2. JUZGAR - ¿HACIA DÓNDE NOS IMPULSA EL ESPÍRITU? 1. ¿Hacia dónde nos impulsa el Espíritu en la vida de fe y de oración? a. Realizar la lectura orante de Jn15,1-11 y acoger lo que el Espíritu nos pide. b. Leer y profundizar el cap. I de la Rb y el cap. I e II de las CCGG. c. Leer y profundizar nuestros documentos: Sdp (nn. 22-27), Shc (nn.10-25), PdE (nn. 5-10). 2. ¿Hacia dónde nos impulsa el Espíritu en la vida de comunión en Fraternidad y Minoridad? a. Realizar la lectura orante de Flp 2,1-16 y acoger lo que el Espíritu nos pide. b. b. Leer y profundizar el cap. IV, V, VI e X de la Rb y el cap. III de las CCGG. c. Leer y profundizar nuestros documentos: Sdp (nn. 42-45), Shc (nn. 26-32), PdE (nn. 26-28, 31). 3. ¿Hacia dónde nos impulsa el Espíritu en la presencia y en el servicio a la Iglesia? a. Realizar la lectura orante de Lc 10,1-9 y acoger lo que el Espíritu nos pide. b. Leer y profundizar el cap. IX e XII de la Rb y el cap. V de las CCGG. c. Leer y profundizar nuestros documentos: Shc (nn. 33-38), PdE (nn. 11-12; 17-21; 25), VC (nn. 29-34), CC (nn. 5-10), EN (n. 78), RM (n. 69). 4. ¿Hacia dónde nos impulsa el Espíritu en el mundo mediante los signos de los tiempos y de los lugares? a. Realizar la lectura orante de Mt 5,1-16 y acoger lo que el Espíritu nos pide. b. Leer y profundizar el cap. III e V de la Rb y el cap. IV de las CCGG. c. Leer y profundizar en la escucha del Espíritu nuestros documentos: Sdp (nn.28-41), Shc (nn.4-6), PdE (nn. 13-16; 22-24; 29-30). d. Realizar una lectura de los signos de los tiempos que interpelan nuestro estilo de vida, nuestras presencias y nuestro servicio. 3. ACTUAR - ¿A DÓNDE QUEREMOS IR? Teniendo en cuenta nuestras posibilidades y debilidades, en la escucha de cuanto nos pide el Espíritu mediante el Evangelio, la Orden, la Iglesia y los signos de los tempos, nos preguntamos: ¿A dónde queremos ir y qué opción concreta estamos dispuestos a hacer? 1. ¿Para una vida auténtica de fe y de oración? 2. ¿Para una vida significativa de comunión en Fraternidad y Minoridad? 3. ¿Para un dinamismo misionero y evangelizador? 4. ¿Para una presencia profética en el mundo? SUBSIDIO del Definitorio General OFM para el Moratorium Nota: indicar una opción en cada ámbito PLAZO PARA ENVIAR LA SÍNTESIS FINAL Los Ministros provinciales o Custodios deberán enviar a la Secretaria de la Curia General OFM, una síntesis del itinerario, en dos o tres páginas, en el mes de noviembre de 2012. Abreviaturas: Lc= Evangelio según san Lucas; Jn= Evangelio según san Juan; Flp= Carta a los Filipenses; Rb= Regla bulada; CCGG= Constituciones Generales; Sdp= El Señor os dé la paz; Shc= El Señor nos habla en el camino; PdE= Portadores del don del Evangelio; VC= Vita Consecrata; CC= Caminar desde Cristo; EN= Evangelii Nuntiandi; RM= Redemptoris Missio. Secretaría general OFM Curia general de los Hermanos Menores Via S. Maria Mediatrice, 25 00165 Roma - ITALIA [email protected] UN ALTO EN EL CAMINO PARA DISCERNIR Teniendo en cuenta nuestra realidad, las llamadas de la Iglesia, los últimos documentos de la Orden y los signos de los tiempos, todas las Entidades de la Orden, en los próximos tres años 2010-2012, entren en un proceso de reflexión y discernimiento – partiendo de las siguientes cuestiones: ¿Dónde nos encontramos? ¿Hacia dónde queremos ir? ¿Hacia dónde nos impulsa el Espíritu? – para realizar opciones concretas que se deben emprender en un futuro próximo. (cf. CAPGEN 2009, Mandato 10) ROMA 2010 PRESENTACIÓN Queridos hermanos: ¡El Señor os dé la paz! Al presentar este breve subsidio, os invito fraternamente a acoger con seriedad cuanto ha decidido el Capítulo general de Pentecostés 2009 en relación con el moratorium. De hecho, de las respuestas que demos a las preguntas que contiene dicho subsidio dependerán en gran parte nuestro presente y nuestro futuro como portadores del don del Evangelio. Estoy plenamente convencido que el moratorium sea el momento de gracia que el Señor nos ofrece para mirar al pasado con gratitud, vivir el presente con pasión y abrazar el futuro con esperanza, y también un tiempo fuerte que tenemos a nuestra disposición para revisar nuestra vida y misión, y para reemprender el camino con renovado entusiasmo hacia nuevos modos de