UPAC, DEFINICIÓN. TASA DE INTERÉS. CORRECCIÓN MONETARIA Concepto Nº 96042357-3. Enero 24 de 1997. SÍNTESIS: Cálculo de tasas de interés. Mora. [§ 0274] EXTRACTOS.-«(...) ¿Qué tasa o porcentaje se encuentra vigente para la liquidación de intereses moratorios en los créditos upaquizados? Sobre el particular, este Despacho estima procedente realizar de manera previa las siguientes precisiones, a fin de establecer qué elementos integran el UPAC y, de qué manera se deben tomar éstos para efecto de computarlos como interés del plazo, para así mismo determinar cuál sería el interés moratorio, retomando algunos apartes del oficio Nº 92025035-2 del 31 de agosto de 1992, en el cual esta Entidad se pronunció en el mismo sentido: 1. ¿Qué es la corrección monetaria? "1. La corrección monetaria es el mecanismo utilizado en el sistema colombiano de ahorro y vivienda para reajustar el valor del dinero con el propósito de restituirle, en todo o en parte, el poder adquisitivo que pierde día tras día como consecuencia, especialmente, del incremento de los precios de los bienes y servicios (Zarruf Gómez Carlos Alberto, la corrección monetaria y el crédito en UPAC, Bogotá, 1986). Entratandose de préstamos, la corrección monetaria permite que la entidad prestamista reciba de sus deudores durante el plazo pactado, una suma de dinero que contenga la misma prestación real (valor constante) que la suma que otorgó a título de préstamo al comienzo del plazo. 2. El UPAC es una unidad de cuenta o medida a través de la cual se aplica la corrección monetaria a las operaciones de las corporaciones de ahorro y vivienda y con base en la cual estos establecimientos de crédito deben llevar sus cuentas y registros debidamente autorizados para el efecto". 3. 'Como quiera que la ley no consagra definición alguna sobre el concepto de 'interés' debe entenderse el principio general del derecho contenido en el artículo 28 del Código Civil, conforme al cual, en ausencia de definición legal, 'Las palabras de la ley se entenderán en su sentido literal y obvio según el uso general de las misma palabras '. En cumplimiento de dicho principio es posible acudir a las definiciones que sobre interés presentan, en su orden los diccionarios de la Real Academia de la Lengua, Jurídico de Escricha, Omeba y de Derecho Usual de Cabanellas: '-El lucro producido por el capital. -El provecho, utilidad y ganancia que se saca de una cosa; y especialmente el beneficio que saca un acreedor del dinero que se le debe, esto es, la cantidad que el acreedor percibe del deudor además del reporte de la deuda. -El rédito que produce o debe producir el dinero o cualquier otro capital en especie. -Lucro o rédito de un capital". Por su parte, el Consejo de Estado en sentencia del 19 de junio de 1969, se pronunció sobre el tema tratado y dijo: 'Para la fiscalía la palabra 'interés' tomadas desde el aspecto comercial quiere decir e/lucro que produce el capital’. 'De las transcripciones anteriores se deduce como elemento común el supuesto fundamental de que los intereses constituyen una noción concreta con la cual se mide el producido del dinero, es decir, son una obligación accesoria a una principal preexistente que en buena parte de los casos corresponde a un contrato de mutuo, convenio del cual, en materia mercantil, constituye uno de los elementos naturales". Así mismo el oficio antes citado, determinó como puede calcularse la tasa de interés y para el efecto señaló: "Cálculo tasas de interés '(…) tendrá que entenderse dentro del concepto de interés todas las sumas que se carguen o reciban directamente o por interpuesta persona, teniendo como causa la entrega del dinero, a título de depósito o de mutuo, así se intente disfrazar tal remuneración o parte de ella bajo denominaciones, cualquiera que ellas sean, tales como las de 'honorarios', 'comisiones', 'reembolso de gastos', etc. Tales conceptos se integrarán al de sus intereses, propiamente así denominados para luego decir su equivalencia en términos reales o efectivos (C.E. OJ. 78/84)'. EL criterio antes expuesto fue acogido por el legislador, conforme se observa en los artículos 64 y 68 de la Ley 45 de 1990 cuyo texto es el siguiente: ART. 64.