Guía: Entrevistas

Guía: Entrevistas
Todo el proceso de búsqueda de oportunidades culmina con una serie de entrevistas de 30
minutos. Sólo el candidato que, gracias a un trabajo previo sobre sus objetivos
profesionales, llega a la entrevista con confianza y preparado, dará una buena impresión al
entrevistador. El candidato cuya preparación empieza unos minutos antes de la entrevista
se encuentra en general en una situación incomoda, que suele traducirse en una falta de
interés hacia el entrevistador por los momentos de silencio embarazosos para ambos.
Toda preparación debe ayudarte a responder las preguntas difíciles: ¿Por qué debería
contratarte? Todas las preguntas giran en torno a este punto: ¿Por qué estás interesado
en Marketing?, ¿Por qué estás interesado en esta empresa? ¿Por qué quieres trabajar en
esta industria? Debes responder a estas preguntas de forma clara y con seguridad, sin
vacilar.
Es muy importante preparar cada entrevista por separado, aunque existen unas pautas
comunes para todas:
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Sé honesto. La falta de honestidad sólo conlleva problemas futuros para la empresa
y para ti.
Tranquilidad y autovaloración.
Cumple con lo acordado y llega a la cita a la hora.
Adáptate al estilo del entrevistador.
Sé positivo durante toda la entrevista, incluso si se alcanzan conclusiones
negativas.
Ve a la entrevista con una actitud positiva con la que te sientas cómodo. Evita proyectar
un perfil o dar respuestas que crees que el entrevistador quiere oír. Sé tu mismo, relajado
y entusiasta.
Tipos de Entrevistas
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Entrevistas estándar. Este tipo de entrevista es un intercambio honesto de
información. El entrevistador te pregunta sobre tu educación, experiencia
profesional anterior, intereses profesionales, etc. La entrevista ideal fluye como una
conversación, con un intercambio dinámico de experiencias y de ideas para que las
dos partes se puedan conocer.
Entrevistas estrés. Mientras la mayoría de las personas encuentran las
entrevistas estresantes por naturaleza, con una cierta dosis de duda, incertidumbre
y presión, la “entrevista estrés” es diferente. El propósito de la entrevista estrés es
crear una presión intensa para que el entrevistador observe tus reacciones a la
presión. Las entrevistas estrés son utilizadas a menudo por empresas de servicios
con contacto directo con el cliente, como consultorías, banca de inversión, ...
"Assessment Center". Se trata de un método de evaluación poco común per
que empieza a extenderse. Las personas observamos, comparamos, evaluamos y
formulamos opiniones sobre otros o sobre distintas situaciones constantemente.
Esta evaluación sobre las personas es similar a lo que ocurre en los centros de
valoración. La diferencia es que
medidas que permiten ser objetivos.
los
candidatos
son
evaluados utilizando
A menudo, cuando te formas una opinión es difícil ser objetivo y por lo tanto las
decisiones pueden estar distorsionadas. Seleccionar personal para puestos clave
con opiniones distorsionadas puede disminuir nuestras opciones de elegir el mejor
candidato para el puesto. Un centro de valoración intenta incrementar la exactitud
de nuestras observaciones.
El diseño actual de los centros de la valoración varía de una organización a otra. No
hay dos centros iguales ya que están diseñados para cubrir las necesidades y
objetivos de una empresa. Sin embargo, todos tienen una serie de componentes en
común:
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Múltiples Evaluadores. Formados para este trabajo. Pueden ser
directores, consultores externos, o psicólogos industriales/
organizacionales.
Técnicas múltiples. Permiten evaluar distintas dimensiones con varios
ejercicios e intentan reducir la subjetividad en la evaluación.
Consenso entre los evaluadores. Se comparte la información para
llegar a una decisión consensuada.
La primera entrevista
Una entrevista exitosa sigue una serie de pasos. Al principio, cada parte intenta descubrir
algunas cosas sobre la otra, empezando con un intercambio de nombres y un apretón de
manos. Le sigue una conversación sobre temas generales. Espera que el entrevistador
haga la primera pregunta, y que dirija la entrevista. Algunas preguntas típicas podrían ser:
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He leído tu curriculum, pero dime algo sobre ti
¿Por qué estás interesado en nuestra empresa?
¿Por qué piensas que tu experiencia profesional puede ser interesante para
nosotros?
Tus comentarios iniciales sobre tus habilidades, puntos fuertes, logros, dirigirán el enfoque
del resto de la entrevista.
La mayor parte de la entrevista, suele tratar sobre el perfil presentado en el curriculum del
candidato. Todas las preguntas se destinan a evaluar a los candidatos, una pregunta lleva
generalmente a otra y el entrevistador pasa de un tema a otro, según le parezca
conveniente. Los entrevistadores tienen estilos diferentes: algunos son más directos, otros
más oblicuos, pero lo importante es tratar cada pregunta con consistencia y confianza.
