Unidad 3. Composición del grupo elaborador y conflictos de interés

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Unidad 3.
Composición del grupo elaborador y conflictos de interés
1.
¿Qué equipos se forman para la elaboración de una guía?
En torno a la elaboración de una guía de práctica clínica o de políticas de salud,
es necesario distinguir distintos grupos que pueden co-existir y trabajar juntos
en torno a este documento. La elaboración de una guía siempre representa un
trabajo en equipo, multidisciplinario. De acuerdo a la OMS, se pueden identificar
tres grupos principales(1):
-
Grupo o institución que encomienda o encarga la guía
Grupo de revisión externa (consulta externa)
Grupo elaborador o desarrollador
En la tabla 3.1 se describen las características, tareas y funciones principales de
los grupos que participan en la producción de una guía. Si bien la estructura que
aquí se propone es una de las que se puede encontrar con más frecuencia, la
necesidad de contar con una guía puede surgir en los más diversos escenarios, ya
sea una necesidad nacional, liderada por Ministerios de Salud o agencias
vinculadas, a nivel local, en una institución hospitalaria, o instituciones privadas
como los seguros privados de salud. Estos distintos escenarios pueden
determinar distintas configuraciones para los grupos arriba citados.
Tabla 3.1 Características, tareas y funciones principales de los grupos
involucrados en la producción de una guía
Grupo
que Grupo
de
revisión Grupo elaborador
encomienda
la externa
o desarrollador
guía
Características - Primer grupo que - Grupo compuesto por
- Equipo
debe formarse
miembros con un interés multidisciplinario
- Elegido por la
directo en el tema de la
de expertos
institución que
guía
externos, a quienes
encomienda la guía - Puede estar compuesto
se encomienda la
- Puede incluir
por muchos subgrupos de elaboración de
miembros de la
interesados (agrupaciones recomendaciones
institución que
de pacientes, sociedades
basadas en
encomienda la guía científicas y profesionales, evidencia
etc.)
Número de
miembros
No más de 10
personas
Tantos grupos como
actores interesados se
identifiquen
Entre 10 a 20
personas
Principales
tareas
- Identificar la
necesidad de
elaborar una guía
- Definir el alcance
de la guía
- Iniciar la
formación del
grupo elaborador
- Revisión y
aprobación
manuscrito final de
la guía
- Ayudar a la construcción
de las preguntas en
formato PICO (pacientes o
población, intervención,
comparación, desenlace
(outcome)
- Revisar secciones o todo
el documento
- Revisar el borrador de
las recomendaciones
- Formulación de
las preguntas de la
guía
- Determina la
importancia de los
desenlaces
- Aconseja al grupo
que encomienda la
guía respecto de su
alcance
- Evalúa
críticamente la
evidencia que se
usará para
informar las
recomendaciones
- Preparar
resúmenes de
evidencia para la
elaboración de
recomendaciones
- Evaluar e
incorporar los
comentarios
provenientes del
grupo de revisión
externa
- Formular las
recomendaciones
finales
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el grupo elaborador de la guía
debe estar conformado, idealmente, por entre 8 y 12 individuos, ser
multidisciplinario, y debe representar a los distintos actores interesados y
afectados por el tópico que la guía abarca. Entre los miembros de este equipo
deben considerarse a profesionales de la salud vinculados al tema de la guía
(clínicos generales y/o especialistas), expertos en la patología o problema de
salud que suscita la guía,
salubristas, potenciales usuarios de las
recomendaciones, pacientes que padecen o están en riesgo de padecer la
enfermedad o condición en cuestión, etc (1). Por lo tanto, el grupo desarrollador
estaría conformado por dos subgrupos: 1) grupo técnico a cargo del manejo de la
evidencia (análisis crítico, preparación de resúmenes de evidencia, consejo en la
interpretación de resultados y formulación de recomendaciones), y 2) Panel de
expertos en el tema que origina la guía (expertos en un área clínica, salud
pública, economía de salud, etc.) En ciertos escenarios es posible que
representantes de la institución que encomienda la elaboración de la guía,
formen parte del panel que formulará las recomendaciones.
