DISFONIAS por M. A. LLINÁS La voz es el sonido originado en la laringe o (en casos especiales) en la faringe y modificado por las cavidades de resonancia que se oye en el exterior de los labios. La voz es un acto voluntario y como tal, el pensamiento debe seguirlo y controlar su emisión. Existen muchos y variados factores que intervienen en la producción y en el control de la voz. Los tres elementos básicos que intervienen en la producción de la voz para así centrar el tema que nos ocupa son: caja torácica y pulmones; repliegues vocales; y cajas de resonancia y órganos de la articulación. S.N.C. intención voluntad emoción relajación AUDICION ESTADO GENERAL VOZ cardiovascular neurológico endocrino personal conversación profesional hablada profesional cantada FIG. 7.1. -Factores que intervienen en la producción y control de la voz (según M. Portmann). La coordinación inteligente de estos tres elementos es lo que dará como resultado una correcta emisión vocal. Se entiende por disfonía la alteración de la voz, en cualquiera de sus cualidades intensidad, tono, timbre- que sobreviene debido a: a) alteraciones orgánicas: disfonías orgánicas b) disarmonía o incoordinación de los músculos respiratorios, laríngeos y de las cavidades de resonancia que intervienen en el acto vocal: disfonías funcionales. El término de afonía, en cambio, debe reservarse para significar la privación del uso de la voz, la pérdida total, aunque temporal, de la voz. Determinar cómo y en qué grado es patológica una voz, no es siempre es fácil. Las circunstancias afectivas, emocionales, los factores culturales y estéticos, la edad, el sexo, las exigencias y la autovaloración de la propia voz... son factores que influyen directamente en la estimación de la patología vocal. Será pues mediante un estudio foniátrico exhaustivo y preciso que se obtendrá el diagnóstico etiológico y concreto que buscamos. Este estudio comprende: a) Historia clínica: motivo de la consulta, profesión, tiempo que dura el problema, antecedentes patológicos familiares y personales, hábitos personales tabaquismo, etcétera. b) Exploración orgánica de los pulmones, laringe (laringoscopia indirecta), faringe, cajas de resonancia. c) Exploración funcional neumofonatoria. d) Exploración funcional de la laringe: estroboscopia y electromiografía laríngea. e) Otras exploraciones complementarías para la obtención del análisis acústico de la voz son: grabación de la voz en una cinta magnetofónica, la sonografía (análisis espectral del sonido) y el fonetograma. Una vez hecho el diagnóstico correcto por el médico foniatra, éste prescribirá el tratamiento aislado o las terapéuticas combinadas (farmacológica, quirúrgica, o rehabilitadora), como ocurre en la mayoría de los trastornos de la voz y su programación. Dichos tratamientos se llevarán a cabo gracias a la colaboración del médico foniatra, del otorrinolaringólogo, del logopeda y a veces de otros profesionales como fisioterapeutas, psicólogos, psiquiatras, etc. CLASIFICACION DE LAS DISFONIAS Al revisar los tratados que describen las alteraciones de la voz observamos que existe una gran variedad, casi todas justificables y válidas según el criterio de clasificación adoptado por el autor. Pero clasificar no es nada fácil. Sabemos que para ejercer cualquier profesión correctamente es necesaria una preparación adecuada en todos sus aspectos y que para muchos profesionales el instrumento voz es primordial y absolutamente imprescindible (cantantes, actores, locutores de radio y televisión, telefonistas, maestros, abogados, médicos, vendedores,...). Vemos como a menudo estas personas ignoran las funciones fisiológicas del aparato fonador y como acostumbran a utilizarlo sin ninguna preparación, de una manera desordenada y poco consciente, sin la más mínima sensibilidad sobre el tema. Podemos decir que es un profesional de la voz sin saberlo. Y es aquí, entonces, en el ejercicio de su profesión, y provocado por las exigencias profesionales de la misma que se pone de manifiesto -a veces dramáticamente- el problema vocal. Es este mismo profesional el que se nos presenta a la consulta en busca de un diagnóstico a su problema y es cuando se le hace necesaria la clasificación de su enfermedad. Normalmente, cuando se nos presenta un caso de disfonía es necesaria su catalogación para poder así describir y aclarar su naturaleza en vistas a la actuación terapéutica posterior. Muchas veces la etiología es simple, sin embargo en algunos casos se produce una amalgama de causas diversas confluentes que producen graves alteraciones en el aparato fonador; lógicamente estos casos son de difícil clasificación. La clasificación presentada por Perelló es una de las más claras e idóneas ya la cual nos adherimos. Esta clasificación consta de los siguientes apartados: 1. Patogenia o alteraciones endocrinológicas que influyen en la voz: a) hormonas sexuales, b) hormona tiroidea, c) hormona corticosuprarrenal, d) hormonas hipotalámicas, e) hormona paratiroidea, f) hormona pancreática. 