Abordaje endoscópico transnasal para resección de tumores de la base de cráneo: nuestra experiencia Endoscopic trasnasal approach for anterior skull base tumors resection: our experience Alfredo Herrera Vivas, MD*, Javier Andrés Ospina Díaz, MD**, Paula Andrea Téllez Cortés, MD***, Oscar Feo Lee, MD**** RESUMEN Tradicionalmente los tumores de la base del cráneo se han manejado mediante abordajes abiertos; sin embargo, en los últimos años se han desarrollo diferentes abordajes endoscópicos que permiten un adecuado manejo de esta patología y así mismo disminuyen las complicaciones y comorbilidades asociadas a estos procedimientos. En esta revisión expondremos las ventajas de estos tipos de abordajes y una breve revisión de nuestra experiencia. Palabras clave: Cirugía endoscópica transnasal, abordaje endonasal extendido, cirugía base de cráneo, cirugía transesfenoidal. Correspondencia * Profesor asistente. Sección Cirugía Endoscópica Senos Paranasales y Base de Cráneo. Unidad de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello. Hospital Universitario San Ignacio. Pontificia Universidad Javeriana. Alfredo Herrera [email protected] ** Otorrinolaringólogo. Pontificia Universidad Javeriana. Recibido: 15-I-2012 *** Residente de III año Otorrinolaringología. Pontificia Universidad Javeriana. Aceptado: 25-II-2012 **** Profesor asistente. Sección Cirugía Endoscópica Base de Cráneo. Unidad de Neurocirugía. Hospital Universitario San Ignacio. Pontificia Universidad Javeriana. Suplemento,125-132, marzo de 2012 marzo de 2012 - suplemento Abordaje endoscópico transnasal para resección de tumores de la base de cráneo ABSTRACT Traditionally, tumors of the skull base has been managed by open approaches, nevertheless different endoscopic transnasal approaches has been developed in recent years allowing a proper endoscopic management of this pathologies and likewise decreasing complications and comorbidities associated with open approaches. In this review we will discuss the advantages of endoscopic approaches and a brief review of our experience. Key word: Transnasal endoscopic surgery, expanded endonasal approach, skull base surgery, transsphenoidal surgery. INTRODUCCIÓN Los tumores de la base del cráneo tradicionalmente han sido manejados con abordajes abiertos; sin embargo, hoy en día están siendo también manejados mediante abordajes endoscópicos. Inicialmente estas técnicas de resección endoscópica fueron descritas para el manejo de tumores de hipófisis, pero actualmente se emplean también para el manejo de tumores de senos paranasales con extensión a la base del cráneo, y para el manejo de tumores de la base de cráneo anterior, media y posterior. Con el desarrollo de equipos quirúrgicos multidisciplinarios y la evolución de las técnicas endoscópicas transnasales menos invasivas, se han logrado iguales tasas de efectividad con menor morbilidad, conservando los principios oncológicos de resección, por lo que en casos seleccionados la cirugía endoscópica es una muy buena alternativa (1-3). En esta revisión expondremos las ventajas que ofrecen estos abordajes puramente endoscópicos y los combinados con abordajes abiertos, nuestras indicaciones para seleccionar los pacientes y una breve revisión de nuestra experiencia en el Hospital Universitario San Ignacio. MARCO TEÓRICO El uso de abordajes transnasales endoscópicos para manejo de tumores fue descrito inicialmente para el manejo de tumores de hipófisis. Con este tipo de abordajes se ha demostrado en diferentes estudios que disminuyen el tiempo operatorio, el uso de drenajes lumbares, el riesgo de diabetes insípida posoperatoria y la estancia hospitalaria. Así mismo, este abordaje ofrece varias ventajas sobre los abordajes con microscopio como la visión mas cercana de la anatomía relevante, un mejor ángulo de trabajo y una visión panorámica del campo operatorio (4-7). -126- Los estudios que comparan las técnicas tradicionales y las técnicas endoscópicas para resección de tumores nasosinusales que comprometen la base del cráneo presentan grandes limitaciones debido a que es una patología poco frecuente (representan únicamente el 3 a 5% de los tumores de cabeza y cuello), la variabilidad de su tamaño y localización, las diferentes histologías y el corto seguimiento que tienen las