abril 2011 [email protected] www.lanaranjadeprensa.com.ar El pliego de reclamos y el acuerdo deben ser aprobados por asamblea ¿QUE PARITARIAS NECESITAMOS? Después de más de 25 años, la conducción de la UTPBA decidió convocar a paritarias para discutir los salarios de los trabajadores de prensa. La pelea histórica de La Naranja junto a las demás agrupaciones de la oposición y los delegados y activistas independientes, que tuvo su pico más alto el año pasado, con la denuncia que realizó nuestra agrupación de que Prensa era el único gremio en todo el país que no tenía paritarias, fue tomada por todos los trabajadores del gremio, y obligó a la anquilosada conducción a acomodar el cuerpo y realizar este llamamiento. Nunca lo había hecho desde que asumió la conducción del sindicato, en 1985. Durante todo este período, la discusión se ha dado empresa por empresa, y esto sólo en aquellas que cuentan con comisión interna o delegados. En las restantes, las patronales dan el aumento que quieren y cuando quieren. Clarín, la principal empresa del gremio, hace años que está en esta situación. La convocatoria de la conducción de la UTPBA llega en un momento en el cual muchas de las empresas organizadas del gremio ya han firmado o están en proceso de firmar sus respectivos acuerdos salariales. Esto, obviamente, resta fuerza a la pelea en la paritaria y frente a la segura resistencia de las cámaras patronales a nuestros reclamos. La paritaria está concebida como un trámite, al mejor estilo burocrático, y no como un proceso de lucha de los trabajadores de prensa, como si se tratara de sentarse alegremente con los Magneto, los Fontevechia y los Saguier y sin pelea alguna los reclamos van a ser concedidos. El llamado a paritarias de la Utpba llega, a su vez, después de seis años ininterrumpidos de concurrencia masiva de los sindicatos a negociar aumentos de salarios, en un cuadro de reactivación económica, creciente inflación y grandes sumas aportadas por el Estado en subsidios a las patronales y proteccionismo industrial. Coincide, sin embargo, con un momento crítico de ese proceso paritario general, quizá la conquista más importante del movimiento obrero argentino tras la debacle de 2001. Las burocracias encabezadas por Moyano aparecen en 2011 dispuestas a cualquier entregada, como moneda de cambio para que se suspendan o frenen los procesos judiciales que las acorralan por sus negociados, el tema de los medicamentos truchos o la situación de quebranto de las obras sociales que dirigen como un negocio personal. Moyano firmó para Camioneros una paritaria a la baja, por un 24% en cuotas (o sea, un 17% en el promedio del año). Luego aceptó una suba del mínimo no imponible de Ganancias de apenas el 20%, que hará que sectores enteros de trabajadores (incluidos camioneros) paguen más este año que en el 2010. La burocracia de la Unión Ferroviaria, con una cúpula entera presa y procesada por el crimen de Mariano Ferreyra, simuló por un tiempo que reclamaba un 35% de aumento, pero lo acaba de sacrificar por uno del 24%. Las burocracias son una amenaza para las paritarias mismas. La conducción de la Utpba no les va en zaga: está involucrada en la causa de los medicamentos truchos, la Obra Social está quebrada y vaciada, el camping de Moreno se encentra en ruinas y debieron abandonar la sede de Alsina por no poder afrontar el alquiler, entre otros aspectos graves que muestran al desastre al que llevaron a nuestro gremio. ¿Cuáles básicos? Sin mandato de nadie, la Utpba ha salido a proponer un mínimo de $4100. Como ni en los afiches ni en los volantes se hace ninguna aclaración debemos asumir que es “bruto”, es decir que en mano suponen $3500. Como el comienzo de la paritaria estaría previsto para junio, es lícito prever que esa cifra se pretende que rija hasta la mitad de 2012. ¡¡Pero hoy mismo la canasta familiar ronda los $5000 !! Tenemos que reclamar 5000 de mínimo en mano y que no se firme nada por más de seis meses. La Utpba reclama un 35% de aumento, pero “aplicado a los básicos de convenio”. Pero hablar de “básicos de convenio” es una