Actas de las Jornadas Monográficas "Patologías de partes blandas de origen mecánico en el pie" A Coruña 13 y 14 de 2014 Editores: Guillermo Lafuente Sotillos María Reina Bueno Manuel Coheña Jiménez Comité científico Daniel López López Piedad Trujillo Pérez Blanca Lafuente Fuster José Manuel Castillo López ISBN: 978-84-941739-8-1 Depósito legal: B 27769-2014 © 2014. Asociación Española de Podología Deportiva y Sociedad Española de Biomecánica y Ortopodología. © 2014. Ediciones Especializadas Europeas SL. Determinación de la modificación de la presión plantar con y sin taloneras Lara Marta Ortiz González Ana Requeijo Constenla Daniel López López Jesús Luis Saleta Canosa Francisco Alonso Tajes INTRODUCCIÓN En la práctica clínica diaria podemos observar como un mal apoyo plantar (1) así como una distribución incorrecta de las presiones plantares puede originar múltiples patologías de origen mecánico en tejitos blandos del pie. La utilización de ortesis y calzado adecuados son básicos para lograr un buen equilibrio biomecánico y lograr un correcto apoyo ya que el calzado y la ortesis hecha a medida alteran la interfaz entre la planta del pie y el suelo a nivel mecánico y neurofisiológico (2). El empleo de taloneras cortas de alta densidad en los tratamientos ortopodológicos es habitual. Una de las funciones aceptadas para la talonera corta sin fenestrar es minimizar la carga de retropié desplazándola hacia antepié, produciéndose modificación de las cargas plantares (3). Distintas publicaciones nos muestran traslado de presiones de retropié a antepié en estática con alturas de tacón por encima de los 2 centímetros, aumentando considerablemente la presión en retropié en relación al antepié con una altura de 4,5cm (4) y un aumento de la presión en antepié con talonera de 1,7cm en dinámica (5). Con el fin de que las taloneras cortas puedan ser utilizadas con calzado convencional nunca deben superar el centímetro de altura (6) ya que alturas mayores comprometerían el espacio del calzado volviéndolos disfuncionales o precisarían ser usadas en calzado ortopédico. Teniendo en cuenta que las alturas de las taloneras cortas que se emplean en la confección de ortesis plantares hechas a medida oscilan entre los 5 mm y los 10 mm, la hipótesis de este estudio parte de que el uso de taloneas cortas de 5 mm y 10 mm en estática permite el traslado de presiones de retropié a antepié. OBJETIVOS Estudiar el traslado de presiones medias en la planta del pie en estática con el uso de taloneras cortas. Analizar si el uso de taloneras cortas puede ser factor protector o agresor en patología de origen mecánico en partes blandas del pie. MATERIAL Y MÉTODO Estudio cuasiexperimental con muestras relacionadas, llevado a cabo con alumnos de podología de la Facultad de Enfermería y Podología de Ferrol (entre 18 y 33 años de edad), mediante muestreo no probabilístico de conveniencia con un tamaño muestral de 64 pies (7). Los sujetos no padecían patología podológica que impidiese la bipedestación dentro de los parámetros de normalidad del individuo. Siguiendo las bases de la ética profesional y los estándares éticos de experimentación en seres humanos de la Declaración de Helsinki (Asamblea Médica Mundial) se obtuvo el pertinente consentimiento del Comité Ético de la Universidade da Coruña. Los sujetos participaron de forma voluntaria, tras la firma de consentimiento informado. Las mediciones de presión plantar se llevaron a cabo con la plataforma de presiones con el sistema Footcheker 4.0 (8) y 4 pares de taloneras cortas confeccionadas a medida en espuma de polietileno de densidad alta (Roval-foam) de 5 mm y 10 mm. En el análisis estadístico para la comparación de dos medias se utilizó una t de student para muestras relacionadas. RESULTADOS De los 32 sujetos que participaron en el estudio el 37,5% son varones y el 62,5% mujeres. La edad media de la población estudiada es de 24,2 años con una desviación estándar (DE) de 2,99. Los datos de traslado de presión plantar de retropié a antepié, medida en kilopascales (Kpa), con el uso en estática de taloneras cortas de espuma de polietileno de alta densidad (Roval-foam negro) de 5mm y 10mm respecto a la estática sin el uso de talonera cortas, se muestran en la tabla 1. Tabla 1. Diferencia entre las presiones medias de antepié y retropié sin uso de talonera y con taloneras de 5 y 10 mm Media Diferencia IC 95% P Inf Sup ANTEPIE Sin Talonera 13,3 0,8 -1,3 2,9 0,435 Talonera de 5mm 12,5 2,1 -0,3 4,2 0,092 Talonera de 10mm 11.2 RETROPIE Sin Talonera 12 0 -1,3 1,2 0,906 Talonera de 5mm 12 2,3 0,7 3,7 0,005 Talonera de 10mm 9,7 De los datos de esa tabla se desprende que no hay diferencias entre las presiones medias de antepié sin uso y con uso de taloneras, pero si hay diferencias estadísticamente significativas y clínicamente relevantes en la diferencia de la presión media de retropié sin uso de talonera y la presión media de retropié con el uso de talonera de 10mm, siendo esta última menor. DISCUSIÓN Los hallazgos de nuestro estudio ponen de manifiesto que no se produce traslado de presiones de retropié a antepié con el uso en estática de taloneras cortas de alta densidad de 5mm y 10mm. Si que disminuye la presión media en retropié con las taloneras de 10mm sin aumentar la presión media de antepié con las consecuentes ventajas que este resultado nos aporta a la práctica clínica diaria. Esta ventaja podemos aplicarla a aquellas patologías de partes blandas de origen mecánico en las que se requiera un acortamiento plantar, elevar el talón, disminuir la presión plantar de retropié y no aumentar la presión de antepié, como fascitis, tendinitis del tendón de Aquiles, Sever, talalgias, déficit de tejido graso, espolón calcáneo o bursitis retrocalcánea entre otros. Encontramos publicaciones que nos muestran traslado de presiones de retropié a antepié con alturas de tacón por encima de los 2cm en estática, a partir de 4,5cm aumenta considerablemente la presión en retropié en relación al antepié (4). Ambas son alturas de tacón superiores a las empleadas por las taloneras de nuestro estudio pero que nos hace pensar en el cambio de comportamiento que experimentan las presiones plantares al modificar la altura de tacón. Otros autores midieron la relación de presiones medias de antepié-retropié en dinámica (5) . En él, con una altura de talón de 17mm la presión en antepié aumenta, disminuyendo considerablemente la de retropié. En nuestro estudio con una talonera de 10mm la presión de antepié no varía, por lo que podemos suponer o bien que una vez se sobrepasan los 10 mm de talón la presión en antepié aumenta o es el comportamiento del pie en dinámica el que aumenta la presión media en antepié. Esto nos lleva a reflexionar sobre las carencias de este estudio, todas las incógnitas y vías de estudio que se nos abren. La primera de las reflexiones va encaminada a que la población aquí estudiada es una población joven, de 21 a 33 años por lo que los datos del estudio no son extrapolables a pie infantil o geriátrico, ya que estos presentan características morfológicas distintas a las habituales en un pie adulto (9). La segunda va dirigida a que la muestra de nuestro estudio es una muestra sana, sin patología podológica morfoestructural que impida la bipedestación, por lo que en pacientes con patologías concretas puede cambiar el patrón de desplazamiento de presiones. Tercero resaltar que se trata de un estudio en estática que ha tenido en cuenta únicamente presiones medias, no siendo extrapolables los resultados aquí obtenidos al comportamiento del pie en dinámica ni a los valores de presión máxima que pueda experimentar este pues encontramos estudios que nos muestran el comportamiento de las presiones en relación a presiones máximas en dinámica. Sin talonera y dinámica el pico de presión máxima se encuentra en antepié (10) (11). En cuarto lugar tener presente que el material empleado para este estudio es espuma de polietileno de alta densidad y que sería muy interesante estudiar el comportamiento de las presiones plantares usando para la talonera otros materiales con distintas propiedades y densidades. Y por último no debemos olvidar que el uso de calzado, los datos aquí estudiados no contemplan la y el correspondiente traslado de presiones que esta uso de calzado minimalista con el que podríamos sobre el traslado de presiones con el uso de talonera ortesis plantares va unido a la del altura de tacón que usará el paciente altura pudiera ocasionar, sería con el extrapolar los datos aquí obtenidos de 10mm. CONCLUSIONES El uso de taloneras cortas, en estática, de 5mm y 10mm no ofrece ningún cambio de presiones medias significativo en antepié respecto a las presiones medidas sin talonera, por lo que su uso no influirá negativamente en pacientes con patología de partes blandas en antepié que pudiera agravarse en caso de aumentar la presión plantar sobre esta zona. La presión media en retropié con talonera de 10mm es inferior a la presión media en retropié sin talonera, lo que nos lleva a considerar la talonera corta de alta densidad de 10mm como un elemento terapéutico útil, para lograr la disminución de presión en retropié, en aquellos tratamientos que así lo precisen. BIBLIOGRAFÍA 1. Ortiz, E. Plantalgias medias. Rev Asoc Argent Ortop. 2009; 74 (2): 176- 203. 2. Hilton, B. Menz, B. Stephen, R. Footwear and postural stability in older people. J Am Podiatrat Med Assoc. 1999; 89 (7): 346-357. 3. Golcher, A. Indicaciones de las ortesis plantares. EMC. 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Segunda parte. Pod. Clin. 2007; (8) número 2: 50-61. La influencia del grosor de la grasa subcalcánea y subcapital, en la presencia o ausencia de dolor de origen mecánico en el talón y en los metatarsianos, mediante la ultrasonografía como método de medición Alfredo Soriano Medrano Ángel Morales Ponce Rubén Sánchez Gómez Mónica Ruth González Gutiérrez Ricardo Becerro de Bengoa Vallejo Marta Elena Losa Iglesias INTRODUCCIÓN La almohadilla grasa es una estructura diseñada para la protección y amortiguación de impactos durante el ciclo de la marcha. Su composición, disposición (desde la fase de contacto de talón) y su capacidad para desplazarse acompañando el movimiento rotatorio de las cabezas metatarsales en la fase de elevación de talón hasta el instante final de la fase propulsiva, convierte a esta región anatómica en un pilar básico para la disipación de las fuerzas compresivas y de cizallamiento que, sobre las cabezas metatarsales y sobre el calcáneo, se producen. Varios estudios aseguran que la pérdida de esta almohadilla de protección se relaciona con la aparición de dolor metatarsal y talalgias (Gooding G. et al, 1986; Kwan et al, 2010). Figura.1 . Imagen obtenida del libro Sarrafian, S. K. (1983). Anatomy of the Foot and Ankle Descriptive, Topographic, Functional, para mostrar la aponeurosis plantar. HIPÓTESIS Si la grasa plantar de la zona de los metatarsianos y del talón, sirve para amortiguar los impactos contra el suelo, un menor espesor de dicha grasa estará relacionado con aumento en la aparición del dolor. OBJETIVOS 1) Analizar la medición de la grasa subcalcánea y subcapital en pies con dolor mecánico. 