ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD: Un estudio con alumnos de Bachiller y Ciclos Formativos en Navarra María Teresa Sanz de Acedo Baquedano UNED de Tudela y Universidad Pública de Navarra María Luisa Sanz de Acedo Lizarraga Universidad Pública de Navarra INTRODUCCIÓN El objetivo del presente estudio fue examinar el nivel de creatividad y el impacto de las instrucciones en pruebas que miden el pensamiento creativo y en la resolución de problemas abiertos. También, valorar si el efecto de dichas instrucciones se relaciona con el nivel de inteligencia de los sujetos. Para ello, se aplicaron el Test de Expresión Verbal, Forma A de “Torrance Tests of Creative Thinking” (TTCT), el Test de Inteligencia Creativa (CREA), un Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos (CRPA) y el test de Dominó, D-48. El trabajo se llevó a cabo con una muestra de 341 estudiantes de Bachillerato y de ciclos formativos, de ambos sexos y con una edad promedio entre 17 y 18 años. Los resultados revelaron que las instrucciones influyen en la actividad de los sujetos generando diferencias significativas entre los que reciben instrucciones creativas y los que reciben instrucciones estándar y que esta influencia es más evidente en las tareas de los sujetos con inteligencia alta. Las conclusiones que emergen del estudio resultan sumamente interesantes a nivel de investigación y de evaluación. El interés científico por el estudio del fenómeno de la creatividad ha ido aumentando en esta última década. Cada día se aprecia más este constructo, tanto a un nivel personal como social y profesional, puesto que una de las capacidades más relevantes de la mente humana es producir algo original. En el aspecto individual, la creatividad es necesaria, por ejemplo, para resolver conflictos, improvisar, aconsejar, planificar, emprender, etc.; en el social, para generar descubrimientos, inventos, empresas y programas M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA y analizar la realidad desde distintos enfoques (Csikszentmihalyi y Wolfe, 2000). Los autores la reconocen y valoran cuando la encuentran, pero les resulta difícil definirla con precisión, de ahí que haya sido descrita de múltiples maneras, tales como producción de ideas, objetos y artes (Engle, Mah y Sadri, 1997), resolución de problemas con nuevos procedimientos (Bransford y Stein, 1984) y como resultado de cierto equilibrio entre el análisis, la inventiva y la práctica (Sternberg, 1997). La creatividad es un término de carácter multidimensional resultado de la concurrencia de varios elementos, denominados por Rhodes (1961) las cuatro “p”: productos concretos, procesos conscientes e inconscientes, persona con rasgos especiales y presión ambiental que apoya y reconoce como valiosos los productos creados. Considerar la creatividad como la capacidad para producir algo, sea un objeto físico, un modelo científico, una estrategia de resolución de problemas, un poema, un comportamiento o una idea, es la forma más generalizada de etiquetar a una persona como creativa, ya que cuando un resultado es original, resulta fácil inferir que el procedimiento que lo produjo fue creativo, así como lo será probablemente la persona que lo ejecutó (Barron, 1988; Torrance, 1990). Según Sternberg y Lubart (1995), para que un producto se perciba creativo ha de tener cuatro cualidades, ha de ser: novedoso, útil, cualificado e importante. Los dos primeros rasgos se consideran esenciales, no así los dos últimos. Un producto es novedoso cuando resulta estadísticamente inusual: es muy distinto de las cosas que otras personas tienden a elaborar, provoca sorpresa en quien lo observa y, sin duda, es difícil repetirlo y predecirlo. No obstante, algunos autores advierten que lo nuevo, sobre todo en ciencia, nunca puede ser totalmente nuevo, puesto que si no conecta con algo anterior pronto será olvidado (Martindale, 1999). A veces, se ha sustituido el adjetivo novedoso por original, inusitado, inesperado, variado y diverso. Pero el criterio de la novedad, aunque admitido como una condición necesaria, no es suficiente, pues el producto también ha de tener alguna función: ser una respuesta útil o apropiada para determinadas cuestiones que preocupan a la sociedad o para un grupo de personas y tener cierto valor como solución de un problema. Por supuesto que la utilidad, como cualquier otro atributo, se presenta en diferente rango, desde una utilidad mínima a una de total satisfacción, pero algo debe darse, ya que una cosa que es nueva, si no sirve para nada, no es creativa, sólo es algo extraño e irrelevante. Y además de la novedad y de la adecuación, el producto ha de ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD poseer dos atributos adicionales: ser un fruto de calidad y resultar importante, los cuales son juzgados por los expertos correspondientes, quienes