estafa. Simplemente porque no existen, ya que no hubo paritarias en los últimos 25 años, es decir que no fueron objeto de una actualización regular, pautada en una negociación colectiva. Las empresas, atentas a esto, dibujan en los recibos de sueldo “básicos” irrisorios y cargan el restante ingreso del trabajador en a “cuenta de sigue en página 2>>> LAS PARITARIAS, LA NARANJA Y LA OPOSICION El año pasado, un afiche inundó la ciudad de Buenos Aires. Decía “La Utpba, el único sindicato del país que no convoca a paritarias”. Llevaba la firma de La Naranja de Prensa y planteaba, entre otras cosas, “paritarias ya, 30% de aumento, paritarios electos de Asamblea”. Cuarenta delegados, de por lo menos 20 de las empresas más importantes del gremio, nos movilizamos también en 2010 para reclamarle a la conducción que nuestro gremio debía superar la atomización que supone discutir los salarios empresa por empresa. Entre otras acciones, en- viamos una carta a la Directiva, de la que no obtuvimos ninguna respuesta formal, excepto el grito histérico de “Elitistas, Elitistas”, proferido por decenas de afiliados truchos y ñoquis en la fraudulenta Asamblea de Junta Electoral del año pasado. El planteo de “paritarias ya” en el gremio de prensa fue, además, una de las principales consignas que convocaron al masivo acto del 7 de junio de 2010, realizado en Crítica, con 800 compañeros. Estuvo también en el centro del programa común acordado por el Frente de Unidad de las agrupaciones opositoras del gremio, que en las últimas elecciones ganó con el 56% de los votos en las empresas periodísticas de Capital y conquistó su ingreso a la Directiva por la minoría, no reconocida por la burocracia que dirige el sindicato. ¿QUE PARITARIAS NECESITAMOS? El llamado a una paritaria general sigue estando ausente, porque se mantiene la idea de segmentar la discusión salarial en radio, televisión, empresas chicas y diarios, negando una acción de conjunto de todo el gremio. convenio” u otros inventos, para deprimir preventivamente el básico. Otras toman como “básico” el “acuerdo Utpba – AAER, propagandizado por la burocracia como una “paritaria para empresas chicas”, de menos de 30 trabajadores. Pero acá no hay ninguna paritaria, es apenas un trámite administrativo, sin lucha ni negociación, completamente clandestino, con salarios de referencia para cada categoría, que están al límite de la subsistencia: el salario para el redactor está en 2.500 pesos en mano para el período enero/ marzo 2011, y el del subdirector periodístico, en ¡4000!. La famosa “planilla salarial prensa escrita CCT 301/75” es en muchos casos reclamada por las propias patronales para tener una orientación sobre cuánto pagar, no pasarse de rosca en la imposición de salarios de hambre y ahorrarse así juicios posteriores. Reclamemos que el 35% se aplique sobre el ingreso real de todos los trabajadores y no sobre ítems que son tanto una miseria como un dibujo. La Utpba plantea extender el mentado 35% para los colaboradores, pero no fija un mínimo por colaboración ni plantean parámetro alguno para medirlo, cuando la dispersión es enorme y cuando en la mayoría de las empresas se pagan miserias. Hay que plantear, además, un mínimo de 600 pesos por colaboración, con cláusulas gatillo para actualizarlas al compás de los aumentos del personal de planta. Necesitamos una paritaria única para todo el gremio. >>>viene de tapa Podemos imponer nuestros reclamos con la movilización, la lucha y la huelga. La Directiva que no se ha preocupado por nuestros salarios, está cuestionada para dirigir la paritaria. Por paritarios electos por la base en asambleas de empresa. Extensión a todo el gremio de la conquista de Editorial Perfil y el diario BAE, donde la Guardería se paga hasta los cuatro años del niño Extensión a todo el gremio de la conquista de Tiempo Argentino, donde la patronal absorbe el 50% del aporte de Ganancias que corresponda a cada trabajador tras la aplicación del siguiente aumento. Eliminación de todas las sumas no remunerativas, con las cargas sociales a cargo de las empresas. Que de allí surja el pliego de reclamos. Recuperación para todos del 7 de junio como nuestro feriado gremial Que el acuerdo sea sometido para su aprobación a asambleas por lugar de trabajo y a una asamblea general. Extender a todo el gremio el pago doble, al 200%, de francos y feriados trabajados, con opción, a decisión del trabajador, de doble franco compensatorio. Por un 35% de aumento, aplicado al salario integral de todos los trabajadores de prensa No a la aplicación del aumento a “básicos” truchos y de miseria Vale de comida de $70 actualizable cada tres meses, de acuerdo a la inflación. 