DETERMINACION DE CONTINGENCIA EN PATOLOGIA CEREBROVASCULAR AGUDA Mª Luisa ORTELLS RAMON, Médico Evaluador. Equipo de Valoración de Incapacidades. Dirección Provincial del INSS. Zaragoza. Mª José TAPIADOR SANJUÁN, Médico Evaluador. Jefe del Equipo de Valoración de Incapacidades. Dirección Provincial del INSS. Teruel. Carlos VÁZQUEZ ESPIÉRREZ, Médico Evaluador. Jefe Equipo de Valoración de Incapacidades. Dirección Provincial del INSS. Cáceres. 1. INTRODUCCION Contingencia es el riesgo cuya actualización origina una situación de necesidad protegible mediante prestación de la Seguridad Social. Las contingencias protegidas por la Seguridad Social contributiva se clasifican en: -Profesionales: Accidente de Trabajo y Enfermedad Profesional, ( en adelante AT y EP ). -Comunes: Enfermedad Común y Accidente No Laboral, ( en adelante EC y ANL ). En contingencias profesionales existen una serie de PARTICULARIDADES con respecto a las prestaciones, cotización, afiliación y alta. La cuantía de las prestaciones es más elevada en AT y EP ( el cálculo se realiza sobre salario día X 367, incluyendo gratificaciones, pagas y beneficios ). No se exigen periodos previos de cotización para las prestaciones ( sin embargo, en contingencias comunes, para obtener la Incapacidad Temporal se precisa una cotización previa de 6 meses, y para la Incapacidad Permanente como mínimo haber cotizado los 5 últimos años, dependiendo de la edad ). Implican un Alta de pleno derecho, aunque el empresario hubiera incumplido sus obligaciones de afiliación y alta. 2. CONCEPTO DE CONTINGENCIA PROFESIONAL 2.1 ACCIDENTE DE TRABAJO Es "toda lesión corporal que el trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que se ejecute por cuenta ajena" ( art. 115 de la Ley General de Seguridad Social ). El RD 1273/2003 amplió la cobertura de las contingencias profesionales a los trabajadores autónomos. Además tienen la consideración de AT (art. 115 de LGSS): 1 - Los que sufre el trabajador al ir o volver del lugar de trabajo (ACCIDENTE IN ITINERE). - Los que sufre el trabajador con ocasión o como consecuencia del desempeño de cargos electivos de carácter sindical, así como los ocurridos al ir o volver del lugar en el que se ejerciten las funciones propias de los cargos. - Los ocurridos con ocasión o consecuencia de las tareas que, aun siendo distintas de las de su categoría profesional, ejecute el trabajador en cumplimiento de órdenes del empresario o espontáneamente en interés del buen funcionamiento de la empresa. - Los acontecidos en actos de salvamento y en otros de naturaleza análoga, cuando unos y otros tengan conexión con el trabajo. - Las enfermedades no incluidas en el concepto de Enfermedades Profesionales, que contraiga el trabajador con motivo de la realización de su trabajo, siempre que se pruebe que la enfermedad tuvo por causa exclusiva la ejecución del mismo (ENFERMEDADES DEL TRABAJO). - Las consecuencias del accidente que resulten modificadas en su naturaleza, duración, gravedad o terminación, por enfermedades intercurrentes, que constituyan complicaciones derivadas del proceso patológico determinado por el accidente mismo, o que tengan su origen en afecciones adquiridas en el nuevo medio en que se haya situado el paciente para su curación. Se presume, salvo prueba en contrario, que son constitutivas de AT las lesiones que sufre el trabajador durante el tiempo y el lugar de trabajo. No tienen la consideración de AT: - Los debidos a fuerza mayor extraña al trabajo, entendiendo por ésta la que sea de tal naturaleza que no guarde ninguna relación con el trabajo que se ejecuta al ocurrir el accidente. No se considera fuerza mayor extraña al trabajo: la insolación, el rayo y otros fenómenos análogos de la naturaleza. - Los debidos a dolo o a imprudencia