Título: La bendición de Permanecer en Dios Base Bíblica: Salmo 84:1-12 David Sánchez 08/10/2014 Introducción: Nuestra vida espiritual puede ser, además de renovada, creciente. Es posible cuando caminamos tomados de la mano de Dios. Es allí—solamente allí—cuando podemos decir: “He estado en la Presencia de Dios”. Ahora, tome nota de que es bien diferente estar en la presencia de Dios que permanecer en la Presencia de Dios. Y nuestra meta es permanecer, porque estar puede ser un evento momentáneo. Permanecer, en cambio, demanda nuestro compromiso y disposición. En este salmo se destaca el énfasis levítico de esta sección. Éste es otro Salmo para los hijos de Coré. Debemos decir aquí que los hijos de Coré sirvieron en el tabernáculo y más tarde en el templo. Recordemos el pasaje de 1 Crónicas 26:1, que dice: "También fueron distribuidos los porteros, así: de los coreítas, Meselemías hijo de Coré, de los hijos de Asaf". Luego se incluía una larga lista de la familia de los coreítas. Ahora, también recordemos que Coré había dirigido una rebelión contra Moisés, por la que fue juzgado. Pero, por la gracia de Dios, estos descendientes estaban sirviéndole en el tabernáculo y en el templo. Después, en 1 Crónicas 26:12-13, dice: "12Entre éstos se hizo la distribución de los porteros, alternando los principales de los hombres en la guardia con sus hermanos, para servir en la casa del Señor. 13Echaron suertes, el pequeño con el grande, según sus casas paternas, para cada puerta". O sea, que un hombre fue asignado para cada puerta y la elección de los mismos se hizo por suerte. Y así, hombres fuertes y robustos vigilaron el tabernáculo o tienda de reunión y más tarde guardaron cada entrada del templo. Vemos, pues, que el tabernáculo y el templo se destacaron en este salmo. Leamos ahora los versículos 1 y 2 de este Salmo 84: "¡Cuán amables son tus moradas, Señor de los ejércitos! ¡Anhela mi alma y aun ardientemente desea los atrios de Jehová! ¡Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo!" ¿Es éste hoy el anhelo de su corazón? ¿Desea usted reunirse con el pueblo de Dios? La iglesia es el lugar donde se experimentan la comunión y el compañerismo, y el lugar donde se predica la Palabra de Dios y Cristo es exaltado. Es allí donde usted puede crecer espiritualmente I. Estar y permanecer en la Presencia de Dios parte de una decisión personal (vv.1-3) 1. Es necesario anhelar estar y permanecer en la Presencia de Dios (v. 1) a. Las multitudes se conforman con una experiencia momentánea b. Permanecer en la Presencia de Dios es algo que trasciende el tiempo 2. Estar y permanecer en la Presencia de Dios demanda un corazón dispuesto (v. 2) a. Una anhelo 1 b. Determinación para perseverar 3. Todo aquél que anhela y dispone su corazón para estar y permanecer en la Presencia de Dios, puede disfrutar de esta experiencia (v. 3) Ahora los hijos de Coré que servían en el templo vieron lo siguiente, que se describe en el versículo 3, que dice: "Aun el gorrión halla casa, y la golondrina nido para sí, donde poner sus polluelos, cerca de tus altares, Señor de los ejércitos, Rey mío y Dios mío". Creemos que los gorriones construyeron sus nidos en el templo de Salomón. Y el hombre que escribió este Salmo, miró hacia arriba y dijo: "Yo quiero morar aquí de la misma manera. Yo quiero vivir cerca de Dios". El Señor Jesús dijo que consideráramos los pequeños gorriones. No valen nada. En realidad, uno quisiera librarse de ellos por la forma en que cotorrean y ensucian todo. El Señor también dijo, en Mateo 10:29, "¿No se venden dos pajarillos por una monedita? Con todo, ni uno de ellos cae a tierra sin el permiso de vuestro Padre". Así que ninguno cae sin que el Padre celestial lo vea. En realidad aquí el lenguaje es aún más fuerte, porque Jesús dijo que el gorrión cae en el regazo del Padre. Él lo sabe todo acerca de sus criaturas. II. Estar y Permanecer en la Presencia de Dios lleva a una nueva dimensión espiritual (vv.4, 5, 8,11) 1. La verdadera realización personal se encuentra en Permanecer en Dios, en Su Presencia (v. 4) 2. Nuestra fortaleza en todas las circunstancias depende de Dios (v. 5 a) 3. Cuando hemos estado en la Presencia de Dios, anhelamos permanecer con Él (v. 5 b) 4. Quien está y Permanece en la Presencia de Dios, le busca en oración (v. 8) a. Lleva a Dios todas sus necesidades (v. 9) b. Encuentra Protección en Dios (v. 11) Ahora, el versículo 9, de este Salmo 84, dice: "Mira, Dios, escudo nuestro, y pon los ojos en el rostro de tu ungido". Aquí Dios fue presentado como nuestro refugio. Pon los ojos en el rostro de tu ungido, el Mesías. Y la referencia al ungido se refiere al Mesías, al Cristo, que reveló el rostro de Dios sobre la tierra. El santuario, como vimos en el Levítico, era el centro mismo de la vida de Israel. Antes, la Iglesia, era el centro de la actividad social en muchos países. Y ahora ni siquiera es el centro de la vida religiosa, pero debería serlo. Escuchemos lo que dice el versículo 10: "Mejor es un día en tus atrios que mil fuera de ellos. Escogería antes estar a la puerta de la casa de mi Dios que habitar donde reside la maldad" 2 Y eso fue precisamente lo que los hijos de Coré eran, los porteros. Preferían cuidar la entrada de la casa de Dios que habitar entre los que vivían lejos de Dios. Estimado oyente, le deseamos a usted la experiencia de todos aquellos que amaban a Dios y confiaban en Él. Hoy usted puede acercarse a Dios por medio del Señor Jesucristo. Y esta vivencia está bien descrita en los versículos 5 al 7 de este Salmo 84, que dicen según otra traducción: "Dichoso el que tiene en ti su fortaleza, que solo piensa en recorrer tus sendas. Cuando pasa por el valle de las lágrimas lo convierte en región de manantiales; también las lluvias tempranas cubren de bendiciones el valle. Según avanzan los peregrinos, cobran más fuerzas, y en Sión se presentan ante el Dios de dioses". III. Estar y Permanecer en Dios nos trae bendiciones y crecimiento espiritual (vv. 7, 9, 12) 1. Las circunstancias adversas y los obstáculos no vencen a quienes están y permanece en la Presencia de Dios (v. 7 a) 2. Quien está y permanece en la Presencia de Dios, disfruta realmente de intimidad con Él (v. 7 b) 3. Dios le muestra su bondad y protección a quien está y permanece en la Presencia de Dios (v. 9) 4. Dios bendice a los que confían en Él (v. 12) Conclusión: Lo maravilloso cuando desarrollamos intimidad con Dios, no es solamente estar sino Permanecer en la presencia de Dios. Es algo que no se puede explicar con Palabras, sino que se vivencia. Estar y Permanecer, que son dos cosas distintas, porque quien estuvo puede que no haya permanecido en la Presencia, pero quien dispone su corazón, sin duda podrá disfrutar de esa Permanencia. Hoy es el día para tomar una decisión que marque su vida para siempre y le permita desarrollar intimidad constante con Dios. 3