Reflexión sobre Mujeres al borde de un ataque de nervios Hace más de diez años que he sido un fan de las películas de Almodóvar. Recuerdo cuando "Mujeres" se estrenó en los cines, pero en esta época yo fui demasiado joven para mirarla. Tengo un recuerdo de mi madre hablando sobre la película con una amiga, y el título de la película causó una gran impresión en mí. ¡Qué interesante!, pensé. No tenía ninguna idea qué era un ataque de nervios, o qué significaba estar al borde de algo, pero a mí me sonaba como algo muy dramático y peligroso. Quería entender más, pero sabía que era una tema de adultos, y tendría que esperar hasta que fuera mayor antes de mirarla. Cuando finalmente vi la película por primera vez, tenía casi treinta años. La miré en casa con subtítulos en videocasete. Había visto algunas de las películas más recientes de Almodóvar, como Todo sobre mi madre y Hable con ella, con mi novia en el teatro y me había gustado mucho. Para mí, los personajes y las historias eran muy complejos y profundos. Por consiguiente, me sorprendió mucho que "Mujeres" fuera tan divertida, casi al punto de ser ridícula. Aun así, todavía podía ver parecidos entre las películas. Todas trataban de personas en circunstancias difíciles, algunas más grave que otras. Y el director tenía un estilo distinto y recurrentente en todas sus películas. Mirar la película de nuevo después de más o menos una década fue muy interesante. En estos años, he visto varias más películas de Almodóvar, y me di cuenta de que él es un artista prolífico con un talento amplio. Entonces, no me sorprendió los aspectos absurdos de la película. Y la segunda vez aprecié más los personajes excéntricos, y como todos se relacionaron con ellos mismos. Por otra parte, algunos de los temas esta vez me parecieron un poco anticuados. Por ejemplo, la idea de un grupo de mujeres emotivas perseguiendo a un hombre suave y distante es un estereotipo. Sin embargo, el director juega con los estereotipos también, y al final, Pepa rechaza al hombre que rompió con ella.