temeraria del trabajador accidentado. No impiden la calificación de AT: - La imprudencia profesional que es consecuencia del ejercicio habitual de un trabajo que se deriva de la confianza que éste inspira. - La concurrencia de culpabilidad civil o criminal del empresario, de un compañero de trabajo del accidentado, o de un tercero, salvo que no guarde relación alguna con el trabajo. Dentro del concepto de las ENFERMEDADES DEL TRABAJO es decir, aquellas no incluidas en el concepto de enfermedades profesionales que contrae el trabajador con motivo de la realización de su trabajo, hay que destacar que la Jurisprudencia está interpretando con carácter amplio el vínculo causal entre enfermedad y trabajo, considerando no sólo la actividad física sino también el medio ambiente laboral ( temperatura, humedad, etc. ) y la situación emocional a la que está sometido el trabajador ( estrés, estado emocional ). Por otra parte, la Jurisprudencia da una protección privilegiada a las ENFERMEDADES DE COMIENZO RAPIDO ( ACVA, IAM ), considerando AT a las enfermedades que se manifiesten en el lugar y tiempo de trabajo, siempre que tengan carácter súbito y violento, incluso aunque el individuo hubiera padecido con anterioridad síntomas de la misma dolencia, exigiendo 2 además que la carga de la prueba que permita romper la relación de laboralidad, debe probar lo contrario. Otro aspecto que ha contribuido a nivel jurisprudencial a flexibilizar y atenuar la exigencia de relación causal entre el trabajo realizado y las lesiones sufridas, es la PRESUNCION IURIS TANTUM: son AT, salvo prueba en contra, las lesiones que sufre el trabajador durante el tiempo y el lugar de trabajo. De este modo, se califican como AT hechos que en principio podrían no considerarse incluidos en el concepto estricto mencionado, como las enfermedades ( especialmente las de inicio agudo ) que acaecen en el lugar y en el tiempo de trabajo. La destrucción de esta presunción de laboralidad ( definida en el artículo 115.3 de la Ley General de la Seguridad Social), exige que la falta de conexión entre la lesión padecida y la actividad profesional del trabajador sea total. La Jurisprudencia actual mantiene el nexo causal incluso cuando existen antecedentes médicos, clínica previa o factores de riesgo, argumentando en la mayoría de las sentencias que dichos antecedentes no impedían al trabajador desempeñar sus tareas y, por otra parte, que la lesión/enfermedad sobrevino realizando su trabajo. 2.2 ENFERMEDAD PROFESIONAL Es la contraída a consecuencia del trabajo ejecutado por cuenta ajena, en las actividades que se especifican en el cuadro actualmente en vigor ( RD 1299/2006 de 10 de noviembre) y las disposiciones de aplicación y desarrollo de esta la Ley General de Seguridad Social y que esté provocada por la acción de los elementos y sustancias que en dicho cuadro se indican para cada enfermedad profesional. En el cuadro actual de EP se incluyen los siguientes grupos: Grupo 1: EP causadas por agentes químicos. Grupo 2: EP causadas por agentes físicos. Grupo 3: EP causadas por agentes biológicos. Grupo 4: EP causadas por inhalación de sustancias y agentes no comprendidos en otros apartados. Grupo 5: EP de la piel causadas por sustancias y agentes no comprendidos en alguno de los otros apartados. Grupo 6: EP causadas por agentes carcinógenos. 3. LEGISLACION 3.1 NORMAS QUE RIGEN LOS ACCIDENTES DE TRABAJO - ORDEN 16 de diciembre de 1987: por la que se establecen nuevos modelos para la notificación de AT y se dan instrucciones para su cumplimentación y tramitación. - ORDEN 11 de mayo de 1988: por la que se modifica la del 5 de abril de 1974 que aprueba el Baremo de lesiones, mutilaciones y deformaciones de carácter definitivo y no invalidantes por AT y EP, así como las indemnizaciones correspondientes. - ORDEN 16 de enero de 1991: por la que se modifica la del 5 de abril de 1974 que aprueba el Baremo de lesiones, mutilaciones y deformaciones de carácter definitivo y no invalidantes por AT y EP, así como las indemnizaciones correspondientes. 