Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Alicia I. Castagna María L. Woelflin Instituto de Investigaciones Económicas, Escuela de Economía. DESARROLLO ECONOMICO EN EL GRAN ROSARIO. NUEVAS CONDICIONES Y PERSPECTIVAS.* 1. INTRODUCCION El trabajo presenta algunas reflexiones acerca de la ciudad y su región a partir de las investigaciones que se han realizado, sobre el Sistema Metropolitano Gran Rosario (SMGR), en el Instituto de Investigaciones Económicas1. El primer aspecto que nos interesa desarrollar es la relación que se establece entre Ciudad y Región y, dentro de la misma, el papel de la metropolización. Los escenarios que se construyen en torno a su desarrollo deben tener en cuenta: la internacionalización del espacio, que se manifiesta permanentemente cuando hablamos de la llamada globalización, la obligada reestructuración productiva a partir de la misma, el proceso de acumulación y de concentración y los aspectos sociales derivados. En segundo lugar debemos tener en cuenta, para el análisis del Area Metropolitana, los elementos que contribuyen al surgimiento, expansión y consolidación de dicho territorio. Es importante, además, debatir sobre cuales son las acciones y actividades concretas que nos permiten hablar del Gran Rosario. Nos interesa el presente y el futuro, pero no se debe olvidar que está asentado sobre su pasado, sobre su historia. El proceso de acumulación dado en una región y la dotación de recursos que posea determinaron la situación actual, pero la forma en que se utilicen actualmente los mismos o las políticas que se apliquen, pueden provocar, atemperar o agravar las desigualdades regionales o sociales dentro del área. Es importante pensar en los efectos que el sistema socioeconómico tenga en un espacio determinado o, también, pensar las acciones de cambio a este sistema. En definitiva, nos interesan las relaciones entre economía, política y territorio, para anticipar y evaluar sus impactos y ver que medidas se deben adoptar para administrar mejor y menos injustamente los recursos. Los serios problemas sociales que enfrentan hoy las metrópolis son, en parte, resultado de tendencias de largo plazo, sobre las que el mismo proceso de metropolización influyó y, * Se agradece la colaboración en el debate de los temas del Dr. Angel Sciara. 1 Este tema fue presentado en el Seminario Internacional sobre Globalización y Territorio realizado en Toluca, México, desde el 20 al 24 de setiembre de 1999. 393 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. en parte, consecuencia de la crisis internacional y políticas de ajustes, incidiendo sobre una estructura ocupacional más sensible a los ajustes recesivos. La gravedad de los mismos y la urgencia para resolverlos constituyen uno de los principales desafíos a enfrentar en los próximos años. Deberá pensarse en aplicar estrategias locales adecuadas y, además, programas integrales que comprendan políticas de apoyo a franjas seleccionadas de unidades productivas y de población de riesgo. 1. Ciudad, región y metropolización En un mundo globalizado la ciudad y las área urbanas adquieren un papel relevante. El accionar de las instituciones municipales afectan el desempeño de los indicadores socioeconómicos y puede transformarse en instrumento de desarrollo, tanto local como regional. Si bien las instituciones y el gobierno local corresponden al éjido urbano, si nos referimos a los actores sociales y a sus relaciones, se trasciende de lo urbano a lo regional. La instancia regional se convierte en un punto clave para la formulación de políticas que contemplen la diversidad, la heterogeneidad y sobre las cuales pueda efectivamente realizarse una evaluación de impactos. La región en todos los casos alude principalmente a un territorio y a la dotación de recursos naturales. Sin embargo, en ella se dan un conjunto de interacciones que conforman un sistema compuesto por subsistemas productivos, institucionales y culturales, que encierran en sí un cúmulo de relaciones, tales como: las relaciones capital-trabajo, los flujos de intercambio, las relaciones monetarias, las organizaciones y procedimientos para la toma de decisiones y las pautas de comportamiento social. La región desde esta perspectivas es más que el territorio aunque éste determine con mayor o menor peso ciertas características de los subsistemas (sobre todo el productivo). Atiende a la flexibilidad de los procesos sociales y es, por ende, una estructura cuyos límites no pueden fijarse en términos de jurisdicción, ya que sólo atenderían a uno de sus aspectos constitutivos olvidando la continuidad de los procesos productivos, sus encadenamientos, que trascienden los límite fijados administrativamente y las relaciones sociales que sólo utilizan el territorio como asentamiento material. (Capraro, H, 1987 ) Por ello, las regiones son concertadas, surgen de acuerdos entre distintas provincias, municipios o localidades, que pueden tener o no contigüidad, pero que necesariamente deben tener problemas comunes a resolver, originados y desarrollados en circunstancias comunes y cuya solución puede encontrarse en acciones y estrategias también comunes. Se ha dado históricamente que las Ciudades van extendiendo su influencia y conformando continuidades urbanas que se transforman paulatinamente en áreas urbanas más extensas, con flujos e interrelaciones funcionales, denominadas áreas metropolitanas. Como consecuencia, el ámbito urbano constituye un recorte lícito, es un espacio delimitado y observable, en el cual los actores sociales y los procesos políticos adquieren corpo- 394 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. reidad. Sin embargo, la delimitación de las áreas metropolitanas o urbanas es una tarea complicada, en la que las dificultades de la señalización de cualquier límite geográfico o socioeconómico van unidas a la complejidad especial de las áreas urbanas. No escapan, así, a la problemática de cualquier región: no tienen entidad, no existen institucionalmente y no se las puede crear por decreto, sino que deben ser construídas con acciones y actividades concretas, orientadas por una clara decisión política estratégica de las jurisdicciones involucradas. (SCIARA,1999) Las diferencias que podemos encontrar entre un área metropolitana y una región no son sólo de extensión, sino también cualitativas y exigen introducir nuevas categorías de análisis e instrumentos de planeamiento. Además de la falta de congruencia entre los límites socioeconómicos y los límites administrativos, en general, los problemas metropolitanos tienen que ver con aquellos característicos de los centros urbanos importantes: rápida extensión, dificultades de tráfico, población heterogénea, cuestiones sanitarias, etc. (Geisse y Coraggio, 1972. Lo que interesa más para nuestro trabajo son los problemas relacionados con el desarrollo socioeconómico y las posibilidades, desde las áreas o regiones, de revertir el proceso histórico condicionante del modelo de acumulación y de sus consecuencias. La formación del área Gran Rosario se dio con la expansión de una ciudad central, Rosario, y en la actualidad une a un conjunto de centros menores que han adquirido importancia en distintas etapas del desarrollo del país.2 Al comenzar a trabajar este tema en el Instituto de Investigaciones Económicas se distinguió entre Area y Sistema. El Area es la continuidad urbana, que engloba nueve localidades, tal cual la define el Instituto de Estadística y Censo (INDEC), que es la mancha que vemos en los mapas (ver anexo 1). Cuando se comienza a trabajar sobre los fenómenos socioeconómicos, que se clasifican a priori como metropolitanos, se encuentra dificultad para asociar esos fenómenos con la mancha urbana. Entonces se habla de Sistema por dos razones: porque la palabra sistema es lo suficientemente amplia para su aplicación según el objeto de investigación y porque pensamos que es importante enfatizar los flujos y las interacciones, que cambian en cada etapa del desarrollo analizada. El sistema se asienta sobre un área geográfica cuya extensión debe ser analizada en función de factores socioeconómicos. A primera vista parece importante enfatizar los flujos de transporte, por los que pueden definirse los límites del área pero, dado que hay distintas intensidades de flujos, es posible definir un área que coincida aproximadamente con una metropolitana, o también una dentro de unos 40Kms, otra dentro de unos 70Kms y otras de mayor distancia. Es posible también definir una para cada rama de actividad, por ejemplo si incluímos o no la agricultura periurbana que se extendería hasta Villa Constitución. De todas maneras el área es una parte decisiva del sistema a causa de la fuerte inercia que tiene la infraestructura construída. Cuando se estudia la historia local, el desarrollo de la infraestructura de los sistemas de transporte (en su proceso de construcción, en su período de presencia hegemónica y en su declinación) se marcan etapas muy claras en el desarrollo 2 Las localidades que conforman el Gran Rosario, definido por el Indec para la Encuestas Permanente de Hogares, son: Puerto General San Martín, San Lorenzo, Capitán Bermúdez, Fray Luis Beltrán, Granadero Baigorria, Rosario, Funes, Pérez, y Villa Gobernador Gálvez. Reúne una población estimada de 1.252.787 para Mayo de 1999. Los datos censales incluyen a Roldán y Soldini. 