El ININ hoy REACTORES DE FISIÓN NUCLEAR EN LA ERA PRECAMBRICA Por Silvia Bulbulián, Suilma M. Fernández-Valverde, Eduardo Ordoñez Regil. Reactores Nucleares Un reactor nuclear es un sistema diseñado para producir y sostener la reacción nuclear de fisión en cadena, de una manera segura y confiable. Para esto es necesario que se cumplan ciertas condiciones, como son; tener la cantidad necesaria de uranio enriquecido, lo que se conoce como masa crítica, tener un entorno que disminuya la velocidad de los neutrones nacientes a lo que se le llama moderador y finalmente tener un fluido que sea capaz de extraer el calor generado por la reacción en cadena, que se conoce como refrigerante. Estas tres condiciones esenciales para que un reactor nuclear trabaje adecuadamente, no es trivial reunirlas ya que para poder tener la masa crítica es necesario que el uranio se encuentre enriquecido en uranio 235 en la mayoría de los casos, aunque existen reactores que utilizan uranio natural, como los CANDU. figura 2 se presenta una descripción gráfica de cómo la cantidad de uranio-238 presente en la naturaleza, con una vida media muy larga de 4,470,000,000 años, se redujo a la mitad de lo que había originalmente cuando se formó el planeta Tierra. Por otro lado el uranio-235, que tiene una vida media de 704,000,000 años, se redujo a sólo una fracción pequeñísima de lo que existía entonces. En la figura 2, T1 representa una vida media transcurrida, T2 representa dos vidas medias, T3 tres vidas medias, etc. A su vez el uranio-234, no representado en esta figura, con una vida media de 246,000 años, se redujo casi completamente al final de los primeros mil millones de años. Por lo tanto, el uranio-234 que se observa actualmente en la naturaleza es un producto indirecto del decaimiento del uranio238. Así se explican las cantidades de uranio238, uranio-235 y uranio-234 que se encuentran en las proporciones indicadas (Fig. 1). Uranio enriquecido El uranio es el elemento más pesado que hay en la naturaleza, está formado por tres isótopos radiactivos de pesos 234 (0.006%), 235 (0.719%) y 238 (99.275%) (figura 1). El isótopo del uranio más abundante es el de masa 238 y existe sólo una pequeña fracción del uranio-235, mientras que el isótopo de masa 234 es aún menos abundante. Esto no siempre ha sido así. En la Figura 1. Composición isotópica del uranio natural Sin embargo se presenta una pregunta ¿será posible que se separen los isótopos del uranio en los procesos geoquímicos? No, los procesos químicos pueden hacer que una región sea rica Contacto Nuclear 1 9 o pobre en uranio, pero el uranio-235, el uranio238 y el uranio-234, son virtualmente indistinguibles desde el punto de vista químico, de tal manera que cualquier proceso que afecte a uno de ellos debe afectar de la misma manera al otro. Así, el contenido del uranio-235 en el uranio natural no es casual, se debe al continuo decaimiento de este isótopo desde la formación de la Tierra. Es por eso que el contenido de uranio-235, de 0.719% en el uranio natural, se considera como constante no sólo en toda la superficie de la Tierra sino también en las rocas de la Luna, en meteoritos y posiblemente en todo el sistema solar. Algunos elementos presentan relaciones isotópicas anormales, pero éstas se deben a efectos químicos de transformaciones nucleares. Figura 2. Decaimiento del uranio 238 y el uranio 235 Reactores nucleares Son instalaciones de las que se puede extraer la energía producida por la fisión nuclear. El núcleo del uranio-235 se rompe formando dos núcleos más ligeros, de peso muy variado y libera además de 2 a 3 neutrones. Este proceso en cadena produce grandes cantidades de calor. Dependiendo de la energía producida los reactores pueden ser de alta potencia como los que producen energía eléctrica y los de baja potencia como los reactores de investigación 2 0 Contacto Nuclear ¿Son factibles los reactores de fisión nuclear naturales? Algunos investigadores se preguntaron sobre esa posibilidad, entre ellos el Dr. Paul K. Kuroda. En el verano de 1945, en Hiroshima y Nagasaki, se produjeron las terribles explosiones de las bombas nucleares con lo que finalizó abruptamente la Segunda Guerra Mundial. A fines de agosto de ese mismo año, Kuroda se encontraba ante las ruinas de Hiroshima y se quedó impresionado con el poder de la energía nuclear. Dice: «La vista frente a mí era justo como el fin del mundo, pero también sentí que el principio del mundo debiera haber sido semejante a eso». Y de allí le surgió la duda: ¿sería posible