3 - RD Legislativo 1/1994, de 20 de junio: aprueba el texto refundido de la Seguridad Social. En su artículo 115 se definen los AT. - RESOLUCION 4 de febrero de 2004 del INSS: sobre cumplimiento por los trabajadores por cuenta propia de la obligación establecida en el párrafo 2º del artículo 12 del RD 1273/2003, de 10 de octubre, sobre cobertura de las contingencias profesionales de los trabajadores por cuenta propia o autónomos, y la ampliación de la prestación por Incapacidad Temporal para los trabajadores por cuenta propia. La obligación consiste en la declaración de actividad, indicando en ella la persona que gestiona el establecimiento o bien el cese temporal o definitivo de la actividad. - ORDEN TAS/ 1040/ 2005, de 18 de abril: por la que se actualizan las cantidades a tanto alzado de la indemnizaciones por lesiones, mutilaciones y deformidades de carácter definitivo y no invalidantes. 3.2 NORMAS QUE RIGEN LAS ENFERMEDADES PROFESIONALES - DECRETO 792/1961, de 13 de abril: organiza el aseguramiento de las enfermedades profesionales de grandes inválidos y huérfanos de fallecidos por AT y EP. - ORDEN 9 de mayo de 1962: por la que se aprueba el reglamento del Decreto anterior. - ORDEN 12 de enero de 1963: por la que se aprueban las normas reglamentarias de carácter médico, por las que se han de regir los reconocimientos, diagnósticos y calificación de las EP. - ORDEN 15 de diciembre de 1965: por la que se aprueban las normas médicas reglamentarias por las que han de regirse los reconocimientos, diagnósticos y calificación de las EP. - DECRETO 3772/1972, de 23 de diciembre: en el anexo aprueba el Reglamento General del régimen especial agrario de la Seguridad Social, y asimismo, aprueba el listado de EP de ese régimen. - RESOLUCION de 6 de marzo de 1973 de la Dirección General de la SS: por la que se aprueba el modelo oficial de parte de EP. - RD 1995/1978, de 12 de mayo: por el que se aprueba el cuadro de EP en el sistema de la Seguridad Social. - RD 2821/1981 de 27 de noviembre, artículo único: por el que se modifica el párrafo 4º, punto 3º del apartado d del RD 1995/1978, incorporando a las profesiones de riesgo para la infección por carbunco, además de la manipulación, carga y descarga de productos de origen animal, el transporte de mercancías. - RESOLUCION de 30 de diciembre de 1993 de la Secretaría General de la Seguridad Social: por la que se considera como EP, la detectada en las industrias del sector de aerografía textil de la Comunidad valenciana (Síndrome de Ardystill o Neumopatía intersticial difusa). - RD Legislativo 1/1994 de 20 de junio: aprueba el texto refundido de la Seguridad Social. En su artículo 116 se definen las EP. - RECOMENDACION de 19 de septiembre de 2003 de la Comisión de las Comunidades Europeas, relativo a la lista europea de EP: hace diversas recomendaciones con respecto a las EP, entre otras, y sin perjuicio de las disposiciones nacionales legislativas o reglamentarias, recomienda la inclusión en el concepto de EP de aquellas patologías cuyo origen profesional ha sido reconocido científicamente (por ejemplo el STC o la bursitis de hombro); destaca el papel de los Sistemas Nacionales de 4 Salud en la prevención de las EP, en particular mediante la sensibilización del personal sanitario para mejorar el conocimiento y el diagnóstico de dichas enfermedades. - RD 1299/2006 de 10 de noviembre, por el que se aprueba el nuevo cuadro de Enfermedades Profesionales del sistema de la Seguridad Social y se establecen criterios para su