DOMINGO 23 DE FEBRERO DE 2014 GALICIA 15 EL CORREO GALLEGO Los tributos vinculados a las herencias { ANÁLISIS } Alicia Lorenzo Los impuestos son uno de los principales quebraderos de cabeza que acompañan a las herencias, especialmente si son cuantiosas. Una correcta planificación de estas situaciones con base en la legislación vigente puede ahorrar problemas en el futuro. Una cuestión habitual a realizar en el ámbito de las herencias, no sólo por su trasfondo fiscal, sino con el fin de evitar problemas futuros en el reparto entre los herederos, es hacer un programa de donaciones en vida, de modo que el patrimonio vaya pasando a los beneficiarios con carácter previo a un eventual fallecimiento. La diferente tributación entre una y otra figura jurídica de transmisión lucrativa, la herencia o la donación, no es baladí. Si bien es cierto que generalmente la segunda goza de unos tipos de gravamen más reducidos en el ámbito del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones (ISD), en las donaciones hemos de tomar en consideración una posible plusvalía generada en el ámbito del IRPF, así como tener en cuenta, en el caso de que haya bienes inmuebles, el abono de la Plusvalía Municipal sin la aplicación de las bonificaciones aplicables en las herencias. No obstante, la legislación civil gallega prevé determinados pactos sucesorios (apartación o mejora) en virtud de los cuales es posible “adelantar” en vida bienes pertenecientes a la herencia del futuro causante. Acogiéndose a alguna de estas modalidades de pactos sucesorios, el adquirente-“heredero”- tributará en el ISD dentro de la modalidad de “Sucesión”, como si el transmitente hubiese ya fallecido, porque así lo establece expresamente la propia Ley. Y siendo esto así, ¿existe algún ahorro frente a la figura de la donación?, ¿se tributa igualmente en el IRPF? Si bien hasta ahora la Administración tributaria parece no tener dudas al hacer tributar al transmitente por la plusvalía generada en el ámbito de su IRPF, lo cierto es que el TSJ de Galicia en todos sus pronunciamientos recientes (de hecho, ha anulado la única sentencia discrepante a estos efectos), ha resuelto definitivamente la cuestión, al entender que nos hallamos ante una figura cuya naturaleza jurídica no es otra que la de una adquisición mortis causa, trasladando esa conclusión a todo el sistema impositivo. Esto es, si en el ISD esta operación es tratada como mortis causa, es incoherente pensar que el IRPF es ajeno a esta configuración, y en igual sentido sucedería con el tributo local de la Plusvalía Municipal. En definitiva, bajo la configuración de estos pactos de mejora las consecuencias fiscales serían las siguientes: (i) en el ISD el negocio traslativo sería tratado como una adquisición mortis causa a la que resultarían aplicables las reglas de las “Sucesiones”, esto es, tipos de gravamen, reducciones, bonificaciones, etc; (ii) en el ámbito del IRPF del transmitente se produciría la no sujeción de la ganancia o pérdida patrimonial puesta de manifiesto en el pacto sucesorio; y (iii), por último, si bien estaría sujeta la transmisión, en su caso, a la “Plusvalía Municipal”, serían aplicables las bonificaciones previstas a estos efectos en las trasmisiones por causa de muerte (que en muchos casos ascienden al 95% del importe de la cuota del Impuesto). Por todos estos motivos, y tomando en consideración la doctrina jurisprudencial en esta materia, esta figura jurídica gallega puede resultar en numerosas ocasiones la más adecuada para transmitir en vida a los descendientes bienes concretos con un tratamiento fiscal generalmente más favorable que la donación. Si bien estamos ante el riesgo de que la Administración tributaria liquide la ganancia patrimonial surgida en la transmisión, lo cierto es que esta circunstancia en ningún caso, dada la posición jurisprudencial mantenida, podría dar lugar, en nuestra opinión, a la imposición de una sanción tributaria. Asimismo, la posición jurisprudencial posibilita el recurrir con ciertas garantías determinados procedimientos en curso no firmes. En definitiva, ya va siendo hora de que la Administración modifique su criterio para adaptarse a estos pronunciamientos jurisprudenciales en aras de la seguridad jurídica de los contribuyentes. La autora es socia de Omega de Economía, S.L. Divididos por las comisiones consumidores y comercios Santiago. La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) lidera en España la oposición contra el límite que quiere establecer Europa a las comisiones interbancarias de los pagos con tarjetas de crédito y débito, que enfrenta a empresas de medios de pago yconsumidores con los grandes comercios. El Parlamento Europeo mantuvo el jueves en el 0,3% el tope propuesto por la Comisión para transacciones con tarjetas de crédito, mientras para las de débito se impuso un 0,2 % o un máximo de 7 céntimos, la que sea más baja. Adicae considera que estos topes, que entrarán en vigor previsiblemente en 2016, no beneficiarán a los consumidores ni a los pequeños comerciantes, que son los que sufrirían subidas de comisiones, en tanto que favorecerá al gran comercio y a la banca. efe