que hubieran ocurrido reacciones nucleares semejantes en la Tierra en épocas geológicas pasadas? En el año de 1956 el Dr. Kuroda publicó un artículo intitulado: «De la estabilidad nuclear física de los minerales de uranio». En este trabajo calculó la proporción de uranio-235 en los yacimientos de alta concentración de uranio en la Tierra en épocas remotas. Calculó que hace 2,100,000,000 de años el contenido de uranio235 en los yacimientos de uranio era de 4%, que de acuerdo con la teoría de los reactores nucleares, en condiciones favorables debió permitir la fisión nuclear espontánea en cadena. El Dr. Paul K. Kuroda defendió la teoría de la existencia de reactores nucleares naturales de fisión en épocas geológicas pasadas; sin embargo, como a menudo suele suceder, sus colegas, los científicos, no le creyeron. Inclusive personajes tan destacados como el Dr. Enrico Fermi, pensaban que una reacción natural de fisión nuclear espontánea del uranio-235 no podría mantenerse como una reacción en cadena. ¿Existieron los reactores nucleares naturales? En 1972 se observó una anomalía en el proceso de enriquecimiento de uranio en uranio-235. Este fenómeno lo observaron Bouzigues y sus colaboradores en la planta procesadora de combustible nuclear, en el CEA (Comisariado de Energía Atómica) en Pierrelatte, Francia. Obtuvieron un resultado curioso durante el análisis rutinario de una muestra de mineral de uranio. La abundancia del uranio-235 en el uranio natural era de 0.717%, el cual era bajo si se comparaba con el contenido normal de 0.719%. Aunque la diferencia entre ambos valores nos parezca pequeña, para quienes enriquecen el uranio ese 0.002% es muy importante. Aquí hacemos un paréntesis para comentar que un proceso común para enriquecer el uranio en su isótopo uranio-235 es el de difusión gaseosa del hexafluoruro de uranio. El análisis de Bouzigues se llevó a cabo por espectrometría de masas, en el cual las moléculas se ionizan y son aceleradas, y finalmente se desvían por un campo magnético. La masa de la molécula se revela por la cantidad que es desviada. Esta técnica es muy delicada y precisa, y cuando se aplica a un material en forma gaseosa se logran aún mayores precisiones que las que se logran en general por otras técnicas. La discrepancia que encontró Bouzigues era pequeña, pero significativa. El CEA empezó a investigar para encontrar la causa de esta discrepancia. A mediados de 1972 encontraron que en embarques de la mina de Oklo, en 700 toneladas de uranio, se habían perdido aproximadamente 200 Kg de uranio-235. Este descubrimiento llevó a los investigadores a pensar en la posibilidad de que el uranio-235 perdido se hubiera destruido in situ. Se pensó la posibilidad de que reactores nucleares naturales hubieran consumido el uranio-235 en épocas geológicas pasadas y se detuvo la explotación de las minas para entender lo sucedido. Gabón, país donde se perdió uranio-235 La República de Gabón se encuentra en la costa occidental de África, la atraviesa el ecuador. Su capital es la ciudad portuaria de Libreville, que es la más grande del país. Gabón es rico en recursos minerales. El país tiene depósitos de uranio, manganeso y petróleo, en la actualidad se explotan todos ellos; se han encontrado grandes yacimientos de mineral de hierro, algunos de ellos entre los más ricos del mundo. También se han encontrado yacimientos de minerales de plomo y plata. Debido a la gran cantidad de recursos naturales, el país ha basado su economía en su explotación, como es el caso de las minas de uranio. En las tierras bajas de la cuenca del río Ogooué, en las que hay gran cantidad de colinas con vegetación de tipo sabana y estrechos corredores de vegetación espesa, se encuentra una microregión geográfica que se conoce como «Oklo» Allí se encuentran unos yacimientos uraníferos muy importantes con concentraciones altas de uranio. Esta región se encuentra en la parte sureste de la República de Gabón y forma parte de la cuenca de Franceville. Pero ¿por qué estamos relatando esto? Porque algo muy extraño pasó en Gabón. Se encontró que parte del U-235 había desaparecido de los yacimientos de Gabón, como lo comprobó el equipo Francés de Pierrelate. Este es un hecho extraordinario en la naturaleza. ¿Qué pudo haberle pasado al uranio-235? Presencia de uranio en las minas de Gabón En la mayoría de los reactores nucleares fabricados por el hombre la materia prima principal es el uranio con un alto contenido de uranio-235. De acuerdo con las condiciones establecidas por Kuroda, sería