Resumen: M-106 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 Hemorragia postparto: incidencia, factores de riesgo y tratamiento Rivero, Mabel I. - Avanza, María J. - Alegre, María C. Feu, María C. - Valsecia, Mabel - Schaab, Andrea - Figueras, Albert Hospital Angela Llano. Ayacucho 3288 – 3400 – Corrientes – Argentina Email: [email protected] / 03783-436982 INTRODUCCIÓN La hemorragia posparto es la pérdida sanguínea mayor a 500ml o un descenso del 10% o más del hematocrito durante las primeras horas después del parto. (1,2) Esta definición presenta algunos problemas que dependen de la condición hematológica y volumétrica de la cual se parte, por lo que se la redefine como cualquier pérdida hemática que no puede ser compensada fisiológicamente y que podría dar lugar a un daño hístico. (3) La hemorragia posparto es la principal causa de muerte materna en el mundo (17-40%), principalmente en países en vías de desarrollo o subdesarrollados. La Organización Mundial de la Salud estima aproximadamente 500.000 muertes maternas anuales, 50% debidas a hemorragias posparto y deja complicaciones secundarias en más de 20 millones de mujeres anualmente. (4, 5, 6) En nuestro país representa una incidencia del 13% y es la segunda causa de mortalidad materna y primera de causa obstétrica directa en países en vías de desarrollo. (3, 7, 8) Actualmente no existe consenso acerca de la mejor conducta terapéutica par el tercer periodo del parto (desde el nacimiento hasta salida placentaria). (4) El manejo expectante del tercer estadio del trabajo de parto permite la expulsión espontánea de la placenta; cuando ello no ocurre, este tipo de manejo promueve la expulsión por gravedad o mediante la estimulación de los pezones. El manejo activo incluye la administración de un oxitócico profiláctico antes de la expulsión de la placenta, así como el pinzado y corte del cordón y la tracción controlada del mismo. (9) Sus causas son diversas, y muchas evitables. La mayoría de los casos ocurren en el período postparto inmediato (dentro de las 24 horas del parto) y se deben a una atonía uterina. Muchas de las causas de la mortalidad materna son fácilmente previsibles a un costo bajo. (10) La prevención de la hemorragia posparto así como la identificación de factores de riesgo y su manejo fueron motivo de múltiples estudios de investigación, criterios de medicina basados en la evidencia, revisiones bibliográficas mientras que aún no existe consenso sobre las distintas maniobras y fármacos adecuados para utilizarse ante una complicación como es la hemorragia puerperal, lo que lleva en muchos casos al uso irracional de medicamentos. (8, 11, 3). La hemorragia posparto es una circunstancia que puede constituir una urgencia y a la vez una emergencia de modo tal que atendiéndonos a la definición estricta de estos hechos existe el peligro de perder un órgano y, tal vez, la vida. (3) Los objetivos del presente trabajo fueron: 1-Evaluar la incidencia, factores de riesgo (F de R) y evolución de la hemorragia posparto (HPP) en un medio hospitalario; y 2-Analizar el manejo de la hemorragia puerperal. MATERIALES Y MÉTODOS Se realizó un estudio observacional, prospectivo, multidisciplinario y descriptivo sobre el manejo del parto y puerperio inmediato durante los meses de enero y febrero del año 2005. Se incluyeron 109 pacientes atendidas en la maternidad del Hospital Angela I de Llano de Corrientes. Las muestras se distribuyeron en dos grupos: -Grupo 1: diariamente se identificaron todas las historias clínicas que cumplían con los criterios de inclusión y se llenó la correspondiente hoja de recolección de datos sobre la base de las historias clínicas, hoja de tratamiento, enfermería e informe de alta; -Grupo 2: se localizaron aquellas pacientes que en el día anterior habían presentado hemorragia puerperal y cumplían con los criterios de inclusión y se llenó la correspondiente hoja de recolección de datos sobre la base de las historias clínicas, hoja de tratamiento, enfermería e informe de alta. Criterios de inclusión: Grupo 1: Toda las mujeres atendidas en el hospital por parto; Grupo 2: Todas las mujeres ingresadas en la sala de tocoginecología con hemorragia puerperal, definida como pérdida hemática igual o superior a 500 ml en el transcurso de las dos horas seguidas al parto. Pacientes que requieren administración de sangre o concentrado de hematíes en el trascurso de 2 horas seguidas al parto. Fueron excluidas las pacientes sometidas a cesárea abdominal en ambos grupos. El estudio fue presentado y aprobado por el servicio de Tocoginecología del Hospital Ángela I de Llano y por el Departamento de Docencia e Investigación y del Comité de Ética del Hospital. El estudio no contemplaba una entrevista directa de la mujer