notificación y registro. Las principales novedades son las siguientes: 1º) Se adecua la nueva lista de EP a la realidad productiva actual, considerando nuevas sustancias que pueden producir EP y ampliando las tareas susceptibles de producir dichas EP. 2º) Se mantiene el esquema general de los grupos de EP de 1978 si bien: *Se introduce un grupo específico para el cáncer de origen laboral. *El grupo de agentes químicos se estructura agrupándolos según su naturaleza, por familias químicas. *Las producidas por agentes físicos incluyen nuevas patologías como: las provocadas por movimientos repetitivos y posturas forzadas ( epicondilitis, patología tendinosa crónica del manguito de los rotadores, etc.), las originadas por esfuerzo mantenido de la voz ( nódulos de cuerdas vocales ), las enfermedades oftalmológicas por exposición a radiaciones ultravioletas, las provocadas por la acción local del frío y las originadas por vibraciones de transmisión vertical. *Los agentes biológicos se detallan más que en la lista de 1978, incorporando enfermedades producidas por agentes bacterianos, virales, parásitos, hongos y priones. *En los grupos de EP respiratorias y dermatológicas se incluyen dos subgrupos relacionados con la exposición a sustancias de bajo y alto peso molecular como el Síndrome de disfunción reactiva de vía aérea, fibrosis intersticial difusa, fiebre de los metales etc. Se incluyen las alteraciones fibrosantes de pleura o pericardio por exposición al amianto. 3º) Se aprueba el Cuadro de Enfermedades profesionales (anexo I) y asimismo, una lista complementaria (anexo II) de enfermedades cuyo origen laboral se sospecha (por ejemplo, carcinoma de laringe producido por la inhalación de polvo de amianto). 4º) Se establece, por último, el mecanismo de modificación del cuadro de EP por parte del Ministerio de Trabajo, con el informe previo del Ministerio de Salud y la Comisión Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo. - ORDEN TAS/1/2007 de 2 de enero: se establece el modelo de parte de enfermedad profesional y se dictan normas para su elaboración. 5 4. PROCEDIMIENTO PARA LA DETERMINACION DEL CARÁCTER COMUN O PROFESIONAL Es competencia del EVI de cada Dirección Provincial del INSS, la determinación del carácter común o profesional de las enfermedades o lesiones que originan una situación de Incapacidad Temporal, Incapacidad Permanente o muerte del trabajador. El procedimiento es el siguiente: 1º) INICIACION: puede ser de oficio ( a iniciativa del INSS, de Inspección de Trabajo o a petición del Servicio Público de Salud ), a instancias de la Mutua o Empresa colaboradora, o a solicitud del trabajador. 2º) INSTRUCCION: la Dirección Provincial del INSS realizará todas aquellas actuaciones que considere necesarias para la determinación, conocimiento y comprobación de los datos, en virtud de los cuales deberá dictar una Resolución. En primer lugar el Médico Evaluador procederá a analizar toda la documentación que figura en el expediente, realizará el reconocimiento médico del trabajador y solicitará los informes y/o pruebas complementarias que estime oportuno, emitiendo finalmente un Informe médico sobre la contingencia. El Equipo de valoración de Incapacidades emitirá, en base a dicho informe y a la documentación del expediente, un Dictamen Propuesta donde constará la identificación del trabajador, profesión, fecha de inicio de la baja, juicio diagnóstico y contingencia determinante de dicho proceso de incapacidad temporal. El Director provincial del INSS dictará Resolución Expresa al respecto, siendo la fecha de efectos la del hecho causante origen de la baja médica. La resolución será comunicada al beneficiario de la prestación y al resto de partes implicadas ( Mutua, empresa, etc.), siendo además inmediatamente ejecutiva. 