395 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. de la región. El transporte y las comunicaciones permiten que las ciudades se extiendan por encima de sus propios límites físicos. De la misma manera, las actividades productivas han sido importantes para la conformación del área. Pero el desarrollo industrial, que surge tempranamente en Rosario acompañando el modelo agroexportador, se transformó en motor del desarrollo regional a partir del proceso sustitutivo de importaciones. Su evolución y reestructuración ha impactado fuertemente en la economía rosarina y en las condiciones de vida de sus habitantes. 2. Factores condicionantes de la conformación y/o extensión del Area Distintos factores conforman un sistema de fuerzas que pueden permitir a las actividades locales alcanzar un desarrollo considerable. Podemos agruparlos en: - Aspectos económicos, con gran peso de temas sectoriales. - Estructura social y ocupacional, destacando las migraciones poblacionales. - Problemas de empleo: desempleo, subempleo y precariedad. - Transformaciones políticas, con nuevas formas de gestión. Estos elementos, o al menos algunos, construyen las relaciones entre economía y territorio y pueden permitir un mayor desarrollo, extendiendo las actividades dentro del área o región. Según como se desarrolle este proceso puede también concentrar espacial y económicamente las mismas. Desde el punto de vista económico y haciendo un recorte temporal o histórico en el área metropolitana, aparecen aspectos permanentes que, de algún modo, la identifican desde siempre. En el caso del Gran Rosario esto es su posición geográfica privilegiada, una condición natural. Este factor es el que más impacta en la evolución de las actividades productivas rosarinas desde su formación, en el siglo pasado. Esta posición le permitió ser el nexo entre la región agrícola pampeana y los mercados mundiales, así como entre diversos espacios de nuestro país. Esto fue materializado con la construcción de infraestructura básica, en especial la relacionada con el sistema ferroportuario, transformando a la región en un nodo del sistema nacional de transporte y de comercio nacional e internacional a lo largo de los años. Así, el desarrollo económico local está ligado al nacimiento de la economía regional. Si bien la ciudad-puerto y su entorno se beneficiaron con el modelo que la Argentina adoptó en el siglo pasado, al integrarse al mercado mundial como exportadora de materias primas y alimentos, en las etapas siguientes la conformación del Aglomerado y la evolución industrial también tuvieron que ver con su localización sobre el Río Paraná. En la actualidad, a casi 100 años de la primera licitación del puerto, con la instalación de puertos privados y la reestructuración del puerto local, bajo otras formas, el río está asumiendo otra vez un papel fundamental en la actividad económica local. 396 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. La ciudad resultó naturalmente un punto de transbordo de una amplia región pampeana y permaneció con esas características hasta hoy. Unido a ello hubo condiciones políticas que validaron la situación y se generan elementos con fuerte inercia. Obviamente el elemento inercial más fuerte en una región urbana es la infraestructura de transporte, de servicio, de viviendas, infraestructura que cambia y se modifica a medida de que cambian los modelos de desarrollo económico imperantes. Los elementos que consolidan el funcionamiento del sistema pueden partir de acciones o estrategias individuales vinculadas a los sectores industrial y de servicios o a políticas de gobierno tendientes a ello, por ejemplo la formulación /ejecución de proyectos que involucran a más de un Municipio o el desarrollar estrategias comunes para enfrentar con éxito problemas similares. Existen también otras políticas de gobierno que si bien no tienen como objetivos básico la integración regional, la misma surge como resultado indirecto de dichas políticas. Por ejemplo, las políticas de salud (más concretamente la existencia o la construcción de un hospital público municipal, que atrae residentes de otras áreas). Los procesos de urbanización y de concentración generan nuevos problemas que se agravan con las crisis económicas. El mayor problema es el desempleo y la pobreza que aumenta a partir de los últimos años, al transformarse la estructura social y ocupacional. Podemos decir, entonces, que no se deben olvidar los recursos de la región, lo que se fue construyendo y lo que se puede hacer o planificar. "...la base heredada es muy diversa para los diversos lugares, incluso de un mismo país. En esto inciden las infraestructuras físicas, las posiciones respecto a los recursos naturales y al nuevo sistema de flujos de mercado global, las historias productivas, las capacidades laborales y empresariales locales, las matrices culturales de larga data. Pero los lugares se distinguen por algo que es crucial en esta época de transición epocal: Se diferencian por la existencia o inexistencia y por la calidad de un proyecto que oriente su rumbo y sobre todo por la influencia del contexto nacional y regional en que están insertas”. (Coraggio, José Luis, 1997, pág.33) 3. Orígenes y evolución del AGR Para sintetizar el proceso histórico que fue conformando la estructura productiva local y regional del Area Metropolitana Gran Rosario, se adoptan las etapas que el pensamiento de la Cepal popularizó para los países latinoamericanos. Los datos provienen de fuentes muy 397 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. diversas y, a veces, no totalmente compatibles, lo que dificulta describir la economía rosarina a partir de los cambios de la década del 30.3 Las distintas fases del desarrollo económico del Gran Rosario toman en cuenta las características o ventajas regionales así como los distintos elementos que caracterizan el Área. Pero es importante señalar que las fases se corresponden con las distintas manifestaciones de las relaciones periféricas y dependientes de Argentina con el sistema económico mundial. Así: a) Cuando los países centrales necesitaban aprovisionarse de materias primas y alimentos baratos, superados los inconvenientes o barreras técnicas de los transportes, la pampa húmeda (y la región) se transforman en espacios integrados, no geográfica pero sí económicamente, de los sistemas productivos de los países industrializados. "El crecimiento de Rosario se ve favorecido por su función de polo central de una de las más importantes regiones cerealeras argentinas y consolidado por un trazado ferroviario y vial que definió dicha función. Históricamente y hasta el advenimiento de la industrialización en el país, la división internacional del trabajo que asignó al área latinoamericana un rol limitado a la producción primaria, encontró en Rosario un punto clave de comunicación de las zonas de origen con el mundo exterior" (Basaldúa y Moreno, 1972, pág.275). En estos m ism os años, el increm ento de la pob la ci ón y la el evac ión del niv el de ingres o exp and ieron el m ercado loca l, a la vez que l a pos ic ión estratégica en el s istem a de tran sporte y com ercialización perm itieron e l abastecim iento de ins um os y la co locación de los productos en to do el m ercado naciona l. Respecto a la infraestructura y al sistema de transporte se puede señalar que ya a fines del siglo XIX e inicios del XX el ferrocarril evolucionó de tal forma que conectó a Rosario con casi todo el país. En 1870 se finaliza la línea del Ferrocarril Central Argentino que une Rosario a Córdoba. Luego se extienden otras, Rosario—Candelaria, Campana, Sunchales y Tucumán. Al mismo tiempo se van construyendo ramales a los distintos poblados del Area, como por ejemplo en 1891 que se autoriza la extensión del ramal ferroviario desde San Lorenzo a Pto Gral San Martín, uniéndose así también a Rosario. Posteriormente, en la década del 30 se pavimentan las principales rutas de la región: 1933 la ruta a Santa Fe, que une a su vez a todos los poblados del norte del cordón, 1935 a 3 Los estudios realizados por el Centro de Estudios Urbanos y Regionales del Instituto Di Tella (CEUR) y la Municipalidad de Rosario (Comisión Coordinadora Urbanística, Ferroviaria, Vial y Portuaria, en primera instancia y División de Planeamiento de la Prefectura Gran Rosario a partir de 1970) son básicos para el desarrollo de este trabajo. Del Diagnóstico por ellos realizado se extrae gran parte de la información hasta los años 70. A partir de esta época las Investigaciones del Instituto de Investigaciones Económicas de la Escuela de Economía (Facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la UNR) permiten reconstruir las sucesivas etapas. 