La elaboración de una guía que fundamenta sus recomendaciones en evidencia
científica requiere también el apoyo técnico de distintos profesionales expertos
en la conducción de revisiones sistemáticas, documentalistas (experto en la
búsqueda de evidencia científica), economistas, profesionales en el área de la
salud pública, epidemiólogos, entre otros. La OMS también sugiere la inclusión
de un metodólogo como parte fundamental del equipo de trabajo.
Para que todo este equipo funcione en forma armónica, es necesario contar con
un líder que presida el equipo elaborador de la guía.
El principal rol que juega quien dirige el equipo elaborador es
facilitar la interacción entre los distintos miembros del grupo de
trabajo, de manera que el proceso se lleve a cabo en un ambiente
de colaboración, manteniendo un balance en el grado de
participación de cada uno de los miembros(2).
Este líder debe, idealmente, contar con conocimientos generales en todas las
áreas vinculadas al desarrollo de la guía, de manera que pueda interactuar con
cada uno de los participantes del grupo de trabajo. Para más detalles sobre el rol
de quien dirija el grupo elaborador, ver tabla 3.2.
Tabla 3.2 Roles clave y funciones que debe asumir el líder del grupo elaborador
de una guía
El líder del grupo elaborador necesita conocimientos sobre la guía a desarrollar:
-
Tener un conocimiento profundo sobre el enfoque de la guía y los temas que se
discuten en las reuniones del grupo elaborador
Conocer en profundidad las potencialidades y habilidades de los miembros del
grupo elaborador
Para coordinar y facilitar el funcionamiento del grupo de trabajo debe:
-
Establecer la reglas sobre cómo operará el grupo desarrollador de la guía
Asistir en la planificación de las reuniones que tendrá el grupo elaborador
Generar un clima de confianza y mutuo respeto entre los miembros del grupo
Ofrecer oportunidades a todos los miembros del grupo para contribuir a la
discusión y actividades, cada uno desde su perspectiva
De ser necesario, reunirse en privado con algunos miembros del grupo fuera de
las reuniones generales planificadas
Durante las reuniones del grupo elaborador debe:
-
Asegurarse que todos los miembros declaren cualquier tipo de conflicto de
interés y manejarlo de acuerdo a criterios establecidos
Encausar la discusión durante las reuniones siguiendo una agenda preestablecida
-
Mantener la discusión durante las reuniones unificada, evitando subconversaciones o la dominancia de un solo miembro del grupo
Promover el debate constructivo, sin forzar los acuerdos
Evitar las discusiones repetitivas de temas ya resueltos
Resumir los puntos principales y las decisiones más importantes que derivaron
del debate
Dar la aprobación final a las minutas de las reuniones una vez que éstas sean
aprobadas por el grupo de trabajo.
Son deberes de quien preside el grupo elaborador:
-
Aprobar el manuscrito final de la guía
Encargarse de clarificar comentarios y sugerencias que provengan de los actores
interesados en la guía a quienes se les ha solicitado su opinión
2.
¿Cómo configurar un panel de expertos para orientar el desarrollo de
la guía?
Fretheim et al.(3), realizaron una revisión sistemática de la literatura con el
objetivo de encontrar evidencia que oriente respecto de cuál debe ser la
composición del grupo que elaborará las recomendaciones. Sólo encontraron un
artículo que reportó que la variabilidad dentro del grupo que elabora las
recomendaciones puede llevar a diferencias de juicio frente a la misma evidencia
disponible(4). Concretamente, aquellos miembros vinculados a una especialidad
clínica en particular se muestran más inclinados a defender el uso de técnicas o
intervenciones que se asocian a su especialidad. Si bien Fretheim et al.(3) no
encontraron estudios respecto del impacto de la composición del grupo al
momento de formular recomendaciones en el ámbito de la salud pública y
sistemas de salud, hay evidencia indirecta que sugiere que recomendaciones
hechas por expertos en esta área tienden a ser inconsistentes respecto de la
evidencia científica disponible(5).