-'Para efectos del artículo 884 del Código de Comercio. En la obligaciones pactadas en unidades de poder adquisitivo constante (UPAC) o respecto de las cuales se estipule cualquier otra cláusula de reajuste, la corrección monetaria o el correspondiente reajuste computará como interés (...)'. De igual forma, el artículo 68 de la mencionada ley señala que 'para todos los efectos legales se reputarán intereses las sumas que el acreedor reciba del deudor sin contraprestación distinta del crédito otorgado, aún cuando las mismas se justifiquen, por concepto de honorarios, comisiones u otros semejantes. Así mismo, se incluirán dentro de los intereses las sumas que el deudor pague por concepto de servicios vinculados directamente con el crédito en exceso de las sumas que señale el reglamento’. (…). 'Obsérvese que el mandato imperativo de las normas transcritas en manera alguna está indicando que la corrección monetaria y los demás factores señalados sean interés, es decir rendimientos financieros propiamente dichos, sino que los mismos deben tenerse en cuenta en el cálculo de la tasa de interés para todos los efectos legales, y específicamente, para los que resultan de la aplicación del artículo 884 del Código de Comercio, con las modificaciones que le introdujo el artículo 72 de la Ley 45 de1990'. Ahora bien, precisando que la corrección monetaria por el hecho de computarse como tasa de interés para los efectos del artículo 884 del Estatuto Mercantil no deja de ser un mecanismo de reajuste del valor del dinero con el propósito de mantener el poder adquisitivo, procede entonces determinar cuáles son los efectos legales a que alude la norma citada, para lo cual nos permitimos transcribir su texto: 'Cuando en los negocios mercantiles hayan de pagarse réditos de un capital, sin que se especifique por convenio el interés, éste será el bancario corriente, si las partes no han estipulado el interés moratorio, será el doble y en cuanto sobre pase cualquiera de estos montos el acreedor perderá todos los intereses’. Así las cosas, el efecto del artículo 884 es determinar el límite de los intereses comerciales, en el caso de la mora, precepto que es desarrollado por el artículo citado al limitar el monto de los intereses moratorias en todos los diferentes eventos en que pudiera haber lugar a estos y determinando para los remuneratorios, supletivamente, el monto para cuando éstos no fueren convenidos por las partes. Por otra parte el límite aplicado a los intereses moratorias en negocios mercantiles se encuentra, como ya anotábamos, en el artículo 884 del Código de Comercio. Esta norma cumple función supletiva de la voluntad para los intereses remuneratorios, diciendo que cuando no se pacten será el corriente bancario, y para los aplicables a la mora en el cumplimiento de una obligación estatuye que en el caso de haberse pactado los intereses de plazo, los moratorios serán el doble de aquellos; y si no se pactaron ni los moratorias ni los remuneratorios, al ser éstos últimos el bancario corriente (como se dispuso en la primera parte del artículo) los moratorios serán el doble de ellos. La segunda parte del artículo que nos ocupa consagró también un límite a los intereses moratorios con la sanción correspondiente a su desconocimiento en la siguiente forma '(...) y cuando sobrepase cualquiera de estos montos el acreedor perderá todos los intereses'. Estos montos que no pueden sobrepasarse, son los dos que determinan el interés moratoria cuando no se ha pactado, es decir, el doble del interés convencional del Plazo y el doble del interés bancario corriente cuando no hubo convención en los remuneratorios; la norma habla de sobrepasar 'cualquiera' lo cual quiere decir que con sobrepasar el menor ya se infringe la misma y el acreedor puede ser sancionado con la pérdida de todos los intereses moratorias, esto es, tanto el monto del exceso como a los que tuviere derecho por la omisión en que incurra el deudor'. (C.E. 01. 