técnicas endoscópicas por su reciente desarrollo (8). Casiano y Falquez (9) fueron los primeros autores que describieron un abordaje puramente endoscópico transnasal para resecar estesioneuroblastomas en un pequeño grupo de pacientes, demostrando que estos tumores pueden manejarse de forma segura con iguales tasas de efectividad a corto plazo, similares a las de los abordajes tradicionales. Después de ellos múltiples autores han reportado su experiencia con los abordajes endoscópicos para el manejo de diferentes tumores que comprometen la base del cráneo. En 2008 Nicolai y cols. (10) publicaron una serie de casos (184 pacientes) de resección endoscópica (sola o combinada con craneotomía) de diferentes tipos de tumores. En 2009 Hanna y cols. (11) reportaron una serie de 120 pacientes con tumores malignos nasosinusales manejados con cirugía endoscópica (sola o combinada con craneotomía). Ambos estudios concluyeron que la cirugía endoscópica es una alternativa útil para el manejo de esta patología obteniendo adecuados márgenes oncológicos en casos seleccionados y en manos de personal experto. En estudios posteriores (12-14) se planteó que la resección endoscópica de tumores nasosinusales asociada a terapia adyuvante complementaria (especialmente radioterapia) en casos seleccionados, permitía obtener resultados similares a los abordajes tradicionales con una muy buena sobrevida y tiempo libre de enfermedad. Alfredo Herrera Vivas, Javier Andrés Ospina Díaz, Paula Andrea Téllez Cortés, Oscar Feo Lee SELECCIÓN DE PACIENTES Evaluación preoperatoria Es indispensable en todos los pacientes contar con una historia clínica detallada, haciendo énfasis en el tiempo de evolución, los síntomas y las comorbilidades. En el examen físico deben identificarse el compromiso de pares craneales, de la agudeza visual y la presencia de adenopatías cervicales. La valoración por oftalmología con campimetría preoperatoria es mandatoria en todos los pacientes en quienes se sospeche compromiso de la agudeza visual; así como es indispensable la realización de perfil hormonal completo en pacientes con tumores hipofisiarios. En todos los casos realizamos una Tomografía Axial Computarizada (TC) de cortes finos (máximo de 1 mm) para identificar las estructuras óseas que se deben tener en cuenta para los abordajes como reparos anatómicos, la localización de la base de cráneo y la órbita y si estas se encuentran comprometidas por el tumor, e identificar si hay zonas de dehiscencia ósea. Adicionalmente realizamos resonancia magnética con medio de contraste para definir si hay compromiso o invasión hacia la periórbita, el contenido orbitario o la duramadre. Así mismo nos permite diferenciar el tejido tumoral de los tejidos adyacentes, de secreciones, fibrosis e inflamación. En casos en que se sospeche compromiso de la arteria carótida interna, debe completarse el estudio con angiografía. Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello abordajes pueden variar entre los distintos grupos quirúrgicos. A continuación mencionaremos nuestras indicaciones para los diferentes abordajes y haremos un pequeño resumen de nuestra experiencia con los mismos. Resección craneofacial endoscópica para tumores de fosa craneal anterior Elegimos este tipo de abordaje para resecar tumores que comprometen los senos paranasales y la base anterior del cráneo con una extensión intracraneana limitada. Puede existir compromiso intradural intracraneal pero sin compromiso del parénquima cerebral. Nuestro límite lateral de resección por vía endoscópica transnasal está dado por la ubicación de los nervios supraorbitarios. En pacientes con tumores con gran extensión intracraneal, con compromiso del parénquima cerebral o extensión lateral que sobrepase los nervios supraorbitarios realizamos un abordaje endoscópico transnasal combinado con craneotomía. Son contraindicaciones para abordajes puramente endoscópicos los siguientes: compromiso del paladar duro, de la pirámide nasal ósea, de los tejidos blandos faciales o del contenido orbitario mas allá de la periórbita. Técnica quirúrgica Es importante tener en cuenta que en algunos casos el compromiso de la periórbita y de la duramadre se define durante el procedimiento quirúrgico, y que de acuerdo al compromiso de estas estructuras puede ser