Al final de la entrevista se suele dar tiempo al candidato para hacer preguntas. Es en este
momento en el que se debe preguntar sobre el puesto, la cultura de la empresa y otros
temas sobre los que el candidato tenga dudas.
Recomendaciones para las entrevistas
Llega preparado para explicar y elaborar cualquier tema de tu CV. Da respuestas concisas
con ejemplos que ilustren tus comentarios. Al entrevistador le interesa saber por qué te
sientes de una determinada forma o qué motivos sostienen tus objetivos profesionales.
En las entrevistas abiertas (aquellas en las que el entrevistador no hace muchas preguntas),
debes dar una presentación que sea breve y articulada y que explique cómo tu experiencia
profesional cumple las necesidades del puesto, cómo mejorarás el negocio, por qué te
interesa el puesto y de qué habilidades dispones para lograrlo.
No es suficiente mostrar interés, conocimiento y preparación. Muestra entusiasmo por el
trabajo y la empresa. El entusiasmo se expresa por tu intensidad, lenguaje corporal, tono
de voz, gestos, contacto visual y el ritmo de tus respuestas. Los entrevistadores buscan los
mejores candidatos que al mismo tiempo, se interesan por su empresa.
Toma el control de la entrevista si quieres dirigirla hacia una área que piensas que es
importante mencionar. La mayoría de los entrevistadores buscan confianza en ti mismo y
vitalidad. La parte final de la entrevista es el mejor momento para realzar un punto
importante o hacer una pregunta pertinente. Si el entrevistador no parece interesado o no
está preparado para responder, vuelve a dirigir la entrevista a tus cualidades para el puesto
Ejemplos de preguntas en las entrevistas
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¿Cómo crees que un compañero de trabajo o un amigo que te conoce bien te
describiría?
Cuéntame un problema difícil que hayas tenido y cómo lo trataste.
¿Cómo te describirías? Dime cosas sobre ti mismo (Prepara esta pregunta. Por
ejemplo, deberías decir dónde naciste, creciste y fuiste al colegio; a qué
universidad fuiste; y por qué has venido a esta entrevista. Utiliza tu imaginación,
no sigas el mismo camino que todos los demás).
¿Cómo te informas sobre los hechos actuales?
¿Qué haces para aliviar la tensión?
Describe tus puntos débiles. ¿Cuál es el más débil y cómo lo compensas?
Describe tu puntos fuertes. ¿Cuál es el más fuerte? ¿Tu mejor habilidad? (Intenta
demostrar cómo estos serían de valor a la empresa o industria que te está
entrevistando).
¿Has tenido algún fracaso? ¿Qué aprendiste de este fracaso? En general, ¿Qué
has aprendido de tus errores?
¿Qué haces si eres flojo en un área cuantitativa (estadísticas, contabilidad, etc),
¿Cómo lo compensas?
¿Cuáles crees que son tu mayores logros o éxitos? ¿Tus fracasos? ¿Tus mayores
decepciones?
¿Cuáles han sido los tres (cinco) logros (decisiones) más importantes en tu vida?
¿Qué decisiones has lamentado? ¿Por qué?
¿Te consideras un líder, emprendedor, creativo? ¿Por qué piensas que lo eres?
(Prepárate para dar ejemplos)
¿Eres bueno para el trabajo en equipo o mejor emprendedor?
¿Por qué crees que eres el candidato ideal para el puesto? ¿Por qué deberíamos
contratarte?
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¿Qué te hace pensar que tendrás éxito en el management de un negocio? ¿En tu
vida profesional?
¿Cómo te encontrarías trabajando individualmente? ¿Y con otros?
¿Cómo va tu búsqueda de trabajo? ¿Cuáles son las otras empresas que has
contactado? (No es necesario dar información específica).
¿Qué te gusta leer? ¿Qué estás leyendo actualmente?
Define cooperación, liderazgo, etc
¿Con quién has hablado hoy?
Tienes cinco minutos para proporcionar las razones más relevantes que
demuestren que eres el candidato más cualificado para este puesto. (Prepárate
varios puntos importantes o aspectos que quieras que el entrevistador recuerde
una vez te hayas marchado. Descríbelos con frases cortas y concisas).
¿Eres resistente? ¿Agresivo?
¿Hasta qué punto eres competitivo? ¿Lucharás para seguir adelante?
¿Qué tipo de trabajo te gusta: difícil, rutinario, desafiante? ¿Por qué?
¿Qué cualidades debe tener un director para tener éxito?
¿Has hablado alguna vez en público ante una gran audiencia? ¿Por qué?