Si bien promover la diversidad y multidisciplinariedad del panel no
necesariamente asegura recomendaciones de mejor calidad, el Instituto de
Medicina de los Estados Unidos recomienda la variabilidad dentro del panel
como una forma de neutralizar posibles sesgos a nivel individual(6). Por otro
lado, la heterogeneidad dentro del grupo puede tener algunas consecuencias
adversas, especialmente a la hora de generar acuerdos y solucionar conflictos
entre visiones distintas, a veces difíciles de conciliar(4). Para ver
recomendaciones generales sobre la configuración del panel de expertos basadas
en la literatura y la experiencia de grupos elaboradores de guías(3), ver tabla 3.3
Tabla 3.3 Sugerencias para la configuración del panel de expertos (3)
- Los grupos que elaboran guías y recomendaciones deben ser multidisciplinarios
desde el punto de vista técnico, e incluir a todos los actores interesados,
profesionales de la salud en el tema de la guía, tomadores de decisiones,
consumidores, entre otros
- La elección del líder del grupo elaborador es crítica, ya que este tiene la
responsabilidad de generar un ambiente armónico de trabajo, donde cada
miembro puede expresar su opinión y ser escuchado
-
-
El grupo debe incluir o contar con los servicios de profesionales con
conocimiento en manejo de información y bases de datos biomédicas, revisiones
sistemáticas, economía de la salud, redacción, edición de documentos escritos,
etc.
Ya que muchos miembros del panel no estarán familiarizados con la metodología
y el proceso a seguir para la elaboración de una guía, se les debe ofrecer
entrenamiento y apoyo de manera de asegurar que todos están en pleno
conocimiento y comprenden la evidencia que informará las recomendaciones,
para permitir así una participación activa de todos sus miembros.
3.
¿Por qué es necesario que el equipo de trabajo represente a los
distintos actores interesados en la guía?
El grado de representatividad que se logre en la configuración del grupo
elaborador afectará directamente la pertinencia y utilidad de las
recomendaciones que se obtendrán al final del proceso. En ciertas
oportunidades, y dependiendo del tópico de la guía, es posible que esta
representatividad se extienda a ámbitos como la localización geográfica, género,
nivel socioeconómico, etnia, entre otros (3). Un reporte del Instituto de Medicina
de los Estados Unidos defiende la multidisciplinariedad dentro de los grupos que
elaboran la guía por tres razones(7):
a) Aumenta la probabilidad de que toda la evidencia disponible sea
localizada y evaluada críticamente
b) Facilita la identificación y solución de problemas prácticos que podrían
suscitarse con el uso de la guía
c) Favorece la creación de un sentido de pertenencia del producto final
obtenido, que facilitaría su aceptación entre los distintos actores
interesados
Actividad 3.1:
Se le ha encomendado la realización de una guía nacional sobre
el diagnóstico, tratamiento, y la prevención de la tuberculosis y
debe realizar una propuesta para configurar el grupo elaborador
y de revisión externa de la guía.
Realice una lista de profesionales y actores interesados para
llevar a cabo esta tarea desde el punto de vista de las
competencias y habilidades requeridas, tema y alcances de la
guía:
Grupo elaborador:
1.
2.
3….
Grupo de revisión externa
1.
2.
3….
Escriba la lista en un documento con cualquier procesador de
textos y luego súbalo en la sección de “Tareas 3.1 Parte A”.
Luego de realizar la lista de profesionales y actores interesados,
compárela con la presentada en la guía (la encontrará en
“Material Complementario” en el archivo “Actividad 3.1 Guía
tuberculosis - España”): Grupo de trabajo de la Guía de Práctica
Clínica sobre el Diagnóstico, el Tratamiento y la Prevención de la
Tuberculosis. Centro Cochrane Iberoamericano, coordinador.
