Clase Nº3 - Asociación Educar

Monografía
Curso de Capacitación Docente
en Neurociencias
Alumna: María Paula Darwich
www.asociacioneducar.com
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Seguinos en:
Emociones en el proceso enseñanzaaprendizaje: ¿cambio de razón por pasión?
Tutor: Emanuel
Para comenzar quisiera plantear qué entendemos por aprendizaje: “Cualquier
variación en las conexiones sinápticas que produzcan cambios en el pensamiento y
comportamiento, que puedan generarse a través de la información teórica, la
practica o las experiencias de vida.”
Existen cuatro etapas en las que el aprendizaje va evolucionando:
Primera etapa: Inconsciente no capacitado, o ignorancia de la ignorancia. No
sé que no se.
Segunda etapa: Consciente no capacitado, o consciencia de la ignorancia. Sé
que no se.
Tercera etapa: búsqueda del conocimiento
Cuarta etapa: Zona de aprendizaje teórico.
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Pero para que se produzca efectivamente un “buen” aprendizaje, es necesario que
se den algunas condiciones que nos ayuden a lograrlo, pues el cerebro no puede
incorporar o atender a toda la información sensorial que es bombardeada a cada
instante, por eso, necesitamos focalizar la atención.
Por suerte hoy sabemos que existen diversas estrategias para ayudar a convertir
información en conocimiento. Algunas de ellas pueden ser:
Incorporar cosas novedosas en la enseñanza
Llevar sorpresas al aula
Realizar predicciones junto con los chicos
Realizar anticipaciones positivas
Atender a los intereses individuales
Estas estrategias pueden ser incorporadas a través de:
 Cambios en la voz
 En el ritmo
 Cambios visuales en los colores
 En el movimiento
 En el tamaño
 Cambios táctiles
Por ejemplo, podríamos crear bosquejos coloridos de la nueva información, o
utilizar tarjetas para asociar un número escrito en palabras con el símbolo
numérico para enseñar diversos temas.
Algo M
MU
UYY IIM
MPPO
ORRT
TA
AN
NT
TEE a tener en cuenta es que
Los estados emocionales influyen fuertemente en el registro de los
estímulos sensoriales que pasen por los filtros cerebrales.
¿Esto qué nos quiere decir? ¡Que los estados emocionales juegan un rol
fundamental en el aprendizaje y en la vida cotidiana en general!
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Pero…¿Cómo es que las emociones influyen en nuestro proceso de aprendizaje?
Existe en nuestro cerebro un órgano llamado Sistema Límbico que seria el “núcleo
emocional” del mismo, donde se le da significado emocional a la información. Es un
órgano autoprotector que busca el placer y para ello evalúa los valores de
supervivencia y placer, y en función de los mismos determina si a la información que
ingresa se le permite el acceso al cerebro racional y de ser así, a qué lugar se
enviará.
El sistema límbico pertenece al “cerebro emocional” y está formado por la
amígdala y el hipocampo, dos centros que se activan frente a situaciones
contrarias.
La amígdala está ubicada a ambos lados del tálamo (estructura donde se integran
los sentidos) y en el extremo inferior del hipocampo. Está relacionada con la
memoria emocional y las respuestas de lucha o fuga. Cuando la amígdala está
activada en respuesta al estrés, hay una caída en la actividad de los centros
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cognitivos más elevados. En un ambiente amenazante, se activará e impedirá
que la información alcance las áreas corticales cognitivas superiores. ¡Esto es
muy importante para tenerlo presente en el aula de clase!
Por otro lado, el hipocampo es un centro de consolidación que liga la nueva
información sensorial al conocimiento previo y a las memorias de experiencias
anteriores.
Otra estructura que adquiere una relevancia especial en la educación es el Núcleo
Accumbens, el cual se asocia al placer. Consiste en un grupo de neuronas del
encéfalo ubicadas en el Bulbo Olfatorio. Tiene un papel importante en el circuito
de recompensa, de la risa, del placer y también de las adicciones.
De nuevo surge la necesidad de construir en el aula un contexto
adecuado y un estado atencional y emocional apropiados para la clase.
Para poder lograr un aprendizaje efectivo, la información debe ser procesada por
el cerebro cognitivo-ejecutivo. Este se encuentra en el Neocortex y representa el
85% del volumen total cerebral.
Su activación es siempre posterior que la de los cerebros instintivo y
emocional. Es de acción lenta y consume gran cantidad de energía.
En él se encuentran los Lóbulos
Pre-frontales, el área que nos hace
“específicamente humanos”.
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Para que la información pueda llegar a nuestro cerebro cognitivo ejecutivo, debe
activarse el SARA, nuestro Sistema de Activación Reticular Ascendente. Se lo
podría definir como el “encendido” del nivel de respuesta y alerta del cerebro.
Al activarse el SARA, la información entrante puede ascender al tálamo, y de allí, a
áreas más elevadas del cerebro, logrando una atención selectiva y sostenida.
Para que esto suceda:
¡¡Es fundamental que se cree un clima de seguridad, ordenado y limpio en el
aula, con elementos conocidos por los alumnos, con un docente asociado al
placer y la seguridad!!
De lo contrario el cerebro emocional será el que responda anticipadamente
situándose en “modo supervivencia”:
¡Lucha o fuga!
Algunas estrategias que permitirían atrapar la atención del SARA favoreciendo
el aprendizaje son:
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 Cambiar
el tono, ritmo y volumen de voz en el transcurso de la clase,
enfatizando lo que queremos destacar como más importante.
 Utilizar
colores llamativos cuando queremos destacar algo, ya sea en el
pizarrón, en algún afiche o si utilizamos un power point.
 Utilizar
el cuerpo, a través de movimientos, gestos, cambios de lugar dentro
del aula, mientras se da la clase. Esto no sólo sería para el docente, también, de
forma ordenada, se podría realizar con los alumnos, teniendo un objetivo claro
de la actividad que se plantea.
 Llevar
objetos al aula para trabajar determinados temas, o cambiar de lugar
los objetos que se encuentran en el salón.
 Hacer
una salida/visita a determinado lugar con un objetivo determinado, es
decir, cambiar de ámbito de enseñanza-aprendizaje.
 Trabajar
con música para determinadas actividades, sin previo aviso a los
alumnos.
 Llevar
diferentes aromas al aula para trabajar diversos temas que se
relacionen
con el aroma presentado (pueden ser esencias, perfumes,
sahumerios, etc)
 Trabajar
con elementos que posean diversas texturas. Plantear actividades
donde deban manipular estos elementos, observarlos, clasificarlos, estudiarlos
desde diversos puntos de vista.
 Ver videos, documentales o películas asociadas al tema que se está enseñando.
 Indagar acerca de los intereses individuales y grupales de los alumnos y
plantear actividades que tengan que ver con esos intereses, respetando los
contenidos a enseñar.
 Innovar
en estrategias y formas de enseñanza que conduzcan a alcanzar el
objetivo de la clase.
 Invitar
personas ajenas a la institución (especialistas en algún tema, por
ejemplo) que aporten al objetivo de la clase.
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Todo esto nos lleva a pensar en:
La importancia de atender a las emociones dentro del aula, tanto de los
alumnos como del docente, pues es la base para crear un clima apropiado para
el óptimo desarrollo de la clase.
Es muy importante aprender, como docente y en la vida cotidiana a desarrollar la
empatía con las personas, para poder percibir cuál es el estado emocional de
nuestros alumnos o de las personas con las cuales convivimos a diario.
Esto nos permite buscar estrategias para modificar ese estado, si es que se trata
de una emoción negativa.
El desvío de la atención o el mecanismo voluntario de desatención es
mutuamente importante para trabajar en la vida cotidiana, así como en el
aula.
Practicar diversas actividades que estimulan un aumento de dopamina (hormona
que nos genera motivación, entusiasmo, éxtasis) en el cerebro, es una buena
estrategia para cambiar un estado emocional negativo, por ejemplo:

