— Bienes 198 - parafernales La adqíiisición, enajenación los inmuebles parafernales, gravamen dé y no necesita venia ' judicial, pero sí venia marital. La mujer separada jiidicialmente de bienes {art. 1995 C. €.), para enajenar o gravar sus bienes, no necesita penia marital, pero si ve nia judicial. * P 65.261. I. A. la Según de A. partida de matrimonio que se presenta, la proponente señora contrajo matrimonio en Italia el 6 de setiembre de 1919. Pretende la interesada que la compra del bien a que se refiere esta carpeta y la hipoteca del mismo, se hagan a su solo nombre, en virtud de existir absoluta separación de bienes con su esposo, por haber contraído matrimonio cónyuges en es Italia, donde el régimen imperante sobre los bienes de los ése. Se invoca para ello el art. 130 de nuestro- C. Civil. El solo hecho de haberse casado la interesada que fatalmente debe en Italia, bienes el no significa de sepa ración, pues podrían existir capitulaciones matrimoniales que lo modifica ran; pero no existiendo registro de éstas, no queda más recurso- que admi tir que no existen, cuando las propias partes interesadas o los terceros no denuncian su imperar con respecto a sus régimen existencia. Esta deficiencia legal puede producir en algún caso serías complicacio nes, pero queda más recurso que resignarse aceptando- la realidad de las cosas, porque si no la contratación se haría imposible. Con esta salve dad, aceptamos como verdad inconcusa, que la interesada en este caso está sometida al régimen de separación absoluta de bienes, de acuerdo con el no sistema italiano y con el art. 130 de nuestro Código Civil. En consecuencia la interesada puede comprar e hipotecar a su solo pero en mi concepto, necesita para ello venia marital, pudiendo prescindir de la judicial. Opino que no necesita esta última, porque esta de la mujer, no están desde luego, comprendi clase de bienes nombre; particulares dos en el art. 2037 C. existencia de la sociedad C, a los do-tales y presupone la que sólo se refiere de bienes. No existiendo tal sociedad ni tales legal — 199 - dótales, no es posible que a ellos les alcance una norma de excepción como la que contiene ese artículo, y que por tanto debe ser de interpretación es tricta. Además esta tesis de que en el caso que estudiamos no es necesaria la venia judicial, está respaldada por la opinión de la Fiscalía de lo Civil Gamarra (Rev. A. de Esc, abril de 1941, ps. -y también por la opinión del profesor de la materia en nuestra Facultad de Derecho Dr. J. Irureta Goyena (hijo) que en la yersión taquigráfica de sus clases refiriéndose a los bienes parafernales (p. 207) de 1er, 134 a turno y del Dr. 135) bajo el régimen de separación dice : "En ese caso los bienes raíces de mujer pueden venderse con la venia del marido, con el consentimiento la mujer, sin la venia judicial." o la de En cambio considero que es necesaria la venia marital, tanto para para hipotecar este bien, porque las disposiciones de los arts. 131 y 134 del C. Civil son de orden público en nuestro derecho, y fuera de los casos en que la propia ley (art. 1995 del C. Civil) autoriza adquirir a como prescindir de ella, será siempre ineludible. (Lagarmilla: "De la socie conyugal", ps. 141 a 143). (Argumento del art. 2404 C. C). dad H. E. Capozzoli.