atendida, solo la revisión de su historia clínica. La base de datos no incluyó ninguna variable que permitiera la identificación de la mujer ni del médico que la atendió. La hoja de recolección de datos incluyó cinco bloques de información, que se encontraban detallados en un manual de codificación que era entregado a monitores entrenados para la recolección de los siguientes datos: Datos generales de la mujer, procedencia, fecha y lugar; Antecedentes Gineco-obstétricos, incluidos los medicamentos tomados durante el Resumen: M-106 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 embarazo, enfermedades concomitantes y factores de riesgo para hemorragia puerperal; Información sobre la atención del parto; Manejo de la hemorragia puerperal en caso de que se presente; y Asistente al parto. Los datos fueron procesados utilizando el sistema estadístico SPSS 10 y se realizó un análisis estadístico descriptivo de frecuencia para la diferentes variables que se expresaron en términos de impacto clínico y de salud pública. DISCUSIÓN DE RESULTADOS La edad media de la población fue 25±7 años, gestas 3,3±3,9, con 4,6±1,9 controles prenatales (64,2% en centros de atención primaria). Se identificaron 8 casos (7,3%) de HPP (Tabla 1). La frecuencia de factores de riesgo durante el embarazo fue: primigestas 32%, RPM 16%, edad extrema <18 o >35 años 16%, gran multípara 15% y anemia 14,7%. Pacientes 1 2 3 4 5 6 7 8 Tabla 1: Casos de HPP Medidas Medidas no farmacológicas farmacológicas Desgarro Cefalotina-Ibuprofeno- Reparación Sangre-Sol Salina Desgarro CefalotinaReparaciónRestos IbuprofenoLegrado Occitocina-Sangre Restos Cefalotina-Occitocina- Legrado Sol Salina Hipotonía Occitocina Masaje uterino Hipotonía Occitocina- Sol Salina Masaje uterino Desgarro Cefalotina-Occitocina- Reparación Sangre-Sol Salina Desgarro Cefalotina-Ibuprofeno- ReparaciónRestos Occitocina-Sangre Legrado Hipotonía OccitocinaMasaje uterino Ergonovina Causas Egreso Viva Viva Viva Viva Viva Viva Viva Viva Se presentaron enfermedades concomitantes en 16,6%, predominando la infección urinaria en 7,3%; vulvovaginitis en 5,6%; hipertensión arterial en 2,8%; obesidad en 2,9%; diabetes y asma en 0,9%. El 47,7% utilizó medicación durante el embarazo, y específicamente sulfato ferroso 34,4%. Durante el período intraparto, se identificaron factores de riesgo en 53 pacientes (49%), predominando la inducción con Occitocina en 20,2%; episiotomía en 18,3%, rotura prematura de membrana en 5,5%; uso de sulfato de magnesio 1,8%; parto prolongado 0,9%; cesárea previa 0,9% y agotamiento por trabajo de parto prolongado 0,9%. El manejo activo del tercer período del trabajo de parto fue incompleto, utilizándose oxitocina en 100% y tracción en 96,3%. Las causas de HPP fueron: hipotonía uterina 37,5%, retención de restos 37,5% y desgarro cervical 25%. La medicación utilizada para HPP fue oxitocina 75% y cefalotina 62,5%; se realizó además, masaje uterino 37,5%, legrado 37,5% y reparación del desgarro 25%. Los partos fueron atendidos por residentes inferiores y en las hemorragias posparto intervinieron en 100% residentes superiores supervisados en un 50% por médicos especialistas. El único factor asociado fue la anemia, con 25% de hemorragia posparto comparado con 4,3% en aquellas sin anemia (p=0,016). La estadía hospitalaria fue mayor en casos con hemorragia posparto (1,6±0,6 vs 2,12±0,6, p=0,027). Este trabajo demostró que el manejo activo del tercer periodo del parto y la utilización de oxitocina antes de la expulsión de la placenta fueron superiores a la conducta expectante en cuanto a mayor eficacia para la prevención de la hemorragia posparto. Esto concuerda con la demostración que el uso profiláctico de oxitocina disminuye el riesgo de hemorragia posparto de 18% a 6%. (12,14,16,19,24). Hasta la actualidad se efectuaron tres estudios con adecuada calidad metodológica comparando estas dos intervenciones. El análisis de los mismos provee evidencia suficiente sobre la reducción de las complicaciones del tercer periodo del parto. Sin embargo, cabe destacar que fueron realizados en países donde el manejo activo es una práctica habitual. (17, 20) El resultado de la prevalencia de hemorragia posparto fue bajo presentándose solo en 8 pacientes, a pesar de los múltiples factores de riesgo. La mortalidad debida a esta condición no fue evaluada por el pequeño tamaño de la muestra. La tasa de incidencia de hemorragia puerperal fue del 7,3% en la maternidad. No hubo una causa principal ya que la hipotonía uterina y la retención placentaria tienen el mismo porcentaje. Pero es de destacar que el principal factor de riesgo fue la anemia. La administración de oxitocina parece ser ventajoso, especialmente en mujeres con riesgo incrementado de hemorragia posparto