INFORME Equipo de proyecto para el desarrollo de estándares judiciales mínimos III 2012 – 2013 Red Europea de Consejos de Justicia (Estándares mínimos relativos a la evaluación del desempeño profesional y la inamovilidad de los miembros del poder judicial) 4. Resumen de propuestas Propuestas de estándares mínimos relativos a la evaluación del desempeño profesional de jueces y (donde proceda) fiscales.4.1. Como resultado de las actividades del equipo de proyecto, se han identificado dos sistemas básicos de evaluación del desempeño profesional de los miembros del poder judicial en los países europeos: sistemas de evaluación formales e informales. La evaluación del desempeño profesional de los jueces en sistema judiciales de derecho anglosajón (Inglaterra y Gales, Irlanda, Irlanda del Norte, Escocia, Chipre, Malta) y en algunos otros países (como Noruega, Suecia y los Países Bajos) tiende a realizarse de un modo informal, lo que excluye un procedimiento burocrático formal y predeterminado en el que un organismo definido con anterioridad y con responsabilidad en el área emita una decisión relativa al desempeño profesional del juez sujeto a evaluación. 4.2. Por otra parte, los países de la Europa continental de acuerdo con la tradición del derecho civil (como por ejemplo Austria, Bélgica, Bulgaria, Francia, Alemania, Hungría, Italia, Lituania, Portugal, Rumanía, España y Turquía) han desarrollado mecanismos formales y complejos para la evaluación del desempeño profesional de los jueces (y a menudo también de los fiscales), la base de los cuales suele estar regulada por la legislación básica desarrollada en mayor profundidad en las normativas internas de los respectivos Consejos de Justicia o Ministerios de Justicia. Se deben tener en cuenta las diferencias de los dos tipos básicos de sistemas de evaluación del desempeño profesional de los miembros del poder judicial cuando se trate de definir los estándares mínimos en este campo, puesto que la mayoría de los estándares han de referirse necesariamente a los sistemas formales de evaluación del desempeño profesional. 4.3. Los sistemas informales de evaluación del desempeño profesional son, por naturaleza, menos ajustables a un conjunto de estándares mínimos. 4.4. Todos los sistemas de evaluación comparten la premisa común de que la profesionalidad del juez representa tanto la principal fuente de legitimidad de la función judicial como una sólida garantía de su independencia. Objetivos potenciales de los sistemas de evaluación.4.5. Los miembros del equipo de proyecto han acordado los siguientes objetivos potenciales del sistema de evaluación del desempeño profesional: a) Mejorar la eficacia de los sistemas judiciales. E. P. 2012-2013 Desarrollo de estándares judiciales mínimos III - 27 - b) Salvaguardar la calidad profesional de los jueces, de cara a mejorar el servicio al público proporcionado por los sistemas judiciales. c) Desarrollar las habilidades de los jueces, incluyendo la formación continua si resulta necesaria a la vista de los resultados de la evaluación. d) Prevenir problemas y errores en los sistemas judiciales. e) Mejorar la motivación y la satisfacción de los jueces en el desempeño de sus actividades profesionales. f) Mejorar las capacidades de dirección y liderazgo dentro del poder judicial y, de manera indirecta, la responsabilidad judicial y la confianza del público en los sistemas judiciales. Criterios aplicados a la evaluación del desempeño profesional.4.7. Los mecanismos de evaluación del desempeño profesional de los jueces deben garantizar la total preparación y competencia de los mismos. Esto se puede conseguir mediante la comprobación sustantiva de que el juez sujeto a evaluación posee un trasfondo profesional adaptado al ejercicio de las funciones judiciales cuyo desempeño se le exige. 4.8. Los criterios para la evaluación del desempeño profesional de los jueces deben ser variados y exhaustivos, y podrían incluir indicadores cuantitativos y cualitativos, de cara a permitir una evaluación profunda y completa del desempeño profesional de los jueces. 4.9. Ningún método de evaluación del desempeño profesional basado a la calidad de las resoluciones judiciales deberá interferir en la independencia del poder judicial, ni en su conjunto ni de modo individual. 4.10. Las actividades y resoluciones de los jueces se deben evaluar estrictamente de acuerdo con el principio de independencia judicial, sin comprobar la legitimidad y validez de resoluciones procesales independientes. 4.11. La cantidad de trabajo desarrollado por un juez puede ser uno de los criterios utilizados en la evaluación del desempeño judicial. Este método de evaluación del desempeño profesional permite una valoración de si los casos se han tramitado en una franja de tiempo apropiada o de si existe una acumulación que pueda justificar la asignación de recursos adicionales y la adopción de medidas con el objetivo de su reducción o eliminación. 