Arte e Islam. 2. - Historia

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ARTE HISPANO-MUSULMÁN.
1.- Arte e Islam.
2.- Arquitectura. Arte califal: la Mezquita de Córdoba, arquitectura y decoración. La ciudad
palatina de Medina Azahra.
3.- Arte almohade. El arte nazarí: la Alhambra.
Enfocar el arte árabe como producto de la dimensión social árabe, ahondando en sus principios
genuinos mediante los cuales se trata de organizar y dar sentido a pueblos, comunidades e
individuos. Desechar la idea deformada, distorsionada y tópica, tan extendida en Occidente, de
conocer al Islam a través de una sola faceta, la religiosa, y consecuentemente enfrentarla
hostilmente, bajo conceptos maniqueos, al Cristianismo.
Explicar la mezquita como trasunto de la vivienda doméstica de Mahoma -un patio y un recinto
cubierto- señalando sus partes y la tipología de los elementos arquitectónicos. Ejemplarizar esta
propuesta a través de la Mezquita de Córdoba. Aludir también por su trascendencia a la ciudad
burocrática de Medina Azahra, con Abderramán III.
Advertir el carácter anicónico del arte y el resumen de su código ornamental en la epigrafía, la
decoración geométrica y el ataurique o decoración vegetal estilizada.
Dada la importancia del arte islámico en Al Andalus, significar algunos de los vestigios más
relevantes del arte almohade, como la Torre del Oro y la Giralda en Sevilla. Por último, explicar
la acrópolis nazarita de la Alhambra bajo la triple dimensión de ciudad, alcazaba y residencia,
advirtiendo la importancia de la jardinería y la “civilización del agua” para los musulmanes.
INTRODUCCION
- No es un arte característico de una religión, sí de una cultura donde la clase dirigente y la mayoría
profesaba el Islám. Por lo tanto no es un arte religioso como el Paleocristiano, sino que sería
equiparable al gótico o barroco.
- Cronológicamente se extendió desde el siglo VIII hasta el XV (en España).
- El punto de partida de esta cultura está en Mahoma y el Corán, recopilación de textos revelados
al profeta por Alá, más los hadices o tradiciones de los dichos y hechos del profeta; en él
encontramos directrices tanto religiosas como sociales o legales y abarcan todos los aspectos de la
vida cotidiana. El Libro estableció un orden político en los territorios islámicos, permitiéndoles
unidad y uniformidad.
- El árabe fue un factor unificador y uniformador puesto que se imponía al igual que los romanos
el latín; era vehículo del mensaje divino y la lengua de las letras y las ciencias, probablemente más
avanzadas del momento.
- Religión y lengua permitieron dar unidad a las diversas lenguas, razas y naciones del
Mediterráneo, como lo demuestra un mismo pensamiento, arte, acciones comunes (como la
rapidísima expansión inicial), etc.
- El arte andalusí, aunque desarrolló formas específicas, no se puede desligar del arte islámico; las
funciones y formas arquitectónicas están determinadas por el Islám, su hispanidad es secundaria;
además, en los siglos XI y XII está determinado por el N. de Africa. Sobre la base del Islám,
elementos árabes, hispanos y bereberes se mezclaron influyéndose mutuamente con distinta
intensidad, alcanzando puntos culminantes excepcionales.
- Los árabes parten de cero en su arquitectura, por lo que van recogiendo elementos de las distintas
culturas que dominan o entran en contacto, es la religión, como decíamos anteriormente, la que
impone una cierta homogeneidad.
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-La poca importancia que Mahoma concede a la arquitectura1, la prisa que tenían en construir (la
mezquita de Basora tuvo que ser reconstruida dos veces en 30 años) y su interés solo por las
grandes superficies y no por la altura (≠Bizancio), se traduce en la utilización de materiales poco
vistosos como el mampuesto, ladrillo, yeso, madera y pocas veces la piedra. Su desinterés por la
altura explica el que la mayor parte de sus bóvedas sean falsas.