presencia y de testimonio (cf. PdE 10). ¡Tengamos la valentía de hacer un alto en el camino para evaluar nuestra vida y misión! No podemos ser víctimas de un verbalismo fácil o de un activismo falto de reflexión. Que el Señor, por intercesión de María Inmaculada y del seráfico padre san Francisco, nos dé lucidez y audacia para conocer y cumplir su santa voluntad. El Señor os bendiga y os guarde siempre Vuestro Ministro y siervo Fr. José Rodriguez Carballo, ofm Ministro general del Evangelio y de nuestro carisma; de encontrar el vinculo entre vida interior, vida fraterna, vida en minoridad y vida de misión evangelizadora; de reorientar nuestra vida y dar respuesta a la interpelación de nuestro tiempo. Como instrumento para el discernimiento, el Capitulo general estableció un tiempo di moratorium para todas las Entidades de la Orden, que se realizará entre el 2010 y el 2012. INDICACIONES METODOLÓGICAS • Siguiendo la metodología de Emaus (cf. Shc 4047.49), se sugiere realizar para el moratorium un proceso que tenga como referencia los siguientes momentos: ver, juzgar y actuar (cf. CapGen 1985, Documento 17-18) • Corresponde a los Ministros provinciales o a los Custodios con su Definitorio – en colaboración con el Moderador de la Formación permanente y eventualmente con ayuda externa – organizar, acompañar el itinerario del moratorium y, al final, recoger las conclusiones en una síntesis para enviar a la Curia General. • A las Provincias y Custodias que han realizado recientemente un itinerario similar, se les solicita realizar nuevamente el itinerario, para habituarse a la continua escucha, discernimiento y búsqueda de nuevas respuestas a las nuevas opciones. • El esquema de las preguntas y de las referencias a los textos es orientativo. Por tal motivo queda a la creatividad de cada Entidad ampliar el análisis, la reflexión y la elección de los textos. Roma, 1 de enero de 2010 1. VER - ¿DÓNDE NOS ENCONTRAMOS? MOTIVACIONES El Capítulo de Pentecostés 2009 propuso que se iniciara un proceso de discernimiento personal y fraterno. Se advierte la urgencia de leer e interpretar los signos de los tiempos y de los lugares a la luz 1. ¿Dónde nos encontramos en la vida de fe y de oración? a. Verificar e identificar los signos de vigor o de crisis en la fe, en la experiencia de Dios, en la vida evangélica, en la profesión de los consejos evangélicos b. Verificar la fidelidad creativa y la frecuencia respecto de los medios o las prácticas que nutren la relación con la Trinidad, el seguimiento de Jesús según el ejemplo de nuestro padre san Francisco, la experiencia espiritual (la regularidad en la meditación, la práctica de la lectura orante de la Palabra, la participación en los ejercicios espirituales, nuevas formas de oración y devoción…). 2. ¿Dónde nos encontramos en la vida de comunión en Fraternidad y Minoridad? a. Verificar e identificar los signos de la calidad de la vida fraterna, la visibilidad de la vida fraterna en comùn… b. Verificar la frecuencia en la utilización de los medios de la vida fraterna (capitulo local, proyecto de vida fraterna y misión, programa de formación permanente…). c. Verificar el estilo de vida pobre, sencillo, no consumista, respetuoso del medioambiente y solidario. d. Analizar la armonía y la coherencia entre nuestros valores carismáticos fundamentales y las estructuras, las actividades, las presencias, el estilo de vida; entre las fuerzas de la Fraternidad y el conjunto de sus actividades, estructuras y compromisos. 3. ¿Dónde nos encontramos en la Iglesia? a. Verificar el aporte específico y creativo como Hermanos Menores a la vida y la misión evangelizadora de la Iglesia local. b. Analizar si nuestras presencias, actividades y estructuras responden al modo franciscano de evangelizar en la Iglesia local y en la misión ad gentes. 4. ¿Dónde nos encontramos en el mundo? Analizar y verificar si nuestras presencias, nuestro testimonio en medio de la gente, nuestra relación con los pobres, nuestra sensibilidad a los signos de los tiempos y de los lugares, nuestro compromiso por la misión evangelizadora, por la justicia, la paz e integridad de la creación, se realizan según nuestra vocación franciscana y si son significativos para el mundo de hoy.