5.000 pesos de mínimo en mano Pase a planta de tercerizados y contratados Por $600 de mínimo para las colaboraciones, con cláusula de enganche con cada aumento para el personal de planta. No a la polivalencia ni a la polifuncionalidad Extensión a todo el gremio del reconocimiento del Respeto irrestricto a nuestros Estatutos y convenios LOS AÑOS QUE PASAMOS SIN PARITARIAS Y CÓMO SUPERARLOS Las décadas que pasamos sin paritarias fueron un flagelo para el gremio de prensa. Años en los que nos desangramos, mano a mano contra cada patronal, para ponerle un límite al deterioro de nuestros salarios por la inflación. Y esto sólo en aquellas empresas que contaban con delegados o comisiones internas. En las restantes, más pequeñas o grandes pero desorganizadas, tal el conocido y flagrante caso de Clarín, las patronales dieron siempre el aumento que quisieron y cuando quisieron, eso cuando no mantuvieron congelado el salario hasta límites insoportables. Años sin discutir pisos mínimos de convenio por categoría, sin actualizar el ítem por antigüedad y con una dispersión y heterogeneidad salarial enormes, que socavaron aún más las bases para la unidad de acción de los compañeros. El cuadro se completó con la desafiliación masiva de los trabajadores de prensa en las empresas, expresión de un inmovilismo que puso al borde de la extinción la vida sindical en los lugares de trabajo, solo sostenida por las comisiones internas y delegados y activistas combativos e independientes, que han enfrentado a esta conducción en todos los frentes. 2% por año de antigüedad, como en Télam 800 pesos para el ítem de Guardería. QUE HACER Venimos, entonces, desde muy atrás. Muchas patronales, cómodamente acostumbradas a este statu quo, serán un hueso duro de roer. Tenemos que recuperar terreno. Fortalecer las comisiones internas existentes con comisiones de trabajo que aborden, en cada empresa, problemáticas específicas que elaboren pliegos de reivindicaciones sobre “mujer”, “colaboradores”, seguridad e higiene”, “jubilados”, etcétera. Que se elijan delegados en todas las empresas que nos los tienen, que funcione a pleno el cuerpo de delegados y que la asamblea general sea el ámbito para dar impulso a las luchas. Hay que imponer, en una transición, cobertura gremial para decenas de compañeros que no reúnen las condiciones “legales” para ser delegados y poder sumarlos al proceso paritario general. Al mismo tiempo, se impone una campaña general para afiliar compañeros de las empresas al sindicato, algo que a la Utpba nunca le interesó, para reproducirse como tal en un gremio vaciado sindicalmente. Que se reduzca al 1% la cuota de afiliación, para estimular una afiliación masiva. Es el momento de dar vuelta la tortilla. Regularización y blanqueo de los colaboradores Igual salario por igual trabajo CAMIONES CON TECHO BAJO El reciente acuerdo de Camioneros firmado por Hugo Moyano, del 24% de aumento en cuotas hasta marzo de 2012, busca imponer un techo salarial al resto de las negociaciones paritarias para lograr acuerdos a la baja. Digan lo que digan, lo que cierra el sindicato que dirige el secretario general de la CGT ha sido, año tras año, la “pauta oficial” de referencia que se pretende para todo el movimiento obrero. Por lo tanto, otra vez, el plan gubernamental y patronal es que los trabajadores pierdan la carrera contra la inflación, que para este período está proyectada bastante por arriba del 30%. Esto, más los subsidios con los que el Gobierno las riega, es lo que explica que las