2) Comparar el espesor de la grasa subcalcánea y subcapital en presencia y ausencia de dolor mecánico, así como su relación con las distintas variables estaturo-ponderales. MATERIAL Y MÉTODOS Estudio observacional, descriptivo simple y prospectivo del fenómeno, desarrollado en un centro con todos los permisos médico-legales en regla desde el año 2008 al 2011. Para nuestro estudio se utilizó el transductor de ultrasonido portátil Bodymetrix™, que permite medir el espesor de grasa y expresarlo en milímetros. Se seleccionaron con la ayuda de un método de elección aleatoria de pacientes la muestra para el estudio: - Figura.2. Muestra la sonda de ultrasonidos BodyMetrix™ utilizada para las mediciones del estudio. Muestra de grasa subcalcánea: 39 unidades de las cuales 21 presentaban dolor en la zona del talón y 18 sin dolor. Muestra de grasa subcapital: 41 individuos, a los que se midió la almohadilla grasa plantar bajo la cabeza del primer metatarsiano, 25 con dolor 16 sin dolor Se definieron las siguientes variables: Género, Dolor, Grasa, Altura, Peso, IMC y Edad. Tras pasarle a cada paciente un consentimiento informado y un cuestionario con una serie de preguntas filtro y criterios de exclusión, se procedió al proceso de medición: - - Medición grasa subcapital: Colocar el pie del paciente con la MTF en posición neutra para no desplazar grasa y marcar punto de interés a medir. Medición grasa subcalcánea: Colocar el pie del paciente a 90°, localización anatómica, marcaje del punto de interés y medición con la sonda Bodymetrix™. Figura.3. Imagen tomada para el estudio perteneciente a una unidad de medida, muestra el proceso de medición con la sonda. La validez y fiabilidad de esta tesis viene dada por ser un estudio randomizado y por los estadísticos que se utilizaron. RESULTADOS Se encontró asociación entre el aumento del peso corporal y la presencia de dolor en el talón, en los sujetos medidos en nuestro estudio. Existe asociación entre el espesor de la grasa subcalcánea y la variable Género, siendo los hombres los que presentaban valores más altos. No hay diferencias entre hombres y mujeres para la grasa subcapital, pero el dato se aproxima mucho a la significación; Levene (0,67) ¿Influencia del calzado de tacón elevado y mayor prevalencia de deformidades congénitas y adquiridas en el pie? Se observó relación entre el espesor de la grasa subcalcánea y subcapital del primer metatarsiano y los pies con dolor mecánico, siendo los pacientes con mayor espesor los que no presentaban dolor. CONCLUSIONES - La sonda BodyMetrixT M es un método fiable para medir el espesor de la grasa subcalcánea y subcapital del primer metatarsiano, ya que a la luz de los resultados obtenidos en lo referente a la fiabilidad, reproducibilidad y repetitividad del aparato, así nos lo demuestran. - Encontramos imprescindible que el Podólogo determine clínicamente el espesor de la grasa subcalcánea y subcapital del primer metatarsiano. - La evidencia demuestra que hay una relación directa entre pérdida del espesor y úlcera subcalcánea y subcapital del primer metatarsiano. El método de ultrasonografía con la sonda Bodymetrix™ puede ser un método diagnóstico y a la vez preventivo, sobre todo para pacientes con pie de riesgo. - El podólogo debe tener en cuenta a la hora de aconsejar a sus pacientes un calzado deportivo, no sólo las variables tiempo de entrenamiento, modalidad, peso, etc. sino también la variable disminución de la grasa plantar, ya que a la luz de los resultados obtenidos en nuestro estudio, influye en la aparición de dolor mecánico. BIBLIOGRAFIA 1. Jorgensen U, Bojsen-Moller F. Shock absorbency of factors in the shoe/heel interaction, with special focus on the role of the heel pad. Foot Ankle 1989;9:294–299. 2. Bojsen-Møller,F.,Jørgensen U. (1991) The Plantar Soft Tissues: Functional Anatomy and Clinical Applications. En: Jahss MH (ed). Disorders of the Foot and Ankle-Medical and Surgical Management.2ª ed.Philadelphia: W.B.Saunders; 1991. p. 532-540. 3. Jorgensen U. Achillodynia and loss of heel pad shock absorbency. 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Nass DE. The thickness of the heel pad leaded by body weight in obese and normal weight adults. Biomech Lab 2005;45:117-121. 19. Declaration of Helsinki of the World Medical Association on Ethical Principles for Medical Research Involving Human Subjects principles. Adopted by the 18th World Medical Assembly, Helsinki, Finland, June 1964 and amended by the 29th World Medical Assembly, Tokyo, Japan, October 1975, the 35th World Medical Assembly, Venice, Italy, October 1983 and the 41st Medical Assembly World, Hong Kong, September 1989. La aponeurosis plantar como factor etiológico del Hallux Limitus Rubén Sánchez Gómez M.Ruth González Gutiérrez Ángel Morales Ponce Alfredo Soriano Medrano Ricardo Becerro de Bengoa Vallejo Mª Elena Losa Iglesias INTRODUCCIÓN La aponeurosis plantar es un tejido semielástico sensible a condiciones de estiramiento o de retracción provocadas en gran medida por el tipo de pisada. La aponeurosis es responsable de la recepción de impactos contra el suelo, del mantenimiento del equilibrio de la bóveda plantar y de la estabilidad de la primera articulación metatarsofalángica en el momento del apoyo completo, pero sobre todo en el despegue, cuando el cuerpo pivota todo su peso sobre el suelo para proceder al desplazamiento. Aunque dicho tejido tiene un origen común, su inserción está dividida en tres septos o fascículos, medial, medio y lateral, que atañen a la primera articulación metatarsofalángica (IAMTF), a las articulaciones metatarsofalángicas centrales y a las laterales, respectivamente, siendo el fascículo medial el más importante por su relación con la biomecánica del despegue. Por dicha distribución anatómica, puede alterar el correcto funcionamiento de IAMTF si el mecanismo de Windlass inverso se ve modificado por algunos patrones patológicos de la biomecánica. Se sabe que el mecanismo de Windlass inverso es el relacionado con el mantenimiento de la bóveda plantar en el momento del despegue, situación en la que la correcta movilidad de la falange proximal del hallux sobre el I metatarsiano (I MTT) es básica para la progresión fisiológica del pie en su pivotaje sobre el suelo. Hipótesis La tensión de la aponeurosis plantar puede ser un factor de coaptación articular de la IAMTF siendo factor etiológico del Hallux Limitus funcional. Objetivos -Describir el comportamiento fisiológico de la aponeurosis plantar -Describir la patomecánica de la aponeurosis plantar en relación al desarrollo de la limitación de la movilidad de la IAMTF. METODOLOGÍA Revisión bibliográfica a través de diversos libros, revistas y de las principales bases de datos (Medline, cinahl, PsycINFO, ICYT, ISOC, IME.) y la experiencia profesional. RESULTADOS y DISCUSIÓN De los artículos encontrados, la mayor parte de ellos relacionan la presencia de Hallux Limitus con un exceso de pronación y/o de un descenso del ángulo de declinación del I MTT. Sin embargo, en dos de estos artículos se habla sobre la tensión de la aponeurosis plantar como componente que puede provocar limitación de la movilidad de la IAMTF, favoreciendo el desarrollo del Hallux Limitus Funcional. CONCLUSIONES El hallux limitus funcional también tiene una etiología relacionada con la afectación de partes blandas: -Exceso de tensión en el fascículo medial de la aponeurosis plantar -Exceso de tensión en el tendón del Flexor Largo del Hallux Biopuntura e n e l s índrome miofas cial Eficacia te rapé utica e n e l abordaje de la fas citis plantar Fernando Ares Bella INTRODUCCIÓN Al igual que otros signos clínicos, la fascitis plantar puede formar parte de un síndrome más complejo que hace su abordaje terapéutico complicado y falto de eficacia. El conocimiento del sistema miofascial, del concepto de cadenas musculares, y su implicación en el agotamiento del sistema postural de compensación nos ayudan a contemplar la fascitis, no como una entidad patológica aislada, sino como parte de un síndrome miofascial. El abordaje terapéutico del Punto Gatillo de la musculatura implicada en la producción del cuadro clínico, mejora las expectativas terapéuticas aportando una visión global de la compensación postural y el desarrollo patomecánico. MARCO TEÓRICO Simons y Travell desarrollaron un método de análisis conductual de cadenas musculares que permitía evaluar la implicación de diferentes músculos en el desarrollo de cuadros clínicos como la fascitis plantar, al que denominaron síndrome miofascial. Este sistema, desarrollado en los años ochenta ha sido validado de forma continua por las diferentes investigaciones realizadas a posteriori. Hoy en día es una práctica constante en el campo de la osteopatía, la fisioterapia o la Medicina del Deporte. Su comprensión y manejo permite un abordaje de los cuadros clínicos más completo y, por tanto, eficaz. OBJETIVOS Valorar la eficacia de la Biopuntura, con biomedicamentos, sobre PG de musculatura implicada en la producción del cuadro clínico diagnosticado como Fascitis Plantar. Valorar la técnica, viabilidad y complejidad. Valorar la respuesta del paciente, tolerancia y apreciación final. METODOLOGÍA El estudio se realiza sobre una población de 54 deportistas, 23 mujeres y 31 hombres, cinco de ellos deportistas de alta competición. Las edades comprenden entre los 23 y los 49 años. Todos fueron diagnosticados como fascitis plantar, de larga evolución (>5 meses) y no obtuvieron los resultados esperados. Se valora la implicación de Músculo tibial posterior, sóleo, gemelo interno, Abd hallucis, Interoseos y cuadrado plantar. Se implementa un protocolo de Biopuntura sobre PG y áreas de dolor referido con el coctel terapéutico TRAUMEEL+SPASCUPREEL+COENZYME COMP. Se infiltra con jeringas de 10cc, marca BRAUN injekt, y agujas Sterican B/BRAUN 0.30x12 mm BL/LB para áreas de dolor referido y Sterican B/BRAUN 0.40x40 mm BL/LB. Se realizan una sesión por semana, con un máximo de tres, en un período máximo de cuatro semanas. Se realiza una técnica de valoración previa, tipo VAS, y posterior al tratamiento. Se valora funcionalidad, dolor y tiempo de recuperación. RESULTADOS 6 pacientes abandonaron el tratamiento, por diferentes motivos (4♂:2♀). El 85% de los sujetos volvieron a los entrenos rutinarios de manera normal. Tan solo 2 de cada 10 sujetos necesitaron tratamientos complementarios, como soportes plantares, para volver a la actividad deportiva. DISCUSIÓN El SMF es de por sí, una entidad compleja que requiere un mayor estudio y comprensión. No hay, todavía, estudios que avalen la eficacia de esta perspectiva diagnóstica y terapéutica que no asegure que el enfoque utilizado sea el correcto. Sin embargo es práctica habitual, con excelentes resultados, en clínica. Los actuales avances en el conocimiento de la fisiopatología en la génesis de SMF nos permiten ir afianzando los protocolos terapéuticos, cobrando mayor fuerza las técnicas mínimamente invasivas como la biopuntura, la acupuntura o la punción seca en el tratamiento de PG. CONCLUSIONES Este estudio nos permite valorar dos protocolos utilizados de manera sinérgica, el concepto de SMF y el uso de medicamentos Biorreguladores en técnica de Biopuntura. Los resultados obtenidos nos permiten aseverar: 1. La aplicación de los conceptos miofasciales nos aportan una visión holística de la concepción del cuadro clínico fascitis plantar. 2. La aplicación del protocolo de Biopuntura mejora la eficacia del tratamiento. 3. La aplicación del protocolo de Biopuntura reduce el uso de soportes plantares u otras medidas. 4. El medicamento Biorregulador se muestra de elección en el tratamiento de estos síndromes. 5. La valoración del paciente es positiva en todos los casos y reduce el tiempo del retorno a la actividad deportiva BIBLIOGRAFÍA 1. M. Ferrer Pastora, J. Juste Dıaza, V. Inigo Huartea, M.J. Calatayud Camposb, M.D. Rubio Fernandeza y R. Gomez-Ferrer Sapina. Mesoterapia como opción 2. 