INTRODUCCIÓN En este trabajo pretendemos informar, orientar y resolver las posibles dudas de los lectores interesados en los trastornos de la voz en la infancia. Las disfonías infantiles son trastornos de la voz que afectan a niños y niñas en edades comprendidas entre los 6 y 10 años hasta la edad puberal. Por lo tanto, afectan a casi la mitad de los niños en edad escolar. Generalmente, estos trastornos no son severos y no suelen suponer la pérdida completa de la voz de manera prolongada o permanente. Suele aparecer con ocasión de una alteración transitoria de la laringe (laringitis viral) durante la cual el niño no ha respetado a moderación vocal pertinente, otras veces tras una amigdalectomía, el niño puede verse obligado a un comportamiento de sobreesfuerzo vocal etc. La estructura seguida abarca los siguientes puntos: la etiología de las disfonías infantiles, los tipos, características generales y evolución, puberfonías (*) y reeducación. En la etiología, previamente, se hace la distinción entre voz normal-voz alterada, y se exponen las características fonatorias infantiles. A continuación, se esclarecen las causas determinantes en la aparición de las alteraciones de la voz (órganica, fisiológica, psicológica y ambiental). En función de los factores etiológicos se establece la siguiente clasificación: disfonías orgánicas y funcionales. A continuación, mostramos los tipos de disfonías según Gallardo y Gallego (2003) que se pueden clasificar en función de un triple aspecto: cuantitativo, localización y etiológico. 3 En el siguiente apartado, es decir, en las características generales hacemos mención explícita a los rasgos típicos de los niños con trastornos de la voz. Es importante que sepamos que la evolución de éstos es diferente dependiendo del caso. De seguida, incluimos las puberfonías con un carácter excepcional porque por rigor no se incluirían en los trastornos de la voz mencionados, por la siguiente razón: según Salas (2008), las puberfonías son trastornos de la voz que aparecen en los adolescentes, predominantemente de sexo masculino, durante el período de transición de la muda vocal, sobre todo, alrededor de los 13 años, y que pueden prolongarse durante los siguientes años. Por último, hacemos hincapié en la reeducación de los trastornos de la voz en edad escolar y en la pubertad. En este caso, la intervención de las alteraciones de la voz ha de implicar tres tipos de estrategias: logopédica, familiar y escolar. Las razones de esta afirmación son las siguientes: - El apoyo logopédico: El logopeda y/o maestro de Audición y Lenguaje deben considerar en la disfonía, previamente, los factores relacionados con el entorno socio-comunicativo del niño, su personalidad, la presencia de factores predisponentes, y posibles circunstancias desencadenantes. A continuación, ponen en marcha las actividades oportunas para la reeducación vocal del niño en concreto. - El entorno familiar: La familia ofrece al niño un modelo de relación y convivencia que puede ser más o menos abierto, tolerante, acogedor, natural, autoritario, exigente, lúdico,... Hay “modelos” de relación y convivencia que pueden ser positivos para unos miembros de la familia y no tan acertados para otros. El niño está inmerso en este contexto, que a su vez está ofreciendo “modelos” de voz: la voz de la madre, del padre, de los hermanos... Muchas 4 veces decimos “este niño habla igual que su padre” porque habla muy fuerte, chillando... En ocasiones no es fácil convencer a los padres de que su hijo parece tener dificultades fonatorias, que su voz no es normal, ni típica para su edad y que debe ser examinado por un especialista. También en la familia hay otros estímulos como la televisión, el ordenador, que pueden ir acompañados de violencia, ruidos y modelos verbales, que conllevan determinados valores, aunque sabemos que estos estímulos no son negativos (todo depende del uso y el abuso que se haga de ellos). Ante esta situación, es conveniente proporcionar unas recomendaciones a los padres para mejorar la situación del niño. - La escuela: Los profesores en el colegio ejercen una profunda influencia en los niños. En muchas ocasiones es el profesor el que detecta la disfonía en el niño y recomienda a los padres que consulten con el otorrinolaringólogo que a su vez lo remitirá al logopeda o al foniatra. El papel de los profesores ante este trastorno puede ser diverso, desde detectar el problema vocal, hasta favorecer el uso de los buenos hábitos vocales en los niños. También puede llevarse a cabo un trabajo preventivo integrado dentro del currículum. Concretamente, proponemos actividades a disposición del profesorado con carácter interdisciplinar y de aplicación al grupo-clase. En definitiva, los trastornos de la voz son una patología cada vez más común en los centros educativos, motivo por el cual debemos ser conocedores y estar preparados para afrontar satisfactoriamente esta situación. 