A pesar de todo, existen algunos elementos arquitectónicos característicos:
* Arco de herradura que los musulmanes tomaron tanto de los
bizantinos como de los visigodos, pero ya
lo habían utilizado los romanos.
* Los capiteles que se usaron inicialmente
eran reutilizados, hasta que en el s. X crean
una modalidad del corintio llamado de
avispero, trabajado con trépano y con
decoración epigráfica. Los almohades a
fines del s.XII aportan el encintado y sobre
éste, los nazaríes crearán en la Alhambra el
de ataurique decorado con piñas y veneras
y el de mocárabes, decorado con una especie de estalactitas.
- La decoración.- El Corán proscribe los ídolos 2 de ahí que el arte sea
anicónico, así pues las imágenes en las mezquitas tendrán que sustituirse por otro tipo de
decoración:
* Geométrica a base de polígonos, estrellas y
lazos combinados.
* Epigráfica o caligráfica para expresar,
normalmente, citas coránicas. Tengamos en
cuenta que Dios solo ha revelado su
Naturaleza a través de la palabra. Tienen un
valor iconográfico porque sustituyen a las
imágenes. Puede ser de dos tipos: la cúfica, de
signos angulosos y sobrios, y la nesjí, de
rasgos más libres y cursivos.
* Ataurique, decoración vegetal de origen clásico o bizantino pero
estilizada, que procede de abstraer vides, roleos, hojas de acanto, etc. En
Occidente a este motivo decorativo se le llama arabesco.
- Las ciudades.- Carecen de trazado
previo por lo que constituyen un
verdadero laberinto. Los edificios
más importantes eran la mezquita (de
la que hablaremos después), los
baños con horario de mañana para
hombres y de tarde para las mujeres,
la madrasa o escuela coránica, el
meristán u hospital, la alcaicería o recinto cerrado del mercado para
mercancías caras. El zoco era la zona de bazares y en las calles
próximas a él existían abundantes alhóndigas o fundaq, con establos y almacenes de mercancías en
la planta baja y habitaciones para alquilar en la superior. Las casas están concebidas para mantener
la intimidad, se valoran por su interior que se organiza en torno a un patio con alberca rodeado de
plantas (ya lo estudiaremos en el período nazarita); contrariamente, el exterior carece de interés,
como si tratara de ocultar el interior.
1
2
“En verdad que lo menos provechoso para el creyente, lo que devora su riqueza es construir”
“Alá es el puro espíritu al que sería imposible prestarle una apariencia humana”
3
LA MEZQUITA.- Tiene su origen en la Casa de Mahoma en Medina que era un recinto cuadrado
de tapial, con cobertizos de palma y barro, además de unas cabañas de adobe adosadas todas ellas al
cercado; en ella residió con sus familiares y seguidores más necesitados (limosna y hospedaje,
obligaciones del buen musulmán). Se compone de tres partes ordenadas por un eje longitudinal:
haram (1) o sala cubierta que se cierra por un muro llamado qibla
(2) orientado hacia La Meca en cuyo centro se abre el mihrab que es
un nicho vacío (pero lleno con la presencia espiritual de Mahoma y
lugar donde se exponía El Corán), junto a este muro también se
encuentra el mimbar o púlpito (único mueble litúrgico permitido por
el Corán) y la maqsura que es el espacio protegido destinado al
califa. Al otro extremo del haram está el patio porticado o sahn (3)
con una fuente purificadora, sabil, en el centro; por último, el
minarete o torre, desde la que el muecín o almuédano llama a
oración, es la única nota vertical de este edificio.
En las ciudades hay una principal para concentrar a toda la
población un día en semana, es la aljama o mezquita del viernes.
LA MEZQUITA DE CÓRDOBA.
- Origen.- Templo romano, iglesia visigoda, mezquita
que sufriera tres ampliaciones y catedral cristiana.