normalmente exigen un alto nivel de elaboración o de tecnología. Según Guilford (1956), la creatividad como producto incluye los componentes de fluidez, flexibilidad y originalidad. La fluidez se observa en los sujetos que producen mucho (ideas, objetos, etc.) en poco tiempo; la flexibilidad indica la capacidad que se tiene para situarse en puntos de vista distintos y la originalidad se refiere a todo aquello que sorprende, que es inesperado y que parece alcanzar metas valiosas por vías insospechadas. Estos procesos han sido confirmados en diversos ámbitos científicos y parece que son los que mejor ayudan a delimitar el perfil de la creatividad, más allá de las diferencias que presentan cada uno de los sectores de la cultura (Torrance, 1988). También la creatividad es un proceso que supone la activación y combinación de operaciones cognitivas para idear respuestas nuevas y de calidad. El proceso no es algo tangible, sino una realidad intrapsíquica que usa información almacenada en la memoria para ir más allá de la misma. Se analiza el proceso preguntando, por ejemplo, ¿cuáles son sus fases?, ¿qué clase de operaciones mentales se activan cuando se crea?, ¿qué procedimientos se utilizan y por qué? Ya Wallas (1926) afirmaba que el espacio creativo implica: a) preparación, o recopilación y síntesis de la información que se dispone la cual ayuda a familiarizarse plenamente con la situación que se está tratando; b) Incubación, o participación del nivel inconsciente, donde las ideas y las imágenes buscan aflorar para establecer asociaciones nuevas; es una fase que puede durar horas, días, incluso años; c) Iluminación, o comprensión del problema planteado y sus posibles vías de solución, muchas veces sin saber cómo ni por qué ocurre, de forma súbita e intuitiva, lo que produce emociones de alegría y satisfacción; d) verificación o constatación de la respuesta creativa o ejecución del proyecto creador con la finalidad de examinar si realmente cumple con los parámetros de novedad, utilidad, calidad e importancia. Las fases de preparación (primera) e incubación (segunda) parecen un tanto espontáneas y no exigen demasiado esfuerzo; en cambio, las de iluminación (tercera) y verificación (cuarta) requieren consciencia y dedicación; por ello, se ha dicho que la creatividad es 99 % trabajo y 1 % inspiración. El acto creador, aunque puede ser breve en el tiempo, con frecuencia es el fin de un camino muy largo. Los momentos de inspiración y M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA de comprensión pueden ser repentinos, pero normalmente llegan después de una búsqueda prolongada. Cabe contemplar, también, la creatividad como una combinación de cualidades que las personas poseen y que se proyectan en mayor o menor grado según las circunstancias. Pero, ¿cuáles son los rasgos personales que contribuyen más directamente a la creación? Los estudios que intentan dar respuesta a esta cuestión sugieren una constelación de características asociadas, básicamente, en cuatro grupos: El primero, el pensamiento. La persona creativa es analítica y sintética, organiza y combina con facilidad la información, descubre y establece asociaciones entre ideas, regula la ejecución de sus proyectos y de sus conductas, posee mente abierta y flexible para enfocar la creación desde diferentes puntos de vista y, finalmente, evalúa sus acciones sobre todo cuando sus propuestas se relacionan con la solución de algún problema. El segundo, la personalidad. La persona creativa manifiesta curiosidad por las cosas que ocurren en la vida, el trabajo, la sociedad, etc.; tiene confianza en su potencial creativo; es tolerante a la ambigüedad, siempre presente en el proceso creador, y tenaz ante las dificultades porque está segura que saldrá adelante; mayormente se adapta al entorno, pero sin peder su tendencia al inconformismo; vive en armonía con sus emociones y a la vez es sensible a las emociones de los demás, y acepta el riesgo cuando desea dar cierto salto mental en su producción. El tercero, la motivación. La persona creativa tiene una motivación intrínseca fuerte que orienta y mantiene sus conductas durante la verificación de sus ideas originales; hace las cosas que le gustan y por ello disfruta de lo que hace; se esfuerza por conseguir metas de excelencia queriendo trabajar siempre al límite de su capacidad, y atribuye los resultados de sus acciones más a su capacidad y esfuerzo que a la suerte y al azar. El cuarto, el conocimiento. La persona creativa posee suficiente información en el campo de conocimiento que trata de crear; conoce procedimientos y técnicas tanto de la disciplina en la que está trabajando como de la creatividad, por ejemplo, la metáfora, la analogía, el torbellino de ideas, etc.; busca introducir algún elemento nuevo en su disciplina fruto de su reflexión y originalidad, y tiene una formación cultural amplia consecuencia de su conocimiento profundo de la realidad social. ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD Todas estas características interaccionan entre sí y con el mundo exterior, y determinan, en mayor o menor grado, el acto creador, hacen que la persona creativa observe lo que todo el mundo observa, pero su pensamiento produce lo que nadie ha pensado. El entorno físico, social, económico, político y cultural tiene también su influencia en la creatividad. Cuando estos ambientes son favorables y abiertos es probable que surja y se manifieste el fenómeno de la creatividad. La idea no es que las oportunidades externas determinen totalmente la creatividad de una persona; la afirmación es más modesta, aunque importante, porque por dotada que esté una persona no podrá elaborar una cadena de productos creativos a menos que el entorno le ofrezca las circunstancias adecuadas, por ejemplo, una formación bien seleccionada, reconocimientos específicos y recursos para experimentar la creatividad y contactar con expertos de diferentes áreas. Los especialistas en creatividad dan suma importancia a los factores del entorno. Así, Harrington (1990) considera que el sistema social tiene un papel decisivo en el proceso creador porque puede maximizar la ejecución creativa; Amabile (2001) defienden que el entorno interesa en cualquier actividad creativa porque: a) es una fuente de ideas; b) fomenta o inhibe, acepta o rechaza la creatividad; c) evalúa los productos creativos según las normas definidas por un grupo de jueces, que pueden ser expertos en el tema y pertenecer a diferentes culturas. El moderado acuerdo existente acerca de las definiciones de creatividad se basa más en el producto que en el proceso, la persona o el ambiente, pues, siempre es más fácil unificar criterios sobre algo objetivo que sobre los procesos, subjetivos, del pensamiento creativo. Estimulación de la creatividad La creatividad es una actividad sensible a las variables educativas, sociales y culturales y, en consecuencia, puede estimularse y desarrollarse, especialmente por medio de la educación y de la experiencia personal y profesional. Son muchas las actividades académicas que pueden mejorar la creatividad. En este estudio se destacan dos: la solución de problemas y las instrucciones docentes. La creatividad siempre ha estado asociada a la solución de problemas (Nickerson, 1999), pues se manifiesta cuando un individuo resuelve un M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA problema de una manera nueva y apropiada (Blumenfeld, Booth y Lossing, 2000). De hecho existen numerosos trabajos que han propuesto modelos conceptuales sobre el proceso de resolución de problemas, algunos de ellos netamente creativos (Bransford y Stein, 1984) que diferencian entre encontrar y definir problemas y dan cierta importancia al papel de la creatividad (Okuda, Runco y Berger, 1991; Runco y Nemiro, 1994). Esto significa que las personas creativas son ciertamente más capaces de construir e identificar alternativas viables de solución. La distinción entre encontrar y resolver problemas semeja a la de generar y explorar ideas. Esta distinción constituye la base del modelo «Geneplore» de la creatividad propuesto por Finke et al. (1992), quienes mezclan, pero distinguen, las actividades de generar y explorar. Argumentan que el pensamiento creativo emplea cíclicamente esos dos procesos cognitivos: durante la fase de generación se construyen representaciones mentales que promueven el descubrimiento creativo que será analizado y explorado más tarde. Por eso, es importante que el sistema educativo ofrezca un clima propicio para que los alumnos detecten anomalías en el mundo, en los demás y en su propia conducta, se interroguen acerca de sus actuaciones y de los problemas que les rodean, aprendan a formular cuestiones y problemas y no tanto a responderlas. Los teóricos consideran a la escuela como el mejor campo de cultivo de la creatividad, como una organización potenciadora o inhibidora de la misma (Sanz de Acedo Lizarraga y Sanz de Acedo Baquedano, 2002). Cuando una institución facilita la ideación, la libre expresión, la inventiva y el redescubrimiento del propio entorno, está facilitando actitudes y desarrollando habilidades creativas. Las instrucciones docentes, las cuales preparan la mente del estudiante para realizar una tarea con niveles diferentes de profundidad, creación y comportamiento estratégico, son actividades docentes muy propicias para estimular la creación. Ya Harrington (1975) demostró que cuando los estudiantes reciben instrucciones explícitas en las que se les invita a manifestarse creativos dan respuestas más originales que los que reciben instrucciones estándar. Y más recientemente, Chand y Runco (1992) muestran que las instrucciones sobre cómo encontrar y resolver problemas influyen en las percepciones de