3. 4. 5. terapéutica en patología dolorosa del aparato locomotor. Rehabilitación (Madr). 2010;44(4):311–316 Felix Manuel Francisco Hernández. Síndromes miofasciales. Reumatol Clin. 2009;5(S2):36–39. D.G. Simons. Review of enigmatic MTrPs as a common cause of enigmatic musculoskeletal pain and dysfunction. Journal of Electromyography and Kinesiology, 2004; 95-107. Carel Bron, PT, MT, Jo Franssen, PT, Michel Wensing, PhD, Rob A.B. Oostendorp, PhD, PT, MT. 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En la presente comunicación se explicarán brevemente las nuevas tendencias en el desarrollo de tecnología para la práctica de la podología y las líneas de I+D que está desarrollando el IBV. VALORACIÓN BIOMECÁNICA En el campo de la valoración biomecánica orientada a la podología, además de los sistemas biomecánicos más clásicos como el registro de las presiones en la planta del pie, tanto plataformas de presiones como plantillas instrumentadas, ha surgido como tendencia el desarrollo de nuevos sistemas de bajo coste para el análisis de los movimientos que pueden permitir al podólogo registrar los ángulos en las diferentes articulaciones del pie y la pierna. Hasta la fecha, los sistemas para el análisis de movimientos utilizados en biomecánica deportiva tienen un coste muy elevado, además de ser complejos en su uso, requiriendo mucho tiempo para el registro y extracción de parámetros. Por lo que su uso se ha centrado principalmente en la investigación. De esta forma, han comenzado a aparecer sistemas comerciales para el análisis de movimientos basados en sensores inerciales como acelerómetros. Pero estos sistemas, aunque son más económicos que los utilizados en laboratorio, siguen teniendo grandes desventajas, como la deriva de las señales, que resultan en una baja precisión, y la pérdida de datos debida a las interferencias electromagnéticas. Para resolver estos problemas, en el IBV se está desarrollando una nueva tecnología para el análisis de movimientos basada en fotogrametría (imagen de vídeo) que es el sistema más extendido en la investigación biomecánica. Este sistema debe ser capaz de calcular ángulos y posiciones en tres dimensiones con gran precisión y sencillez, y a la vez debe tener un coste razonable para su utilización por profesionales de la salud del pie. Para ello, se ha diseñado un sistema que consta de una única cámara y extrae la información 3D a partir de un marcador plano. Este tipo de marcadores se utilizan con frecuencia en aplicaciones de realidad aumentada pero nunca antes se habían utilizado para obtener medidas biomecánicas. Dichos marcadores son detectados en cada fotograma utilizando técnicas de análisis de imagen y, a partir de la perspectiva con la que se observan desde la cámara y conociendo sus dimensiones, se extrae de forma automática su posición y orientación. De esta forma, si se coloca un marcador en el pie y otro en la pierna (Figura 1), se podrá conocer la posición relativa de un segmento respecto del otro a lo largo del tiempo. Los resultados obtenidos se han comparado con un sistema de fotogrametría estándar de alta precisión: 8 cámaras y un modelo de 30 marcadores; los resultados demuestran que esta técnica es adecuada para la medición de la cinemática del tobillo durante la carrera. Figura 1. Izquierda: Corredor instrumentado con marcadores planos. Derecha: Detección de los marcadores planos y representación de los ejes del pie y la pierna. Otra de las líneas en las que el IBV está trabajando es la captura de la forma y dimensiones de la planta del pie en 3D. En la actualidad, la tecnología más precisa para obtener la información real en 3D de la planta del pie son los escáneres que proyectan un haz láser. Pero existen diferentes tendencias para registrar la forma del pie con dispositivos low cost como la Kinect, aunque por el momento los resultados no son satisfactorios. Desde el IBV se está desarrollando una línea de investigación en esta área. En la actualidad se dispone del escáner láser de la planta del pie con mejores prestaciones y más económico del mercado (Figura 2) y se ha desarrollado un sistema de captura del pie que con solo tres fotos tomadas desde el móvil permite obtener una representación en 3D. Este innovador sistema de captura de la forma del pie aun no tiene aplicación clínica donde es necesaria una gran precisión en pies patológicos, pero es posible que en los siguientes años se consigan sistemas de muy bajo coste con altas prestaciones. Figura 2. Izquierda: Escáner laser de la planta del pie ShapeScan100/IBV desarrollado por el IBV. Derecha: Comparación de la precisión del escáner con un pie real. NUEVAS FORMAS DE FABRICACIÓN PERSONALIZADA Desde finales de los años 80 se ha extendido el uso de los sistemas de prototipado rápido, actualmente llamados impresoras 3D. Estas tecnologías están basadas en la descomposición de modelos de diseño por ordenador (CAD) en 3D, en delgadas capas que son reproducidas físicamente y superpuestas una sobre otra “capa por capa”. Esta tecnología surgió como alternativa a la fabricación por control numérico basada en el arranque de material, ya que resulta muy poco eficiente por el gran desperdicio de material que se tira, y al proceso de termoconformado, ya que evita las tensiones del material producidas por el proceso de calentamiento y deformación. Figura 3. Izquierda: Tecnología aditiva. Derecha: tecnología de arranque de material. En el IBV se ha desarrollado una línea de investigación y desarrollo para la puesta en marcha y validación de un proceso de fabricación de ortesis plantares mediante tecnología aditiva. La tecnología de Sinerizado Selectivo Láser utilizando material de poliamida permite la fabricación de piezas para ortesis totalmente funcionales con las ventajas de poder personalizar el espesor, el diseño y las características mecánicas con un solo clic (figura 4). Figura 4. Izquierda: Máquina de Sinerizado Selectivo Láser. Derecha: Estructura semirígida de poliamida para ortesis plantares. Fuerza (N) Se ha realizado la validación de estas ortesis mediante diferentes tests con máquinas y con pacientes con excelentes resultados. A continuación se presenta la comparativa de las propiedades mecánicas de fuerza-deformación de diferentes materiales estructurales utilizados habitualmente en las ortesis plantares en comparación con los fabricados mediante impresora 3D (figura 5). Desplazamiento (mm) Impresora 3D Impresora 3D, con ranuras Polipropileno avanzado Resina Subortholen Polipropileno estándar Figura 5. Curvas de características mecánicas de diferentes materiales utilizados en la fabricación de la pieza estructural de las ortesis plantares. Como puede verse en el gráfico, mediante este nuevo sistema de fabricación es posible reproducir las propiedades mecánicas de los materiales utilizados habitualmente en las ortesis plantares. Consiguiendo mayor o menor rigidez mediante el cambio de espesor o introduciendo diferentes geometrías de ahorros en la plantilla, como ranuras. CONCLUSIONES En diversas disciplinas médicas se están produciendo profundos cambios en la forma en la que se recoge la información del paciente y se diseñan y fabrican soluciones personalizadas para resolver sus problemas de salud. En el ámbito de la podología se está iniciando este proceso de cambio, pero pese a que comienzan a aparecer tecnologías de gran interés para este colectivo, el avance es quizás menor que en otros profesionales. La podología deportiva posee un carácter más innovador que otras áreas de la salud del pie, ya que debe enfrentarse a problemas más exigentes y complejos. Por esta razón podría actuar como vanguardia y valedora en la introducción de estas nuevas tecnologías en el mundo de la podología. Efectividad del Índice del Arco vs clasificación del pie en la edad escolar Ana Requeijo Constenla Lara Marta Ortiz González Daniel López López María Ángeles Bouza Prego Francisco Alonso Tajes Adolfo Bautista Casasnovas INTRODUCCIÓN En la consulta podológica podemos encontrarnos con distintas alteraciones, desde las alteraciones dermatológicas más frecuentes como helomas, nevus, verrugas plantares, dermatomicosis,… hasta alteraciones biomecánicas producidas por alteraciones en la morfología del pie. Pero uno de los motivos más frecuentes de consulta es la presencia de pies planos en niños de corta edad. En el niño muchas patologías y deformidades en el pie no son dolorosas y pueden pasar desapercibidas1 . Las patologías que no son tratadas tienden a cronificarse y se manifestarán en la edad adulta, con sintomatología dolorosa, y cuyo único tratamiento puede ser paliativo; así afecciones y deformidades de los pies en la infancia, no tratados, pueden acarrear en la edad adulta complicaciones ósteo-articulares secundarias a lo largo de la cadena cinética ascendente: en rodillas, caderas, raquis, etc. 2 El pie humano, por su composición y estructura, tiene tres funciones fundamentales: apoyo, amortiguación y soporte del peso. Son muchos los factores que influyen en la estructura y funcionamiento del pie, pero uno de ellos es el peso corporal3 . Así, el problema del sobrepeso y la obesidad en la infancia es uno de los problemas de salud más importantes en Europa4,5 y su influencia en los arcos del pie ha sido tratado frecuentemente en un contexto de la influencia del peso excesivo en la incidencia del pie plano3,6,7,8,9 . En la práctica clínica diaria, realizamos un protocolo de exploración biomecánico para valorar la presencia de alteraciones en los pies. En los niños se valora el Arco Longitudinal Medial (ALM) y para ello se utiliza la huella del pie. Para valorar el ALM se han utilizado diversos métodos como las huellas de tinta o digitales que se pueden realizar en estática o en dinámica, técnicas fotográficas y otros métodos directos como las medidas somatométricas, la evaluación clínica, evaluación radiográfica, y ecografía3 , medición tridimensional del arco10 ,…Son varios los investigadores que han estudiado la huella del pie ,tanto en estática como en dinámica, en deportistas, en pacientes mayores, en niños3,6-18 , y para ello han utilizado distintos métodos para clasificar el pie, entre otros, el Índice de Staheli9 , Método de Hernández Corvo13 , Indice Chippaux Smirak6,16 y el parámetro del Indice del Arco descrito por Cavanagh y Rodgers 17 ha sido utilizado por muchos investigadores8,9,12,13 han utilizado el cálculo del Indice del Arco para clasificar los pies, en función del valor obtenido, como pies con arco aumentado (pie plano) pies con arco disminuido (pie cavo) o pie con arco normal. El cálculo del Indice del Arco, descrito por Cavanagh y Rodgers es una medida útil y un predictor válido de la altura del arco interno del pie 13 . La valoración del ALM se puede hacer mediante la valoración de la imagen de la huella obtenida de los pies sobre el podoscopio 18 , sobre la plataforma de presiones7 , las huellas obtenidas utilizando el pedígrafo6,8,15 , así como, el método del fotopodograma11 . OBJETIVOS Los objetivos de este trabajo han sido: 1) Calcular el Índice del Arco de las huellas plantares de niños de edades comprendidas entre 3 y 14 años, para clasificar los pies en función del valor obtenido del mismo. 2) Determinar si existe correlación en el tipo de arco del pie según el método usado para su clasificación, es decir, según los resultados del cálculo del Indice del Arco, a partir de una pedigrafía, y la valoración clínica de la huella en el podoscopio y en la plataforma de presiones. 