Roberto Moreno EL AXóLOTL Empecé viendo en los axólotl una metamorfosis que no conseguía anular una misteriosa huma­ nidad. JULIO CORTÁZAR, "Axólotl" Posiblemente el más extraño e interesante de los animales que la fauna mexicana ofreció a la zoología universal, es el que pue­ bla con abundancia los lagos mexicanos y que conserva con pro­ piedad su nombre náhuatl de axólotl. Sin duda supera en rareza a los animales fantásticos de la imaginación prehispánica, cuya historia está por hacerse. El axólotl durante mucho tiempo desconcertó a los naturalis­ tas europeos y hasta bien entrado el siglo XIX se lo pudo clasifi­ car, previa acuñación de un nuevo término zoológico. El primer autor de historia natural que da noticia de este animal es el cele­ bérrimo doctor Francisco Hernández, quien en su Historia de los animales de la Nueva España lo describe con bastante amplitud y con visibles incorrecciones. I Ésta es la descripción: Del axólotl o juego del agua. Es una especie de pez lacustre cubierto de piel blanda y con cuatro patas como de lagartija, de un palmo de largo y del grueso del pulgar, aunque a veces tiene más de un codo de longitud. Tiene vulva muy parecida a la de la mujer, el vientre con manchas pardas, y desde la mitad del cuerpo hasta la cola, que es larga y muy delgada en su extremo, adelgaza gradualmente; tiene por lengua un cartílago corto y ancho; nada con las cuatro patas, que terminan en dedos muy parecidos a los de rana; la cabeza es deprimida, y grande en relación con el cuerpo; la boca entreabierta y el color negro. Se ha observado repetidas veces que tiene flujos menstruales como las mujeres, y que comído excita la actividad genésica, no de otra suer­ te que los estincos, 'lue algunos llaman cocodrilos terrestres y son quizá de su misro? especie. Suministra un alimento saludable y IFrancisco Hernández, Obras completas, 4 V., México, Universidad Nacional Autónoma de México, 19<'" ¡Is., Ill, 390, cap. 2, trato 5. 158 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATl EL AX6LOTL sabroso, semejante a la carne de anguilas. Se preparan de muchas maneras, fritos, asados o cocidos. Los españoles los aderezan ge­ neralmente con clavos de especia y pimientos de Indias; los mexi­ canos con el pimiento solo, molido o entero, condimento muy co­ mún de que gustan sobremanera. Tomó su nombre de la forma rara y divertida que tiene. Acompaña actualmente a la descripción de Hernández un gra­ bado antiguo realizado evidentemente con la pura noticia escrita. pues no habrá quien 10 confunda ni por asomo con un ajolote. A grabado y descripción les falta la característica más notable del animal, que es el penacho que forman las branquias. Empe­ ro, fue la noticia de Hernández la que dio al axólotlla celebridad de que después gozaría. Fue el también famoso Alexander von Humboldt el que vol­ vió, siglos después, a ocuparse del extraño "pez" de los lagos y pantanos de México. Las ciencias naturales habían progresado mucho y ya podía hacerse una descripción más correcta del axó­ lotl. Sin embargo, había características en este animal -yen otros similares de las grutas europeas y de los pantanos de Nor­ teamérica- que hundían en el desconcierto a los naturalistas que encabezaba, en Francia, Cuvíer. Este naturalista, descubridor de la ley de las correlaciones y antievolucionista furibundo, se en­ frentó al problema del axólotl con abierta consternación. Los ejemplares que pudo estudiar y describir le fueron proporciona­ dos por Humboldt. Éste menciona en dos ocasiones al extraño animal. Cuando comenta los trabajos que pasaron los aztecas a su llegada al valle de México, dice que se 1'efugiaron en los islotes de Acocolco. 2 Allí vivieron por espacio de medio siglo en espantosa miseria, pre­ cisados a alimentarse de raíces de plantas acuáticas, insectos y de un reptil problemático llamado axólotl, que el señor euvier mira como el hijuelo de una salamandra desconocida. 2Humboldt, Ensayo polltico sobre el reino de la Nueva Espa/la, estudio prelimi­ nar, revisión del texto, cotejos, notas y anexos de Juan A. Ortega y Medina, Mé­ xico, Editorial Porrua, 1966, cLxxx-696 p., ils., grafs., mapas. (Col. "Sepan cuan­ tos ... ", 39), p. 113. En una nota a gunos ejemplares Dumeril creyó lante, al hablar d confusión sobre € ban popoyote o a del verdadero, y de una gran sala! ql .1 I, I~ , I! 11 Figura 1. El ajolol El problema qu complicado. Con debían inscribirse ban siempre la res] los convertiría en 1 la cita de Cuvíer ( los entre los primt que siempre conse Pese a que no f, ficación, pasaron e contrario. En 186: de París se transfo: 3Ibidem. <Ibídem, p. 516. 'Zimmermann, Histo IX, 250. l59 EL AXÓLOTL & CULTURA NÁHUATl En una nota aclara Humboldt que él y Bonpland llevaron al­ gunos ejemplares bien conservados a Europa y que el naturalista Dumeril creyó que eran una nueva especie de proteo. J Más ade­ lante, al hablar de Acapulco, Humboldt dilucida un problema de confusión sobre el axólotl, ya que los indios de este lugar llama- . ban popoyote o axólotl a un pez escamoso de dos aletas, diverso del verdadero, y refuerza la creencia de Cuvier que es la larva de una gran salamandra: ~paran de muchas s los aderezan ge­ : Indias; los mexi­ ndimento muy co­ mbre de la forma [ernández un gra­ ira noticia escrita, .o con un ajolote. stica más notable ,ranquias. Empe­ :61otlla celebridad nboldt el que vol­ ez" de los lagos y labían progresad.o s correcta del axó­ ste animal -yen ,pantanos de Nor­ .os naturalistas