no hay más que ver la cuantía de las indemnizaciones en Bankia, sino más bien que la Oligarquía Financiera necesita recursos para cubrir sus pérdidas por su actividad especulativa y que antes se destinaban a cubrir los Servicios Públicos. El objetivo es claro, el capital prestado a los bancos españoles desde Alemania fruto de una balanza comercial altamente positiva para ellos, debe ser devuelta por los trabajadores a través de la reducción de sus servicios y de la generación de una deuda estatal ilegítima. Es un clamor social el hecho de que la ejecución de ajustes a los trabajadores no es correspondida con ajustes a la clase dominante, que se ve beneficiada con rescates, subvenciones o amnistías fiscales. Esta semana la Unión Europea ha dictado que el Gobierno de España deberá subir el I.V.A., acelerar la elevación a 67 años la edad de jubilación e intervenir más en las medidas económicas de las autonomías. Estás medidas junto a las que se vienen practicando ya, van a suponer una mayor detracción de recursos públicos para salvar entidades financieras, unos menores ingresos del Estado y por lo tanto nuevos recortes y ajustes. A esta coyuntura social, política y económica los andaluces respondieron el pasado 25 de marzo castigando severamente a quienes hasta la fecha habían practicado estas políticas a favor de la clase dominante, PSOE y PP. La matemática electoral permitía a IULV-CA intervenir en la política de la Junta de Andalucía, pues el Gobierno de Andalucía dependía de nuestra acción. Desde un principio, se hizo mayoritaria la opción de impedir el Gobierno del PP, pues ello suponía permitir la llegada a Andalucía de las políticas más regresivas que se estaban planteando en ese momento desde el Gobierno Central, la opción de Gobierno con el PSOE fue presentada como la mejor alternativa para que IULVCA se enfrentara activamente a la política de ajustes y recortes del PP, así lo entendió la militancia que en referéndum apoyó mayoritariamente dicha opción una vez el Comité Central del P.C.A. se posicionó favorable a la entrada en el Gobierno. Apenas iniciada la andadura del Gobierno de coalición PSOE- IULVCA, los andaluces asistimos a la presentación de un Plan de Ajuste Económico que atentaba contra los derechos más básicos de los trabajadores, pues incluía entre sus propuestas bajada de salarios e implícitamente la no contratación de unos 10.000 interinos en Sanidad y Educación, lo cual tiene dos efectos: la desaparición de empleo público y la reducción de la calidad de estos servicios. Dicho Plan de Ajuste tiene el claro sello del PSOE, pues calca los planes de recorte y “austeridad” planteados cuando era el PSOE quien dirigía el Gobierno Central. Afortunadamente el conjunto de la organización supo reaccionar, e IULV-CA terminó aplazando la aprobación de dicho Plan de Ajuste para iniciar una ronda de intercambios con la sociedad. Felicitamos sin duda la adopción de dicha medida, que ha supuesto la recuperación de parte de la confianza en nosotros perdida por nuestras alianzas sociales. Tanto el P.C.E. como I.U. han teorizado que la salida de la crisis no pasa por la aplicación los recortes, este mensaje claro y nítido unido a otras propuestas ha permitido que nuestro proyecto entre en una dinámica de acumulación de fuerzas como demostraron las elecciones andaluzas y han demostrado el acercamiento de distintas organizaciones sociales y sindicales. La adopción de medidas contrarias a las que hemos venido planteando no harán sino debilitar o invertir ese proceso de acumulación, tal y como planteábamos en la reciente Conferencia Política Andaluza: “…de nada sirve gobernar o ser influyentes, si no existe fortaleza social que defienda la ejecución de nuestro programa. Y en esta fase de incremento de la intensidad de la lucha de clases, con la necesaria ocupación reivindicativa del espacio público, nuestra participación en el Parlamento de Andalucía deberá centrarse en contribuir a la fortaleza social de un Bloque Antineoliberal. […] Y uno de los criterios a tener en cuenta en nuestras deliberaciones debe ser en qué medida las decisiones que adoptamos contribuyen a modificar las relaciones de fuerza en Andalucía” Planteamos por lo tanto que la presencia de IULV-CA en el Gobierno de Andalucía debe permitir el fortalecimiento del proyecto federal y el enfrentamiento a las políticas neoliberales. No tenemos únicamente un problema enmarcado en el actual dilema del Plan de Ajuste aplazado por IULV-CA, sino cual va a ser la posición del Gobierno