3) Establecer si existe relación entre el Indice de Masa Corporal (IMC) y el Arco Longitudinal Medial (ALM) MATERIAL Y MÉTODOS El estudio consistió en la exploración de los pies de 130 niños de edades comprendidas entre los 3 y 14 años. Se trata de un estudio observacional descriptivo realizado en una clínica podológica en el período comprendido entre Enero y Diciembre de 2013. La selección se realizó por muestreo no probabilístico de tipo consecutivo. Se incluyeron en el estudio aquellos niños de edades comprendidas entre los 3 y 14 años y cuyos padres habían solicitado la inclusión en el estudio y que habían firmado el consentimiento informado y se excluyeron aquellos participantes que presentaban traumas previos que modificasen la morfología del pie. La investigación fue aprobada por el Comité de Investigación y Ética de la Universidade da Coruña (España) con número de expediente CE 15/2013. Todos los padres y tutores legales firmaron el consentimiento informado, al tratarse de participantes menores de edad, antes de ser incluidos en el estudio y se preservaron los estándares éticos de experimentación en seres humanos de la Declaración de Helsinki (Asamblea Médica Mundial), en el Convenio del Consejo de Europa relativo a los derechos humanos y la biomedicina, en la Declaración Universal de la Unesco sobre el genoma humano y los derechos humanos y de los organismos nacionales o institucionales apropiados. La exploración y mediciones se llevaron a cabo por un solo clínico, y en primer lugar se midió la altura y el peso y se calculó el percentil del escolar. Se calculó el Índice de Masa Corporal (IMC) para determinar el grado de sobrepeso y obesidad de los participantes. Se consideró que un niño tiene sobrepeso u obesidad cuando su IMC fue mayor o igual al percentil 85 20 . A continuación se han tomado las huellas plantares en estática mediante un pedígrafo, obteniéndose las huellas en papel que luego se escanearon, y mediante el programa Auto CAD 2013 se hallaron las superficies de las huellas13,21 y se calculó el Índice del Arco según la fórmula descrita por Cavannagh y Rodgers . El IA está definido como “la proporción entre las áreas de contacto de las diferentes partes de la huella plantar excluyendo los dedos”. El pie se divide en tres partes iguales, pero para ello se toma primero el eje axial del pie, que es una línea que va desde el centro del talón hasta lo más alto del segundo dedo. Las tres partes del pie se corresponden con la parte anterior (A), la parte media (B) y la parte posterior (C) del pie (véase Figura 1) IA = B/ A + B + C Figura 1.División del Pie en tres áreas. El IA es la proporción del área del medio pie (B) entre la superficie total (A+B+C) del pie exceptuando los dedos. Así se obtienen los siguientes valores que determinan el tipo de pie: • Pie cavo si el IA es menor de 0,21 • Pie normal si el IA está comprendido entre 0,21 y 0,26 • Pie plano si el IA es mayor de 0,26 Las imágenes de las huellas de los pies en el podoscopio se tomaron con una cámara digital Canon Power Shot A3400IS y, luego se visualizaron en la pantalla del ordenador y se clasificaron los pies con arco normal, con arco aumentado y con arco disminuido (véase Figura 2). Figura 2. Huella plantar en estática. En estática también se han obtenido las imágenes de las huellas con la plataforma de presiones FootChecker 4.0 (véase Figura 3). Figura 3. Huella Plantar obtenida mediante plataforma de presiones. Para el análisis de los datos se utilizó el paquete estadístico IBM SPSS Statistics 19 para Windows y se realizó un análisis descriptivo de las variables incluidas en el estudio. Las variables cualitativas se presentan como valores absolutos y porcentajes. De las variables cuantitativas se describen la media, desviación típica (DT). Para la comparación de varias medias se realizó un análisis de la varianza (ANOVA) para muestras independientes RESULTADOS Características de la muestra Un total de 130 escolares completaron el curso de la investigación. La edad, el sexo, la altura, el peso, el IMC y el número de niños obesos aparecen en la Tabla 1. Tabla 1. Características sociodemográficas de la muestra. Arco Normal Arco Aumentado Arco Disminuido 0,21<IA<0,26 Nº casos (n=41) IA>0,26 (n=33) IA<0,21 (n=56) Sexo Femenino 23(56,1%) 12(36,4%) 34(60,7%) Masculino 18(43,9%) 21(63,6%) 22(39,3%) Edad (años) 8,59 (3,11) 6,67 (3.26) 9,96 (2,01) 36,04 (13,88) 28,71 (18.46) 37,41 (11,82) Talla (metros) 1,34 (0,19) 1,22 (0,19) 1,42 (0,14) IMC 18,94 (3,19) 14,47 (4,38) 17,86 (2,63) n=17 (41,46%) n=6 (18,18%) n=9 (16,07%) Peso (kg) Obesos Cuando establecemos la correlación entre el tipo de arco de pie (normal, aumentado o disminuido) calculado mediante el Índice del Arco y el valorado en la clínica mediante el uso de la plataforma objetivamos que existe una correlación significativa (p>0,01) entre los resultados obtenidos por ambos tipos de mediciones. Lo mismo ocurre al establecer la correlación entre el tipo de arco del pie calculado mediante la fórmula del Índice del Arco y el observado en la imagen de la huella del pie en el podoscopio (p>0,01) Por el contrario no se objetiva correlación entre el IMC y el Índice del Arco DISCUSIÓN Los resultados del estudio nos muestran que el valor del Índice del Arco es un método objetivo válido para clasificar el tipo de pie en función del tipo de Arco Longitudinal Medial (ALM) y al compararlo con la observación clínica de la huella, utilizando el podoscopio o la plataforma de presiones, hemos obtenido resultados similares, con un solo observador. Otros investigadores, como Berdejo del Fresno et al.13 , a diferencia de nuestro estudio, han encontrado alta variabilidad al comparar los resultados obtenidos entre dos métodos paramétricos; también es cierto que hemos encontrado pocos estudios en la literatura con una metodología similar a la adoptada en esta investigación, ya que hay autores que utilizan el mismo método de obtención de la huella, mediante el pedígrafo, pero utilizan otros métodos paramétricos para el cálculo del ALM 6,15 . Wong et al.18 concluyen, en su estudio, que da una excelente fiabilidad, para el cálculo del Índice del Arco, la utilización de la fotografía digital de la huella en el podoscopio. En la literatura se relaciona el sobrepeso y la obesidad con cambios estructurales en el pie y, por tanto, con los valores de la altura del arco 3,6,7,8,9,22 , así, la mayoría de las investigaciones reflejan que los pies de los niños con sobrepeso u obesidad presentan una disminución de la altura del ALM, y el exceso de peso afecta a la estructura del pie del niño22 . Sin embargo, los resultados de nuestro estudio no muestran una correlación significativa entre el IMC y el tipo de arco del pie que han presentado los niños, probablemente por la diferencia de grupos de edad entre los diferentes estudios, ya que, algunos de ellos8 estudian niños menores de 6 años y como otros autores manifiestan, su arco puede no estar aún formado 10 CONCLUSIONES El cálculo del Índice del Arco, a partir de la toma de huellas plantares realizadas con un pedígrafo, nos permite clasificar el tipo de pie, en función de la elevación del arco longitudinal medial, en pies con arco aumentado, disminuido o normal. El diagnóstico del tipo de arco del pie es independiente de la técnica utilizada para su valoración sin influir el IMC en el tipo de arco que presenta el pie. BIBLIOGRAFÍA 1. Gentil I, Becerro, R. Podología preventiva en el niño de edad preescolar y escolar. El Peu 2001; 21(3):129-137. 2. Ramos J, Lomas MM, Martínez L, García R. 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El ciclismo como otros deporte exige una gran coordinación y trabajo de las extremidades inferiores, siendo el pie uno de los grandes protagonistas, ya que trasfiere las fuerzas desde los músculos de las extremidades inferiores hasta el pedal, por lo que cualquier modificación que se produzca, ya sea ósea , músculo ligamentosa o mecánica influye en la biomecánica del pedaleo predisponiendo al organismo a sufrir lesiones. Otro aspecto a destacar es la articulación de la rodilla en el ciclista, biker´ knee. Dicha articulación es el punto medio entre muslo y pie, y la que sufre más variaciones en el ciclismo, experimentando determinados momentos de flexo-extensión; acentuados por la presencia de una disimetrías de miembros inferiores. Por ello es necesario su estudio cinemático y un adecuado ajuste del ciclista, con la idea de establecer un protocolo de exploración clínica de las disimetrías en el ciclismo 1,2 . MARCO TEÓRICO El ciclismo ha merecido particular atención en investigación biomecánica en relación al rendimiento. Es por ello, que se da importancia al ajuste del ciclista a la bicicleta así como al gesto deportivo que el ciclista desempeña en su actividad deportiva. En los últimos años, el uso de la bicicleta ha aumentado exponencialmente, tanto desde el punto de vista competitivo como lúdico, y con ello la incidencia de lesiones a nivel de la rodilla. Las lesiones más frecuentes que se producen en la rodilla engloban dolor fémoropatelar , molestias latero mediales en la articulación de la rodilla, sobrecarga a nivel infrapatelar y síndrome cintilla iliotibial. Esta articulación soporta gran parte de las cargas durante el gesto de pedaleo representando el 25 % de las lesiones no traumáticas3,4 en ciclistas de cualquier nivel , siendo más frecuentes en los de un alto nivel dado por la gran cantidad de kilómetros que recorren en los entrenamientos. En cuanto a las disimetrías, existen muchas definiciones sobre el concepto de disimetría, para algunos autores asimetría o disimetría. Igualmente, algunos autores, establecen diferentes métodos clínicos para su diagnóstico, modo de tratamiento, influencia en la extremidad inferior , etc. Entre las definiciones encontramos: "Acortamiento de un miembro con respecto al contralateral. Ésta desnivelación de longitud de una pierna con respecto a la contralateral trae como consecuencia cojera más o menos ostensible dependiendo de la intensidad de la disimetría” 5 "Diferencia de longitud existente entre las extremidades inferiores” 5 La diferencia de longitud de los miembros inferiores conlleva a desórdenes musculo esqueléticos que pueden ser motivo de lesiones. Actualmente no hay un acuerdo establecido por la comunidad científica para justificar la cantidad de compensación como tratamiento a la disimetría. Algunos investigadores, entre ellos Blake RL han intentado cuantificar una disimetría de longitud de los miembros inferiores significativa, aceptando un intervalo que va desde 20 a 30 milímetros5. Otros como Etnier JL definen una disimetría en términos de resultados funcionales6 . Gross RH determinó una asociación definida entre la disimetría de longitud de los miembros inferiores y el dolor lumbar 7,8 mientras que en otras publicaciones se afirma que no existe relación alguna 9 . Las disimetrías tienen origen funcional o estructura. Según, se ha comprobado en la literatura, el origen funcional se debería a una hiperlaxitud ligamentosa junto con posiciones o maniobras mantenidas que alterarían a la cinemática de la articulación, entre otras causas. La afectación estructural se debería a alteraciones en la anatomía de la articulación, en el cinturón pelviano o diferencia anatómica de longitud de los miembros inferiores (anisomelia). 