398 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Buenos Aires vía Pergamino y en 1936 a Córdoba. El trazado de las rutas otorga mucha mayor flexibilidad a las comunicaciones y así se constituyó en otro hecho fundamental para la consolidación del cordón. El rápido crecimiento demográfico de la ciudad continuó aproximadamente hasta 1930 alimentado, en gran medida, por la inmigración europea. En 1910, año pico de este movimiento de población, el 44,6% de los habitantes de Rosario eran extranjeros, en su gran mayoría italianos. La población pasó de 113.000 habitantes en 1900, a 225.000 en 1914 y a 421.000 en 1930. El crec im iento ur ba no consigu iente creó un m ercado de m ateriale s para la construcc ió n, que f ue abastecido loc alm ente. Dado e l tipo edilic io prevaleciente, entre estos m ateriales s e enco ntraban p iezas de cer ám icas de construcció n f abril, así com o estructuras de acero y otros pro ductos m etálicos, cu ya f abricac ión di o origen a la i ndu stri a m etalúrgica ros arina. Se estab an creand o, así, las condic iones par a la expans ión d el s ector industria l. Rosar io ya prese ntaba un se ctor m anufacturero qu e había surgi do tem pranam ente, m uy vinculado a las act iv idades agríco las. Se debe recor dar que en la d écada de 1850 había a pareci do la r am a m oliner a, que ve inte años después inició la ex portaci ón de h arina - un año ant es que com enzaran los em barques regu lares de trigo- y fue seguida por otras industrias de la a lim entación com o la f rigoríf ica, tam bién ligada al sector e xterno. b) Cuando, a partir de 1929, el sistema entra en crisis y la demanda mundial pierde el carácter expansivo que había tenido durante largo tiempo, la resultante es la necesidad de producir internamente parte de los bienes que el mercado requiere: surge así la industrialización liviana sustitutiva de importaciones. Para 1934 se notaban ya signos de reactivación económica, habiendo descendido la desocupación, sobre todo por la absorción de mano de obra en la construcción de caminos y otras obras públicas. La construcción de los caminos pavimentados rompe el monopolio ferroviario y, en consecuencia, altera las relaciones existentes entre transporte por ferrocarril y negocios portuarios. Pero, además, la competencia del transporte automotor significa una segmentación del mercado de las cargas: las de mayor valor se vuelcan hacia el transporte puerta a puerta, quedando para el FFCC aquellas de mayor volumen y de menor valor unitario. El transporte ferroviario local decayó así, sistemáticamente hasta el presente, desapareciendo la mayor parte de los servicios de pasajeros hacia fines de la década de 1970. "En las décadas del 40 y 50 se produce en el país un fuerte crecimiento industrial. El que se desarrolló estructuralmente sobre la base de la política de sustitución de importaciones que regía la economía nacional. Esto fue causa de un gran movimiento de población. El proceso produjo cambios en la ciudad, ya que incorporó a la función puerto una importante localización de industrias, fundamentalmente, en la rama metalúrgica. Desde el punto de vista urbano esto agudizó los problemas preexistentes al no haber controles normativos e institucionales para el desarrollo urbano. Este desordenado proceso de crecimiento ha producido algunas deficiencias notorias, entre las más distorsionantes se pueden señalar: pro399 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. fundas fallas en el trazado de accesos y redes viales y ferroviarias, importantes industrias ubicadas en zonas residenciales, insuficiencias en la prestación de los servicios esenciales". (Basaldúa y Moreno, 1972, pág.275) c) Desde mediados del 50, aproximadamente, se avanza hacia la provisión de bienes de capital, pero con capitales y tecnología extranjera, orientados hacia el mercado interno y al amparo de fuertes políticas proteccionistas. La p artic ipac ión del área m etropolitana en el Pro ducto Brut o Geogr áf ico de la provinc ia f ue del 4 1% en 1959, m ientras que en el año 1967 este porcentaje era del 61 %, dem ostrando la im portancia económ ica de la zona. El papel protagónico pasó a m anos de las em presas de la industria pesada y sem ipesada, de propiedad g eneralm ente extranjera o pública, con instalaciones productivas f uera del m unic ip io y adm inistraciones ce ntral es f uera de la reg ión. La política económica instaurada por el gobierno desarrollista primero (1958-1962) y por el gobierno de facto después (1966-1973), contribuyó a la particular configuración del Gran Rosario. Las f ábricas que se instalar on f ueron conf orm ando el cordón industrial que se ext end ió d esde Pu erto San Martín hasta Vil la Gobernad or Gálve z y Punta Alve ar, hacia el sur. El crecim iento poblac ional que ell o inducía a lo largo d e la c osta, consoli da el Ag lom erado Gran Rosario, c om o continuidad urba na. Es la etapa de la penetración del capital externo, atraído por ventajas que le otorga la Ley de inversiones extranjeras. En el orden mundial se consolida el predominio de los Estados Unidos que orienta el excedente de sus capitales hacia los países de Latinoamérica, influyendo en sus economías. El área de Rosario se convirtió en una de las zonas que más atrajeron inversiones extranjeras. En los tres años transcurridos entre finales de 1958 y 1961, el Ministerio de Economía aprobó radicaciones por aproximadamente 400 millones de dólares, siendo Estados Unidos y, en segundo lugar, Suiza los que mayores radicaciones realizaron. Las industrias que llevaron más caudal inversionista, alrededor de 118 millones, fueron las químicas y petroquímicas que, justamente, prefirieron localizarse en el Gran Rosario. El 80% de los capitales que se radicaron en la Provincia de Santa Fe lo hicieron en esta rama. d) La economía mundial comienza luego un proceso de cambios radicales en el sistema productivo, con globalización creciente de la economía, conformación de bloques económicos y un nuevo patrón de especialización en el comercio internacional. En Argentina, el quiebre del modelo sustitutivo y la caída del Estado Benefactor también dan lugar a importantes cambios. La década del ochenta es la de grandes desequilibrios e inestabilidad macroeconómica, provocados por la variabilidad de las políticas económicas. Hiperinflación y falta de crecimiento marcan este período que se puede considerar de transición hacia ajustes más duraderos. 400 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Este perío do (1976-1990) m arca grande s m odif icaciones tan to a nivel país com o, por supuesto a nive l de la C iud ad y su reg ión. Po lít icam ente abarca, en f orm a com pleta, el gob ier no m ilita r cuya gestión se llam ó Proceso de Reorgan izac ió n Naci onal y el gobierno del Dr.Raúl Alf onsín, durante el c ual se ponen en vigenc ia el Pla n Austral (1 985) y el Plan Prim avera (1988). Desde e l pu nto de vista econ óm ico com prende la etapa de q uiebr e y f inalizac ión de la su stit ución de im portacio nes, ya que e l go bie rno que as um e a princ ip io s de 1 976 adopta un m odelo basado e n la apertur a de la eco nom ía. El s ector industrial, que se ha bía estableci do y evoluc ionad o al am paro de m edidas proteccioni stas, tiene ahora que com petir en el pro pio m ercado dom éstico con los productos im portados. Durante el gob iern o m ilitar se a doptan algunas m edidas d e política ec onóm ica, adem ás del esquem a de apertura, que m erecen ser señaladas porque tiene n gran infl uenc ia en la estruct ura productiv a nacional y loc al. Así, la Ref orm a Financ iera de 1977, m arca el f ina l de una etapa dónd e las tas as de interés re ales n egativ as alteraban la s dec is ion es de in versión de las em presas, oc asionand o un sistem a de subsi dio s hac ia los usuar ios de los cr éd itos. Es un período de gran i nestabil ida d económ ica, m arcada por un crec im iento de los pr ec io s que t iene sus punt os m ás álg ido s en el "Rodrigazo" de 1975, la hiperinf laci ón de m ediados de 1989, cu ando se producen los f am osos "sa queos" en la ciudad de Rosario y los picos de inicios de 1990 y 1991 previos a la im plem entación de l Plan de Conv ertib ili dad. La déc ada d el 80 e stá sig nada por la grave crisis del b alance de pagos de 1981, y p or el c reciente en deudam iento externo, que ll ega a s u pu nto culm inante cuando en 1988 se suspen de n los pag os tanto de interes es com o de capita les. Rosar io, e nclava do y f orm ando parte del cordón in dustrial de l país, no escapó de la crisis que atravesó la economía argentina a partir de fines de los años 70. Por el contrario, estudios realizados permiten afirmar que fue aquí más grave aún, en tanto las nuevas políticas económicas no favorecieron al sector industrial y, en particular, al tipo de firmas y de actividad desarrollada en la Región.4 Sin embargo, un hecho destacable es el establecimiento en la zona norte, fuera de la Ciudad, sobre el Río Paraná, de las nuevas plantas productoras de aceites y grasas vegetales, 4 El sector metalmecánico, predominante en la región, fue uno de los más afectados por la apertura indiscriminada, ni lograron acuerdos sectoriales como en el caso de las automotrices. El textil y el calzado ven cerrar muchas de sus empresas. En lo relativo al tipo de firmas, predominan las micros y pymes, con tecnología obsoleta y producción para el mercado interno, Mientras que las grandes empresas del cordón se reestructuran despidiendo una parte importante de su personal, lo que afecta económica y socialmente a las localidades de la región. 