4.12. El índice de recursos con éxito contra resoluciones se debe utilizar con cautela como uno de los diversos criterios para la evaluación del desempeño profesional, puesto que no refleja necesariamente la calidad de las resoluciones sujetas a recurso. E. P. 2012-2013 Desarrollo de estándares judiciales mínimos III - 28 - Organismo competente para realizar la evaluación del desempeño profesional.4.13. Los procedimientos para la evaluación del desempeño profesional de los jueces o (cuando corresponda) de los fiscales, deben ponerse en manos de un organismo u organismos independientes del gobierno en los que estén directamente implicados un número apropiado de miembros del poder judicial. 4.14. El organismo encargado de la evaluación del desempeño profesional de los jueces puede ser el correspondiente Consejo del Poder Judicial nacional (o un comité o departamento específico dentro del mismo), comités o juntas de evaluación nacionales independientes, los directores de los tribunales (o fiscalías) correspondientes o incluso el juez de más alto rango. 4.15. El Ministerio de Justicia, como organismo del poder ejecutivo, no debe intervenir directamente en la evaluación del desempeño profesional de los jueces individuales como organismo único, puesto que ello podría suponer una amenaza a la independencia judicial. Proceso para la evaluación del desempeño profesional.4.16. El proceso de evaluación del desempeño profesional de los jueces se debe llevar a cabo según los mismos criterios y con las mismas garantías que se han mantenido en la selección y nombramiento iniciales de los jueces (y de los fiscales, cuando proceda): debe ser independiente de influencia política, justo en cuanto a los procedimientos de evaluación, abierto a todos los miembros del Poder Judicial y transparente por la posibilidad de escrutinio público. Además, el proceso debe basarse en el desempeño profesional pasado del juez, utilizando distintas fuentes de información fiable. 4.17. En caso de los mecanismos o sistemas de evaluación del desempeño profesional formales, es necesario un procedimiento específico y formal, cuyas normas fundamentales deben establecerse en la legislación básica. 4.18. Los actos jurídicos y reglamentos relativos a la evaluación del desempeño profesional de los jueces deben estipular de manera clara y exhaustiva todos los aspectos relevantes concernientes a la evaluación. 4.19. El procedimiento de evaluación (en especial si se trata de uno formal) debe permitir que el juez (o fiscal) en cuestión tenga acceso a los documentos objeto de examen y participe activamente o sea escuchado en el proceso expresando su propio punto de vista respecto a su desempeño profesional, así como permitir al juez comentar cualquier observación crítica. E. P. 2012-2013 Desarrollo de estándares judiciales mínimos III - 29 - 4.20. Cualquier juez sujeto a evaluación del desempeño profesional tiene derecho a conocer el resultado de la evaluación, especialmente si la resolución de la evaluación conlleva consecuencias negativas para el juez relativas a su carrera profesional, beneficios económicos o la imposición de obligaciones específicas. Esto implica la necesidad de un procedimiento independiente de reclamación o impugnación al que cualquier juez sujeto a evaluación pueda recurrir si considera que se le ha tratado de manera injusta durante el proceso de evaluación. Propuestas de estándares mínimos relativos a la inamovilidad de los jueces.4.21. El principio de inamovilidad se extiende al nombramiento o designación de un juez para un puesto o localidad diferente sin su consentimiento (es decir, no se puede trasladar a un juez a un puesto diferente o cambiarle a otras funciones sin su consentimiento). Sin embargo, hay excepciones razonables a esta norma general cuando se ordena el traslado forzoso de un juez a otro cometido, otro tribunal u otra localidad por circunstancias especiales concretadas por la ley, o previstas de manera general y abstracta, incluyendo la sanción disciplinaria o aquellos casos en los que se resuelva que un juez es incapaz de desarrollar sus funciones judiciales en su puesto de modo adecuado, independiente e imparcial. El principio de inamovilidad hace imperativo que las razones para el traslado de jueces estén claramente establecidas y que el traslado forzoso se decida a través de procedimientos transparentes dirigidos por un organismo independiente o autoridad sin influencias externas, y cuyas resoluciones estén sujetas a la posibilidad de impugnación o revisión. 4.22. Es necesaria la definición de las infracciones disciplinarias por las que un juez podría ser cesado o trasladado de su puesto y que los procedimientos disciplinarios cumplan con las exigencias del debido proceso, incluyendo la posibilidad de impugnación, recurso o revisión judicial de la decisión emitida por el organismo competente en el ámbito de la disciplina judicial. 4.23. Este organismo independiente encargado de la disciplina judicial podría ser el correspondiente Consejo del Poder Judicial nacional (o un comité o departamento específico dentro del mismo), comités o juntas de evaluación nacionales o regionales independientes, los directores de los tribunales pertinentes o incluso el juez de más alto rango. E. P. 2012-2013 Desarrollo de estándares judiciales mínimos III - 30 -