14:57 11/14/15 José Aguiló JOHN STUART MILL (1806-1873) Ya empezó a ver las terribles consecuencias del capitalismo industrial (pensemos en Dikens). Y ello le condujo a distingir entre dos tipos de leyes en ciencia económica. Las leyes de la producción y las leyes de la distribución. Según él las leyes de la producción venían gobernadas por la naturaleza y por la tecnología. Los hombres sólo podían ajustarse a estas leyes siendo impotentes para cambiarlas (la ley de los redimientos decrecientes). Las leyes de la distribución son un producto social y, por tanto, están sujetas al control humano de forma que la distribución de la renta existente podía ser alterada. Para este pensador la conducta de los trabajadores se podía cambiar, tan solo era necesario que el nivel de educación se elevara, ya que "poca mejoría podía esperarse en la moralidad mientras no se tenga, del incremento de las familias numerosas el mismo concepto que se tiene de la embriaguez o de otros excesos físicos". Mill puede considerarse como un utilitarista: creía que el principal objetivo de la humanidad era la consecución de la felicidad. Y que la maximización de la felicidad podía consegirse mediante la maximización de la producción de bienes. De manera que aquello que fomentase la producción era útil independientemente de que pudiera porducir sufrimientos pasajeros a algunas minorias. Su lema era: "la máxima felicidad para el máximo número". A Mill se le atribuye el primer libro de texto de economía política. Detro de la corriente utilitarista surgirá la corriente de los marginalistas, cuyo principal valedor es Willian Stanley Jevons (1835-1882) que en 1871 tuvo una gran revelación "El papel de utilidad marginal". Esta teoría señala que lo que da valor a un producto o servicio no es la satisfacción total que proporciona su uso, sino la satisfacción o goce que proporciona la última unidad (y por tanto, la menos deseada) consumida. Con estos dos autores, la fundamentación del valor pasa desde conceptos de la oferta (el trabajo incorporado) a cocepciones de la demanda (la utilidad proporcionada). La síntesis que dará lugar al nacimiento de la microeconomía moderna queda reservada para el gran Alfred Marshall. 1