Guía de Práctica Clínica sobre el Diagnóstico, el Tratamiento y la
Prevención de la Tuberculosis. Plan de Calidad para el Sistema
Nacional de Salud del Ministerio de Sanidad, Política Social e
Igualdad. Agència d´Informació, Avaluació i Qualitat en Salut
(AIAQS) de Cataluña; 2009. Guías de Práctica Clínica en el SNS:
AATRM Nº 2007/26.
Finalmente compare la lista de miembros realizada por Ud. con
aquella presentada en la referencia citada. Además, evalúe la
forma en que los autores de la guía citada reportaron la
configuración del equipo elaborador, y de revisión externa.
Suba en “Tarea 3.1 Parte B” un nuevo archivo respondiendo a las
siguientes preguntas:
¿Se ha incluido a todos los actores interesados en el tema
particular de esta guía?, ¿Qué discrepancias observa entre la lista
de miembros propuesta por usted y aquella presentada en la
guía?
4.
¿Cómo manejar y reportar potenciales conflictos de interés de los
desarrolladores de la guía?
La OMS define un conflicto de interés como cualquier tipo de
interés que tenga un experto miembro de cualquiera de los grupos
involucrados en el desarrollo de la guía (grupo que encomienda la
guía, grupo elaborador, panel de expertos, grupo de revisión
externa) que puede afectar o ser percibido como un factor que
afectaría el juicio objetivo y la independencia del consejo y aportes
que este miembro del grupo haga(1).
En otras palabra, el conflicto de interés “se produce en aquellas circunstancias
en que el juicio profesional sobre un interés primario, como la seguridad de los
pacientes o la validez de la investigación, puede estar influenciado en exceso por
otro interés secundario, sea éste un beneficio financiero, de prestigio y
promoción personal o profesional.”(8)
Se desprende del párrafo anterior que el conflicto de interés existe y puede
sospecharse independientemente que el profesional bajo cuestionamiento
considere que tal conflicto no afecta en absoluto su criterio científico u opinión
personal.
Los conflictos en el contexto de las guías pueden ser de dos tipos(8):
-
Intereses personales: existe una relación entre un miembro del grupo y
una entidad externa de la cual ha recibido honorarios o beneficios
individuales o personales.
-
Intereses no personales: existe una relación de financiación entre un
departamento o unidad que se encuentra bajo responsabilidad de uno de
los miembros del grupo y una entidad externa, sin que esté último perciba
un beneficio personal.
La declaración de intereses debe realizarse en etapas iniciales de la
configuración del grupo elaborador, del panel de expertos y del grupo de
revisión externa. Habiéndose recolectado esta información, el grupo que
encomienda la guía debe determinar la cuantía y severidad de los conflictos de
interés reportados por los profesionales invitados a participar del proceso(9). El
objetivo final es que el líder y la mayoría de los miembros del grupo elaborador
estén libres de conflictos de interés.
Respecto de las potenciales interacciones financieras que hayan establecido
miembros del grupo que desarrolla la guía con instituciones externas como por
ejemplo, la industria farmacéutica y las agencias de tecnologías sanitarias, se
pueden numerar los siguientes escenarios de potencial conflicto de interés:
-
Ser accionista o tener intereses económicos vinculados a una compañía
farmacéutica o elaboradora de equipamiento médico.
Estar contratado como consultor experto para una compañía
farmacéutica.
-
Recibir cualquier tipo de apoyo en recursos y/o financiación para el
desarrollo de investigación de entidades privadas o de la industria
farmacéutica.
-
Recibir financiación de programas de educación continua o actividades de
formación.
-
Recibir honorarios como ponente en una reunión organizada por la
industria farmacéutica o alguna compañía que fabrica equipamiento
médico.
-
Recibir apoyo económico para acudir a reuniones y congresos locales e
internacionales (costos de inscripción, pasajes aéreos, viáticos, estadía,
etc.)