que sta, descubridor de ~ furibundo, se en­ onsternación. Los leron proporci.ona­ pasiones al extrañ.o ~aron los aztecas a paron en los islotes r t rantosa miseria, pre­ ~ticas, insectos y de ~ señor euvier mira .t í1 , ,\ ji, Figura 1. El ajolote de la Historia de los animales de Francisco Hemández, III, 391. , El problema que se planteaba a los naturalistas europeos era complicado. Con arreglo a la clasificación en boga, los ajolotes debían inscribirse como perennibranquios --o sea que conserva­ ban siempre la respiración branquial- o caducibranquios, 10 que los convertiría en larvas de salamandras. Se ha hecho ya clásica la cita de Cuvíer de 1820 en que se confiesa obligado a colocar­ los entre los primeros, en vista de que varios testigos afirmaban que siempre conservaban sus branquias. s Pese a que no faltaron especialistas que dudaban de esa clasi­ ficación, pasaron cuarenta y cinco años antes de comprobarse lo contrario. En 1865 unos especímenes del Jardín de Aclimatación de París se transformaron en salamandras, hecho que fue cuida­ ! I Espaíla, estudio prelimi­ . Ortega y Medina, Mé­ paso (Col. "Sepan cuan­ ~ r 3Ibidem. 'Ibídem, p. 516 . 'Zimmermann, Historia natural. 24 IX, 250. Y., Barcelona, Gassó Hermanos, [s.f.), Us. 160 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL dosamente observado por Dumeril, que no se limitó a observar el proceso, sino que cercenó las branquias de otros ejemplares cinco o seis veces y logró la transformación. Con ello los natu­ ralistas volvieron a la tranquilidad y el axólotl dejó de llamarse Siredon pisciformis o axolotl -género sirena- para pasar a ser Ambystoma axolotl -tritÓn-.· Actualmente se lo llama Ambys­ toma trigrinum. Pero no bastaba este simple cambio en el sistema para poder ubicar correctamente al axólotl, pues si bien es una larva de sa­ lamandra, en realidad alcanza la madurez sexual en estado lar­ vario y puede completar todo su ciclo vital en ese estado. De aquella época a entonces se ha estudiado este fenómeno -no ex­ clusivo del axólotl- al que se dio el nombre de neotenia (per­ petua juventud). La teoría evolucionista y los modernos estudios ecológicos suponen que un descenso en la humedad general del medio habitual de ese tipo de salamandra hizo que cumplir su ciclo normal resultara peligroso para la especie, de manera que la forma de sobrevivir fue que las larvas alcanzaran madurez sexual y se reprodujesen dentro del agua. La neo tenia no es exclusiva del axólotl pues existen otras espe­ cies animales, generalmente anfibios, que la poseen, aunque por algún tiempo se creyó que el ajolote era el único caso que conser­ vaba la facultad de llegar a completar todo su ciclo de transfor­ mación en condiciones favorables. Modernas investigaciones, no completas aún, hacen dudar de la idea de que todos los ajolotes tengan esta facultad. Postulan la existencia de varias especies, unas de las cuales pueden transformarse en salamandras. 7 El caso es que desde antiguo se conoce a una o a varias espe­ cies de animal con el nombre de axólotl. El propósito de este artículo es seguir la pista al ajolote en las crónicas, a fin de in­ dagar el grado de conocimientos que alcanzaron los nahuas sobre él; hasta qué punto lo observaron y, en la medida de lo posible, aclarar el sentido del nombre con que lo bautizaron. 6/bidem. 7S on muchos los especialistas nacionales y extranjeros que se ocupan del estudio del ajolote. Entre los primeros destaca Maldonado Koerdell. Empero, falta mucho que aprender del ajolote. Esto me obligó a hacer observaciones directas. De cua­ tro ejemplares, dos lograron completar su transformación (marzo a julio de 1968), aunque una salamandra murió al poco tiempo. I EL AXÓLOTL En su pi mo el "xó, ciones, alg, fícilmente , conceptos e dad primiH mágicos, re en ella, que ciaciones de más complie lugar con al el momento cuantos cone construcción En el caso relacionan c( bastante Osel frar ampliam un poco con lidad son un complementa lo anormal y general como se representa Xólotl apan de los orígene: huesos de la h para que se m La más corl que Quetzalcó. los hombres p 8 Leyenda de los de los Soles, tradl1 cional Autónoma 120-121. Traducción más de trozos clásicos. 2a. OO., México, .& Traducción ampü ~E CULTURA NÁHUATL Umitó a observar f otros ejemplares ~on ello los natu­ r dejó de llamarse f para pasar a ser ~ 10 llama Ambys­ lstema para poder s una larva de sa­ ~al en estado lar­ ~n ese estado. De ~nómeno -no ex­ de neotenia (per­ Fodernos estudios medad general del ~o que cumplir su ¡, de manera que la ~n madurez sexual I ,existen otras espe­ k>seen, aunque por ~o caso que conser­ ~ ciclo de transfor­ ¡investigaciones, no ~ todos los ajolotes Ide varias especies, ~amandras.7 ~a o a varias espe­ 11 propósito de este tónicas, a fin de in­ bn los nahuas sobre ~~da de 10 posible, ~tIzaron. ~ue se ocupan del estudio ¡en. Empero, falta mucho directas. De cua­ I (marzo a julio de 1968), ~ciones EL AXÓLOTL 161 En su primer sentido, la palabra axólotl designa al animal co­ mo el "xólotl del agua". El término xólotl tiene diversas acep­ ciones, algunas de fácil comprensión y otras con significados di­ fícilmente accesibles o francamente crípticos, según se refieran a conceptos comunes o religiosos. Si se considera que la mentali­ dad primitiva se enfrenta al mundo con conceptos en buena parte mágicos, religiosos o esotéricos, se captará en cuanto se penetre en ella, que todo o casi todo el orden natural tiene nexos y aso­ ciaciones