3º) RECLAMACION PREVIA: habrá un plazo de 30 días (posteriores a la fecha de notificación de la resolución), en el que las partes implicadas puedan interponer una reclamación previa a la vía judicial. 5. CONTINGENCIA AGUDA EN PATOLOGIA CEREBROVASCULAR 5.1 DEMOSTRACION DEL ORIGEN LABORAL O COMUN DE LA PATOLOGIA ACONTECIDA EN EL TRABAJO El artículo 115.3 de la Ley General de la Seguridad Social afirma que son Accidente de Trabajo, salvo prueba en contra, las lesiones que sufre el trabajador durante el tiempo y el lugar de trabajo. En esta definición se establece la PRESUNCION IURIS TANTUM o presunción de laboralidad, que ha contribuido de manera decisiva a nivel jurisprudencial a flexibilizar la exigencia de relación causal entre el trabajo realizado y las lesiones sufridas. En el concepto de Lesión se incluyen tanto las lesiones producidas por la acción súbita y violenta de un agente exterior en el trabajo, como las enfermedades que surjan en el trabajo. Es en este último grupo donde existe mayor litigiosidad y por lo tanto mayor jurisprudencia. 6 Debemos destacar la DOCTRINA DEL TRIBUNAL SUPREMO, plasmada en su sentencia del 28 de septiembre de 2003, en la que se afirma que en el término de lesión se incluyen las enfermedades de súbita aparición como IAM (sentencias de 2712-95, 15-2-96, 18-10-96, 27-2-97, 23-1-98), angor (sentencias del 18-6-97, 14-7-97), ACV (4-5-98), y la razón es que no es descartable la influencia de factores laborales. En este mismo sentido se pronuncia la sentencia del Tribunal Supremo del 30-1-04. La PRESUNCION DE LABORALIDAD sólo puede romperse cuando se demuestre la absoluta falta de relación entre el trabajo del individuo, con todos los matices físicos y psíquicos que lo rodean, y la enfermedad. Además tal presunción no se desvirtúa por el simple hecho de haber padecido patología coronaria o cerebrovascular previa, ni por existir factores de riesgo vascular. En definitiva, en estos casos no es necesario demostrar el origen laboral de la enfermedad que acontece en el tiempo y en el lugar de trabajo, sino que para destruir el nexo causal deberá demostrarse la ausencia total de relación entre ambos. 5.2 CONSIDERACION DE LA PATOLOGIA CORONARIA AGUDA COMO ACCIDENTE DE TRABAJO La Sentencia de la sala IV del Tribunal Supremo, del 4-11-1988, contempla el caso de un administrativo que encontrándose en su puesto de trabajo habitual se sintió mal y acompañado por un compañero abandonó el lugar de trabajo y fue a su domicilio donde falleció unas horas más tarde. Se acredita que la causa de la muerte fue un IAM y se concluye que la contingencia es Accidente de Trabajo. Dicha Doctrina ha sido reiterada en UNIFICACION DE DOCTRINA por muchas otras Sentencias, que en síntesis establecen: 1º) La presunción de laboralidad contemplada en la Ley General de la Seguridad Social se aplica a los accidentes y también a las enfermedades que se manifiestan durante el trabajo, como la patología coronaria aguda. 2º) Para excluir dicha presunción debe existir prueba en contrario que evidencie de forma inequívoca la ruptura de relación entre el trabajo y la enfermedad. Se precisa, a estos efectos, que en principio no es descartable la posible influencia de los factores laborales en el desarrollo de una crisis cardiaca. Además no se destruye la presunción de laboralidad porque el trabajador tuviera antecedentes de tipo cardiaco o coronario. (STS 23-1-98). 