Moniciones (Monición) Hemos celebrado el tiempo fuerte de

SEGUNDO DOMINGO DE TIEMPO ORDINARIO
CICLO B
Moniciones
INTRODUCCIÓN
(Monición)
Hemos celebrado el tiempo fuerte de Adviento y Navidad y ahora estamos,
en el Tiempo Ordinario. Las lecturas nos presentan la relación entre Dios y
su pueblo; entre Cristo y su Iglesia en la elección de sus discípulos. Para
construir una relación fuerte, Dios nos regala los carismas. Pero nos pide que
los pongamos en práctica. Que nos apoyemos en la roca, Pedro.
PRIMERA LECTURA: Primer libro de Samuel 3,3b-10.19
(Monición)
Dios escoge al pequeño Samuel. En los designios de Dios cada uno tiene una
misión que cumplir. Las circunstancias personales van descubriendo la
voluntad de Dios. Escuchemos
SALMO RESPONSORIAL
(Sal 39)
Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad.
SEGUNDA LECTURA: Primera Carta de san Pablo a los Corintios 6,13c-15a. 17-20
(Monición)
San Pablo explica la doctrina de la castidad cristiana, fundada en la
consagración del cuerpo humano por la incorporación a Cristo que lo
convierte en templo del Espíritu Santo. Escuchemos
TERCERA LECTURA: Evangelio según san Juan 1,35-42
(Monición)
Oigamos el relato del encuentro de los primeros discípulos de Jesús. San Juan
insiste en la actitud de búsqueda por parte de la persona. No importa lo que se sepa
sobre Jesús lo importante es el encuentro con Él. Este encuentro transforma toda la
persona. le hace consciente de que tiene una misión.
ANTES DEL EVANGELIO
Aleluya, aleluya.
Hemos encontrado al Mesías, que es Cristo,
la gracia y la verdea vinieron por medio de Él.
Aleluya.
ORACIÓN UNIVERSAL:
Monitor:
 Por la Santa Madre Iglesia, para que ponga a disposición de los demás
hombres los dones que ha recibido generosamente de Dios, Roguemos al
Señor.
 Por Puerto Rico y sus habitantes, para que practiquen la generosidad y
caridad en sus relaciones con los demás, Roguemos al Señor
 Por nosotros para que Cristo, presente aquí en la Eucaristía, bendiga a las
familias de esta parroquia como Él bendijo la Boda de Cana, Roguemos al
Señor.
 Por los aquí presentes en este milagro de la Eucaristía, para que vivamos con
alegría nuestra realidad de Hijos de Dios, Roguemos al Señor.