de difícil comprensión, que forman un sistema cada vez más complicado en el que cada elemento se explica y ocupa su lugar con arreglo a conceptos generales dados. Visto así, hasta el momento sólo conocemos una porción de datos sueltos y unos cuantos conceptos generales, que deberán conectarse para la re­ construcción del edificio de la cosmovisión náhuatl. En el caso del axólotl es preciso remontarse a los mitos que se relacionan con el dios Xólotl. Esta deidad es de una simbología bastante oscura, que hasta el momento no se ha logrado desci­ frar ampliamente. Xólotl es el hermano gemelo de Quetza1cóatl, un poco con el carácter de complemento de este último. En rea­ lidad son un mismo dios. Quetza1cóatl, el "gemelo precioso" se complementa con Xólotl, en una advocación que 10 relaciona con 10 anormal y 10 monstruoso. Así, Xólotl ha sido considerado en general como el dios de los mellizos y los monstruos, y él mismo se representa en algunos códices con figura de perro. Xólotl aparece relacionado con dos mitos importantes del ciclo de los orígenes, que son los que se refieren a la búsqueda de los huesos de la humanidad en el Mictlan y al sacrificio de los dioses para que se moviera el Sol. La más corriente versión del primero de estos mitos postula que Quetza1cóatl descendió al Mictlan en busca de los huesos de los hombres para, mediante su sacrificio, darles vida. 8 Sin em­ 8Leyenda de los Soles, en Códice Chimalpopoca, Anales de Cuauhtitlán y Leyenda de los Soles, traducción de Primo Feliciano Velázquez, México, Universidad Na­ cional Autónoma de México, Instituto de Historia, 1945, xXII-166 p., facs., p. 120-121. Traducción más moderna en Ángel Ma. Garibay, Llave del náhuatl. Colección de trozos clásicos, con gramática y vocabulario, para utilidad de los principiantes, 2a. ed., México, Editorial Porrúa, 1951, 388 p., p. 221-222. Traducción ampliamente comentada en Miguel León-Portilla, La filosofía náhuatl 162 EL AXÓLOTL ESTUDIOS DE CULTURA NÁnUATL bargo, se conserva otra versión que atribuye a Xólotl estos he­ chos. Mendieta, citando a fray Andrés de Olmos, lo relata así: Pero ya que en diversas maneras cada provincia daba su relación, por la mayor parte venían a concluir que en el cielo había un dios llamado Citlalatónac [CitIaltónac], y una diosa llamada Citlalicue [Citlalinícue]; y que la diosa parió un navajón o pedernal (que en su lengua llaman Técpatl); de lo cual admirados y espantados los otros sus hijos, acordaron de echar del cielo al dicho navajón, y así lo pusieron por obra y que cayó en cierta parte de la tierra, donde decían Chicomóztoc, que quiere decir "siete cuevas". Dicen salie­ ron de él mil y seiscientos dioses ... , los cuales dicen que vién­ dose así caídos y desterrados, y sin algún servicio de hombres, que aún no los había, acordaron de enviar un mensajero a la diosa su madre, diciendo que pues los había desechado de sí y desterrado, tuviere por bien darles licencia, poder y modo para criar hombres, para que con ellos tuviesen algún servicio. Y la madre respondió: que si ellos fueran los que debían ser, siempre estuvieran en su compañía, mas pues no lo merecían y querían tener servicio acá en la tierra, que pidieren al Mictlan Tecutli, que era el señor o capitán del infierno, que les diese algún hueso o ceniza de los muertos pa­ sados, y que sobre ello se sacrificasen, y de allí saldrían hombre y mujer que después [se] fuesen multiplicando. Que parece querer atinar al diluvio, cuando perecieron los hombres, teniendo no haber quedado alguno. Oída, pues, la respuesta de su madre (que dicen les trajo Tlotli, que es "gavilán"), entraron en consulta, y acorda­ ron que uno de ellos, que se decía Xólotl, fuere al infierno por el hueso y ceniza, avisándole que por cuanto el dicho MictIan Tecutli. capitán del infierno, era doblado y caviloso, mirase no se arrepin­ tiese después de dado lo que se le pedía. Por 10 cual le convenía dar luego a huir con ello, sin aguardar más razones. Hízolo Xólotl de la misma manera que se le encomendó, que fue al infierno y alcanzó del capitán Mictlan Tecutli el hueso y ceniza que sus her­ manos pretendían haber, y recibido en sus manos, luego, dio con ello a huir. Y el Mictlan Tecutli, afrentado de que así se le fuese estudiada en sus fue1ltes, 3a. ed., México, Universidad Nacional Autónoma de Mé­ xico, Instituto de Investigaciones Históricas, 1966. xXIv-414 p., ils., p. 183s. huyendo, tropezó y pedazos, 1 bres ser I pudo, lle~ todo 10 ql sacrificaro: después 10. tornando :J dieron a c cardo. 9 El relato ( con la explic los dioses". de los hombI unirse en Te(J que se arrojó dioses aposta acertaron, de; no se movía, ) murieran tode eludió y despl Viendo esto 1 drían prevale matarse y sac crificio fue X los mató, y di Las divergen nocida en torIl actual, me llev. el texto que ree un aspecto ese. 9Gerónimo de ~ Salvador Chávez H IOlbidem. 