los estudiantes sobre la tarea, y en la flexibilidad y originalidad de sus respuestas. Las instrucciones se han estudiado con diseños experimentales en los que se manipula cierta información dada a los sujetos, sea oral, escrita o audiovisual, antes de que resuelvan algún problema. La ventaja de este ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD estilo de actuación es que sus efectos son fáciles de comparar, objetivar y justificar. La racionalidad de las instrucciones, es decir, su uso en estudios empíricos sobre creatividad, radica en el hecho de que las mismas parecen alentar en los sujetos un análisis más profundo de la tarea en cuestión y, en consecuencia, favorecen la elaboración de respuestas mejores y divergentes. A modo de conclusión, puede señalarse que los planteamientos ofrecidos sobre la creatividad y su estimulación por medio de la resolución de problemas y las instrucciones docentes sirven de fundamento y motivación para realizar el presente trabajo. De fundamento, porque se ha puesto de manifiesto que estas variables están estrechamente relacionadas, comparten ciertas características teóricas y pueden potenciarse mutuamente, y de motivación, porque se dan todavía en ellas aspectos polémicos que requieren más investigación y porque es interesante comprobar la posibilidad de mejorar la ejecución de los procesos creativos en el sistema educativo. Propósito del estudio Este estudio tuvo como finalidad valorar la capacidad creativa de los estudiantes en los cursos previos a su incorporación a la universidad o al mundo laboral. Así como, analizar las posibles relaciones entre creatividad e inteligencia. Sus hipótesis de trabajo fueron las siguientes: a) los sujetos con instrucciones creativas darán respuestas más creativas que los sujetos con instrucciones estándar; b) los sujetos con creatividad alta resolverán mejor los problemas propuestos que los sujetos con creatividad baja; c) los sujetos con creatividad alta obtendrán mejores resultados en el “Cuestionario de Resolución de Problemas abiertos” que los sujetos con creatividad baja; d) habrá interacción entre creatividad e inteligencia en la resolución de un problema abierto. MÉTODO Participantes La población del estudio estuvo constituida por alumnos de Bachiller y Ciclos Formativos. De los centros existentes en Pamplona, se eligieron al azar ocho, cuatro públicos y cuatro concertados, que fueron los que pasaron M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA a integrar la muestra de esta investigación. El número de estudiantes fue de 36. el 15,6 % de la población total, de los cuales 19 no se consideraron en los análisis estadísticos por no haber completado la totalidad de las pruebas y tareas establecidas, por lo que la muestra final fue de 341 estudiantes, 188 de Bachiller y 153 de Ciclos Formativos, de ambos sexos (166 chicas y 175 chicos) con una edad comprendida entre 17 y 18 años (M = 17,6; DE = 1,2). La asignación de los centros al grupo experimental (n = 178) y al grupo control (n = 163) también se realizó al azar. La intervención en los centros educativos contó con el consentimiento y la aprobación de la dirección, de los jefes de estudio y de los propios alumnos quienes expresaron que nunca habían participado en entrenamientos de resolución de problemas utilizando la creatividad. Tanto los profesores como los alumnos consideraron el trabajo empírico como una experiencia positiva y enriquecedora que contribuiría a conocer mejor la importancia que tienen las orientaciones pedagógicas en la estimulación del potencial creativo durante el proceso de enseñanza/aprendizaje. Instrumentos Se emplearon tres instrumentos estandarizados -Test de Expresión Verbal, Forma A (TTCT), Inteligencia Creativa, CREA y Test de Dominó, D48- y dos cualitativos elaborados por el equipo investigador. A continuación, se describen los contenidos y las características de ambos tipos de medida. 1. Tests estandarizados Estos tests se utilizaron con el objeto de conocer el nivel de entrada de los sujetos en las variables de estudio para la investigación. 1.1. Test de Expresión Verbal, Forma A de TTCT Este test, que forma parte del “Torrance Tests of Creative Thinking” (TTCT) (Torrance, 1974, 1979), evalúa el pensamiento creativo en tres dimensiones: fluidez, flexibilidad y originalidad. Consta de siete juegos; los tres primeros se basan en el mismo dibujo y consisten en elaborar ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD preguntas sobre lo que ocurre en dicha escena en ese momento y sobre lo que se piensa que ha sucedido antes o lo que podrá suceder en un futuro próximo; el cuarto juego, con un nuevo dibujo, consiste en señalar todas las transformaciones ingeniosas que uno pueda imaginar para agraciarlo; en el quinto y sexto juego se emplean unas cajas de cartón, y el sujeto pensará en sus posibles utilidades y elaborará preguntas al respecto; el último juego presenta un dibujo inverosímil y se le dice que escriba las ideas que le sugiere la expresión siguiente: imagina que hubiese cordones atados a las nubes y colgasen hasta el suelo. El test permite obtener tres puntuaciones parciales -fluidez, flexibilidad y originalidad- y una puntuación total que indica la energía creativa que la persona ha demostrado en la realización de las tareas. Los índices de fiabilidad que se obtuvieron oscilan entre α = .80 y α = .97 para las puntuaciones totales y entre α = .86, α = .76 y α = .80 para fluidez, flexibilidad y originalidad, respectivamente. 