M Palacio ateus Mateus (Vila Real) Información general POBLACIÓN: Vila Real, 24.500 habitantes (vila-realenses) ALTITUD: 445 m Región: Norte. Fiesta local: 13 junio, San Antonio. El Solar de Mateus se encuentra a unos 4 km al sureste de Vila Real. Es una de las más conocidas y fantásticas casas de campo de Portugal. Su visita nos permite vislumbrar la vida de la aristocracia portuguesa. La imagen puede resultarles familiar ya que se reproduce en las etiquetas de las botellas de vino Mateus Rosé , uno de los más exportados del país. En cuanto a Vila Real solo decir que la ciudad vieja se encuentra en lo alto de un promontorio por lo que puede verse a lo lejos. Tradicionalmente es una de las principales áreas comerciales del Vino de Oporto y en las últimas décadas se ha convertido también en núcleo estudiantil gracias a la Universidad de Tras-os-Montes y Alto Duero. La mayor atracción turística de la ciudad es el Palacio/Solar de Mateus. Mateus 105 Mateus e Guía d HISTORIA Lo mandó construir Antonio José Botelho Mourao, tercer Morgado ( heredero) de Mateus, en 1740. No hay seguridad sobre quien fue el arquitecto, aunque se suele atribuir al italiano Nicolau Nasoni. Este arquitecto, autor de la torre de los Clérigos en Oporto, tuvo una gran influencia en el desarrollo del barroco portugués que vivió su auge en los años de la construcción del Solar. Posiblemente intervino en la edificación de la sección central del palacio (fachada oeste) y en el diseño de la planta que recuerda al estilo de las villas privadas italianas, su lugar de origen. La discusión sobre el arquitecto tiene su importancia ya que la intervención de Nasoni confiere todavía más valor al palacio. Tras la muerte del tercer Morgado sus descendientes continúan con las obras, añadiendo nuevos edificios y mejorando lo anterior. No hay que olvidar que se trata de la residencia de una familia adinerada e importante perteneciente a la nobleza rural. La Capilla, diseñada por José Álvarez Rego, fue terminada por el 4ª Morgado. En la fachada está grabado en piedra que D. Luís António de Sousa Botelho Mourão aumentó, completó y culminó la capilla cumpliendo así la promesa hecha a sus padres. Posteriormente se construyen también otros edificios dentro de la finca como los denominados “Nova Adega “y “Barrão”. Ya en el siglo XX, se trabaja mucho en los jardines. En los años 30 la segunda Condesa de Mangualde manda plantar los situados al sur de la casa con diseño de Gomes de Amorim. En los años 50, Don Francisco de Albuquerque planta el túnel de cedros y construye en el lado norte tres estanques con diseño de Antonio Lino. También en esa década se hace el Lago, que funciona como un espejo de agua reflejando la imagen de la fachada principal. La escultura tumbada en el agua es de 1981, obra Mateus de João Cutileiro. En la actualidad el lugar es sede de la fundación 106 Mateus de Casa de Mateus, creada en 1970 por D. Francisco de Sousa Botelho de Albuquerque, Conde de Mangualde, Vila Real e Melo. El fin de la misma es preservar la casa, el estudio de su archivo y la promoción de actividades culturales, científicas y pedagógicas. Se trata de una de las fundaciones culturales más activas del país. Actúa tanto a nivel regional como nacional e internacional organizando conciertos, seminarios y todo tipo de actividades relacionadas con la música y las artes plásticas. MATEUS ROSÉ Las botellas de Mateus Rosé no se hacen aquí, no las busque. Están producidas por Sogrape company en viñedos de Beiras y no tienen más conexión con la finca que la etiqueta de las botellas. Se trata de un vino de color brillante, joven, fresco y ligeramente espumoso o burbujeante. Tiene un 11% de graduación alcohólica. Se suele tomar fresco y sirve como alternativa a una cerveza para acompañar comidas ligeras. Como curiosidad destaca que la botella, un verdadero icono del diseño, está inspirada en las cantimploras de los soldados de la Primera Guerra Mundial. El vino tuvo un rápido éxito siendo actualmente uno de los más exportados, está presente en 125 países. Es el tipo de vino que suele gustar a los que no les gusta el vino y por eso los “entendidos” dicen que ha dado mala fama a los vinos portugueses entre los que hay productos bastante mejores. VISITA Estamos en la perfecta casa solariega portuguesa. La construcción es de dimensiones generosas y con una buena distribución de espacios y funciones. Es un edificio barroco en el que los muros blancos contrastan con los remates y decoraciones de granito. Tiene una capilla familiar en el mismo estilo y una bodega, anterior a la casa e imprescindible en cualquier casa de campo de la zona. Pero sobre todo está rodeada de espléndidos jardines y viñedos. ía de GuMateus La planta del Palacio es rectangular con forma de U, formada por dos cuerpos laterales en sentido noreste/sureste y unidos entre sí por dos alas perpendiculares al nivel de las fachadas posterior y principal . Esta estructura genera dos patios el de entrada y otro interior. El efecto final es de grandiosidad y belleza tanto a nivel arquitectónico como artístico. Anexa en el lado nordeste está la Capilla de la casa, con una decoración exuberante y unas dimensiones que no desentonan con el resto de la edificación. La fachada más bella es la principal, con sus dos alas gemelas adelantándose al cuerpo principal. Una de las fotos más bonitas se consigue desde más allá del estanque con el reflejo de la fachada en el mismo. Luego hay que acercarse hasta el patio de entrada para apreciar la escalera doble cuya balaustrada hace dirigir la vista hacia el frontispicio sobre la puerta. Este queda flanqueado por estatuas clásicas y coronado por el escudo de la familia. Merece la pena dar la vuelta al edificio para ver el resto de las fachadas. Está la fachada sur con su simétrica secuencia de ventanas y balcones y la del este muy diferente de la principal. En el interior del palacio hay finos muebles y pinturas pero no tesoros especiales. Lo mejor es la biblioteca. Está habilitada como museo pero la visita es complicada ya que no admiten más de diez personas a la vez y el precio elevado para los estándares de Portugal. Lo mejor es dedicar el tiempo a recorrer los magníficos jardines que rodean la casa por el este, el sur y el oeste. Hay árboles de muchas especies incluidos cedros del Himalaya. Lo más curioso es la espectacular avenida cerrada, un túnel de árboles de más de 50 metros de largo. También hay parterres muy cuidados y ordenados y las vistas sobre los alrededores son idílicas. Información Práctica Hay una pequeña tienda de recuerdos donde se pueden comprar libros, postales, vinos, dulces y mermeladas de Casa Mateus. También hay un café para snacks y refrescos. Mateus 107