1, 84-8: IILeón·Portilla, ( 163 EL AXÓLOTL CULTURA NÁIlUATL K:ólotl estos he­ )S, lo relata así: daba su relación, elo había un dios !amada Citlalicue pedernal (que en y espantados los icho navajón, y así le la tierra, donde vas". Dicen salíe­ ~s dicen que vién­ :> de hombres, que ljero a la diosa su le si y desterrado, ara criar hombres, . madre respondió: e estuvieran en su tner servicio acá en L el señor o capitán ,de los muertos pasaldrían hombre y Que parece querer ¡, teniendo no haber Íl madre (que dicen [consulta, y acorda­ ~ al infierno por el bho Mictlan Tecutli, jirase no se arrepin­ rlo cual le convenía bnes. Hízolo Xólotl ~e fue al infierno y ~. ceniza que sus her­ tnos, luego, dio con que así se le fuese r bonal Aut6noma de Mé­ ~14 p., Hs., p. 183s. ,I huyendo, dio a correr tras él, de suerte que por escaparse Xólotl, tropezó y cayó, y el hueso, que era una braza, se le quebró e hizo pedazos, unos mayores y otros menores, por 10 cual dicen los hom­ bres ser menores unos que otros. Cogidas, pues, las partes que pudo, llegó donde estaban los dioses sus compañeros, y echado todo lo que traía en un lebrillo o barreñón, los dioses y diosas se sacrificaron sacándose sangre de todas las partes del cuerpo (según después los indios lo acostumbran) y al cuarto día salió Un niño; y tornando a hacer lo mismo, al otro cuarto día salió la niña: y los dieron a criar al mismo Xólotl, el cual los crió con la leche de cardo" El relato que recogió Olmos y transcribe Mendieta prosigue con la explicación "de cómo fue criado el sol y de la muerte de los dioses". Según esta versión del mito, los dioses se servían de los hombres, pero como no tenían sol decidieron aquéllos re­ unirse en Teotihuacán, donde hicieron un gran fuego; el primero que se arrojó al sacrificio bajó al "infierno". Mientras, los otros dioses apostaban por dónde habría de salir el sol, y como no acertaron, debían sacrificarse. Cuando salió finalmente el Sol, no se movía, y dijo a los otros dioses que no lo haría mientras no murieran todos. Citli disparó tres flechas contra el Sol, éste las eludió y después lanzó la última a Citli, matándolo. Viendo esto los otros dioses desmayaron, pareciéndoles que no po­ drían prevalecer contra el sol: y como desesperados, acordaron de matarse y sacrificarse todos por el pecho; y el ministro de este sa­ crificio fue Xólotl, que abriéndolos por el pecho con un navajón los mató, y después se mató a sí mismo ... lO Las divergencias fundamentales entre esta versión y la más co­ nocida en torno a la creación del Quinto Sol y la humanidad actual, me llevan a pensar en una posible mayor antigüedad en el texto que recogió Olmos. La Leyenda de los Soles discrepa en un aspecto esencial. lI Es Quetza1cóatl quien baja al Mictlan y 9Ger6nimo de Mendieta, Historia Eclesiástica Indiana, 4 Salvador Chávez Hayhoe. [s.f.l, J, 83-84, lib. n, cap. 1. 10Ibidem, 1, 84-85, lib. lI, cap. 2. IlLeón-Portilla, op. cit., p. 183-184. V., México, Editorial 164 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL EL Ax6LOTL supera las pruebas que le pone Mictlantecutli. Empero, Quetzal­ cóatl no fue solo por los huesos de los hombres, sino que fue acompañado de su nahual, personaje curioso, doble del dios y servidor suyo, que pienso no hay duda de que se trata de su gemelo Xólotl. Otro hecho Xólotl aparec consigo mism según la cual Sol. 1 y luego el ai dicese que u dioses: j Oh 4 suerte que se el que matab virtióse en pi llaman xólotl vez echó a hl maguey que t visto, y echó llama axólotl, La traducció hagún Il es Ínter Al punto hizo ses. Pero, seg Dijo a los dio -¡No muera Por esto much ron los párpad huir ante ella, ter, tomó el as cuyo nombre Ü Figura 2. Ajolote y salamandra. Dibujo de Víctor M. Castillo. La tesis que propongo es que la versión de Olmos es la más antigua de las dos importantes que nos han llegado. El hecho de que aparezca Xólotl como figura central del mito puede hacer pensar que éste es anterior ai encumbramiento de Quetzalcóatl en el panteón náhuatl. Para los creadores de ese mito antiguo, es Xólotl una deidad de gran importancia que ocupa el lugar que posteriormente fue de su gemelo. Desde luego, son una misma deidad; pero fue la ampliación del culto a Quetza1cóatl la que redujo a Xólotl a ser un gemelo con funciones de servidor. Ésta sería una de las razones por las que Xólotl aparece como Wla deidad de difícil comprensión. IZBernardino de Si ción de Wigberto Jir ils., 11, 260. r fe. I3Garibay, op. cit. 1'Puede referirse a 1S Millacaxólotl. 1 "doble". Sin embar pongo esta otra: ml xólotl. Podrla inter¡:: mente la caña del m; EL AXÓLOTL 165 CULTURA NÁHUATL npero, Quetzal­ ~, sino que fue .ohle del dios y : se trata de su Otro hecho que quiero destacar en el texto de Olmos es que Xólotl aparece como el que sacrifica a todos los dioses y finaliza consigo mismo. Sahagún proporciona otra versión del mito,U según la cual los dioses deciden morir para dar movimiento al Sol. y luego el aire se encargó de matar a todos los dioses y matólos; y dícese que uno llamado Xólotl rehusaba la muerte, y dijo a los dioses: j Oh dioses! ¡ No muera yo! y lloraba en gran manera, de suerte que se le hincharon los ojos de llorar; y cuando llegó a él el que mataba echó a huir, y escondióse entre los maizales, y con­ virtióse en pie de maíz que tiene dos cañas, y los labradores le llaman xólotl; y fue visto y hallado entre los pies del maíz; otra vez echó a huir y se escondió entre los magueyes, y convirtióse en maguey que tiene dos cuerpos que se llama mexólotl; otra vez fue visto, y echó a huir y metióse en el agua, y hízose pez que se llama axólotl, y de allí le tomaron y le mataron. La traducción de Garibay al texto de los informantes de Sa­ hagún13 es interesante. !jetar M. Castillo. i ~ Olmos es la más i llegado. El hecho el mito puede hacer ~to de Quetzal~óatl ~ ese mito antIguO, ~ ocupa ellugar. que ~o, son una mIsma ir\uetzalcóatl la que i'< ' es de servidor. Esta aparece como una l Al punto hizo su oficio EhécaW 4 (el viento) y da muerte a los dio­ ses. Pero, según dicen, Xólotl no quería morir. Dijo a los dioses: -¡No muera yo, oh dioses! Por esto mucho lloraba, bien se le hincharon los ojos, se le hincha­ ron los párpados. Pero llegó hasta él la Muerte y no hizo más que huir ante ella, se ausentó, entre cañas de maíz verde se fue a me­ ter, tomó el aspecto, se convirtió en caña que en dos [permanece, cuyo nombre (es) doble, "doble labrador".ls l1Bernardino de Sahagún, Historia gelleral de las cosas de la Nueva Esparta, edi­ ción de Wigberto Jiménez Moreno, 5 V., México, Editorial Pedro Robredo, 1938, ils., n, 260. 