1.2. Inteligencia Creativa, CREA Esta prueba es una medida cognitiva de la creatividad a través de la generación de cuestiones sobre un material gráfico durante un tiempo limitado, es decir, pidiendo al sujeto que formule la mayor cantidad de preguntas posibles acerca de un estímulo (Corbalán et al., 2003). El test está diseñado para aplicarlo individual o colectivamente; incluye dos láminas para adolescentes y adultos (A y B) y una para niños (C). La prueba evalúa con estabilidad y confianza el constructo de la creatividad, proporciona solamente una puntuación global y tiene correlaciones altas con otras pruebas de creatividad, por ejemplo con la Batería de Creatividad de Guilford (α = .81), lo que indica que es aceptable su validez concurrente. 1.3. Test de Dominó, D-48 Este test de inteligencia general evalúa la capacidad para conceptualizar y aplicar el razonamiento sistemático a nuevos problemas y apreciar las funciones centrales de la competencia intelectual, como son la abstracción y la comprensión de relaciones (Anstey, 1999). Es una medida del factor “g”, no contaminada por factores culturas o educacionales. El manual del test, en su última edición de TEA, ofrece buenos estudios psicométricos, lo que garantiza su utilización como prueba de inteligencia. M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA 2. Pruebas cualitativas El equipo de investigación elaboró y validó las dos pruebas siguientes. 2.1. Cuestionario de Resolución de un Problema Abierto, CRPA Este cuestionario evalúa las respuestas creativas que se dan en la solución de un problema abierto, en este caso el Problema de la Radiación de Gick y Holyoak (1980). Se fundamenta en los modelos cognitivos de la creatividad, los cuales proponen un conjunto de procesos que se ponen en acción cuando se produce algo creativo (Mumford et al., 1991), y en el concepto de creatividad de Torrance (1974, 1979), que considera la creatividad compuesta, esencialmente, por los tres componentes mencionados: fluidez, flexibilidad y originalidad. Consta de cinco preguntas, cada una de las cuales recoge información sobre los procesos más relevantes que se activan al resolver un problema de forma creativa. Los estudios psicométricos realizados al cuestionario revelaron índices de consistencia interna Alfa de Cronbach de α = .87. También se analizó la fiabilidad de cada uno de los componentes de la creatividad -fluidez, flexibilidad y originalidad- cuyos valores fueron α = .85, α = .76 y α = .88, respectivamente. 2.2. Preguntas de Opinión Al final de la intervención se formuló por escrito dos preguntas de opinión a los sujetos del grupo experimental sobre si se consideraban personas creativas y si las instrucciones que habían recibido antes de realizar los tests de creatividad -TTCT, CREA y CRPA- les motivaron a responder de manera más creativa a dichos instrumentos. Cada pregunta tiene cinco alternativas de respuesta: nada, poco, bastante, mucho, muchísimo. Se incluyeron estas dos preguntas porque se sabe que en la evaluación de la creatividad participan elementos actitudinales y motivacionales que pueden favorecer o contaminar los resultados. ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD Diseño El diseño que se utilizó en este estudio fue descriptivo transversal, puesto que se compararon variables y grupos en un momento dado y el plan de trabajo respondió a un modelo factorial de 2X2, con dos factores: instrucciones (creativas y estándar) e inteligencia general (alta y baja). Procedimiento La intervención se realizó en dos sesiones cada una de dos horas de duración. En la primera sesión se administró a los alumnos la tarea de solución del problema denominado “Problema del General” de Dunker (1945) seguido del Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos (CRPA) y del test de Inteligencia Creativa (CREA). Después de 15 días tuvo lugar la segunda sesión en la que se administró el Test de Expresión Verbal, Forma A de TTCT, el Test de Dominó, D-48 y las dos preguntas de Opinión; éstas últimas solamente al grupo experimental. El procedimiento consistió en leer, dos veces, despacio, con claridad y énfasis las instrucciones -creativas al grupo experimental y estándar al grupo control- en las pruebas