movimiento físico,


conectar el saber con el interés personal del alumno,
el contacto social,


la música en el aula,
los juegos y el humor,

las novedades (siempre que sean incorporadas
de una forma orgánica y coherente con el objetivo de la clase),

alcanzar el sentido del logro,


la recompensa personal o el tener iniciativas
proponerse objetivos realizables.
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Un dato importante a tener en cuenta:
Cuando la función de la dopamina disminuye en el cerebro (por situaciones de
estrés, por ejemplo) también disminuye la función de la endorfina.
La dopamina también dirige el “centro del placer”, el área que le perite a la
persona “gozar de la vida”.
Cuando el estrés interfiere en la función dopaminérgica, el centro del placer
se hace inoperante, y la vida se convierte en dolorosa y ausente de placer.
Llegando al final de esta monografía creo que es preciso retomar la idea central de
este texto: dar a las emociones el lugar y la importancia que realmente poseen
en el proceso de enseñanza-aprendizaje, no sólo dentro del aula sino en cada
momento de nuestras vidas.
Lo que algunos docentes intuitivamente venían realizando desde hace varios años,
hoy las neurociencias l confirman y nos estimulan a tenerlo bien presente y
aplicarlo en nuestras clases, para lograr un clima de armonía, interés, confianza y
felicidad dentro de las escuelas, lo cual seguramente traerá aparejado el
aprendizaje de nuestros niños.
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Construyamos una nueva forma de entender y hacer educación, basada en el
afecto, la creatividad, la conexión con la naturaleza y respetando las
emociones de alumnos y docentes, marcando los límites pero sin agresiones
ni autoritarismos. ¡Creemos el mundo tal cual como quisiéramos que sea!
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