401 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. completando sus instalaciones con muelles para la exportación de granos, aceites y subproductos. Durante esta etapa se inicia en el Area uno de los problemas que aún hoy está sin solución: la desocupación. Tomando en cuenta las tasas de desocupación y subocupación se observa que, hasta inicios de la década del 80, las mismas presentan valores semejantes a los de los países desarrollados. A partir de ese momento se produce un quiebre en el comportamiento del mercado laboral local, con una tasa de desocupación que por primera vez supera el 6% y que nunca más se ubica por debajo de dicho valor. En 1974, al finalizar la etapa sustitutiva de importaciones, el empleo en el sector industrial del área significaba el 34% del empleo total, proveyendo de más de 100.000 puestos de trabajo al mercado laboral. De allí en más su importancia relativa en este aspecto va disminuyendo, al entrar en un claro proceso de reestructuración. Así es como en 1990 la proporción de empleo por él absorbida había disminuído al 21%. Esta disminución se produce por la falta de dinamismo del sector para incrementar sus puestos de trabajo, pero no por una disminución absoluta de los mismos entre ambos extremos.5 Las tres cuarta parte de los empleos creados entre 1975 y 1991 fueron absorbidos por el sector comercio (Gran División VI) y los servicios personales, comunales y sociales (Gran División IX)6. Son los servicios los que presentan un comportamiento más activo en la creación de empleo. Esta evolución muestra la terciarización producida en la economía local, dónde los servicios adquieren, a partir de mediados de los 70, cada vez mayor peso en el sistema productivo. e) Por último, los nuevos cambios en la política y estructura económica del país, tienen que ver con la adaptación final al sistema internacional: Globalización e integración. Esto significó para las empresas enfrentar un duro proceso de apertura y la necesaria búsqueda de la competitividad, quedando muchísimas de ellas en el camino. Además, si bien Rosario es el centro de una región con una ubicación privilegiada frente al esquema regional ampliado del Mercosur, lo que es un factor atractivo para las inversiones (ubicación sobre la Hidrovía Paraná-Paraguay, centro del corredor bioceánico, puente Rosario-Victoria, entre otras obras), ella sola no alcanza, siendo necesario avanzar sobre las ventajas locacionales. Es esta etapa la que presentaremos más en detalle en relación con las posibilidades de la ciudad y su área metropolitana. 4. El aglomera do frente al ajust e y l a convertibilidad. El presente. 5 La creación de puestos de trabajo (alrededor de 200.000) se observa comparando la segunda onda de 1990 con la segunda de 1974, o bien la primera de 1991 con la misma correspondiente a 1975. Sin embargo se debe aclarar que la primera onda de 1990 sí había presentado una disminución notoria de los trabajadores industriales. Sucede en esta etapa que la PEA aumenta de 288.000 a 552.000 (entre 1975y 1991), aproximadamente. Si bien los valores absolutos deben ser tomados con cuidado, es indudable que el ritmo de crecimiento de la PEA es superior al ritmo de crecimiento de la ocupación por lo que las tasas de desocupación se incrementan (ver anexo cuadros). 6 Los ocupados totales pasan de 272.611 a 492.808 personas; los del sector comercio de 45.773 a 122.037 y los del sector servicios personales, comunales y sociales de 69.000 a 162.008. 402 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. En m arzo de 1991 se pone en m archa el Plan de C onvert i bilidad, cuyo princ ip al obj et ivo era detener el grave proceso inf lacionar io por el que atravesaba n uestra eco nom ía, apo yán dos e, pri ncipalm ente, en dos m edidas f undam entales: la a pertura de la econom ía y la con verti bil ida d de la m oneda loc al, an cl ada a un tipo de cam bio f ijo. Si b ien no se pued e dejar de m encionar que una d e las m etas, que f ue anunc ia da com o decis ión inquebrantable, era lograr un sup er avit del Balance de Pagos que permitiese e l pa go d e la deuda interna y ex terna (Rofm an, 1997). Pero tam bién se ad optan otras m edidas que tienen un f uerte im pacto sobre las acti vi dades productiv as com o son las priv atizacion es y la d esreg ulac ió n (o re-regu lac ión) de la econom ía. Esto ocas io na un c am bio en los precios relativ os de ciertos serv icios, que en m anos del s ector públi co tení an precios determ inados com o tarif as públicas. Todas estas m edidas se adoptan en un m arco de integrac ión de nuestro país en e l Mercosur y de un f uerte proce so de globa lización de la econom ía intern ac iona l. Un tem a que m erece ser estud iad o es com o repercute todo este proceso en las diversas regi ones del país, ya qu e cada una de e llas tiene capac idades m uy dist intas pa ra enfrentar y, si es pos ible, aprovechar las con di ci ones vigentes. Cabe s eñ alar que la integración con Bras il, Uruguay y Paragu ay, no necesar iam ente con lleva una m ayor integr ac ión int erna. Contrar iam ente las disparidad es entre regiones tam bién s e han ac entua do. Durante la v igenc ia del Pl an se produce un crec im iento de la econom ía nac iona l m edido e n térm inos de s u Prod ucto Bruto Interno, sin em bargo la distr ibuc ión de est e crecim iento acentúa aún m ás la i nequi da d exist ente. En Rosario un o de los sectore s m ás af ectados, m ientras la r eestructuración continua, es el industrial, que com o ya m encionáram os fue el m otor del desarrol lo en gran de s períodos de su his toria y u no d e los que m ás contribuyeron a la conf orm ación del a glom erado. Abarca tam bién a l sector com ercio y s ervicios, ten ien do un f uerte im pacto en el se ctor f inanciero, desapareciendo pract icam ente la banca l ocal. La consecu enc ia m ás destacable y p enosa en este contex to es el alto c osto social de la des ocupación y subocupac ión, así com o el deterioro de las con dic iones la bora les de gran parte de la poblac ión q ue ve así dism inuir su n ivel de v ida. 4.1 El sector industrial El desarrollo industrial local está explicado, sobre todo, por el desempeño y comportamien- 403 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. to de empresas de tamaño pequeño y mediano (Pymes), cuya evolución ha estado muy ligada a los ciclos de la economía nacional. Durante la sustitución de importaciones se desarrollaron al amparo de fuertes medidas proteccionistas y al finalizar ésta e implementarse grandes cambios, que incluyeron la apertura de la economía, se producen modificaciones estructurales que ocasionan la caída en el número de empresas y de puestos de trabajo. En una economía más abierta, “las condiciones de competitividad que debe alcanzar la actividad económica regional, expresadas en el desempeño de las empresas, no sólo se confrontan con el mercado interno, sino que se exponen a l a competencia internacional. En este sentido las fronteras desaparecen para las empresas, aunque sus productos abastezcan preferentemente al mercado interno” (Bendesky, 1994). Es así como el área en la actualidad cuenta con la mitad de las industrias que ostentaba en sus épocas de auge. Los datos del último Censo Nacional Económico (1994) dan cuenta de la existencia de alrededor de 3.700 industrias, representando el 4% de los locales y puestos de trabajo industriales del país, habiendo perdido participación respecto a una década anterior. La estructura de este sector de acuerdo a la variable locales industriales se muestra en el cuadro siguiente, donde puede apreciarse la importancia de las dos ramas más tradicionales: la metalmecánica y la alimenticia. La primera y más numerosa, abarca en general Pymes y microempresas, mientras que en el sector alimentos se encuentra un gran número de micro y Pymes conviviendo con un número de grandes empresas. CUADRO Nº 1 ESTRUCTURA INDUSTRIAL DE ACUERDO AL PORCENTAJE DE LOCALES GRAN ROSARIO RAMA DE ACTIVIDAD PARTICIPACION 15: Alimentos y bebidas 19.9 17: Textiles 1.2 18: Prendas de vestir 5.7 19: Cueros y calzado 1.6 20: Maderas sin muebles 3.0 21: Papel 1.2 22: Imprentas 7.0 23: Coke y petróleo 0.1 24: Químicos 2.4 25: Caucho y plástico 4.0 26: Minerales no metálicos 3.3 27: Metales 2.0 28: Prod. Metal excepto maquinarias y equipos. 18.3 29: Maquinaria y equipo 10.7 30: Máquinas de oficina 0.1 31: Máquinas eléctricas 3.5 32: Aparatos de radio, televisión y comunicaciones 0.4 33: Instrumentos y Relojes 1.4 404 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. 34: Automotores 5.7 35: Otros equipos de transportes 2.1 36: Muebles y otros 6.4 Fuente: Elaboración propia en base a datos del CNE. 94 Si se analiza la variable Valor agregado la industria alimenticia se ubica en primer lugar, básicamente por la concentración en el área de la industria frigorífica y de las aceiteras. Sin embargo luego de realizado el Censo el proceso de transformación del sector se acentúa, produciéndose gran cantidad de cierres y reestructuraciones de firmas. Entre las afectadas ya a los inicios de la Convertibilidad podemos señalar la industria textil, desapareciendo un conjunto de pequeñas y medianas empresas del sector y decretando su quiebra, en el año 1992, el que fue el principal establecimiento textil de la zona: Estexa, que daba ocupación a unas 1300 personas, señalándose como factor fundamental de su quiebra el ingreso de gran cantidad de telas importadas. En 1993 cierran tres importantes industrias de Capitán Bermúdez: Electroclor, Verbano y el frigorífico De Pauli, significando la destrucción de 900 puestos de trabajo. La rama metalmecánica también sufrió los impactos del modelo económico. En general los empresarios señalaban como causas de sus problemas a: la apertura externa indiscriminada y bajo regímenes de dumping; las altas tasas de interés que hacen imposible la utilización de créditos; los altos costos internos, impositivos, laborales o por servicio públicos privatizados; y la