psicológicas seleccionadas las cuales se administraron en los grupos configurados por los centros educativos que participaron en el estudio y en horario regular de clase. RESULTADOS Los resultados más relevantes de este estudio se presentan en tres apartados, que son los siguientes: a) efecto de las instrucciones en la creatividad; b) papel de la inteligencia en los tests de creatividad; c) creatividad y resolución de problemas; d) interacción entre inteligencia e instrucciones docentes. M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA Efecto de las instrucciones La tabla 1 exhibe las medias y desviaciones estándar obtenidas por los grupos experimental y control en los tests de TTCT, CREA y CRPA en puntuaciones parciales -fluidez, flexibilidad y originalidad- y en puntuaciones globales. Puede apreciarse también en la figura 1 que los resultados del grupo que recibió instrucciones creativas, grupo experimental, son mejores que los que recibieron instrucciones estándar, grupo control, en todas las variables. El análisis de varianza revela que existen diferencias significativas entre los grupos experimental y control en todas las variables medidas, siendo los resultados los siguientes: 1. Test de Expresión Verbal, Forma A (TTCT): fluidez [F (1,239) = 26,86, p < .000], flexibilidad [F (1,239) = 3.76, p < .000], originalidad [F (1,239) = 23,55, p < .000] y creatividad total [F (1,239) = 27,26, p < .000]. 2. Test de Inteligencia Creativa (CREA): puntuación total [F (1,239) = 9,51, p < .002]. 3. Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos: fluidez [F (1,239) = 24,88, p < .000], flexibilidad [F (1,239) = 26,6. p < .000], originalidad [F (1,239) = 29,0. p < .000] y creatividad total [F (1,239) = 27,96, p < .000]. Tabla 1. Medias y desviaciones estándar de los grupos experimental y control en los instrumentos de TTCT, CREA y CRPA. Grupo experimental Grupo control Instrucciones creativas Instrucciones estándar N = 178 N = 163 Variables M DE M DE 78,40 16,53 58,23 14,99 Flexibilidad (TFx) 36,34 11,28 27,06 9,19 Originalidad (TO) 10.91 22,75 75,22 18,71 Creatividad total (TCt) 71,80 28,91 53,57 24,58 CREA: Puntuación total 18,08 6,62 14,94 5,64 CRPA: Fluidez (CF) 18,23 4,01 12,62 4,11 Flexibilidad (CFx) 9,47 2,27 5,96 2,23 Originalidad (CO) 19,78 4,40 12,66 4,53 Creatividad total (CCt) 15,83 3,48 1.41 3,58 TTCT: Fluidez (TF) ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD: UN ESTUDIO CON ALUMNOS DE BACHILLER Y CICLOS FORMATIVOS EN NAVARRA Estos resultados de alguna manera confirman que las instrucciones influyen en las respuestas que se dan a las pruebas de creatividad tanto en sus componentes principales -fluidez, flexibilidad y originalidad- como en la creatividad total. Papel de la inteligencia Por otro lado, las medias y desviaciones estándar que presenta la tabla 2 y los análisis de varianza confirman que el efecto de las instrucciones creativas es significativamente mayor en el grupo de inteligencia alta que en el grupo de inteligencia baja en casi todas las variables criterio, como así se evidencia en los resultados siguientes: 1. Test de Expresión Verbal, Forma A (TTCT): fluidez [F (1,239) = 5,32, p < .029], flexibilidad [F (1,239) = 4,87, p < .033], originalidad [F (1,239) = 6,35, p < .030] y creatividad total [F (1,239) = 4,98, p < .034]. M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA 2. Test de Inteligencia Creativa (CREA): puntuación total [F (1,239) = 9,51, p < .002] 3. Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos (CRPA): fluidez [F (1,239) = 4,52, p < .035], flexibilidad [F (1,239) = 2,28, p < .132], originalidad [F (1,239) = 4,59, p < .032] y creatividad total [F (1,239) = 4,73, p < .035]. En cambio, el efecto de las instrucciones estándar no generó diferencias significativas entre los grupos de inteligencia alta y baja. Tabla 2. Medias y desviaciones estándar de los grupos experimental y control en los cuestionarios de creatividad según los niveles de inteligencia alta (IA) y de inteligencia baja (IB) Instrucciones Creativas (GE) Variables TTCT: Fluidez (TF) Flexibilidad (TFx) Estándar (GC) IA (n= 103) IB (n = 75) IA (n = 78) IB (n = 85) M DE M DE M DE M DE 79,01 23,27 73,44 21,67 56,22 24,38 59,79 18,95 4.65 1.27 35,86 11,70 26,26 11,01 27,68 11,39 Originalidad (TO) 101,9 31,15 94,32 29,16 75,02 2.75 75,38 21,15 Creatividad total (TCt) 78,18 19,92 71,20 17,55 52,57 12,73 54,35 16,09 CREA: Puntuación total 19,34 6,94 15,46 5,67 14,25 6,34 13,26 5,13 CRPA: Fluidez (CF) 18,47 3,83 14,86 4,29 13,10 3,80 12,24 4,33 Flexibilidad (CFx) 7,48 2,15 7,44 2,46 6,18 2,02 5,79 2,40 Originalidad (CO) 2.99 4,42 15,46 4,40 13,08 4,10 12,33 4,84 Creatividad total (CCt) 18,98 3,89 12,59 3,64 1.79 3,27 1.12 3,81 ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD: UN ESTUDIO CON ALUMNOS DE BACHILLER Y CICLOS FORMATIVOS EN NAVARRA Se detecta, pues, que aunque