13Garibay, op. cit., p. 219-220. "Puede referirse aquí a Quctzalcóatl. 15 Millacaxólotl. Literalmente puede leerse asl, millácatl, "labrador" y xólotl, "doble". Sin embargo, dudo que ésa sea la palabra correcta en este caso. Pro­ pongo esta otra: milacaxólotl, de milli,"sembradio", "milpa"; ácatl, "caña" y xólotl. Podría interpretarse como "doble caña del sembradlo", que seria natural­ mente la caña del malz. 166 ESTUDIOS DE CULTURA NÁUUATL Pero ahí entre las cañas fue visto. Otra vez ante su cara huyó, y bien se fue a meter entre los magueyes, se convirtió también en maguey que dos permanece, cuyo nombre es "maguey doble"16. También otra vez fue visto, otra vez bien se fue a meter en el agua, se convirtió en ajolote ... 11 empero allí le cogieron, con 10 cual le dieron muerte. En este bello texto se notan inmediatamente algunos proble­ mas. Xólotl, aunque sigue siendo el último en morir, deja de ser el-personaje central del mito, y curiosamente es el único que se resiste en forma patética a la muerte. El significado de esta nueva apreciación del gemelo de Quetza1cóatl se me escapa. Sí conviene apuntar la idea de que Xólotl aparece en este mito co­ mo un dios que posee la facultad de la transformación; pero sólo puede hacerlo en cosas que lo revelan, pues los dioses descubren sus· transformaciones, ya que se realizan en plantas o animales que presentan anormalidades. . La idea general sobre Xólotl es que es un dios de difícil clasi­ ficación. Nicholson así 10 declara y da algunos de sus rasgos más s.obresalientes: ... asociado con el perro, era ostensiblemente el dios de los mons­ truos y de los gemelos; él mismo era gemelo de Quetzalcóatl y fre­ cuentemente lleva la misma insignia. Representa aparentemente la fusión de diferentes ideas con asociaciones estelares importantes, particularmente de Venus. u Alfonso Caso, por su parte, destaca el simbolismo astronómico de Xólotl, considerándolo el hermano gemelo de Venus, que unas veces es la primera estrella que desaparece entre los rayos del sol y otras veces es la última. De esta suerte, Quetzalcóatl es Venus matutino y Xólotl es Venus vespertino. Lámina 1. Xólotl con Este fenómeno astronómico se interpréta en el mito diciendo que Quetzalcóatl o su hermano gemelo XólotI bajan al mundo de los 16Mexólotl. 17Ax61otl. 1nf. B. Nicholson, "Los principales dioses mesoamericanos", en Acosta etal., Esplendor del México Antiguo, 2 V., México, Centro de Investigaciones Antropoló­ gicas de México, 1959, Us., 1, p. 161-178, p. 175. CULTUI' NÁIIU UL su cara huyó, y irtió también en maguey doble" '6. fue a m<:ter en el le cogieron, con lo algunos proble­ en morir, deja de es el único que significado de esta se me escapa. Sí el dios de los mons­ de Quetzalcóatl Y fre­ aparentemente la estelares importantes, astronómico de Venus, que unas entre los rayos del Quetzalcóatl es bulLO m o rtu o ri o. el mito diciendo que bajan al mundo de los Cúdicc E L AX6LOTL muertos y recorren los someten los die ~ ¿j 'Q if"> ·2 ~ :­ 0 -;:;loo Sostiene también cóatl en sus atribuci, L a interpretación el mito recogido por nes de dios de los ! de que lo "monstru( poco diferente a nm sar en términos de . Otra asociación d, el Códice Borbónico , dido por Quetzalcóa Frente a él está Xé arreos que lo hacen melo.20 Eduard Seler ha s dió la significación d a los detalles import san principalmente E n s, algunas de las magnIficos comenta] samente a Xólotl y deada. Empieza po Más adelante, al tr: de los días, me toa el dios que baja al d esta región, sin con 1 Sol y hace qj zón se ataba alrede guisa de collar, un ,,¡ 19A1fooso Caso, La r~ 62 p ., ils. (Encielap dia 2°Francisco del Paso ~ pictórico de los antiguos I D iputados de París (ami! Landi, 1898, XXIV-368 p. 21 Eduard Seler, Comen V., México, Fondo de Cu EL A}(;ÓLOTL 167 muertos y recorren el infierno sufriendo diferentes pruebas a que los someten los dioses infernales. 19 Sostiene también Caso que Xólotl es un nombre de Quetzal­ cóatl en sus atribuciones de dios de los gemelos y los monstruos. La interpretación de Venus vespertino-Xólotl se refuerza con el mito recogido por Olmos. Por 10 que respecta a las atribucio­ nes de dios de los gemelos y los monstruos, cabe la aclaración de que lo "monstruoso" en el pensamiento náhuatl ha de ser un poco diferente a nuestra idea, por lo que creo que debemos pen­ sar en términos de "anormal" o "insólito" simplemente. Otra asociación del dios Xólotl es con el juego de pelota. En el Códice Borbónico, lámina XXVI, se representa un juego presi­ dido por Quetza1cóatl, el cual se ve con sus atributos habituales. Frente a él está Xólotl con cabeza de perro y con insignias y arreos que 10 hacen aparecer como ayudante de su hermano ge­ melo. 20 Eduard Seler ha sido el autor que con más detenimiento estu­ dió la significación de Xólotl y por ello el que mejor se aproximó a los detalles importantes. Las fallas de su interpretación se ba­ san principalmente en su forma aventurada de encontrar relacio­ nes, algunas de las cuales son francamente dudosas. En sus magnifico s comentarios al Códice Borgia, Seler analiza cuidado­ samente a Xólotl y da una visión de este dios bastante redon­ deada. Empieza por declarar sus propósitos: Más adelante, al tratar de Xólotl, regente del décimo séptimo signo de los días, me tocará demostrar con detalle que Xólotl no sólo es el dios que baja al reino de los muertos y acompaña al Sol a través de esta región, sino que también abandona el Inframundo junto con el Sol y hace que éste salga en el cielo oriental. Y por esta ra­ zón se ataba alrededor de los bultos mortuorios de los guerreros, a guisa de collar, un xolocózcat!, una representación de X6lotl.Z 1 19A1fonso Caso, La religión de los aztecas, México, Imprenta Mundial, 1936, 62 p., ils. (Enciclopedia ilustrada mexicana), p. 14 Y 18. 2°Francisco del Paso y Troncoso, Descripción, historia y exposición del Códice pictórico de fas antiguos náuas que se conserva en la Biblioteca de la Cámara de Diputados de Paris (antiguo Palais Bourbon) , Florencia, Tipograffa de Salvador Landi, 1898, xxlY-368 p., p. 116. llEduard Seler, Comentarios al Códice Borgia, traducción de Mariana Frenk, 2 V., México, Fondo de Cultura Económica, 1963, Hs., 1, 49. 168 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL En este párrafo resume Seler su tesis. La argumentación es de lo más interesante y sirve mucho al propósito de este artículo. Con toda razón destaca a Xólotl en su aspecto de perro. Es bien sabido que una especie de perro se llamaba xoloitzcuintli, que es aquel que presenta la rareza de carecer de pelo en el cuerpo y sólo tenerlo en forma de un mechón en la cabeza. Seler destaca su importancia como animal comestible y para el culto a los muertos; para la creencia mexicana -dice- el alma del muerto tardaba cuatro años de trabajos antes de llegar a la orilla del río Chicunahuapan, pero sólo lo podía atravesar si lo esperaba en la otra margen su perro que, al reconocerlo, se echaba al agua y lo ayudaba a cruzar. Por ello, cuando moría alguien, sus deudos sacrificaban un perro que acompañaba el cadáver. En caso de que un guerrero fuera capturado y sus restos no pudieran recu­ perarse, se hacía un bulto mortuorio y se le ponía una imagen de perro que se llamaba xolocózcatl. Seler juzga difícil encontrar el origen de esta creencia; por un lado, cree posible que la cos­ tumbre de enterrar a los muertos con todas sus pertenencias e inclusive su compañero animal, el perro, haya creado la idea de que este último tenía alguna relación con el reino de los muertos. El mismo Seler propone otra idea, tomada de sus interpretaciones de los códices mayas, de una asociación del perro con el fuego, diciendo que es el animal-relámpago que penetra en la tierra, por lo que el hombre debe ser introducido por el perro al Mictlan. 12 Si bien la idea es atractiva, y hay algunos datos para ayudarla, parece un poco forzada por encontrar la relación del perro con el fuego en ser el "animal que muerde" y en su representación en los códices mayas. Con base en los hechos conocidos que cita Seler, creo que el verdadero problema no es el del origen de la costumbre mortuo­ ria. El mito que he transcrito en versión de Mendieta explica con toda claridad que el perro tiene una asociación inmediata con Xólotl y es este dios el que entra al Mictlan con muchos esfuer­ zos, de forma que cada muerto va a ese lugar acompañado de Xólotl. Lo que no es fácil dilucidar es por qué la imagen del perro es la preferida para representar al dios. Posiblemente provenga de la idea de "servidor" de Quetzalcóatl. Esto mismo ll¡bidem, 1, 98. EL ~6LOTL cree Seler, pero II importante la COIl a Xólotl con Tlál que resulta de int Cuando había fa cían grandes prO! cesión gran cant pelados sin ningú en su gentilidad I de este género de sión y andas mu: plo que les tenía dos ahí los sacrif al dios de las ag¡ llegasen al templ< no podían llegar pués de muertos El párrafo es d~ de Se1er, debe tOIl redondea su conee el perro representa acompañando ru S deja de ser perro ) sos, Nanahuatzin, el xolocózcatl com al guerrero a la ca Finalmente, Sele bIes. Cita el mexo cajete con dos extr Los mexicanos -i el nacimiento de 1 mo algo antinatul uno de ellos inmel 2lDiego Muñoz Cam ed., México, [s.e.J. 1947. 1<ISel er, QP· cit., I, 145 169 )S DE CULTURA NÁHUATL EL AX6LOTL argumentación es de ~to de este artículo. ~o de perro. Es bien ,xoloitzcuintli, que es 'pelo en el cuerpo y abeza. Seler destaca , para el culto a los ~ el alma del muerto gar a la orilla del río lar si lo esperaba en , se echaba al agua y ~ alguien, sus deudos eadáver. En caso de ps no pudieran recu­ le ponía una imagen nzga difícil encontrar ~ posible que la. cos­ ~ sus pertenencias e ~ya creado la idea de :reino de los muertos. ~e sus interpretaciones ~l perro con el fuego, ~etra en la tierra, por l perro al Mictlan. 