necesario cambiar el abordaje quirúrgico que se había definido inicialmente. Antes de iniciar el procedimiento debemos contar con todo el instrumental necesario para la cirugía: lentes rectos y angulados, doble succión, electrocauterio mono y bipolar, gasas suficientes y materiales hemostáticos de bajo y alto flujo (surgicel®, gelgoam ®, floseal®, etc.). Con base en la historia clínica, imágenes diagnósticas, la histología del tumor y la presencia o no de metástasis realizamos una estadificación del tumor, y teniendo en cuenta esta clasificación en una junta multidisciplinaria se define el mejor abordaje para cada caso. Utilizamos infiltración con lidocaína al 1% con epinefrina 1:200.000 para disminuir el riesgo de sangrado durante la resección tumoral. Posteriormente rechazamos el tumor hacia medial con gasas para poder identificar la mayor cantidad de reparos anatómicos posibles y así lograr una resección segura. Adicionalmente se ubican y cauterizan las principales arterias nutricias, principalmente las arterias etmoidales anteriores y posteriores, para evitar sangrados masivos durante el procedimiento quirúrgico. Indicaciones Para decidir si un paciente es candidato para un procedimiento puramente endoscópico vs. un procedimiento combinado con abordaje abierto se deben tener en cuenta tres aspectos fundamentales (15): 1. La experiencia del equipo quirúrgico, 2. La extensión e histología del tumor, y 3. Las comorbilidades del paciente. Teniendo en cuenta lo mencionado es de gran importancia recalcar que las indicaciones para realizar los diferentes La resección del tumor se realiza desde la periferia hacia el centro (de forma centrípeta), disminuyendo así el riesgo de sangrado, hasta lograr un debulking total del tumor. Para disminuir el riesgo de residuo/recidiva tumoral es fundamental identificar los sitios de inserción del tumor y realizar un fresado de las paredes óseas. En este punto es importante tener en cuenta que aunque no se logre una -127- marzo de 2012 - suplemento Abordaje endoscópico transnasal para resección de tumores de la base de cráneo resección en bloque del tumor, se pueden lograr márgenes de resección oncológicos tomando biopsias por congelación. Una de las ventajas que ofrece la resección endoscópica vs. los abordajes abiertos, es que la visión cercana del endoscopio es útil para identificar posibles zonas de infiltración tumoral como la periórbita y la duramadre, favoreciendo así resecciones mas completas. Después de que se ha realizado la resección del tumor se procede a reconstruir el defecto en la base del cráneo, para lo cual se han descrito diferentes técnicas y materiales. El desarrollo de colgajos pediculados con suplencia vascular ha disminuido significativamente la tasa de complicaciones posoperatorias como fístulas de LCR y neuroinfección (16). En nuestro servicio el injerto de reconstrucción mas utilizado es el colgajo septal de Hadad-Bassagasteguy e injertos libres de fascia lata que se colocan por encima y por debajo del defecto óseo logrando un cierre completo del mismo (técnica under-over). que se decide realizar un abordaje endoscópico transnasal combinado con craneotomía, con el que se logra una resección amplia del tumor con bordes libres, como se evidencia en las imágenes posoperatorias (Imagen 2 A, B, C, D). A B C D Es importante anotar que en la reconstrucción de los defectos de la base de cráneo preferimos no usar hueso debido a que muchos de estos pacientes requieren radioterapia posoperatoria con lo que aumenta el riesgo radionecrosis, infección y pérdida de los injertos de reconstrucción. En los casos en los que se realiza cirugía endoscópica transnasal combinada con craneotomía el uso del endoscopio permite adicionalmente asegurar mejor los injertos de reconstrucción e identificar las zonas con mayor riesgo de falla en el cierre. Mediante esta técnica quirúrgica hemos resecado diferentes tumores, benignos y malignos de la base de cráneo anterior entre los que se incluyen 5 carcinomas escamocelulares, 5 estesioneuroblastomas, 3 carcinomas indiferenciados, 1 tumor adenoide quístico, 1 tumor neuroendocrino, 1 tumor neuroectodérmico primitivo, 2 rabdomiosarcomas, 1 meningioma, 3 melanomas, entre otros. (Información en proceso de publicación). Imágenes 1A,B,C,D. Preoperatorias