la creatividad y la inteligencia son expresiones de la capacidad mental, cada una tiene una finalidad y recursos cognitivos distintos. Resumiendo, pues, puede afirmarse que las instrucciones docentes influyen en los procesos creativos que los estudiantes emplean al resolver un problema abierto. Creatividad y resolución de problemas Los sujetos con creatividad alta obtuvieron mejores resultados en el Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos como se muestra en la figura 2. Un resultado que se esperaba puesto que la resolución de problemas es una oportunidad para explicitar el potencial creativo. Esta superioridad de los sujetos con creatividad alta se manifiesta en la fluidez, definiendo el problema desde perspectivas distintas; la flexibilidad, generando puntos de vista diferentes; la originalidad, proponiendo soluciones novedosas y previniendo las dificultades que se podrían encontrar al poner en ejecución dichas soluciones. M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA Interacción entre instrucciones e inteligencia Los análisis estadísticos señalan que existen interacciones significativas entre instrucciones e inteligencia en todas las variables criteriales cuando los sujetos responden a los ítems de las pruebas psicológicas utilizadas en este estudio. Los valores de las pruebas F se reseñan a continuación: 1. Test de Expresión Verbal, Forma A (TTCT): fluidez [F (1,239) = 9,05, p < .000], flexibilidad [F (1,239) = 1.34, p < .000], originalidad [F (1,239) = 7,79, p < .000] y creatividad total [F (1,239) = 9,07, p < .000]. 2. Test de Inteligencia Creativa (CREA): puntuación total [F (1,239) = 7,61, p < .000]. 3. Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos (CRPA): fluidez [F (1,239) = 8,94, p < .000], flexibilidad [F (1,239) = 9,1. p < .000], originalidad [F (1,239) = 1.11, p < .000] y creatividad total [F (1,239) = 9,75, p < .000], lo que indica que los efectos de las instrucciones dependen de alguna manera del nivel de inteligencia de los sujetos. Los datos confirman la influencia mutua existente entre la creatividad y la inteligencia en las diferentes pruebas utilizadas, lo que informa que ambas variables comparten elementos teóricos y, por ello, se afectan. DISCUSIÓN Los resultados muestran que las instrucciones docentes tienen un impacto positivo en las respuestas dadas a las pruebas psicológicas utilizadas y a la solución de un problema abierto, denominado el “Problema del General”. Los estudiantes que recibieron instrucciones creativas emplearon mejor la fluidez, la flexibilidad y la originalidad que los que recibieron instrucciones estándar. Por lo tanto, se desprende que las instrucciones son un camino para mejorar el pensamiento creador y, en consecuencia, la resolución de problemas (Dominowski, 1995; Runco et al., 1997; Ruscio y Amabile, 1999). ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD Este estudio confirma la opinión de algunos autores de que las instrucciones preparan a los sujetos para un análisis más profundo y diferenciado de una tarea en cuestión (Chand y Runco, 1992; Hyman, 1964; Martinsen y Kaufmann, 1991; Pesut, 1990; Runco 1986b; Ruscio y Amabile, 1999). Es cierto que el tema es un tanto desconocido, pero las investigaciones van aportando datos, como ocurre con la presente: se puede estimular y mantener la creatividad seleccionando bien la información que se da a los sujetos antes de realizar una tarea. Cabe asegurar, pues, que las variables didácticas tienen un poder importante en el desempeño del estudiante al activar su potencial convergente y divergente. De igual manera, las instrucciones han generado cambios en los tres componentes de la creatividad -fluidez, flexibilidad y originalidad- pues los análisis entre los grupos que recibieron instrucciones creativas así lo revelan. Las investigaciones anteriores a la presente, mayormente reportan datos sobre efectos en la originalidad y en menor medida en la fluidez y flexibilidad (Harrington, 1975; Runco y Okuda, 1991). Además, como se viene comentando, queda probado que no se utiliza de manera espontánea la creatividad, sino que se requiere algún tipo de manipulación previa por parte del sistema educativo para que los estudiantes la manifiesten en la resolución de problemas. Otro aspecto que se observa en este estudio es la relación entre instrucciones e inteligencia. Los resultados del test de Dominó (D-48) establecen diferencias significativas entre los grupos categorizados como inteligencia alta e inteligencia baja cuando responden a los procesos creativos en las diferentes pruebas utilizadas, lo que indica que el efecto de las instrucciones depende en cierto grado del nivel de inteligencia del sujeto. Se ha observado que los estudiantes de inteligencia alta se benefician más de las instrucciones creativas que los de inteligencia baja y que los estudiantes con