Si bien los intereses numerados representan situaciones que pueden
potencialmente transformarse en conflictos de interés, esto no significa que
efectivamente el profesional que los declara tiene intereses secundarios por
sobre los que orientan el desarrollo de la guía. A continuación se enumeran
algunas circunstancias en las que se puede con claridad establecer la existencia
de conflictos de interés(1, 10):
-
-
-
-
Obtener beneficios económicos de una compañía farmacéutica que fabrica
un producto o una tecnología que puede ser recomendada en la guía como
útil.
Tener derechos de patente sobre un producto o tecnología que puede ser
recomendada en la guía.
Tener miembros del grupo familiar que trabajan para una compañía que
fabrica un producto o una tecnología que está en dentro las posibles
recomendaciones que la guía haga.
Conducir en la actualidad o en el pasado, una línea de investigación o
cualquier otro tipo de trabajo académico relevante sobre un producto o
tecnología que puede ser considerado en alguna de las recomendaciones
de la guía, incluyendo ensayos clínicos y/o revisiones sistemáticas.
Recibir financiamiento, ser empleado, consultor, consejero, conferencista,
o líder de opinión para una compañía con un interés específico en algún
producto que se encuentra dentro de las potenciales alternativas
terapéuticas que la guía contempla.
El juicio sobre los intereses declarados por los miembros de los grupos a
configurar debe hacerse caso a caso. Si se determina que alguno de los miembros
del grupo de trabajo o de revisión externa tiene claros conflictos de interés que
podrían atentar y sesgar los resultados del proceso de desarrollo de la guía y sus
recomendaciones, se le puede solicitar al dicho miembro que no participe en
alguna instancia específica de decisión que esté en directa relación con el
conflicto declarado. En el caso que se determine que los conflictos de interés
reportados por uno o más miembros atentan severamente contra la integridad
de la guía, exista la opción de solicitarle que abandone el equipo de trabajo.
Los conflictos de interés declarados deben ser dados a conocer ampliamente a
todo el grupo elaborador y a quienes encomendaron la realización de la guía.
Este debe ser uno de los primeros puntos a tratar durante las reuniones iniciales
de todo el proceso, de manera que cada uno de los miembros esté al tanto de
todos los potenciales conflictos de interés. Así mismo, la guía debe contemplar
una sección especial que declare todo tipo de conflicto de interés establecido
antes, durante y al final del proceso de desarrollo de la guía. Para más detalle
sobre la declaración de conflicto de interés en el documento final de la guía, ver
el ejemplo citado en la actividad 3.2.
Actividad 3.2:
1. Toda guía clínica debe incorporar una sección dedicada a la
declaración de conflictos de interés de los distintos grupos de
trabajo en torno a la guía.
En la sección de “Material Complementario” (nombre del archivo:
Actividad 3.2 Declaración de interés.pdf) encontrará a modo de
ejemplo la declaración de interés realizada por el grupo de
trabajo de la Guía de Práctica Clínica sobre el Diagnóstico, el
Tratamiento y la Prevención de la Tuberculosis citado en la
actividad
A partir de este documento, determine:
-
¿Le parece que el reporte de potenciales conflictos de
interés fue claro y permite al lector hacerse una idea del
riesgo de que este tipo de intereses hayan afectado el
desarrollo de la guía?
2. Busque una guía de su área de interés, ya sea clínico o de
políticas de salud, y diríjase a la sección de declaración de
conflicto de interés. Compare la información entregada en la guía
que usted eligió con aquella analizada en la pregunta anterior:
-
¿Cuál le parece que ha hecho un mejor trabajo dando a
conocer los conflictos de interés dentro de los grupos que
colaboran en el desarrollo de la guía ?
Una vez respondidas estas preguntas suba las mismas en la sección
“Tareas 3.2”
En el anexo 1 se adjunta a modo de ejemplo el formulario de declaración de
conflicto de interés para expertos asesores, elaborado por la Organización
Mundial de la Salud. En este documento se solicita explicitar cualquier tipo de
conflicto de interés actual y durante los últimos 4 años de ejercicio profesional
5.
