Juan Carlos Agulla. Una nueva educación para una sociedad posible . Academia Nacional de Educación PROLOGO Pretendemos mostrar la posibilidad de emprender un nuevo camino para entender a nuestro país: un nuevo camino que parte de un análisis sociológico objetivo de la realidad sin prejuicios ni preconceptos. Pero también un nuevo camino que busque la superación de una situación crítica histórica y se proyecte hacia el futuro. Este nuevo camino parte de la idea de que el conocimiento de la realidad social sólo puede adquirirse si al mismo tiempo se la está transformando por la acción política misma. Y es to es una nueva política, es decir, una política que conoce la realidad en base a su transformación en función de una meta políticamente definida. De allí la necesidad que tenemos de basamos, desde una perspectiva sociológica, en la prospectiva y el planeamiento; desde allí, nueva política es uso de la razón operativa, es control y regulación de la sociedad del futuro corno forma de conocer el presente y explicar el pasado de la realidad social. Para eso tenernos necesidad de recurrir a una utopía posible en donde esa razón sea su razón de ser. Esto nos evita caer en declamaciones y gesticulaciones, en actos de buenos deseos y de mejores intenciones. Entendemos que la política, por naturaleza, siempre tiende hacia una idea de perfección social (justicia), pero esa idea de perfección social (justicia) ha cambiado y cambiará históricamente. De lo que se trata en consecuencia, es de encontrar la forma que va a tener históricamente esa idea de perfección (justicia). Para ello, políticamente, recurrimos a una utopía social posible basada en una tendencia histórica: la permanente y constante expansión de la cultura tecnológica e integración de las sociedades tecnocráticas, las que actúan en el presente contexto prospectivo como variable independiente. Pero además, y para no caer en un modelo que como nación podemos poner en duda, tratamos permanentemente de evaluar esa tendencia desde los valores de la Nación Argentina, es decir, de los valores que emergen de su razón histórica que, en última instancia, es la razón de ser de la nación misma. Y a esto lo llamamos "Proyecto Nacional", es decir, una utopía posible fundada en la razón operativa y evaluada por la razón histórica. Por eso, el proyecto nacional es sólo un camino, un camino difícil que reclama la incorporación de la voluntad en la historia, un camino que compromete a la política. Concebir un proyecto nacional como un camino histórico, políticamente orientado, reclama, inexorablemente, una teoría sobre el desarrollo de las sociedades nacionales. Esta teoría ac túa como marco teórico interpretativo de todas las explicaciones del pasado, comprensiones del presente y proyecciones del futuro de la sociedad argentina. Si con ella hemos conseguido, de alguna manera, iluminar algo este difícil camino, habremos logrado nuestro objetivo. Este documento ha sido descargado de http://www.educ.ar 1