La iglesia visigoda de S. Vicente desde 747 es
utilizada a medias con los cristianos, pero en 784,
previa indemnización, se convierte en mezquita. Las
obras se inician el 786 y duran poco más de un año
quizás porque las 5 naves se desmontan de su
orientación E-O y se montan en dirección N-S, tal
vez influyeran también los importantes botines del
momento. Se duda si el arquitecto fue un sirio o el mismo Abderramán I, al que las fuentes le dan
gran protagonismo. El modelo fue la mezquita de Al-Aqsa de Jerusalém, de planta basilical.
- La estructura parece estar basada en el Acueducto de los
Milagros de Mérida, aunque también se había utilizado
en la Gran Mezquita de Damasco,
pues para ganar altura (más de 8 m)
se colocan sobre las columnas,
muchas de ellas reutilizadas,
cimacios troncopiramidales, y sobre
ellos pilares rebajados en su parte
inferior y decorados con modillones de rollo, donde reposan arcos de 1/2
punto más gruesos que los de herradura; estos últimos solo tienen como
finalidad tectónica el servir de tirantes, de entibo; ambos son de sillares y ladrillos alternados.
- La primera mezquita tenía 11 naves perpendiculares a la qibla y 12 tramos o crujías; las naves
extremas más estrechas, con rejas, destinadas a las mujeres (saquifas). Utilizan como elemento
ornamental modillones de rollo y rizos que pasan después a la arquitectura mozárabe y al románico
francés. Los muros se aparejan "a soga y tizón" reforzados por contrafuertes; almenas y merlones
escalonados derivados de la mezquita de Damasco (Siria) como remate. Muy discutido es el hecho
de que la qibla mire al sur en lugar de dirigirse a La Meca, tal vez se deba a que para ir a dicho
lugar había que dirigirse primero al sur. Quizás careciera de alminar como todas en esa época;
Hixam I, hijo del anterior, edificaría uno pequeño, de base cuadrada h. 7903.
3
Los restos hallados están a casi 11 m al sur de la torre actual y tienen unos 6 m de lado. Se supone sin muchas bases que tenía 40
codos de altura, unos 20 m, una sola escalera, y dos cuerpos
4
- Ampliación de Abderramán II.- (Acabada h. 848) El aumento de población obliga a prolongar las
naves 8 tramos en dirección al río, con lo que alcanza 64 metros de profundidad y adopta una forma
casi cuadrada el haram. Se utilizan capiteles nuevos copiando los romanos, aunque se siguen
reutilizando materiales.
- Mohamed I (5º emir) parece ser que reformó la antigua Puerta de los Visires de tiempos de
Abderramán I convirtiéndola en la hoy llamada Puerta de San Esteban
(855); encontramos en ella un arco de herradura enjarjado (por tanto
escarzano), trasdós e intradós concéntricos, despiezo mirando hacia el
centro del arco y su peralte la mitad del radio. Construyó asimismo la
primera maqsura.
- Abderramán III (primer califa) construyó otro minarete (952) que rompe
con la tradicional forma helicoidal de Oriente y se encuentra dentro de la
torre actual4. También agrandó el sahn (según últimos estudios fue
Alhaquem II) y lo rodeó de una galería de 6 m. de profundidad con pilares
y columnas alternadas. Aparece ya el nuevo arco de herradura: trasdós e
intradós dejan de ser paralelos, despiezo mirando hacia la línea
de impostas, etc.
- Alhaquem II finaliza la tercera ampliación el año 971 con los
trabajos musivarios5; añadiendo 12 tramos o crujías (suman 32
en total) a las 11 naves. La nueva qibla tiene doble muro, con
cinco habitaciones para el paso (sabat o pasadizo) del califa
desde el alcázar y otras cinco para resguardar el tesoro.
