9 Organización y diversidad de la biosfera

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BAZO
ESTRUCTURA DEL TEMA:
46.1. Generalidades.
46.2. Cápsula conjuntiva.
46.3. Pulpa blanca.
46.4. Pulpa marginal.
46.5. Pulpa roja.
46.1. GENERALIDADES
El bazo es un órgano linfoide secundario localizado en el hipocondrio izquierdo por
debajo del estómago. Macroscópicamente presenta un color rojizo. Es una estructura alargada
(12 centímetros de longitud), de morfología más o menos triangular y de un peso que oscila
desde 150 – 200 gramos.
En la zona central que se sitúa por debajo del estómago, aparece una densificación
que es el denominado hilio esplénico, que contiene vasos sanguíneos (arteria esplénica, vena
esplénica que es rama de la vena porta) y un vaso linfático eferente, ya que los vasos linfáticos
nacen directamente del tejido conjuntivo, es decir, no hay ningún vaso linfático aferente.
Es un órgano en el adulto eminentemente depurador de la sangre que se filtra a través
de él, tanto de partículas extrañas como de bacterias o virus. Es un órgano que en
determinados momentos puede tener una función hematopoyética, en casos de aplasias
medulares. Puede ser el origen de colonias eritrocitarias y granulocíticas.
Embriológicamente se desarrolla sobre la quinta semana a partir del mesénquima
esplácnico que sufre una colonización por hemocitoblastos. En esta segunda invasión se
forman granulocitos, plaquetas anucleadas, eritrocitos enucleados… La función
hematopoyética del bazo comienza aproximadamente en el segundo mes y acaba sobre el
sexto mes, cuando la médula ósea toma el control de la hematopoyesis.
Es un órgano que en teoría
es muy importante, pero que según
los cirujanos tampoco tiene tanta
importancia, porque su función
puede ser sustituida por otros
órganos cuando se extirpa, como
por ejemplo, el hígado.
Macroscópicamente,
en
una sección transversal se observa
una cápsula fibrosa que lo
envuelve. El interior aparece de
color rojizo más o menos uniforme,
esta es la pulpa roja. De forma
aislada, dentro de la pulpa roja,
encontramos nódulos de color
blanco grisáceo de forma punteada,
que se denomina pulpa blanca.
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46.2. CÁPSULA CONJUNTIVA
La cápsula conjuntiva es de tejido conjuntivo denso que presenta fibras de colágeno
organizadas, fibroblastos... En el hombre presenta algunas células musculares lisas aisladas.
En algunos animales como los perros o los gatos, las fibras musculares lisas son muy
importantes, llegando incluso a formar verdaderos fascículos musculares para contraer el
órgano y vaciar su contenido al torrente sanguíneo, sobre todo en anemias rápidas. En el ser
humano no tiene esa función.
Esta cápsula emite hacia el interior una serie de trabéculas gruesas que se ramifican.
La circulación arterial penetra por el hilio y da un plexo capsular. De este plexo capsular nacen
las arteriolas trabeculares que van a descender en el seno de las trabéculas.
46.3. PULPA BLANCA
Cuando las trabéculas llegan a su fin, estas arteriolas se ven rodeadas de tejido
linfoide, constituyéndose esos nódulos de pulpa blanca. Estos nódulos son de dos tipos:
- Difusos o primarios: los linfocitos de tipo T ocupan todo el nódulo y la arteriola se
queda en posición central.
- Secundarios: con centro germinal evidente, de predominio B. La arteria aparece situada
desplazada a uno de los extremos del nódulo.
En cualquiera de las dos situaciones los nódulos están rodeados externamente por
fibras de reticulina que son elaboradas por células reticulares, constituyendo la vaina reticular
circunferencial del nódulo linfoide.