de una paciente con un tumor de senos Paranasales con gran extensión intracraneal intradural en la fosa craneal anterior. A B C D Caso 1 Paciente de 31 años de edad con cuadro clínico de 2 años de evolución de obstrucción nasal y epistaxis recurrente por fosa nasal derecha, con antecedente de dos cirugías endoscópicas previas en otra institución con diagnóstico de adenocarcinoma. Paciente presenta reaparición de los síntomas asociado a cefalea severa y alteraciones visuales. Las imágenes prequirúrgicas evidencian un tumor con gran extensión intradural (Imagen 1 A, B, C, D) por lo -128- Imágenes 2A,B,C,D. postoperatorias evidenciando resección completa del tumor. Alfredo Herrera Vivas, Javier Andrés Ospina Díaz, Paula Andrea Téllez Cortés, Oscar Feo Lee El estudio inmunohistoquímico confirma un tumor neuroectodérmico primitivo. Como tratamiento complementario recibe 22 sesiones de radioterapia con controles imagenológicos y endoscópicos sin evidencia de recidiva tumoral a los dos años posoperatorios. Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello esta etapa se utilizan micropinzas anguladas y curetas, y se reseca el tumor hasta identificar los límites de la disección a nivel del diafragma selar y los recesos laterales. Es muy importante explorar los recesos anterosuperiores utilizando un lente de 30 grados, pues este es un sitio relativamente ciego, donde se puede quedar patología tumoral. Resección endoscópica de tumores de fosa craneal media En este grupo de cirugías incluimos dos tipos de abordajes quirúrgicos: los que realizamos para tumores de hipófisis convencionales y los que realizamos para tumores con gran extensión supraselar o que comprometen el planum esfenoidal. Con este tipo de abordaje utilizando una técnica totalmente endoscópica de 2 cirujanos a 4 manos hemos manejado 87 pacientes con patología de hipófisis. Incluyendo adenomas secretores, prolactinomas que no responden al manejo médico, macroadenomas y craneofariongiomas que han permitido manejarse con este abordaje. (Información en proceso de publicación). Tumores de hipófisis convencionales Abordaje transplanar-transtubercular La gran mayoría de los tumores de hipófisis son manejados con abordaje endoscópico transnasal o convencional, para lo cual nosotros realizamos una técnica transepto-esfenoidal con septectomía posterosuperior. Este tipo de abordaje se utiliza para microadenomas y macroadenomas que no tengan gran componente supraselar y por lo tanto, requieran un abordaje transplanar-transtubercular para la resección completa del tumor. La cirugía inicia con el abordaje transeptal disecando la mucosa del lado izquierdo, y utilizando la técnica descrita por Hadad-Bassagasteguy (16) se crea un colgajo septal pediculado en la arteria esfenopalatina izquierda. Este colgajo se deja en la nasofaringe para que no interfiera durante el procedimiento. Adicionalmente se realiza una septectomía posterosuperior para poder trabajar simultáneamente por ambas fosas nasales, lo cual es fundamental durante las técnicas de dos cirujanos a cuatro manos que utilizamos. Este tipo de abordaje lo hemos utilizado en nuestro servicio para manejar dos pacientes. Un paciente con un macroadenoma hipofisiario con gran extensión supraselar y un paciente con un meningioma que comprometía el planumtuberculum selar. La cirugía inicia como el abordaje descrito para cirugía de hipófisis convencional; sin embargo, en este abordaje es indispensable exponer la totalidad del planum esfenoidal, el cual se encuentra limitado por las arterias etmoidales posteriores hacia anterior y los nervios ópticos hacia lateral. Para ello debe realizarse una etmoidectomía anterior y posterior amplias exponiendo el límite entre el techo del etmoides y el planum esfenoidal, lo cual corresponde aproximadamente al nivel de emergencia de las arterias etmoidales posteriores. (Imagen 3). Realizando un abordaje transreceso esfenoetmoidal bilateral se identifican los ostium del esfenoides y el rostrum esfenoidal, y se realiza esfenoidotomía bilateral amplia. Una vez se logra una exposición amplia de todo el seno esfenoidal, que nos permita identificar todas las estructuras importantes incluyendo el piso selar, las arterias carótidas internas, los canales ópticos y el clivus, se procede a resecar el