DFW en Español

Boletín oficial de Lugares de trabajo sin drogas
mayo 2016 Vol. 15 No. 5
Publicado por el Council on Alcohol and Drugs
Tel (404) 223-2486 | Fax (866) 786-9811 | www.LiveDrugFree.org
DFW en Español
Aumenta el consumo de alcohol
El consumo de alcohol en los Estados Unidos ha
estado creciendo de manera continua desde los
años noventa. Los centros para el control de enfermedades (CDC) de Atlanta informan de que
en 2015 hubo más de 30 000 defunciones en los
Estados Unidos por causas relacionadas con el
alcohol, lo que ha situado la tasa de muertes por
abuso de alcohol en el país en su nivel más alto
desde hace treinta años. Esto ni siquiera incluye
el número de muertes ocasionadas por personas
en estado de ebriedad que sufren accidentes de
conducción o cometen homicidios, ni otros accidentes inducidos por el alcohol. El número de
víctimas mortales ascendería a 90 000 si se incluyeran también estos casos.
En los últimos años se ha hecho mucho hincapié
en las muertes por abuso de analgésicos por receta y sobredosis de heroína, pero según el CDC,
el año pasado murieron más personas por causas relacionadas con el alcohol que la suma de
las muertes por sobredosis de heroína y de analgésicos por receta. Las tasas de consumo excesivo de alcohol en los Estados Unidos están aumentando significativamente.
La Administración de Servicios de Abuso de Sustancias y Salud Mental (SAMHSA) informa de que
el número de adultos que toman alcohol cada
mes está aumentando continuamente desde hace doce años; el aumento del número de mujeres que toman alcohol cada mes o que participan
en el consumo compulsivo de alcohol (definido
como tres o más bebidas seguidas) tiene mucho
que ver con el aumento general.
¡No “todo el mundo” toma alcohol!
La industria del alcohol ha conseguido convencer
al público estadounidense de que el consumo de
alcohol es necesario para disfrutar de la vida, y
con estadísticas como las anteriores, puede parecer que “todo el mundo toma alcohol continuamente.” Lo cierto es que un 33% de los adultos
estadounidenses no consumen alcohol en absoluto, y otro 30% toma menos de una bebida a la
semana. En una encuesta realizada por los CDC
en 2013, más de un 43% de los estadounidenses
mayores de edad indicaron que no tomaron bebidas alcohólicas durante el mes anterior.
El Centro de Política y Fomento de la Nutrición
del Departamento de Agricultura Estadounidense
(USDA) llevó a cabo una encuesta para determinar cuántos adultos sobrepasan las pautas actuales del USDA en cuanto a consumo de alcohol
(no más de una bebida al día para las mujeres y
Los empleados que
consumen marihuana sufren
un 55% más de accidentes
en el lugar de trabajo!
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dos al día para los hombres). Los investigadores
reunieron datos mediante una encuesta representativa de la situación nacional, centrada en la
salud y la nutrición, con la participación de unos
5400 adultos de más de 21 años. Entre otras
cosas, se preguntó a cada uno cuánto alcohol
había tomado el día anterior. El 64% de los hombres y el 79% de las mujeres indicaron no haber
tomado alcohol en ese día, y un 18% de hombres y un 10% de mujeres lo tomaron dentro de
las pautas recomendadas.
¿Por qué hay tantas personas que optan por no
consumir alcohol? Algunos porque se están recuperando del alcoholismo, otros por motivos religiosos, y muchos porque no les gusta sentirse
“fuera de control”; también están los que desean
mantener su salud y buen estado de forma durante toda su vida y por ello evitan los efectos
adversos del consumo de alcohol. La gente suele
rodearse de personas que piensan como ellos,
así que cuando uno abusa del alcohol y/o las
drogas, frecuentemente también lo hace la mayoría de sus amigos. Este estilo de vida se autoperpetúa y a veces dificulta que uno pueda
recuperarse. No obstante, la vida con poco o
nada de alcohol ciertamente es una manera
aceptable y viable de vivir para muchos estadounidenses. Las personas que evitan el alcohol y
las drogas están ampliamente acompañadas en
ello.
Repercusiones del alcohol
La mayoría de los adultos no toma alcohol en un
día determinado, pero lo cierto es que el consumo de alcohol en los Estados Unidos supone un
problema de salud pública significativo. El consumo de alcohol tiene muchas repercusiones, especialmente cuando se consume durante mucho
tiempo en cantidades superiores a las recomendadas. Más del 3.5% de todas las muertes por
cáncer en el mundo están relacionadas con el
alcohol. Otros efectos negativos son:
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Alcoholismo
Síndrome de abstinencia del alcohol
Anemia
Pérdida de masa ósea
Daños cerebrales
Demencia
Depresión
Deficiencias en electrolitos
Síndrome de alcoholismo fetal
Insuficiencia y enfermedades cardiacas
Insomnio
Enfermedades y daños en el hígado
Pérdida de deseo sexual, impotencia
Enfermedades pulmonares
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Múltiples tipos de cáncer
Debilidad muscular
Daños en los nervios
Pancreatitis
Trastornos de la piel
Ataques
Temblores
El alcohol afecta a todos los órganos del cuerpo.