disminución de las ventas por estrechamiento del mercado interno. A mediados de 1994 la Asociación de Industriales Metalúrgicos de Rosario dan cuenta de que una de las actividades seriamente afectada por el modelo vigente es la de bicipartes, rama muy concentrada en el átrea y de importancia a nivel nacional. Señalan como factor causal de esta situación a la libre importación de estos componentes, sobre todo de China, India, Brasil y Taiwán. Estimaban en 60 a las empresas involucradas en esta situación, comprometiendo la fuente de trabajo de alrededor de 750 empleados. Otro sector comprometido sería el de las máquinas herramientas, perjudicado por la baja de los aranceles a la importación a nivel cero aunque con un subsidio a la compra de bienes nacionales. En este caso se estimaban en 20 las pequeñas y medianas empresas afectadas y en 300 los puestos de trabajo. La rama carrocera de mucha concentración en Rosario y su Región, que años antes producía no sólo para satisfacer la demanda nacional, sino que incluso exportaba a países de Latinoamérica y Cuba, es otra de las afectadas, en este caso por la importación proveniente mayoritariamente de Brasil vinculada al Mercosur. Otras ramas que se encontraban trabajando con muy baja utilización de su capacidad instalada, calculada en sólo un 20%, era la de maquinarias agrícolas; con similar proporción trabajaba la rama de matricería; la de forjado y estampado, con un porcentaje del orden del 405 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. 30% mecionándose también la difícil situación por la que estaría pasando el subsector de fundición, trabajando sólo al 15% de sus posibilidades. En el rubro de autopartes, se encontraban involucradas unas 35 empresas con aproximadamente 700 empleados que trabajaban usando sólo el 40% de su capacidad. Otro conjunto de empresas se reestructuran y justamente aquellas que en momentos de auge del cordón eran las que más mano de obra ocupaban son, al mismo tiempo, las que más expulsaron trabajadores en los últimos tiempos. Dentro de éstas podemos citar a empresas como el frigorífico Swift, que realizando claramente un proceso de downsizing, en el término de dos décadas redujo a la mitad su personal ocupado, haciendo importantes inversiones y exportando a gran cantidad de países. Pasa, empresa instalada en la época desarrollista, en 1964 llegó a dar ocupación a más de 1000 personas. Sin embargo los conflictos se iniciaron ya a mediados de la década del 70, habiendo disminuido su personal ocupado en un 20% hacia 1975 y en 1991 sólo ostentaba un tercio de los empleos de su época de auge. Además de la apertura, las privatizaciones también afectaron a la región, quizás debamos destacar la venta de la destilería YPF de San Lorenzo a principios de 1993. Al mismo tiempo los puertos privados instalados en el área continúan conformando uno de los sistemas portuarios más importantes del País y el complejo aceitero se consolida en la zona norte del cordón, concentrando un porcentaje muy importante de las exportaciones nacionales. En 1991, Celulosa, Sulfacid, Duperial, Peconagra, Cerámica San Lorenzo, ACA, Indo, Pasa, Dow, Terminal 6, exportaron, en conjunto, alrededor de 380 millones de dólares, aunque en ese mismo período la CGT Regional declara que se han perdido 1400 puestos de trabajo. Además parecería que el área sigue atrayendo localizaciones industriales importantes. En 1997 comienza su actividad la General Motors, empresa que se instala al sur del cordón en Alvear. Esta planta es una de las llamadas “cuatro plantas” que la G.M. instala conjuntamente en Polonia, China y Tailandia. Pero las heterogeneidades se acentúan entre los sectores y entre las empresas, de igual manera que en la población, al concentrarse cada vez más los ingresos. Empresas importantes continúan moviendo cientos de millones de dólares anualmente, mientras muchas otras deben cerrar sus puertas. Aceiteras, petroquímicas y terminales privadas portuarias movilizan miles de camiones mensuales, sin embargo las tasas de desocupación y subocupación, como ya se mencionó, alcanzan niveles nunca antes conocidos y las condiciones laborales se van precarizando, condenando a parte de la población a vivir en niveles que pueden ser considerados, en el mejor de los casos, de subsistencia. Sin lugar a dudas el cordón industrial rosarino vivió momentos de gran auge y hoy le toca atravesar un proceso de adaptación a las nuevas condiciones donde si bien existen ganadores, son muchos los perdedores. 406 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Los últimos datos con que se cuenta para el sector industrial son los correspondientes al Relevamiento del Sector Productivo 1997, censo a la industria manufacturera de la Ciudad, cuyos resultados mostraron un panorama que se vislumbraba como más positivo. Sin embargo, acontecimientos ocurridos con posterioridad dan cuenta de la continuidad de los problemas. La comparación de la información relevada en el mismo con la proveniente del CNE 94 dan cuenta del proceso concentrador sufrido por algunas ramas como la de fabricación de prendas de vestir y la química; la expansión en el empleo de otras como la fabricación de productos de caucho y plástico, maquinaria y aparatos eléctricos y muebles y la expulsión de personal en la de automotores, remolque y semirremolque . El mismo censo presenta una estructura industrial compuesta por un 36% de microempresas (hasta 5 personas ocupadas y menos de 60.000 pesos anuales de facturación), un 63% de Pymes y menos del 1% de grandes (más de 200 personas ocupadas). Además dio cuenta de la existencia de un gran grupo de empresas que son sólo de subsistencia, con muy pocas posibilidades de supervivencia. Sus cierres tendrán, sin duda, efectos no deseados en la población. En el otro extremo, un grupo de empresas muy dinámicas habían implementado, en los últimos años, estrategias ofensivas y estaban muy bien posicionadas. Entre estos dos grupos un sector intermedio, sobre el cual no estaba todo dicho y que, seguramente, requerían apoyo institucional o estatal para funcionar en un “ambiente favorable”. 4.2 Otras actividades productivas. Durante la presente década otro sector, el del comercio, experimenta, y aun hoy lo está haciendo, un fuerte proceso de reestructuración, caracterizado por la concentración y la adquisición de firmas locales por capitales extrarregionales, en gran parte internacionales. Si bien la comparación de los datos de los dos últimos censos, 1985-1994, muestra, por primera vez una brusca disminución en la cantidad de comercios y en sus puestos de trabajo, constituyendo un síntoma de la reestructuración que enfrenta, las transformaciones más notorias se producen con posterioridad. Los aspectos más destacados de este proceso se sintetizan a continuación: a) La llegada de las grandes cadenas líderes a la Región. A partir de 1996, con la instalación de Carrefour en Rosario, toma especial impulso la radicación de este tipo de firmas. Las mismas se instalan en lugares estratégicos de la ciudad o bien adquiriendo establecimientos de capitales locales, elegiendo sitios preferenciales en la trama urbana y desarrollan estrategias claramente ofensivas para ganar el mercado. b) Ante estos acontecimientos, los grandes grupos locales, que ya existían en 1994, implementaron estrategias defensivas diversas. Una fue replegarse sobre el centro urbano tradicional, abriendo nuevos locales o utilizando instalaciones existentes, las que en muchos casos permanecían sin uso por cierre de otras firmas. Otra estrategia frecuente ha sido la de abrir nuevas bocas de ventas en centros urbanos menores del Aglomerado donde sólo exis- 407 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. tían comercios del tipo tradicional. Muchas de ellas han sido compradas, recientemente, por cadenas de capitales externos a la región o internacionales. c) Otro aspecto destacable es la incursión de empresas mayoristas en el sector minorista, cumpliendo en grandes locales con ambas funciones. A su vez grandes cadenas también cumplen con la distribución mayorista, desdibujándose los límites entre uno y otro tipo de comercio. d) Otra particularidad ha sido la aparición de alianzas entre empresas, que se asocian para implementar estrategias de comercialización que les permita enfrentar un mercado cada vez más concentrado. Según estimaciones de la Cámara del sector tradicional de ventas, se ha producido durante 1997, una disminución de 367 locales, casi todos ellos pertenecientes a pequeñas y medianas firmas. No es difícil apreciar que esta cifra se incrementa hasta la actualidad, con una gran rotación de los negocios. Más allá de la exactitud o no de estos datos, lo cierto es que el grupo de almacenes y pequeños puestos de servicios enfrenta una situación difícil a partir de la dura restricción impuesta por la escala en que operan. Su permanencia en el sector dependerá de las estrategias que puedan implementar para salvar tal situación. En la actualidad la mayoría de las cadenas de capitales regionales han quebrado o bien han sido adquiridas por empresas extraregionales, ya sean nacionales o extranjeras. Respecto al sector financiero, a partir del Plan de Convertibilidad se dio un profundo proceso de reestructuración y reconversión, que se agudiza después de la crisis de 1994, afectando tanto a la banca pública y como privada. En la banca oficial se dio una disminución