¿Cómo proceder cuando se ha definido la existencia de potenciales
conflictos de interés entre los miembros del grupo colaborando en la
elaboración de la guía?
Si se ha definido que algunos de los miembros que participarán de la elaboración
de la guía presentan un conflicto de interés considerado como potencialmente
significativo, la OMS propone seguir alguno de los 3 cursos de acción que se
describen a continuación (11):
a. Participación condicional: Cuando el conflicto de interés es definido
como de menor importancia, es posible que ese miembro siga
participando del proceso. Sin embargo, el líder del equipo elaborador
debe hacer público el conflicto de interés detectado, reportándolo
explícitamente al resto del grupo elaborador, y debe registrase además en
todos los documentos producidos en el proceso, incluido el manuscrito
final de la guía.
b. Exclusión parcial: En este caso, las atribuciones del experto
considerado bajo conflicto de interés son limitadas: i) Se le excluye sólo
de aquellas reuniones en las que se considera que su conflicto puede
influir en la toma de decisiones, y/o ii) Se le excluye de todas las
reuniones en las que se tomen decisiones relevantes, indistintamente de
su relación con el conflicto de interés detectado (Elaboración de
preguntas y recomendaciones). Cuando este curso de acción es elegido,
debe ponerse especial atención a la interacción entre el miembro con
conflicto de interés y el resto del equipo, y debe reportarse en cualquier
documento producido en el contexto de la guía.
c. Exclusión total: Esta situación ocurre cuando el experto declara un
conflicto de interés realmente significativo y que puede acarrear un sesgo
considerable a la hora de desarrollar la guía. Este miembro del grupo es
removido de su cargo dentro del grupo elaborador y no se le permite la
asistencia a ninguna de las reuniones de trabajo.
Para profundizar más en la declaración y manejo de conflictos de interés, se
siguiere consultar la “Guía para la Declaración de Conflictos de Interés” de la OMS,
que puede descargarse en el siguiente link: http://keionline.org/node/1062.
Actividad 3.3
Para el desarrollo de esta actividad, se adjunta una porción de
manuscrito de la guía OMS “Administración neonatal de
suplementos de vitamina A” (2011) que la encontrará en el
archivo “Actividad 3.3 Guía vit A .pdf” dentro de material
complementario.
A partir de la información disponible, responda las siguientes
preguntas y súbalas en la sección “Tarea 3.3”:
1. A su juicio, ¿Cuál es la calidad del reporte de potenciales
conflictos de interés en esta guía?, ¿Es el reporte claro y permite
al lector hacerse una idea del riesgo de que este tipo de intereses
hayan afectado el desarrollo de la guía y la formulación de
recomendaciones? Justifique su respuesta
2. ¿Existe alguna otra entidad financiadora aparte de OMS? De
ser afirmativa su respuesta, ¿se declara que la entidad
financiadora no influyó en el contenido de la guía? Justifique su
respuesta
3. ¿Qué medidas se tomaron para minimizar la influencia de los
conflictos de interés en el desarrollo de la guía o la formulación
de las recomendaciones?, ¿Le parece que estas medidas son
suficientes?
4. Diríjase a la sección “gestión de los conflictos de interés”
(página 9 de la guía). Allí se nombran una serie de colaboradores
que declaran potenciales conflictos de interés.
¿Le parece que los conflictos descritos podrían influir en la forma
en que estos miembros del grupo elaborador toman decisiones
dentro del proceso?
Justifique su respuesta refiriéndose particularmente a:
1) la relación con la industria farmacéutica, y
2) su participación como investigadores líderes en el área con el
interés de que los resultados de sus estudios sean considerados
(conflicto de interés intelectual)
5. ¿Cuál es la política implementada para el manejo de conflictos
de interés de especialistas externos?, ¿Le parece apropiada esta
política? Justifique su respuesta
6.