5.3 CONSIDERACION DE LA PATOLOGIA CEREBROVASCULAR AGUDA COMO ACCIDENTE DE TRABAJO La jurisprudencia incluye en el término LESION, determinadas enfermedades cardiacas o cerebrales de súbita aparición, surgidas en el puesto de trabajo ( STS de 1995, 1996, 1997, 1998, 2000, 2004 ) y para la destrucción de la presunción de laboralidad, la jurisprudencia exige que la falta de conexión entre la lesión padecida y la actividad profesional sea total. Estas enfermedades siguen considerándose Accidente de Trabajo incluso aunque se considere que la actividad laboral ha actuado únicamente como factor coadyuvante o desencadenante, siempre y cuando su inicio coincida con el desempeño de sus quehaceres profesionales y en el lugar de trabajo. 7 Por el contrario, cuando el ACV acontece en el trayecto habitual al trabajo y no en el propio lugar de trabajo, que en principio podría encuadrarse en el concepto de Accidente in Itínere, no resulta aplicable la presunción de laboralidad. En este sentido, la Sentencia del Tribunal Superior de justicia de Asturias del 13-10-06, establece que para catalogar el ACV acontecido en el trayecto habitual del trabajo al domicilio, como Accidente in Itínere, es indispensable que se acredite su conexión con el trabajo. La sentencia de la sala IV del Tribunal Supremo del 20-6-04, indica que la asimilación a Accidente de Trabajo de aquél, ocurrido in itínere, se limita a las lesiones súbitas y violentas producidas por un agente externo y no a las dolencias o procesos morbosos de otra etiología. Para que estas enfermedades acontecidas en el trayecto al trabajo sean consideradas Accidente de Trabajo, debe quedar acreditada la existencia de relación causal con el trabajo. 5.4 CLASIFICACION ETIOLOGICA CEREBROVASCULAR AGUDA DE LA PATOLOGIA La patología cerebrovascular puede ser de origen arterial (isquémica o hemorrágica) o venosa. La PATOLOGIA CEREBROVASCULAR ARTERIAL ISQUEMICA es la alteración focal o global del encéfalo secundaria a un trastorno cualitativo o cuantitativo del aporte circulatorio. Podemos distinguir entre AIT (el déficit neurológico es de breve duración y con recuperación completa en las siguientes 24 horas al inicio de la focalidad) y los INFARTOS CEREBRALES (el déficit neurológico dura más de 24 horas y es secundario a la necrosis tisular establecida). Los SUBTIPOS ETIOLOGICOS DE INFARTO CEREBRAL son los siguientes: 1- INFARTO ATEROTROMBOTICO O ARTERIOESCLEROSIS DE GRANDES VASOS Producido por la oclusión o estenosis de la pared de las grandes arterias intra o extracraneales supra-aórticas, debido a trombosis, a embolismo arterio-arterial o a trastornos hemodinámicos. Suele ser un infarto de tamaño mediano o grande, de topografía cortical o subcortical, carotídea o vertebrobasilar. Para su diagnóstico es imprescindible la existencia de ateroesclerosis generalizada ( coexistencia de cardiopatía isquémica y/o vascular periférica ) o la demostración de oclusión o estenosis de arterias cerebrales ( mayor del 50% o menor del 50% pero con dos o más factores de riesgo vascular ) correlacionables con la clínica del paciente. Sugieren este diagnóstico la existencia de soplo cervical, AIT previos ipsilaterales, comienzo progresivo o intermitente, comienzo al despertar, historia de cardiopatía isquémica o claudicación intermitente, ausencia de componente hemorrágico en TAC craneal, y localización en territorios limítrofes. 2- INFARTO LACUNAR O ENFERMEDAD ARTERIAL DE PEQUEÑO VASO Producido por microangiopatía hipertensiva y/o diabética, aunque existen otras causas potenciales como: embolismo arterio-arterial, mecanismo hemodinámico, 8 embolismo cardiaco, arteritis infecciosa, etc. Son infartos de pequeño tamaño ( inferior a 15 mm de diámetro ), localizados en territorio de distribución de arteriolas perforantes cerebrales. Ocasionan clínicamente un síndrome lacunar ( hemiparesia motora pura, síndrome sensitivo puro, síndrome sensitivo-motor, hemiparesia atáxica y disartria mano torpe ) en pacientes con HTA y otros factores de riesgo vascular. 