La arteria dentro de esta pulpa blanca se divide en una serie de ramas. Algunas de
estas ramas se ven rodeadas por macrófagos, constituyendo las vainas macrofágicas
periarteriales (VMPA) en realidad son capilares discontinuos cuyos huecos ocupan los
macrófagos. Estas vainas se denominan también elipsoides por su forma elipsoidal o vainas
Schweigger-Seidel. La ramificación de la arteriola final recibe el nombre de arterias
peniciladas.
46.4. PULPA MARGINAL
Entre la pulpa blanca y los elipsoides se encuentra la pulpa marginal, constituida por
fibras de reticulina, células reticulares, macrófagos y células en tránsito que van desde los
elipsoides hacia la pulpa blanca, fundamentalmente linfocitos T y B comprometidos. Cuando las
arterias peniciladas dan el elipsoide puede acabar de dos formas:
- Pueden vaciarse en la pulpa roja, entre los cordones esplénicos de Billroth.
- Pueden vaciarse en unos sinusoides venosos que son los senos esplénicos. Estos
senos terminarán en unas pequeñas vénulas (vénulas trabeculares) que ascienden por
las trabéculas y que saldrán por el hilio en forma de vena esplénica.
Los linfáticos nacen en las trabéculas y constituyen los vasos linfáticos eferentes del
bazo.
Ese vaciamiento distinto de las arterias
peniciladas implica 2 tipos de circulación
esplénica -ambos tipos de circulación existen-:
- Circulación abierta de los cordones
esplénicos para reingresar en los senos
venosos (filtrado de la sangre).
- Circulación cerrada de los senos venosos.
Cuando vemos la estructura de los senos
venosos, vemos que tienen un diámetro de unas
30-40 micras y que las células endoteliales no son
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aplanadas, sino de morfología fusocelular, dejando unos espacios entre ellas, de unas 5 micras
de diámetro con interrupciones de la membrana basal.
En el corte transversal aparecen como elementos de morfología cilíndrica. Presentan
un estroma de fibras de reticulina muy característico, ya que se disponen rodeando en forma
de bandas a las células endoteliales, como si fueran los aros de un barril. Entre los paquetes
de fibras de reticulina encontramos células reticulares, que sintetizan esas bandas.
46.5. PULPA ROJA
La pulpa roja es lo que queda por fuera de los sinusoides. Se constituye como un
entramado de fibras de reticulina y células reticulares. En él encontramos todas las poblaciones
hematopoyéticas, ya que aunque no se especializa en ello, puede formar células sanguíneas
en determinadas situaciones. Hay colonias eritroides que formarán glóbulos rojos,
megacariocitos productores de plaquetas y hay colonias granulocíticas.
La función de filtrado fundamentalmente es para las células viejas (eritrocitos viejos que
pierden la elasticidad de la membrana y que se rompen al atravesar los espacios de los
capilares, siendo fagocitados por los macrófagos). Los macrófagos aprovechan el hierro y con
el resto del grupo hemo forman bilirrubina, que va al hígado donde es conjugada, pasando a
formar parte de los jugos biliares).
El bazo es una fuente de maduración de monocitos. Los monocitos sanguíneos
maduran muy bien dentro del ambiente esplénico. A través de la vena esplénica y por la vena
porta ingresan en la circulación hepática, donde pueden quedarse como células de Kuppfer o
bien por la vena cava llegar a los pulmones, constituyendo la población de macrófagos
pulmonares o alveolares.
En él también se produce plaquetopoyesis a partir de megacariocitos. Además pueden
almacenarlas y liberarlas en caso de procesos anémicos agudos o crónicos.
Maduran granulocitos y donde se destruyen cuando son viejos.
Es una zona donde existe una verdadera formación de respuesta inmunitaria (tanto
celular, mediada por linfocitos T, como humoral, mediada por la producción de anticuerpos
formados en las células plasmáticas formadas a partir de linfocitos B activados). Estas células
pasarán fundamentalmente a los vasos linfáticos trabeculares y de allí a la circulación linfática,
habiendo recirculación de la linfa en el territorio linfático y vascular.
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