ganancias de las empresas argentinas no hayan hecho más que multiplicarse, aún en medio de la crisis económica que golpea al mundo. El líder de la CGT, más preocupado por sus problemas judiciales y por el lugar de sus amigos en las listas del Frente para la Victoria, que por las reivindicaciones obreras, le impone salarios de miseria al conjunto de los trabajadores, en favor de los intereses patronales. El acuerdo de Camioneros es miserable y no hay aumento del mínimo imponible de Ganancias o plus vacacional que lo arregle. Por supuesto que ningún abogado de Clarín le exigirá ahora Moyano que refrende su acuerdo salarial en asambleas, como insólitamente sí le exigieron a los delegados de Artes Gráficas Rioplatense (AGR), que bloquearon con un piquete la salida del matutino, para gusto del Camionero. En asambleas limpias y democráticas, ningún camionero hubiese votado esa porquería. Aquí también el “combativo” dirigente camionero hace escuela: acuerdos a libro cerrado con la patronal, sin ninguna deliberación por parte de las bases que padecerán el acuerdo. Hay que decir, además, que los superbeneficios del trabajador camionero son un mito: jornadas extenuantes, interminables, con alto riesgo y profundo desgaste físico, en la mayoría de los casos con semanas fuera del hogar, transportando cargas valuadas en millones y millones, no son un paseo por el que sus protagonistas se hagan precisamente ricos. PARITARIAS SIN CLARIN: NO ME SUENA Tiempo Argentino: Ante una asamblea de trabajadores que hace unos pocos meses le reclamó la convocatoria a paritarias, el secretario adjunto de la nueva directiva de Utpba, Raúl Dellatorre, se defendió diciendo que no era conveniente la discusión colectiva porque Clarín, la principal empresa del gremio y con amplio predominio en la cámara patronal contra la que tenemos que luchar, no contaba con delegados. Dellatorre olvidó decir que si Clarín no tiene delegados es por culpa de la Utpba, que traicionó la lucha de los compañeros en 2000 y los entregó a las garras de Magnetto, resultado de lo cual fue despedida la totalidad de la comisión interna y más de 100 trabajadores. Sin embargo, poco tiempo después de volcar ese argumento, la Utpba hace el llamado a paritarias, pero no ha dispuesto ninguna acción ni campaña para que se elijan delegados en Clarín, ni en ninguna otra empresa de entre las decenas que están desorganizadas, como Infobae, C5N o CN23, para mencionar algunas. El hecho de que la dirección del sindicato no se plantee esta tarea revela el escaso alcance que tiene la acción impulsada por la burocracia. Lancemos ya mismo una campaña para que se elijan delegados en Clarín. Frente al terrorismo patronal de los Noble-Magnetto, se necesita una acción de todo el gremio para imponerlos. Vamos por la actualización de los ítems Guardería y Antigüedad La Asamblea de El Cronista pidió 35% La asamblea de trabajadores de El Cronista y las revistas IT y Apertura, aprobó reclamar a la empresa un aumento general de salarios de 35%. También que se actualice el ítem por Guardería a 750 pesos (de los 500 pesos que se pagan ahora) y actualizar el ítem antigüedad, que está actualmente en 15 pesos, al nivel de lo que cobran los trabajadores gráficos, hoy en 23 pesos. El fundamento del pedido porcentual responde a la proyección inflacionaria que las consul- toras privadas realizan para el período 2011, de 30% promedio, más la pérdida que registramos como consecuencia de la negociación de paritaria 2010, sobre todo en los salarios medios y altos, como resultado de la aplicación de una suma fija. El acuerdo de El Cronista vence a fines de abril. La comisión interna de prensa y gráficos ya elevó el reclamo a la patronal, la que al cierre de esta edición se aprestaba a dar una respuesta. BAE: logramos un aumento del 27% y el blanqueo de todos los compañeros Luego de más de un mes de conflicto, que incluyó el retiro de colaboración, el trabajo a reglamento, el retiro de firmas, cortar la producción periodística propia y pegar cables, y paros progresivos de una hora y luego de dos horas, los trabajadores de BAE