169 “DOCTRINA DEL MINISTERIO PÚBLICO 2010” 1.- FECHA DE ELABORACIÓN: 2.- DIRECCIÓN REMITENTE: 3.- MATERIA: 18/02/201 Dirección de Revisión y Doctrina Penal Adjetiva Interceptación o Grabación de Comunicaciones Privadas 4.- TEMA: 5.- EXTRACTO Aún por razones de necesidad y urgencia, la interceptación o grabación de comunicaciones privadas debe ser previamente autorizada por el órgano jurisdiccional 6.- CONTENIDO 6.1.- COMUNICACIÓN Nº 6.2.- FECHA: DRD-20-079-2010 26/03/2010 6.3.- TRANSCRIPCIÓN (...) En otro orden de ideas, este Despacho apreció que otro de los argumentos esgrimidos por la representación del Ministerio Público para motivar la solicitud de Sobreseimiento interpuesta en esta causa, aludió al incumplimiento de formalidades esenciales, específicamente relacionadas con la obtención de evidencias. A propósito, debe señalarse que -ciertamente- de las actuaciones examinadas se desprende que el día 20 de enero de 2010, según se expuso en el acta policial de esa misma fecha (suscrita a las 21:00 horas), se grabó llamada telefónica en la cual el ciudadano K L C sostuvo una conversación con el ciudadano G J, sin que se evidenciara el cumplimiento de las exigencias legalmente previstas para ello. Conforme a lo descrito en el acta policial, esto se hizo “según el supuesto especial tipificado en el Artículo No 20 de la Ley de Órganos de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas” (atendiendo a razones de necesidad y urgencia); por considerar que dicha actuación “(…) serviría para determinar o no la comisión real de uno de los delitos previstos en la Ley Orgánica de Salvaguarda del Patrimonio Público”112. De acuerdo con lo señalado en el artículo 20 de la citada Ley de Órganos de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas: “Artículo 20. El fiscal del Ministerio Público encargado de la investigación, solicitará al juez competente la orden de allanamiento de inmuebles, así como la intercepción o grabación de Comunicaciones privadas, sean éstas ambientales, telefónicas o realizadas por cualquier otro medio, cuyo contenido 112 Según se indicó, la grabación se realizó con autorización previa del ciudadano K L C. Doctrina del Ministerio Público 2010 170 se transcribirá y agregará a las actuaciones, siempre y cuando se cumpla con los señalamientos sobre el delito investigado, tiempo de duración, medios técnicos a ser empleados y el sitio o lugar desde donde se efectuará. Los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, a cargo de la investigación podrán solicitar directamente la orden referida en el presente artículo, previa autorización por cualquier medio del Ministerio Público, de la cual dejarán constancia en sus respectivos libros diarios los funcionarlos intervinientes, siempre que se trate de un supuesto que por la necesidad o urgencia requiera celeridad en la realización de las actuaciones. En todo caso la solicitud deberá contener las razones que la justifican. Las actuaciones realizadas con prescindencia de lo previsto en el presente artículo, se considerarán carentes de valor probatorio. Solo en los casos de delitos flagrantes, los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas podrán actuar con prescindencia de lo establecido en el presente artículo. En todo caso se dejará Constancia de lo actuado en el informe que se remitirá al Ministerio Público”. (Negrillas nuestras). En este mismo sentido, cabe referir además lo previsto sobre este asunto en el artículo 220 del Código Orgánico Procesal Penal: “Artículo 220. Autorización. En los casos señalados en el artículo anterior, el Ministerio Público, solicitará razonadamente al juez de control del lugar donde se realizará la intervención, la correspondiente autorización con expreso señalamiento del delito que se investiga, el tiempo de duración, que no excederá de treinta días, los medios técnicos a ser empleados y el sitio o lugar desde donde se efectuará. Podrán acordarse prórrogas sucesivas mediante el mismo procedimiento y por lapsos iguales, medios, lugares y demás extremos pertinentes. El órgano de policía de investigaciones penales, en casos de necesidad y urgencia, que deberán ser debidamente justificados, podrá solicitar directamente al juez de control la respectiva orden, previa autorización, por cualquier medio, del Ministerio Público, que deberá constar en la solicitud, en la cual, además, se harán los señalamientos a que se contrae el aparte anterior. La decisión del juez que acuerde la intervención, deberá ser motivada y en la misma se harán constar todos los extremos de éste artículo” (Negrillas nuestras). Tal y como se desprende de lo anterior, aún por razones de necesidad y urgencia, el legislador venezolano exigió que la interceptación o grabación de comunicaciones privadas debe ser previamente autorizada por el órgano jurisdiccional; todo lo cual se traduce en un imperativo por la garantía consagrada en el artículo 48 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que establece lo siguiente: “Artículo 48. Se garantiza el secreto e inviolabilidad de las comunicaciones privadas en todas sus formas. No podrán ser interferidas sino por orden de un tribunal competente, con el cumplimiento de las disposiciones legales y preservándose el secreto de lo privado que no guarde relación con el correspondiente proceso”. Así las cosas, consideramos que -no pudiendo apreciarse en el presente caso el cumplimiento de estas formalidades esenciales-, efectivamente la grabación de la comunicación telefónica sostenida entre los ciudadanos K L C y G J tuvo un origen inconstitucional; y por lo tanto, no debía ser valorada como un elemento de convicción sobre la comisión del delito y la responsabilidad penal del imputado. Doctrina del Ministerio Público 2010 171 Acerca de esto, resulta pertinente destacar lo previsto en el artículo 214 del Código Orgánico Procesal Penal, de acuerdo con el cual “(...) los elementos de convicción sólo tendrán valor si han sido obtenido por un medio lícito e incorporados al proceso conforme a las disposiciones de este Código (...)”. Asimismo, debe señalarse que -según esta disposición- “(…) no podrá utilizarse información obtenida mediante tortura, mal trato, coacción, amenaza, engaño, indebida intromisión en la intimidad del domicilio, en la correspondencia, las comunicaciones, los papeles y los archivos privados ni la obtenida por otro medio que menoscabe la libertad o viole los derechos fundamentales de las personas. Asimismo tampoco podrá apreciarse la información que provenga directa o indirectamente de un medio o procedimiento ilícitos”. Doctrina del Ministerio Público 2010