de sus empleados por medio de un proceso de retiros voluntarios, por la conversión de algunos bancos en Sociedades Anónimas, por la privatización de otros y también por el cierre y transformación de parte de ellos. A estas instituciones financieras oficiales hay que agregar el cese de la relación laboral en aquéllos bancos que cerraron o se fusionaron con otros, desapareciendo prácticamente la banca local. El proceso de reestructuración en este sector se caracterizó por un alto grado de incertidumbre que hizo que los ahorristas huyeran muchas veces de las casas bancarias menores, lo cual aceleró y acentuó aún más el proceso de cierres, fusiones y adquisiciones. Se calcula que la concentración del sector tuvo como consecuencia la disminución en alrededor de 2000 los puestos de trabajo entre 1994 y 1996. Otro sector que durante el período bajo análisis presenta profundas modificaciones es la actividad portuaria dentro del Municipio. En 1993, y de acuerdo a la legislación vigente, asume sus funciones el ENAPRO (Ente Administrador del Puerto de Rosario), quien finalmente llama a licitación para la concesión de la explotación del Puerto de Rosario, que se concreta durante el año 1998. Al mismo tiempo se inicia un plan de mejoras en las vías navegables, que incluye la señalización y dragado del Río Paraná, desde la zona de aguas profundas del Río de La Plata, hasta el acceso al Puerto de Santa Fe. Esta obra, largamente reclamada por los puertos del Area, es concedida al consorcio Hidrovía SA, habilitándose las obras y el cobro del peaje a partir del 1 de enero de 1996. Se impulsa con ello la Hidrovía, que es tan importante para la integración regional en el Mercosur. 408 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Así, de acuerdo a un texto del Plan Estratégico Rosario del año 1998, se puede enfatizar que la historia portuaria reciente de la zona indica que coexisten dos situaciones, aunque todas pueden ser analizadas dentro de un contexto general de reactivación de la región. Mientras Rosario trata de resolver y encauzar el proceso de ordenamiento y mejora de viejas estructuras heredadas, las terminales privadas se consolidan como puertos. Se observan mejoras relevantes que convierten al conjunto en el complejo agroindustrial más importante del país, no sólo por extensión y capacidad acumulada, sino por la incorporación de nuevas tecnologías y actividades complementarias de proyección internacional. A casi 100 años del llamado a licitación para construir el Puerto de Rosario, se está tratando de repetir el proceso que entonces le significó a la ciudad contar con una infraestructura y una operatoria portuaria de excelencia, reconocida como tal en el mundo. Se está reiniciando un proceso que puede permitir recuperar las viejas y, en muchos casos, obsoletas instalaciones y encauzar nuevamente la operatoria portuaria a futuro. La Construcción es una de las actividades que manifiesta una reactivación en la Ciudad durante los primeros años de vigencia de la Convertibilidad, aunque en los últimos años ha mermado su actividad. Gran parte de ella se debe a la disponibilidad de créditos hipotecarios los cuales, si bien no son accesibles para gran parte de la población, facilita al grupo de ingresos medios altos, la posibilidad de comprar bienes inmuebles. Además, la llegada de capitales externos y la radicación de algunas grandes empresas en la zona aledaña a la ciudad, incentivó la construcción de hoteles, algunos en plena ejecución durante 1998. Esta actividad merece especial atención en el contexto actual, ya que además de acarrear efectos multiplicadores, en ella encuentran ocupación la mayoría de los habitantes de los asentamientos irregulares. Estudios realizados recientemente, dan cuenta que gran parte de esta gente proviene de movimientos migratorios, sobre todo de las provincias limítrofes (Ej. Chaco), en busca de trabajo. 5. Problemas sociales: empleo y pobreza Los problemas estructurales de la desocupación no son nuevos, sin embargo, son los procesos de ajuste económico y reestructuración productiva los que lo agravan. Pero los efectos de estos procesos no son similares ni equitativos para todos los Sectores. Se acenuó la heterogeneidad característica de la estructura rosarina y hubo ganadores y perdedores. Es evidente que las micro, pequeñas y medianas empresas han sufrido una permanente rotación, de cierres y aperturas, con éxitos relativos. Gran parte de las firmas sólo lograron subsistir, sin capacidad de acumulación y, por lo tanto, sin posibilidades de innovarse y adaptarse. Por el contrario las que han logrado innovar e insertarse en el mercado internacional tienen mejores perspectivas. Es a partir de la presente década cuando la capacidad de creación de puestos de trabajo de la economía local comienza a presentar modificaciones de importancia, que se manifiesta en un nuevo incremento de las tasas de desocupación y subocupación. Así en los 409 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. siete años transcurridos entre 19927 y 1999 mientras la tasa de desocupación se incremente del 9,6% al 14,9%, las personas sin trabajo aumentaron en más de 30.000. Estudios realizados (Arrillaga y otros,1998) demostraron que “la tasa anual de creación de puestos de trabajo pasó del 2,45% anual (85/91) a un valor ínfimo del 1,12% en el período 91/97, verificando una capacidad de cubrir las necesidades laborales de tan sólo un 12%”.(Arrillaga y otros, 1994). Este fenómeno se da en un contexto de crecimiento negativo de variación de la tasa de actividad, ya que la tasa de variación de la PEA, si bien es positiva, es inferior al ritmo de crecimiento vegetativo. Es así como durante la presente década, la situación del empleo se agrava en el área, mostrando una de las caras más dolorosas del proceso vigente. La tasa de desocupación llega, en la primera medición de 1995, a superar el 21%. Si bien este porcentaje es por demás ilustrativo, lo es más aún su valor absoluto al representar 102.738 personas sin trabajo. Si a esto se le agrega los casi 64.000 subocupados, significa que más de uno de cada tres trabajadores rosarinos tenían problemas de trabajo en mayo de dicho año. Ese fue un momento álgido para la zona, dónde los efectos post "Tequila" se manifiestaron de forma muy notoria. CUADRO Nº2`TASAS DE DESOCUPACION Y SUBOCUPACION GRAN ROSARIO AÑO 1991 Desocupación 10.9 Subocupación 9.3 1992 10.1 8.1 1993 10.9 11.7 1994 13.0 10.8 1995 21.1 13.1 1996 19.9 10.9 1997 16.1 14.1 1998 13.8 13,5 1999 14.9 12.7 Fuente: Encuesta Permanente de Hogares, primera onda Desocupación: Desocupados/Pob. Económicamente Activa Subocupación: Subocupados/ Pob. Económicamente Activa Aunque con posterioridad las tasas disminuyeron (notándose un incremento en la última medición respecto a su inmediata anterior), durante la primera onda del presente año, el 27,6% de los trabajadores desocupados o subocupados significaban 140.000 personas en una situación problemática, sin tener en cuenta la expansión de esta situación a su núcleo familiar. 7 Se trabaja con la primera onda de la EPH de 1992, dado un desajuste existente entre la población estimada previa a la realización del CNPyV y la que efectivamente relevó dicho censo, que produjo un reajuste en los datos de las encuestas. 410 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Una muestra elocuente del impacto de las políticas actuales sobre el mercado de trabajo se tiene analizando la creación y destrucción de puestos de trabajo, y el aumento/disminución de nuevos desocupados, como se muestra en el siguiente cuadro: CUADRO N° 3 CREACION Y DESTRUCCION TOTAL DE PUESTOS DE TRABAJO (Con respecto a igual onda anterior -primera onda) Año Puestos Creados* Acumulado d/ 1992 Nuevos Desocup** Acumulado d/1992 1993 (1.601) (1.601) 4.582 4.582 1994 8.194 6.593 12.367 16.949 1995 (28.154) (21.561) 40.837 57.786 1996 (3.944) (25.505) (8.478) 49.308 1997 22.865 (2.640) (16.880) 32.428 1998 25794 23.154 (8.571) 23.857 1999 37 23.191 6.648 30.505 Fuente: IIE en base a datos del INDEC () valores negativos *Signos negativos representan destrucción de puestos de trabajo ** Signos negativos significan caída en el número de desocupados El problema de la desocupación ha impactado principalmente en el sector industrial, notándose, no sólo pérdida de participación de este sector en el total, sino incluso destrucción de puestos de trabajo en el período 92/99. Esto ocasiona que en la actualidad existen más de 10.000 desocupados industriales, significando alrededor del 12% de la PEA sectorial. Este porcentaje es similar al que presenta el sector comercial y es superado largamente por la construcción que tiene más de la cuarta parte de sus trabajadores sin trabajo. CUADRO N° 4.DISTRIBUCION DEL EMPLEO EN LAS PRINCIPALES RAMAS DE ACTIVIDAD (En porcentaje del empleo total- primera onda) Año Industria Manufact. Construcc. ComercioTransp.Almac Rest. Hote- en.Comunic. les Servicios Financ.Seg. Inm ServiciosPersonales soc Com. Y 1991 20.6 7.6 24.8 6.3 5.3 32.9 1992 19.3 8.4 24.3 6.4 4.5 35.6 1993 17.2 8.1 28.5 7.5 7.2 29.7 1994 19.2 9.2 28.6 6.3 6.1 29.3 1995 18.7 8.3 26.1 6.9 7.3 29.9 1996 20.6 9.9 25.1 6.1 7.3 29.7 1997 18.4 9.6 27.0 6.2 6.6 30.6 1998 16.5 9.6 29.3 7.0 6.6 29.0 411 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. 