Construye un bellísimo minbar6 y el mihrab definitivo que es
una habitación, ya no sólo una hornacina como era habitual, de planta
octogonal, cuya fachada sigue el esquema de la Puerta de S.Esteban y
tiene tres partes diferenciadas:
a) Zócalo con planchas de mármol y dos columnas del mihrab de
Abderramán II.
b) Arco con frente de mosaico de oro decorado con ataurique; enjutas
o albanegas doradas con motivo circular muy utilizado en Al Andalus
y Mogreb. Franja azul con caracteres cúficos.
c) Arquería ciega polilobulada, de influencia abbasí, con contraste de
mármol blanco y dorados entre los arcos.
Delante del mihrab (cubierto con una bóveda avenerada de yeso,
antiguamente decorada con oro, azul y otros colores) se construye la maqsura ocupando tres tramos
con sendas cúpulas de tipo califal o de nervios que no se cruzan en el centro de tradición abbasí; la
cuarta cúpula de este tipo la encontramos en el lucernario o Capilla de Villaviciosa situada en la
4
El cronista más fiable parece ser al-Idrisi, y nos da noticias de una torre de dos cuerpos de planta cuadrada, pero de distinta altura y anchura,
su relación es aproximadamente de 1/3. En su interior cuenta con dos escaleras. El inferior se coronaba con una hilera de arcos de herradura
sobre columnas. El superior consistía en una habitación para los almuédanos, abierta por los cuatro costados. Sobre este cuerpo, una cúpula o
media naranja sobre la que estaba clavado un largo vástago de hierro, el amud, con cinco bolas o manzanas ensartadas. Tras las recientes
restauraciones se ha obtenido más información, a través de la cual sabemos que la altura total era de unos 47,14 m (hasta el remate del amud).
El cuerpo inferior tenía 30,8 m y las escaleras 0,94 m de anchura. Contó con dos puertas de acceso, una en el costado norte y la otra en el sur.
Exteriormente los cuatro costados estaban decorados en la parte superior por sendas galerías de arcos de herradura ciegos sobre columnitas;
pero mientras que el norte y el sur tenían cuatro ventanales de dos arcos de herradura cada uno sobre columnitas, los costados este y oeste sólo
tenían dos ventanales pero de tres arcos de herradura cada uno. El pretil era almenado a la manera de los muros de la mezquita.
El segundo cuerpo es más difícil de precisar porque de él no queda nada, teniendo que acudir a las fuentes escritas o gráficas; era un prisma
hueco, más alto que ancho, provisto de una decoración almenada y cubierto con una media naranja. Su altura era de 11,04 m y su anchura no
debió exceder los 4,8 m.
El amud, de unos 5,3 m, constaba, además del vástago de hierro, con cinco esferas: la primera de 1,4 m, la segunda 1 m, la tercera 0,6 m, etc.
5
Trabajos realizados por un maestro musivario enviado por el emperador Nicéforo Focas que formó una escuela local.
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Haciendo un resumen de las fuentes contemporáneas, era un mueble sobre ruedas de coral y maderas preciosas: sándalo rojo y amarillo,
ébano, marfil, áloe verde, azufaifo y leño de sapán, todo ello sujetado con clavos de plata y oro, algunas de cuyas cabezas estaban adornadas con
perlas y piedras preciosas. Su costo alcanzó los 35.705 dinares y 3 dirhems. Tenía nueve escalones y se componía de 36.000 piezas de
marquetería. Su altura era 3,5 m y su anchura 0,9 m. y fue acabado entre 965-966.
5
nave central, en la primera crujía de esta ampliación, donde se hallaba el mihrab original. Las
cuatro cúpulas califales adoptan la tipología de planta en forma de T.
Se utiliza el nuevo arco de herradura; y en la maqsura y el lucernario aparecen los de herradura y
polilobulados entrecruzados.
- Almanzor y su arquitecto Said Ibn Batrí h.988 añadieron en vez de tramos, puesto que el río
estaba ya próximo, 8 naves por la parte oriental, porque por la occidental estaba el Palacio, y adaptó
el sahn a estos cambios que dejaron descentrados mihrab y minarete; la causa fue la llegada de
muchos mercenarios bereberes. Artísticamente hay un importante "bajón" si la comparamos con la
parte de Alhaquem. Aparecen por primera vez los arcos de herradura apuntados cuyo origen está en
el cruzamiento de los arcos de herradura circulares.
