MODELO GENERAL DE CONTABILIDAD PARA EMPRESAS PRESTADORAS DE SERVICIOS PÚBLICOS EPSP1 TÍTULO III MARCO TÉCNICO DE ADOPCIÓN BASE Capítulo 3 NORMAS TÉCNICAS APLICABLES A CUENTAS DE RESULTADOS Junio de 2010 1 Coordinadores del Proyecto: Ricardo Vásquez Bernal – Socio de Baker Tilly Colombia, Wilmar Franco Franco – Gerente de Consultoría Baker Tilly Colombia, Fernanda Pérez Hernández – Senior de Consultoría Baker Tilly Colombia 1 Tabla de Contenido Contenido A. INGRESOS ORDINARIOS .............................................................................................. 4 Aplicación .......................................................................................................................... 4 Definiciones ....................................................................................................................... 4 1. Medición de los ingresos ordinarios ........................................................................... 5 2. Criterios para identificar las transacciones ................................................................. 5 3. Ingresos ordinarios por venta de bienes ..................................................................... 6 4. Ingresos ordinarios por prestación de servicios .......................................................... 7 5. Ingresos ordinarios por Intereses, regalías y dividendos ............................................. 9 6. Revelaciones ............................................................................................................ 10 B. COSTOS POR PRÉSTAMOS ........................................................................................ 11 Aplicación ........................................................................................................................ 11 Definiciones ..................................................................................................................... 11 1. Principio general de reconocimiento ........................................................................ 11 2. Costos por préstamos susceptibles de capitalización ................................................ 12 3. Inicio de la capitalización .......................................................................................... 13 4. Suspensión de la capitalización ................................................................................ 14 5. Fin de la capitalización ............................................................................................. 14 6. Revelaciones ............................................................................................................ 14 C. EFECTOS DE LAS VARIACIONES EN LAS TASAS DE CAMBIO EN MONEDA EXTRANJERA .. ................................................................................................................................. 15 Aplicación ........................................................................................................................ 15 Definiciones ..................................................................................................................... 15 1. Moneda funcional .................................................................................................... 15 2. Información en la moneda funcional de transacciones en moneda extranjera ......... 17 3. 2.1. Reconocimiento inicial ....................................................................................... 17 2.2. Medición posterior ............................................................................................ 17 2.3. Reconocimiento de diferencias en cambio ......................................................... 18 Inversión neta en un negocio en el extranjero .......................................................... 19 2 4. Procedimiento de Remedición ................................................................................. 20 5. Cambio de la moneda funcional .............................................................................. 20 6. Conversión de Estados Financieros de Negocios en el Extranjero ............................. 21 6.1. Uso de una Moneda de Presentación diferente a la moneda funcional .............. 21 6.2. Procedimiento de Conversión para Entidades cuya moneda funcional no es la moneda de una Economía hiperinflacionaria ............................................................... 21 6.3. Procedimiento de Conversión para Entidades cuya moneda funcional es la moneda de una Economía hiperinflacionaria ............................................................... 22 6.4. Tasas de cambio utilizadas para la conversión del Crédito Mercantil ................. 23 7. Venta o Disposición de un negocio en el extranjero ................................................. 23 8. Efectos impositivos de todas las diferencias en cambio ............................................ 24 9. Revelaciones ............................................................................................................ 24 3 A. INGRESOS ORDINARIOS Aplicación Esta norma debe ser aplicada por una EPSP al contabilizar ingresos procedentes de transacciones de venta de productos, prestación de servicios y el uso por parte de terceros de activos de la entidad que produzcan intereses, regalías y dividendos. Definiciones Los ingresos ordinarios corresponde a la entrada bruta de beneficios económicos, durante el periodo, surgidos en el curso de las actividades ordinarias de una entidad, siempre que tal entrada de lugar a un aumento en el patrimonio, que no esté relacionado con las contribuciones de los propietarios de ese patrimonio. Los ingresos ordinarios comprenden solamente las entradas brutas de beneficios económicos recibidos y por recibir, por parte de la entidad, por cuenta propia. Las cantidades recibidas por cuenta de terceros, tales como impuestos sobre las ventas, sobre productos o servicios, no constituyen entradas de beneficios económicos para la entidad y no producen aumentos en su patrimonio. Por tanto, tales entradas se excluirán de los ingresos ordinarios. De la misma forma, en una relación de comisión, entre un principal y un comisionista, las entradas brutas de beneficios económicos del comisionista incluyen importes recibidos por cuenta del principal, que no suponen aumentos en el patrimonio de la entidad. Los importes recibidos por cuenta del principal no constituirán ingresos ordinarios, que quedarán limitados en tal caso a los importes de las comisiones. Valor razonable: Es el importe por el cual podría ser intercambiado un activo, o cancelado un pasivo, entre compradores y vendedores interesados y debidamente informados, que realizan una transacción libre. Método de la tasa de interés efectiva. Es un método de cálculo del costo amortizado de un activo o un pasivo financieros (o de un grupo de activos o pasivos financieros) y de imputación del ingreso o gasto financiero a lo largo del período. La tasa de interés efectiva es la tasa de descuento que iguala exactamente los flujos de efectivo por cobrar o por pagar estimados a lo largo de la vida esperada del instrumento financiero (o, cuando sea adecuado, en un periodo más corto) con el valor neto en libros del activo o pasivo financiero. Para calcular la tasa de interés efectiva, una entidad estimará los flujos de efectivo teniendo en cuenta todas las condiciones contractuales del activo o pasivo financiero, pero no tendrá en cuenta las pérdidas crediticias futuras. El cálculo incluirá todas las comisiones y puntos de interés pagados o recibidos por las partes del contrato, que integren la tasa de interés efectiva. 