¿Has escrito mucho? ¿Sobre qué?
¿Qué tipo de situaciones te frustran fácilmente?
Durante la entrevista puede ser que se te pregunte sobre tus motivaciones para hacer una
cosa u otra. El entrevistador quiere conocer tus motivaciones, pero también tu carácter,
personalidad y capacidad de liderazgo.
Preguntas a formular
Los candidatos son siempre invitados a preguntar a los entrevistadores, normalmente al
final de la entrevista, y si no lo haces cuando la oportunidad se presenta puedes ser
catalogado como una persona sin imaginación o iniciativa. Si el entrevistador ya ha
contestado todas las preguntas que querías hacerle, dilo, y menciona cuáles eran. Intenta
pensar un par más pero no preguntes algo que se haya dicho anteriormente o que deberías
saber.
Prepara por lo menos tres o cuatro preguntas. Es una buena idea anotarlas- no te
preocupará olvidarlas y el entrevistador verá que has trabajado la entrevista. A la gente le
preocupa qué preguntar, pero esto debería ser una de las etapas más fáciles de todas,
especialmente si has hecho una investigación sobre la empresa. Puedes preguntar sobre el
puesto en sí, la empresa y sus objetivos o realizar preguntas más “sociales” sobre la cultura
de la empresa – no preguntes exclusivamente sobre estas últimas, corres el riesgo de
parecer frívolo.
Ideas para formular algunas preguntas:
Carrera profesional:
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¿Cuáles son las posibilidades de carrera en la empresa?
¿Se ofrece algún tipo de formación para cubrir este puesto?
¿Cuál es la política de la empresa sobre desarrollo profesional y personal?
Descripción del puesto:
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¿Cuáles son las responsabilidades del puesto en el día a día?
¿Cuáles son los objetivos a alcanzar?
¿Quién supervisará mi actuación? ¿Con qué frecuencia?
Empresa:
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¿Me podría explicar la estructura organizativa de la empresa?
¿Qué cambios significativos prevé la empresa en un futuro cercano?
¿Cuáles son las estrategias para el crecimiento?
Algunas razones por las que falla una entrevista
1) Falta de conocimiento sobre la industria/empresa
Acción:
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Leer periódicos de negocios sobre la industria (el Financial Times para información
financiera).
Hablar con Antiguos Alumnos o alguien de la industria para conocer su opinión sobre
temas clave del sector y la empresa.
Buscar artículos en bases de datos, revistas o periódicos sobe la industria y la
empresa.
Leer la memoria anual, folletos corporativos sobre la empresa.
Utilizar los recursos disponibles en la biblioteca del IESE.
Debes tener cuidado en no mostrar cuánto te has preparado dando un montón de datos
sobre la empresa. Tu preparación quedará demostrada por tu forma de responder a las
preguntas.
2) Falta de experiencia profesional
Algunos candidatos cambian frecuentemente de trabajo y sector por lo que no tienen
experiencia profesional. Lo que necesitan demostrar son sus habilidades transferibles. Si el
entrevistador comenta que el candidato no tiene experiencia profesional, es porque el
candidato no está demostrando sus habilidades transferibles.
Acción:
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Identifica las habilidades requeridas para el puesto al que optas.
Lee sobre la industria, sobre lo que pasa en el momento actual, e imagina las
habilidades que se podrían requerir.
Habla con gente que haya trabajado en el mismo tipo de puesto y pregunta qué
hacer para tener éxito.
Llama a Antiguos Alumnos o gente que ocupe el mismo cargo y pregunta qué
habilidades creen que son las más importantes para el puesto. Pide un par de
opiniones y aspectos comunes.
3) Necesitas venderte mejor
El candidato no enfatiza sus puntos fuertes y habilidades y no es lo bastante persuasivo
para mostrar al entrevistador que es el candidato ideal y que sería un gran valor en la
empresa. Además, el uso de lenguaje negativo para describir situaciones (o incluso a sí
mismo) mostrará al entrevistador una impresión negativa.
Acción:
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Usa un lenguaje positivo, incluso si el entrevistador te pregunta cuáles son tus
flaquezas. Muestra cómo las pudiste volver puntos fuertes. Si es una pregunta
negativa, intenta no contestarla, si es posible, o bien intenta positivarla.
Debes decidir previamente por qué serías de valor para la empresa y de articularlo
efectivamente.
Debes vender tus habilidades y competencias dando ejemplos e ilustraciones que
encajen con las necesidades del contratante.
Después de la entrevista
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Enviar una carta de agradecimiento después de la entrevista.
Si no has tenido noticias de la empresa en tres o cuatro semanas puedes ponerte en
contacto con la empresa contratante / de selección para interesarte por el proceso.