- En época de Carlos V, contando con su licencia aunque luego se arrepintiera, se insertó un crucero
catedralicio en las ampliaciones de Alhaquem y Almanzor, rompiendo, además de las naves
afectadas, el alzado horizontal del edificio. El otro grave atentado fue el recubrimiento del minarete
poco después.
Sus dimensiones definitivas son pues 178 x 128 m. solo superada por dos mezquitas de Samarra
(época abbasí). A diferencia del Medio Oriente, el espacio de la aljama cordobesa no se puede
captar como un todo, dado el bosque de columnas existentes.
MEZQUITA DE BAB-AL-MARDUN (Toledo, fines del siglo X)
- Mezquita privada de planta central: cruz griega inscrita en un
cuadrado de 8 m.
- Se compone de 9 tramos, el central más alto, con 9 bóvedas
califales distintas, que se pueden considerar copias reducidas de las
de la época de Alhaquem.
- Por el inteligente empleo del ladrillo en su exterior, tendrá gran
influjo en el arte mudéjar.
- El alzado del edificio muestra su planta en "T" como la mezquita y
Medina Azhara.
CIUDAD BUROCRÁTICA DE MEDINA AZHARA (iniciada en 936 ó 940)
- Fue la capital gubernamental del califato, mientras Córdoba continuaba siendo la capital
económica y religiosa. Su fundación se debió a una doble necesidad de Abderramán III:
* Plataforma político-administrativa para controlar los territorios (Al-Andalus y Magreb)
* Prestigiar la dignidad califal (un edificio monumental expresa mejor que nada la majestad,
resumiendo sus propias palabras) frente al también reciente califato fatimí cuyo expansionismo por
el norte de África amenazaba los intereses omeyas en el Magreb.
- El plano es rectangular (1500 x 745 m) defendido por una muralla, a cuyos lados se sitúan
cuarteles para la guarnición. El espacio estaba escalonado en
tres terrazas jerárquicas que se adaptan al relieve:
* En la superior están las dependencias palatinas entre
albercas y huertos. Hemos de destacar el Salón Rico (953-57),
destinado a recibir a las embajadas extranjeras procedentes de
Bizancio, de la corte imperial alemana, de los reinos
cristianos del norte y, sobre todo, de las tribus aliadas del
norte de África. Su estructura arquitectónica y la decoración
mural definen absolutamente el arte califal, que después será
copiado en los reinos táifas, aunque de forma mucho más
humilde. Se perfilan las proporciones del arco de herradura
canónico: tres de alto por cuatro de ancho; se crea el capitel
de avispero y se importan motivos ornamentales persas como
el árbol de la vida que se integra en el ataurique. Pero esta
decoración está realizada con una nueva técnica basada en la
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talla de los motivos decorativos sobre una piedra caliza superpuesta a la constructiva.
De las habitaciones privadas nada se ha descubierto7.
* En la intermedia estaban las oficinas y las viviendas de los ministros, separadas de aquellas por
jardines.
* La baja se componía de la mezquita, la Casa de la Moneda, el centro artesano oficial, el zoco y
las casas de la población divididas por barrios.
- Las características de este palacio-ciudad no se diferencian mucho de otros grandes centros
islámicos de Oriente o N. de África: la situación preeminente del palacio en el conjunto, la posición
secundaria de la mezquita con relación al palacio, y el aislamiento de la zona palaciega respecto a
su entorno próximo mediante grandes espacios abiertos.
- La decadencia vino muy pronto. Tras la muerte de Al-Hakem en 976 el poderoso primer ministro
de Hisam II, Almanzor, trasladó todo el aparato administrativo al nuevo centro urbano que había
construido al este de Córdoba -Madinat al-Zahira-. Privada de sus funciones esenciales, al-Zahira
quedó reducida a mera residencia de Hisam. Las primeras destrucciones datan de 1.010
- Esta breve ciudad expresa mejor que ninguna otra los enunciados del urbanismo árabe temprano,
libre de los procesos de otras ciudades ininterrumpidamente habitadas (El Cairo, p.ej.) que acabaron
distorsionando el modelo inicial, ofreciendo el estereotipo de ciudad densa, abigarrada y
aparentemente caótica.