4 1. Medición de los ingresos ordinarios La medición de los ingresos ordinarios debe hacerse utilizando el valor razonable de la contrapartida, recibida o por recibir, derivada de los mismos. El importe de los ingresos ordinarios derivados de una transacción se determina, normalmente, por acuerdo entre la entidad y el vendedor o usuario del activo. Se medirán al valor razonable de la contrapartida, recibida o por recibir, teniendo en cuenta el importe de cualquier descuento, bonificación o rebaja comercial que la entidad pueda otorgar. En la mayoría de los casos, la contrapartida revestirá la forma de efectivo u otros medios equivalentes al efectivo, y por tanto el ingreso se mide por la cantidad de efectivo u otros medios equivalentes, recibidos o por recibir. No obstante, cuando la entrada de efectivo u otros medios equivalentes se difiera en el tiempo, el valor razonable de la contrapartida puede ser menor que la cantidad nominal de efectivo cobrada o por cobrar. Por ejemplo, una EPSP puede conceder a sus clientes un crédito sin intereses o acordar la recepción de un efecto comercial, cargando una tasa de interés menor que la del mercado, como contrapartida de la venta de bienes. Cuando el acuerdo constituye efectivamente una transacción financiera, el valor razonable de la contrapartida se determinará por medio del descuento de todos los cobros futuros, utilizando una tasa de interés imputada para la actualización. La tasa de interés imputada a la operación será, de entre las dos siguientes, la que mejor se pueda determinar: a. La tasa vigente para un activo financiero similar cuya calificación crediticia sea parecida a la que tiene el cliente que lo acepta; b. La tasa de interés que iguala el valor nominal del instrumento utilizado, debidamente descontado, al precio al contado de los bienes o servicios vendidos. La diferencia entre el valor razonable y el valor nominal de la contrapartida se reconoce como ingreso financiero por intereses. Cuando se intercambien o permuten bienes o servicios por otros bienes o servicios de naturaleza similar, tal cambio no se considerará como una transacción que produce ingresos ordinarios. Cuando los bienes se vendan, o los servicios se presten, recibiendo en contrapartida bienes o servicios de naturaleza diferente, el intercambio se considera como una transacción que produce ingresos ordinarios. Tales ingresos ordinarios se miden por el valor razonable de los bienes o servicios recibidos, ajustado por cualquier eventual cantidad de efectivo u otros medios equivalentes transferidos en la operación. En el caso de no poder medir con fiabilidad el valor de los bienes o servicios recibidos, los ingresos ordinarios se medirán según el valor razonable de los bienes o servicios entregados, ajustado igualmente por cualquier eventual importe de efectivo u otros medios equivalentes al efectivo transferidos en la operación. 2. Criterios para identificar las transacciones Los criterios de reconocimiento y medición incorporados en esta norma y en el marco conceptual son usualmente aplicados por separado a cada transacción. No obstante, en determinadas 5 circunstancias es necesario aplicar dichos criterios, por separado, a los componentes identificables de una única transacción, con el fin de reflejar la sustancia de la operación. Por ejemplo, cuando el precio de venta de un producto incluye una cantidad identificable a cambio de algún servicio futuro, tal importe se diferirá y reconocerá como ingreso en el intervalo de tiempo durante el que tal servicio será ejecutado. A la inversa, el criterio de reconocimiento será de aplicación a dos o más transacciones, conjuntamente, cuando las mismas están ligadas de manera que el efecto comercial no puede ser entendido sin referencia al conjunto completo de transacciones. Por ejemplo, una EPSP puede vender bienes y, al mismo tiempo, hacer un contrato para recomprar esos bienes más tarde, con lo que se niega el efecto sustantivo de la operación, en cuyo caso las dos transacciones deben ser contabilizadas de forma conjunta. 3. Ingresos ordinarios por venta de bienes Los ingresos ordinarios procedentes de la venta de bienes deben ser reconocidos y registrados en los estados financieros cuando se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones: a. La EPSP ha transferido al comprador los riesgos y ventajas, de tipo significativo, derivados de la propiedad de los bienes; b. La EPSP no conserva para sí ninguna implicación en la gestión corriente de los bienes vendidos, en el grado usualmente asociado con la propiedad, ni retiene el control efectivo sobre los mismos; c. El importe de los ingresos ordinarios puede ser medido con fiabilidad; d. Es probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados con la transacción; y e. Los costos incurridos, o por incurrir, en relación con la transacción pueden ser medidos con fiabilidad. El proceso de evaluación de cuándo una EPSP ha transferido al comprador los riesgos y ventajas significativos, que implica la propiedad, requiere un examen de las circunstancias de la transacción. En la mayoría de los casos, la transferencia de los riesgos y ventajas de la propiedad coincidirá con la transferencia de la titularidad legal o el traspaso de la posesión al comprador. Este es el caso en la mayor parte de las ventas al por menor. En otros casos, por el contrario, la transferencia de los riesgos y las ventajas de la propiedad tendrá lugar en un momento diferente del correspondiente a la transferencia de la titularidad legal o el traspaso de la posesión de los bienes. Si la EPSP retiene, de forma significativa, riesgos de la propiedad, la transacción no será una venta y por tanto no se reconocerán los ingresos ordinarios. Una EPSP puede retener riesgos significativos de diferentes formas. Ejemplos de situaciones en las que la EPSP puede conservar riesgos y ventajas significativas correspondientes a la propiedad, son los siguientes: a. Cuando la EPSP asume obligaciones derivadas del funcionamiento insatisfactorio de los productos, que no entran en las condiciones normales de garantía; 6 b. Cuando la recepción de los ingresos ordinarios de una determinada venta es de naturaleza contingente porque depende de la obtención, por parte del comprador, de ingresos ordinarios derivados de la venta posterior de los bienes; c. Cuando los bienes se venden junto con la instalación de los mismos y la instalación es una parte sustancial del contrato, siempre que ésta no haya sido todavía completada por parte de la EPSP; y d. Cuando el comprador tiene el derecho de rescindir la operación por una razón especificada en el contrato de venta y la EPSP tiene incertidumbre acerca de la probabilidad de devolución. Si una EPSP conserva sólo una parte insignificante de los riesgos y las ventajas derivados de la propiedad, la transacción es una venta y por tanto se procederá a reconocer los ingresos ordinarios. Por ejemplo, un vendedor puede retener, con el único propósito de asegurar el cobro de la deuda, la titularidad legal de los bienes. En tal caso, si la EPSP ha transferido los riesgos y ventajas significativos, derivados de la propiedad, la transacción es una venta y se procede a reconocer los ingresos ordinarios derivados de la misma. Los ingresos ordinarios se reconocerán sólo cuando sea probable que los beneficios económicos asociados con la transacción fluyan a la entidad. En algunos casos, esto puede no ser probable hasta que se reciba la contraprestación o hasta que desaparezca una determinada incertidumbre. No obstante, cuando aparece una incertidumbre relacionada con el cobro de un saldo incluido previamente entre los ingresos ordinarios, la cantidad incobrable o la cantidad respecto a la cual el cobro ha dejado de ser probable se reconocerá como un gasto, en lugar de ajustar el importe del ingreso originalmente reconocido. Los ingresos ordinarios y los gastos, relacionados con una misma transacción o evento, se reconocerán de forma simultánea. Este proceso se denomina habitualmente con el nombre de correlación de gastos con ingresos. Los gastos, junto con las garantías y otros costos a incurrir tras la entrega de los bienes, podrán ser medidos con fiabilidad cuando las otras condiciones para el reconocimiento de los ingresos ordinarios hayan sido cumplidas. No obstante, los ingresos ordinarios no pueden reconocerse cuando los gastos correlacionados no puedan ser medidos con fiabilidad; en tales casos, cualquier contraprestación ya recibida por la venta de los bienes se registrará como un pasivo. 4. Ingresos ordinarios por prestación de servicios Cuando el resultado de una transacción, que suponga la prestación de servicios, pueda ser estimado con fiabilidad, los ingresos ordinarios asociados con la operación deben reconocerse, considerando el grado de terminación de la prestación a la fecha del Estado de Situación Financiera. El resultado de una transacción puede ser estimado con fiabilidad cuando se cumplen todas y cada una de las siguientes condiciones: a. El importe de los ingresos ordinarios pueda medirse con fiabilidad; b. Es probable que la entidad reciba los beneficios económicos derivados de la transacción; 7 c. El grado de terminación de la transacción, en la fecha del Estado de Situación Financiera, pueda ser medido con fiabilidad; y d. Los costos ya incurridos en la prestación, así como los que quedan por incurrir hasta completarla, puedan ser medidos con fiabilidad. El reconocimiento de los ingresos ordinarios por referencia al grado de terminación de una transacción se denomina habitualmente con el nombre de método del porcentaje de terminación. Bajo este método, los ingresos ordinarios se reconocen en los periodos contables en los cuales tiene lugar la prestación del servicio. El reconocimiento de los ingresos ordinarios con esta base suministrará información útil sobre la medida de la actividad de servicio y su ejecución en un determinado periodo. Las disposiciones establecidas en esta norma para los contratos de construcción son, por lo general, aplicables al reconocimiento de los ingresos ordinarios y gastos asociados con una operación que implique prestación de servicios. Los ingresos ordinarios se reconocen sólo cuando es probable que la entidad reciba los beneficios económicos derivados de la transacción. No obstante, cuando surge alguna incertidumbre sobre el grado de recuperabilidad de un saldo ya incluido entre los ingresos ordinarios, la cantidad incobrable o la cantidad respecto a la cual el cobro ha dejado de ser probable se procede a reconocerlo como un gasto, en lugar de ajustar el importe del ingreso originalmente reconocido. Una EPSP será, por lo general, capaz de hacer estimaciones fiables después de que ha acordado, con las otras partes de la operación, los siguientes extremos: a. Los derechos exigibles por cada uno de los implicados, acerca del servicio que las partes han de suministrar o recibir; b. La contrapartida del intercambio; y c. La forma y los términos del pago. Normalmente, es también necesario para una entidad disponer de un sistema presupuestario financiero y un sistema de información que sean efectivos. La EPSP revisará y, si es necesario, modificará las estimaciones del ingreso por recibir a medida que el servicio se va prestando. La necesidad de tales revisiones no indica, necesariamente, que el desenlace de la operación de prestación no pueda ser estimado con fiabilidad. El porcentaje de terminación de una transacción puede determinarse mediante varios métodos. Cada entidad debe usar el método que mide con más fiabilidad los servicios ejecutados. Entre los métodos a emplear se encuentran, dependiendo de la naturaleza de la operación: a. La inspección de los trabajos ejecutados; b. La proporción que los servicios ejecutados hasta la fecha como porcentaje del total de servicios a prestar; o c. la proporción que los costos incurridos hasta la fecha suponen sobre el costo total estimado de la operación, calculada de manera que sólo los costos que reflejen servicios ya ejecutados se incluyan entre los costos incurridos hasta la fecha y sólo los costos que reflejan servicios ejecutados o por ejecutar se incluyan en la estimación de los costos totales de la operación. 8 Ni los pagos a cuenta ni los anticipos recibidos de los clientes reflejan, forzosamente, el porcentaje del servicio prestado hasta la fecha. Para efectos prácticos, en el caso de que los servicios se presten a través de un número indeterminado de actos, a lo largo de un periodo de tiempo especificado, los ingresos se podrán reconocer de forma lineal a lo largo del intervalo de tiempo citado, a menos que haya evidencia de que otro método representa mejor el porcentaje de terminación en cada momento. Cuando un acto específico sea mucho más significativo que el resto de los actos, el reconocimiento de los ingresos ordinarios se pospondrá hasta que el mismo haya sido ejecutado. Cuando el resultado de una transacción, que implique la prestación de servicios, no pueda ser estimado de forma fiable, los ingresos ordinarios correspondientes deben ser reconocidos como tales sólo en la cuantía de los gastos reconocidos que se consideren recuperables. Durante los primeros momentos de una transacción que implique prestación de servicios, se da a menudo el caso de que el desenlace de la misma no puede ser estimado de forma fiable. No obstante, puede ser probable que la entidad recupere los costos incurridos en la operación. En tal caso, se reconocerán los ingresos ordinarios sólo en la cuantía de los costos incurridos que se espere recuperar. Dado que el desenlace de la transacción no puede estimarse de forma fiable, no se reconocerá ganancia alguna procedente de la misma. Cuando el resultado final de una transacción no pueda estimarse de forma fiable, y no sea probable que se recuperen tampoco los costos incurridos en la misma, no se reconocerán ingresos ordinarios, pero se procederá a reconocer los costos incurridos como gastos del periodo. Cuando desaparezcan las incertidumbres que impedían la estimación fiable del correcto desenlace del contrato, se procederá a reconocer los ingresos ordinarios derivados, aplicando los criterios generales para el reconocimiento de ingresos por prestación de servicios. 5. Ingresos ordinarios por Intereses, regalías y dividendos Los ingresos ordinarios derivados del uso, por parte de terceros, de activos de la EPSP que producen intereses, regalías y dividendos deben ser reconocidos siempre que: a. b. sea probable que la entidad reciba los beneficios económicos asociados con la transacción; y el importe de los ingresos ordinarios pueda ser medido de forma fiable. Las bases utilizadas para el reconocimiento de estos ingresos son las siguientes: a. Los intereses deben reconocerse utilizando el método de a tasa de interés efectiva; b. Las regalías deben ser reconocidas utilizando la base de causación (o devengo), de acuerdo con la sustancia del acuerdo en que se basan; y c. Los dividendos deben reconocerse cuando se establezca el derecho a recibirlos por parte del inversionista. 9 Cuando se cobran los intereses de una determinada inversión, y parte de los mismos se han acumulado (o devengado) con anterioridad a su adquisición, se procederá a distribuir el interés total entre los periodos pre y post adquisición, procediendo a reconocer como ingresos ordinarios sólo los que corresponden al periodo posterior a la adquisición. Cuando los dividendos de las acciones procedan de ganancias netas obtenidas antes de la adquisición de los títulos, tales dividendos se deducirán del costo de las mismas. Si resultase difícil separar la parte de dividendos que corresponde a beneficios anteriores a la adquisición, salvo que se emplee un criterio arbitrario, se procederá a reconocer los dividendos como ingresos ordinarios del periodo, a menos que claramente representen la recuperación de una parte del costo del título. Las regalías se consideran causadas (o devengadas) de acuerdo con los términos del acuerdo en que se basan y son reconocidas como tales con este criterio, a menos que, considerando la sustancia del susodicho acuerdo, sea más apropiado reconocer los ingresos ordinarios derivados utilizando otro criterio más sistemático y racional. Los ingresos ordinarios se reconocen sólo cuando sea probable que la entidad obtenga los beneficios asociados con la transacción. No obstante, cuando surge algún tipo de incertidumbre acerca de los importes ya incluidos como ingresos ordinarios, la cuantía incobrable, o el importe respecto del cual ha dejado de ser probable la recuperabilidad, se reconocen como gastos, en lugar de ajustar los importes originalmente reconocidos como ingresos ordinarios. 6. Revelaciones Una EPSP debe revelar la siguiente información en sus estados financieros: a. Las políticas contables adoptadas para el reconocimiento de los ingresos ordinarios, incluyendo los métodos utilizados para determinar el porcentaje de terminación de las operaciones de prestación de servicios; b. La cuantía de cada categoría significativa de ingresos ordinarios, reconocida durante el periodo, con indicación expresa de los ingresos procedentes de: (i) (ii) (iii) (iv) (v) Venta de bienes; Prestación de servicios; Intereses; Regalías; Dividendos; y c. El importe de los ingresos ordinarios producidos por intercambios de bienes o servicios incluidos en cada una de las categorías anteriores de ingresos. Una EPSP también debe revelar en sus estados financieros cualquier tipo de activos contingentes y pasivos contingentes. Los activos y pasivos de tipo contingente pueden surgir de partidas tales como costos de garantías, reclamaciones, multas o pérdidas eventuales. 10 B. COSTOS POR PRÉSTAMOS Aplicación Esta norma se aplicará por una EPSP al contabilizar sus costos de préstamos. Entre los costos por préstamos se incluyen: a. los intereses de los préstamos a corto y largo plazo, así como los que proceden de sobregiros en cuentas corrientes; b. las cargas por intereses relativas a los arrendamientos financieros; y c. las diferencias de cambio procedentes de préstamos en moneda extranjera, en la medida en que sean consideradas como ajustes a costos por préstamos de la operación. Definiciones Los costos de préstamos son intereses y otros costos, incurridos por una EPSP, que estén relacionados con los fondos que ha tomado prestados. Activo cualificado2: Es un activo que requiere, necesariamente, de un periodo de tiempo sustancial antes de estar listo para su uso o para la venta. Dependiendo de las circunstancias, cualquiera de los siguientes elementos puede ser considerado un activo cualificado: a. b. c. d. e. Inventarios; Fábricas de manufactura; Activos intangibles; Propiedades de Inversión; Plantas de generación de energía. Los activos financieros y los inventarios que se manufacturan de forma rutinaria o que se producen en grandes cantidades de forma repetitiva, y que necesitan períodos cortos de tiempo para su fabricación no son activos cualificados. Tampoco son activos calificados los activos que al adquirirlos están ya listos para la intención de uso o venta. 1. Principio general de reconocimiento Una EPSP debe capitalizar como parte del costo de adquisición los costos de préstamos que son directamente atribuibles a la adquisición, construcción o producción de activos cualificados. Los 2 Activos en período improductivo. 11 demás costos de préstamos deben ser reconocidos como gastos financieros en el período en el cual se incurra en ellos. Los costos por préstamos que sean directamente atribuibles a la adquisición, construcción o producción de un activo cualificado, deben ser capitalizados, formando parte del costo de dichos activos. Tales costos de préstamos son capitalizados como parte del costo del activo cuando es probable que de ellos resulte probables beneficios económicos futuros para la entidad y dichos costos puedan ser medidos confiablemente. 2. Costos por préstamos susceptibles de capitalización Son costos por préstamos directamente atribuibles a la adquisición, construcción o producción de un activo que cumple las condiciones mencionadas para su cualificación, los costos que podrían haberse evitado si no se hubiera efectuado ningún desembolso en el activo correspondiente. Cuando una EPSP toma fondos prestados que destina específicamente a la obtención de un activo que cumple las condiciones mencionadas, los costos por préstamos relacionados con el activo en cuestión pueden ser fácilmente identificados. La determinación del importe de los costos por préstamos que son directamente atribuibles a la adquisición de un activo que cumple las condiciones para su cualificación requiere la utilización de criterios para realizarla. Puede resultar difícil identificar una relación directa entre préstamos recibidos y activos que cumplan las condiciones para su cualificación, para determinar qué préstamos podrían haberse evitado. También aparecen dificultades cuando un grupo de entidades adquiere con las instituciones de crédito una gama variada de préstamos a diferentes tasas de interés, y presta luego esos fondos, con diferentes criterios, a otras entidades del grupo o cuando se usan préstamos expresados o referenciados a una moneda extranjera, cuando el grupo opera en economías altamente inflacionarias, y cuando se producen fluctuaciones en las tasas de cambio. En la medida que los fondos se hayan tomado prestados específicamente con el propósito de obtener un activo que cumpla las condiciones para su cualificación, el importe de los costos por préstamos susceptibles de capitalización en ese activo se determinará según los costos reales incurridos por tales préstamos durante el periodo, menos los rendimientos conseguidos por la colocación de tales fondos en inversiones temporales. Según los acuerdos financieros relativos a los activos que cumplan las condiciones correspondientes para su cualificación, puede suceder que la entidad obtenga los fondos, e incurra en costos por préstamos, antes de que los mismos sean usados para hacer desembolsos que correspondan al activo en cuestión. En tales circunstancias, la totalidad o una parte de los fondos se pueden invertir temporalmente a la espera de hacer los desembolsos correspondientes al citado activo. Para determinar la cuantía de los costos por préstamos susceptibles de ser capitalizados durante el periodo, cualquier rendimiento obtenido de tales fondos se deduce de los costos por préstamos incurridos en el mismo. 12 En la medida en que los fondos procedan de préstamos genéricos, usados para obtener el activo que cumple las condiciones para a su cualificación, el importe de los costos por préstamos susceptibles de ser capitalizados debe ser determinado aplicando una tasa de capitalización a los desembolsos efectuados en dicho activo. La tasa de capitalización debe ser la media ponderada de los costos por préstamos aplicables a los préstamos recibidos por la EPSP, que han estado vigentes en el periodo, y son diferentes de los específicamente acordados para financiar el activo. El importe de los costos por préstamos, capitalizados durante el periodo, no debe exceder del total de costos por préstamos en que se ha incurrido durante ese mismo periodo. En algunas circunstancias, podría ser adecuado incluir todos los préstamos recibidos por la matriz y sus subordinadas (entidades subordinadas o dominadas) al calcular la media ponderada de los costos por préstamos; en otros casos, sin embargo, será adecuado utilizar, para cada subordinada o dominada, una media ponderada de los costos por préstamos atribuibles a sus propios préstamos. Exceso del importe en libros del activo apto sobre el importe recuperable Cuando el importe en libros o el costo final del activo apto exceda a su importe recuperable o a su valor neto realizable, el importe en libros se reducirá o se dará de baja de acuerdo con las exigencias de este marco técnico. 3. Inicio de la capitalización La capitalización de costos por préstamos, como parte del costo de los activos, que cumplan las condiciones para su cualificación, debe comenzar cuando: a. se haya incurrido en desembolsos con relación al activo; b. se haya incurrido en costos por préstamos; y c. se estén llevando a las actividades necesarias para preparar al activo para su uso deseado o para su venta. Los desembolsos relativos a un activo, que cumpla las condiciones para su cualificación, hace referencia únicamente a pagos que hayan dado lugar a salidas de efectivo, a transferencias de otros activos o cuando se asuman pasivos que acumulen (o devenguen) intereses. El valor en libros promedio del activo durante un periodo, incluyendo los costos por préstamos capitalizados anteriormente constituye, por lo general, es una aproximación razonable de los desembolsos a los que se debe aplicar la tasa de capitalización en ese periodo. Las actividades necesarias para preparar el activo para su uso deseado o para su venta implican algo más que la construcción física del mismo. Incluyen también los trabajos técnicos y administrativos previos al comienzo de la construcción física, tales como las actividades asociadas a la obtención de permisos anteriores a la construcción propiamente dicha. No obstante, estas actividades excluyen la mera tenencia del activo, cuando no se están llevando a cabo sobre el mismo los cambios que implican la producción o el desarrollo. Por lo tanto, y como ejemplo, los costos por préstamos en los que se incurre mientras los terrenos se están 13 preparando se capitalizan en los periodos en que tal preparación tiene lugar. Sin embargo, los costos por préstamos en que se incurre mientras los terrenos, adquiridos para construir sobre ellos, se mantienen inactivos sin realizar en ellos ninguna labor de preparación, no cumplen las condiciones para ser capitalizados. 4. Suspensión de la capitalización La capitalización de los costos por préstamos debe ser suspendida durante los periodos en los que se interrumpe el desarrollo de actividades. Una EPSP puede incurrir en costos de préstamos durante un período largo de tiempo en el cual se suspenden las actividades necesarias para preparar el activo para su uso deseado o para su venta. Tales costos de mantenimiento de activos parcialmente terminados, no cumplen las condiciones para su capitalización. Sin embargo, la capitalización no debe suspenderse si durante ese periodo se están llevando a cabo actuaciones técnicas o administrativas importantes. Tampoco se suspenderá la capitalización por causa de un retraso temporal necesario como parte del proceso de obtención de un activo disponible para su uso o para su venta 5. Fin de la capitalización La capitalización de los costos por préstamos debe finalizar cuando se han completado todas o prácticamente todas las actividades necesarias para preparar al activo, que cumple las condiciones para su cualificación, para su utilización deseada o para su venta. Normalmente, un activo estará preparado para su utilización esperada o para su venta, cuando se haya completado la construcción física del mismo, incluso aunque todavía deban llevarse a cabo trabajos administrativos sobre él. Si lo único que falta es llevar a cabo modificaciones menores esto es indicativo de que todas las actividades de construcción están sustancialmente acabadas. Cuando la construcción de un activo, que cumple las condiciones que le cualifican para poder capitalizar costos por préstamos, se realiza por partes, y cada parte es capaz de ser utilizada por separado mientras se terminan las restantes, la capitalización de los costos por préstamos debe finalizar cuando estén terminadas, sustancialmente, todas las actividades necesarias para preparar esa parte para su utilización deseada o su venta. 6. Revelaciones Una EPSP debe revelar en sus estados financieros información acerca de lo siguiente: a. b. c. las políticas contables adoptadas con relación a los costos por préstamos; el importe de los costos por préstamos capitalizados durante el periodo; y la tasa de capitalización utilizada para determinar el importe de los costos por préstamos susceptibles de capitalización. 14 C. EFECTOS DE LAS VARIACIONES EN LAS TASAS DE CAMBIO EN MONEDA EXTRANJERA Aplicación Esta norma deberá ser aplicada por una EPSP para: a. Contabilizar las transacciones y saldos en moneda extranjera, salvo las transacciones y saldos con instrumentos derivados; b. Convertir los resultados y la situación financiera de los negocios (operaciones) en el extranjero que se incluyan en los estados financieros de la entidad, ya sea por consolidación, por consolidación proporcional o por el método de participación patrimonial; y c. Convertir los resultados y la situación financiera de la entidad a una moneda de presentación. Esta norma también aplica para la presentación de los estados financieros de una entidad en una moneda extranjera. Definiciones Una entidad puede llevar a cabo actividades en el extranjero de dos formas diferentes. Puede tener transacciones en moneda extranjera o puede tener operaciones en el extranjero. Además, una entidad puede presentar sus estados financieros en una moneda extranjera. Esta norma prescribe cómo incluir las transacciones en moneda extranjera y los operaciones en el extranjero, en los estados financieros de una entidad, y cómo convertir los estados financieros a una moneda de presentación. La contabilización de activos y pasivos financieros denominados en una moneda extranjera y la contabilidad de coberturas de partidas en moneda extranjera se tratan en el capítulo de instrumentos financieros. Moneda extranjera (o divisa). Es cualquier otra distinta de la moneda funcional de una entidad. Moneda funcional. Es la moneda del entorno económico principal en el que opera la entidad. Moneda de presentación. Es la moneda en que se presentan los estados financieros. Operación en el extranjero. Es toda entidad subordinada, asociada, negocio conjunto o sucursal de la entidad que informa, cuyas actividades están basadas o se llevan a cabo en un país o moneda distintos a los de la entidad que informa. Transacción en moneda extranjera. Es toda transacción cuyo importe se denomina, o exige su liquidación, en una moneda extranjera. 1. Moneda funcional Cada entidad deberá identificar su moneda funcional. Moneda funcional es la moneda del entorno económico principal en el que opera la entidad. 15 El entorno económico principal en el que opera una entidad es, normalmente, aquél en el que ésta principalmente genera y gasta el efectivo. Por ello, los factores más importantes que una entidad debe considerar al determinar su moneda funcional son los siguientes: a. La moneda: (i) Que influye fundamentalmente en los precios de venta de los bienes y servicios (con frecuencia será la moneda en la cual se denominen y liquiden los precios de venta de sus bienes y servicios); y (ii) Del país cuyas fuerzas competitivas y regulaciones determinen fundamentalmente los precios de venta de sus bienes y servicios. b. La moneda que influya fundamentalmente en los costos de la mano de obra, de los materiales y de otros costos de producir los bienes o suministrar los servicios (con frecuencia será la moneda en la cual se denominen y liquiden tales costos). Los siguientes factores también pueden suministrar evidencia acerca de la moneda funcional de una entidad: a. La moneda en la cual se generan los fondos de las actividades de financiación (esto es, la emisión de instrumentos de deuda y patrimonio); b. La moneda en que normalmente se mantienen los importes cobrados por las actividades de operación. Al determinar cuál es la moneda funcional de un negocio en el extranjero, y si es la misma que la de la entidad que informa (en este contexto, es la entidad que tiene el negocio en el extranjero como su subordinada, sucursal, asociada o negocio conjunto) se considerarán los siguientes factores adicionales: a. Si las actividades del negocio en el extranjero se llevan a cabo como una extensión de la Entidad que informa, en lugar de hacerlo con un grado significativo de autonomía. Un ejemplo de la primera situación se presenta cuando el negocio en el extranjero sólo vende bienes importados de la entidad que informa y remite a la misma los importes obtenidos. Un ejemplo de la segunda situación se presenta cuando el negocio acumula efectivo y otras partidas monetarias, incurre en gastos, genera ingresos y toma préstamos, realizando todo ello, sustancialmente, en su moneda local; b. Si las transacciones con la entidad que informa constituyen una proporción alta o baja de las actividades del negocio en el extranjero; c. Si los flujos de efectivo de las actividades del negocio en el extranjero afectan directamente a los flujos de efectivo de la entidad que informa, y están fácilmente disponibles para su remisión a la misma; d. Si los flujos de efectivo de las actividades del negocio en el extranjero son suficientes para atender las obligaciones por deudas actuales y normalmente esperadas, sin que la entidad que informa deba poner fondos a su disposición. 16 2. Información en la moneda funcional de transacciones en moneda extranjera 2.1. Reconocimiento inicial Toda transacción en moneda extranjera se registrará, en el momento de su reconocimiento inicial, utilizando la moneda funcional, mediante la aplicación al importe en moneda extranjera, de la tasa de cambio de contado a la fecha de la transacción entre la moneda funcional y la moneda extranjera. La fecha de una transacción es la fecha en la cual dicha transacción cumple las condiciones para su reconocimiento. Por razones prácticas, una entidad puede utilizar un tipo de cambio aproximado al existente en el momento de realizar la transacción, por ejemplo, puede utilizarse el correspondiente tipo medio semanal o mensual, para todas las transacciones que tengan lugar en ese intervalo de tiempo, en cada una de las clases de moneda extranjera usadas por la entidad. Sin embargo, cuando las tasas de cambio varían de forma significativa, resultará inadecuado el uso de la tasa media del periodo. Una transacción en moneda extranjera es toda transacción cuyo importe se denomina, o exige su liquidación, en una moneda extranjera, entre las que se incluyen aquéllas en que la entidad: a. compra o vende bienes o servicios cuyo precio se denomina en una moneda extranjera; b. presta o toma prestados fondos, si los importes correspondientes se establecen a cobrar o pagar en una moneda extranjera; o c. adquiere o dispone de activos, o bien incurre o liquida pasivos, siempre que estas operaciones se hayan denominado en moneda extranjera. 2.2. Medición posterior Al final del período sobre el que se informa: a. las partidas monetarias en moneda extranjera se convertirán utilizando la tasa de cambio de cierre; b. las partidas no monetarias en moneda extranjera, que se midan en términos de costo histórico, se convertirán utilizando la tasa de cambio en la fecha de la transacción; y c. las partidas no monetarias que se midan al valor razonable en una moneda extranjera, se convertirán utilizando las tasas de cambio de la fecha en que se determine este valor razonable. Para determinar el valor en libros de una partida se tendrán en cuenta además, las otras políticas que sean de aplicación. Por ejemplo, las propiedades, planta y equipo pueden ser medidas en términos de su valor razonable o costo histórico. Independientemente de si se ha determinado el valor en libros utilizando el costo histórico o el valor razonable, siempre que dicho importe se haya establecido en moneda extranjera, se convertirá a la moneda funcional utilizando las reglas establecidas en esta guía. 17 El valor en libros de algunas partidas se determina comparando dos o más importes distintos. Por ejemplo, el valor en libros de los inventarios es el menor entre el costo y el valor neto realizable. De forma similar, el valor en libros de un activo, para el que exista un indicio de deterioro, es el menor entre su valor en libros, anterior a la consideración de las posibles pérdidas por ese deterioro, y su importe recuperable. Cuando la partida en cuestión sea un activo no monetario, medido en una moneda extranjera, el valor en libros se determinará comparando: a. el costo o valor en libros, según lo que resulte apropiado, convertidos a la tasa de cambio en la fecha de determinación de ese importe (por ejemplo, a la tasa de cambio a la fecha de la transacción para una partida que se mida en términos de costo histórico), y b. el valor neto realizable o el importe recuperable, según lo que resulte apropiado, convertido a la tasa de cambio en la fecha de determinación de ese valor (por ejemplo, a la tasa de cambio de cierre al final del periodo sobre el que se informa). El efecto de esta comparación puede dar lugar al reconocimiento de una pérdida por deterioro en la moneda funcional, que podría no ser objeto de reconocimiento en la moneda extranjera, o viceversa. Cuando se disponga de varios tipos de cambio, se utilizará aquél en el que pudieran ser liquidados los flujos futuros de efectivo representados por la transacción o el saldo considerado, si tales flujos hubieran ocurrido en la fecha de la medición. Cuando se haya perdido temporalmente la posibilidad de negociar dos monedas en condiciones de mercado, la tasa a utilizar será la primera que se fije en una fecha posterior, en la que se puedan negociar las divisas en las condiciones citadas. 2.3. Reconocimiento de diferencias en cambio Las diferencias de cambio que surjan al liquidar las partidas monetarias, o al convertir las partidas monetarias a tipos diferentes de los que se utilizaron para su reconocimiento inicial, ya se hayan producido durante el periodo o en estados financieros previos, debe ser reconocidas en los resultados del periodo en el que aparezcan salvo por las diferencias en cambio surgidas en una partida monetaria que forme parte de la inversión neta en un negocio extranjero. Aparecerá una diferencia de cambio cuando se tengan partidas monetarias como consecuencia de una transacción en moneda extranjera, y se haya producido una variación en la tasa de cambio entre la fecha de la transacción y la fecha de liquidación. Cuando la transacción se liquide en el mismo periodo contable en el que haya ocurrido, toda la diferencia de cambio se reconocerá en ese periodo. No obstante, cuando la transacción se liquide en un periodo contable posterior, la diferencia de cambio reconocida en cada uno de los periodos, hasta la fecha de liquidación, se determinará a partir de la variación que se haya producido en las tasas de cambio durante cada periodo. 18 Cuando se reconozca en otros ingresos del estado del resultado integral una pérdida o ganancia derivada de una partida no monetaria, cualquier diferencia de cambio, incluida en esa pérdida o ganancia, también debe ser reconocida en otros ingresos del estado del resultado integral. Por el contrario, cuando la pérdida o ganancia, derivada de una partida no monetaria, sea reconocida en los resultados del periodo, cualquier diferencia de cambio, incluida en esta pérdida o ganancia, también debe ser reconocida en los resultados del periodo. Algunas normas de las NIIF requieren el reconocimiento de algunas pérdidas o ganancias como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral. Por ejemplo, las políticas sobre propiedades, planta y equipo requieren el reconocimiento en otros ingresos del estado del resultado integral de algunas pérdidas o ganancias surgidas por la revaluación de las propiedades, planta y equipo. Cuando estos activos se midan en moneda extranjera, se requiere que el importe revaluado sea convertido utilizando la tasa a la fecha en que se determine el nuevo valor, lo que producirá una diferencia de cambio a reconocer también en otros ingresos del estado del resultado integral. 3. Inversión neta en un negocio en el extranjero Las diferencias de cambio surgidas en una partida monetaria que forme parte de la inversión neta en un negocio extranjero de la entidad que informa, se reconocerán en los resultados de los estados financieros separados de la entidad que informa, o bien en los estados financieros individuales del negocio en el extranjero, según resulte apropiado. En los estados financieros que contengan al negocio en el extranjero y a la Entidad que informa (por ejemplo, los estados financieros consolidados si el negocio en el extranjero es una entidad subsidiaria o subordinada), las diferencias en cambio se reconocen inicialmente como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral, y reclasificadas de patrimonio a resultados cuando se realice la disposición del negocio en el extranjero. Cuando una partida monetaria forme parte de la inversión neta realizada por la entidad que informa en un negocio en el extranjero, y esté denominada en la moneda funcional de la entidad que informa, puede aparecer una diferencia de cambio en los estados financieros individuales del negocio en el extranjero. Si esta partida estuviese denominada en la moneda funcional del negocio en el extranjero, la diferencia de cambio aparecería en los estados financieros separados de la entidad que informa. Si tal partida está denominada en una moneda diferente a la moneda funcional de la entidad que informa o del negocio en el extranjero, surge una diferencia de cambio en los estados financieros separados de la entidad que informa y en los estados financieros individuales del negocio en el extranjero. Estas diferencias de cambio serán reconocidas como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral, en los estados financieros que contienen al negocio en el extranjero y a la entidad que informa (es decir, en los estados financieros donde el negocio en el extranjero se encuentre consolidado, consolidado proporcionalmente o contabilizado según el método de la participación). 19 4. Procedimiento de Remedición Cuando una entidad del grupo lleve sus registros y libros contables en una moneda diferente de su moneda funcional, y proceda a elaborar sus estados financieros, convertirá todos los importes a la moneda funcional, utilizando los criterios de medición de las transacciones en Moneda Extranjera, es decir: a. las partidas monetarias en moneda extranjera se convertirán utilizando la tasa de cambio de cierre; b. las partidas no monetarias en moneda extranjera, que se midan en términos de costo histórico, se convertirán utilizando la tasa de cambio en la fecha de la transacción; y c. las partidas no monetarias que se midan al valor razonable en una moneda extranjera, se convertirán utilizando las tasas de cambio de la fecha en que se determine este valor razonable. Como resultado de lo anterior, se obtendrán los mismos importes, en términos de moneda funcional, que se hubieran obtenido si las partidas se hubieran registrado originalmente en dicha moneda funcional. Por ejemplo, las partidas monetarias se convertirán a la moneda funcional utilizando las tasas de cambio de cierre, y las partidas no monetarias, que se midan al costo histórico, se convertirán utilizando la tasa de cambio correspondiente a la fecha de la transacción que originó su reconocimiento. 5. Cambio de la moneda funcional Cuando haya un cambio de moneda funcional de una entidad, ésta deberá aplicar los procedimientos de conversión aplicables a la nueva moneda funcional de forma prospectiva, desde la fecha del cambio. La moneda funcional de una entidad refleja las transacciones, eventos y condiciones subyacentes y que son relevantes para la entidad. En consecuencia, una vez que se determina la moneda funcional, sólo podrá cambiarse si se produce un cambio en las transacciones, eventos y condiciones subyacentes. Por ejemplo, un cambio en la moneda que principalmente influye en los precios de venta de los bienes y servicios, podría conducir a un cambio en la moneda funcional de la entidad. El efecto de un cambio de moneda funcional se contabilizará de forma prospectiva. En otras palabras, una entidad convertirá todas las partidas a la nueva moneda funcional utilizando la tasa de cambio en la fecha en que se produzca el cambio. Los importes resultantes convertidos, en el caso de partidas no monetarias, se considerarán como sus costos históricos. Las diferencias de cambio que surjan de la conversión de un negocio en el extranjero, que se hubieran clasificado anteriormente en el patrimonio, no se reconocerán en los resultados hasta que se lleve a cabo su disposición del negocio. 20 6. Conversión de Estados Financieros de Negocios en el Extranjero 6.1. Uso de una Moneda de Presentación diferente a la moneda funcional Una EPSP puede presentar sus estados financieros en cualquier moneda (o monedas). Si la moneda de presentación difiere de la moneda funcional de la Entidad, ésta deberá convertir sus resultados y situación financiera a la moneda de presentación elegida. Por ejemplo, cuando un grupo consolidable está formado por entidades individuales con monedas funcionales diferentes, esta debe expresar los resultados y la situación financiera de cada entidad en una moneda común, a fin de presentar estados financieros consolidados. La incorporación de los resultados y la situación financiera de un negocio en el extranjero a los de la entidad que informa, seguirá los procedimientos normales de consolidación, como por ejemplo la eliminación de los saldos y transacciones intragrupo de una subsidiaria (subordinada o dominada). No obstante, un activo (o pasivo) monetario intragrupo, ya sea a corto o a largo plazo, no puede ser eliminado contra el correspondiente pasivo (o activo) intragrupo, sin mostrar los resultados de las variaciones en las tasas de cambio dentro de los estados financieros consolidados. Esto es así porque la partida monetaria representa un compromiso de convertir una moneda en otra, lo que expone a la entidad que informa a una pérdida o ganancia por las fluctuaciones del cambio entre las monedas. Por consiguiente, en los estados financieros consolidados de la entidad que informa, esta diferencia de cambio se reconocerá en el resultado, o si se deriva de una partida monetaria que forma parte de la inversión neta en el negocio en el extranjero, se reconocerá como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral y se acumulará en un componente separado del patrimonio hasta la disposición del negocio en el extranjero. Cuando los estados financieros del negocio en el extranjero y de la entidad que informa son de fechas diferentes, es frecuente que aquél prepare estados financieros adicionales con la misma fecha que ésta. Cuando no sea así, se pueden utilizar informes financieros de fechas de presentación diferentes, siempre que la diferencia no sea mayor de tres meses, y que se realicen los ajustes pertinentes para reflejar los efectos de las transacciones y otros eventos significativos ocurridos entre las fechas de referencia. En tal caso, los activos y pasivos del negocio en el extranjero se convertirán a la tasa de cambio de la fecha de cierre del periodo sobre el que se informa del negocio en el extranjero. Se practicarán también los pertinentes ajustes por las variaciones significativas en las tasas de cambio hasta el final del periodo sobre el que se informa de la entidad que informa. Este mismo procedimiento se utilizará al aplicar el método de la participación a las asociadas y negocios conjuntos, así como al aplicar la consolidación proporcional a los negocios conjuntos. 6.2. Procedimiento de Conversión para Entidades cuya moneda funcional no es la moneda de una Economía hiperinflacionaria Los resultados y la situación financiera serán convertidos a la moneda de presentación, en caso de que ésta fuese diferente, utilizando el siguiente procedimiento: 21 a. Los activos y pasivos de cada uno de los estados de situación financiera presentados (es decir, incluyendo las cifras comparativas), se convertirán a la tasa de cambio de cierre en la fecha del correspondiente estados de situación financiera; b. Los ingresos y gastos para cada estado de resultado integral o estado de resultados separado presentado (es decir, incluyendo las cifras comparativas), se convertirán a las tasas de cambio de la fecha de cada transacción; y c. Todas las diferencias de cambio resultantes debe ser reconocidas como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral formando parte del Estado de Resultado Total. d. Las partidas del patrimonio se convierten a las tasas históricas teniendo en cuenta la fecha en que este fue adquirido u originado. Por ejemplo: las partidas de capital se convierten a las tasas vigentes de cuando este fue aportado o adquirido; las reservas se convierten a las tasas vigentes de cuando este fue incorporado al patrimonio. Por razones prácticas, para la conversión de partidas de ingresos y gastos puede utilizarse un tipo de cambio aproximado, representativo de los cambios existentes en las fechas de las transacciones, como puede ser la tasa de cambio media del periodo. Sin embargo, cuando las tasas de cambio varían de forma significativa, no es adecuado el uso de la tasa media del periodo. Las diferencias en cambio resultantes del proceso de conversión surgen de: a. La conversión de los gastos e ingresos a las tasas de cambio de las fechas de las transacciones, y la de los activos y pasivos a la tasa de cambio de cierre. b. La conversión del activo neto inicial a una tasa de cambio de cierre que sea diferente de la tasa utilizada en el cierre anterior. Estas diferencias de cambio no se reconocen en el resultado porque las variaciones de las tasas de cambio tienen un efecto directo pequeño o nulo en los flujos de efectivo presentes y futuros derivados de las actividades. El importe acumulado de las diferencias de cambio se presenta en un componente separado del patrimonio hasta la disposición del negocio en el extranjero. Cuando las citadas diferencias de cambio se refieren a un negocio en el extranjero que se consolida, no está participado en su totalidad, las diferencias de cambio acumuladas surgidas de la conversión que sean atribuibles a las participaciones no controladas, se atribuyen a la misma y se reconocen como parte de las participaciones no controladas en el estado consolidado de situación financiera. 6.3. Procedimiento de Conversión para Entidades cuya moneda funcional es la moneda de una Economía hiperinflacionaria Los resultados y situación financiera de una entidad, cuya moneda funcional es la correspondiente a una economía hiperinflacionaria, se convertirán a una moneda de presentación diferente utilizando los siguientes procedimientos: a. todos los importes (es decir, activos, pasivos, partidas del patrimonio, gastos e ingresos, incluyendo también las cifras comparativas correspondientes) se convertirán a la tasa de cambio de cierre correspondiente a la fecha de cierre del estado de situación financiera más reciente, excepto cuando 22 b. los importes sean convertidos a la moneda de una economía no hiperinflacionaria, en cuyo caso las cifras comparativas serán las que fueron presentadas como importes corrientes del año en cuestión, dentro de los estados financieros del periodo precedente (es decir, estos importes no se ajustarán por las variaciones posteriores que se hayan producido en el nivel de precios o en las tasas de cambio). Cuando la moneda funcional de la Entidad sea la de una economía hiperinflacionaria, esta re expresará sus estados financieros antes de aplicar el método de conversión establecido en el párrafo anterior, de acuerdo con las políticas establecidas para la re expresión de los estados financieros, excepto las cifras comparativas en el caso de conversión a la moneda de una economía no hiperinflacionaria. Cuando la economía en cuestión deje de ser hiperinflacionaria, y la Entidad deje de re expresar sus estados financieros, utilizará como costos históricos, para convertirlos a la moneda de presentación, los importes re expresados según el nivel de precios a la fecha en que la Entidad deje de hacer la citada re expresión. 6.4. Tasas de cambio utilizadas para la conversión del Crédito Mercantil Tanto el crédito mercantil surgido en la adquisición de un negocio en el extranjero, como los ajustes del valor razonable practicados al valor en libros de los activos y pasivos, como consecuencia de la adquisición de un negocio en el extranjero, se deben tratar como activos y pasivos del mismo. Esto quiere decir que se expresarán en la misma moneda funcional del negocio en el extranjero, y que se convertirán a la tasa de cambio de cierre. 7. Venta o Disposición de un negocio en el extranjero En la venta o disposición final de un negocio en el extranjero, el importe acumulado de las diferencias de cambio relacionadas con el negocio en el extranjero, reconocido como parte de los otros ingresos del estado del resultado integral y acumulado como un componente separado del patrimonio, debe ser reclasificado del patrimonio al resultado (como un ajuste por reclasificación) cuando se reconozca la ganancia o pérdida derivada de la disposición. Además de la disposición de toda la participación de una entidad en un negocio en el extranjero, lo siguiente se contabilizará como disposición, aún si la entidad retiene una participación en la anterior subsidiaria (subordinada o dominada), asociada o entidad controlada de forma conjunta: a. la pérdida del control de una subsidiaria (subordinada o dominada) que incluye un negocio en el extranjero; b. la pérdida de una influencia significativa sobre una asociada que incluye un negocio en el extranjero; y c. la pérdida del control conjunto sobre una entidad controlada de forma conjunta que incluye un negocio en el extranjero. 23 En la disposición de una subsidiaria (subordinada o dominada) que incluye un negocio en el extranjero, el importe acumulado de diferencias de cambio relacionadas con ese negocio en el extranjero que haya sido atribuido a las participaciones no controladas deberá darse de baja en cuentas, pero no deberán reclasificarse a resultados En la disposición parcial de una subordinada o subsidiaria (subordinada o dominada) que incluye un negocio en el extranjero, la Entidad debe volver a atribuir la parte proporcional del importe acumulado de las diferencias de cambio reconocidas en otros ingresos del estado del resultado integral a las participaciones minoritarias en ese negocio en el extranjero. En cualquier otra disposición parcial de un negocio en el extranjero la Entidad reclasificará a resultados solamente la parte proporcional del importe acumulado de las diferencias de cambio reconocidas en otros ingresos del estado del resultado integral. La disposición parcial de la participación de una entidad en un negocio en el extranjero es cualquier reducción de la participación de una entidad como propietaria en un negocio en el extranjero, excepto aquellas reducciones relacionadas con la pérdida de control, control conjunto o influencia significativa, que se contabilizan como disposiciones. Cuando una entidad disponga de la totalidad o parte de su participación en un negocio en el extranjero mediante su venta, liquidación, devolución del capital aportado o abandono total de la entidad o de parte de la misma, la rebaja del valor en libros del negocio en el extranjero, debido a sus propias pérdidas o a un deterioro de valor reconocido por el inversor, no constituye una disposición parcial. Por consiguiente, en el momento de una rebaja de valor no se reclasificará en resultados parte alguna de las ganancias o pérdidas por cambio en moneda extranjera reconocidas en otros ingresos del estado del resultado integral. 8. Efectos impositivos de todas las diferencias en cambio Las ganancias y pérdidas por diferencias de cambio en las transacciones realizadas en moneda extranjera, así como las diferencias por conversión de los resultados y la situación financiera de una entidad (incluyendo también un negocio en el extranjero) a una moneda diferente, pueden tener efectos impositivos. Para contabilizar estos efectos impositivos se aplicará lo establecido en la norma técnica de “Impuesto sobre las Ganancias”. 9. Revelaciones Una entidad debe revelar: a. el importe de las diferencias de cambio reconocidas en los resultados, con excepción de las procedentes de los instrumentos financieros medidos al valor razonable con cambios en los resultados,; y b. las diferencias de cambio netas reconocidas en otros ingresos del estado del resultado integral y acumuladas como en un componente separado del patrimonio, así como una conciliación entre los importes de estas diferencias al principio y al final del periodo. 24 Cuando la moneda de presentación sea diferente de la moneda funcional, este hecho será puesto de manifiesto, revelando además la identidad de la moneda funcional, así como la razón de utilizar una moneda de presentación diferente. Cuando se haya producido un cambio en la moneda funcional, ya sea de la entidad que informa o de algún negocio significativo en el extranjero, se revelará este hecho, así como la razón de dicho cambio. Cuando una entidad presente sus estados financieros en una moneda que sea diferente de su moneda funcional, señalará que sus estados financieros son conformes con el MGC, solo si cumplen con todos los requerimientos del modelo, incluyendo las que se refieren a los métodos de conversión establecidos en esta norma. En ocasiones, las entidades presentan sus estados financieros u otra información financiera en una moneda que no es su moneda funcional. Por ejemplo, la entidad puede convertir a la otra moneda sólo determinadas partidas de sus estados financieros. Otro ejemplo se da cuando una entidad, cuya moneda funcional no es la de una economía hiperinflacionaria, convierte los estados financieros a la otra moneda utilizando para todas las partidas la tasa de cambio de cierre más reciente. Tales conversiones no están hechas de acuerdo con las NIIF, por lo que será obligatorio revelar la información establecida en el párrafo siguiente. Cuando una entidad presente sus estados financieros, u otra información financiera, en una moneda diferente de su moneda funcional y de su moneda de presentación, y no cumple los requerimientos de esta norma: a. identificará claramente esta información como complementaria, al objeto de distinguirla de la información que cumple con el MGC. b. revelará la moneda en que se presenta esta información complementaria; y c. revelará la moneda funcional de la entidad, así como el método de conversión utilizado para confeccionar la información complementaria. 25