11 datos para ayudarla, lación del perro con ,'en su representación cree Seler, pero lleva sus ideas demasiado lejos. Para él es muy importante la concepción del perro como relámpago y relaciona a Xólotl con Tláloc, con base en un texto de Muñoz Camargo que resulta de interés transcribir: ~ ¡ ~ta Seler, creo que el ~a costumbre mortuo­ !de Mendieta explica pación inmediata con con muchos esfuer­ ar acompañado de r qué la imagen del 1 dios. Posiblemente alcóatl. Esto mismo Cuando había falta de aguas y hacía grande seca y no llovía, ha­ cían grandes procesiones, y ayunos y penitencias, y sacaban en pro­ cesión gran cantidad de perros pelones que son de su naturaleza pelados sin ningún género de pelo, de los cuales había antiguamente en su gentilidad muchos que los tenían para comer, y los comían ... de este género de perros como referido tenemos, sacaban en proce­ sión y andas muy adornadas, y los llevaban a sacrificar a un tem­ plo que les tenían dedicado que lo llamaban Xoloteupan; y llega­ dos ahí los sacrificaban, y les sacaban los corazones y los ofrecían al dios de las aguas, y cuando volvían de este sacrificio, antes que llegasen al templo mayor llovía y relampagueaba de tal manera que no podían llegar a sus casas con la mucha agua que llovía, y des­ pués de muertos los perros se los comían. 23 El párrafo es desconcertante y, aunque parece apoyar la tesis de Seler, debe tomarse con muchas reservas. Finalmente Seler redondea su concepción, también sujeta a muchas dudas, de que el perro representa a Xólotl en su recorrido nocturno al Mictlan acompañando al Sol; pero como éste debe volver a salir, Xólotl deja de ser perro y se convierte en el deforme dios de los bubo­ sos, Nanahuatzin, que se sacrificó para ser el Sol. Así, explica el xolocózcatl como la efigie del dios Xólotl, que va a conducir al guerrero a la casa del Sol. 24 Finalmente, Seler destaca la idea de los gemelos o cosas do­ bles. Cita el mexólotl, doble maguey, el texólotl, mano de mol­ cajete con dos extremos. Los mexicanos -igual que otros pueblos primitivos- consideraban el nacimiento de gemelos y, en general, cualquier germinación, co­ mo algo antinatural y alarmante. Por esto los padres mataban a uno de ellos inmediatamente después del parto. Parece que basado 23Diego Muñoz Camargo, Historia de Tlaxcala, edición de Lauro Roselt, 6a. ed., México, [s.e.], 1947, 376-YI p., Us., p. 167. 14Seler, op. cit., 1, ]45 s. 170 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL en esta concepción se asociaba posteriormente con la palabra xólotl la idea de la deformidad, la mostruosidad. Es probable que por esto el extraño animal anfibio, larva del Amblystoma mexicanum, que vive en las lagunas de México, se haya llamado axólotl, "mons­ truo acuático". Los nombres xolo-itzcuintli y, en zapo teca peco­ xolo, para el perro sin pelo, se derivan de la misma concepción. Y puede ser que por esta misma razón Xólotl se haya considerado dios de los monstruos ... " En torno a la palabra texólotl, Seler sufre un error. Texólotl es una especie de texoloni, que proviene de leci, majar o moler, y el pasivo y el ni formando el instrumental. El final ólOl1 signi­ fica redondo. Literalmente texólot! es el majadero redondo. Cabe hacer mención también del personaje legendario Axolo­ hua, que se sumergió en el lago, posiblemente convertido en ajo­ lote, para hablar con Tláloc. Parece reforzar la relación entre este último dios y Xólotl. Dejando a un lado la interpretación de Seler, quedan varios rasgos de Xólotl como deidad que deben destacarse: 1. Es hermano gemelo de Quetzalcóatl. 2. Aparece como paje o siervo de su gemelo. 3. Se representa como perro. 4. Puede transformarse en seres dobles o anormales en general. 5. Es el dios de los gemelos y los "monstruos". De estos cinco rasgos principales pueden recogerse como ideas centrales la duplicidad, la servidumbre, la anormalidad o deformi­ dad/ 6 y la transformación. Algunas veces, dos o más de estos rasgos se dan en seres a los que los nahuas bautizaron con el nombre de xólotl. Recurriendo al Vocabulario de Molina, xolo aparece como "paje, mozo, criado o esclavo", si bien en diversas combinaciones la palabra tiene las siguientes acepciones: sentarse en cuclillas, plegar, arrugar, empeorar una llaga, hacer tonto o serlo, ser in­ disciplinado. 27 No es difícil comprender algunas de estas acep­ ciones, derivadas del sentido general de "monstruoso" o anormal, como 10 arrugado, plegado o llagado. El sentido de "tonto" no 23 Ibídem. 1, 144. 26Asi, los xolome eran los enanos y jorobados de las cortes. .7Alonso de Molina, Vocabulario en lengua castellana y mexicana. Madrid, Edi­ ciones Cultura Hispánica, 1944, 162 f. EL AXÓLOTL le encuentro re venga de los b también a las "arruga" y "to Por lo que re de xólotl nos ql 1. Mexólotl,. 2. Milacaxólc 3. Xolo, paje, 4. Xoloitzcuin ñante del t 5. Huexólotl, 6. Axólotl. Los primeros· lo. El perro sin llevar el nombre pañante al Mictl. su evidente anon a través de sus e su nombre a algí no al axólotl, qu viene saber cómo lo describe así: Hay unos anima nen pies y mane y el cuerpo tam! cuezo. Es muy b Lo que dictaroj Axólotl: Yuhquinma cuetz iaoac, papaoa, t. amo cenca omio; 28Mauricio Swadesh Base analítica de la lel versidad Nacional Aul 1966, x-94 p. (Serie di 29S a hagún, op. cit.• : 30La paleografIa ha Dibble and Arthur J. ( DE CULTURA NÁHUATL 1 ~on la palabra xólotl ~ probable que por Ilystoma mexicanum, nado axólotl, "mons­ r, en zapoteca peeo­ llsma concepción. y se haya considerado un error. Texólotl reci, majar o moler, El final ólotl signi­ jadero redondo. je legendario Axo~o­ te convertido en aJo­ zar la relación entre Seler, quedan varios destacarse: lelo. anormales en general. truos". l recogerse como ideas ;normalidad o deformi­ i, dos o más de estos [nas bautizaron con el ~, xolo aparece como ~versas combinaciones ,: sentarse en cuc1i11~s, rr tonto o serlo, ser m­ Ialgunas de estas acep­ ~onstruoso" o anormal, ~ sentido de "tonto" no , las cortes. Jana y mexicana, Madrid, Edi· EL Ax6LOTL 171 le encuentro relación si no es con la aventurada idea de que pro­ venga de los bufones deformes de los señores. Swadesh reduce también a las cuatro acepciones de "monstruo", "sirviente". "arruga" y "tonto" el término xólotl!s Por lo que respecta a los seres y objetos que tenían el nombre de xó!ot! nos quedan: 1. Mexó!otl, maguey doble. 