10 Sobre otras repercusiones, Whilst Blake and Ferguson determinaron que "la compensación más común de la discrepancia de longitud en los miembros inferiores, es una escoliosis funcional o actitud escoliótica"12 . Lorimer , refiriéndose a las partes del cuerpo, explicaba que " debido a las compensaciones, en el miembro mas largo suele haber una predisposición a sufrir dolores de rodilla por la zona medial, debido a la rotación interna producida por la pronación de la articulación subastragalina".1 OBJETIVOS 1. Valorar la compensación ¿Cuánto compensamos? ¿Dónde? 2. Determinar la influencia de la disimetría de los patrones angulares (ángulo muslo-pie) aplicando alza dentro de la zapatilla. 3. Valorar comportamiento de la rodilla en los planos Sagital y frontal. 4. Establecer un protocolo de exploración clínica de las disimetrías en el ciclismo. HIPÓTESIS Tras la revisión bibliográfica, se observa que existe un vacío con respecto a las compensaciones de las disimetrías en el ciclismo. Las investigaciones más recientes señalan como posible causa de lesiones de rodilla no traumáticas al procedimiento de cuánto y cómo compensar una disimetría en el ciclista procediendo a la variación de ésta mediante el acierto/error, es decir, sin una base científica pudiendose alterar parámetros rotacionales y torsionales del miembro inferior y alterar el rendimiento deportivo así como a generar lesiones. Por lo tanto, la hipótesis de este trabajo es que la disimetría de miembros inferiores favorece la inestabilidad lateral de la rodilla así como al ángulo muslo-pierna, provocando patocompensaciones a nivel de la tibioperonea-astragalina y pelvis influyendo en el rendimiento deportivo. PROTOCOLO DE EXPLORACIÓN Y AJUSTE DEL CICLISTA. Una vez explorado cada ciclista mediante el protocolo de exploración establecido por el servicio de ortopodología de la universidad de Sevilla, se valora si el paciente presenta disimetría y se determina el tipo si es funcional o real. Para ello, medimos con cinta métrica y solicitámos una telemetría de miembros inferiores. Posteriormente se procede a las mediciones de la flexión dorsal de tobillo con goniómetro de dos ramas tanto con la rodilla extendida como flexiónanda en decúbito supino, ángulo Q y torsión tibial etc. Seguidamente se procede a la valoración del ajuste cala zapatilla, intentando que la cala coincida con la cabeza del primer metatarsiano en cada pie y observando que no hubiera un desplazamiento de la pieza incorrecto en el plano transversal, pues la mayoría de las calas presentan rotaciones externas que según la bibliografía podía alterar el patrón torsional y afectar la rodilla. Una vez realizada la exploración, se fija la bicicleta del ciclista a un rodillo para dar comiendo al ajuste adecuado del ciclista. Inicialmente se lleva a cabo el ajuste con la plomada que consiste en buscar la línea recta entre el centro de la rótula, (para ello se mede cada rotula y se marcaba un punto central coincidiendo en la mitad de dicha estructura) y el eje del pedal. Para ello, con las calas insertadas en cada pedal y las bielas paralela al suelo, dejamos caer una plomada desde el centro de la rótula y la línea vertical de la cuerda debe coincidir con el centro del eje del pedal y la cala; si la cuerda queda por detrás del eje hacia el pedalier(parte posterior del pedal) el sillín estará muy retrasado y si sobrepasa el eje del pedal hacia los dedos de los pies el sillín estará demasiado adelantado, es decir más cerca del manillar por lo cual se desplazará el silín hasta que dicha cuerda coincida con el centro del pedal y cala. 11 Posteriormente, mediante un goniómetro de dos ramas extensible se mide la angulación de la flexo-extensión de cada extremidad inferior debiendo estar a 150 grados o 30º (angulo complemetario según ciertos autores11) .En cuanto a la forma de medición, se toma como puntos de referencia los siguientes: Una rama en el centro del trocante mayor del fémur, otra rama en el centro del maléolo externo y el centro del goniómetro en la cabeza del peroné coincidiendo con el centro de la articulación de la rodilla. Por último, una vez hallada la altura correcta, se procede a ajustar el sillín en una posición plana con la ayuda de un nivel, teniendo en cuenta siempre la superficie del suelo siendo ésta lo más plana y estable posible. Este punto es importante pues hay ciclistas que la parte delantera del sillín la inclinan hacia abajo por no tener problemas de afectación del nervio pudendo en los genitales, pero lo ideal es en una posición plana para evitar basculaciones pélvicas sin que interfiera en este estudio. Una vez ajustado cada ciclista a la bicicleta se aplican marcadores en prominencias óseas como trocánter de fémur, cabeza del peroné, maléolo externo, espina ilíacas postero-superiores, centro de rótula y centro de la zapatilla coincidiendo con el segundo dedo o eje del pie. Posteriormente, se filma en los planos frontal (anterior/posterior) y Sagital (Izquierdo/Derecho) a una distancia de 1,5 metros . Una vez cuantificada la disimetría se compensaba el 40% mediante un alza completa de eva de 60 shore A, para hacerlo de forma gradual. Se filmaba entonces con y sin el alza valorando la variabilidad que presenta la rodilla. RESULTADOS Al estar en una fase de recogida de datos se establece que a priori los ciclistas explorados y compensados refieren tener una mejora de la sintomatología ,por lo que una vez terminado el análisis de los datos se extraerán sus conclusiones. BIBLIOGRAFÍA 1. Mellion MB. Common cycling injuries. management and prevention. Sports Med. 1991 Jan; 11 (1): 52-70. 2. Sanner WH, O'Halloran WD. The biomechanics, etiology, and treatment of cycling injuries. J Am Podiatr Med Assoc. 2000 Jul-Aug; 90 (7): 354-76. 3. Gaston EA. Biker ́s knees. Bicycling. 1977. 4. Holmes JC, Pruitt AL, Whalen NA. USOC, editor. Knee pain in the cyclist. EnFirst 10 C world congress on sport sciences; 1989; Colorado Springs. ; 1989. p. 223-4. 5.. Moreno JL. Podología general y Biomecánica. 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Algunos autores sugieren que los niños que se encuentran fuera del rango normal de parámetros, requieren tratamiento ortopodológico Bleck EE 1977, Bordelon RL 1980, Jay RM 1995, Kuhn DR 1999, Leung A 1998, Pratt D 1996, Sinha S 2013, Trujillo P 2008. En contraste, otros autores han sugerido que el pie plano valgo infantil se autocorrige, no haciendo falta tratamiento a excepción de aquellos con defectos congénitos o con problemas neurológicos Wenger D 1989, Whitford D 2007. OBJETIVOS - Conocer las alteraciones biomecánicas que se producen en el pie plano valgo. Analizar el efecto biomecánico de los soportes plantares en el pie plano valgo infantil. Evaluar la efectividad del tratamiento ortopodológico a corto y largo plazo. RESULTADOS El pie plano valgo presenta una biomecánica de la marcha alterada. En el periodo de medio apoyo se observa una reducción de la flexión dorsal del tobillo, un aumento de eversión del retropie y un aumento de la abducción y supinación del antepie. En el periodo propulsivo se observa la falta de inversión absoluta en el retropié, un aumento de flexión plantar del antepie y una disminución de adducción en el antepie. Este mismo patrón cinemático se observa en pacientes con disfunción del tibial posterior Eng JJ 1994, Hösl M 2013, Leung A 1998, Levinger P 2010. Todas estas alteraciones son independientes de la presencia de síntomas, que pueden estar relacionados con el sobreuso de tejidos y el umbral del dolor que es subjetivo. Así lo demuestra Hösl M 2013, que en su estudio comparó la función de niños con pies planos valgos sintomáticos y asintomáticos con pies normales. Los resultados indican que existen alteraciones biomecánicas en todos los pies planos valgos Hösl M 2013. El tratamiento ortopodológico se basa en la utilización de soportes plantares personalizados. Estos proporcionan una orientación osteoarticular correcta del retropie, reducen la deformidad del arco longitudinal interno con una disminución de la tensión de los ligamentos plantares y disminuyen el movimiento de rotación interna de la pantorrilla durante la fase de apoyo de la marcha. De esta forma se previene el desarrollo de distintas patologías como el síndrome de dolor patelofemoral, degeneración de las articulaciones, HAV, etc Eng JJ 1994, Jay RM 1995, Kunh DR 1999, Leung A 1998, Pardos M 2009, Sinha 2013, Trujillo P 2008. En cuanto a la efectividad de los soportes plantares a corto plazo, el estudio de Kuhn DR 1999 demuestra que se puede conseguir una modificación en la orientación osteoarticular mediante el uso de soportes plantares elaborados a medida. Los resultados demuestran una disminución de los ángulos astrágalo-calcáneo AP y lateral y el ángulo de inclinación del astrágalo lateral Kuhn DR 1999. El estudio de Leung A 1998, indica que se puede conseguir una reducción de la pronación máxima en un 37% y una reducción de la pronación total en un 39% con el uso de soportes plantares en niños con pies planos valgos. Leung A 1998 El estudio de Jay RM 1995 demuestra que el uso de soportes plantares tras un mes de tratamiento, en niños con pies planos valgos, disminuye los grados de eversión del calcáneo al medir la posición relajada del calcáneo en apoyo. Jay RM 1995 Debido a que muchos niños con pies planos valgos presentan una marcha rotadora interna, hemos incluido el estudio de Castillo JM 2007, que demuestra que con los soportes plantares con cuña rotadora externa se consigue una apertura del ángulo de la marcha de 3,6º y control del valgo en el momento de instauración del tratamiento Castillo JM 2007. En cuanto a los efectos a largo plazo, algunos autores indican que al colocar el pie en una posición corregida mediante el uso de soportes plantares, se reduce el estrés en los tejidos blandos, con el paso del tiempo la longitud de los ligamentos se reduciría y se conseguiría mantener el pie en una posición adecuada Bleck 1977, Bordelon RL 1980 El estudio de Trujillo P 2008 evalúa el efecto corrector de los soportes plantares en el tratamiento del pie plano valgo infantil, obteniendo como resultados que el tratamiento más efectivo es el soporte plantar con posteado medial y que transcurrido un tiempo de tratamiento, la eversión del calcáneo en bipedestación disminuía. Trujillo P 2008. El estudio de Sinha S 2013 indica que con el uso de soportes plantares en un periodo de 2 años se mejoró el ángulo formado por el astrágalo y 1º metatarsiano, en niños con pies planos valgos sintomáticos. Dividió a los niños en 2 grupos, uno de control tratado con analgésicos y otro de tratamiento con soportes plantares. Los resultados demuestran que el tratamiento más efectivo en la disminución del dolor fue el del grupo que utilizó los soportes plantares Sinha S 2013 El estudio de Bleck 1977 evalúa el efecto de los soportes plantares a largo plazo. Los resultados obtenidos varían según la edad, en donde los niños con edades comprendidas entre los 7-9 años alcanzaron un alto porcentaje de mejoría, y según la duración de tratamiento, en donde a mayor tiempo de uso, mayor porcentaje de mejoría y a su vez, el ángulo de inclinación del astrágalo disminuyó progresivamente. Bleck 1977. El estudio de Bordelon RL 1980 muestra que es posible corregir el pie plano valgo infantil mediante el uso de soportes plantares. La media de corrección del ángulo astrágalo – 1º metatarsiano fue de 0,41º por mes o 5º por año. Bordelon RL 1980 Por lo contrario y en desacuerdo con todo lo antes expuesto, existen autores que mantienen que el pie plano valgo infantil es un fenómeno que se resuelve espontáneamente y que no determina una mayor incidencia de dolor ni limitación funcional, respecto a aquellos que tienen definido su arco longitudinal, recomendando