piso de la silla turca con fresa diamantada, drill de Midas y pinzas Kerrison. Después de tener expuesta la duramadre la incidimos en forma de cruz con un bisturí # 11 con mango largo, se identifica la lesión tumoral y se toman muestras para el estudio anatomopatológico. Posteriormente se reseca el tumor de manera secuencial comenzando por la porción inferior y posterior, luego las porciones laterales y por último la porción que está contra el diafragma selar; esto con el objeto de evitar el descenso del diafragma en la parte anterior para evitar obstruir la visibilidad para resecar la porción posterior del tumor. En Imagen 3. Abordaje Transplanar. Disección en cadáver en el que se evidencian los límites de la resección Transplanar. P: Planum esfenoidal. NO: Nervio ópticos. SIC: Seno intercavernoso. H: Hipófisis. C: Clivus superior. ACI: Arteria Carótida Interna. RCO: Receso Carotico-óptico. -129- marzo de 2012 - suplemento Abordaje endoscópico transnasal para resección de tumores de la base de cráneo Con fresa diamantada y drill de Midas® se adelgaza el planum esfenoidal hasta lograr la apariencia de cáscara de huevo. Con la ayuda de disectores y pinzas Kerrison se retiran los fragmentos óseos hasta exponer la duramadre. Así mismo se adelgaza el hueso a nivel del tuberculum selar (teniendo en cuenta que a este nivel el hueso es muy grueso) y si es necesario se complementa con la resección del piso selar. Una vez expuesta la duramadre sobre el planum y el tuberculum selar se identifica la ubicación del seno intercavernoso superior y se cauteriza o liga en su porción mas lateral. A continuación se realiza la durotomía y se expone el tumor. isointensa en T1, que capta de forma homogénea el medio de contraste y ejerce compresión sobre la hipófisis y estructuras adyacentes. (Imagen 5 A, B, C). El paciente es llevado a cirugía donde se realiza un abordaje endoscópico transnasal transplanar-transtubercular logrando resecar el tumor. En el posoperatorio el paciente presenta deterioro del estado de conciencia y neumoencéfalo de aumento progresivo, por lo que se sospecha presencia de fístula de líquido cefalorraquídeo. Se lleva paciente a nueva intervención quirúrgica en la que se refuerzan los injertos empleados para corregir el defecto en la base del cráneo. Imágenes posoperatorias evidencian resección completa del tumor y pequeño neumoencéfalo residual. (Imagen 6 A, B, C). La resección del tumor se hace preservando los principios de resección microquirúrgica, haciendo primero un debulking del tumor y posteriormente una disección extracapsular meticulosa. A este nivel es necesario identificar y tratar en lo posible de preservar las pequeñas arterias que se encuentran alrededor del tumor. Es importante tener en cuenta la ubicación de la arteria cerebral anterior y la comunicante anterior las cuales pueden estar en contacto con el tumor o incluso llegar a estar dentro del mismo. (Imagen 4). B A C Imagen 5. Imágenes preoperatorias de un paciente con un meningioma del planum y el tuberculum esfenoidal. Imagen 4. Imagen intraoperatoria. Se evidencia a la arteria cerebral anterior involucrada dentro del tumor. ACA: Arteria cerebral anterior T: Tumor. Caso 2 Paciente de 57 años con cuadro clínico de 5 meses de evolución de cefalea global de intensidad moderada y nictalopía. En las imágenes prequirúrgicas se evidencia una masa bien delimitada, dependiente del tubérculo selar, -130- A B Imagen 6. Imágenes postoperatorias que evidencian resección del tumor y neumoencéfalo residual. Alfredo Herrera Vivas, Javier Andrés Ospina Díaz, Paula Andrea Téllez Cortés, Oscar Feo Lee Resección endoscópica transnasal de tumores de fosa craneal posterior Hemos utilizado este tipo de abordaje para el manejo de 3 tumores benignos de la fosa posterior, entre los que se incluyen la resección de un tumor epidermoide y dos meningiomas. Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello derecha (Imagen 7 A, B). Se decide realizar un abordaje endoscópico transnasal transclival para acceder a la fosa craneal posterior logrando una resección completa del tumor (Imagen 8 A, B). Para este abordaje es necesario realizar una resección de la porción posterior del septum nasal, aproximadamente 2 cm parar lograr adecuada exposición del clivus medio e inferior, y adicionalmente un adecuado manejo del instrumental. Como en los abordajes anteriormente descritos, se realiza un colgajo septal y una esfenoetmoidectomía amplia para identificar el piso de la silla turca, los nervios ópticos y las arterias carótidas internas. Imagen 7. Imágenes preoperatorias evidencian una masa extraxial, superior a la cisterna del ángulo pontocerebeloso derecho, que moldea la protuberancia. Corresponde a un quiste epidermoide. Mediante este tipo de abordajes se puede exponer la totalidad del clivus (superior, medio e inferior). En caso de desear exponer hasta el clivus inferior los límites de la resección ósea son el piso de la silla hacia superior, el foramen magnum hacia inferior y las arterias carótidas internas y los cóndilos del occipital lateralmente. Una vez expuesto el clivus, se levanta la mucosa a este nivel y se fresa con fresas diamantadas y drill de Midas® hasta exponer la duramadre de la fosa posterior. En esta etapa de la cirugía es importante tener en cuenta la presencia del plejo basilar, el cual puede ser una causa de sangrado intraoperatorio importante. Debemos recordar que este es un sistema de alto flujo pero baja presión, por lo tanto un sangrado a este nivel debe manejarse con “presión y paciencia”, y en casos seleccionados puede ser útil el uso de materiales hemostáticos como el fluoseal®. A. Se identifica el tumor prepóntico derecho en la fosa craneal posterior. T: tumor. AB: Arteria basilar Una vez expuesta la duramadre de la fosa posterior se incide con bisturí # 11 y se expone el tumor. La resección del tumoral se realiza siguiendo los mismos principios que describimos anteriormente. Finalmente se reconstruye el defecto en la base del cráneo teniendo en cuenta que en esta región el cierre es un poco mas difícil por el tamaño del defecto y la presencia de la cisterna prepóntica. Caso 3 Paciente de 17 años con cuadro clínico de 2 años de evolución consistente en disminución de la agudeza visual, además insuficiencia suprarrenal e hipertensión arterial. En estudios imagenológicos se encuentra una masa prepóntica B. Una vez se logra la resección completa del tumor, se identifican las estructuras de la fosa posterior. III: tercer par craneal. ACP: Arteria Cerebral Posterior. ACeS: Arteria cerebelosa superior. Abas: Arteria Basilar. Imágenes 8A y 8B. Imágenes intraoperatorias -131- marzo de 2012 - suplemento Abordaje endoscópico transnasal para resección de tumores de la base de cráneo CONCLUSIONES Los abordajes endoscópicos transnasales son una muy buena alternativa para el manejo de casos seleccionados de pacientes con tumores que comprometen la base de cráneo, permitiendo una resección amplia con márgenes oncológicos y así mismo, disminuyendo las comorbilidades y complicaciones posoperatorias asociadas a los abordajes abiertos. Entre las ventajas respecto a los abordajes tradicionales (abiertos) se incluyen la no realización de incisiones faciales, el evitar la retracción cerebral, la menor tasa de hidrocefalia posoperatoria, el permitir realizar descompresión orbitaria en el mismo abordaje, entre otros. Es importante tener en cuenta que muchos de los abordajes descritos son técnicas recientes, por lo que se encuentran en proceso de perfeccionamiento. Así mismo es importante recalcar que entre mas extendido sea el abordaje mayores son las tasas de complicaciones descritas pues se tratan de pacientes mas complejos, hay mayor riesgo de lesión de estructuras vitales y los defectos en la base del cráneo son mas amplios. Por último, queremos enfatizar en que el éxito de estos abordajes depende de una adecuada selección de los pacientes, del desarrollo de equipos quirúrgicos multidisciplinarios entrenados basados en una técnica de dos cirujanos a cuatro manos, y de disponer del instrumental necesario para el desarrollo de estos abordajes. 4. Stamm AC, Vellutini E, Timperley D, Balsalobre L, Endoscopic Transnasal pituitary surgery. Stamm A.C. Transnasal endoscopic skull base and brain surgery. 1a ed. New York; Thieme. 2011; 235-240. 5. Cappabianca P. Alfieri A. de Divits E. Endoscopic endonasal transsphenoidal approach to the sella: towards functional endoscopic pituitary surgery (FEPS). Minim Invasive Neurosurg. 1998; 41: 66-73. 6. 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