ALTERACIONES DE LAS PLANTAS Y SUS CAUSAS En un trabajo anterior (1) nos ocupamos de los principales insectos del viñedo que originan intensas plagas en este cultivo, tan importante como típico de España. A los graves daños derivados de sus ataques hay que sumar los cuantios©s producidos por Ia acción de otros agentes que no pertenecen, como los insectos, al reino animal ; san los horigos y ' bacterias, plantas sin flores, cuyo estudio re; quiere en la mayor parte de los procesos patológicos ^el examen micr^oscópico. Además de éstos, existen otras alteraciones en las plantas cultivadas que reconocen diversas causas : condiciones intrínsecas de medio (suelo y clima) ; intoxicaciones específicas producid^s por principios nocivos difundidos en el terre(1) ^Insectos del viñedo. Seccíón de Publicaciones, Prenaa y Propaganda del Mínisierio de Agricultura, Madrid. no o atmósfera; traumatismos; virosis, y fisiológicas. Científicamente se denomina enfermedad a cualquier desviaci.ón o perturbación en la estruct'uara o f^sncionamiento normxl de las plamtas; por tanto, en este amplio concepto encajan todas las alteraciones anteriores; sin embargo, usualmente se designan con la denominación de p^xga, a los ataques de los animales--sobre todo, insectos-^cuando sobregasan los límites de área y número para ocasionar graves dafios. Asf lo aceptamos nosótros, y reservamos en el curso de este trabajo el nombre de enfermedad para designar las alteraciones que sufren las plantas bajo la acción de hongos ,y bacterías, lo mísmo que los trastornos fisiológicoa derivados de causas no parasitarias. Ning^ún cultivo como la vid ha sufrido tan importantes modificaciones, en el transcurso de un siglo, . a consecuencia de sus parásitos ; primero, el "oidio" (1845), despuéa la "filoxera" (1868) y, por último, el "mildeu" (1879), oriundoa todos de Norteamérica, fueron originando una serie de crisis económicas, cuyos paliativ^oa (azufrados, reconstitución con pies america,nos y trata^mientos cúpricos) han ido encareciendo, afio tras año, los productos de la vid, al propio tiempo que mermaban sus cosechas. De aquf se desprende la graíl importancia que reviate el conocimiento d^ las ^ufQrmedade$, al^unas de jaa cual^s afgct^n^ frecuentemente, a gran parte del 1.588.994 hectáreas de viñedo que cubren el suelo eapañol, cuya producción en 1941 se elevó a 3.458.682.931 pesetas. S^erán materia de esta divulgación las si,guientes enfermedades : "^tnildeu" (Plasynopara viticola Berlese y De Toni) ;"oidio" . (Uncinula nn,cator Burril) ; "apoplejía" o "yesca" (Stereum hirsu^tum F. var. ^zecator Viala) ; la "podredumbre de rafces" producida por el hongo Armillwria mellea Qhel., y "clorosis caliza", entre las de orig^n no parasitario.