EL PERIODO ALMOHADE (1149-1235, en España).- Aportaron mayor ortodoxia religiosa y
austeridad. Los territorios almohades se extendían desde Libia hasta Marruecos y el sur de España,
por lo que existió un continuo intercambio de artistas entre el norte y el sur.
Características.- Su arquitectura como su religiosidad es esencialmente austera (comparable a la cisterciense),
como lo atestigua el que su material de construcción preferido sea el ladrillo, a veces en grandes
superficies vacías.
- Utilización de arcos de herradura apuntados o túmidos, montados sobre pilares.
- Los motivos decorativos tienen formas precisas y claras destacando sobre fondos lisos. Marcada
tendencia geométrica. Aparece la decoración epigráfica
de nesjíes y los paños de sebka
o redes de rombos. Los
capiteles son un cuerpo
cilíndrico generalmente liso y
decorado con una cinta
continua y ondulada que es la
estilización de las hojas de
acanto (capitel encintado). Se
introduce la cerámica vidriada
de origen mesopotámico-persa. Los mocárabes se generalizan. El alfiz se
distancia de la clave del arco.
- Las mezquitas ofrecen particularidades:
* más anchura de la nave central, las extremas y la transversal junto a
la qibla,
* siempre el pilar como elemento sustentante, de base cuadrada
normalmente.
* Mezquita de Sevilla, construida entre 1172-76, de la que solo queda
el minarete y parte del sahn. Constaba de 17 naves con arcos de
herradura apuntados. La puerta central del patio, aun conservada,
correspondiente al eje de la mezquita, posee un arco con faja central en
7
Según los textos, una de las salas tenía las paredes de mármol y un techo de oro del que colgaba una perla enorme, regalo del
emperador de Bizancio; las puertas de ébano, marfil e incrustaciones de piedras preciosas; una alberca llena de azogue que con los
rayos del sol producía efectos maravillosos, completaba la dependencia.
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el intradós rehundida (angrelado) donde aparece un follaje liso y alargado
prenazarita. La puerta lateral se cubre con bóveda de mocárabes. Fue
derribada por su mal estado en 1401. Su minarete es La Giralda,
influenciado por el de la mezquita Kutubiyya de Marraquech (1.130-63),
debe su nombre a la veleta que gira con la estatua de la Fe (o la Fortaleza,
según estudios realizados con motivo de su restauración). No está situada
en el sitio correspondiente, en el eje de la nave central, por problemas de
cimentación; en su lugar está la puerta del Perdón. Iniciada en piedra por
ben Basso (1184), la continuó y acabó en ladrillo Alí de Gómara (1198),
material del que se compone en su mayor parte. Está formada por dos
núcleos concéntricos de planta cuadrada, midiendo el exterior 13,65 m; en
torno a los dos prismas se desarrolla la rampa de acceso en sentido
contrario a las agujas del reloj. Hasta la primera terraza mide 50,85 m. Su
decoración con paños de sebka inspirará muchos campanarios mudéjares.
- Palacio almohade de Sevilla.- Se conserva poco del que debió ser el más suntuoso del periodo.
* Torres del alcázar con la típica decoración de listeles paralelos y horizontales.
* Arquería del Patio del Yeso con algunos rasgos que se continuaron en el arte nazarita: arco
central mayor que los laterales, red de rombos de yeso calada.
* Existe una bóveda de tipo califal pero de nervios muy finos y mocárabes en el centro.
- Fortificaciones.- Se caracterizan por:
* Puertas muy ornamentadas.
* Doble recinto amurallado; además de la muralla principal con su adarve (camino trasero y
elevado de la muralla), hay otra exterior, mas baja, llamada barbacana (origen bizantino).
