220-0456 Ref: Capacidad para suscribir contratos- Quórum Deliberativo y Mayorías decisorias: Se recibió su comunicación radicada bajo el número 480461, mediante la cual solicita que se le aclaren las siguientes inquietudes jurídicas: l. Siendo el Revisor Fiscal nombrado por la Asamblea General de Accionistas y el Representante Legal nombrado por la Junta Directiva, la pregunta se concreta en determinar cual es la persona que en representación de la empresa debe firmar los respectivos contratos. 2. Si los socios que no estuvieron presentes al inicio de la reunión, pueden participar en las discusiones y votar las propuestas. 3. Si habiendo un quórum determinado al inicio de la reunión, al tiempo de votar las propuestas se ha disminuido porque algunos socios se ausentaron , la inquietud que se presenta es establecer si las personas que se quedaron en la reunión pueden votar y tomar las decisiones sobre las propuestas presentadas. o si se requiere que cada vez que se apruebe una propuesta se verifique el quórum. El primer interrogante relacionado con la firma del contrato de la persona designada para desempeñarse como Revisor Fiscal por parte del máximo órgano social, se resuelve muy sencillamente respondiendo que su firma le corresponde al representante legal , por ser éste la persona encargada de suscribir los actos y contratos que la sociedad realiza para cumplir los estatutos y la ley. Sin embargo valga advertir que la calidad se otorga no por la firma del contrato sino por la elección que conforme a la ley y los estatutos haga el máximo órgano social debidamente aceptada por quien ha sido designado para ejercer el órgano fiscalizador. En cuanto al nombramiento del gerente, en este caso designado por la Junta Directiva, la vinculación se encuentra sustentada por el acta del órgano en quien se encuentra radicada la competencia para elegirlo, junto con aceptación, los cuales adicionalmente permiten la inscripción en el registro mercantil con la cual adquiere la representación de la compañía a la vez que le es deferido el ejercicio de su cargo. No obstante, si se hace necesario la firma de un contrato entre la sociedad y la persona natural o jurídica nombrada para tal fin, quien debe suscribirlo es el órgano que estatutariamente tenga tal facultad, que eventualmente puede ser la junta directiva. En ausencia de disposición sobre este particular, quien está llamado a suscribirlo es el representante legal inscrito en el registro mercantil. Si ya se ha producido la inscripción del nuevo nombramiento la suscripción puede hacerlo la misma persona en su doble calidad de contratante y contratista; sin embargo, debe tenerse en cuenta que no es el contrato el documento idóneo para probar la designación sino que lo sigue siendo el acta del órgano competente junto con la aceptación de quien ha resultado elegido; consideración esta última que aplica igualmente para el caso del revisor fiscal. Así mismo, para responder los dos últimos interrogantes me permito manifestarle que el artículo 427 del Código de Comercio modificado por el artículo 68 de la ley 222 de 1995, al consagrar lo relativo a Quórum y mayorías decisorias dispuso lo siguiente: " la asamblea deliberará con un número plural de socios que represente , por lo menos la mitad más una de las acciones suscritas , salvo que en los estatutos se pacte un quórum inferior. Con excepción de las mayorías decisorias señaladas en los artículos 155, 420 numeral 5y 455 del Código de Comercio , las decisiones se tomarán por mayoría de votos presentes . En los estatutos de las sociedades que no negocien sus acciones sus acciones en el mercado público de valores , podrá pactarse un quórum diferente o mayorías superiores a las indicadas." De la norma legal invocada se infiere que son dos los presupuestos que deben darse: 1. Un número plural de personas .2. Los asociados reunidos representen un porcentaje igual al indicado en los estatutos o en su defecto, por lo menos, la mitad más una de las acciones suscritas. Por tanto, la falta de uno cualquiera de tales requisitos origina la imposibilidad para que la asamblea pueda tomar decisiones, ya que al no conformarse debidamente el quórum deliberativo, las decisiones que en tales circunstancias llegaren a tomarse serían ineficaces a la luz de los artículos 190 y 433 del Código de Comercio , esto es que no producirán efecto alguno sin necesidad de declaración judicial, de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 897 ibídem. Prepuestos que legitiman a la asamblea para deliberar y decidir y que deben permanecer en el transcurso de la reunión, de tal manera que si como consecuencia del retiro de uno o vario de los socios desaparece el porcentaje requerido para deliberar, el órgano rector no puede permanecer en asamblea y la misma habrá de darse por terminada; pero si los accionistas presentes permiten deliberar pero no decidir, ocurre entonces que la asamblea podrá mantener su reunión para discutir los temas del día pero sobre ellos no podrá adoptar decisión alguna. Desde luego, si se restablece el quórum decisorio, nada se opone para que los accionistas que lleguen con posterioridad participen y voten las decisiones En cuanto a las disposiciones sobre quórum deliberativo y decisorio el doctor Jose Ignacio Narvaez en su obra "Teoría General de las Sociedades " en la página 245, manifiesta: " Estas disposiciones legales ciertamente supletivas de la voluntad social que se condensa en los estatutos, estructuran la bifurcación entre quórum para deliberar , o sea el mínimo de asociados o de porciones de capital que se requieren para que el cuerpo colegiado abra la sesión; y quórum para decidir , que es la mayoría de votos necesaria para aprobar válidamente cualquier resolución . El quórum decisorio supone siempre el deliberativo ,pero no a la inversa , pues puede acontecer que haya quórum para deliberar y no para decidir", como ocurre cuando disponen las partes o el legislador exige la presencia de un quórum especial para adoptar alguna decisión en particular. Por lo expresado, se reitera que si al momento de discutir las propuestas y votar las decisiones los socios que se ausentan desintegran el quórum mínimo para deliberar, debe darse por finalizada la reunión por desaparecer uno de los presupuestos de validez de la reunión, de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 190 del Código de Comercio. Así que en la reunión habrá de tenerse especial cuidado al momento de adoptar una decisión para no incurrir en un vicio tal que la haga ineficaz, como consecuencia de haber sido tomada por un mayoría inferior a la requerida o por que ni siquiera podrían ya estar reunidos como consecuencia de no existir un porcentaje necesario para deliberar. En los anteriores términos se da respuesta a la consulta formulada advirtiendo que la misma tiene el alcance señalado en el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo.