CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES OBRAS FLUVIALES 1. INTRODUCCIÓN Los ríos son elementos naturales que captan las aguas de una cuenca y las transportan, en régimen a superficie libre, hasta su desembocadura. La hidráulica fluvial estudia la intervención del hombre sobre los ríos, ya sea para la adecuación al sistema de aprovechamientos del recurso hídrico, la disminución de riesgos de daños por inundación, o bien por la intersección del río con una obra de infraestructura (carretera, ferrocarril, conducciones, etc.). Si bien los ríos y los canales artificiales conducen agua mediante régimen a pelo libre, existen importantes diferencias entre ambos. Como primer medida, es imprescindible destacar, que los canales son obras de ingeniería como cualquier otra infraestructura. Un canal responde a un proyecto, con su respectivo caudal de diseño, régimen de explotación, trazado, revestimiento, sección tipo, etc. Además, es posible que el proyecto de un canal contemple obras para evitar la entrada de sedimentos (trampas de arena, decantadores, etc.). Por lo contrario, en el caso de los ríos no existen determinaciones previas. El caudal es siempre variable, según el régimen hidrológico de la cuenca, y puede ser a una escala de tiempo estacional o bien restringido a un evento meteorológico. En general, la forma del cauce de un río responde a ciertos caudales de elevadas recurrencias (pero no extraordinarias). Además, existen las crecidas extraordinarias las cuales pueden transformar la naturaleza o el curso del río (corte de meandros) otorgándole al mismo un comportamiento dinámico que responde a ciertos grados de libertad. Otra gran diferencia es que el río, al ser parte del medio ambiente, se relaciona con el mismo y conforma a su alrededor un ecosistema húmedo, apropiado para la vida vegetal y animal. Un río mantiene un flujo bifásico de agua y sedimento (procedente del cauce o de la cuenca), en el cual si no existen cambios espaciales o temporales, simplemente el río aporta una cierta cantidad de ambas fases. La hidráulica fluvial intenta ser una herramienta para el ingeniero en la cuantificación de los cambios en la fase sedimento, que le permitan dar solución a problemas tales como tarquinamiento y pérdida de capacidad en embalses, explotación de áridos admisibles, o variaciones en la cota de fondo. Estas últimas suelen ser las mas graves para obras cimentadas en el río o cerca del mismo (puentes, acueductos, etc.) y también para obras subfluviales (túneles). Al poseer un fondo móvil, el régimen hidráulico de un río puede adaptarse a las altas velocidades de erosión mediante una sucesión de régimen lento y rápido, como se observa en la naturaleza. Existe una resistencia al flujo dada por el tamaño del grano del material que compone el lecho, a la que debe agregarse una rugosidad debido a las formas del fondo (rizos, dunas, etc.). Para finalizar la comparación, es conveniente destacar que los ríos se encuentran sometidos a crecidas, situación que crea las mayores solicitaciones modificando el equilibrio del cauce, formando considerables erosiones, provocando desbordes e inundaciones, etc. 1 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 2. NOCIONES DE MECÁNICA DEL TRANSPORTE DE SEDIMENTOS 2.1 Elementos: Agua – Sedimentos – Mezcla Los materiales que componen los lechos de los ríos pueden ser granulares o cohesivos. Las modificaciones del cauce de estos últimos son mas lentas debido a la mayor resistencia a la erosión. Tras una erosión del fondo, un lecho cohesivo puede restablecer su cota original, pero ya como material granular. La hidráulica fluvial relativa a lechos cohesivos aun se encuentra en sus principios. Una de las propiedades de mayor relevancia de las partículas de un lecho granular es el peso. En general, los cauces naturales están formados por partículas de rocas y minerales cuya densidad “ρs” tiene poca variación. Un valor medio adoptado es ρs = 2.65 o también la densidad relativa (respecto del agua) ρs/ρ = 2.65. La densidad relativa sumergida “∆” es una relación de gran uso en la Mecánica del Transporte de Sedimentos y responde a la siguiente expresión: ∆= ρs − ρ ≅ 1.65 ρ (1) Debido a esta relación aproximadamente constante de los cauces naturales, la propiedad de mas importancia pasa a ser el tamaño, como representación del volumen de la partícula. Existen diferentes definiciones para establecer el tamaño de una partícula tales como: diámetro de sedimentación, de tamiz, nominal, de caída, etc. (Weber, 2000). De las dimensiones triaxiales de una partícula ideal mostradas en la figura 1 (siendo a > b > c) la medida “b” es la dimensión decisiva para que un grano pase o sea retenido por un tamiz. Figura 1: Ejes principales de una partícula ideal. La representación gráfica de las fracciones acumuladas de porcentaje en peso pasante a un determinado tamaño (tamiz), correspondientes a las distintas dimensiones de granos que representan una muestra, constituye la distribución granulométrica (ver figura 2). R ÍO D E L L A N U R A Uno de los diámetros más empleados es el D50. En términos estadísticos es interesante definir la varianza de una muestra como: R ÍO D E M O N T A Ñ A 100 90 % Pasante en Peso 80 70 60 50 σ 2 = ∑ % Pi ⋅ ( Di − Dm ) 2 40 30 20 (2) 10 0 0.01 0.1 1 10 Diámetro [mm] Figura 2: Ejemplo de Curvas Granulométricas. 100 donde: Dm es la media aritmética de los diámetros de la muestra, Di es el diámetro correspondiente a un porcentaje de pasante Pi. 2 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Los ríos de montaña están compuestos generalmente por una mezcla de tamaños desde finos a gruesos, el desvío estándar es σ > 3 y se dice que la granulometría es extendida o que el material es bien graduado. Para los ríos de llanura en cambio, σ < 3 la granulometría es uniforme o que el material es mal graduado (ver figura 2). Normalmente, los materiales granulares se subdividen según el diámetro de tamizado; mientras que los limos y arcillas según su diámetro de sedimentación. Una de las escalas mas empleadas para esta separación es la clasificación del American Geophysical Union (AGU) mostrada en la tabla 1. Tabla 1: Clasificación de materiales sedimentarios de la American Geophysical Union. Grupo Clase Tamaño [mm] Muy grandes 2 048 - 4 096 Grandes 1 024 - 2 048 Medianos 512 - 1 024 Pequeños 256 - 512 Grandes 128 - 256 Pequeños 64 - 128 Muy gruesa 32 - 64 Gruesa 16 - 32 Mediana 8 - 16 Fina 4 - 8 Muy fina 2 - 4 Muy gruesa 1 - 2 Gruesa 0.5 - 1 Mediana 0.25 - 0.5 Bolos Cantos Grava Arena Fina 0.125 - 0.25 Muy fina 0.062 5 - 0.125 Grueso 0.031 25 - Stokes Limo Mediano 0.062 5 0.015 625 - 0.031 25 0.007 812 5 - 0.015 625 Muy fino 0.003 906 25 - 0.007 812 5 Gruesa 0.001 953 125 - 0.003 906 25 Mediana 0.000 976 563 - 0.001 953 13 Fina 0.000 488 281 - 0.000 976 56 Muy fina 0.000 244 141 - 0.000 488 28 Fino Arcilla Fuente: García Flores et al (1995). Otras propiedades de los sedimentos tales como factor de forma, esfericidad, redondez, velocidad de caída, etc. se encuentran desarrolladas en algunas de las referencias bibliográficas citadas, de las cuales se destacan entre otros García Flores et al (1995) y Weber (2000). Las propiedades de la fase agua son bastante conocidas por lo que sólo serán aquí enumeradas: densidad ρ, peso específico γ, viscosidad dinámica µ, viscosidad cinemática ν, índice de compresibilidad y elasticidad volumétrico, etc. Respecto de las propiedades de la mezcla bifásica se destaca la concentración, la cual equivale a la relación entre volumen de sólidos con volumen total de la mezcla, peso específico de la mezcla, viscosidad dinámica de la mezcla, etc. 3 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 2.2 Iniciación del Movimiento Un lecho granular sometido a la acción de una corriente de agua, observará que en algún momento una partícula es desplazada por la fuerza de arrastre del agua. Conocer en que condiciones ocurre este fenómeno, es el problema denominado Inicio o Umbral del Movimiento del fondo, el cual permite establecer el comienzo y la finalización del flujo bifásico. El estado del arte sobre este tema proviene fundamentalmente de estudios experimentales en laboratorios y con arenas uniformes, los que paralelamente han sido apoyados en teorías mecanicistas y análisis dimensionales, pero existe un cierto consenso en torno al resultado obtenido por el investigador Albert Shields en 1936, conocido como Diagrama de Shields. La acción del agua sobre el lecho puede caracterizarse por una tensión cortante sobre el fondo τo. La resistencia de la partícula a ser movida puede relacionarse con su peso sumergido, el cual es función del peso específico sumergido (γs-γ) y el diámetro D que caracteriza el volumen de la partícula. Con estas tres variable puede formarse el parámetro adimensional τ o tensión de corte adimensional. τ = τo (γ s − γ ) D (3) Esta relación compara la fuerza que tiende a producir el movimiento (acción de arrastre proporcional a τoD2) con la fuerza que procura estabilizarlo o mantenerlo en reposo (acción del peso proporcional a (γs-γ)D3). Analizando el equilibrio de fuerzas en un tramo de cauce de longitud diferencial, en el sentido de la corriente la componente del peso del volumen de control es contrarrestada por la fuerza de rozamiento en su contorno (ver figura 3). τ Figura 3: Corte longitudinal esquemático de un cauce. Para un cauce prismático, el peso del líquido “W” es igual al producto del peso específico por el volumen de control W = γ ⋅ A ⋅ dx donde “A” es el área transversal del cauce. La componente en la dirección del flujo Wx = γ ⋅ A ⋅ dx ⋅ sen θ . Si el ángulo “θ” es pequeño sen θ ≈ tg θ ≈ S siendo “S” la pendiente del tramo de cauce analizado. 4 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Por otro lado, existe una fuerza de fricción aplicada en todo el contorno del cauce que se opone al escurrimiento τ o ⋅ P ⋅ dx , donde “P” es el perímetro mojado del cauce. Analizando el equilibrio de ambas fuerzas resulta τ o ⋅ P ⋅ dx = γ ⋅ A ⋅ S ⋅ dx , resolviendo se obtiene: τo = γ ⋅ R ⋅ S (4) donde “R” es el radio hidráulico del cauce ( R = A ). Para cauces muy anchos (B > 20 h) P entonces R≈h. La ecuación 4 puede escribirse: τo = γ ⋅ h ⋅ S (5) La acción del agua sobre el fondo puede representarse también por una velocidad característica denominada “velocidad de corte u*”. De los conocimientos adquiridos en Mecánica de los Fluidos, esta velocidad se define a partir de la tensión τo como: u* = τo ρ (6) o bien: τ o = ρ ⋅ u* 2 (7) El parámetro adimensional τ definido en la ecuación 3 puede expresarse en términos de la velocidad de corte como: ρ ⋅ u* u* u τ = = = * (γ s − γ ) D g ( ρ s − ρ ) D g∆D ρ 2 2 2 (8) Esta última expresión tiene la estructura de un número de Froude. Además, con la velocidad de corte es posible definir otro parámetro adimensional denominado número de Reynolds granular “Re*”. Re* = u* D υ Es importante destacar que los flujos en la naturaleza son turbulentos y dependiendo del espesor de la subcapa viscosa “δ” respecto del diámetro “D” de las partículas del lecho, el movimiento podrá ser turbulento a pared lisa (δ > D) o rugosa (δ > D) según muestra la figura 4. (9) Figura 4: movimiento turbulento liso (izq.) y rugoso (der.). 5 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES El espesor nominal adimensional de la subcapa viscosa se puede relacionar con el Re* de la siguiente forma: Re* = 11.6 D δ (10) por lo tanto δ = 11.6 D υ = 11.6 Re* u* (11) de la ecuación 11 se observa que si Re* = 11.6 entonces δ = D encontrándose el flujo en una situación particular entre pared lisa y rugosa. El diagrama de Shields (figura 5) muestra la relación entre los parámetros adimensionales τ y Re* descriptos anteriormente. Por debajo de la curva existe reposo; mientras que los puntos por encima de la curva corresponden al movimiento desarrollado. En realidad, este diagrama no es una relación determinística, sino que existe una zona o banda alrededor de la curva en la cual existe una alta probabilidad (∼ 40 a 50 %) de inicio de movimiento. A este valor del parámetro adimensional se lo denomina como tensión crítica “τc”. PARED LISA MOV. TURB. LISO PARED RUGOSA MOV. TURB. DE TRANSICIÓN MOV. TURB. RUGOSO 11.6 Figura 5: Diagrama de Shields. El número de Reynolds granular refleja la relación entre las fuerzas de inercia y viscosas en el entorno de un grano, es decir, el grado de turbulencia. Al aumentar Re* el movimiento es más turbulento alrededor de la partícula y la curva de Shields tiende a ser asintótica horizontalmente (situación análoga al problema de fricción en tuberías del ábaco de Moody). El valor de la tensión adimensional τ en este régimen es independiente del Re* variando, según distintos autores, desde 0.03 a 0.06. El límite entre movimiento turbulento liso y el intermedio es para Re* menores a 3 – 5 (δ > D). Para el paso de intermedio a turbulento rugoso el Re* es de 70 – 100 (δ < D). 6 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 2.3 Acorazamiento Una limitación de la teoría del diagrama de Shields es que dicha curva fue deducida mediante experimentos de laboratorio para materiales granulares finos y de granulometría uniforme. En la naturaleza y sobre todo en ríos de montaña, el lecho esta constituido por una mezcla de materiales de distintos tamaños, cada uno de los cuales posee una tensión crítica diferente. Por lo tanto, una misma corriente puede desplazar mas fácilmente a los materiales finos que a los gruesos. Mediante este razonamiento puede explicarse un desplazamiento selectivo de las partículas más finas, de manera que un material originalmente bien graduado sometido a un régimen permanente, al cabo de un tiempo presentará una frecuencia mayor de gruesos en la superficie. A esta condición se la denomina como acorazamiento del lecho. Figura 6: Acorazamiento. Este fenómeno influye en la rugosidad del cauce ya que la superficie del fondo presenta partículas de grano mayor. También influye en el inicio del movimiento del lecho ya que es necesario primero destruir la coraza para poder mover en material mas fino que hay debajo. Existen estudios empíricos o semi-teóricos que analizan el inicio del movimiento de una mezcla y establecen que las partículas gruesas se ponen en movimiento para una esfuerzo de corte menor del que necesitaría si estuviera acompañada de partículas de su mismo tamaño. Inversamente, las partículas más finas necesitan un esfuerzo mayor para ponerlas en movimiento. Esto significa que una mezcla presenta un comportamiento conjunto en el umbral del movimiento, retrasando o dificultando el desplazamiento de las partículas finas, y anticipando o facilitando el de los granos más gruesos. La posibilidad de acorazamiento de un lecho puede juzgarse por medio de la desviación granulométrica típica σ . En general, para valores de σ > 3 puede existir este fenómeno. 7 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 2.4 Formas de Fondo Cuando es superado el umbral del movimiento τ > τ c , el fondo de un río puede presentar una configuración ondulada siguiendo las llamadas formas de fondo. Este fenómeno tiene gran importancia porque participa en el transporte de sedimentos e interviene en la resistencia al flujo (rugosidad). Las formas de fondo ocurren en lechos de arena, mientras que en ríos de grava o de materiales gruesos y de granulometría extendida se presentan en forma limitada o directamente no se producen. Al comenzar el movimiento en un lecho de arena e ir aumentando la velocidad se presentan las siguientes formas: rizos, dunas, fondo plano y antidunas. Los rizos o arrugas son pequeñas ondulaciones triangulares con altura máximas del orden de centímetros y longitud de onda del orden de decímetros. Sólo aparecen con arena fina (< 0.6 mm) y su presencia es un indicador que el movimiento en el fondo todavía no es turbulento rugoso (δ > D). Las dunas son ondulaciones también triangulares pero con taludes diferentes, el de aguas arriba es muy suave y el de aguas abajo es muy marcado. El tamaño de la duna es un orden de magnitud mayor que el de los rizos y además mantiene una proporción con el tirante de agua. La superficie libre se ondula suavemente en oposición al fondo (descenso sobre la cresta y ascenso sobre el valle) lo que indica que el régimen hidráulico es lento. Las dunas se desplazan hacia aguas abajo por el avance de los granos sobre la pendiente suave para quedar atrapados en el valle, o bien ser suspendidos dentro de la masa líquida debido a la gran turbulencia de estos sectores. Aumentando la velocidad de la corriente, las dunas se alargan hasta ser barridas, quedando el lecho plano. Con una velocidad mayor, el lecho se ondula en formas asimétricas llamadas antidunas cuya forma puede migrar hacia aguas arriba a pesar de verificarse un fuerte transporte de sedimentos aguas abajo. La superficie libre presenta una fuerte ondulación en correspondencia con el fondo, lo que indica que el régimen hidráulico es rápido. La evolución de este régimen conduce a la aparición de crestas de espuma y finalmente verdaderos resaltos hidráulicos. En ocasiones, se añade a la clasificación una denominada “rápidos y pozos” que es el punto final de la evolución y se producen en ríos de gran pendiente. Este hecho sugiere que el régimen rápido no ocurre en forma estable y prolongada dado que el fondo es deformable y móvil. La secuencia de las formas de fondo descriptas se muestran en la figura 7. Figura 7: Formas de fondo: a) rizos, b) dunas, c) antidunas, d) rápidos y pozos. 8 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Existen diversos criterios para deducir las formas de fondo de un lecho granular. Uno muy simple emplea las mismas variables adimensionales del diagrama de Shields, con lo que resulta un área distinta para cada forma por encima de la curva de inicio del movimiento (figura 8). Se observa que los rizos o arrugas corresponden al movimiento turbulento liso y que son sustituidas por dunas y lecho plano para flujo mas desarrollado. Otros autores presentan gráficos similares de los que se destacan el de Bogardi citado por Weber (2000). Figura 8: Formas de fondo en un Diagrama de Shields. Cada forma de fondo agrega a la rugosidad debida al tamaño del grano una resistencia por forma. Ésta es lógicamente mayor con las dunas que con rizos o fondo plano. Por otro lado, este último coincide aproximadamente con el régimen crítico (Fr = 1). En la figura 9 se observa la tensión total debida a las fuerzas de rozamiento en el fondo según la evolución de formas. Figura 9: Tensión de corte total en función del número de Froude. Para separar la fricción por grano de la que producen las formas de fondo existen diversos métodos empíricos de los cuales se destacan el de Einstein, Einstein-Barbosa y EngelundHansen. Este último es desarrollado por Weber (2000). 9 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 2.5 Transporte de Sedimentos • Clasificación de transporte El transporte de sedimentos en un río puede clasificarse conforme a dos criterios: según el modo de transporte y según el origen del material. Según el modo de transporte, el sedimento puede ser transportado en suspensión sostenido en el seno del flujo por la turbulencia, o bien por el fondo rodando, deslizando o saltando (en correspondencia con el tamaño del grano: de grueso a fino respectivamente). Una partícula inicialmente en reposo puede ser transportada rodando o saltando cuando se supera el umbral del movimiento, pero si la corriente sigue creciendo, puede ser luego transportada en suspensión. Cuanto más intensa es la corriente mayor es le tamaño del material que puede ser puesto en suspensión y transportado de ese modo. Esta idea conduce a observar que el sedimento cuyo origen es el cauce puede ser transportado de ambos modos: en suspensión y por el fondo. Otro origen posible del material transportado es la cuenca hidrográfica del río. Este material es muy fino (limos y arcillas D < 0.0625 mm), es transportado siempre en suspensión y se denomina carga de lavado (de la cuenca) o foránea (al cauce). La clasificación del transporte de sedimentos se resume en la tabla 1. Tabla 1: Clasificación del Transporte de Sedimentos. Origen del Material LECHO (qs) Modo de Transporte qsf • Rodamiento DE FONDO qss CUENCA (qw) Material grueso • Deslizamiento • Saltación (debido a las Formas de Fondo) Material fino EN SUSPENSIÓN El transporte de sedimentos total será: qt = qsf + qss + qw (12) El transporte en suspensión puede representar el 90% o más de todo el transporte sólido de un río y dentro de éste la carga de lavado o foránea puede ser la más importante. La carga de lavado está relacionada a las características hidrológicas de la cuenca: tipo de suelos y cobertura, topografía, precipitaciones, etc. el material transportado en suspensión tiene gran repercusión en la desembocadura de un sistema fluvial: formación de deltas y colmatación de embalses. El transporte de fondo en cambio, tiene la mayor repercusión sobre el río mismo ya que causa sus modificaciones y es por ello el interés en la hidráulica fluvial. El transporte de fondo (material del cauce) está relacionado a las características del cauce: ancho, pendiente, granulometría, caudal, etc. 10 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES La separación de transporte de fondo a suspensión no es abrupta en la naturaleza, es decir no existe un límite exacto, pero si se cuenta con criterios empíricos tales como el de Raudkivi (ver tabla 2) que permite tener una idea de este fenómeno en función de la relación entre la velocidad de caída de las partículas “ω” con la velocidad característica cerca del fondo “u*”. Tabla 2: Criterio de Raudkivi para separación de modos de transporte de Sedimentos. 6> 2> 0.6 > • ω/u* ω/u* ω/u* >2 > 0.6 >0 Rodamiento, deslizamiento Saltación Suspensión Concepto de equilibrio del fondo Un lecho se encuentra en equilibrio en presencia de transporte de sedimentos cuando no sufre modificación en su cota de fondo. Las variables que entran en juego para proporcionar este equilibrio son numerosas. Con un propósito sólo cualitativo, Lane en 1955 propuso tener en cuenta 4 variables: caudal líquido “q”, caudal sólido de fondo “qsf”, la pendiente “S” y el tamaño del sedimento “D” y las dispuso en la analogía de la balanza (figura 10). La balanza de Lane es una herramienta muy útil para analizar el desequilibrio de un río, en particular, por causa de una intervención humana. Figura 10: Analogía de la Balanza de Lane. Los caudales líquidos y sólidos de un río pueden estar equilibrados o no, si no están en equilibrio puede haber exceso o defecto de material sólido, respondiendo mediante una sedimentación o erosión respectivamente. Esta igualdad es relativa a la pendiente de cauce, y se puede establecer la pendiente de equilibrio como aquella que compensa los caudales líquidos y sólidos (por ejemplo muchos sólido y poco agua se equilibran formando una gran pendiente). El equilibrio depende también del tamaño del material. Por ejemplo, el mismo caudal sólido de partículas mas gruesas y el mismo caudal de agua se equilibra con una mayor pendiente, y viceversa. 11 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS • OBRAS FLUVIALES Cuantificación del transporte La cuantificación del caudal sólido de un río puede hacerse mediante mediciones (ya sean directas o indirectas) o con el empleo de fórmulas de transporte. Las ecuaciones o fórmulas de transporte tratan de cuantificar el caudal sólido de una corriente en función de sus características hidráulicas y de las propiedades geométricas y granulométricas del cauce. La complejidad de la mecánica de transporte de sedimentos es tal que todavía no existe una verdadera ecuación dinámica del transporte de la fase sólida de un flujo de agua y sólidos. En su lugar, se han desarrollado numerosas ecuaciones empíricas, semiempíricas o basadas en distintas teorías y que responden a ciertas observaciones, en general, de laboratorio. Estas ecuaciones son aproximadas, no exactas, y sólo válidas dentro del rango en que fueron obtenidas cada una de las variables y sus relaciones. Otra limitación de las ecuaciones de transporte proviene de que son fórmulas de capacidad de transporte, es decir, de transporte en potencia. Para que el transporte real sea comparable a la capacidad de transporte es necesario que exista sedimento disponible en la corriente. Cuando existe material disponible el transporte real y la capacidad tenderán a coincidir en términos medios de espacio y tiempo. En cambio, si no hay disponibilidad de material el transporte real será inferior a la capacidad. Para un flujo dado, la capacidad de transporte (el caudal sólido transportable) es menor a mayor tamaño de las partículas. Lo mismo puede suceder con la disponibilidad, es decir, el volumen por unidad de tiempo que la parte superior del cauce o la cuenca puede proporcionar al tramo considerado. Entre ambas magnitudes puede ocurrir lo ilustrado en la figura 11, en tal caso, la aplicabilidad de una fórmula de transporte será errónea si el material es mas fino que D*, pues la cantidad transportada estará controlada por la disponibilidad del material, no por la capacidad de transporte. Figura 11: Disponibilidad y capacidad con relación al transporte sólido. 12 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Las ecuaciones de transporte de fondo son fórmulas unívocas y más o menos explícitas entre en caudal sólido unitario qsf y las características hidráulicas del cauce. Muchas responden a una relación funcional del tipo: q sf = F (τ o − τ c ) (13) donde τ c es la tensión crítica (Shields) y τ o la tensión actuante en el fondo. De esta manera, el caudal sólido es función creciente del exceso de tensión de corte sobre la del inicio del movimiento. En general, ante solicitaciones máximas (crecidas) las fórmulas arribadas por diferentes autores muestran cierta similitud en que este funcional “F” responde a una potencial con exponente 3/2 (García, 1999). Tanto para la cuantificación del transporte de fondo como la carga de lavado existe una gran cantidad de ecuaciones de diferentes autores. Estas ecuaciones son ampliamente desarrolladas en diversas bibliografías de las cuales se destaca principalmente la de Maza et al (1996) y Weber (2000). 13 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3. CONTEXTO GEOMORFOLÓGICO La morfología de ríos estudia la estructura y forma de los ríos, abarcando la configuración del cauce en planta, la geometría de las secciones transversales, las formas de fondo y las características del perfil longitudinal. Las teorías y planteos analíticos para ríos se han desarrollado para casos idealizados. Los datos empleados, ya sean de campo o laboratorio, corresponden a canales rectos con secciones transversales casi invariantes, en los cuales se supone que el caudal es casi constante y se mantiene por grandes periodos. Efectivamente, los ríos reales muestran muchas de las características idealizadas en los canales estables que merecen la atención del ingeniero; sin embargo existen varias diferencias entre ambos que es necesario conocer para la aplicación satisfactoria de dichas teorías. 3.1 Clasificación de los Ríos Para facilitar el estudio, se han clasificado a los ríos según diferentes puntos de vista, lo cual permite ubicar fácilmente a cualquier cauce para determinar sus principales características. Debe tenerse e cuenta que en la naturaleza es posible encontrar situaciones intermedias a las que serán definidas en esta clasificación. 3.1.1 Según la Edad Geológicamente, los ríos son clasificados como jóvenes, maduros y viejos. Los ríos jóvenes se encuentran en cauces de montaña, tienen pendientes altas y sección transversal tipo “V”. Son muy irregulares y generalmente se encuentran en un proceso de degradación. Los ríos maduros se presentan en valles amplios y tienen pendientes relativamente bajas, la erosión de las márgenes ha reemplazado a la erosión de fondo. Estos ríos son estables y la sección transversal de cada tramo es capaz de transportar la carga de sedimento en todo su recorrido. Los ríos viejos se encuentran en valles amplios y planicies cuyo ancho es 15 a 20 veces mayor que el ancho de meandros. Las pendientes son muy bajas y forman depósitos naturales de sedimentos en las márgenes. Frecuentemente se encuentran zonas de pantanos y/o lagos con formas de herradura que son restos de meandros abandonados que fueron cortados en forma natural. 3.1.2 Según la Condición de Estabilidad a) Estabilidad Estática: cuando la corriente es capaz de arrastrar sedimentos pero no puede mover las partículas o elementos de las orillas. Por ejemplo en márgenes rocosas o con suelos de alta cohesión. b) Estabilidad Dinámica: cuando las variaciones de corriente, materiales del fondo y de las orillas y los sedimentos transportados han formado una pendiente y una sección 14 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES transversal que se mantienen en el tiempo. En estas condiciones, el río sufre desplazamientos laterales continuos en las curvas, con erosiones en las márgenes exteriores y depositación en las interiores. Todos los caudales, antes de producirse un desborde, escurren por un único cauce que no tiene islas o bifurcaciones. Por ejemplo ríos de planicie formados por un único cauce. c) Inestabilidad Dinámica: el río escurre por un solo cauce pero se presenta cuando el desplazamiento lateral de los meandros es muy intenso y por lo tanto, el corte natural de ellos ocurre frecuentemente. Por un lado, el río trata de desarrollar su pendiente de equilibrio al desarrollar sus meandros y por otra, éstos se estrangulan rápidamente y se cortan. El río no alcanza a estabilizar su pendiente. d) Estabilidad Morfológica: este grado de estabilidad posee el concepto más amplio. En cualquier cauce natural, la pendiente de un tramo cualquiera, el ancho y el tirante de su sección transversal, así como el número de brazos en que se divide el cauce, dependen del caudal líquido que escurre anualmente y de su distribución, de las características de los materiales que componen el lecho y las orillas, y de la calidad y cantidad del sedimento que es transportado. En otras palabras, cualquier corriente natural no alterada por factores humanos tiene estabilidad morfológica. Un cauce que en forma natural tiene estabilidad estática o dinámica, también tiene la morfológica. 3.1.3 Según el Tramo (ver tabla 3) Tabla 3: Clasificación propuesta por Lojtin según la ubicación del tramo. Denominación Alta Montaña Montaña Faldeo o Piedemonte Intermedio Planicie (con cauce arenoso) Río Caudaloso Río poco Caudaloso D/S > 10 >7 >6 >5 Fr >1 0.7 a 1 0.45 a 0.7 0.2 a 0.45 >2 >1 0.44 a 0.55 0.14 a 0.44 Donde: D diámetro medio de las partículas de fondo [m]; S pendiente del cauce [m/m] y Fr número de Froude. 3.1.4 Según los Grados de Libertad Se denomina grados de libertad (GL) a la forma de respuesta de un cauce ante una variación en el caudal (ver figura 12). i. Si sólo varia el tirante, se dice que existe 1 GL (por ejemplo un canal revestido de hormigón armado). Cuando se tiene 1 GL no existe transporte de sedimentos. ii. Cuando sólo puede variar el tirante y la pendiente, se dice que el cauce tiene 2 GL (por ejemplo cuando las márgenes son rocosas y el fondo arenoso). 15 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES iii. Si además del tirante y la pendiente, también pueden alterarse las márgenes y ajustarse al ancho, se dice que el cauce tiene 3 GL (por ejemplo la mayoría de los cauces naturales que escurren sobre materiales aluviales). Figura 12: Grados de Libertad de un Cauce. Para algunos autores existe un cuarto grado de libertad. Este cuarto GL lo tienen los cauces con 3 GL cuando llegan a formar meandros. En general, se considera que las corrientes naturales tienen 3 GL, y que si desarrollan meandros es porque la pendiente de la planicie es mayor que la pendiente hidráulica del escurrimiento, y por lo tanto, se ven obligados a aumentar la longitud de su recorrido, lográndolo al erosionar las márgenes y desplazarse lateralmente. 3.1.5 Según el Material de las Márgenes y el Fondo a) Cohesivo: son cauces alojados en materiales predominantemente arcillosos. b) No cohesivos o Granulares: cauces alojados en material formado por partículas sueltas. Pueden subdividirse a su vez según la clasificación dada en la Tabla 1 o bien según la distribución granulométrica: i. Bien graduados o con granulometría extendida: σ > 3 existe la posibilidad de acorazamiento; ii. Mal graduados o de granulometría uniforme: σ < 3 16 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3.1.6 Según el Tiempo que Transportan Agua a) Ríos Perennes: estas corrientes transportan agua durante todo el año y están siempre alimentadas por el agua subterránea. Son propios de climas húmedos. b) Ríos Intermitentes: transporta agua en las épocas de lluvias cuando el nivel freático asciende. En épocas de sequías el río no transporta agua excepto cuando ocurre una tormenta. Son propios de climas semiáridos. c) Ríos Efímeros: aquellos que sólo llevan agua bajo episodios de fuertes precipitaciones, manteniéndose secos el resto del tiempo. El nivel freático se encuentra siempre debajo del lecho, y es el río el que alimenta a los almacenamientos subterráneos. Son propios de climas áridos. 3.1.7 Según la Pendiente la pendiente de un río establece la diferencia más importante en cuanto al régimen hidráulico. a) Torrenciales: S > 1.5 % b) Torrentes: S > 6 % en éstos se abandona la premisa de que el flujo tiene una fase líquida y otra sólida, ya que la cantidad de sólidos transportados es tal que el comportamiento del flujo es no newtoniano (Huang et al, 1997) 3.1.8 Según la Geometría Para esta clasificación se emplea la relación conocida como índice de sinuosidad “P” según: P= Longitud del Thalweg Longitud del Valle a) Cauces Rectos: normalmente ocurre en pequeños tramos y son transitorios ya que cualquier perturbación produce flujos transversales que inician la formación de curvas o meandros. P < 1.2. En general, los tramos rectos se presentan cuando el río escurre a lo largo de una falla (14) geológica o cuando existe alguna modificación de tipo antrópica. Figura 13: Cauce Recto. b) Cauces Sinuosos: 1.2 < P < 1.5 17 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS c) Cauces con Meandros: P > 1.5. estos cauces presentan curvas alternadas unidas por tramos rectos y cortos. La pendiente normalmente es baja. Los tirantes en los tramos rectos son menos profundos que en las márgenes cóncavas. d) Cauces Trenzados: no presentan un solo cauce sino que se dividen continuamente en varios cauces se entrelazan y se vuelven a separar. Los cauces son amplios y las márgenes no están bien definidas. Para caudales bajos existen dos o más cauces principales entrelazados y se forman cauces secundarios. En crecidas, el agua cubre todos los cauces y grandes cantidades de sedimentos son depositados rellenando cauces antiguos. OBRAS FLUVIALES Figura 14: Cauce con Meandros. Generalmente, estos cauces tienen pendientes altas, el material es grueso y llegan grandes cantidades de sedimentos. La principal característica de estos cauces es que están sujetos a un proceso de sedimentación. Figura 15: Cauce Trenzado. En la naturaleza se distinguen dos morfologías fluviales típicas: el trenzado o anastomosado y el meandriforme, ambos ya descriptos. Existen otras formas menos frecuentes en los cauces y que se generan según las características de ciertos lugares específicos. A continuación se mencionan algunas de las mas importantes. e) Cauces con Islas: se forman islas en su interior, las cuales pueden desplazarse hacia aguas abajo, o bien si permanece estable por varios años son cubiertas por vegetación. f) Cauces en Estuarios: se presentan en las desembocaduras de los ríos en los océanos y están altamente influenciados por las mareas. g) Cauces en Pantanos: normalmente son muy amplios por no existir pendiente o ser muy pequeña, además presentan zonas muertas y saturadas por altos niveles freáticos. Los tirantes son reducidos y se genera un ambiente favorable para el crecimiento de la vegetación. h) Deltas: son aquellos ríos que arrastran gran cantidad de sedimentos y desembocan en lagos, embalses o en el mar con mareas reducidas. El material depositado, en general sedimentos finos, inicialmente forma flechas paralelas a flujo, las cuales posteriormente incrementan su ancho debido a la acción del oleaje y los materiales que continúan depositándose. Al ocurrir grandes crecidas estas flechas se rompen por donde sale parte del flujo y se repite nuevamente el proceso descripto. Este 18 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES proceso genera un abanico de sedimentación cuya forma se asemeja a la letra griega ∆, de donde proviene su nombre. Las principales variables que intervienen en su formación son la temperatura, carga de sedimento, salinidad y la pendiente del río. Los deltas presentan siempre varios brazos. i) Abanicos Aluviales (o conos de deyección): son depósitos de sedimento cuya forma se asemeja a un segmento de sección cónica, que visto en planta se parece a un abanico y tiene una pendiente así uniforme desde el ápice hasta el borde final (ver figura 16). Se presentan normalmente en zonas áridas y montañosas con pendientes fuertes. Ocurren en el punto donde la corriente pasa de un cauce estrecho a otro muy amplio, o bien cuando la pendiente disminuye abruptamente. Figura 16: Abanico Aluvial. En el ápice del abanico, donde las velocidades decrecen repentinamente, la corriente deposita grandes cantidades de material, parte del cual es arrastrado por crecidas posteriores. El flujo en los canales aguas bajo del ápice escurre con tirantes y velocidades mayores a la crítica. 3.1.9 Según las Condiciones del Transporte Es normal considerar que los tramos de los ríos pueden estar sujetos a un proceso de erosión, sedimentación o en equilibrio. Una clasificación importante relacionada a estos aspectos es la propuesta por Schumm en 1963 la cual se muestra en la Tabla 4. Tabla 4: Clasificación de cauces según Schumm. Forma del Transporte de Sedimento M% Estable En suspensión del 85 al 100 % 100 En suspensión del 65 al 85 % y en el fondo del 15 al 35 % 30 De fondo del 35 al 70 % <5 F<7 P > 2.1 S baja 7 < F < 25 1.5 < P < 2.1 S moderada F > 25 1 < P < 1.5 S alta Estabilidad del Cauce Depositación Erosión El principal depósito ocurre en las Predomina la erosión del márgenes que origina el estrechamiento fondo. Poca ampliación de del cauce. El depósito en el fondo es márgenes. menor. Es importante la erosión del Es importante el depósito en las fondo y la ampliación de márgenes y también en el fondo. márgenes. La erosión del fondo es baja, Depósito en el fondo y formación de y la ampliación del cauce es islas. muy importante. Donde: F = B/h, B ancho de la superficie libre, h tirante; P índice de sinuosidad; S pendiente longitudinal del fondo. 19 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3.2 Características Físicas (o Geometría Hidráulica) El problema de predecir o deducir la geometría de un río si se le permiten todos sus grados de libertad ha preocupado a muchos investigadores de la geomorfología. Se cuenta con observaciones relativamente sencillas de las características geométricas de los ríos que sugieren relaciones empíricas entre ellas. La morfología de los cauces cambia con el tiempo y es afectada principalmente por el caudal, el material transportado, el diámetro representativo del material de fondo, la pendiente del lecho, la relación entre el ancho de la superficie libre y el tirante, y la configuración de curvas. MORFOLOGIA = f (t , Q, Qs, D, S , B, H , etc.) (15) Es necesario notar que la mayoría de las veces, en los factores de la expresión 15, son mas importantes sus interrelaciones que la influencia de cada uno por separado. Así por ejemplo, la pendiente longitudinal, la carga de sedimento y la resistencia al movimiento de as márgenes y del fondo, son interdependientes, pues están estrechamente ligadas entre si. A continuación se muestran algunas de las relaciones más importantes entre estas variables. • Pendientes, Bray en 1973 propuso: S = 0.003634 M −0.38Qm−0.32 (16) Donde: S es la pendiente longitudinal del cauce [m/m], Qm es el caudal medio anual [m3/seg], M es por porcentaje de sedimentos transportados menor a 0.074 mm (apertura del tamiz 200). Esta relación indica que al aumentar el caudal o al disminuir el tamaño del material sólido, la pendiente disminuye. • Sección Transversal (el mismo autor en 1982): Deducida para lechos de grava (con posibilidad de acorazamiento) para cauces rectangulares muy anchos relaciones B/h > 50. B = 4.75Q 0.527 (17) h = 0.266Q (18) 1 3 Siendo: B el ancho promedio de la sección [m], Q el caudal pico [m3/seg] para una crecida de recurrencia de 2 años, h el tirante promedio de agua [m]. • Transporte de sólidos, Schumm en 1960: Relaciona la sección transversal con la cantidad de limos y arcillas F= B = 255M −1.08 h (19) 20 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3.3 Caudal Formativo Es el caudal que de escurrir en forma constante genera las mismas dimensiones promedio de la sección transversal y la pendiente (definición dada por Inglis en 1947). Existen varios criterios para obtener este caudal formativo. Entre los más importantes y cuya utilización es recomendada están los siguientes: i. Capacidad hidráulica del cauce principal. Es decir, el caudal máximo capaz de escurrir por el cauce principal sin desbordar (Inglis). Esta definición se aplica a ríos de planicie. ii. Caudales asociados a ciertas frecuencias. • Q de periodo de retorno de 1.4 años (Leopold y Maddock). • Q que ocurre cada 170 días (Nixon). • Q que ocurre el 3 % de los días del año. iii. Cuando el método de cálculo tiene en cuenta el transporte de sedimentos el caudal formativo se denomina caudal dominante Qd. Qd ∫ = t2 t1 Q (t ) ⋅ Qs(t ) ⋅ dt ∫ t2 t1 Qs(t ) ⋅ dt (20) Donde: Q(t) es la serie de caudal líquido, Qs(t) es la serie de caudales sólidos. Ambas series de caudales deben estar en las mismas unidades y asociadas a un mismo intervalo de tiempo dt. El criterio de Shaffernak establece como Qd aquel que durante los días que se presenta a lo largo de un año, transporta el mayor volumen de sedimentos. Similarmente, el USBR considera sólo las partículas de arena (D > 0.062 mm) en el transporte de fondo. El procedimiento tiene en cuenta las siguientes relaciones: • Curvas de frecuencia de Q. • Curva de Q vs. Qs. • Curva de Q vs. volumen de sedimentos transportados. 3.4 Meandros la evolución de los meandros puede clasificarse en dos categorías: a) la migración hacia aguas abajo de todo el meandro y b) la expansión de la curvatura del meandro, su estrangulamiento y finalmente el corte del mismo. El desarrollo de meandros incrementa la longitud del río y por consiguiente disminuye la pendiente. El meandro es el mecanismo natural por el cual un río ajusta su pendiente cuando la del valle por donde fluye es mayor que la necesaria. La configuración y geometría de un cauce con meandros está determinadas por la erosión y socavación de la margen externa o cóncava y el depósito de sedimentos a lo largo de la margen interior o convexa. La figura 17 muestra los parámetros principales de un meandro. 21 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Figura 17: Meandros. Lane en 1957 analizó 144 ríos y estableció una relación entre el caudal medio, la pendiente el material de fondo y de las márgenes y de la forma del río en planta. La ecuación que propone para ríos con meandros y trenzados si el fondo es de arena, es la siguiente: K −0.25 S = Q 2.44 (21) Donde: S pendiente [m/m], Q caudal medio anual [m3/seg] y K un coeficiente que tiene en cuenta la forma del cauce en planta. Esta ecuación se representa gráficamente en la figura 18. Determinados los valores de Q y S se obtiene un punto en la gráfica. Si el punto queda bajo la recta de K = 0.0017, el río es meandroso, si queda sobre la recta de K = 0.01 será trenzado y si está entre las dos será intermedio. Cabe destacar que la relación 21 representa un brazo de palanca en la balanza de Lane presentada en la figura 10 (sección 2.5). Figura 18: Relación entre la pendiente y el caudal según la expresión de Lane. Hay una gran cantidad de ríos que debido a su origen y a la resistencia del material donde se alojan, el meandreo es prácticamente fijo, es decir, se trata de cauces con meandros en trinchera. 22 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3.5 Flujo en Curvas Entre el interior y exterior de una curva se desarrolla una sobreelevación del nivel de agua por causa de la fuerza centrifuga. El valor de esta sobreelevación puede obtenerse con bastante precisión mediante la siguiente ecuación: ∆z = U2 ⋅B g⋅r (21) Donde: ∆z sobreelevación [m], U velocidad media de la corriente [m/seg], B ancho del cauce [m], g aceleración de la gravedad [m/seg2] y r radio de la curva. Figura 19: Sobreelevación en curvas. Esta fuerza centrifuga explica otro efecto importante. En una sección vertical A-A (figura 19) donde la distribución de velocidades es logarítmica, al girar sobre un mismo radio r, se desarrolla mayor fuerza centrifuga en la superficie que en el fondo. Por causas de estas fuerzas desiguales, existen componentes de velocidad en la transversal que generan una circulación llamada “corriente secundaria”. Esta corriente en la transversal, sumada al movimiento longitudinal producen un flujo helicoidal que forma o modela la sección en las curvas. El lado exterior de la curva es mas profundo por efecto del descenso de este flujo helicoidal, mientras que el interior forma una suave pendiente debido a la corriente ascendente. Este proceso se esquematiza en la figura 20. Figura 20: Corriente Secundaria – Flujo Helicoidal. 23 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 3.6 Ecosistema Fluvial En la descripción de los ríos no puede faltar la consideración de su valor ecológico. Los ríos, en estado natural, son ecosistemas complejos y singulares, que merecen una protección y conservación. Se destacan tres aspectos fundamentales del medio fluvial: 1) El cauce de las aguas continuas o permanentes alberga flora y fauna acuática. Su valor depende de su diversidad biológica y esta es función de la diversidad física. Así hay diferentes hábitat para distintas especies cuando, por ejemplo, en unos lugares hay sol y en otros sombra, en uno el fondo es de gravas y en otros de barro, se suceden los pozos de aguas calmas y los rápidos, hay islas o barras o bolos emergidos e intersticios sumergidos, hay zonas de mayor y menor velocidad, etc. 2) También se debe destacar la llanura de inundación (cuando existe), cuyo valor ecológico para sustentar una comunidad biológica singular como zona humedad depende de la frecuencia de la inundación y de su duración, del nivel freático y de la diversidad física de la llanura: depresiones, meandros abandonados, crestas, suelos de distinto tipo. La inundación que aporta agua, sedimento y nutrientes es importante para la vida de la llanura. 3) Además, el bosque de ribera sino ha sido degradado por la agricultura o pastoreo constituye un ecosistema de gran valor biológico. Aparte de la vegetación acuática, sumergida o semisumergida, el bosque está constituido por un estrato arbóreo de especies caducifolias como sauces, fresnos, álamos y olmos más o menos próximos al agua según su necesidad hídrica, un estrato arbustivo en los claros o bordes del bosque (por ejemplo zarzales) y un estrato herbáceo. El bosque de ribera controla la llegada de energía al sistema acuático mediante la sombra y los detritos vegetales. Actúa a modo de filtro, pues retiene las partículas en suspención de las aguas de escorrentía y capta nutrientes de las aguas subterráneas que afluyen al río. También cumple una función de estabilización de las orillas mediante las raíces. Es muy dinámico pues puede resultar destruido por una avenida pero rehacerse rápidamente. El bosque puede albergar gran riqueza ornitológica, también en combinación con humedales. 24 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 4. OBRAS FLUVIALES En el presente apartado se abordarán los conceptos principales que permitan comprender el funcionamiento de las obras fluviales más comunes, con las que seguramente se enfrentará un ingeniero durante su vida profesional. Es importante destacar que existen extensas bibliografías que analizan en detalle cada uno de los temas que serán desarrollados en adelante. El objetivo es dar los lineamientos generales y conceptos amplios que proporcionen el conocimiento para proyectar obras de ingeniería fluvial. De manera que un estudio detallado de cualquier tipo de estas obras demandará una profundización en el tema específico que debe ser analizado. 4.1. Efectos del Transporte de Sedimentos Como consecuencia del flujo bifásico, y en función de los temas revisados en los apartados anteriores, es posible asegurar que un tramo de cauce de un río cualquiera estará sometido a fenómenos de erosión o sedimentación, y en el mejor de los casos, en equilibrio. Si bien estos términos han sido aplicados en las secciones anteriores, es necesario definirlos adecuadamente: • Erosión (o degradación): descenso del nivel del lecho y/o por lo menos una de las márgenes se desplaza alejándose del eje de escurrimiento. • Depositación (o sedimentación): ascenso del nivel del lecho o al menos una de las márgenes converge al eje de escurrimiento. • Equilibrio (o estabilidad): puede ser estático, cuando el escurrimiento es incapaz de transportar material del lecho o de las márgenes; o dinámico, cuando la sección transversal permanece aproximadamente constante para diferentes periodos de tiempo. Todas estas definiciones dependen de cual sea el periodo de tiempo (∆t) de análisis, ya que observando un lecho antes y después de una crecida es posible que la sección no haya variado notablemente; mientras que para un ∆t menor, es decir, durante la crecida el lecho sufre importantes variaciones (dependiendo de las variables analizadas Q, Qs, D, S, etc.). Estos procesos pueden ocurrir de manera individual o conjuntamente en un tramo de un cauce. Por ejemplo, en una curva se tiene un proceso de erosión en la margen externa; mientras que la interna se encuentra sometida a sedimentación. Además, estos fenómenos pueden resultar influenciados por causas antrópicas, ya sean acelerándose o retardándose. A su vez, dichas alteraciones pueden ubicarse localmente o afectar a gran parte de un río. Particularmente nos interesan las influencias derivadas de la construcción de obras de ingeniería. Para el proyecto de obras sobre ríos, por ejemplo puentes, obras de captación, estaciones de bombeo, cruce de conducciones, estabilización de márgenes, etc., el ingeniero debe tomar conciencia que está interfiriendo con el desarrollo de un proceso natural. Por este motivo, el ingeniero fluvial o civil abocado al proyecto y diseño de estas obras, necesita conocer y establecer o estimar cuantitativamente esta interferencia y sus posibles consecuencias. 25 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Particularmente, nos ocuparemos de los procesos erosivos y principalmente de aquellos que afectan a las obras de ingeniería. 4.2 Tipos de Erosión A) Erosión General Se denomina erosión general, al descenso general del lecho debido a un aumento de la capacidad de transporte de una corriente en crecidas. Afecta a tramos largos del cauce y seria la única erosión en un cauce recto, prismático y sin ninguna singularidad (a diferencia de erosión local). Este fenómeno es todavía poco conocido. Puede analizarse como el transporte diferencial de sedimentos entre dos secciones para igual caudal líquido como muestra la figura 21. Figura 21: Erosión General (Qs2 > Qs1). La magnitud de la erosión general se puede calcular, por ejemplo, a partir del criterio de inicio de movimiento ante una corriente permanente. Una vez establecida la posición de la superficie libre (para cierto caudal), el cálculo se realiza manteniendo fijo el nivel del agua y se desciende el nivel del lecho, aumentando de esta manera el área y disminuyendo la velocidad, hasta que la velocidad sea incapaz de mover las partículas. Existe una gran variedad de ecuaciones empíricas para estimar la erosión general que se deducen a partir de distintas hipótesis. Una de las mas conocidas es la de Blench, la cual parte de la teoría del régimen. El autor plantea que durante la crecida se alcanza el tirante dado por las ecuaciones régimen. Para arenas de 0.06 < d50 (mm ) < 2 q 23 y m = 1.20 1 6 d 50 (22) Para gravas con d50 (mm ) > 2 q 23 y m = 1.23 1 (23) 12 d 50 Donde: ym tirante de erosión medio [m] (desde la superficie libre hasta el fondo del lecho erosionado), q caudal por unidad de ancho [m3/seg m], el diámetro medio d50 [mm]. 26 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES B) Erosión por Estrechamiento Este tipo de erosión en las aproximaciones a distintas obras, como por ejemplo a puentes, encauzamientos, etc. Al reducirse el ancho de la sección, la corriente aumenta su velocidad y por ende aumenta el transporte de sedimentos, el tirante aumenta y puede variar la pendiente del fondo a partir de la contracción. Este proceso se detiene cuando alcanza la situación de equilibrio para todo el tramo τ o ≈ τ c y el Qs1 ≈ Qs2. Figura 22: Erosión por Estrechamiento. El grado de estrechamiento es considerado por la relación de contracción β: β = B1 B2 (24) Para estimar el valor de esta erosión, existe una infinidad de trabajos entre los que se destacan el de Laursen (1958 a 1963), Komura (1966), Gill (1981) y Parker (1981). En general, estos autores desarrollan distintas ecuaciones según se trate de agua limpia (clear water) o lecho vivo (live bed). Como veremos mas adelante, el agua limpia tiene mayor potencial de erosión debido a que el sedimento arrastrado no es repuesto por la corriente. Si bien el trabajo de Laursen es uno de los más antiguos, analiza distintas situaciones de contracción del cauce principal y llanuras de inundación, por lo que se torna uno de los más completos. Para lecho vivo, contracción tanto del canal principal como de la llanura de inundación, y diferentes coeficientes de rugosidad aguas arriba y abajo, Laursen propone: 6 h2 Q2 7 k 1 n2 β = h1 Q1m n1 k2 (25) Para lecho vivo y contracción únicamente de la llanura de inundación (B1 = B2): h2 Q2 = h1 Q1m 6 7 (26) 27 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Para lecho vivo y contracción únicamente del canal principal: h2 = β k1 h1 (27) En la situación de agua clara (condición de equilibrio estático), Laursen llega a establecer analíticamente: 6 h2 V12 = β 7 36h 13 D 2 3 h1 1 50 3 7 (28) donde las variables de las ecuaciones 24 a 28 significan: B1, B2, h1 y h2 anchos y tirantes en el canal principal [m], Q2 caudal [m3/seg], en la sección contraida (Q2 equivale al caudal de diseño completo), Q1m caudal [m3/seg] en el canal principal aguas arriba, n1 y n2 coeficientes de rugosidad de Manning (para el equivalente perímetro mojado), k1 y k2 coeficientes que dependen de la relación entre las velocidades de corte (u*) y de caída (ω) dada en la tabla 5, V1 es la velocidad media [m/seg] en el canal aguas arriba, y D50 es el diámetro medio [mm]. Tabla 5: valores de los coeficientes k1 y k2. u*/ω < 0.50 0.50 a 2.0 > 2.0 k1 0.59 0.64 0.69 k2 0.066 0.21 0.37 Modo de Transporte del Material Material en contacto con el fondo en su mayoría (rodamiento, deslizamiento). Algo de material suspendido (salatación). Material suspendido en su gran mayoría. Para la contracción debida a puentes, la Circular HEC-18 “Evaluating Scour at Bridges” (Hydraulic Engineering Center Nº 18 – US Department of Transportation), Richardson et al (1995), basados en la ecuación de Laursen, para lecho vivo recomiendan la siguiente modificación de la ecuación 25: h2 Q2 = h1 Q1m 6 7 B1 B2 k1 (29) Esta misma circular recomienda la siguiente expresión para la condición de agua limpia: Q h2 = 1.48 1 2 d 3B m 2 6 7 (30) Donde Q2 es el caudal total en la sección del puente [m3/seg], dm es el diámetro medio equivalente [mm] establecido como dm = 1.25D50. Por otro lado, Neill en 1973 propone un proceso iterativo similar al planteado para la estimación de la erosión general. Establecido el emplazamiento del puente, se determinan las características de la corriente aguas arriba y en la sección del puente suponiendo que no existe erosión. Luego se comienza a descender el fondo en la sección del puente hasta igualar que la velocidad sea igual o menor a la crítica. 28 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES C) Erosión en Curvas Según el proceso descripto en la sección 3.5 el lado externo de la curva presenta profundidades mayores. Richardson en 1975 clasificó las curvas de los ríos según la relación entre el radio de curva r al centro del cauce y el ancho de la superficie libre B, en los siguientes tres tipos: Tipo de curva Limitadas Libres Forzadas r/B 7.0 – 8.0 4.5 – 5.0 2.5 – 3.5 En las curvas de tipo libre y limitado, el tirante crece gradualmente desde la transición aguas arriba de la curva, alcanzando un máximo casi en el final de la curva. En curvas forzadas, el tirante crece rápidamente al comienzo de la curvatura hasta un máximo en el sector central de la misma y luego decrece gradualmente hacia aguas abajo. El tirante máximo en una curva puede estimarse con el criterio de Altunin, cuya expresión es la siguiente: hmax = ε ⋅ hmed (31) Donde: hmax profundidad máxima de la curva [m], hmed tirante medio en el tramo recto ubicado aguas arriba [m], y ε coeficiente que depende de la relación r/B dados en la tabla 6. Tabla 6: valores de ε en función de la relación r/B. r/B ε ∞ 1.27 20 1.33 10 1.40 6 1.48 5 1.84 4 2.20 3 2.57 2 3.00 D) Erosión Local La erosión local se explica por la acción de un flujo complejo que requiere consideraciones bi o tridimensionales de las velocidades. Se presenta asociada a singularidades u obstáculos y no afecta a las condiciones generales del flujo. Posee fuerte turbulencia y puede desarrollar grandes vórtices. En las erosiones locales, el flujo bifásico resulta acelerado o retardado en forma brusca por causas de las fluctuaciones de presión, de las fuerzas de alzamiento y de las variaciones en los esfuerzos de corte. Las erosiones locales resultan función de: - las características del escurrimiento; del material que conforma el lecho; material transportado; hidrograma de crecida y eventos anteriores; 29 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS - OBRAS FLUVIALES dirección del flujo; acumulación de basura; acumulación de hielo; características de la obra de ingeniería. Algunas de las erosiones locales más frecuentes se enuncian a continuación: iiiiiiivvvi- en estribos de puentes en espigones en pilas de puentes aguas abajo de una presa a la salida de obras de descarga erosión debajo de conducciones El presente trabajo será enfocado al análisis conceptual de los fenómenos de erosión local con el objeto de mostrar los mecanismos de socavación que el ingeniero deberá tener presente en el diseño de una obra. Se darán a continuación los procesos de erosión local en pilas y estribos de puentes. • Erosión Local en Pilas de Puentes Físicamente, el fenómeno consiste en que alrededor de la pila se dan velocidades localmente mayores que las medias de la corriente. Estas altas velocidades son producto del sistema de vórtices que se originan por la presencia de la pila y son los responsables de la socavación. Existen dos modalidades distintas de erosión local: 1) la corriente no es capaz de poner en movimiento el material del lecho del río, pero los vórtices pueden llevar a cabo la socavación (agua limpia). La erosión local comienza con una velocidad de aproximadamente la mitad de la velocidad umbral para el lecho en general. 2) normalmente en las crecidas de un río existe un transporte general de sedimentos en el lecho al mismo tiempo que la erosión local (lecho vivo). La naturaleza del equilibrio del foso es distinta en uno y otro caso; cuando se tiene una corriente de agua limpia (clear water) el equilibrio se manifiesta cuando τ o = τ c y no se erosiona mas el foso. En cambio cuando existe transporte de sedimentos en la corriente, es decir lecho vivo (live bed), el equilibrio se alcanza cuando el flujo de sedimento entrante es igual al saliente. Curiosamente el equilibrio en el foso, para condiciones permanentes en el tiempo, es aproximadamente igual en ambos casos (ver figura 23 a). Por otra parte, la profundidad máxima del foso parece formarse si la corriente es tal que el fondo se encuentra en el límite entre el estado de reposo (aguas claras) y el de movimiento general del lecho (lecho vivo), es decir, en las condiciones de inicio del movimiento (ver figura 23 b). Este proceso, si bien ha sido analizado para erosiones locales en pilas de puentes en laboratorios, puede ser observado en otros fenómenos de socavaciones locales. 30 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES AGUA LIMPIA LECHO VIVO a) b) Figura 23: Profundidad de la erosión local. Los elementos que aparecen en la erosión local en pilas (ver figura 24) son los siguientes: a) b) c) d) Flujo descendente aguas arriba (downflow); Generan la erosión al pie. Vórtice en herradura (horseshoe); Vórtice en estela aguas abajo (wake); arrastra el sedimento erosionado. Sobreelevación de la superficie del agua con pequeños remolinos (roller). Figura 24: Patrones de flujo y erosión en una pila circular. La profundidad de erosión local hs es función de los siguientes parámetros: hs = F [ fluido(ρ ,ν , g ); lecho(D, ρ s ); flujo(h, U ); pila (b)] (32) Donde: b es el ancho de la pila proyectado en la dirección del flujo; las restantes variables han sido presentadas anteriormente. Con estas 8 variables y 3 dimensiones, es posible establecer 5 relaciones adimensionales. En Breusers y Raudkivi (1991) se desarrollan estas 31 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES relaciones y se estudian los efectos de cada una de ellas. A manera de resumen, se presentan estos efectos a continuación: 12345- no uniformidad del sedimento, σg; relación tamaño de la pila vs. sedimento, b/D50; relación tirante aguas arriba vs. tamaño de la pila, h/b; alineación de la pila, b ancho efectivo, proyectado en la dirección del flujo; forma de la pila (rectangular, circular, ovalada, etc.). Unos de los trabajos más recientes en erosión de puentes, Melville et al (2000), agregan algunos efectos a los anteriores, de los cuales los más importantes son: 6- intensidad del flujo, U/Uc (velocidad media del flujo / velocidad umbral); 7- forma de la fundación de la pila; 8- geometría irregular del canal natural de aproximación al puente; 9- efecto del tiempo; 10- efecto del Número de Froude. En los trabajos citados se desarrollan ampliamente los parámetros a tener en cuenta para cuantificar estos efectos en la profundidad de erosión. En el presente apunte sólo se propondrán algunas de las numerosas ecuaciones empíricas establecidas para la estimación de la erosión local en pilas. Richardson en 1995 propone: hs = 2 ⋅ K ⋅ b 0.65 ⋅ h1 0.35 ⋅ Fr1 0.43 (33) Donde: hs profundidad de erosión local en la pila [m], K coeficiente que tiene en cuenta la forma de la pila según la tabla 7, b ancho efectivo de la pila [m], h1 y Fr1 son el tirante y el número de Froude aguas arriba del puente. Tabla 7: Factor de forma para pilas uniformes Forma Circular Nariz redondeada Nariz cuadrada Nariz triangular K 1.0 1.0 1.1 0.9 Laursen en 1958 plantea: h b = 5.5 s h1 h1 1.7 h s + 1 − 1 11.5 ⋅ h1 (34) Donde las variables responden a las nomenclaturas y unidades descriptas anteriormente. 32 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS • OBRAS FLUVIALES Erosión Local en Estribos de Puentes Tienen un proceso similar al de erosión en pilas. Algunos autores han testeado esta analogía comparando profundidades de erosión en pilas circulares y estribos con bordes semicirculares del mismo diámetro arribando a resultados del mismo orden de magnitud para pilas y estribos. Lo que sí cambia el patrón de erosión es la longitud del estribo y su correspondiente obstrucción al flujo. Para estribos cortos el proceso puede observarse con claridad en la figura 25 donde se advierte la analogía entre en vórtice principal y el vórtice en herradura mostrado en la figura 24 de la erosión en pilas. Figura 25: Patrones de flujo y erosión en un estribo corto. En estribos largos (ver figura 26), la estructura del flujo y la geometría del foso de erosión son similares a la de estribos cortos, excepto la componente del flujo descendente es menos significante y se generan fuertes recirculaciones o remolinos adelante del estribo y cerca de la pared o borde del canal. Debido a la profundidad del flujo en el foso de erosión existe un flujo bidimensional aguas abajo. La actividad erosiva es mayor cerca del borde del estribo donde el vórtice principal es mas concentrado. Figura 26: Patrones de flujo y erosión en un estribo largo. Para la estimación de la profundidad de erosión local en estribos Melville et al (2000), al igual que la erosión local en pilas, plantean la necesidad de analizar relaciones entre 33 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES distintos parámetros y sus correspondientes efectos. Aquí se darán únicamente algunas de las ecuaciones empíricas más utilizadas. Laursen h L = 2.75 s h1 h1 1.7 h s + 1 − 1 11.5 ⋅ h1 (35) Donde: L es la longitud del estribo [m] que efectivamente obstruye a la corriente (medida en la dirección perpendicular al flujo), las restantes variables responden a la nomenclatura y unidades descriptas anteriormente. Método de Artamanov hs = Kα ⋅ K k ⋅ K q h1 (36) Donde: Kα coeficiente que depende del ángulo α que forma el eje del estribo con la corriente y responde a la expresión 37; Kk coeficiente que depende del talud del estribo y responde a la expresión 38; Kq coeficiente en función de la relación de caudal interceptado por el estribo y el caudal total de diseño; responde a la ecuación 39. Kα = 0.782 ⋅ e 0.0028⋅α (37) K k = 1.028 ⋅ e −0.24⋅k (38) Qi K q = 4.429 + 1.063 ⋅ Ln (39) Q Donde: α ángulo entre estribo y corriente [radianes]; k talud del estribo (k:1; horizontal:vertical); Qi caudal [m3/seg] que intercepta el estribo (i depende de la margen analizada); Q caudal total de diseño [m3/seg]. • Limitaciones de los Métodos de Estimación de la Erosión Local Los procedimientos descriptos están basados en datos de laboratorio derivados de modelos idealizados de puentes. Las limitaciones se deben a: iiiiiiiv- fundaciones rígidas e ideales de los modelos a escala; canales de laboratorio rectangulares y rectos; flujo uniforme y permanente; materiales de fondo a menudo uniformes, homogéneos y no cohesivos. En la naturaleza, donde las condiciones son sustancialmente diferentes a las de laboratorio, la aplicación de estas ecuaciones debe ser realizada con sumo cuidado. En general, las ecuaciones presentadas dan una estimación conservadora de las profundidades de erosión local en todos los casos. 34 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 4.3 Sugerencias Generales para Diseño de Obras Fluviales A continuación se presentan algunas recomendaciones generales de diferentes obras fluviales con el objeto de brindar al profesional los conceptos primordiales para el proyecto. La colmatación de embalses es desarrollada en Weber (2000). 4.3.1 Encauzamientos El cauce es el espacio ocupado por el río, en sentido natural, o bien el espacio destinado al río tras una intervención del hombre. Un encauzamiento, es cualquier arreglo o intervención que toma un tramo de río o de cauce como su objeto de actuación primordial. Es necesario describir cuales son los fines u objetivos de la actuación en el río. Estos objetivos son múltiples y pueden estar presentes en distinto grados y combinaciones. Los posibles objetivos de un encauzamiento son: iiiiiiivvvi- Protección frente a inundaciones (impedir daños); Protección de las márgenes del río (impedir la destrucción del terreno); Fijación de un cauce para el río (asegurar el lugar futuro para dicho cauce); Mejorar las condiciones de desagüe (reducción del coeficiente de fricción); Formar un canal navegable (garantizar una profundidad de agua suficiente); Recuperar la naturaleza (conseguir espacios de valor natural o recreativo); Los efectos ocasionados para cumplir estos objetivos deben ser analizados correctamente, comprendiendo fundamentalmente que los ríos son sistemas dinámicos, es decir, que sufren cambios o modificaciones generalmente a mediano y largo plazo como consecuencia de acciones externas. Los cambios son posibles debido a que los contornos aluviales son móviles tanto en sentido vertical (variación del fondo) como horizontal (modificación de la planta). Cuando el río no circula en equilibrio existen sedimentaciones o erosiones que producen cambios en el contorno. Par un encauzamiento es esencial conocer en detalle el régimen hidrológico de la cuenca de aporte. Esto permitirá fijar los condicionantes para aguas bajas, altas y crecidas. Las aguas bajas son persistentes y van produciendo la incisión en el cauce, aumentando la sinuosidad y disminuyendo la pendiente que le corresponde. Para aguas altas y crecidas, el río no respeta la sinuosidad y la pendiente condicionante es la del valle aluvial. La sinuosidad es un aspecto fundamental para un encauzamiento estable y para esto es imprescindible observar el estado natural del río la cual mostrará las características esenciales para un trazado del cauce principal o de aguas bajas. El trazado en planta del cauce de aguas altas y crecidas (caudales de baja frecuencia anual y extraordinarios, respectivamente) será menos sinuoso a medida que aumenta el caudal. Las diferencias de sinuosidades pueden observarse esquemáticamente en la figura 27 donde se muestra u encauzamiento compuesto por tres cauces (aguas bajas, altas y crecidas). Los elementos principales para realizar encauzamientos lo constituyen los albardones o diques laterales y los espigones. La figura 28 muestra las distintas combinaciones de estos elementos. 35 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES Figura 27: Planta y secciones esquemáticas de un encauzamiento. Figura 28: Encauzamiento con combinaciones de diques laterales y espigones. Los materiales mas comúnmente utilizados para encauzamientos en nuestro medio son los gaviones. También pueden emplearse mantos de escollera, rip-rap, mantas con losetas de hormigón adheridas, etc. en algunos lugares han sido empleados con éxito, sobre toda para la protección de márgenes, la plantación artificial de ciertas especies arbóreas. Como conclusiones de las obras de encauzamientos es posible decir: - En el proyecto de un encauzamiento es absolutamente imprescindible conocer el río, particularmente su geometría hidráulica, su estado de equilibrio o desequilibrio, su régimen hidrológico y de avenidas, así como su transporte sólido. La geometría e Hidrología deben estar presentes en la concepción del trazado y de las secciones, ancho, radios de curvatura, pendiente, etc. El transporte sólido y el estado de equilibrio nos informan de la estabilidad del encauzamiento. - Se debe recordar siempre que mediante un encauzamiento tan solo se crea una vía de circulación del agua a conveniencia del hombre, por ser más estable, más regular o tener más capacidad. El riesgo hidrológico subsiste por igual. Con frecuencia se desarrolla un efecto psicológico de seguridad por el solo hecho de haber intervenido en el río, lo cual trae aparejado un crecimiento de los daños en caso de inundación. - Los ríos son sistemas dinámicos que acomodarán su geometría a las condiciones nuevas impuestas por el hombre mediante un encauzamiento. Se deben estudiar los efectos de las intervenciones para rectificar el proyecto, o al menos para estar preparados para las consecuencias. - Una obra de encauzamiento parcial puede generar más inestabilidad que la protección pretendida. El problema se agrava cuanto más aumenta la velocidad media en el tramo encauzado respecto a la que prevalece fuera del encauzamiento. Las transiciones de comienzo y fin de un encauzamiento deben ser suaves y graduales; las obras longitudinales deben implantarse en el terreno y ofrecer contornos suaves. Pretender un objetivo en una margen traerá frecuentemente el perjuicio en la otra. 36 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES 4.3.2 Corte de Meandros Como un caso particular de los encauzamientos se presenta las pautas principales a respetar en el corte artificial de un meandro. En la evolución de un meandro, las curvas aumentan su longitud, pero debido a la erosión de las márgenes exteriores de las curvas se produce un acercamiento entre las márgenes cóncavas hasta que ocurre un estrangulamiento y se corta (ver figura 29). Generalmente, esto sucede durante una gran crecida cuando se excede la capacidad del cauce y el agua pasa sobre la parte mas estrecha erosionando las márgenes y produciendo así un canal mas corto denominado corte o rectificación. Eventualmente este nuevo cauce, amplio y profundo, aísla al antiguo meandro abandonándolo como un lago en forma de cuerno o herradura. Figura 29: Corte de un meandro. En ocasiones se requiere controlar el corte de un meandro, ya sea para evitar una ruptura violenta que altere el régimen del río, o bien por razones de seguridad ante daños que pueda producir el corte repentino, o sólo para acortar una vía de navegación. Dicho control puede requerir desde la construcción completa del corte necesaria para la rectificación, hasta solamente la excavación de un canal o cauce piloto, que posteriormente el propio río agrandará hasta alcanzar su equilibrio y conducirá el escurrimiento completo. Evidentemente, existe el caso intermedio de encauzamientos por donde se desvían las aguas altas y crecidas, y se mantienen en forma permanente el escurrimiento de las aguas bajas. Para el diseño de los cortes artificiales se deben tener en cuenta las siguientes consideraciones: a) La alineación de los dos extremos del corte debe ser tangencial a la dirección del flujo principal para cada caudal de diseño; 37 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES b) La entrada y salida del corte debe tener una transición gradual; c) En lo posible la excavación debe realizarse en material aluvial del propio cauce; d) Se debe cuidar que la energía de salida sea al menos igual a la de la corriente principal en ese sitio. e) El fondo del cauce piloto a la entrada y a la salida del mismo debe coincidir con la elevación del fondo en dichos lugares. El ancho del corte resultará del mayor valor según los siguientes criterios: 1) el ancho debe ser como mínimo igual a dos veces la altura del corte, para evitar posibles deslizamientos de las nuevas márgenes; 2) la nueva geometría debe garantizar que el esfuerzo cortante del fondo τ o = γ ⋅ R ⋅ S sea mayor que tres veces el esfuerzo cortante crítico para iniciar el movimiento de las partículas. Lo descripto anteriormente garantiza que la dimensión del cauce piloto sea la sección más económica que asegure la ampliación y el buen desarrollo del corte por el propio río (García Sánchez, 1995). El cálculo Hidráulico debe hacerse atendiendo a la compatibilidad de perfiles y gradientes de energía aguas arriba y aguas abajo del corte. Este cálculo se deberá realizar para diferentes caudales relacionados a evaluaciones de daños y costos, eligiéndose el valor que resulte óptimo. 4.3.3 Puentes Se definen como lugar de cruce entre las distintas infraestructuras de comunicación y los ríos. Los puentes son obras singulares, costosas y vitales para mantener el transporte, del cual depende la economía de algunos sectores o regiones. En una estadística realizada en 1976, sobre las causas de fallo o rotura de 143 puentes en todo el mundo, resultó 1 fallo debido a corrosión, 4 a la fatiga, 4 al viento, 5 a un diseño estructural inadecuado, 11 a terremotos, 12 a un procedimiento inadecuado de construcción, 14 fallos fueron por sobrecarga impacto de embarcaciones, 22 por materiales defectuosos y finalmente 70 fallos fueron causados por crecidas (de los cuales 66 fueron debidos a la socavación, 46% del total). Esto muestra que los aspectos hidráulicos son fundamentales en los puentes; un buen conocimiento de estos aspectos hará el puente mas seguro y barato. Lo que se ha avanzado en el conocimiento de las estructuras, las cargas, los materiales y los procedimientos constructivos es mucho más que lo conocido sobre las acciones del agua y el sedimento. Pero no sólo la acción del agua y el sedimento es objeto de la hidráulica de puentes, sino también cuestiones de la concepción del puente y de la misma vía, como son las dimensiones del vano y el emplazamiento del puente. El mejor emplazamiento de un puente tiene respuesta en los diferentes puntos analizados a lo largo del presente trabajo: - es esencial que en el lugar de emplazamiento, el río posea estabilidad fluvial; un lugar inestable puede obligar a obras de encauzamiento importantes; se deben elegir los tamos rectos, y en lo posible estrechos para abaratar la obra; 38 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS - OBRAS FLUVIALES es preferible un cauce principal que tenga gran capacidad que uno fácilmente desbordable; conocer el río hidrológica e hidráulicamente y sobre todo morfológicamente (análisis en distintas escalas espaciales y temporales); En cuanto a la alineación del puente, antiguamente, se trataba de hacerlos a perpendiculares al río. En la actualidad, se atiende al diseño geométrico de la vía y el puente puede estar oblicuo a la corriente (y hasta en curva); pero las pilas, estribos y todo elemento mojado del puente deben estar correctamente alineados con el flujo. El dimensionamiento de la altura y el ancho libre del puente debe tener en cuenta: - las características de la cuenca, principalmente en relación a los objetos posible de arrastrar (arboles, hielo, etc.) - análisis económicos: relaciones entre longitudes de terraplén (obra barata) versus longitudes de tablero (obra costosa), considerando también las relaciones estrechamiento del cauce versus elevación del tirante; - estimar mediante un estudio hidrológico los periodos de retorno, los cuales serán asociados a la importancia de la vía (es comúnmente usado un Tr = 25 a 50 años vías poco importantes, 100 años vías de importancia media y 100 a 200 años vías de gran importancia); o bien, si se cuenta con los datos suficientes, asociarlos con relaciones entre costos y daños o perjuicios versus periodo de retorno. Es importante contar con datos relevados in-situ (niveles de resaca) o informaciones de los lugareños, tales como cantidad de veces que escurre por las llanuras de inundación, o la máxima cota histórica del río, etc. Se deberán realizar relevamientos de los sedimentos (D50, σg a distintas profundidades) que componen el cauce y las llanuras de inundación, tipo de vegetación que cubre esta última, y todo tipo de antecedente relacionado (topográfico, geotécnico, etc.). En cuanto al relevamiento topográfico es de vital importancia para el cálculo hidráulico del río, pero pasa a ser menos relevante al considerar la movilidad del fondo, y por lo tanto pasar a ser trascendental para el estudio la experiencia del profesional encargado. La estimación de la erosión total en puentes se resume en el siguiente diagrama: EROSIÓN TOTAL EN PUENTES EROSIÓN GENERAL DEL LECHO EROSIÓN LOCALIZADA EROSIÓN POR CONTRACCIÓN EROSIÓN LOCAL EROSIÓN POR ESTRIBO EROSIÓN POR PILA En general, para la estimación de los diferentes parámetros desarrollados a lo largo de este apunte han sido elaborados distintos modelos computacionales. Algunos de estos modelos han alcanzado un cierto grado de avance, en cuanto a la cantidad de variables operadas, 39 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES pero ninguno analiza la totalidad de elementos involucrados, obviamente debido a la complejidad de estos sistemas. Uno de los modelos disponibles para la estimación de erosiones en puentes es el denominado HEC-RAS (Hydrologic Engineering Center – River Analysis Systems) desarrollado por el US Army Corps of Engineers. Este modelo permite evaluar todas las erosiones descriptas anteriormente, excepto la erosión general del lecho. Para el cálculo de ésta, puede emplearse el modelo HEC-6 “Scour and Deposition in Rivers and Reservoirs”. Bridge Scour RS = 10.36 Legend WS PF#1 20 Ground Ineff Bank Sta Contr Scour 15 Total Scour Elevation (ft) 10 5 0 -5 -10 900 1000 1100 1200 1300 1400 1500 Station (ft) Figura 30: Ejemplo de cálculo de erosión local en puentes mediante HEC-RAS. 40 CÁTEDRA DE OBRAS HIDRÁULICAS OBRAS FLUVIALES REFERENCIAS - Breusers H. and Raudkivi A. (1991) “Scouring”. IAHR. Hydraulic Engineering Circular Nº 18 (HEC-18, 1993) “Evaluating Scour at Bridges” FHWA. US Department of Transportation. Farraday R. And Charlton F. (1983) “Hydraulic Factors in Bridge Design”. Hydraulic Research. Wallingford. García Flores M. y Maza Alvarez J. A. (1995) Cap. 7 del Manual de Ingeniería de Ríos “Origen y Propiedad de los Sedimentos”. Instituto de Ingeniería de la UNAM. García Sánchez J. y Maza Alvarez J. A. (1995) Cap. 11 del Manual de Ingeniería de Ríos “Morfología de Ríos”. Instituto de Ingeniería de la UNAM. 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