3- INFARTO CARDIOEMBOLICO Producido por embolismo cardiogénico. Es de tamaño medio o grande, de localización generalmente cortical, con inicio frecuente de la sintomatología en vigilia, de instauración instantánea (minutos) o aguda (horas), generalmente con el máximo déficit al inicio de la enfermedad. Es imprescindible para su diagnóstico que exista una cardiopatía embolígena demostrada y la ausencia de oclusión o estenosis arterial significativa. Sugieren este diagnóstico: comienzo brusco, aparición en vigilia, crisis epilépticas, pérdida de conciencia al inicio, antecedente de embolismos sistémicos, antecedentes de AIT o infartos en distintos territorios cerebrovasculares, infarto cortical, infarto hemorrágico y la presencia de cardiopatía embolígena. 4- INFARTO DE CAUSA INHABITUAL Suele estar producido por una arteriopatía diferente de la arterioesclerótica ( displasia fibromuscular, ectasia arterial, S. de moya-moya, S. de Sneddon, disección arterial etc.) o por una enfermedad sistémica ( conectivopatía, infección, neoplasia, S. mieloproliferativo, metabolopatía, trastorno de la coagulación ). Son infartos de tamaño pequeño, medio o grande, cortical, subcortical, carotídeo o vertebrobasilar, en paciente sin factores de riesgo vascular, en el que se ha descartado el origen cardioembólico, lacunar o aterotrombótico. 5- INFARTO DE ETIOLOGIA INDETERMINADA Son infartos de tamaño medio o grande, corticales o subcorticales, de territorio carotídeo o vertebrobasilar. Se diferencian los siguientes subtipos: - Por coexistencia de 2 o más etiologías potenciales. - Por causa desconocida o criptogénico. - Por estudio incompleto. La PATOLOGIA CEREBROVASCULAR HEMORRAGICA es la originada por la extravasación de sangre en la cavidad craneal, por diversos mecanismos, tras la rotura de un vaso sanguíneo arterial o venoso. Excluimos las hemorragias derivadas de Traumatismo Cráneo Encefálico ( hematoma subdural y epidural ). Los distintos tipos son: HEMORRAGIA INTRAPARENQUIMATOSA, HEMORRAGIA INTRAVENTRICULAR Y HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA. La causa más frecuente de HEMORRAGIA CEREBRAL INTRAPARENQUIMATOSA es la HTA, seguida de la angiopatía amiloide ( propia de ancianos ), malformaciones vasculares, tóxicos, enfermedades hematológicas, vasculopatías cerebrales, tumores etc. Puede tener distintas localizaciones: Hematoma profundo subcortical, en ganglios de la base y tálamo, cuyo principal factor de riesgo 9 es la HTA. Hematoma lobar, cortical o subcortical, de etiología más variada a la de las hemorragias profundas, siendo las causas más frecuentes: malformaciones vasculares, tumores, discrasias sanguíneas, yatrogenia con anticoagulantes, angiopatía amiloide ( en ancianos con deterioro cognitivo previo ). Hematoma cerebeloso ( siendo la etiología hipertensiva la más común ) y Hematoma de tronco cerebral. La HEMORRAGIA INTRAVENTRICULAR puede ser primaria cuando la sangre está en el interior de las paredes ventriculares sin evidencia de lesión parenquimatosa, o secundaria cuando se debe a la extensión de sangre procedente del parénquima, sobre todo en hematomas hipertensivos de ganglios de la base o tálamo. En las primarias la etiología suele ser la rotura de una pequeña malformación arteriovenosa o la HTA. La HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA primaria se debe a la extravasación de sangre directamente en el espacio subaracnoideo, la secundaria cuando la sangre procede del parénquima o del sistema ventricular. La causa más frecuente de la primaria es la rotura de un aneurisma. La PATOLOGIA CEREBROVASCULAR VENOSA está originada por la oclusión de venas y senos venosos tanto corticales como subcorticales, que pueden dar lugar a defectos neurológicos focales. En la etiología de la trombosis venosa se incluyen: patología infecciosa, malnutrición, deshidratación, trastornos hematológicos ( policitemia, coagulopatías ), síndromes paraneoplásicos y patología cardiaca. 