¿Cómo y en qué etapas del proceso de desarrollo de la guía deben
incorporarse las perspectivas de los pacientes y otros actores involucrados?
La incorporación de pacientes y público a quien la guía va enfocada es un tema
de creciente prioridad tanto en la literatura médica como para las agencias
desarrolladoras de guías. Si bien estos actores tienen distintas instancias para
interactuar y entregar su punto de vista al grupo elaborador, existen tres
estrategias generales que se fundamentan en el flujo de información que
comparten el grupo desarrollador y el público(12):
1) Consulta: esta estrategia implica la recolección de información de parte de los
pacientes y público en general. Esto puede llevarse a cabo a través de encuestas,
entrevistas, otro tipo de estudios primarios, o el uso de revisiones sistemáticas
que informan sobre las perspectivas del grupo de interés. Este tipo de estrategias
son especialmente útiles para explorar las necesidades y expectativas que tienen
los pacientes u otros actores directamente vinculados con la guía en desarrollo,
de manera masiva. Cuando es implementada en etapas tempranas del desarrollo
de la guía, esta estrategia permite focalizar e incorporar temas que parecen
prioritarios para el público.
Por otro lado, el proceso de consulta externa tiene también como objetivo
fortalecer el grado de representatividad de la guía a desarrollar. La perspectiva
de actores externos al grupo elaborador viene a complementar a aquella
presentada por miembros del propio grupo desarrollador. Este proceso de
consulta abarca todos los ámbitos de la guía e informa a cada uno de los pasos
del proceso de desarrollo(3):
a) Identificar y establecer prioridades para el desarrollo de guías y
recomendaciones
b) Ayudar a precisar los alcances de la guía y las recomendaciones
c) Comentar sobre la evidencia que se usará para informar la guía y sus
recomendaciones
d) Comentar sobre los planes propuestos para facilitar la diseminación,
adaptación e implementación de una guía y sus recomendaciones
e) Ayudar a establecer una agenda de investigación prioritaria a partir de los
resultados de la recolección de la evidencia que informará las
recomendaciones
2) Participación: estas estrategias involucran el intercambio activo de
información entre quienes desarrollan la guía y el público o los pacientes. Esta
participación se lleva a cabo, entre otras formas, incluyendo en el grupo
elaborador de la guía a representantes de los distintos actores interesados,
escuchando sus opiniones de primera fuente, debatiendo en persona, lo que
retroalimenta y enriquece la de perspectiva de todo el grupo, generando una
visión colectiva del problema de salud que suscita la guía. Es importante destacar
que cuando esta estrategia es llevada a cabo en forma aislada y considerando un
número limitado de representantes, puede llevar a imprecisiones y atenta contra
otros grupos de interés que se vería sub representados.
3) Comunicación: las estrategias comunicacionales implican la entrega de
información a pacientes y público general para apoyar la toma de decisiones
sobre cuidados de salud a nivel individual. Estas estrategias incluyen el uso de
resúmenes simplificados del contenido de las guías, especialmente adaptados
para el público general, el uso de material educativo, entre otros. El principal
objetivo de ellas es facilitar la diseminación e implementación de las
recomendaciones de la guía. Cuando el curso de acción es claro, como en el caso
de recomendaciones fuertes a favor o en contra de una intervención, las
estrategias comunicacionales pueden influenciar favorablemente el
comportamiento de los pacientes, por ejemplo, aumentando la adherencia a
tratamiento o aconsejando en contra de hábitos nocivos para la salud. Cuando las
recomendaciones son condicionales o débiles, o se está en presencia de más de
una alternativa válida, el uso de herramientas de ayuda para la toma de
decisiones ha mostrado gran utilidad en este contexto, explicitando los pros y
contras de cada alternativa. Para más detalles sobre este tema y la incorporación
de los valores y preferencias de los pacientes en la guía, ir a la Unidad 10.
1.
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