evitar el uso de soportes plantares Wenger D 1989, Withford D 2007. El estudio de Wenger D 1989, evalúa a niños con pies planos valgos flexibles, con el fin de evaluar si presentan alguna modificación con la utilización de distintos tratamientos ortopodológicos. En el análisis de los resultados no se encontraron diferencias significativas entre el grupo control y los grupos con tratamiento. Wenger D 1989. En el estudio de Withford D 2007 se comparó la eficacia del tratamiento ortopodológico con soportes plantares personalizados en el pie plano valgo infantil con el uso de ortesis prefabricadas y con un grupo control sin tratamiento. Los resultados indican que no hay diferencias significativas entre los distintos tratamientos con el grupo control. Withford D 2007 DISCUSIÓN En base al análisis de los documentos que estudian la efectividad de los soportes plantares a largo plazo, existen algunas discrepancias de los autores que indican que el tratamiento ortopodológico es efectivo y los que indican lo contrario. Los resultados obtenidos varían según la edad y la duración de tratamiento. En cuanto a la edad, los estudios se basaron en el análisis del ángulo astrágalo-1º metatarsiano. Wenger D 1989 no encontró diferencias significativas en sus resultados en niños menores de 6 años. Bleck EE 1977 incluye en su estudio niños menores de 6 años en los cuales no se observan grandes cambios, pero también incluye un grupo de niños de 7 a 9 años que sí presentan un gran porcentaje de mejoría. Por esto creemos que el intervalo de edades de 1 a 6 años es muy bajo para poder observar cambios. En cuanto a la duración de tratamiento, Withford D 2007 indica que no hay diferencias significativas en sus resultados en 6 meses de tratamiento. Bleck EE 1977 indica que los niños que utilizaron los soportes plantares durante un periodo de menos de 6 meses obtuvieron un bajo porcentaje de cambios. A diferencia de los niños que los utilizaron durante un periodo de 26 a 46 meses de tratamiento, donde se observó un alto porcentaje de mejoría. Del mismo modo, Sinha S 2013 en su estudio para evaluar el tratamiento más efectivo en la disminución del dolor en los pies planos valgos sintomáticos, lo realizó en un periodo de 24 meses. De esta forma creemos que la duración del tratamiento menor a 6 meses es un periodo muy corto para poder observar cambios. CONCLUSIONES 1. El pie plano valgo presenta una biomecánica de la marcha alterada. 2. Los soportes plantares con cuña rotadora externa mejora en los niños el ángulo de la marcha. 3. El uso de soportes plantares tras un periodo corto de tratamiento, reducen la pronación durante la marcha y la eversión del calcáneo en bipedestación. 4. El uso de soportes plantares tras un periodo de 2 años, es el tratamiento más efectivo para disminuir el dolor en los pies planos valgos sintomáticos. 5. El uso de soportes plantares en niños mayores de 6 años reducen el ángulo de inclinación del astrágalo con un alto porcentaje de mejoría después de 26-46 meses de tratamiento. BIBLIOGRAFÍA Bleck EE, Berzins UJ. Conservative management of pes valgus with plantarflexed flexible talus. Clin Orthop. 1977;122:85-94 Bordelon RL. Correction of Hypermobile Flatfoot in Children by Molded Insert. Foot and Ankle. 1980; 1(3): 143- 150 Castillo JM. Efecto de los soportes plantares con cuña rotadora externa en las marchas rotadoras internas en el niño. [Tesis Doctoral]. Sevilla. Nuevas tendencias asistenciales y de investigación en ciencias de la salud. Universidad de Sevilla. 2007 Eng JJ, Pierrynowski MR. The effect of soft foot orthotics on three-dimensional lower limb kinematics during walking and running. Phys Ther 1994; 74:836-844 Hösl M, Böhm H, Multerer C, Döderlein. Does excessive flatfoot deformity affect function? A comparison between symptomatic and asymptomatic flatfeet using the Oxford Foot Model. Gait & Posture. 2013; 39 (1): 23-28 Jay RM, Schoenhaus H D, Seymour C, Gamble S. The dynamic stabilizing innersole system (DSIS): The management of hyperpronation in children. The journal of foot and ankle surgery. 1995; 34 (2): 124-131 Kuhn DR, Shibley NJ, Austin WM, Yochum TR. Radiographic evaluation of weightbearing orthotics and their effect on flexible pes planus. Journal of manipulative and physiological therapeutics. 1999; 22(4): 221-226 Leung A, Mak A, Evans H. Biomechanical gait evaluation of the immediate effect of orthotic treatment for flexible flat foot. Prosthetics and Orthotics International. 1998; 22: 25-34 Levinger P, Murley G, Barton C, Cotchett M, Mc McSweeney, Menz H. A comparison of foot kinematics in people with normal- and flat-arched feet using the Oxford Foot Model. Gait & Posture. 2010; 32: 519-523 Pardos M, Sala E. Estudio cinemático del efecto del soporte plantar en la rotación interna de la pierna en un niño con pie plano flexible. Revista Internacional de Ciencias Podológicas. 2009; 3(1): 15-34 Pratt D, Sannert W. Paediatric foot orthoses. The foot. 1996; 6: 99-111 Sinha S, Ryong H, Jun H, Sik M, Chool Y, Heon S. Medial arch orthosis for paediatric flatfoot. Journal of Orthopaedic Surgery. 2013; 21(1): 37- 43 Trujillo P, Reina M, Serrano D, Munuera P. Estudio del efecto corrector de las ortosis con posteado interno de talón en el retropie valgo infantil: resultados. Revista Española de Podología. 2008; 9(1): 6-9 Wenger D, Mauldin D, Speck MD, Morgan D, Lieber R. Corrective shoes and inserts as treatment for flexible flatfoot in infants and children. The Journal of Bone and Joint Surgery. 1989; 71-A (6): 800-810 Withford D, Esterman A. A randomized controlles trial of two types of in-shoe orthoses in children with flexible excess pronation of the feet. Foot and ankle international. 2007; 28(6): 715-723 Validación del protocolo de valoración de las disimetrías María Reina Bueno Guillermo Lafuente Sotillos Manuel Coheña Jiménez INTRODUCCIÓN Se define disimetrías de miembros inferiores como la diferencia de longitud de los mismos. Esta asimetría es muy común, pudiendo causar si no se compensa patologías en pies, piernas y distintas estructuras del aparato locomotor. Puede ser la causa de que ambos pies tenga distinta morfología y soporten cargas diferentes. Hasta hoy la única prueba validada para el diagnóstico de las mismas es la telemetría de los miembros inferiores. Hasta el día de hoy no están validadas las diferentes técnicas de medición de la longitud de los miembros inferiores con cinta métrica en decúbito ni la proyección radiólogica anteroposterior del nivel de caderas en carga. OBJETIVOS El primer objetivo de este estudio es validar un protocolo manual de evaluación de las disimetrías, eliminando la necesidad de irradiar a los pacientes que la presentan. Para ello se comparará la diferencia de longitud de los miembros inferiores en la radiografías con las medidas manuales. El segundo objetivo es validar la radiografía de caderas en carga como prueba diagnóstica para la valoración de las disimetrías, comparando los resultados con los de la telemetría. METODOLOGÍA En el estudio participan 50 sujetos de forma voluntaria y previa firma del consentimiento informado. Como criterio de inclusión estar diagnosticado de disimetría. En camilla se mide la longitud de ambos miembros inferiores desde la espina iliaca antero superior hasta el maleolo interno. Se le realiza 2 radiografías anteroposteriores en carga; un nivel de cadera y una telemetría de los miembros inferiores. Se comparan las diferencias de longitud de ambos miembros entre las tres medidas realizadas. RESULTADOS Según los resultados obtenidos, las medidas con cinta métrica y el nivel de caderas no se correlacionan a los valores de la telemetría. CONCLUSIONES Según nuestro estudio, las mediciones realizadas con cinta métrica y radiografía de nivel de caderas no son válidas para valorar la dismetría, ya que los resultados no concuerdan con los obtenidos en la telemetría. Bases para implantar un Programa de Salud podológica en triatletas Sandra Reyes Casas José Ramos Galván INTRODUCCIÓN La razón por la que se plantea realizar este trabajo, comienza a raíz de nuestra vivencia en una clínica podológica y centro deportivo donde son atendidos un gran número de triatletas. Esta idea creció con la experiencia personal en el Triatlón del puerto de Sevilla celebrado en el año 2012, al que asistimos como invitados. Encontramos que la mayor parte de los participantes andaban descalzos por todo el recinto y no había atención podológica, a diferencia de la Maratón de Sevilla en la que se cuenta con un puesto asistencial de Podología, Fisioterapia y Enfermería para atender a los maratonianos lesionados. Esta investigación trata de conocer la prevalencia de lesiones en triatletas y buscar los factores implicados para determinarlas pautas a seguir en la detección precoz de patologías podológicas en dichos deportistas. La justificación de este trabajo radica principalmente en las ventajas que obtendrían los triatletas en cuanto a salud podológica si se estableciera un Programa de Salud podológica, ya que cada vez son más las personas que practican este deporte y las lesiones presentes en el pie. Por otro lado, uno de los sectores para los que sería útil esta investigación es la industria del calzado deportivo. Desde la perspectiva de la prevención podológica, somos conscientes de la influencia que tiene el calzado en la salud de los pies, por tanto el conocimiento de las lesiones en relación con los distintos tipos de pies y las necesidades de cada uno, favorecería mejores formas de diseño de zapatillas deportivas y calzado de ciclismo adecuadas especialmente para los triatletas. Consideramos necesario conocer las distintas lesiones de la extremidad inferior que existen en estos deportistas, para de este modo poder realizar estrategias preventivas adecuadas, en función de los factores de riesgo y mecanismos de lesión que presenten, así como conocer las características de la lesión. Conocer el origen de las lesiones del pie en triatletas, pudiera suponer un factor clave a la hora de diseñar programas de salud y estrategias preventivas. MARCO TEÓRICO El Triatlón es un deporte de resistencia relativamente moderno, en el que se combinan tres disciplinas en tres segmentos. Estos son: natación, ciclismo y carrera a pie. El orden es el citado y el cronómetro no se para durante todo el tiempo que dure la competición. El ganador es el que menos tiempo emplea en realizar las tres pruebas.7 En los últimos años, ha habido un aumento de la práctica de Triatlón, tanto desde un punto de vista lúdico como competitivo, generando un aumento de la incidencia de lesiones que se acompaña de un crecimiento de la frecuencia de las consultas. Con los conocimientos actuales, y según se destacó en una reciente revisión de la literatura, la ausencia de datos disponibles sobre la incidencia, pauta de lesiones y ausencia de estudios publicados con un mínimo nivel de evidencia, causan una falta de recomendaciones médicas preventivas en el Triatlón .1 En un estudio conocimientos conocimientos evidencia para sobre lesiones músculo-esqueléticas en el Triatlón y el estado de los de prevención de las lesiones, destacan la falta importante de sobre la incidencia de lesiones, el perfil de las lesiones sufridas y la la prevención de lesiones. 