* Torres albarranas; son exentas y colocadas como avanzadilla de la muralla (Torre del Oro,
Torre de la Plata, Torre de Espantaperros (Badajoz).
La Torre del Oro, de 1220, es el extremo de una coracha o trozo de muro perpendicular a la
muralla. Su planta es dodecagonal y su alzado está formado por dos cuerpos semejantes al que se
añadió en el s.XVIII una linterna. Escalera desarrollada en torno a un núcleo hexagonal; la bóveda
de dicha escalera está formada por unos tramos triangulares y otros cuadrados (se inspiran en la
catedral de Aquisgrán). Parece que al otro lado del río había otra igual o un fortín, en caso de ataque
naval se extendía una cadena entre ambas para evitar el paso. La referencia al oro se debe a que en
su parte superior estuvo alicatada y, según otros, a que los galeones desembarcaban allí el preciado
metal8.
ARQUITECTURA GRANADINA.
- Cenit del decorativismo musulmán: arcos falsos, yeserías y zócalos cubriendo los muros, cubiertas
de yesería o de madera, todo ello para ocultar la pobreza de materiales.
- Vuelta a la columna como soporte: fuste muy fino (columna de galgo) rematado por anillas, basa
con gran moldura cóncava, capitel con un primer cuerpo cilíndrico y un segundo prismático con
decoración vegetal y mocárabes.
- Los arcos constructivos de las puertas de las murallas, por ejemplo son de herradura apuntados;
los falsos poseen un esqueleto de madera, son peraltados y con numerosos lóbulos o triangulares de
mocárabes (parecidos a los arcos en cortina).
- Las bóvedas son esquifadas, de arista, gallonada, etc., a la que hay que añadir las falsas de
mocárabes (salas de las Dos Hermanas y de los Abencerrajes).
- Además de Alhambra y Generalife: el Cuarto Real de Sto. Domingo, Alcázar Genil, la alhóndiga
llamada "Corral del Carbón" y fuera de Granada parte de la Alcazaba de Málaga y la Mezquita de
Ronda.
LA ALHAMBRA.
8
Fue salvada de la piqueta que destruyó murallas y puertas de la ciudad por Demetrio de los Ríos, precursor en la defensa del
Patrimonio Artístico, en 1869.
8
Se asienta sobre una colina llamada SABIKA, cerca de las últimas estribaciones de Sierra Nevada,
a cuyo pie corre el Darro. En su cima y con vistas a dicho río, se construyó en el siglo IX una
fortaleza llamada Qal´at al Hamra o Castillo Rojo. Para afianzarse en el poder, Muhamed I (1/2
siglo XIII) no sólo reconstruye esa fortaleza, actual Alcazaba con su monumental Torre de la Vela
en el extremo, sino que continúa la muralla hasta cercar por completo la meseta del monte,
construye la acequia real desde el Darro y en el interior, junto a la Alcazaba, construye el Palacio
primitivo. A éste lugar traslada en 1238 su corte desde el Albaicín.
Este palacio-ciudad, independiente del resto de la ciudad, es un conjunto edificado sin proyecto
unitario y varias veces reestructurado y redecorado. Dotado de diferentes elementos urbanos,
defensivos y palatinos: calles, viviendas, mezquitas, baños, cementerios, alcazaba, muralla, puertas,
torres (algunas con ricos palacetes dentro como la de las Infantas y la de la Cautiva), jardines
característicos, palacios con áreas públicas y privadas. En total, el recinto mide 740 m x 220 m de
anchura máxima.
CUARTO DE COMARES.
Construido en tiempos de Yusuf I (2º 1/4 siglo XIV). Es lo más granadino del conjunto. Consta de
dos patios:
- Mexuar (Sala del Consejo de visires; posteriormente capilla cristiana), es el más pequeño y servía
para administrar justicia. Sólo tiene arquerías en uno de los frentes estrechos y a él se abre la gran
portada del palacio, protegida por un voladísimo alero de madera ricamente decorado. Por otra
puerta se comunica con el otro patio. En el otro lado del Mexuar hay un oratorio con su pequeño
mihrab con arco de herradura. Es de principios del s.XIII, por lo que hay quien lo considera
almohade.