alcanzamos un importante triunfo salarial y de condiciones de trabajo. La férrea unidad de los trabajadores del diario que votaron monolíticamente cada medida y las fueron llevando adelante, demostró a la patronal que no íbamos a ceder un paso en nuestras conquistas laborales y salariales. Finalmente se alcanzó un acuerdo que contempla un aumento salarial del 26% que, sumado al incremento del 50% en el plus por antigüedad (de $20 a $30 por año trabajado) supone un incremento promedio en los salarios del 27 al 28 por ciento. El sueldo mínimo en el diario pasa a estar por encima de los $5000. Asimismo, se logro el blanqueo de los trabajadores que venían de Crítica y Crónica y el pase de los colaboradores que superaron las 24 colaboraciones a calidad de colaborador permanente y en blanco. Estos últimos dejan de facturar, y empiezan a cobrar con recibo de sueldo, a aportar para la jubilación y tener una obra social. Es una gran conquista de los trabajadores de BAE contra la tercerización y el trabajo en negro. En Perfil, reclaman un 35% de aumento Los trabajadores de Editorial Perfil han salido a reclamar un 35 % de aumento para todas las categorías. El planteo fue resuelto en una masiva asamblea. La anterior paritaria -marzo 2010/febrero 2011 culminó con una mejora del 27,5 %. El sueldo mínimo actual es de $3.800 en mano. La respuesta de la empresa fue: cinco cuotas del 5 % (no acumulativos) de mayo a febrero del año próximo. La patronal adoptó esta decisión luego de conocerse el luctuoso 24% firmado por Moyano para Camioneros, que intenta ser un piquete a las paritarias. A pesar de la entregada del líder de la CGT, una nueva asamblea resolvió por unanimidad rechazar la propuesta patronal, disponiendo el quite de firmas en las notas de los distintos medios de la editorial y asambleas diarias de tres horas de duración, que han dificultado la salida de las publicaciones. A la bronca despertada por la propuesta de aumentos fraccionados se le sumó en el último fin de semana una fuerte indignación porque la patronal violentó en el diario la medida de fuerza adoptada publicando con nombre ficticio o firmada por editores las notas entregadas sin firmas por los redactores, violando disposiciones expresas del Estatuto del Periodista en cuanto a la libertad de expresión y de conciencia y del propio Código de Etica del diario Perfil. Varios de los principales columnistas del diario Perfil, han decidido plegarse a la decisión de retirar sus firmas en solidaridad con los trabajadores de la editorial si las medidas de fuerza se mantienen. Perfil es una empresa en expansión con la salida próxima de un nuevo diario y una multiplicación de sus negocios internacionales. Corresponsal Se logró un aumento del 73% en los salarios más bajos Los trabajadores de Tiempo Argentino lograron una importante recomposición salarial en la discusión paritaria desarrollada en febrero y marzo últimos. En ello jugó un papel clave la asamblea, que se mantuvo unida y con una clara idea de sus objetivos. El resultado ha sido alentador: los salarios más bajos fueron subidos hasta un 73%, desde $2400 a poco más de $4100 en mano, entre una recomposición salarial vinculada a los atrasos arrastrados desde 2010 y los aumentos correspondientes a 2011, todo ello discutido en esta paritaria. Para el conjunto de los trabajadores, los incrementos son de $300 fijos desde enero, y luego 10% en marzo, 5% en mayo y 9% en julio, acumulativos. Así, dos tercios de la redacción pasa a tener aumentos de entre 36,7% y 38,5%. Cabe recordar que esta es la primera paritaria de Tiempo Argentino, que comenzó a salir en mayo del año pasado, aunque una parte de su personal ya cumplió un año de tareas. Y que, además, esta ha sido también la primera negociación salarial de un medio grande en lo que va del año. Ambos hechos le agregaron más complejidad al proceso. La negociación se vivió con intensidad dentro del diario, con asambleas que fueron levantando temperatura a medida que pasaban las semanas y la propuesta salarial de la empresa no cubría la expectativa de los trabajadores. En una