2 El modelo TRIPP (Traslación de la investigación a la práctica de la Prevención de lesiones) describe una serie de seis pasos necesarios para proporcionar una base de pruebas para la prevención de lesiones: lesiones de vigilancia, etiología, mecanismo de la lesión, identificación y aplicación de medidas preventivas. A pesar del número de estudios comprometidos en abordar las etapas TRIPP 1 y 2 (vigilancia de las lesiones, la etiología y el mecanismo de de lesiones) y la 3,4 ,5 y 6 (desarrollar medidas preventivas y evaluar la estrategia preventiva) esto no se ha llevado a cabo. La mayoría de los estudios de Triatlón han sido limitados por la escasez de estudios prospectivos de calidad, la investigación de la incidencia de lesiones en el Triatlón y los factores que contribuyen a su aparición. Esto ha provocado la incapacidad de elaboración de estrategias de prevención de lesiones (TRIPP) para este deporte.4 Las lesiones por uso excesivo se dan tanto por factores intrínsecos como extrínsecos. Podemos destacar como factor intrínseco la pronación excesiva, el pie cavo, el alto impacto estilo de carrera, varo o valgo rodillas, displasia patelofemoral, rótula alta, la disimetría de las extremidades inferiores y la hipermovilidad de las articulaciones. Como factor extrínseco encontramos el clima, un calzado inadecuado, viejo o nuevo, un mal entrenamiento, un pobre calentamiento y estiramiento y una atención insuficiente a los músculos.5 Los investigadores de un estudio identifican una defectuosa construcción de la zapatilla como un factor que ha contribuido al desarrollo de la fascitis plantar. La extremidad inferior sufre muchas lesiones que surgen de múltiples factores; el tipo de zapatilla usada por el atleta puede ser un importante factor en la prevención de lesiones y puede compensar una desviación biomecánica. Una mayor conciencia de la necesidad de evaluar la construcción del calzado deportivo puede prevenir una lesión de tobillo. 8 En un estudio epidemiológico sobre las lesiones en triatletas británicos en el que encontraron que las lesiones más frecuentes son las músculo-esqueléticas y tienen lugar en el pie/tobillo (27%), muslo (20%) y rodilla(20%). El 65% de las lesiones ocurren durante la carrera a pie, el 16% durante el ciclismo y el 12% durante la natación. Korkia et al, en 1994, no relacionan la incidencia de lesiones con la cantidad de entrenamientos. De los triatletas lesionados en el estudio, el 20% asistió al fisioterapeuta, el 70% al médico y el 13% al podólogo. 3 En los deportes donde el pie tiene un protagonismo especial es evidente la importancia que tiene hablar del calzado. Aunque se puede decir que el calzado deportivo de hoy en día es estructural y funcionalmente superior al de hace diez años, en la actualidad el deportista tiene como tarea difícil elegir el calzado correcto. Cada tipo de calzado tiene requisitos funcionales diferentes de acuerdo con las exigencias de la actividad en concreto. El calzado deportivo ha sufrido una tremenda evolución a lo largo de la historia. Una mayor adquisición de conocimientos por parte de los podólogos sobre las necesidades de cada atleta en lo que se refiere al calzado, ha sido la razón por la que la tecnología del calzado deportivo ha intentado coincidir con nuestros criterios.6 OBJETIVOS Determinar las lesiones y los hábitos más frecuentes en triatletas para el desarrollo posterior de un Programa de Salud podológica que incida positivamente en el rendimiento deportivo y disminuya la prevalencia de estas lesiones. MATERIAL Y MÉTODO Se trata de un estudio observacional descriptivo transversal y retrospectivo. Se han realizado dos cuestionarios a los participantes del XVII Triatlón de Sevilla, celebrado el 4 de Mayo de 2013. La recogida de la muestra se llevó a cabo en dos etapas, una primera “Pre” en la entrega de dorsales, y una segunda “Post” en la llegada a meta. El tipo de muestreo empleado para seleccionar la muestra fue aleatorio simple, ya que se pasaron los cuestionarios a los triatletas que recogían su dorsal para la distancia olímpica, y por conveniencia, debido a que se pasaron los cuestionarios a los triatletas que iban llegando a recoger su dorsal de edades comprendidas entre 14 y 19 y todos aquellos que fueran llegando a la meta lesionados. RESULTADOS Se analizaron 80 cuestionarios, 44 pre-prueba y 36 post-prueba, correspondientes a 80 participantes del XVII Triatlón de Sevilla, de los cuales el 11% eran de mujeres y el 89 % de hombres. Con edades comprendidas entre 14 y 51 años, los rangos de edades más frecuentes fueron de 16 y 17, 8 y 6 participantes respectivamente. En relación a los resultados del primer cuestionario (pre-prueba), fue realizado por 23 jóvenes (de entre 14 a 19 años) y 21 adultos (mayores de 19 años). Encontramos que el 61.4% de los participantes habían sufrido alguna vez lesiones deportivas. De ellos, el 52.2% jóvenes, y el 71.4% eran mayores de 19 años. Los resultados de la prueba Chicuadrado muestran que la frecuencia de lesiones no está relacionada con el rango etario (p=0.190). Respecto a dichas lesiones, el pie fue el segmento anatómico más lesionado en un 15.9%, 17.4% en los jóvenes y 14.3% en los mayores de 19 años. Le siguen la rodilla y la pierna, con un 9.1% y un 6.8% respectivamente. Sobre las lesiones deportivas en el pie, 4 jóvenes contestaron que habían asistido al médico para resolverlas, 10 adultos respondieron que asistieron al fisioterapeuta y 4 al podólogo. Respecto a la pregunta. “si había recibido información sobre los cuidados de los pies”, el 26.1% de los jóvenes encuestados refirieron haber recibido educación podológica, frente al 81% de los adultos. Los resultados de la prueba Chi-cuadrado muestran que el rango de edad, entre jóvenes y adultos, sí tiene relación con la información podológica recibida (p=0.000). La información recibida sobre la educación del pie en los adultos fue mayoritariamente por el podólogo (el 33%), y en los jóvenes a través de otros medios (entrenador, fisioterapeuta y padres en un 21.7%). De los 23 jóvenes el 65.2% no habían ido nunca al podólogo. En cambio, el 61.9 de los adultos si habían acudido alguna vez. Los resultados de la prueba Chi-cuadrado muestran que la edad no influye de forma estadísticamente significativa respecto a la visita al podólogo, pero sí se muestra cierta tendencia (p=0.72). El motivo de consulta podológica más frecuente en ambos grupos fue por soportes plantares, en el 13% en jóvenes y el 23.8 de los adultos. Le siguen problemas de uñas y dolor articular en un 8.7%. En relación a la pregunta de “si creían importante la realización de un estudio del pie previo a la dedicación del Triatlón”, la totalidad de los adultos respondieron que sí, mientras que en los jóvenes respondieron afirmativamente el 82.6%. El motivo a favor más frecuente del estudio del pie, tanto en jóvenes como en adultos, fue “para prevenir lesiones”, en un 34.8% en los jóvenes y en un 57.1% de los adultos. Otros motivos que según los participantes justificaría importancia del estudio de pie para el Triatlón fue “para mejorar el rendimiento” en un 4.3% de los jóvenes, o “para conocer la zapatilla adecuada a su pie” en un 8.7% de los jóvenes y en el 9.5% de los adultos. En relación a los resultados del segundo cuestionario (post-prueba), fue realizado por 12 jóvenes (de entre 14 a 19 años) y 28 adultos (mayores de 19 años). Encontramos que el 65 % de los participantes jóvenes habían sufrido lesión o dolor en los pies. De ellos, el 41.7% eran jóvenes, y el 75% eran mayores de 19 años. En relación a la pregunta “qué tipo de lesión sufrió”, encontramos que el 62% eran lesiones dérmicas. En los jóvenes un 33.3% y en los adultos un 75%. Con respecto a la pregunta, “en qué momento de la prueba han comenzado las molestias”: un 91.7% de los jóvenes y un 60.7% de los adultos contestaron que durante la carrera. En relación a la inspección realizada de los pies de los triatletas, encontramos que el 27.5% sufrió ampollas, siendo un 8.3% jóvenes y un 35.7% adultos. La lesión dérmica que le sigue es la herida en un 17.5%, de los cuales, un 25.0% en los jóvenes y un 14.3% en los mayores. DISCUSIÓN La presencia de estudios sobre programas preventivos en triatletas es inexistente en Podología, por lo que nos resulta complicado realizar comparaciones con otras investigaciones llevadas a cabo por podólogos, aunque por otro lado es donde estriba la pertinencia y novedad del trabajo en cuestión. No obstante sí hemos encontrado en nuestra revisión bibliográfica estudios con objetivos y poblaciones parecidas, pero efectuados desde otras disciplinas. El triatlón es un deporte relativamente joven y el volumen de literatura referida a programas de prevención podológica en triatletas es muy escaso, de ahí, la importancia de esta investigación. Los Programas de Salud podólogica ayudarán no sólo a detectar y a tratar a tiempo alteraciones que puedan estar presentes en los pies de los triatletas, sino también a divulgar la educación sanitaria y dar a conocer la figura del podólogo que sigue siendo desconocida por la población. CONCLUSIONES Las lesiones podológicas más frecuentes encontradas en los triatletas, una vez finalizada la prueba han sido dérmicas, en concreto ampollas, heridas y rozaduras. Los jóvenes, a lo largo de su trayectoria, han acudido al podólogo menos que los adultos. El motivo más frecuente por el que acudieron fue por soporte plantares en ambos grupos. Los jóvenes han recibido menos educación podológica que los adultos. Se deben realizar estudios más profundos que nos aporten información más específica sobre las lesiones en sí, para poder crear el Programa de Salud podológica ya que sería importante dada la falta de información sobre cómo cuidarse los pies sobre todo en los jóvenes y la poca constancia de la relevancia del podólogo como profesional que intervenga en la salud del deportista. BIBLIOGRAFIA 1. Galera O, Gleizes-Cervera S, Pillard F, Rivière D. Prevalencia de lesiones en triatletas de una liga francesa. Apunts Med Sport. 2012; 47 (173): 9-1. 2. Gosling CM, Gabbe BJ, Forbes AB. Triathlon related musculoskeletal injuries: the status of injury prevention Knowledge. J Sci Med Sport.2008; 11:396-406. 3. Korkia PK, Tunstall-Pedoe DS, Maffulli N. An epidemiological investigation of training and injury patterns in British triathletes. Br J Sports Med. 1994; 28: 191-196. 4. Mechelen W, Hlobil H, Kemper HC. Incidence, severity, aetiology and prevention of sports injuries. A review of concepts. SportsMed. 1992; 14:82-99. 5. Migliorini S. Risk factors and injury mechanism in Triathlon. J Hum Sports Exerc. 2011; 6(2): 309-314. 6. Moreno J. Podología Deportiva. Barcelona: Masson; 2005. 7. Reglamento de competiciones. Federación Española de Triatlón. 2011; [Online]. [Consultado: 24 de Octubre de 2013]. Disponible en:www.triatlon.org/web/reglamentos.asp. 8. Wilk BR, Fisher KL, Gutierrez W.Defective Running Shoes as a Contributing Factor in Plantar Fascitis in a Triathlete.J Orthop Sports PhysTher. 