2. Disfonías orgánicas debidas a alteraciones morfológicas de los órganos de la laringe. a) malformaciones laríngeas congénitas, b) inflamaciones, c) traumatismos laríngeos. 3. Disfonías funcionales. a) hipercinéticas, b) hipocinéticas. TRATAMIENTO DE LAS DISFONIAS TRATAMIENTO DE LAS DISFONIAS ENDOCRINOLOGICAS "La acción de las diferentes hormonas se hace sentir en cada uno de los órganos y funciones de la fonación; desarrollo de la laringe [...] respuestas neuromusculares [...]. Actúan de una manera constante durante toda la vida del individuo [...] siendo su papel más profundo y más general [...1" (Perelló, 1973, pág. I y 2). El tratamiento de estas disfonías no debe dirigirse a los órganos de fonación sino más bien a la patología que los produce, y que es la específica para cada enfermedad. En el campo de la foniatría, los trastornos en la muda vocal, las disfonías relaciona- das con el período menstrual (alteración del timbre) son los temas más frecuentes dentro de este capítulo. El tratamiento de las alteraciones de la muda vocal, si es orgánico, se enfocará a solucionarlo, pero si dicha alteración no es orgánica sino funcional, el tratamiento será rehabilitador y psicológico. TRATAMIENTO DE LAS DISFONIAS ORGANICAS a) Congénitas. Estas disfonías en su mayoría se manifiestan desde el momento en que se produce el primer sonido. Algunas llegan a ser incluso incompatibles con la vida, como por ejemplo el diafragma laríngeo o la imperforación de la laringe. Sin embargo, algunas otras pueden pasar inadvertidas y no manifestarse hasta que la persona requiera una mayor exigencia vocal debido a su profesión. Dentro del campo de la foniatría, tienen especial interés el glotis ovales, los quistes intracordales, el sulcus vocalis, el microdiafragma anterior laríngeo... A pesar de que sus manifestaciones a veces son imperceptibles en la exploración con el laringoscopio de García (laringoscopia indirecta), se ponen de manifiesto gracias a la técnica estroboscópica (en los últimos años este tema ha sido estudiado y tratado con profundidad por Cornut y Bouchaier). Su tratamiento es siempre quirúrgico y debe acompañarse de una terapia rehabilitadora pre y posquirúrgica para anular el sobreesfuerzo vocal acumulado. b) Infamatorias. El tratamiento de la laríngitis (aguda, seca, crónica, infantil, profesional) o de la artritis crónica o cricoaritenoidea será específico para cada uno de los casos y es responsabilidad del médico foniatra. El objetivo de la terapéutica será la normalización morfológica de los repliegues vocales y su buen funcionamiento. Se prescribirá la medicación específica (antihistamínicos, antihemorrágicos, corticoides, y otros antiinflamatorios, antibióticos, vasoconstrictores, fluidificantes, aerosoles, etc.) que irá acompañada de reposo vocal absoluto. c) Traumáticas. Dentro de este apartado debemos incluir las lesiones laríngeas producidas por heridas, contusiones, quemaduras por inhalación o ingestión, los efectos de la radioterapia, el granuloma postanestésico, las parálisis como consecuencia de las estrumectomías, las consecuencias de las laringectomías parciales, y no debemos dejar de lado las disfonías debidas o provocadas por maniobras quirúrgicas mal efectuadas. En estos casos, el tratamiento irá enfocado a devolver o mejorar, siempre que sea posible, su morfología y su funcionalidad. El tratamiento será quirúrgico y reeducador. TRATAMIENTO DE LAS DISFONIAS HIPER E HIPOCINETICAS a) Dentro de las disfonías hipercinéticas podemos englobar: -monocorditis vasomotora, -voz de bandas ventriculares, -úlcera de contacto, -hemorragia sub mucosa del repliegue vocal, latigazo laringeo, eversión del ventrículo o laringocele, -disfonía hipercinética sin lesión laringea. b) Dentro de las disfonías hipocinéticas encontraremos: -nódulo vocal, -pólipo vocal, -edema de Reinke o poliposis vocal, -fonastenia. Generalmente, en las disfonías hipercinéticas la alteración orgánica que presentan es secundaria a un sobreesfuerzo vocal, en cambio en las disfonías hipocinéticas la alteración orgánica puede ser primaria o secundaria, es decir, ser la causa o la consecuencia del mal funcionamiento. En ambos casos, hiper e hipocinéticas, el tratamiento debe ser siempre rehabilitador, aunque en según que casos requieran ser complementados por un acto quirúrgico o medicación.