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- Patio de la Alberca o de los Arrayanes.- Pórticos de columnas en sus dos frentes estrechos y un
largo estanque central; tras uno de los pórticos, Carlos V destruye la obra musulmana y construye
su palacio, tras el otro pórtico está la Sala de la Barca, estrecha y larga con cubierta de madera
decorada con lacería y con alcobas en los extremos; tras ella está el Salón del Trono o de Comares,
alojado en una gran torre, la inmediatamente mayor que la de la Vela; es una estancia cuadrada
cuyas ventanas, por el gran grosor del muro, son auténticos gabinetes, en uno de los cuales está el
trono. El interior aparece decorado con materiales frágiles y pobres como barro, yeso, madera, pero
mágicamente convertidos en obras de arte tanto en el suelo como en las paredes, pero tal vez
destaque el artesonado de carpintería del techo donde se representan esquemáticamente los siete
cielos superpuestos del cosmos musulmán, presididos por el trono de Alá en el octavo cielo. Tanto
en la Barca como en el Trono hay importante decoración epigráfica.
- Se completa, contiguamente a la torre, con baños que constan de la Sala de las Camas y los baños
propiamente dichos.
CUARTO DE LOS LEONES.
- Obra de Muhamed V (2ª 1/2 siglo XIV) para emular la obra de su padre. El patio, a imitación de
los claustros cristianos, tiene arquerías en los cuatro lados; en su centro se encuentra la Fuente de
los Leones (reutilización procedente de la casa de un judío del s.XI), en la que el agua simboliza la
plata fundida de los dones del sultán y los leones a los guerreros leales, a quienes colma de favores.
- Tras el pórtico del testero (frente a puerta principal) hay una crujía dividida en varios tramos por
arcos de mocárabes; en el centro se halla la Salas de los Reyes, llamada así por los que decoran la
bóveda de la sala del centro, mientras que otras salas lo están con escenas de caza y de amor, obra
de autores cristianos. Aquí se celebraban las fiestas y banquetes del verano. La galería del otro lado
ancho (oeste) es la Sala de los Mocárabes.
- En el eje de los dos lados menores del patio se encuentran dos salas: la de los Abencerrajes,
donde se celebraban las fiestas y banquetes en invierno, y la de las Dos Hermanas donde se
encuentra el Mirador de Daraja, ubicación del trono de este rey, tras el cual hay un hermoso
jardín. Ambas están cubiertas por bóvedas de mocárabes.
EL GENERALIFE (1.273-1.302)
Su nombre significa o “Jardín de los Artistas” o “Huerta excelsa” (Yannat al´Arif) y fue construido
por Muhamed II como residencia de verano aislada para el descanso pero próxima a la Alhambra y
sobre la acequia real. Varios jardines de diferente tipo se encuentran ordenados en el largo Patio de
la Acequia, aprovechándose de forma ingeniosa los diferentes
niveles del terreno, como lo demuestra la admirable la escalera de
rampas de agua. Con sus dos andenes en cruz, se emparenta con
Patio de los Leones.
En la concepción general de la construcción del Generalife, igual
que en la Alhambra, se tuvo presente la vista del edificio hacia
fuera: la naturaleza se hace omnipresente y se puede disfrutar con
los cinco sentidos.
Siguiendo la pendiente en dirección norte existen las ruinas de otra
villa semejante llamada "Casa de la Desposada". En la Alhambra
también encontramos una réplica a estos jardines: El Partal, obra
de Mohamed III en los primeros años del s. XIV. Estos jardines,
donde la vegetación alterna con fuentes, canales y aposentos por lo
que fluyen arroyos, el hortus conclusus, pretende ser un reflejo del
Edén o paraíso coránico.
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