2000; 30(1): 21-31. Proyecto de validación de una media de running con tejido compresivo en toda su superficie César Canales Hortelano La sociedad actual está cada vez más interesada en la práctica deportiva tanto en el ámbito de actividad física y salud, como en el ámbito del alto rendimiento. Se estimula la adquisición de hábitos saludables desde tempranas edades y desde los centros educativos, los gimnasios y los centros polideportivos forman parte del paisaje de nuestras ciudades, las personas más mayores pasean y realizan actividades adaptadas a sus posibilidades. En este contexto, cualquier información sobre avances en materia textil ayuda a disfrutar de estas aficiones y pueden contribuir a practicarlas con mayor confort, así como conseguir mejores marcas personales que ayuden a la consecución del éxito. Hoy, ya es imposible salir a trotar o ir a una carrera y no cruzarte con alguien que lleva medias compresivas, mallas o incluso un mono completo. Los equipos de I+D se han puesto manos a la obra, nuevas marcas han aparecido y los papeles se han invertido: el corredor popular cada vez es más exigente, quiere llevar lo último en innovación y se preocupa por su eficacia en carrera y su recuperación, como si de un atleta élite se tratara. De esta forma, las prendas de compresión comienzan a ser básicas para casi todos los deportistas, y por tanto se necesita de la investigación de éstas y de la creación de nuevas prendas que mejoren las existentes para que se ajusten a unos mínimos de calidad, Lurbel junto con AITEX y el GIBD (Grupo de Investigación e Biomecánica aplicada al deporte - Universidad de Valencia) han desarrollado un proyecto conjunto para observar los beneficios que pueden aportar las perneras de compresión a los deportistas a nivel de parámetros fisiológicos, impactos, confort y antropometría de la pierna. Es un proyecto ambicioso que pretende seguir adelante en futuras líneas. Figura 1. Prueba realizada en el laboratorio GIBD-Universidad de Valencia para la medición de variables. NECESIDADES Y OBJETIVOS DEL PROYECTO Cuando hablamos de compresión nos referimos a la presión que ejerce un tejido elástico cuyo fin es aportar diferentes gradientes cíclicos de presión en la pierna. Al correr es importante que el retorno venoso sea lo más efectivo posible. A pesar de que tenemos mecanismos fisiológicos que permiten que la sangre vuelva al corazón, debemos considerar que el uso de prendas de compresión puede influir positivamente en el retorno sanguíneo y reducir así la fatiga en carrera. Para evidenciar las posibles mejoras de estas prendas es muy importante buscar las publicaciones científicas más recientes y no basarnos sólo en las “sensaciones individuales”. Numerosos son los beneficiosos que se le atribuyen a las prendas compresivas deportivas, a nivel fisiológico, de recuperación, de prevención de lesiones, etc. Estas razones justifican su rápida expansión en la sociedad actual. Aún así, hay que ser cautos en sus beneficios ya que, realmente a nivel científico existen pocas evidencias por lo que se consideraba necesario investigar en este aspecto. En este sentido, el principal punto de partida en este proyecto ha sido analizar y determinar si diferentes valores de compresión en las perneras pueden modificar las variables medidas a nivel biomecánico, fisiológico, antropométrico y de confort. Por otra parte, la empresa desea con este proyecto mejorar el producto para conseguir en un futuro mayores beneficios deportivos. Además surge una nueva necesidad de conocer qué valores de presión son los más adecuados o los que más beneficios pueden aportar a los deportistas. Hasta el momento no existe rigor científico en cuanto a estos parámetros y cada marca deportiva utiliza unos parámetros distintos y por ello, surge la necesidad de ahondar en este aspecto. Con todo, este contexto de desconocimiento y con un mercado receptivo a este nuevo concepto de material deportivo, Lurbel, en una constante fase de innovación y adaptación a las necesidades del sector, quiere ofrecer material compresivo con garantías tanto para el deportista amateur como el de alto rendimiento y para ello va más allá de las tendencias y muestra su inquietud por analizar, conocer y desarrollar una gama de prendas compresivas bajo unos parámetros científicos derivados de este estudio. Figura 2. Prueba realizada en el laboratorio de Biomecánica GIBD (Universidad de Valencia) para la medición de variables y medias compresivas utilizadas. PRUEBAS REALIZADAS En primer lugar se realizó un TEST de campo para determinar la Velocidad aeróbica máxima (VAM), este test nos sirve para determinar la velocidad de las dos pruebas de esfuerzo que se realizarán en laboratorio. El test consiste en correr cinco minutos en una pista de atletismo (400m) al máximo de las posibilidades del participante y con velocidad sostenida con la finalidad de obtener el VAM del corredor. Tras la prueba, se multiplica la distancia recorrida (Km) por 12 y se obtiene la VAM en Km/h para cada uno de los corredores. Figura 3. Realización del test de determinación de la VAM. (Pistas de Atletismo. FDM. Tramo III. Valencia) Tras esa prueba se les cita a las tres semanas para realizar el 1er Test de laboratorio con medias de estudio (unos llevan las medias compresivas y otros las convencionales de forma aleatoria). Durante esas tres semanas deben entrenar con las medias entregadas. Este test se realiza en treadmill, 10minutos de calentamiento y 30minutos de carrera al 80% de la VAM calculada en el Test de Campo. Esta prueba tiene una duración aproximada de 1h y 30min por participante, ya que se instrumenta al sujeto y se realizan todas las mediciones pertinentes explicadas a lo largo del informe. Se cita a las 4 semanas ya que deben entrenar la siguiente semana sin medias, y tras esta semana de entrenamiento sin medias, se entrenará 3 semanas con las nuevas medias entregadas (compresivas o convencionales). El 2º test de Test de laboratorio consiste en la misma prueba que el primer test. Figura 4. Prueba realizada en el laboratorio de Biomecánica GIBD (Universidad de Valencia) para la medición de variables. RESULTADOS El tamaño final muestral del estudio fue de 35 deportistas, con una media de edad de 27,81 años, peso medio de 67,51kg y una altura media de 1,73m. Pese a que en algunas de las variables medidas, cómo han sido las fisiológicas, y la percepción de fatiga no se han encontrado diferencias significativas, sí que se han encontrado resultados importantes en los impactos de tibia y cabeza. A continuación, se presentan los resultados para aquellas variables en las que hemos obtenido diferencias significativas. El análisis referente a las variables relacionadas con el estudio de impactos mediante el uso de acelerometría, consistió en comparar los valores de cada una de las variables descritas anteriormente durante la prueba. Para ello, se recogieron datos al inicio de la prueba, en los minutos 5, 10, 15, 20, 25 y al final de la prueba (30'), comprobando si existían diferencias en los valores obtenidos utilizando unas medias u otras. Como puede observarse en la Figura 5, para la variable Magnitud Tibia, se han encontrado diferencias significativas en el minuto 5 y en el 25, siendo superior la magnitud utilizando las medias convencionales. Cabria destacar también que, a pesar de no haber encontrado diferencias significativas en los restantes momentos de medición, se puede apreciar una tendencia que va en consonancia con las diferencias obtenidas. Estos resultados nos permiten afirmar que la magnitud de los impactos en la tibia se reduce con el uso de las medias compresivas (TOTAL). Figura 5--. Comparación entre las medias TOTAL y CONVENCIONAL en los distintos momentos de la prueba en la variable “Magnitud Tibia”. De esta misma forma, los resultados relativos a la variable Mínimo Tibia (Figura 6), presentan diferencias significativas en todos los momentos de medición a excepción del inicio de la prueba. En todos los casos la media convencional muestra valores mayores con respecto a la media compresiva (TOTAL). Esto se traduce en que la intensidad de los impactos se reduce cuando se utilizan las medias compresivas (TOTAL). Figura 6. Comparación entre las medias TOTAL y CONVENCIONAL en los distintos momentos de la prueba en la variable “Mínimo Tibia”. Los resultados de medición de perímetros, se ha observado que en el caso de las medias compresivas la única zona que presenta diferencias significativas en las dos piernas en la zona Tendón-Aquiles gemelo, disminuyendo el perímetro al final de la prueba. Por otra parte en las medias convencionales se observan diferencias significativas en las dos piernas (derecha e izquierda) en las zonas de Tendón Aquiles-gemelo y en el mínimo perímetro tobillo. En la pierna izquierda la zona de máximo contorno también presenta diferencias siendo el perímetro 0,37cm mayor en el post que en el pre (p=0.019). En el análisis de perímetros también se han comparado las diferencias de todas las zonas entre el pre y el post, valorando las dos medias (compresivas y convencionales). Se observa que no existen diferencias significativas en ninguna de las zonas al comparar las dos medias. Con este dato, podríamos decir que las dos medias se han comportado de forma similar. Sin embargo, sí que se observa una tendencia a que el perímetro tras la prueba ha disminuido. En la valoración de confort, se observa una tendencia de mayor confort durante la carrera en todas las variables analizadas al usar las medias de compresión total en comparación con las medias convencionales. Las mejores puntuaciones de confort para las medias de compresión total se observan en el confort del tejido utilizado, la sensación de temperatura y el confort percibido tanto al inicio como al final de la carrera. CONCLUSIONES Impactos Se ha observado de forma general en diferentes variables de acelerometría, que las medias compresivas reducen el nivel de impactos en las piernas, lo que se traduce en un mayor estrés para el sistema musculo esquelético y por la tanto una posible disminución de las lesiones. Fatiga y dolor posterior Sin embargo, las medias de compresión TOTAL mostraron una tendencia de valoración de percepción de fatiga en pierna anterior y posterior inferior a las medias CONVENCIONALES. Estudio antropométrico Se observa una disminución del contorno de la prueba en gran parte de las zonas que presentan diferencias significativas. No se han encontrado referencias bibliográficas que constaten estos resultados, por lo que en futuros estudios se debe tener en cuenta. Podemos observar que la diferencia al inicio de la prueba y al final es mínima, por lo tanto se puede concluir que el tallaje tomado para el deportista podría ser el correcto tanto al inicio como al final de la prueba. Confort Las medias de compresión TOTAL mostraron una tendencia de valoración de confort superior en TODAS las variables de confort analizadas. Las medias de compresión TOTAL fueron valoradas muy positivamente en cuanto al Tejido utilizado, la Temperatura producida, la Humedad producida, y el confort percibido tanto al Inicio como al Final de la carrera. A raíz de este estudio se abre una puerta muy importante con estos datos, ya que no hay nada investigado sobre esto y pueden ser aspectos muy importantes el comportamiento de la pierna con diferentes gradientes de presión. Se hace necesario seguir investigando sobre esta temática, debido a la gran importancia que tiene en la actualidad, valorando más tipos de compresión así como diferentes pruebas de esfuerzo. Figura 7. Instrumental utilizado para la medición del impacto. Colocación: un acelerómetro en tibia, y otro en cabeza. “Este proyecto surge como resultado de la apuesta constante de la empresa por la innovación y el desarrollo. Se persigue incrementar el grado técnico de las prendas compresivas que desarrollamos a partir de los resultados del estudio y, consecuentemente, ofrecer al mercado un material deportivo con unas garantías óptimas. Para la empresa este proyecto implica la adquisición de un valioso know-how aplicable a nuestra cadena productiva que nos permite la mejora de esta gama de productos comercializados. Con iniciativas como esta, Lurbel, reitera su apuesta por la innovación y sienta las bases a líneas de investigación futuras”. Rafael Lurbe, product manager de Lurbel y gerente de MLS ELEBÉ 1992 SL.