o en mujeres con anemia severa. (22, 23) La duración de la hospitalización fue mayor en pacientes con hemorragia puerperal, pero esto se debe a que muchas de estas complicaciones se diagnostican precozmente durante la estadía hospitalaria de la puérpera, lo que conlleva a una terapéutica más efectiva. (18) Resumen: M-106 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 Desde el punto de vista clínico, el manejo activo debería realizarse rutinariamente en las maternidades donde actualmente se practica, y se impone como necesario efectuar estudios en nuestro país para confirmar su eficacia y modificar conductas terapéuticas ampliamente arraigadas. Desde ya que esto tendría un gran impacto poblacional debido a que la hemorragia post-parto es la principal causa de muerte materna en nuestro medio. (4) CONCLUSIÓN La prevalencia de hemorragia posparto fue baja. A pesar de una elevada frecuencia de factores de riesgo, sólo la anemia se asoció a HPP. El manejo no fue sistematizado, dependiendo de la causa. La HPP se relacionó con una estadía hospitalaria más prolongada. BIBLIOGRAFÍA 1. “Prevención y manejo de la Hemorragia Postparto. Centro Latinoamericano de Perinatología y Desarrollo Humano (CLAP)- OPS-OMS. 1989 2. Propuesta normativa perinatal. “Capitulo V: Atención del parto de riesgo. Periodo placentario patológico”. Tomo IV, pp.61-64. Ministerio de Salud y Acción Social. 3. Ortí J. “Hemorragia posparto”. Programa de actualización de ginecología y obstetricia Sexto ciclo. Módulo 3. Ed. Panamericana 2002, Pág. 147-173. 4. Quadir Khan G,IS Jhon,Wani S. “Controlled cord traction versus minimal intervention technique in delivery of the placenta: A randomized controlled trial”. Am J Obstet Gynecol 1997;177:770-4. 5. Ratnam SS, Viegas OAC, Sing K. “Magnitude and causes of maternal mortality as a basis for its prevention”. Ott Publishers. 1989: 80-90 6. Turmen T. “Safe motherhood: A global problem. Report from a symposium on the prevention and management of anaemia in pregnancy and postpartum hemorrhage”. World Health Organization. Zurich, 1996: 1-13. 7. Prendiville WJ, Elbourne D, McDonald S. “Conducta Activa versus conducta expectante en el alumbramiento”. The Cochrane Library, Issue 4, 2002. 8. Mc Donald S, Prendiville WJ, Elbourne D. “Sintometria profiláctica vs oxitocina en el alumbramiento”. The Cochrane Library, Issue 1, 2002. 9. Prendiville WJ, Elbourne D, McDonald. “Manejo Activo del tercer estadío del trabajo de parto comparado con el expectante”. The Cochrane Library, Issue 1, 2002. 10. Farro A, Pacheco J. “Mortalidad Materna. Experiencia en el Hospital Nacional Edgardo Rebagliati Martins”. Ginecol. Obstet (Perú) 2003; 49 (1): 18-30 11. Elbourne D, Prendiville WJ, Carroli G, Mc Donald S. “Uso profiláctico de la oxitocina en el alumbramiento”. The Cochrane Library, Issue 4, 2002. 12. Gulmezoglu AM, Forna F, Villar J, Hofmeyer GJ. “Prostaglandinas para la prevención de la hemorragia posparto”. The Cochrane Library, Issue 1, 2002. 13. Bergstrom, S, Hojer, B and Liljestrand, J. “Perinatal health care with limited resources”. Eds. London. First Edition. 1994, ppl-94 14. Arias F. “Guía práctica para el embarazo y parto de alto riesgo”. Segunda edición 1995; 21: 446-64. 15. Chalmers I, Enkin M, Keirse MJNC.“Effective care in Pregnancy and childbirth”. Oxford University Press.1989: 1145-69. 16. Prendiville WL, Harding JE, Elbourne DR, Stirrat GM. “The bristol third stage trial: active versus physiological management of third stage of labour”. BMJ 1988; 297: 1295-300. 17. Cochrane Database of Systematic Reviews, 1997 Issue 2. 18. Morejom MP, Suárez Blanco C, Palacios Valdés. “Complicaciones puerperales durante la estadía hospitalaria”. Rev. Cubana Obstet Ginecol 2002;28(1):42-8 19. Shane Barbara, Burns Michele “Prevención de la Hemorragia Postparto: Manejo del Tercer Período del Parto”. Outlook, April 2002; 19(3):1-8 20. H. Gelband, J. Liljestrand, L. Nemer, M. Islam, J. Zupan, P. Jha. “The Evidence Base For Interventions To Reduce Maternal And Neonatal Mortality In Low And Middle-Income Countries”. Commission on Macroeconomics and Health Working Paper Series. Paper nº 5. 21- Combs.CA, Murphy EL,Laros RK. “Factors associated with post partum haemorrhage with vaginal birth”. Obstet Gynecol 1991;77:69-76. 21. Mark Waterstone, Susan Bewley, Charles Wolfe. “Incidencia y predictores de morbilidad obstétrica severa: un estudio caso- control “. BMJ 2001;322:1089-1094 22. Bergel E, Carroli G, Meneghini M. “Hemorragia postparto en parto vaginal: Análisis de factores de riesgo”. Reproduçao & Climaterio 2001; 16 (Supl. 1 - Res. 109): 68 23. Nothnagle Melissa, Scott Taylor Julie. “Should Active Management of the Third Stage of Labor Be Routine?”. American Family Physician 2003; Vol 67, Nº 10.