asamblea clave hubo un importante debate acerca de si se debían tomar medidas de lucha. Muchos trabajadores del diario creen que ese fue el factor que influyó en el ánimo de la empresa a hacer una nueva propuesta. Un par de semanas después se firmó el acuerdo. Pero, cuando faltaba muy poco, apareció la Utpba para plantear que quería estar presente en el acuerdo. ¿Debía estar? Sus argumentos eran que su presencia le otorgaba más fuerza legal al convenio y que si no se le daba un lugar ahora, luego no se debía pretender que estuviera (la Utpba) en caso de necesidad. Ambos planteamientos abren debates muy importantes acerca del rol de un sindicato y del tipo de paritaria que necesitamos. En primer lugar, los acuerdos internos (entre empresa y comisión interna) “son de cumplimiento obligatorio”, según el artículo 5 del convenio colectivo. De hecho, en los últimos años se han firmado decenas de convenios internos salariales sin que la conducción de la Utpba estampara su firma ni se pasase por el Ministerio de Trabajo. Por otro lado, el sindicato no elige a quién defiende de la patronal y a quién no. Su deber es hacerlo en todos los casos. Un planteo así esconde una extorsión: o se acepta la política de la conducción o se corre el riesgo de pelear solos ante una embestida de la patronal. El debate en Tiempo tuvo el mérito de haber puesto al desnudo uno de los aspectos de la tradicional política de la burocracia que dirige la Utpba, de sentarse a esperar que los trabajadores de cada empresa luchen solos contra las patronales, para luego querer aparecer en la foto, en el mejor de los casos. Por eso el año pasado, frente la denuncia de La Naranja, de que éramos el único sindicato que no tenía paritarias, improvisaron una respuesta trucha, en la que vociferaron que en 2010 se habían firmado “25 acuerdos salariales”, sin decir que ellos no habían tenido ni arte ni parte en ninguno, amén de que la cantidad de convenios propagandeados no representaba ni un cuarto de la totalidad del gremio. Los trabajadores de Tiempo mostraron que tenían muy claro este problema y resolvieron no esperar la graciosa aparición de la conducción de la Utpba y rubricaron ellos mismos su gran conquista salarial. Reincorporación de Pablo Viñas en AGR y de Ricardo Junghanns y Marcelo Moreira en Canal 13 Bloqueo a diarios: separemos la paja del trigo y apoyemos la lucha de los trabajadores del grupo Clarín La Naranja de Prensa expresa su más firme apoyo a la lucha de los trabajadores de Artes Gráficas Rioplatense (AGR) contra la patronal negrera del Grupo Clarín, que ha convertido a la planta en una cárcel. Denunciamos que los Noble-Magnetto ejercen sistemáticamente la represión contra los derechos sindicales de los trabajadores de todas sus empresas, siendo los casos más emblemáticos la prohibición de la organización gremial en la más importante de ellas, el diario Clarín, y el desconocimiento de los fallos judiciales que han ordenado la reincorporación de delegados despedidos en Canal 13. En el caso particular de la planta donde se imprimen la revista Viva y otros productos y materiales del Grupo Clarín, denunciamos que, en complicidad con el gobierno del por entonces presidente Néstor Kirchner, la patronal despidió ilegalmente a la comisión interna durante un reclamo salarial. Ahora, tras verse obligada a reincorporar a casi todos los integrantes de esa CI, los persigue, desconoce sus fueros gremiales y su escala salarial, a la vez que ejerce contra los restantes trabajadores todo tipo de atropellos. Advertimos, sin embargo, que el bloqueo a Clarín no forma parte de una real acción gremial sino que se encuentra en la línea de amenazas que la burocracia sindical ha venido ejerciendo contra su socio, el gobierno nacional, para que intervenga en desarmar los procesos judiciales que sufren varios de sus jefes. Está en la misma línea que las protestas de UATRE y las patronales rurales y la CGT para defender al esclavista Momo Venegas de sus responsabilidades en la mafia de los medicamentos o de los paros truchos de la Unión Ferroviaria y La Fraternidad para excarcelar