posible el Contacto Nuclear 2 1 El estrato geológico de formación más reciente o cuenca de Franceville está formado esencialmente por cinco capas geológicas pertenecientes a diferentes períodos de tiempo. El investigador Francés F. Weber (1968) las estudió y clasificó por muchos años en diferentes campañas de prospección minera. Yacimientos de uranio Para entender cómo se formaron los yacimientos de uranio de Gabón es necesario hacer una descripción de cómo se extiende el yacimiento uranífero en la cuenca de Franceville. El Figura 3. Sitios de Oklo, Okelobondo y Bangombé. funcionamiento de reactores naturales siempre y cuando hubiera yacimientos con alto contenido de uranio-235, condición que sólo se puede encontrar en yacimientos uraníferos muy antiguos, lo cual nos lleva a estudiar los yacimientos de uranio en Gabón que discutiremos a continuación (Figura 3). Los yacimientos muy antiguos de uranio son los sitios de Oklo, Okelobondo y Bangombé, los dos primeros se encuentran separados tan sólo por 5 kilómetros, mientras que Bangombé se encuentra a 30 kms, en la dirección sur, sureste de Oklo. yacimiento uranífero abarca las regiones geográficas de Oklo, Okelobondo y Bangombé, con espesores que varían de 200 a 400 metros, extendidos en varios kilómetros cuadrados. Se ha determinado que movimientos tectónicos posteriores a su formación le han dado un relieve muy accidentado. El borde norte del basamento se fracturó y una parte se elevó de su nivel original adquiriendo una pendiente muy inclinada, de casi 45 grados, que hacen llegar a este basamento cerca de la superficie, arrastrando consigo las capas de formación posterior. Esta parte, por ser la más superficial fue muy apropiada para iniciar la explotación minera del yacimiento uranífero. Figura 4. Croquis del reactor No. 10 de Oklo 2 2 Contacto Nuclear Durante la época en que se conformó esta cuenca, los agentes climáticos como son las lluvias, erosión, etc. dispersaron al uranio de manera más o menos homogénea en el material granítico que conforma la capa profunda, por lo que la concentración normal de mineral en esta zona es de 1 a 20 por ciento. Debido a esta concentración de uranio se considera como zona rica en uranio por lo cual ha sido explotada durante varias décadas por la compañía de minas de uranio de Franceville, la cual provee de una importante cantidad de uranio para el funcionamiento de los reactores nucleares franceses. Dentro de la zona geológica de Oklo existen otros dos yacimientos uraníferos que presentan el mismo fenómeno de fisión espontánea Los yacimientos de Okelobondo (que se encuentran a una profundidad 300 metros) pertenecen al mismo perfil geológico y forman parte del mismo yacimiento uranífero que los de Oklo, aunque existe una distancia de 5 km entre ambos. Otro sitio más se encuentra en Bangombé. Este yacimiento que se encuentra a 30 kms. de Oklo, figura 5, está extendido en una superficie de 1.5 Km2 y se encuentra casi en la superficie. Tiene un contenido de uranio bastante bajo, cerca de 0.1%, pero con acumulaciones locales muy fuertes de uranio. El yacimiento se encuentra contenido en una depresión tipo cubeta rellena de material granítico que se encuentra casi en superficie el material en que reposa tiene un gran contenido de manganeso. Formación de los yacimientos de uranio El fenómeno de la formación de los yacimientos de uranio se llevó a cabo hace aproximadamente 2000 millones de años. Del uranio total que se encontraba en las rocas ígneas y las rocas volcánicas, se separó el uranio en estado de valencia VI, que es soluble en agua. Por un proceso de lixiviación, se desprendió de las rocas Figura 5. Croquis de las zonas de reacción que funcionaron como reactores nucleares y se disolvió en el agua. El uranio en solución se infiltró a través de los sedimentos y posteriormente se redujo y precipitó en forma de uranio en estado de valencia IV que es insoluble. La materia orgánica presente fue la causa de la reducción del uranio. Al conjuntarse las condiciones adecuadas en las vetas ricas en uranio, funcionaron diferentes reactores naturales, que se muestran en la figura 5, obteniéndose mucha información sobre cómo funcionaron los reactores y cómo se comportaron los productos de fisión desde hace 2000 millones de años, hasta nuestros días. Referencias S. Bulbulian, E. Ordóñez Regil, S.M. Fernández Valverde. «Reactores de Fisión Nuclear de Hace Miles de Millones de Años. La Ciencia para Todos, 209, Fondo de Cultura Económica, Julio, 2005. Contacto Nuclear 2 3