inteligencia alta y baja e instrucciones creativas tienen puntuaciones más variadas que los estudiantes con los mismos niveles de inteligencia que reciben instrucciones estándar. Estos datos confirman los de Guilford y Hoepfner (1966) pero difieren un tanto de los obtenidos por Davidson y Sternberg (1983), Runco (1986b) y Sanz de Acedo Lizarraga (1989), quienes obtuvieron datos que revelan que los sujetos de inteligencia baja se benefician más de intervenciones dirigidas a estimular los procesos del pensamiento convergente y divergente. Asimismo, la estrategia de haber estudiado conjuntamente la creatividad y la resolución de problemas ilustra las relaciones entre pensamiento crítico y pensamiento divergente, tan necesarios en las M. T. SANZ DE ACEDO BAQUEDANO Y M. L. SANZ DE ACEDO LIZARRAGA soluciones innovadoras, tal como lo defiende el modelo Creative Problem Solving (CPS) que describe el proceso creador en seis fases con aportaciones dentro de cada una de ellas de ambos tipos de pensamiento (Isaken y Treffinger, 1985). Entender cómo el pensamiento convergente contribuye a la ejecución creativa debe ser constantemente evaluado sobre todo en tareas específicas (Runco, 2003). Además, el estudio revela que existen ciertas interacciones entre las variables estudiadas, lo que confirman que el efecto de las instrucciones depende del nivel de inteligencia. Resultados coherentes, puesto que la creatividad requiere cierto potencial cognitivo (Sternberg y O’Hara, 1999). Puede decirse también que los resultados obtenidos en este estudio revelan que las instrucciones que se imparten con los tests de creatividad tienen un efecto significativo en las respuestas que se dan a dichos tests y en la solución de un problema abierto. Esto es, las instrucciones creativas estimulan tanto al constructo de creatividad global como a sus componentes de fluidez, flexibilidad y originalidad. Datos que de alguna manera responden a la primera cuestión que se planteó en este estudio. La creatividad, por lo tanto, puede estimularse, aunque sea modestamente, por medio de la educación. Trabajar para alcanzar este objetivo es algo loable y digno de esfuerzo. Ayudar a los adolescentes a encontrar el balance correcto entre sus capacidades creativas y reflexivas es un motor importante para garantizar la educación integral de los mismos. También parece claro, en consecuencia, que el mejoramiento en creatividad no es algo automático o fácil, la tarea requiere mucho esfuerzo tanto del alumno como del profesor. A través de la solución de problemas creativos el alumno puede llegar a ser consciente de la existencia de un principio general: la interacción que se produce al explicar un nuevo concepto le guía hacia ese proceso de abstracción. La creatividad se ha mostrado como un mecanismo eficaz para la solución de problemas nuevos. Con su aplicación, las habilidades de resolución de problemas del grupo experimental incrementaron de una manera sustancial y estadísticamente significativa. Aprender a formular problemas debería ser parte del currículo, pero la capacidad para formular nuevos problemas, incluso comprometerse en el pensamiento divergente, pocas veces se potencia en los centros educativos. Pueden entresacarse de este estudio implicaciones bastante relevantes. En primer lugar, en la evaluación del propio pensamiento creativo, ha de tenerse muy en cuenta las instrucciones que se imparten ESTIMULACIÓN DE LA CREATIVIDAD pues inciden de manera significativa en el mismo; convendría reflexionar más sobre el contenido de las instrucciones y sobre el estilo que se emplea cuando se imparten. En segundo lugar, en la actividad educativa, ya que las instrucciones o mensajes que el docente da a los alumnos influyen en la calidad de sus respuestas, en su motivación y en su actitud hacia el trabajo (Hennessey, 1989). Los resultados de la presente investigación pueden estimarse como preliminares, dado las limitaciones del trabajo: pocos materiales de intervención, carecer de pretest, entrenamientos cortos y estar todavía el «Cuestionario de Resolución de Problemas Abiertos» en proceso de validación. En definitiva, queda mucho por hacer, y es bueno que sea así; que la creatividad ayude también a solucionar de alguna manera el problema de la calidad de la educación que tanto preocupa a todos. BIBLIOGRAFÍA Albert, R.S., y Runco, M.A. (1989). Independence and the creative potential of gifted and exceptional gifted boys. Journal of Youth and Adolescence, 18, 221-230. Alexander, P.A., Parsons, J.L., y Nash, W.R. (1996). Toward a theory of creativity. Monograph from the National Association for Gifted Children, 1707 L Street NW, Suite 55. Washington, DC, 337-376. Amabile, T.M. (2001). John Irving and the passionate craft of creativity. American Psychologist, 56(4), 333-336. Anstey, E. (1999). 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