a Pedraza, responsable del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyra. Rechazamos el bloqueo como una medida inconsulta y ajena a los intereses de los trabajadores del Grupo Clarín, se trate de los de AGR, en Pompeya, o los de la planta de Zepita, en Barracas, donde se imprime el diario, que en ningún caso votaron o prestaron conformidad con tal acción. Queremos señalar que la instrumentación de justas reivindicaciones obreras y de los métodos para obtenerlas por parte de burocracias sindicales patoteras y ajenas a los intereses de los trabajadores cumple la función política de bastardear y desprestigiar nuestras luchas y acciones. Son, así, funcionales a la represión patronal. El bloqueo a Clarín vino pocos días después de que Moyano amenazara explícitamente con movilizar cien, mil, diez mil, frente a aquellos medios que “informaran” agravios al camionero. El rechazo al piquete por parte de canillitas y público ha hecho un flaco favor a la causa de los trabajadores, y en cambio, un grueso favor a la campaña autovictimizante de Clarín en defensa de la “libertad de expresión”. Denunciamos que los delegados de AGR que bloquearon la puerta de Clarín vienen de complotarse, con el Ministerio de Trabajo y la patronal de Noble y Magnetto, para excluir de las reincorporaciones arrancadas a la empresa a Pablo Viñas, delegado despedido junto con ellos en 2004. La razón es que Viñas milita en La Naranja Gráfica, una agrupación opositora a la lista que conduce el sindicato gráfico. La exclusión y traición a Viñas es, además, funcional a los atropellos patronales en AGR. Semejante sectarismo desmoviliza y desmoraliza al taller, al ver que uno de sus delegados más representativos es discriminado en la pelea por la reincorporación, desconociendo la votación de centenares de compañeros. Denunciamos, asimismo, a las entidades patronales de medios y sus alcahuetes políticos, intelectuales y hasta periodísticos, quienes con la excusa de defender la libertad de expresión de Clarín y la propia, pretenden abolir, de paso cañazo, todo el arsenal de medidas a las cuales podemos recurrir los trabajadores de prensa para hacer escuchar nuestra voz y reclamos, en las condiciones completamente desventajosas que nos impone el régimen de monopolio patronal de los medios y el sostén estatal y gubernamental que lo vehiculiza y hace posible. La más elemental de las medidas que podemos adoptar para defender nuestros derechos supondrá, en esta línea de razonamiento, afectar “la libertad de expresión” de nuestras patronales y el “derecho a informarse del público”, al cual se apela solamente cuando se trata de usarlo como un ariete contra nuestras luchas, mientras que se lo ignora olímpica y cotidianamente mediante la manipulación informativa, la mentira y las operaciones mediáticas al servicios de oscuros pactos de intereses. No se alza la voz en defensa de los “lectores” y su “derecho a informarse” cuando las patronales cotidiana e impunemente censuran a los periodistas que trabajan en los medios, sean estos oficialistas u opositores, cierran medios, achican o despiden trabajadores si los números no les cierran. - Abajo la dictadura patronal en Clarín y todas las empresas del Grupo - Plenos derechos sindicales para los delegados de AGR - Reincorporación de Pablo Viñas en AGR y de Ricardo Junghanns y Marcelo Moreira en Canal 13 - Proponemos a todo el gremio de prensa una campaña en defensa de la libertad sindical en las empresas del Grupo Clarín, para que sean sus propios trabajadores quienes resuelvan cómo enfrentar a su patronal - Paritarias ya en el gremio de prensa: 35% de aumento, 5000 de mínimo en mano, pase a planta de colaboradores, contratados y tercerizados y defensa estricta de nuestros estatutos y convenios - Fuera las burocracias de nuestros sindicatos Aportá a la colecta para colaborar con la recuperación de Elsa Rodríguez, Militante del Partido Obrero baleada por la patota de Pedraza. Podés depositar tu colaboración en la cuenta del Banco Credicoop, cuenta Nº 191.001.050914.2. Para transferencias: CBU 1910001855000105091428.