5 1. ETIOLOGÍA DE LAS DISFONÍAS INFANTILES • VOZ NORMAL vs. VOZ ALTERADA Antes de comenzar a desarrollar el tema de las disfonias infantiles se hace necesario hacer una distinción entre lo que es VOZ NORMAL y VOZ ALTERADA. Los tipos de voz en función de las características acústico-perceptivas los dividimos en: VOZ NORMAL. Voz clara y limpia, con un timbre agradable y una intensidad, tono y duración adecuadas. VOZ ALTERADA. Sería una pérdida en la emisión vocal. Las más frecuentes en un niño en etapa escolar son: - Voz fuerte o chillona: voz estridente con mucha intensidad debido al abuso vocal. - Voz débil: poca intensidad por poco tono en la laringe. - Voz ronca: voz áspera y sin calidad (se ve afectado el timbre). - Voz nasal: voz con resonancia nasal por una obstrucción o por una lesión. - Voz entrecortada: espasmos en los órganos de la fonación y la respiración. Debemos tener en cuenta que las alteraciones de la voz pueden darse en cualquier cualidad: intensidad, tono timbre y duración. • CARACTERÍSTICAS FONATORIAS INFANTILES La disfonía se corresponde con una alteración del tono fundamental como consecuencia de trastornos vinculados a principios físicos, químicos y biológicos, 6 influenciados todos ellos por el perfil psicológico del sujeto. Centrándonos en las disfonías infantiles debemos comenzar considerando como se produce la evolución y crecimiento de la laringe infantil. Los elementos básicos de la laringe están formados ya en la undécima semana de vida del embrión, aunque esta no se utiliza con función vocal hasta el nacimiento del niño. La madurez neurológica de la laringe infantil queda completada alrededor de los 3 años de edad; durante la primera infancia la laringe se convierte en un excelente instrumento para la respiración, la deglución y la protección de la vía aérea: no obstante todavía es un pobre instrumento fonatorio. Pero, ¿Por qué se producen disfonías en los niños? Las estructuras laríngeas de un niño (incluyendo las cuerdas vocales) son diferentes a las que puedan tener los adultos. El ligamento vocal no esta totalmente diferenciado hasta los 16 años de edad, por lo que hay un mayor riesgo de sufrir disfonías, por ejemplo: ante la emisión de gritos por parte del niño, el hablar en ambientes ruidosos, cantar en un tono que no es favorable, el estrés… normalmente estos niños muestran un aumento de la tensión muscular corporal y patrones de respiración clavicular, con voces generalmente agravadas con ataques bruscos. • FACTORES ETIOLÓGICOS La etiología de las alteraciones de la voz puede ser múltiple: órganica, fisiológica, psicológica y ambiental; unos determinan su aparición y otros la mantienen o agravan. - Enfermedades en el aparato respiratorio. Todas las “-itis” y problemas respiratorios (faringitis, asma, vegetaciones…) - Malformaciones laringeas. Suelen dejar secuelas. 7 - Intervenciones quirúrgicas y manipulaciones terapéuticas. - Traumatismos laringeos. Quemaduras, gritos… - Mal uso respiratorio y vocal. - Traumatismos. Por ejemplo, un susto o trauma con el que nos quedamos sin voz. - Características comportamentales. Padres gritones, niños mimados, mandones, inhibidos… - Ambiente familiar y social. Cuando se comunican gritando. - Alteraciones de la audición Atendiendo a esta serie de factores etiológicos podemos empezar a establecer una primera clasificación atendiendo a su etiología: DISFONÍAS ORGÁNICAS. Producidas por lesiones en los órganos de la fonación. Presentan en la imagen laringoscópica una patología visible y tienen un componente anatómico o neurológico importante en forma de tumores, problemas vasculares, paresias de cuerda vocal, perturbaciones endocrinológicas, etc. Se clasifican en: congénitas, inflamatorias y traumáticas. DISFONIAS FUNCIONALES. Se caracterizan por una utilización defectuosa del órgano vocal a causa de la instalación progresiva del circulo vicioso del sobreesfuerzo vocal, bajo la influencia de factores variados: psicológicos, sociológicos y también orgánicos, tales como nódulos y pólipos. Se clasifican en: o Hipertónicas (cuerdas vocales demasiado tensas) o Hipotónicas (cuerdas vocales muy flojas, no suenan) Nódulo. Esta es la patología más frecuente en niños. Pólipo 8 2. TIPOS DE DISFONÍAS Las disfonías son muy frecuentes en la edad escolar. Afectan según DINVILLE (1983) a la mitad de los niño/as desde los 5 ó 6 años hasta la pubertad, con mayor incidencia en el sexo masculino. En algunos niños y niñas aparece en los primeros meses de vida y se va identificando poco a poco, en otros aparece más tarde. El niño/a puede pasar por periodos totalmente afónicos y se quejará de pinchazos o sequedad en la garganta. Los gritos o llantos excesivos, los juegos ruidosos, los frecuentes resfriados, pueden desencadenar un proceso de alteración temporal de la voz que, si el niño/a no la recupera posteriormente, puede llegar a hacerse crónica. A continuación, y siguiendo a GALLARDO y GALLEGO (2003) clasificamos las alteraciones de la voz atendiendo a un triple aspecto: CUANTITATIVO LOCALIZACIÓN ETIOLÓGICO Congénitas Afonías Laringofonías Inflamatorias Orgánicas 9