2. Milacaxólotl, caña de maíz doble. 3. Xolo, paje, sirviente, bufón. 4. Xo!oitzcuintli, perro anormal, sin pelo, sirviente, y acompa­ ñante del hombre. 5. Huexólotl, guajolote. 6. Axólotl. Los primeros tres justifican su sentido a 10 largo de este artícu­ lo. El perro sin pelo posee muchas características que 10 hacen llevar el nombre: su identificación con el dios Xólotl como acom-· pañante al Mictlan, que llegó casi a generalizarse en la especie, y su evidente anormalidad física. El guajolote es difícil de explicar a través de sus características generales y posiblemente responda su nombre a algún tipo de asociación no bien conocida. En tor­ no al axólotl, que se encuentra en dos mitos importantes, con­ viene saber cómo se 10 veía en el pensamiento náhuatl. Sahagún29 10 describe así: Hay unos animalejos en el agua que se llaman axólotl, (que) tie­ nen pies y manos como lagartijas, y tienen la cola como anguila, y el cuerpo también; tienen muy ancha la boca y barbas en el pes­ cuezo. Es muy bueno de comer; es comida de los señores. Lo que dictaron los informantes indígenaslO se sigue: Axólotl: Yuhquinma euetzpali, mamae, euitlapile, euitlapilpatlaehtie, eamaeo­ iaoae, papaoa, tzotlaelie, huel nacaio, naeatetie, nanaeaio: haomio, amo cenca omio; qualli yectli, qualoni, ahuiae, tetonal. 28Mauricio Swadesh y Madalena Sancho, Los mil elementos del mexicano clásico. Base analítica de la lengua nahua, prólogo de Miguel León.Portilla, México, Uni­ versidad Nacional Autónoma de México, Instituto de Investigaciones Históricas, 1966, x-94 p. (Serie de Cultura Náhuatl. Monografías, 9), p. 75. 29Sahagún, op. cit., TI, 195. lOLa paleografía ha sido tomada del Florentine Codex, translated by Charles E. Dibble and Arthur 1. O. Anderson, 12 V., Santa Fe, N. M., The School of Amer- .172 ESTUDIOS DE CULTURA NÁHUATL La \:rsión es: Es así como lagartija, tiene manos, tiene cola, cola ancha, gran bo­ ca, es guedejudo, es brillante, bien carnudo, con carne, mucha car­ ne, sin hueso, no mucho hueso, es bueno, gustoso, es merecimiento de la gente. Aparte de la exactitud de la descripción, destaca el aspecto comestible. También Sahagún lo menciona entre las comidas de que usaban los señores. 31 Es curioso señalar que los tres anima­ les que llevan el nombre xólotl son comestibles y pertenecían a la dieta de los señores. Pero hasta ahora nada de 10 dicho sobre el axólotl, como no sea desde el punto de vistá occidental, justifica completamente el sentido de su nombre, pues no aparece como monstruoso o doble en los textos. Si recordamos el mito de Xólotl cuando no quería morir y la leyenda de Axolohua, que parece convertirse en ani­ mal lacustre para hablar con Tláloc, queda la impresión de que se sugiere un sentido de transformación. En ambos aparece el ajolote. La tesis que se propone es que se puede inscribir la "transfor­ mación" dentro del sentido de xólotl, por el dios, por el perso­ naje legendario y por el animal. Es muy posible que los nahuas, que comían ajolotes, los hubiesen pescado y guardado en alguna pila o estanque y lograran ver el proceso de transformación de algunos de ellos en salamandras, por 10 que axólotl se podría traducir también como "transformista del agua". No hay en los textos ninguna prueba en favor de esto, pero sí parece existir una arqueológica que presento. Las piezas, de colección particular, que ilustran, parecen haber formado una serie referente a la trans­ formación del ajolote en salamandra. La primera es el ajolote completo y las demás siguen los pasos de la transformación con algún detalle, mostrando los rasgos más característicos, que son el cambio de tamaño y posición de los ojos y la afilación de la ¡can Research and The University of Utah, 1951-1963, ñol es mla. 31Sahagún, op. cit., I1, 30S. XI, 64. La versión al es pa­ EL A:X:6LOTL cara. Si esto es ' en la época prehi~ de observación dI: ~ DE CULTURA NÁHUATL I 'cola ancha, gran bo­ , carne, mucha car­ roso, es merecimiento bu ~ i destaca el aspecto ntre las comidas de que los tres anima­ ~les y pertenecían a f f I~l axólotl, como no fa completamente el !monstruoso o doble cuando no quería ~ convertirse en ani­ tIa impresión de que n ambos aparece el ptl r scribir la "transfor­ 1 dios, por el perso­ ible que los nahuas, guardado en alguna e transformación de e axólotl se podría a". No hay en los ~ sí parece existir una ¡colección particular, ~e referente a la trans­ rrimera es el ajolote ~ transformación con Iracterísticos, que son ~ y la afilación de la ! r ¡ ¡XI, 64. I f ,I La versión al es pa- EL AXÓLOTL 173 cara. Si esto es correcto, probaría el conocimiento del proceso en la época prehispánica y abonaría mucho en favor de las dote s de observación del mundo natural por parte de los indios. t SIMBOLISMO DE 1 Dibl FOtOgI \¡ Los colores, núm mordíal en los co mágico del nativo una función precis~ prema trinidad del días, la fusión de 11 La vida materia antoja un mural CI en que se logra la a y cada uno de los y su razón de ser, ) dad y belleza al co: dad indígena. No CI armoniosa y total I base de la integrid El simbolismo de sado en observaciol parte esencial de lo exotéricas: el canto Las observacione! miento y Religión, turas clásicas mesol