1999 18.0 8.0 27.1 7.0 7.9 29.8 Fuente: Elaboración propia en base a datos de la E.P.H. Los sectores de servicios se vieron más protegidos, al inicio de la apertura y fueron capaces de captar parte del incremento de la demanda que siguió a la estabilidad. Cuando se contrae el consumo se termina esa oportunidad y también este sector se ve ante la necesidad de reconvertirse. Este proceso ya se inició en el sector financiero, en el comercio minorista y en el transporte y las comunicaciones (transformados con las privatizaciones). En todos ellos, el proceso es claramente concentrador. En la primera etapa de vigencia del Plan, se da un aumento del cuentapropismo, impulsado, por una parte, por el boom del consumo resultante de los primeros años de la estabilidad y, por otra, por la disponibilidad de fondos provenientes de las indemnizaciones por los despidos producidos por privatizaciones y reestructuraciones empresariales. Sin embargo, al bajar el consumo cae el cuentapropismo y aumenta aún más la desocupación. El resultado neto de estos comportamientos se manifiesta en una caída de tres puntos en el cuenta propismo entre 1991 y 1999 (1ª. 91: 36,87% y 1ª. 99: 33,85%). Este mismo comportamiento se presenta en el sector industria, dónde los no asalariados disminuyen su participación en poco más de dos puntos (20.6% en 1991 y 18.03 en 1999). En este caso esta pérdida de participación refleja el cierre de microempresas, cuyas posibilidades de permanencia en el mercado se vieron truncadas en el modelo vigente de apertura de la economía. Otra muestra de las alteraciones cuali y cuantitativas producidas en el mercado de trabajo es la referida a los ingresos de los trabajadores. A este respecto se nota que durante los ocho años transcurridos desde la implementación de la Convertibilidad, los ocupados del área han tendido a concentrarse en los rangos extremos de ingresos. En 1991 en los dos rangos más bajos de ingresos se concentraban el 5.2% de los ocupados, pasando este porcentaje a ser del 12.8%. Esta población, que significan casi 55.000 personas, tiene un ingreso que oscila entre 1 y 200 pesos mensuales. En el otro extremo, en los dos rangos superiores de ingresos la concentración de trabajadores pasó de ser un 20% al 24.3%. Entre los asalariados sectoriales se puede notar menor participación de los industriales en los rangos inferiores, mayor participación de los del sector comercio (6,81% en 1991 y 9,75% en 1999) y un incremento que duplica su porcentaje de ocupados en estos rangos en el sector construcción. (10.9 y 20.9% respectivamente en ambos años analizados). Este último sector también se ha visto muy afectado en el cuentapropismo ya que, en estos dos rangos de ingresos, la participación se incrementó del 4.2% al 25.4%, a lo que cabe agregarse un 6,8% de trabajadores sin ingresos en 1999 verus el 2.2 de 1991. En 1998 la mitad de los ocupados rosarinos ganaban menos de 413 pesos.8 Sin embargo este valor es ligeramente superior a la mediana de 1991 actualizada por el índice de precios al consumidor. 8 Los datos sobre mediana de ingresos no están disponibles para la primera onda de la EPH de 1999. 412 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. La situación antes descripta hace que en Rosario gran parte de los niños deban trabajar. Estudios realizados por una consultora 9, en base a datos oficiales del INDEC, del Banco Mundial y del Sistema de Información, Evaluación y Monitoreo de Programas Sociales (SIEMPRO), señalan que el 8.2% de los menores de entre 10 y 14 años trabajan ayudando al sustento familiar. De ellos un 3,3% lo hace en forma autónoma (abrepuertas de taxis, limpia parabrisas, etc.) y el resto colaborando con familiares en trabajos callejeros10. Además el 41,6% de los menores de 6 años tienen necesidades básicas insastisfechas. Otro aspecto que se destaca como producto del proceso de concentración económica es el aumento del número de asalariados y la disminución del cuentapropismo. Contrariamente aumenta la precariedad laboral, la falta de cobertura social y los bajos ingresos. En el caso de las grandes superficies comerciales se ha manifestado en una serie de conflictos laborales producto de las condiciones y de las jornadas de trabajo. En el análisis de esta problemática se debe tener en cuenta que “el cambio en la organización del trabajo y la conformación de un nuevo tipo de empleo traen también consecuencias en los destinos personales. Si ya no hay más empleos permanentes, si hay flexibilización en los contratos y flexibilización tecnológica, las trayectorias laborales dependen cada vez más de las iniciativas y capacidades personales. Pero en este diseño de las propias trayectorias profesionales, en que el acceso a los buenos puestos depende cada vez más de las capacidades y del capital social y cultural de cada uno, el peligro es la profundización de las desigualdades sociales. Por otra parte, la flexibilización y precarización de las relaciones laborales incrementa el margen de incertidumbre y coloca, como consecuencia de la pérdida de cobertura social, a un número creciente de personas en una situación de vulnerabilidad” (Golbert, 1998). Sin lugar a dudas, como señala Pixley (1995), la cuestión del empleo forma parte de los derechos y obligaciones de los ciudadanos que les posibilita su participación de la vida en sociedad. Ser excluído de la actividad principal de la vida económica no permite una ciudadanía inclusiva. 6- El futuro: nuevas condiciones y perspectivas. La dimensión regional como perspectiva de análisis del desarrollo económico adquiere vital importancia en la actualidad, prrecisamente cuando el proceso de globalización e internacionalización de la economía toman gran auge. La relación ciudad región ha ido reforzándose en cada una de las etapas de la evolución económica y social, siendo hoy imposible referirse a la economía municipal (o desarrollo local) si no es como economía del área metropolitana. 9 Diario La Capital del 14-8-99 sobre un trabajo de la Consultora Equis. 10 Los datos de la 1ª. Onda de 1999 dan 1326 niños de entre 10 y 14 años integrando la PEA, lo que significa un 1.3% de tasa de actividad específica. 413 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Rosario y su área, al igual que muchas otras regiones del país, se enfrenta hoy al desafío de encontrar un camino hacia el desarrollo, que le permita detener el deterioro de la calidad de vida de gran parte de su población. Preocupa que cada vez más los ciudadanos, sean como productores, trabajadores o consumidores, tienden crecientemente a buscar respuestas regionales o locales a sus problemas, necesidades o expectativas. La búsqueda de soluciones genuinas a la cuestión urbana pasa sin lugar a dudas por el crecimiento económico y la creación de empleo productivo. Desde este punto de vista Rosario debe transformar sus ventajas locacionales en verdaderas ventajas competitivas. Y esto necesariamente debe llevar a que las políticas públicas locales deban coordinarse a nivel metropolitano, permitiendo construir (o reconstruir) una región y transformar la realidad actual. Esto es así dado que existe una importante complementariedad sectorial, con encadenamientos hacia atrás y hacia delante. La conformación y transformación de la actividad económica a lo largo del tiempo ha concluído hoy con una participación creciente de los servicios en la ciudad y de los otros sectores productivos en el resto del área. Sin embargo, al intentar encarar acciones para lograr ese objetivo, se enfrenta ante un complejo conjunto de inconvenientes o “debilidades”, entre las que se pueden mencionar: las altas tasas de desocupación y subocupación, un sector industrial en parte deteriorado y en parte no adecuado a las nuevas formas de producción, deficiencias en la prestación de algunos servicios y en especial en el sistema de transporte, crisis en el comercio minorista, entre otras. Solucionar estos problemas o intentar paliar sus efectos negativos requiere tomar una serie de decisiones políticas lo más acertadas posibles para lograr mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. Cuando las soluciones involucran a un área que excede los límites administrativos, surgen conflictos por el ejercicio del poder de distintas jurisdicciones en diferentes ámbitos geográficos. Es así como para superar tales situaciones con eficacia y eficiencia se vuelve prioritario lograr instituciones y procedimientos de planificación para el área metropolitana en su conjunto. Luego de describir muy suscintamente los grandes cambios producidos en las actividades productivas del Gran Rosario durante los últimos años, cabe preguntarse cuáles son sus posibilidades de crecimiento sostenido; cuál es el papel que jugará en el siglo XXI. ¿Su industria puede ser aún factor de desarrollo como lo fue en el pasado?. Sabemos que el proceso de "reestructuración" y " concentración" que se manifestó en el sector tuvo costos muy grandes para gran parte de nuestra población y que cuando los niveles de ocupación industrial se vieron disminuídos, esta “desocupación” no pudo ser absorbida totalmente por los otros sectores. Es por ello que pensamos que el sector es importante a pesar de que el futuro rosarino no es sólo industrial y es necesario el fomento de nuevas actividades sobre todo de servicios. Sin embargo estos deben relacionarse fundamentalmente con la producción, logrando la competitividad de todos los sectores y del área en su conjunto. El proceso de reestructuración es complejo y aún no ha terminado. La adaptación a las nuevas condiciones imperantes no es homogénea para todos los sectores ni para todas las firmas. 