Andaluz ante los recortes que se nos exigirán en los próximos meses desde Madrid o Bruselas. Y en este sentido, IULV-CA no puede obviar que el recorte de 2.700 millones de euros exige un enorme sacrificio para los trabajadores andaluces, mientras observamos como el Gobierno de España tarda menos de una semana en proyectar la entrega de 23.000 millones de euros a Bankia, esto demuestra que sí es posible endeudarse. Es hora por lo tanto de que IULV-CA actúe con contundencia y coherencia frente a las políticas neoliberales y desde nuestra pertenencia al Gobierno de la Junta de Andalucía; los andaluces mostraron el 25 de marzo su oposición a la política de recortes, IULV-CA debe ser consecuente con ello sin importarle en que orilla se situará el PSOE. No entendemos por lo tanto como asumible el Plan de Ajuste por innecesario y porque atenta contra principios políticos básicos que hemos defendido. Desde el P.C.A. no aceptamos el discurso que contrapone los intereses de los trabajadores públicos frente al resto de trabajadores, haciendo residir en los salarios de los primeros la responsabilidad de que sea posible o no garantizar los Servicios Básicos de los segundos. Debe tenerse en cuenta que los funcionarios ya han sido recortados en tres ocasiones mediante, congelación de salarios, reducción del 5% en 2010 y el incremento del IRPF en febrero de 2012. Es necesario recalcar que los trabajadores andaluces necesitan hoy más servicios, y no menos, por ello es necesario también que lejos de recortar en Sanidad, la Junta de Andalucía solucione el hecho de que muchos residentes andaluces, inmigrantes, parados de larga duración, etc, están viendo como se anulan sus tarjetas sanitarias, y ante eso IULVCA debe garantizar su acceso gratuito a la Sanidad Pública. Felicitarnos por la enorme actividad de encuentros con sindicatos, reuniones de comisiones del partido, agrupaciones, grupos de trabajo, etc. El mandato del Comité Ejecutivo del 25 de mayo ha sido cumplido con creces, recogiéndose aportaciones alternativas al Plan de Ajuste en un banco de datos que a iniciativa del Grupo Parlamentario está trabajando las distintas propuestas alternativas. El Partido, una vez más, demuestra que es un agente activo en la elaboración colectiva al servicio de IULV-CA. Reiterando nuestro rechazo a un Plan de Ajuste sobre unos Presupuestos que ya rechazamos en su día, saludamos el esfuerzo que nuestro Grupo Parlamentario y su portavoz están realizando para que: Los recortes salariales no afecten a los mileuristas Rebajar la presión a los interinos. Que se establezcan cláusulas de reversibilidad en el decreto. Mayor progresividad en las cargas. Reducción capítulo I. Hacemos un llamamiento a la necesidad de reflexión colectiva desde un punto de vista estratégico. Para ello, el encuentro con la sociedad que debe suponer la Convocatoria Social del día 30 debe ir acompañado de la defensa de lo público frente a su degradación y la reflexión sobre como abordar las imposiciones que seguirán produciéndose desde Madrid y Bruselas. En este sentido y de cara a los Presupuestos de la Junta para 2013 la defensa de los servicios públicos es la lucha central. Por ello desde el PCA mostramos desde ya nuestra oposición a cualquier recorte que atente contra los derechos adquiridos por los trabajadores de la función pública o contra la calidad de los Servicios Públicos. Especialmente queremos hacer mención a la garantía de universalidad de los Servicios Públicos Sanitarios, tal y como figura en el Estatuto de Autonomía, así como atender las demandas del movimiento en defensa de la educación y la Universidad públicas en el sentido de garantizar el reforzamiento de las becas e impedir la subida de las tasas universitarias. El PCA denuncia que el diseño de los recortes por parte del gobierno central hace de las CCAA las depositarias del mayor porcentaje como expresión del ataque a lo público y los intentos de privatización de los mismos. Esto debe conllevar un proceso político de movilización entendida como empoderamiento de la ciudadanía, y ahí el Gobierno debe jugar un papel fundamental. Se trata de transparencia (poner las cartas sobre la mesa), mecanismos efectivos (fórmulas democracia participativa) y movilización (orientada hacia Madrid y lo que está pasando, con alternativa global en España). El PCA continuará cumpliendo su obligación de debatir y discutir en sus órganos la valoración política de las medidas presentes y futuras del Gobierno Andaluz para su traslado a los órganos de IULV-CA.