78/84). Lo dicho en el texto transcrito conserva su validez, salvo en lo tocante con la sanción por el incumplimiento de la norma que se modificó por el artículo 72 de la Ley 45 de 1990. Por lo anteriormente expuesto, es preciso concluir que, si bien es cierto por disposición legal la corrección monetaria debe computarse como interés, no lo es menos el hecho que por esta razón no pierde su naturaleza de mecanismo de ajuste, por tanto, una vez calculada la tasa de interés teniendo en cuenta los factores señalados en la Ley 45 de 1990, artículo 68, ésta se aplica como única y en términos efectivos al capital reajustado. A este punto, es preciso indicar que la Superintendencia Bancaria certifica bimestralmente, tanto el interés bancario corriente como el interés ordinario -de libre asignación-y, de manera informativa determina el interés de usura. Es así como, para efectos del cálculo de la tasa de interés moratoria, si no se estipuló contractualmente nada, se doblará la tasa de interés corriente calculada en los términos indicados, es decir sin sobrepasar los límites permitidos. Lo anterior resulta más valedero si se tiene en cuenta que la corrección monetaria tiene doble utilización a saber: l. Se aplica al valor del crédito con el fin de ajustarlo monetariamente para efectos de poder mantener el poder adquisitivo de la moneda. 2. Se tiene en cuenta para el cálculo de la tasa de interés en términos efectivos, se aplica sobre el valor del crédito ajustado monetariamente. "De admitirse que el interés moratoria sea equivalente al doble de la tasa de interés corriente más el doble de la corrección, se estaría, desconociendo el contenido del artículo 884 del Código de Comercio y se extendería de forma inadecuada el mandato contendido en la Ley 45 de 1990". Así las cosas, una vez realizadas las consideraciones expuestas en precedencia, esta Entidad procede a establecer si las tasas que se estipularon en la Resolución 19 de 1991 emanada de la Junta Directiva del Banco de la República, siguen vigentes en cuanto a los montos: Efectivamente la Resolución 19 de 1991 de la Junta Directiva del Banco de la República está en vigencia en cuanto que en su artículo 4° establece que, "Las tasas de interés convencionales se liquidarán sobre valores expresados en unidades de poder adquisitivo constante UPAC. Además estas tasas serán fijadas y, por lo tanto no podrán variarse durante el plazo del crédito". De igual manera el artículo 5° del mismo texto normativo determina como se realizará el cobro de intereses de mora cuando determina que, "Las corporaciones de ahorro y vivienda podrán cobrar intereses de mora con sujeción a disposiciones generales sobre la materia. No obstante lo establecido en el inciso anterior, durante los primeros 90 días de mora, la tasa efectiva de interés moratorio no podrá exceder de aquella que resulte equivalente a la tasa efectiva de interés moratorio liquidada sobre el valor de las cuotas en mora". Adicionalmente, el título tercero, capítulo cuarto de la Circular Básica Jurídica 07 de 1996 de la Superintendencia se refiere a las tasas de interés y entre ellas las moratorias diciendo para este efecto que, "En el cobro de intereses moratorios las corporaciones de ahorro y vivienda deberán observar las reglas generales que sobre la materia se hallan (sic) contenidas en el Código de Comercio, en el Estatuto Orgánico del Sistema Financiero y en la Ley 45 de 1990, no obstante están sujetas a los siguientes parámetros: Durante los primeros 90 días de mora el interés no podrá exceder de aquel que resulte equivalente al aplicar las tasas de interés de mora exclusivamente sobre las cuotas de mora, aun cuando se haga efectiva la cláusula aceleratoria, en el evento en que la misma se haya pactado. Pasados noventa días de mora podrán cobrar intereses moratorias sobre el saldo insoluto de la obligación, siempre y cuando se haya dado aplicación a la cláusula aceleratoria. En todo caso, en la hipótesis contemplada en el presente numeral, si se declarare válidamente extinguido el plazo y se exigiere el saldo insoluto de la obligación las corporaciones deberán tener en cuenta para la aplicación de los intereses de mora, lo dispuesto en el Código de Comercio y, en particular por el artículo 69 de la Ley 45 de 1990"».