5.5 DEMOSTRACION DEL NEXO CAUSAL En el concepto de Accidente de Trabajo se incluye como elemento definitorio la CAUSALIDAD: "toda lesión corporal que el trabajador sufre con ocasión o por consecuencia del trabajo", es decir, el trabajo es la causa que produce la lesión. La causalidad se determina teniendo en cuenta tres criterios: cronológico, topográfico y etiológico: -Cronológico: el accidente debe acontecer en la jornada laboral. -Topográfico: el accidente debe producirse en el lugar de trabajo. -Etiológico: la lesión debe tener su causa, de alguna manera, en el trabajo. La gran DIFICULTAD en el caso de las enfermedades en principio comunes ( como la patología cerebrovascular aguda ) que acontecen en el lugar y tiempo del trabajo, es determinar la influencia de la actividad laboral en su desarrollo. Con respecto a los ACV, desde un punto de vista patogénico, sabemos que la actividad laboral puede influir por horarios, estilo de vida, sobrecarga psíquica, etc., en el desarrollo de factores de riesgo vascular ( HTA, DM, dislipemia, etc.) que favorecen el desarrollo de arterioesclerosis; sin embargo es imposible demostrar que tengan por causa exclusiva la ejecución de un determinado trabajo, y por tanto no podría incluirse en el concepto de ENFERMEDAD DEL TRABAJO. Por el contrario, sí podrían encuadrarse como Accidente de Trabajo en la definición de: "lesión que sufre el trabajador durante el tiempo y lugar de trabajo", ya que, como hemos dicho a lo largo del desarrollo de este tema, lesión ha sido definida jurisprudencialmente como cualquier menoscabo físico o fisiológico que incida en el desarrollo funcional del individuo y, además, salvo prueba en contrario, se reconoce la presunción de laboralidad. 10 Desde un PUNTO DE VISTA PATOGENICO, la isquemia cerebral está producida por la disminución del flujo cerebral, originada a su vez por la alteración en el equilibrio de múltiples factores hemodinámicos; dicho trastorno del flujo cerebral producirá una serie de alteraciones metabólicas y bioquímicas que concluirán en la necrosis celular; en la hemorragia cerebral hay una extravasación de sangre en la cavidad craneal que se produce por diversos mecanismos, tras la rotura de un vaso sanguíneo arterial o venoso. Hay que resaltar que la vasomotricidad cerebral es diferente funcionalmente de la de otras arterias de nuestro organismo, ya que son relativamente independientes de las influencias exteriores, de los factores psíquicos, de las emociones y de las variaciones de la circulación en general. El sistema simpático protege el flujo circulatorio frente a las modificaciones bruscas de la tensión arterial sistémica, sobre todo ante los incrementos rápidos de la presión arterial media. La autorregulación descrita se pierde en el cerebro isquémico y entonces la perfusión cerebral sí depende pasivamente de la TA sistémica. Las características de la vasomotricidad cerebral hacen más complicado entender el papel real de la actividad laboral en los ACV, aunque sí existen patologías en las que la actividad realizada en el trabajo sí puede determinar finalmente la aparición de la lesión, como en el caso de una Hemorragia Subaracnoidea producida por rotura aneurismática y relacionada con la realización de un ejercicio físico violento. En definitiva, aunque desde un punto de vista patogénico no pueda establecerse una relación de causalidad entre la mayoría de ACV y el trabajo, en la actualidad se consideran Accidente de Trabajo las enfermedades de súbita aparición ( como IAM, angor o ACV ) que acontecen en el lugar y tiempo de trabajo y la razón argumentada por la jurisprudencia es la presunción de laboralidad y el no poder descartar la influencia de factores laborales. 11