Es un depresor del sistema nervioso central que
se absorbe rápidamente desde el estómago y el
intestino delgado y pasa a la sangre. Es metabolizado en el hígado por los enzimas; sin embargo,
el hígado solamente puede metabolizar una pequeña cantidad de alcohol en un momento determinado, por lo que el resto queda circulando por
todo el cuerpo. La intensidad del efecto del alcohol en el cuerpo está directamente asociada con
la cantidad consumida.
El USDA informa de que “el consumo excesivo de
alcohol (es decir, en altas cantidades, de alto riesgo o compulsivo) no beneficia en ningún aspecto
al cuerpo, y los riesgos del consumo elevado de
alcohol son de sobra conocidos: aumenta el riesgo
de cirrosis del hígado, hipertensión, ataques, diabetes de tipo II, cáncer del tracto gastrointestinal
superior y del colon, lesiones y violencia. El consumo excesivo a lo largo del tiempo se asocia con
un aumento de peso y puede afectar a la función
cognitiva a corto y largo plazo.” En un informe de
Rasmussen de 2010, un 49% de estadounidenses
indicaron estar “bastante preocupados” por los
riesgos del consumo de alcohol y un 21% indicaron estar “muy preocupados.”
Hay demasiadas personas que no se dan cuenta
de los posibles perjuicios para su salud a largo
plazo. Si a esto le añadimos los otros problemas
ocasionados por el consumo excesivo de alcohol,
como familias destrozadas, accidentes por conducir en estado de ebriedad, intoxicación etílica,
asaltos sexuales, peleas, aumento de delitos, relaciones sexuales de riesgo, comportamiento peligroso, aumento del riesgo de cáncer de mama,
violencia, ahogamientos, lesiones por caídas y
daños en propiedades, solamente queda preguntarse: ¿por qué? ¿Por qué una persona considerada y responsable se arriesgaría a dañarse ella
misma o a otras personas solamente para poder
emborracharse?
Situaciones que requieren la abstinencia
Hay muchas circunstancias en las que no se debería tomar nunca alcohol:
● Personas incapaces de moderar su consumo.
● Personas menores de la edad legal de consumo. Aparte de ser ilegal, el consumo aumenta el riesgo de ahogamiento, accidentes automovilísticos y traumatismos, siendo todas
ellas causas comunes de muerte entre niños y adolescentes.
● Mujeres embarazadas o que podrían estarlo. El consumo durante el embarazo, especialmente en los primeros meses, puede
ocasionar consecuencias conductuales o
neurológicas adversas en los hijos. No existe ningún grado de consumo de alcohol seguro durante el embarazo.
● Personas que toman medicamentos recetados o sin receta con efectos indeseables al
combinarse con el alcohol.
● Personas con ciertas afecciones (p. ej. enfermedades del hígado, hipertrigliceridemia,
pancreatitis).
● Personas que van a manejar, manipular
maquinaria o participar en otras actividades
que requieren atención, habilidad o coordinación, o situaciones en las que las alteraciones mentales podrían ocasionar lesiones
o muertes (como en el trabajo).
El consumo compulsivo de alcohol (más de cuatro bebidas en un día para los hombres y más de
tres para mujeres o personas ancianas) aunque
solamente sea una vez puede aumentar el riesgo
por caídas, accidentes de vehículos motorizados
y otros. El consumo compulsivo de alcohol no se
limita únicamente a personas en edad universitaria, sino que existe entre personas de todas las
edades. Los mayores bebedores entre los hombres se encuentran en el intervalo de 31 a 50
años. Las mujeres más bebedoras se encuentran
entre los 51 y los 70 años.
El abuso del alcohol es una tendencia que resulta
en un perjuicio a la salud de una persona, a sus
relaciones interpersonales, o a su capacidad de
trabajar. Algunos de los signos del abuso del
alcohol son:
● Omisión de responsabilidades cruciales en
el trabajo, en clase o en casa.
● Consumo de alcohol en situaciones peligrosas, como al manejar un auto o manipular
maquinaria.
● Problemas legales relacionados con el alcohol, como arrestos por conducción en
estado de ebriedad o disputas físicas.
● La persona sigue abusando del alcohol, a
pesar de los problemas en la relación con
otras personas ocasionados o agravados
por el consumo.
● El abuso del alcohol a largo plazo puede
conducir a la dependencia del alcohol.
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