414 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. Se repite en el sector industrial la situación de exclusión que vive parte de la sociedad. Las empresas son competitivas o desaparecen del mercado, lo que ya ha sucedido desde el fin del modelo sustitutivo de importaciones pero que, sin dudas, se ha agravado en esta década. “Las pequeñas y medianas empresas, supuestamente capaces de resolver por condiciones particulares asociadas a su tamaño el problema del desempleo, ocupando el espacio del capital nacional, no realizan tal ilusión, por falta de condiciones históricas o de políticas adecuadas, pero también de posibilidades reales en un mercado libre donde la concentración del capital subsume todo lo significativamente rentable. Por lo demás, es probable que, sin una acción política decidida y sostenida por la sociedad para avanzar hacia una competitividad sistémica, la mera modernización tecnológica de las Pymes reduciría significativamente sus ventajas en la creación de empleo a la vez que las desnacionalizaría” (Coraggio, 1997). Los diferentes resultados analizados en la industria muestran la gran heterogeneidad existente en el sector que ocasiona y, a su vez, es ocasionada por distintos comportamientos y estrategias empresariales ante los cambios de políticas macroeconómicas. Pero los rosarinos identificamos ciertas “fortalezas” locales que surgen de la trayectoria industrial del área: “la existencia de mano de obra calificada, que ha incorporado a lo largo del tiempo un saber hacer con posibilidades de ser reconvertida” y “la capacidad empresarial local, respaldada en una larga tradición industrial y comercial, posible de ser reorientada" (PER, 1999) En el contexto de globalización imperante, el donde producir se convierte en uno de los elementos relevantes, tanto en términos privados como sociales. Es así como los factores de localización de las actividades productivas han tendido a modificarse. De Mattos (1998) señala como factores de localización de los centros del nuevo poder económico: a) Mejores y más expeditos sistemas de comunicación, resaltando la necesidad de un aeropuerto con gran cantidad de vuelos, entre otros. b) Presencia de otras empresas de rango semejante c) Servicios altamente especializados d) “condiciones para una fluida comunicación directa cotidiana , formal e informal entre las personas que desarrollen las tareas más creativas del nuevo aparato productivo.” Estas condiciones sólo existen en las áreas metropolitanas más importantes, y por lo tanto actúan incrementándolas aún más, ya que en cadena se produce la localización de otras actividades. Rosario, si bien está bien comunicada con todos los otros puntos del país, tenía serias deficiencias fundamentales: Puerto y Aeropuerto, las que están en vías de solucionarse. Si bien cabe aclarar que históricamente los centros de decisiones de las más grandes empresas se hallaban fuera del área. En la actualidad uno de esos ejemplos se dan con las grandes superficies comerciales, que son de capitales externos, o bien nacionales extraregiona- 415 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. les. Este aspecto reviste gran importancia cuando se ve que los flujos financieros se orientan también hacia otras áreas, en general Buenos Aires. Siguiendo con los planteamientos de De Mattos, los factores de localización más destacados para el sector servicios son: a) existencia de mano de obra calificada b) proximidad de creadores de conocimiento, información y de técnicas. c) Proximidad del mercado. En este sentido nuestro área es una de las favorecidas, ya que además de contar con universidades, colegios técnicos, etc; existe un importante aparato productivo, sobre todo industrial, concentrando algunas de las actividades de mayor exportación: aceitera y frigorífica. Si bien no se puede hablar de un tipo de localización para las firmas industriales, como la que se dio en la sustitución de importaciones, cabe destacarse que en este momento la competitividad de cada empresa es fundamental para su permanencia en el mercado, y en este sentido es en las áreas metropolitanas dónde mayores posibilidades tienen, ya que ellas no “protagonizan en solitario la pugna competitiva en los mercados; también compiten en conjunto con su entorno territorial e institucional, el cual explica de forma decisiva la eficiencia productiva y la competitividad empresarial. Recursos humanos calificados; vinculación del sistema educativo y de capacitación con el perfil productivo del territorio; líneas apropiadas de financiamiento para las micro, pequeñas y medianas empresas; servicios empresariales avanzados que permitan disponer de información de mercados y tecnologías; líneas de comercialización, etcétera, son aspectos de un mercado de factores estratégicos que se debe construir territorialmente con el esfuerzo de toda la sociedad, por medio de la concertación público-privada para crear entornos innovadores de calidad en los ámbitos locales” (Alburquerque, 1999). Pero también la región se consolida reteniendo los excedentes económicos mediante un activo sistema financiero, fortaleciendo los bancos regionales y creando "productos" financieros competitivos. Si esto no se da y existen transferencia de los excedentes a otras áreas el crecimiento y la recuperación se vuelven difíciles. El AGR tiene ahorros locales que fluyen fuera de él financiando gastos "en el exterior", si bien ésto no es una de las causales de desigualdad entre regiones sino su consecuencia. Se pueden señalar acciones que permiten vislumbrar algunas transformaciones necesarias en el área y varios proyectos de gran envergadura que pueden ayudar a plantear una realidad distinta. Entre estos se pueden mencionar: -La reconversión y modernización del Puerto de Rosario, ya concedido y en plena etapa de readecuación. -La construcción del puente Rosario-Victoria, ya iniciado. Este puente forma parte de un nuevo corredor bioceánico y conexión vial que convertirá a Rosario en la salida natural de buena parte de la producción Mesopotámica, mejorando sensiblemente la integración de la Región. 416 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. -La implementación de la Hidrovía Paraná-Paraguay, verdadero eje de integración de la Cuenca del Plata mediante obras de dragado y balizamiento, cuyas primeras etapas ya se concretaron. región. -El mejoramiento de la red de rutas nacionales y de los principales accesos a la Si estos proyectos efectivamente se completan, seguramente generarán un cambio en la región, pero la magnitud del mismo dependerá de otros muchos factores. Fundamentalmente dependerá de las estrategias que adopten los actores sociales involucrados, para que, tal como ocurrió en el pasado, el Area pueda posicionarse eficazmente en un nuevo esquema territorial, desarrollando sus posibilidades y apropiándose de los beneficios que de él se deriven. En este sentido, cabe señalar la reciente elaboración del Plan Estratégico de Rosario que fue presentado en octubre de 1997, el cual plantea medidas y proyectos para el desarrollo local y mejores condiciones de vida de los habitantes de la ciudad, promoviendo un mayor grado de participación de todos los actores sociales. Su objetivo general, definido delineando un horizonte, un escenario realista para el futuro de la Ciudad, es por demás de elocuente: “Rosario una Ciudad sustentada en el trabajo y la creación, con oportunidades de vida y de progreso para todos sus habitantes, recupera el río y se constituye en punto de encuentro del Mercosur”, según consta en dicho Plan. Pero quizás lo más destacable referente a las actividades productivas de Rosario, esté plasmado en la línea estratégica como la Ciudad del Trabajo: “Convertir a Rosario en centro regional de transporte y servicios, recuperando asimismo su perfil de ciudad laboriosa, industrial y competitiva”. Para ello se señalan como objetivos particulares: -Aprovechar la posición geoestratégica de Rosario como centro polimodal de transporte e intercambio de la región y comunidad logística del Mercosur. -Fortalecer o reconvertir las actividades productivas existentes y generar condiciones para el desarrollo de nuevas actividades. -Fomentar la creación de empleo y la capacitación de las personas. Si efectivamente la ejecución del Plan logra cumplir con los objetivos propuestos a través de la integración de los esfuerzos del sector público con el sector privado y la sociedad civil en su conjunto, sin lugar a dudas el futuro de Rosario se perfila mejor que el pasado reciente. 417 Cuartas Jornadas "Investigaciones en la Facultad" de Ciencias Económicas y Estadística, octubre de 1999. CITAS BIBLIOGRAFICAS Alburquerque, Francisco (1999): “Cambio estructural, globalización y desarrollo económico local”, en Comercio Exterior, Vol. 49, Núm. 8. México, Agosto. Arrillaga, Hugo; Barletta, Mario y Masi, María Beatriz (1998): “El comportamiento del mercado laboral en el interior argentino 1985-1997”. Red de Editoriales de Universidades Nacionales, Buenos Aires. Basaldúa, Raúl y Moreno, Oscar (1972): La organización jurídica e institucinal de un área metropolitana en la Argentina, en Hardoy, Jorge y Geisse, Guillermo: Políticas de desarrollo urbano y regional en América Latina. 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